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Tópicos en Mecánica
(Apuntes de clases)
Francisco Brieva
versión 1.0
agosto 2020
INDICE
2. Dinámica de la partı́cula 31
2.1. Leyes del movimiento de Newton . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31
2.2. Dinámica rotacional: Momentum angular y Torque . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37
2.3. Análisis del movimiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
2.4. Ejemplos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 44
2.5. Fuerzas en la naturaleza . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54
2.5.1. Fuerza gravitacional . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 59
2.5.2. Fuerzas de roce . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65
2.5.3. Fuerzas de restitución (lineal) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 70
2.6. Ejemplos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 76
2.6.1. Interacción entre distribución de masa y masa puntual . . . . . . . . . . . . . 76
2.6.2. Desplazamiento de partı́cula en medio viscoso . . . . . . . . . . . . . . . . . . 78
2.6.3. Péndulo de resorte . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89
5. Oscilaciones 171
5.1. Modelo: fuerza lineal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 172
5.1.1. Simplificaciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 172
5.2. Oscilaciones libres . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 174
5.2.1. Fuerza en 1–dimensión . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 175
5.2.2. Fuerza en 2–dimensiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 177
5.2.3. Fuerza en 3–dimensiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 183
5.3. Oscilaciones amortiguadas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 186
5.4. Oscilaciones forzadas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 194
5.5. Oscilaciones acopladas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 203
5.5.1. Un caso didáctico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 204
5.5.2. Un ejemplo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 213
CAPITULO 1
Este tema, también conocido como Cinemática, nos permite introducir los conceptos básicos que
permiten describir los aspectos geométricos del movimiento de un objeto, sin considerar sus causas
o las limitaciones espacio–temporales que lo restringen en una situación fı́sica particular. El análisis
del movimiento de una partı́cula corresponde, en un contexto fı́sico más riguroso, al estudio del
movimiento de traslación del centro de masa de un cuerpo de tamaño finito. No se consideran, en
esta etapa, las posibles rotaciones y deformaciones que el cuerpo puede sufrir y las restricciones
geométricas que ello implica. No obstante, se podrá dar una descripción fı́sica correcta de aquellas
variables del movimiento relevantes en una amplia gama de problemas de aplicación práctica.
Suposiciones
Los objetos a describir se consideran puntuales, es decir, son representados por partı́culas
sin dimensión espacial. Entonces, el problema se reduce a estudiar la geometrı́a asociada al
movimiento de un punto en el espacio.
El espacio es euclidáneo† (plano), isótropo (no tiene direcciones privilegiadas) y homegéneo
(uniforme).
Existe un tiempo t único, universal, en ese espacio (velocidad de señal que transmite información
entre relojes ubicados en puntos del espacio se supone infinita).
Se estudia el rango de fenómenos mecánicos cuyas velocidades caracterı́sticas son mucho
menores que la velocidad de la luz.
C¶
O+
~r(t)
C
Figura 1.1: Vector posición
Ejemplo: Un disco de radio R rueda sin resbalar a velocidad constante ~vc sobre un plano
horizontal, como se indica en la figura adjunta. Describa la trayectoria de un punto P del
disco ubicado a una distancia h ≶ R del centro.
Solución Para describir la posición del punto P a un tiempo arbitrario t, observemos en la
figura que se cumple
−→ −→0 −− → −−→
IP = II + I 0 O + OP .
|^
~c
µ
~r(t)
P ¶ ^{
−→
Identificando IP con el vector posición ~r, se tiene
h −→ −−→ i h −−→ i
0
~r(t) = II · ı̂ + OP · ı̂ ı̂ + R + OP · ̂ ̂ ,
Es directo verificar que, inicialmente, xP (0) = 0 e yP (0) = (R − h) ̂. Para todo tiempo t,
es directo evaluar estas componentes cuando el disco se desplaza con velocidad constante.
Además, simplifica la descripción de la trayectoria el notar que el movimiento de P depende
1.1 Conceptos cinemáticos 3
del ángulo θ que mide, con respecto a la vertical, el desplazamiento del rayo donde se ubica,
además del desplazamiento de O. Entonces,
−→0 −−→ −−→
II · ı̂ = vc t , OP · ı̂ = − h sin θ , OP · ̂ = − h cos θ .
h
Introduciendo la razón γ = R para caracterizar la ubicación de P con respecto al radio R del
disco se obtiene para xP e yP ,
hv i
c
xP (t) = R t − γ sin θ ,
R
yP (t) = R [ 1 − γ cos θ ] .
vc t = R θ .
xP (t) = R [ ωO t − γ sen(ωO t) ] ,
yP (t) = R [ 1 − γ cos(ωO t) ] ,
xP (θ) = R [ θ − γ sen(θ) ] ,
yP (θ) = R [ 1 − γ cos(θ) ] ,
y/R °
3
1,5
2
1,0
0,5
1
¼ 3¼ x/R
-1
4 Geometrı́a del movimiento
2πR 2π
T = = .
