República Bolivariana de Venezuela.

Universidad Católica Santa Rosa. 

Facultad de Derecho. 

Escuela de Derecho. 

Ética Jurídica

M02C 

Conflicto de intereses entre Venezuela y Estados Unidos.

Profesor: Estudiante:
Bauza, Eduardo. Pilaguano, Olga.  

C.I: 31.127.184 

Caracas, 28 de marzo de 2022.

 Conflicto de intereses entre Venezuela y Estados Unidos.

Venezuela podemos definirla como un país de una mediana extensión territorial, en

una privilegiada posición geográfica, con el mayor proceso de mestizaje de América y
uno de los pocos países más diversos y no menos importante con la mayor reserva de
petróleo del mundo.
El conflicto inicia cuando el presidente en ese momento de los EE. UU Barack
Obama declara una "emergencia nacional" por la amenaza "inusual y extraordinaria" a
la seguridad nacional y a la política exterior causada por la situación en Venezuela. Las
primeras sanciones se hacen presentes en 2015 cuando impuso restricciones de
visado a varios funcionarios venezolanos que fueron vinculados a violaciones de los
derechos humanos y corrupción política, según el Departamento de Estado de los
Estados Unidos aclaró que las sanciones “no van dirigidas al país o población en
general, sino de forma específica contra individuos".
Estas sanciones se fueron intensificando al pasar de los años contra otros
funcionarios del gobierno entre ellos Diosdado Cabello, integrante de la Asamblea
Nacional Constituyente; José David Cabello hermano de Diosdado Cabello y presidente
del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (SENIAT);
Marlenys Contreras de Cabello, esposa de Diosdado Cabello y Ministra de Turismo; y
Rafael Sarría un empresario con propiedades dentro de los Estados Unidos y supuesto
testaferro de Diosdado Cabello.
En 2018 la Unión Europea sanciona a siete funcionarios del Estado venezolano por
ser señalados como autores del deterioro de la democracia en el país: Diosdado
Cabello, Néstor Reverol, Gustavo González, Antonio Benavides, Tibisay
Lucena, Maikel Moreno, y Tarek William Saab, prohibiéndoles hacer transacciones con
personas o entidades, así como también la entrada a las naciones de dicha comunidad.
El gobierno de Panamá de ese mismo año aplicó una serie de sanciones a 55
funcionarios públicos venezolanos y personas de la alta esfera política oficialista,
añadiendo también sanciones a 16 empresas que operan en dicho país.
El Consejo Federal de Suiza implementó sanciones contra Venezuela, congelando
los fondos de siete ministros y altos funcionarios «a causa de las violaciones a los
derechos humanos y al deterioro del Estado de derecho y de las instituciones
democráticas», prohibiéndoles la entrada al país y siguiendo las medidas impuestas
por la Unión Europea
En 2019 el Departamento de Estado y el Departamento del Tesoro cancelan las
órdenes de compra a PDVSA y ceden el control de su filial CITGO y de cuentas
bancarias del estado venezolano en su territorio al Gobierno de Transición de Guaidó.
De ese modo, Venezuela no puede tomar crédito del sistema financiero de EE. UU. ni
venderle activos. Esa limitación pretende dificultar al gobierno venezolano la obtención
de dinero fresco. Siendo así, pérdida de una fuente de ingresos importante.
En ese mismo año,  el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó y
emitió designaciones de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros contra el Banco
Central de Venezuela y una de sus directoras, Iliana Ruzza, para prevenir que sea
usado "como una herramienta del régimen de Maduro, el cual continúa saqueando los
bienes venezolanos y explotando las instituciones gubernamentales para enriquecer" a
funcionarios corruptos.
Las pertinentes a sanciones financieras, en específico contra el Banco Central de
Venezuela y el bloqueo de cuentas en el extranjero que iniciaron en 2017, y las
económicas y petroleras de mayor énfasis en 2018 y 2019, son las que mayormente
han afectado terriblemente la economía venezolana
En 2020 el gobierno británico a través de la Oficina de Implementación de
Sanciones Financieras adoptaría las mismas sanciones que la Unión Europea y dictó
en junio de ese año contra once dirigentes chavistas, y que elevarían a 36 el total de
sancionados.
En 2021 la Unión Europea sancionó 19 funcionarios del régimen de Maduro, a la
cual se unieron 8 países más, siendo un total de 55 personas sancionadas por el
consejo de la Unión Europea y Macedonia del Norte, Montenegro y Albania, los países
de la Asociación Europea de Libre Cambio Islandia y Liechtenstein, así
como Ucrania, Moldavia y Georgia.
El objetivo de estas sanciones según los Estados Unidos es forzar un cambio de
Gobierno como consecuencia del daño económico ocasionado a la población, pero
esto van con el fin de crear una crisis social para justificar ese cambio forzado de
Gobierno, el bloqueo financiero lleva a asfixiar la economía de Venezuela y causar una
crisis social, que justifique un cambio arbitrario de Gobierno. De hecho, la experiencia
con Cuba nos muestra que las sanciones pueden tener consecuencias muy negativas
para los civiles, especialmente para los grupos vulnerables. Esto demuestra que no
siempre son efectivas para imponer un cambio de gobierno y modelo político, mas bien
es un daño a la población misma.
Por otro lado, actualmente está sucediendo la problemática llevada a una guerra
entre Ucrania y Rusia. A raíz de esto una de las consecuencias es el alza e inflación en
