IDENTIDAD E IDENTIFICACION F.

:NLAS ADICCIONES

El Estadio del espejo como formación del yo. Partimos del modelo del estadio
del espejo como una identificación, es decir, como una transformación
prodlKida en el sujeto cuando asume una imagen. La imagen especular dr¡ll
lactante es asumida jubilosamente porque le permite Ivivenciar un sentimiento
de unidad corporal alli donde no lo llay, ya que el infans esta sumido en la
impotencia motriz y la dependencia de la lactancia.
La forma total del cuerpo gracias a la cual el sujeto se adelanta en un
espejismo a la maduración de su poeler, le es dada cpmo una gestalt en.
oposición a la turbulencia de movimientos con que s~ exporimonta a si mismo.
La función del estadio del espejo se nos revela como' un caso particular de la
función de la imago que es establecer una relación ele] organismo con su
realidad.
Esta relación con la naturaleza esía allerada en el llo111
bre por su discordancia
primordial, su incoordínación motriz, el macabamíento anatómico del sistema
piramidal, se plantea una verdadera prematuración especifica en el nacimiento
delllombre, dato conocido como felalización. I . •

Este estadio del espejo permite el pasaje do la insuficiencia a la anticipación,

de la imagen fragmentacja del cuerpo Ilasta una fonTla "ortopédica" de la
totalidad, hasta asumir una identidad enajenante que va a marcar el desarrollo
mental.
El término de narcisismo primario designa la carga I¡ibidinalpropia de ese
momento. .'
En cuanto a la constitución del yo corno unidad puede pensarse que esta viene
precipitada por una cierta imagen que el sujeto adquiere de si mismo
basandose en el modelo de olro,que es precisamente el yo.
El narcisismo seria la captación amorosa elel sujeto por la imanen. Lacan
relaciona este primer momento ele la formacion del yo con la experiencia
narcisista fundamental: fase del espejo.
De este modo el yo se define por una identificación con la imagen de otro.
Si como narcisismo entendemos el amor a la imagen de si mismo, vemos
.como para amar esa imagen, la mirada '1 el recollocimiento de la madre, del
.Otro es fundamental. ..

I .
 Al decir de Farias el narcisismo es especular e imaginario, el yo en formación
se traga la imagen del espejo\ madre (tragar como identificación sobre la
modalidad oral incorporativa y como tiagarse el cuento de su unidad).
La posibilidad de que ese narcisismo se constituya dependera de un soporte
externo, un yo auxiliar.
En el adicto vamos a tratar de ver que pasa con el soporte de la mirada de la
-madre,conque se identifica el adicto, que pasa con su yo.
Cuales han sido las fallas en la formación del yo, que cualidades singulares
tiene ese otro materno para que Ilablemos en la adiccion de un narcisismo
fallido ?
En este sentido, Farias diría que la droga es la única posibilidad que encuentra
el adicto para reforzar su narcisismo íallido.
Se establece un circuito particular, el otro de poder del adicto es su madre y en
un intento de diferenciarse y discriminarse, se acerca a ese objeto de poder ya
que le atribuye a la droga los mismos atributos que al objeto primario, con la
droga ¡intenta alimentar su narcisismo y se acerca más al objeto del cual se
quiere discriminar, ya que con la droga esta repitiendo un estado de
indiscriminación, de confusión, de pérdida de limites como con la madre donde
todo se tiene, todo se puede.
La regresión a un narcisismo deficitario incapaz de sostener la integración del
sujeto, amenazada por una desintegración, una dm¡aparición en el universo
omnipotente del narcisismo del otro en cuerpo de la madre. Esto lo recrea el
adicto en la droga asi como se esclaviza de narcisismo de la madre se
esclaviza de la completucl que pretenele obtener con la ingesta. 0.0.<

. \'
La presencia de la droga cubre la ausencict de la madre y le otorga los mismos
poderes y omnipotencia, recreando situaciones de confusión e indiscriminación
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\
.(el otro es completo, total, fálico).
El objeto droga es tratado como una parle elel propio cuerpo del adicto, cuerpo
que puede ser vivido fragmentariamente por falta ele una función sintetizadora y
unil1cadora del yo: narcisismo. -
Se recrea una modalidad patológica: yo ¡<ibily la necesidad de adjudicar
grandes poderes a lo que se inlloyccla.
 El adicto demanda un reconocimiento que haga posible fortalecer su propio
I

narcisismo deficitario Y poder diferenciarse del otro, objeto que lo ahoga.