vc ωO
1.1.2. Velocidad
El concepto de velocidad instantánea, usualmente velocidad, mide la tasa de variación temporal de
la posición de la partı́cula en el espacio. En una primera aproximación, esta variación se estima
midiendo las posiciones P y P 0 de un objeto en los instantes t y t + ∆t posterior, respectivamente
(Fig. 1.2). El vector ∆~r que indica el desplazamiento, en lı́nea recta, de la partı́cula desde la posición
inicial ~r(t) a la posición final ~r(t + ∆t) se llama vector desplazamiento,
P¶
¢s
~r +¢ ~r ¢ ~r v~
P
~r
O recta tangente en P
~v (t) = v(t) t̂ ,
d~r = v(t) dt t̂ ,
expresión que permite introducir la longitud infinitesimal de arco de trayectoria ds (∆s en Fig. 1.2),
√
ds = d~r · d~r ,
ds
v(t) = = ṡ,
dt
d~r
t̂ = ,
ds
Suma de velocidades
En la descripción de la trayectoria de P interesa, a veces, especificar su posición con respecto
a un nuevo punto de referencia O 0 , origen de otro sistema de referencia (S 0 ) como se indica
en Fig. 1.3. En el nuevo sistema, el vector posición ~r 0 (t) describe la posición de P relativa a
O 0 ; entonces
~r = ~rO0 + ~r 0 .
S
C¶
O+
~r(t)
~r (t)
O
¶
P
S
O+
¶
C
Figura 1.3: Dos sistemas de referencia
El vector posición ~r identifica la posición absoluta de P . Se expresa como la suma del vector
posición ~rO0 , describiendo la ubicación del origen O 0 de un nuevo sistema de referencia, más
el vector posición ~r 0 de P relativo a O 0 . Con esta descomposición, la velocidad ~v de P en el
sistema de referencia original (S) o velocidad absoluta ~vabs de P se expresa por
donde
~vO0 (t) = ~r˙O0 , ~vrel (t) = ~r˙ 0 ,
son la velocidad ~vO0 del punto O 0 (origen del sistema de referencia S 0 ) y la velocidad relativa
~vrel de P con respecto a O 0 . Si la posición de O 0 con respecto al origen O es fija (~rO0 constante
en el tiempo), entonces ~vO0 = 0 y las velocidades absoluta y relativa de P coinciden.
Velocidad media
Se define como el valor promedio de la velocidad instantánea en un intervalo de tiempo T ,
Z t0 +T
1
< ~v >T = T ~v (t) dt ,
t0
1
= T [ ~r (t0 + T ) − ~r (t0 ) ] ,
Rapidez media
Corresponde al valor promedio de la magnitud de la velocidad instantánea en un intervalo de
tiempo T ,
Z t0 +T
1
< v >T = T v(t) dt ,
t0
1
= T [ s(t0 + T ) − s(t0 ) ] ,
Velocidad angular
La noción de velocidad angular es intuitiva, asociándola a la forma en que una partı́cula o un objeto
pueden rotar en torno a un punto o a un eje fijo en el espacio. Ello es particularmente verificable
cuando existen restricciones fı́sicas (una cuerda por ejemplo) que impiden al objeto alejarse del punto
o del eje. Esta evidencia sugiere que la velocidad instantánea puede descomponerse en cantidades
que permitan identificar los grados de libertad rotacionales que, eventualmente, caracterizan el
movimiento de una partı́cula y su eventual generalización a sistemas más complejos.
La idea de descomponer la velocidad en dos términos nace de la siguiente observación: para una
partı́cula en movimiento, su vector posición ~r(t) y su velocidad ~v (t) definen, instantáneamente, el
plano donde el movimiento ocurre, como se observa en Fig. 1.4. En ese plano (que por supuesto
cambia con t) es posible proyectar la velocidad según la dirección del vector posición y su componente
ortogonal para obtener una descripción alternativa. Ası́ planteado, el movimiento se interpreta como
correspondiendo a una partı́cula que se mueve en la dirección radial y, simultáneamente, en una
dirección ortogonal a la radial producto de la rotación que sufre con respecto al origen.
Introduciendo la velocidad en la dirección radial como
~vr = vr r̂ , con vr = ~v · r̂ ,
C¶
~ O (t) × ~r(t) ,
~v (t) = ~vr (t) + ω
~r(t) × ~v (t) ˙ .
ω
~ O (t) = = r̂(t) × r̂(t)
r 2 (t)
Propiedades
~r(t) · ω
~ O (t) = 0 ,
~v (t) · ω
~ O (t) = 0 .
~!
O
†
Un vector ~r cambia su signo (~r → − ~r) bajo inversión con respecto al origen de sus ejes coordenados. Existen, sin
embargo, los llamados vectores axiales o seudovectores, quienes permanecen invariantes (~r → ~r) bajo inversión. Es
simple verificar, por ejemplo, que el producto vectorial de dos vectores es un vector axial.
1.1 Conceptos cinemáticos 9
1.1.3. Aceleración
La necesidad de relacionar el movimiento con las causas que lo producen motiva la introducción del
concepto de aceleración instantánea o aceleración. Se define como la tasa de variación temporal del
vector velocidad,
h i
~a(t) = lı́m ~v(t+∆t)−~∆t
v (t)
,
∆t→0
d ~v (t) d2~r(t)
= = ,
dt dt2
≡ ~v˙ (t) ≡ ~r¨(t) .
Formalmente, la ecuación previa indica que la aceleración corresponde a la derivada temporal del
vector velocidad o, equivalentemente, a la segunda derivada temporal del vector posición.
