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Lucas 4:18-19

«El Espíritu del Señor está sobre mí,  por cuanto me ha ungido para anunciar
buenas nuevas a los pobres.   Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y
dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, 19 a pregonar el año del
favor del Señor.»

Lo primero que nos dice el versículo 18 es “El Espíritu del Señor está sobre mi”,
esto hace referencia directa al Mesías y significa que el Espíritu de Dios lo ha
ungido, Mesías significa ungido, y su primer objetivo es predicar el evangelio o las
buenas noticias a los pobres, pero estas buenas noticias a los pobres no se
refieren a la prosperidad financiera, a salir de la pobreza, no nos hablan de una
campaña política para eliminar la pobreza material del mundo, sino que se refiere a
recibir riquezas que son espirituales.

Sin embargo empieza con una aseveración tremenda, dice “ El Espíritu del Señor
está sobre mi” no dice en mi, no dice “desde el cielo” dice sobre mi. Y eso nos da
un panorama de lo que puede suceder en una persona. Cuando tu naces de nuevo,
te conviertes en templo del Espíritu Santo, y Dios mora en ti, pero la Biblia hace
una clara diferencia cuando habla de “está sobre mi” o cuando dice “llenos del
Espíritu Santo” y aquí vemos en este pasaje importantísimo que dice “Sobre mi”. y
no sólo eso sino que dice que lo ha ungido.

POBREZA ESPIRITUAL
La buena noticia que trae el Mesías es para quienes están espiritualmente pobres

Los pobres viven todos los días de su vida con una desesperanza que los agobia.
Tener hambre, frío y desesperanza, acaba a cualquier persona, y Dios siempre ha
estado al pendiente de los pobres. Y lo primero que dice es que vino a hacer fue a
darles buenas noticias.

La palabra griega que se usa para referirse a esta pobreza se traduce como:
temblar, retroceder, encogerse, así que se refiere directamente a alguien que
parece un mendigo, que ha llegado a tal grado de humillación que no puede
siquiera levantar la cabeza para mirar a los ojos de quienes le están ayudando.

Es alguien que ha llegado a someter todo su orgullo con el fin de poder


conseguir ayuda.
Este persona es la que ha alcanzado la pobreza más extrema y no sabe quién
puede suplir lo que le hace falta, así que está desesperadamente listo para buscar
a Cristo.
Es curioso que cuando todo lo que hacemos confiados en nosotros mismos
fracasa, no nos queda más recurso que acudir a Dios.

Cuando espiritualmente llegamos a este estado en nuestra vida, reconociendo


que no podemos hacer nada por nuestra propia cuenta, que dependemos de la
ayuda de otros para recibir el alimento, es cuando nuestro corazón está listo para
reconocer a Cristo como nuestro Señor y obedecerle en todo.
Esta es la pobreza que Cristo viene a bendecir con una riqueza que no es
material, sino que espiritual.
Mateo 5:3
«Dichosos los pobres en espíritu, porque el reino de los cielos les pertenece.

La bendición solo se alcanza cuando rendimos todo a Jesús.

No es posible ser un cristiano, si nuestro corazón no se ha rendido por completo a


Cristo y esta rendición solo se logra en la humillación de nuestro “Yo”. Muriendo a
nosotros mismos es cuando Jesús empieza a desarrollarse en nuestras vidas.

Tampoco es posible ser ayudado por Dios mientras no reconozcamos


nuestra pobreza espiritual, ya que es vital tomar conciencia de nuestro
estado sin Dios, para buscar su ayuda.

QUEBRANTADOS DE CORAZON
Después dice que vino a sanar a los quebrantados de corazón, todos nos hemos
dado cuenta de cuánta gente tiene el corazón triturado. Por miles de razones, pero
tienen un corazón quebrantado. Algunos por enfermedad, otros por heridas en el
alma, o por tantas cosas, pero hay muchos que tienen el corazón roto. Y vivir así
es llevar una carga muy pesada. Cabe mencionar que dice sanar a los
quebrantados de corazón, por lo que podemos ver que es una especie de
enfermedad, la cual sólo Cristo puede sanar, muchas veces sólo el puede ver los
corazones, y donde parece que no hay nada “enfermo” Dios lo ve y lo sana. El
corazón es algo muy íntimo y privado pero Dios nos conoce a fondo.

LIBERAR A LOS CAUTIVOS


El siguiente punto dice que a proclamar libertad a los cautivos. no necesitamos
estar en una cárcel para estar presos, algunos están presos en sus vicios, otros en
actos inmorales, otros en sus temores,.

Un cautivo es alguien privado de la libertad, es un esclavo, alguien que paga una


pena en la cárcel, pero sabemos por lo que nos dicen los evangelios que Jesús no
liberó a ningún preso mientras estaba en la tierra, ni siquiera a Juan el Bautista
quien fue encarcelado y luego decapitado por el tetrarca Herodes, a causa de una
promesa que le hizo a su hijastra. (Mateo 14:1-12)
Así que a ¿qué tipo de presos se refiere la escritura?  Se refiere a los que están
presos de la culpa, del remordimiento a causa de sus pecados de sus faltas.

Una verdad que podemos asegurar, es que muchas personas piensan que son
libres y ven al cristianismo como una especie de esclavitud, porque asocian
cristianismo con perder nuestros derechos de ser y de hacer, ellos dicen, yo soy
libre de hacer lo que quiera, de vivir como quiera, y no tengo que rendirle cuentas
a nadie.
Romanos 6:16
¿Acaso no saben ustedes que, cuando se entregan a alguien para obedecerlo,
son esclavos de aquel a quien obedecen? Claro que lo son, ya sea del pecado que
lleva a la muerte, o de la obediencia que lleva a la justicia.