La adicción puede considerarse como una incapacidad para regular la distancia'
con el objeto y recurre a la identificación primaria para llenar ese yo agujerado,
El sujeto alcanza su ser y se relaciona con la presencia de un otro, presencia
que le posibilita la identificación Y que es garantía de una inclusión en una
\..._-,- •. Ilistoría,en este sentido, para el adicto es como si la historia se Ilubiese
detenido, el tiempo esta cristalizado, el tiempo es el de presencia o ausencia
\
,\ de la droga.
'"'.-- El adicto fracasa en lograr la idenlificación con un modelo. esto podemos
vincularlo con la ausencia de ideales en el adicto, ya que no se posiciona en un
lugar activo sino que se posiciona como un objeto P'1ra la droga\madre.
Buena parte de la realidad es desmentida por el toxicómano que tiene que ver
con las diferencias. esto habla de una deficiencia en su infancia para hace,r el
duelo de la doble pérdida (pérdid<:ldel objeto y su identidad primaria). La
superación de esta doble pérdida es la condición previa para que se constituya
una idp,ntidad psiquica y un<1identidad sexual, sin las cuales el sujeto se verá
librado a la tendencia de volver a la no diferenciacióll dad<.lla inconsistencia de
su idéntidad. i
El toxicomano en el acto de drogarse V<.lintentar apropiarse del otro corno un
intento de volver a ese momento mitico anterior <1la separación, en este
contexto, la reiteración del acto de drogarse cobra el valor de la confirmación
del vinculo. I

Los efectos del complejo de Edipo en la estructuaración del sujeto se describe

en terminas de identific<lción, I:'IS cargas de los padtes son abandonadas Y
sustituidas por identificaciónes (cambio tener a por ser como él) .
El Superyo corno instancia lloradera del complejo de Edipo, normatizadqra,
formadora, guia de conductas a seguir, falla en el adicto, en tanto la .
interdicción paterna está ausente o frágil impidiento' la identificación con
,

emblemas paternos ("asl corno tu padre debes se('). El adicto esta lejos de
ideales paternos ya que este padre no hace obstáculo en la relación
hijo\rnadre, quedando 1<1 madre disponible y posibilitadora de consumar el
in~sto,

'.:¿
, $i I;¡ prcrnis;¡ (Jel <:dicto es que todo esposilJle tmllbién son posibles los deseos
- milS profundos, el II<¡ rn;¡do de I<¡oroa;) es elll;¡rn;¡clo de 1111<1m;¡dre loca que le
,
oferta el incesto corno realizable,
El adicto busca dentro ele si Illccii<lntc la ,;ustanciEl tóxica ese encuentro
desbordante ante cuya fasinación no retrocede.
El <tdicto se ve compelido ;¡ incorpor;:¡r el tóxico ;¡ 105 eredos de producir en él
las transformaciones noccsalias que le permitan hllir de un sistema que le
resulta intolerablemente opresivo,
La droga intenta desmentir el limite entre lo masculinolfemenino, lo eleseado y
lo posible, lo real y lo perdbic)o. El [1(1ictoes IIn individuo tentado por déficit en
su estructuración edipica con 1<1 ilusión de un incesto posible donde le faltan
recursos yoicos para manejarse con un nivel ele E1ngusti;¡más o menos
tolerable en el mundo simbólico,
El adicto no perdió 1<1 ilusión <le Jlevar SIIS cle,;eos ¡lasta las ultimas
consécuencias en un jue90 con la muerte y la autódestnicción. .
El sujeto sale del complejo de edipo con detenninad<1s identificaciones y una
identidad sexual de este modo el edipo adquiere un c{lfacter estructurante ele
la sexualidad y la personalidad.
El adicto desea sostener a su madre en un IUrJarfálico, podemos pensar que la
droga viene a desmentir la castr<lción materna, donde la madre tiene el falo y la
castrción no existe, el adicto reniega ele un;] percepción de la realiejad donde la
;¡usencia se tapa con una presencial la droga)
El adicto sortea la amenaza de la c¡¡slración con la ecuación droga=falo
evitando la representación de la falta, la droga da todo, creencia que debe ser
sostenida para evitar el desarrollo de la angustia,
Madre fálica es aquell<t que siente que no le falta nada, está completa, todas la
illsastifacciones,
anhelos, encuentran en su hijo la posibilidacl de crearse la ilusión de que se
realizan, tiene alguien que para ella es todo, tiene un subdito incondicional. El
niño no sabe de la castración de la madre y cree que es él el que la hace feliz.
Es una madre que dicta la ley y en su mirada alllijo le dirá sos todo para mi, no
importa tu padre, ';
El nif'lo queda ubicado como falo y su identidad se estructura en base a este )
destino trágico: es para la m<tdre y P;¡r;¡ el narcisismo de ella, ofrece su_vida en " \
función de desmentir la castración materna. . -'
El padre interviene como privador de la madre en doble sentido: privar al niflo
del objeto de su deseo y privar a la madre del objeto fálico. En el padre del
adicto, la función de corte está fallida, no es un padre deseado por la mujer,
. dejando al tlijo y a la madre en esta unldaei narcisista, con todas las
consecuencia que esto implica: la identidad sexuai queda dificultada en un
Inundo
_ donde 1v~_11 v........ ~o hO'I'''n "U",h'lr1n Ur~'l•••.•.•
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fálica con serias dificult¡¡des.en Ii] ,lijfJr(1nr.i;lr.ión sexU<l1y el entr<lrn::ldo

identificatorio, no puede hi~iiorila,so y definirse por si mismo ya que es, lo que
al otro le Ilace falta,