¢ ¢
La construcción gráfica del vector aceleración se indica en Fig. 1.6, considerando un punto P de la
trayectoria en el instante t. Su cálculo requiere del conocimiento del vector velocidad en dos puntos
(o del vector posición en tres) infinitesimamente (∆t → 0) próximos. En particular, se observa que
la aceleración tiene la dirección ∆~v , es decir, apunta siempre en el sentido de la concavidad de la
trayectoria que la partı́cula sigue. Esta propiedad se hace explı́cita al considerar la velocidad en
términos de su magnitud y su dirección según la tangente a la trayectoria,
dv dt̂
~v (t) = v(t)t̂ =⇒ ~a(t) = t̂ + v .
dt dt
Recordando que la derivada de un vector unitario es perpendicular a él, introduzcamos una dirección
n̂ normal a la dirección t̂ tangente a la trayectoria,
dt̂
dt
n̂ =
dt̂
,
dt
con lo cual la la aceleración se puede escribir en término de dos componentes: una tangencial (según
t̂) y otra normal (según n̂) a la trayectoria,
con
~at̂ = v̇ t̂ y ~an̂ = v
ddtt̂
n̂ .
C
P
~r(t)
~a ^t
+
O ~a n^
t^
~a(t)
C¶
Figura 1.7: Aceleración y sus componentes.
Fig. 1.7 ilustra la aceleración y sus componentes. La componente tangencial existe sólo si la rapidez
6 0) mientras que la componente normal siempre está presente, salvo cuando la
varı́a en el tiempo (v̇ =
trayectoria es rectilı́nea. El alejamiento de la trayectoria a su tangente en cada punto es consecuencia
de la presencia de la aceleración normal, condición que explica la geometrı́a que sigue la trayectoria
y la dirección de la aceleración para un punto en movimiento.
El cálculo de la magnitud a(t) de la aceleración es directo:
p
a(t) ≡ k~a(t)k = ~a(t) · ~a(t) ,
q
= k~at̂ k 2 + k~an̂ k 2 .
Aceleración media
Se define como el valor promedio de la aceleración instantánea en un intervalo de tiempo T ,
Z t +T
0
< ~a >T = T1 ~a(t) dt ,
t0
1
= T [ ~v (t0 + T ) − ~v (t0 ) ] ,
Aceleración angular
La aceleración angular se define como la tasa de variación temporal de la velocidad angular
correspondiente. Consistente con la discusión sobre velocidad angular, se puede introducir el
concepto de aceleración angular de la partı́cula con respecto al punto O,
dω ~ O (t)
α
~ O (t) = ≡ω~˙ O ,
dt
~r × ~a v
= r̂ × r̂¨ = 2
−2 r ω
~ ,
r r O
1.1 Conceptos cinemáticos 11
Movimiento uniforme
Se trata del caso más simple de movimiento que se encuentra en la naturaleza. La desviación
de una partı́cula de la trayectoria recta indica la presencia de aceleraciones y, como se verá
más adelante, de fuerzas que actúan sobre ella. Ocurre cuando la aceleración es nula y, por
consiguiente, velocidad de un objeto es uniforme ~v (t) = ~v0 , es decir, de magnitud y dirección
independientes del tiempo. A partir de la definición de velocidad, la trayectoria se obtiene
integrando la función velocidad,
Z t
~r(t) = ~r0 + ~v (t 0 ) dt 0 ,
t0
donde ~r0 = ~r(t0 ). La integral es factible de calcularse cuando la dirección del movimiento es
constante. En este caso, la velocidad no varı́a en el tiempo, por lo cual
~r(t) = ~r0 + ~v0 [ t − t0 ] ,
es decir, la trayectoria es una lı́nea recta como se indica en Fig. 1.8 para t0 = 0.
~a(t) = ~a0 ,
= a0 â0 , (1.1)
Este caso es especialmente simple por ser la aceleración constante, permitiendo sacar el
integrado fuera de la integral y teniendo que realizar una integral elemental. Se obtiene,
resultado que indica que la posición de la partı́cula queda descrita por un polinomio de orden
2 en la variable temporal
[ ~r(t) − ~r0 ] · ê = 0 .
No existe proyección del vector desplazamiento [ ~r(t) − ~r0 ] sobre la dirección ê, situación
que describe el lugar geométrico correspondiente a un plano. Por lo tanto, la trayectoria
seguida por el vector posición ~r(t) está contenida en el plano definido por la dirección ê y
a partir del punto descrito por ~r0 .
1.1 Conceptos cinemáticos 13
• La trayectoria de la partı́cula sobre el plano es, en general, parabólica. En Fig. 1.9 se indica
esquemáticamente el tipo de movimiento esperado ~r(t), suponiendo ~r0 = 0, para diferentes
ángulos entre la dirección de la velocidad inicial (v̂0 ) y la dirección de la aceleración
inicial (â0 ). En el caso particular de v̂0 paralela a â0 , la trayectoria es una lı́nea recta.
con
xk = v0 cos α t + 21 a0 t2 ,
x⊥ = v0 sin α t .
En este caso, las aplicaciones más usuales son el análisis del movimiento en caı́da libre y el
estudio de la trayectoria de proyectiles en el campo gravitacional terrestre.