El pecado tiene la capacidad de esclavizarnos y volvernos seguidores de


Satanás y no de Dios.

La buena noticia es que Cristo vino a liberar a las personas del pecado.
La palabra que se usa para liberar, se refiere al Perdón, la absolución  de la pena.
El que es liberado por Cristo, es liberado de la culpa que genera el pecado
delante de Dios.

Así que nuevamente la misión del Mesías es traer liberación al mundo de su


estado de cautiverio para que puedan disfrutar de la libertad que Cristo nos da.

DAR VISTA A LOS CIEGOS


Después dice “y vista a los ciegos” aquí se refiere a los ciegos en lo natural, y
ciegos en lo espiritual, en lo natural Dios puede hacer un milagro y en lo espiritual
puede abrirles los ojos para que puedan ver la verdad. La vista tiene un significado
muy importante por que por nuestros ojos podemos ver el camino en el que
andamos. Muchas veces por nuestra ceguera andamos en caminos equivocados.

Aquí podemos ver que realmente Cristo si curó a las personas de su ceguera
física, en los evangelios se nos cuenta de la curación de varias personas ciegas y
nos encontraremos en Lucas con algunos de estos casos, sin embargo la escritura
se refiere a la ceguera espiritual.
Y los  que se encuentran en oscuridad espiritual, no solo carecen de los recursos
espirituales para encomendarse a Dios, no solo están en pobreza espiritual, no
solo son culpables de pecado y están presos, sino que como ciegos, no pueden
ver ni entender la verdad.

LIBERTAD PARA LOS OPRIMIDOS

Y también dice “y poner en libertad a los oprimidos” Los oprimidos no


precisamente son los pobres, no precisamente son los enfermos, sino aquellas
personas que están aplastadas emocionalmente.

El verso 18 termina abriéndonos el tema a este tipo de personas, los oprimidos,


no son los presos, no están en la cárcel, sino que son personas abrumadas,
desesperadas, llenas de angustia, de amargura, dolor, etc. personas que
no  pueden perdonar, que no pueden creer en los demás, que cargan con un peso
emocional tan grande que no logran encontrar la salida y esto los oprime, los
agobia, esta opresión es producida por el pecado.
Los oprimidos son las personas a las que Jesús invitó en Mateo 11:28-29
»Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré
descanso.29 Carguen con mi yugo y aprendan de mí, pues yo soy apacible y
humilde de corazón, y encontrarán descanso para su alma.

El pecado es una carga tan pesada que provoca angustia en el corazón y solo
Dios nos puede liberar de esa angustia tan grande.

Cristo ha venido a traer buenas noticias a los pobres, libertad a los presos del
pecado, vista a los ciegos espirituales, libertad a los oprimidos y estas personas
somos nosotros que hemos creído y obedecido a Dios, nosotros hemos sido
enriquecidos por Dios, hemos sido liberados de la culpa, hemos recibido la vista y
hemos sido librados de la opresión del pecado,

AÑO AGRADABLE DEL SEÑOR


Y cierra con la frase de “predicar el año agradable del Señor”. E l año del favor del
Señor, es el año de la gracia, el año del amor de Dios que nos ha llenado el
corazón de esperanza y nos ha dado la oportunidad de vivir una vida grandiosa
junto a Cristo.

Hoy es el día en que podemos recibir la gracia de Dios, hoy podemos acercarnos a
él y disfrutar de una relación personal con Cristo.

Al hablar del año agradable del Señor, cualquiera podría preguntarse: ¿Cuál será


ese año agradable? ¿Será el año pasado, el presente o el que está por venir? En
el antiguo testamento, los israelitas celebraban un año agradable, el cual era un
año que les  dejaba una gran riqueza tanto espiritual, como material. Veamos en
primer lugar, el año agradable en el antiguo testamento.
I. El año agradable en el antiguo testamento
a. Era el año del jubileo
b. Se celebraba a cada cincuenta años (Levítico 25:10-13; 25-45)

c. ¿Por qué decimos que era un año agradable?

1) Porque la gente que por algunas circunstancias habían perdido sus


propiedades, en ese año las recobraban.

2) Los que tenían deudas se les perdonaba.

3) Los esclavos eran liberados.


II. El año agradable en el nuevo testamento.
a. No es un año de 12 meses, ni de 365 días
b. Comenzó desde el inicio del ministerio de Jesús y culminará con el
arrebatamiento de la iglesia. (estamos en la era de la gracia)

c. Las riquezas del año agradable o año de la gracia.


1) Se predica las buenas nuevas a los pobres.

2) Hay sanidad para los quebrantados de corazón


.
3) Hay libertad para los cautivos
.
4) Vista para los ciegos
.
5) Libertad para los oprimidos
.
6) Perdón de deudas = perdón de pecados.
Conclusión:
Estamos viviendo el año agradable del Señor; y así como en el antiguo testamento
cuando llegaba el año del jubileo las personas recobraban sus propiedades, en
Cristo recobramos nuestros valores perdidos en el mundo por causa de Satanás;
así como se perdonaban las deudas, hoy en Cristo los pecados son perdonados; y
así como se liberaban a los esclavos, hoy las cadenas de esclavitud se rompen por
el poder de Dios y hay libertad en Cristo Jesús.

Modificado el ( lunes, 02 de julio de 2012 )


 

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