el sector petrolero y gasífero, ya que Rusia es el tercer mayor productor de petróleo del
mundo detrás de Estados Unidos y Arabia Saudita, esto según la Agencia Internacional
de Energía, esto nos explicaría el por qué la invasión de Rusia a Ucrania estaría ligada
al alza de los combustibles y en particular el alza del petróleo que llego a precios que
no se observaban en años.
 A causa de esto, sucede un gran impacto en materia económica y energética en los
Estados Unidos por lo que hizo que los precios suban aún más y tengan que aplicar
medidas coercitivas para combatir la inflación.
Estados Unidos se vio en la necesidad de realizar negociones con Venezuela para
la exportación del importante crudo, por la eventualidad por la que atraviesa.
Después de las fuertes sanciones aplicadas por Estados Unidos a Venezuela desde
el 2015, han jugado un papel importante en la caía de la economía venezolana.
Estados Unidos quien después de declarar su apoyo a Juan Guaidó y no reconocer a
Maduro como presidente legítimo de la República quiere establecer un acercamiento
para una conveniencia sin duda económica.
No podemos dejar de reconocer que esto es una gran oportunidad y necesidad para
Venezuela para beneficiar la política y la economía del país. Existe una gran
controversia en la que se es criticado Estados Unidos por querer realizar negociaciones
con el país que en su momento fue tachado por ellos mismos como una amenaza a la
seguridad nacional.
Recordemos que el presidente tiene como tarea propia ocuparse de los demás,
hacerse cargo de ellos, tener en cuenta sus intereses. Es como decía Adam Smith
“Interés particular y bien común”. Comerciar es atender al interés del otro, pero por
razón del propio; lo que podemos aplicar para las actuaciones que ha tenido Venezuela
desde el momento del llamado a negociaciones, Venezuela quizá no tiene su enfoque
en todo el daño ocasionado por Estados Unidos a distintas materias del país, si no el
beneficio que puede sacar de ello. Necesitamos del producto del trabajo del otro, del
mismo modo que él necesita del excedente del nuestro. El beneficio es mutuo por
razón del intercambio recíproco.
Venezuela es el país líder en términos de reservas del petróleo y Estados Unidos
fue el mayor comprador del carburante en la época de los 60 y 70. Tras años de
desconformidad notoria entre ambos países, se vuelve irónico que hoy Estados Unidos
busque intereses en un país que fue y sigue siendo excluido del resto del mundo a
causas de tantas sanciones realizadas con el fin de sacar el gobierno pertinente y
buscar una supuesta democracia a la nación, pero también es con ese mismo gobierno
y líder “dictador” que hoy indagan una posibilidad para un provecho en particular.
Venezuela no es el mejor país del mundo, pero como venezolanos tenemos que
saber que tenemos TODO para serlo. Con un buen manejo y estrategias en favor del
país existe la posibilidad de llegar a un bienestar. El petróleo ayuda a que el mundo
funcione y Venezuela tiene mucho, es por tanto que ese es el interés primordial de los
Estados Unidos: Comprar y obtener petróleo.
Después de las sanciones de EE. UU contra Venezuela las consecuencias han sido
visibles para el país. Un ejemplo de ello es que Venezuela es un país que depende
netamente de las importaciones de alimentos, medicinas y maquinaria para producción
interna. Recordemos que Washington ha impuesto sanciones al sector petrolero de
Venezuela, y su vez para cualquier empresa o individuo fuera de Venezuela que
establezca negocios directa o indirectamente con el gobierno. Lo que contrarresta para
el progreso del país. Día tras día son los bloqueos que se hacen presentes a las
transacciones venezolanas para la compra de medicinas que no se hacen el país ni la
materia prima para producirlas. Asimismo, pasa con los alimentos, las sanciones no
permiten importar alimentos e incluso desarrollar la industria agroalimentaria, ante el
bloqueo para adquirir nuevos insumos y equipos y no menos importante la educación el
deporte y la cultura, los cuales se han visto afectados debido a que no es posible
adquirir equipos para las ciencias básicas o libros y otras bibliografías que se producen
fuera de Venezuela; el deporte se ve afectado porque la nación suramericana no puede
importar equipos e implementos deportivos. Mientras que los bloqueos de pagos
internacionales amenazan con no poder trasladar a los atletas a competencias
mundiales.
Con esto podríamos calificar como en absoluto ético y moral la acciones antes
señaladas por los Estados Unidos, ya que ocasionó daños económicos, políticos y
sociales a nuestra nación, escudándose en la falta de legitimidad de nuestros dirigentes
actuales, ya que públicamente declaró y afirmó contra el gobierno la ilegitimidad y
criminalidad de este, para luego de años retomar negociaciones o buscar acuerdos
comerciales con el mismo gobierno que tanto señaló y tachó, por el cual nos declararon
una amenaza. Solo queda expuesto su doble moral en cuanto a las acciones políticas
siempre y cuando estas les sean convenientes.
Es irónico el cómo podemos observar que las sanciones impuesta según solo
afectarían a los funcionarios y que a través de estas se lograría un cambio de gobierno,
siendo todo lo opuesto, las sanciones solo afectaron a la población en general y los
funcionarios sancionados y el mismo gobierno siguen en el ejercicio de sus funciones
en diferentes cargos políticos.