Movimiento circular
Se trata de una trayectoria circular contenida en un plano. Llamando ê una dirección perpen-
dicular al plano del movimiento y haciendo coincidir el origen O del vector posición con el
centro del cı́rculo, entonces el movimiento circular queda especificado por
~r(t) = R0 r̂ ,
~r(t) · ê = 0 ,
donde R0 es el radio del cı́rculo y r̂ es el vector radial unitario. Es interesante analizar otras
cantidades cinemáticas como la velocidad y la aceleración de una partı́cula sometida a un
movimiento circular.
~v (t) = R0 r̂˙ .
~r(t) · ~v (t) = 0 ,
~r(t) · ~r(t) = R0 2 .
1.1 Conceptos cinemáticos 15
La magnitud de la velocidad es
v(t) = R0
r̂˙
.
e ¢
eje de referencia
Para calcular la magnitud de la derivada temporal del vector radial unitario hay que ob-
servar el movimiento de la partı́cula en dos instantes de tiempo t y t+∆t correspondientes
a los puntos P y P 0 en Fig. 1.10,
h i
˙
r̂(t+∆t)−r̂(t)
r̂(t)
=
lı́m
∆t→0 ∆t
.
Introduciendo la variable angular θ para medir la posición del vector posición con respecto
a un eje de referencia y el incremento angular ∆θ,
y descomponiendo r̂(t + ∆t) según las direcciones r̂(t) y t̂, vector unitario tangente a la
trayectoria circular,
r̂(t + ∆t) = cos(∆θ) r̂ + sen(∆θ) t̂ ,
se tiene, en el lı́mite ∆t → 0 ( ∆θ → 0 ),
˙
lı́m ∆θ t̂
,
r̂(t)
=
∆t→0 ∆t
dθ(t)
= ≡ θ̇(t) ,
dt
con θ̇(t) la derivada temporal de la variable angular θ. Por lo tanto, la velocidad de una
partı́cula en movimiento circular de radio R0 es
~v (t) = R0 θ̇(t) t̂ .
~ O (t) × ~r(t) ,
~v (t) = ω
16 Geometrı́a del movimiento
ω
~ O (t) = θ̇(t) ê .
~a(t) = R0 θ̈ t̂ + R0 θ̇ t̂˙ .
La derivada temporal del vector unitario t̂ se obtiene al notar que r̂ y t̂ son vectores
ortogonales. Entonces,
r̂ · t̂˙ = −r̂˙ · t̂ .
De aquı́ se concluye,
0 eje de referencia
Cuando el origen de coordenadas coincide con el centro del cı́rculo, se acostumbra expresar
la aceleración en término de sus componentes tangencial (a la trayectoria) y radial (normal
a la trayectoria),
~a(t) = ~at (t) + ~ar (t) ,
con
~at (t) = R0 θ̈ t̂ ,
~ar (t) = − R0 θ̇ 2 r̂ ,
α
~ O (t) = θ̈ ê ,
µ ( t)
do
®0 > 0
ra
ele
e
ac
form
te uni
en
em
rm
ifo
!0 > 0
un
µ0 ®0 < 0
t
Figura 1.12: Variación temporal angular.
Movimiento armónico
Otro tipo de movimiento frecuente en la naturaleza se caracteriza por tener una aceleración
proporcional y antipararela al vector posición de un punto con respecto al origen O,
~a(t) ≡ ~r¨(t) = − Ω2 ~r(t) ,
donde Ω > 0 es una constante de proporcionalidad con dimensión inversamente proporcional
al tiempo. Si tratamos de integrar directamente esta ecuación se tiene,
Z t
d~v
~a(t) = =⇒ ~v (t) = ~v0 − Ω 2
~r(t0 )dt0 .
dt 0
18 Geometrı́a del movimiento
Pero esta integral no la podemos resolver directamente porque, en este caso, el integrando es
la función vectorial buscada ~r(t). Hay variadas técnicas para resolver la ecuación diferencial
vectorial e incluso la integral, pero ellas se verán más adelante en el curso. Por ahora, basta
considerar la solución
~v
~r(t) = ~r0 cos (Ωt) + Ω0 sen (Ωt) ,
y verificar que satisface la ecuación diferencial y las condiciones iniciales. La dependencia
temporal del vector posición indica que se trata de un movimiento armónico caracterizado por
la frecuencia angular Ω. Al respecto, definiendo un intervalo de tiempo T , llamado el perı́odo
del movimiento,
2π
T = ,
Ω
se concluye que
~r(t + T ) = ~r(t) ,
es decir, la posición de la partı́cula en el espacio se repite con perioricidad T y la trayectoria
es cerrada. Además, el movimiento armónico es plano,
° >1
° =1
r (t ) ° <1
r 0
Ωt
O O O
1 1 3
® =
4
¼ ® = 2
¼ ® =
4
¼
Figura 1.13: Ejemplos de trayectorias elı́pticas.
El tipo de trayectoria que sigue una partı́cula sobre el plano es, en general, elı́ptica. En
Fig. 1.13 se grafica la magnitud de la distancia desde origen a la trayectoria, normalizada a la
posición inicial r0 , en función del ángulo (Ωt) y para 3 valores del ángulo inicial α entre ~r0 y
~v0 . Se ha introducido además el parámetro
v0
γ= ,
Ω r0
que mide la magnitud v0 relativa a la rapidez Ω r0 de una partı́cula siguiendo una trayectoria
circular.
