ANTORCHA DE ESPERANZA SAFANA.

ORACIÓN A
LA SAGRADA FAMILIA.

Sagrada Familia de Nazaret,

enséñame a imitarte con mi
vida, a ser fiel en el
cumplimiento del deber,
generoso en el
sacrificio, sencillo y leal en
todo, sincero en la amistad,
sereno en las dificultades y
constante en la oración.
Bendice a mi familia, colegio,
profesores, alumnos y
exalumnos, acógenos en tu
paz y alegría, en la vida
y en la muerte.
Jesús, José y María,
que todas las familias
de la tierra os imiten y
bendigan. Amén.
Lucas. 1, 26 – 33.
Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una
ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una joven virgen
que estaba comprometida en matrimonio con un hombre
llamado José, de la familia de David. La virgen se
llamaba María. Llegó el ángel hasta ella y le dijo:
»Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» María
quedó muy conmovida al oír estas palabras, y se
preguntaba qué significaría tal saludo.
Pero el ángel le dijo: « No temas, María,
porque has encontrado el favor de Dios.
Concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, al que
pondrás el nombre de Jesús. Será grande y justamente
será llamado hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el
trono de su antepasado David; gobernará por siempre al
pueblo de Jacob y su reinado no terminará jamás.»
María entonces dijo al ángel: »¿Cómo puede
ser eso, si yo soy virgen?»
Contestó el ángel: «El Espíritu Santo
descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te
cubrirá con su sombra; por eso el niño santo
que nacerá de ti será llamado Hijo de Dios.»…

Dijo María: «Yo soy la servidora del Señor,

hágase en mí tal como has dicho.»
Después la dejó el ángel.

(Lucas.1,34 – 38)
Las palabras de María, »hágase en mí
según tu palabra»
o su Fiat, representa el punto culmen de la
Anunciación y un momento único en la
historia de la salvación; la joven virgen, la
llena de gracia, acepta el plan divino y
Jesús se encarna en su vientre. El
momento del Fiat, es el momento en que se
hace posible el plan de Dios, y en el que el
destino del hombre cambia.
“Hágase”… No podemos encontrar otra palabra que exprese
con mayor profundidad la fe de María. Es un abandonarse a
la voluntad de Dios con la certeza que Él tiene para nosotros
un plan que tal vez no comprendemos, pero que sabemos que
tiene como finalidad nuestra salvación, pues esa es la
voluntad de Dios. En la Anunciación, María, con su
“hágase”, hizo posible el misterio de la Encarnación y dio
paso a la plenitud de los tiempos y a nuestra redención. Así
nos proporcionó el modelo a seguir para nuestra salvación.
Disponibles para servir La Anunciación es la
festividad que nos
recuerda, que el
camino del católico no
es sencillo, que a todos
el Padre nos ha
entregado una misión, y
que cumplirla implica
renuncia, servicio, fe y
decisión.

Ante las dificultades,

las dudas, las alegrías,
los aciertos, y en cada
uno de nuestros actos,
el hágase de María nos
recuerda que nuestra
vida no está creada para
agradar al mundo, sino
para servir a Dios.
MARÍA, la mujer del SI.

Toda la vida de la virgen María

es un si a Dios.
Un si:
Confiado, comprometido,
obediente, en libertad, humilde.
El si de María es confiado.

María es mujer de
esperanza, que nos
enseña la providencia de
Dios en los sucesos
cotidianos
Contempla, mira a la virgen María y habla un rato con ella, pídele que te enseñe a
escuchar a Jesús en tu corazón y hacer lo que Él te pida.
María, está atenta a la escucha del paso de
Dios por su vida.

¿Cuántas veces pasa Dios por tu lado y no te das

cuenta, no lo escuchas, ni sabes lo que te pide?
María, admite su pequeñez y confía en
Dios.

¿Confías tú, en que Dios pone lo que no está

de tu parte, te cuida y vela por ti.?
El ángel dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo»…

¿Procuras tú, ser para las personas que te rodean, buena noticia?
 Agradece a Dios, las
muchas bendiciones
que derrama sobre ti a
cada instante.
María, nos enseña a captar
el momento favorable en el
que JESÚS, pasa por
nuestras vidas.
 Canta el himno de Antorcha y haz tu compromiso para esta semana.

Virgen María, soy todo tuyo y todo cuanto tengo tuyo es.