Algunos casos lı́mites, fácilmente interpretables, se han omitido en Fig. 1.13. Corresponden,
por ejemplo, a la situación en que ~v0 es paralelo a ~r0 y el movimiento es rectilı́neo, con la
1.2 Sistemas de coordenadas 19
P
~r
x^ 3
O x^2
x^ 1
donde la coordenada xi
xi (t) = ~r · x̂i ,
corresponde a la proyección de ~r sobre la dirección de referencia x̂i . Ası́, las componentes del vector
posición en la base canónica de referencia se identifican con las coordenadas independientes xi que
describen la posición de un punto en el espacio. La magnitud de ~r es
v
u 3
√ uX
k~r(t)k = ~r · ~r = t (xi )2 ,
i=1
es decir, la raı́z cuadrada de la suma del cuadrado de cada una de las componentes xi .
El cálculo de otras magnitudes cinemáticas como la velocidad y la aceleración, expresadas en la
base de referencia estándar {x̂i }, corresponde a
3
X 3
X
~v (t) = vi x̂i , ~a(t) = ai x̂i ,
i=1 i=1
vi = ẋi , y ai = ẍi .
Estas componentes son también proporcionales a la magnitud de la velocidad angular calculada con
respecto a los ejes {x̂i }. Introduciendo el ángulo αk entre el vector posición ~r y el eje x̂k ,
v
u P3
u i6=k (xi )2
sen αk = t P3 ,
2
i=1 (xi )
1.2 Sistemas de coordenadas 21
es directo demostrar la siguiente relación entre la velocidad angular con respecto al origen O y las
velocidades angulares con respecto a los ejes ortonormales de la base,
i=3
X
ω
~O = [sin αi ]2 ω
~ x̂ .
i
i=1
Entonces, los vectores unitarios {ı̂, ̂, k̂}, mutuamente ortogonales, satisfacen
ı̂ · ̂ = 0 , ı̂ × ̂ = k̂ ,
̂ · k̂ = 0 , ̂ × k̂ = ı̂ ,
k̂ · ı̂ = 0 , k̂ × ı̂ = ̂ .
Esta base es fija en el espacio y tiene origen en O, como se indica en la Fig. 1.15. El vector posición
~r, que describe la trayectoria de una partı́cula P , se descompone según los vectores unitarios que
definen la base cartesiana,
~r(t) = x ı̂ + y ̂ + z k̂ ,
22 Geometrı́a del movimiento
donde x = x(t), y = y(t), z = z(t) son las coordenadas cartesianas que miden la proyección del
vector posición según los vectores base,
x1 (t) ≡ x(t) = ~r · ı̂ ,
x2 (t) ≡ y(t) = ~r · ̂ ,
x3 (t) ≡ z(t) = ~r · k̂ .
La velocidad del punto P se obtiene calculando la derivada temporal del vector posición y observando
que los vectores base no dependen del tiempo,
~v (t) = vx ı̂ + vy ̂ + vz k̂ , (1.-9)
y su magnitud
q
v(t) = vx2 + vy2 + vz2 , (1.-9)
~a(t) = ax ı̂ + ay ̂ + az k̂ , (1.-9)
donde las componentes en la base cartesiana corresponden a la segunda derivada de las componentes
del vector posición,
ax (t) = ẍ , ay (t) = ÿ , az (t) = z̈ . (1.-9)
06 ρ 6∞,
0 6 θ 6 2π ,
−∞ 6 z 6 ∞ .
1.2 Sistemas de coordenadas 23
^
k P
¶
Figura 1.16: Coordenadas cilı́ndricas.
Se introduce una base de referencia asociada a las coordenadas {ρ, θ, z} formada por los vectores base
{ρ̂, θ̂, k̂} (indicados en Fig. 1.16) que satisfacen, por construcción, las relaciones de ortonormalidad
ρ̂ · θ̂ = 0 , ρ̂ × θ̂ = k̂ ,
θ̂ · k̂ = 0 , θ̂ × k̂ = ρ̂ ,
k̂ · ρ̂ = 0 , k̂ × ρ̂ = θ̂ .
Por simplicidad, es usual tomar la dirección que define al plano donde se proyecta el movimiento
coincidiendo con vector unitario k̂ y al eje de referencia coincidiendo con la dirección ı̂ de la base
cartesiana. La elección favorece para establecer las relaciones algebraicas que existen entre ambos
conjuntos de coordenadas.
Se enfatiza que ahora, a diferencia de las coordenadas cartesianas, la base sobre la cual se proyecta
el movimiento es móvil con ρ̂ y θ̂ dependiendo del tiempo.
Establecida la base de referencia {ρ, θ, z} y las coordenadas cilı́ndricas {ρ, θ, z} de un punto en esa
base, se pueden estudiar la forma que toman los conceptos cinemáticos. A partir de Fig.1.16 se
observa que el el vector posición del punto P se expresa por
~r(t) = ρ ρ̂ + z k̂ . (1.-15)
dρ̂
~v (t) = ρ̇ ρ̂ + ρ + ż k̂. (1.-15)
dt
Considerando que la derivada a un vector unitario es normal a éste y en el sentido en que el vector
varı́a su dirección,
dρ̂
= θ̇ θ̂ ,
dt
entonces, la velocidad en coordenadas cilı́ndricas queda dada por
~v (t) = ρ̇ ρ̂ + ρ θ̇ θ̂ + ż k̂ ,
24 Geometrı́a del movimiento
y su magnitud q
2
v(t) = ρ̇ 2 + (ρ θ̇) + ż 2 .
La aceleración se obtiene directamente al derivar la velocidad con respecto al tiempo. Es necesario
observar que la derivada temporal de θ̂ apunta en la dirección antiradial,
˙
θ̂ = − θ̇ ρ̂ ,
con lo cual la aceleración se expresa por
~a(t) = [ ρ̈ − ρ θ̇2 ] ρ̂ + [ 2 ρ̇ θ̇ + ρ θ̈ ] θ̂ + z̈ k̂ .
Coordenadas polares.
Es un caso particular de las coordenadas cilı́ndricas que ocurre cuando la variable z es nula
durante el movimiento. Entonces, las coordenadas ρ y θ describen el movimiento en un plano
que contiene el origen. En coordenadas polares, la velocidad y la aceleración de una partı́cula
se calculan a partir de las expresiones previas correspondientes con z(t) = ż(t) = z̈(t) = 0. Una
aplicación directa de estas coordenadas corresponde al movimiento circular de una partı́cula
descrito en clase 3, con la coordenada radial ρ constante durante el movimiento.
Coordenadas cartesianas y cilı́ndricas.
Se puede establecer relaciones simples entre ambos sistemas de coordenadas. A partir de
Fig. 1.16 es directo establecer
x = ρ cos(θ) , ı̂ = cos(θ) ρ̂ − sen(θ) θ̂ ,
y = ρ sen(θ) , ̂ = sen(θ) ρ̂ + cos(θ) θ̂ ,
z=z , k̂ = k̂ .
En forma análoga se expresa ,
p
ρ = x2 + y 2 , ρ̂ = cos(θ) ı̂ + sen(θ) ̂ ,
θ = arctan xy ,
θ̂ = − sen(θ) ı̂ + cos(θ) ̂ ,
z=z , k̂ = k̂ .
Estas expresiones corresponden a las relaciones buscadas entre las coordenadas (bases) cartesianas
y cilı́ndricas respectivamente,
A diferencia del caso de las coordenadas cartesianas, la base esférica sobre la que se proyecta el
movimiento es móvil, con todos sus ejes dependiendo del tiempo. La posición de un punto P queda
descrita por las coordenadas {r, θ, φ} asociadas respectivamente a los vectores de la base y su rango
de variación, para cubrir todo el espacio, es
06 r 6∞,
06 θ 6π,
0 6 φ 6 2π ,
µ r^
P Á^
µ^
^k r
O
{^ Á P¶
Á^ y
½^
El vector posición en coordenadas esféricas tiene una expresión simple en términos de su magnitud
y la dirección radial. Se expresa por
~r(t) = r r̂ .
La velocidad del punto P se obtiene por derivación, en el tiempo, del vector posición para lo cual se
requiere conocer la derivada temporal de r̂,
~v (t) = ṙ r̂ + r r̂˙ .
La derivada temporal de r̂ tiene componentes según θ̂ y φ̂ (por ser normal a r̂ está contenido en el
plano definido por θ̂ y φ̂),
r̂˙ = θ̇ θ̂ + φ̇ sin θ φ̂ ,
con lo cual la velocidad en coordenadas esféricas tiene la expresión
~v (t) = ṙ r̂ + r θ̇ θ̂ + r φ̇ sen θ φ̂ ,
y su magnitud q
2 2
v(t) = ṙ 2 + (r θ̇) + (r φ̇ sen θ) .
26 Geometrı́a del movimiento
φ = arctan xy
, φ̂ = − sen(φ) ı̂ + cos(φ) ̂ .
t̂ · n̂ = 0 , t̂ × n̂ = b̂ ,
n̂ · b̂ = 0 , n̂ × b̂ = t̂ ,
b̂ · t̂ = 0 , b̂ × t̂ = n̂ ,
1.2 Sistemas de coordenadas 27
O
s
~r
^
n
P
^
b
^
t
Plano
Normal
^b
P ^
n
Plano ~v ^t ~a
Osculador
Plano
Rectificante
que permita tener una descripción alternativa del movimiento de una partı́cula en el espacio.
En Fig. 1.19, el vector unitario tangente t̂ define el plano normal que contiene el punto P . A su vez,
el vector unitario n̂ normal a la dirección tangente a la trayectoria en P , define el plano rectificante
que contiene a t̂. Por último, el vector unitario b̂ define el plano osculador que pasa por P y que
contiene los vectores velocidad y aceleración,
~v × ~a
b̂ = ,
k~v × ~ak
= t̂ × n̂ .
En estas coordenadas intrı́nsecas, la velocidad se expresa como
d~r d~r ds
~v (t) = = = ṡ t̂ ,
dt ds dt
donde la tangente a la trayectoria se ha definido como el vector desplazamiento por unidad de arco
recorrido,
d~r
t̂ = ,
ds
28 Geometrı́a del movimiento
dt̂ 1
= ,
ds Rc
y la aceleración queda expresada por
ṡ 2
~a(t) = ~at + ~an , con ~at = s̈ t̂ y ~an = ,
Rc
es decir, la suma de sus componentes tangenciales y normales.
En general, la utilidad de las coordenadas intrı́nsecas se manifiesta en problemas donde la trayectoria
es conocida.
Radio de curvatura
El radio de curvatura Rc de la trayectoria se puede determinar a partir de la velocidad y la
aceleración de la partı́cula,
1 3
~v (t) × ~a(t) = ṡ b̂ ,
Rc
expresión permite calcularlo a partir de las magnitudes cinemáticas (en plano osculador),
3
v
Rc =
~v × ~a
.
Sin mucho trabajo se puede expresar la torsión como el triple producto escalar
h i
db̂
τ = t̂ b̂ ds ,
magnitud escalar que puede ser positiva o negativa dependiendo del sentido de rotación del
plano osculador en torno al eje definido por vector tangente t̂. Para expresar la torsión y el
radio de torsión en términos de las magnitudes cinemáticas, se calcula la derivada temporal
de la aceleración y se proyecta según b̂. Entonces, es directo comprobar que el radio de torsión
está dado por
k~v × ~ak 2
Rτ = .
[ ~v~a~a˙ ]
En el caso que la trayectoria tenga torsión nula (Rτ = ∞) se trata de una curva plana
contenida en el plano osculador.
30 Geometrı́a del movimiento
CAPITULO 2
Dinámica de la partı́cula
concepción y, por lo tanto, no es derivable de algún principio más fundamental. Su tarea básica es
relacionar las cantidades cinemáticas que describen el movimiento de una partı́cula con las fuerzas,
macroscópicas o microscópicas, dependientes o independientes del propio movimiento, que actúan
sobre ella.
Las ideas introducidas por Newton toman, en su versión actual, la forma de tres leyes. Dos de ellas,
que forman lo conceptualmente básico de la Dinámica, establecen las condiciones que permiten
obtener una ecuación de movimiento fı́sicamente significativa. La tercera, de otro rango, da una
prescripción para describir la interacción de dos cuerpos en contacto.
Ley I
Todo cuerpo permanece en estado de reposo o de movimiento uniforme en lı́nea recta, a menos
que actúe sobre él una acción (fuerza) que lo obligue a cambiar de dicho estado.
Esta ley fue originalmente enunciada por Galileo. Se le conoce también como el Principio de Inercia,
ya que describe una propiedad común a todos los medios materiales: la inercia. Por otra parte, la
condición de reposo o de movimiento con velocidad constante depende, además de la ausencia de
fuerzas externas, del sistema de referencia particular que se utiliza. Ası́, de todos los sistemas de
referencia posibles, un Sistema de Referencia Inercial es aquel en el cual la Ley I se cumple.
~¶
¶
~o
¶
¶
o¶
~r = ~rO 0 + ~r 0 ,
~v = ~vO 0 + ~v 0 ,
~a = ~a 0 ,
que relacionan la descripción del movimiento para observadores en S y S 0 . Por lo tanto, si ~v es nulo
o uniforme se tiene que ~v 0 , la velocidad del punto P en S 0 , es también uniforme. Las aceleraciones
del punto P medidas en ambos sistemas de referencia son iguales, lo cual hace explı́cito el hecho
que todos los sistemas de referencia inerciales son fı́sicamente equivalentes. Implı́cito en estas
2.1 Leyes del movimiento de Newton 33
transformaciones está la idea de un tiempo universal, es decir, t = t0 . Esta suposición resulta ser,
en general, incorrecta. Entonces, las transformaciones de Galileo deben ser consideradas como una
descripción aproximada de la idea de sistema de referencia inercial y válidas cuando las velocidades
caracterı́sticas del fenómeno a describir son mucho menores que la velocidad de la luz.
Ley II
La tasa de variación temporal de la cantidad de movimiento de un cuerpo es proporcional a la
fuerza neta (o resultante de las fuerzas) que actúan sobre él.
p~ = m ~v ,
con la masa m representando la medida cuantitativa de su inercia (masa inercial). Entonces, la Ley
II se expresa
d~p
≡ p~˙ = F~ ,
dt
donde la constante de proporcionalidad se ha tomado igual a la unidad† y F~ es la fuerza neta o
resultante que actúa sobre la partı́cula,
N
X
F~ = F~n ,
n=1
con F~n indicando cada una de las N fuerzas que, eventualmente, se ejercen sobre ella.
A destacar
Si F~ = 0 =⇒ p~ = constante ,
ṁ ~v + m ~a = F~ ,
m ~a = F~ ,
es decir, la masa del cuerpo por la aceleración que adquiere es igual a la fuerza neta que
sobre él actúa.
Unidades
[F ] = M LT−2 ,
Ley III
Las fuerzas actúan siempre en pares: si un cuerpo (A) actúa sobre otro cuerpo (B) con una
fuerza F~B(A) , el cuerpo (B) reacciona sobre el cuerpo (A) con una fuerza F~A(B) de modo que
las magnitudes de las fuerzas son iguales y tienen la misma dirección pero sentidos opuestos.
A A
F = - mg F = mg F = mg
b
F = mg F = - mg F = - mg
8
Figura 2.2: Ejemplo.
F~A(B) = − F~B(A) .
2.1 Leyes del movimiento de Newton 35
F~B A
(
A B
F~A B( ) F~B A ( )
A gravedad gravedad
Luna
B Tierra
F~A
Figura 2.3: Otros ejemplos de fuerzas de acción y reacción.
Alternativa
- Principio de Conservación del Momentum Lineal Total: si se consideran dos cuerpos (A)
y (B), de momentum lineal p~A y p~B respectivamente, que interactúan en ausencia de
otras fuerzas externas, entonces el momentum lineal total del sistema,
P~ = p~A + p~B ,
dP~
= 0,
dt
= p~˙A + p~˙B ,
= F~A(B) + F~B(A) ,
es decir, las fuerzas que actúan sobre los cuerpos satisfacen el Principio de Acción y
Reacción,
F~A(B) = − F~B(A)
36 Dinámica de la partı́cula
p~ ( t ) − p~ ( t0 ) = P~ ? ( t, t0 ) ,
= < F~ > ( t − t0 ) ,
con < F~ > el valor medio de la fuerza aplicada en dicho intervalo. En conclusión, una
percusión genera un cambio de momentum lineal en el intervalo de tiempo (importante cuando
es pequeño) en que actúa.
Integral de la energı́a
Otra primera integral de movimiento se obtiene multiplicando (producto escalar) la ecuación
de movimiento por el momentum lineal p~ ,
d~
p
· p~ = F~ · p~ .
dt
d~
p d 1
· p~ = 2 p~ · p~ ,
dt dt
expresión que permite calcular en forma explı́cita la magnitud de la velocidad a partir de las
condiciones iniciales del movimiento, la fuerza resultante sobre la partı́cula y la trayectoria
por ella seguida. Esta ecuación constituye la base para introducir los conceptos de energı́a y
trabajo, temas que serán discutidos en detalle más adelante. Por ahora, basta con considerar
la metodologı́a usada como una herramienta de cálculo de gran utilidad para la resolución de
problemas. No es necesario preocuparse (ni es exigible) por ahora del cálculo de la integral de
~
R
lı́nea F · d~r indicada.
Momentum angular
La inspiración emerge cuando se expresa la velocidad de la partı́cula en términos de sus
componentes radial ~vr y normal a la dirección radial (discutido en Clase 3, ver Fig. 2.4),
~ O × ~r ,
~v = ~vr + ω
donde,
~r × ~v
~vr = (~v · r̂) r̂ y ω
~O = ,
r2
es la velocidad angular con respecto al origen O.
Ahora, el momentum lineal se puede escribir como,
~ O × ~r ,
p~ = p~r + m ω
con p~r = m ~vr , su componente en la dirección radial. La idea de momentum angular con
respecto al origen O ~`O se introduce eliminando la componente radial del momnetum lineal,
~` = ~r × p~ ,
O
38 Dinámica de la partı́cula
~vr
~! ~r
+
O
m
~v
~r
O
~!O
con r = k~rk y ~r · ω
~ O = 0. Introduciendo el momento de inercia IO de la partı́cula con respecto
a origen O,
IO = m r 2 ,
se tiene una forma alternativa de expresar el momento angular ~`O ,
~` = I ω
O O ~O ,
~r
F
~r
~
F
¿~ O
- Es director verificar que el torque neto T~O apunta en la dirección perpendicular al plano
definido por ~r y F~ y es, fı́sicamente, el generador de la rotación con respecto a O.
- Para fuerzas radiales,
F~ = f (r) r̂ =⇒ T~O = 0 ,
el torque es nulo.
Dinámica rotacional
Se trata de establecer una relación entre la variación temporal del momento angular y el
torque que genera esa rotación. Calculando la derivada del momento angular ~`O se tiene,
d~`O
= ~v × p~ + ~r × p~˙ .
dt
Como p~ es paralelo con ~v y la ecuación de movimiento indica que p~˙ = F~ , se concluye que
d~`O
= T~O ecuación del movimiento rotacional
dt
Haciendo explı́cita la derivada del momento angular,
I˙O ω ~ O = T~O ,
~ O + IO α
con α~O = ω~˙ O la aceleración angular de la partı́cula con respecto a O. El resultado muestra la
relación entre aceleración angular y torque, de nuevo el análogo rotacional de la ecuación de
movimiento.
y el movimiento ocurre en el plano definido por la dirección `ˆO . Además, se puede observar
en Fig. 2.6 que el elemento diferencial de área que subtiende el radio vector cuando se
desplaza un infinitesimal d~r es
dA~ = 1 ~r × d~r ,
2
40 Dinámica de la partı́cula
~ = 21 ~r
dA dr
~ dr
~
+
O ~r
B
C
A
perihelio S afelio
relación que permite establecer que el elemento de área recorrido por el radio vector de
una partı́cula por intervalo de tiempo es proporcional al momento angular de la partı́cula,
dA~ 1 ~
= ` .
dt 2m O
Al ser el momento angular constante, se concluye que áreas descritas por el radio vector
son iguales en tiempos iguales para una partı́cula moviéndose bajo una fuerza que produce
torque nulo con respecto al foco (origen) de ella. En el caso del movimiento de los planetas
alrededor del sol, este resultado se conoce como la Segunda Ley de Kepler y se ilustra
en Fig. 2.6: en un perı́odo de tiempo, el vector posición del planeta que inicialmente
está cerca del afelio, en punto A, subtiende el área S–A–B y cuando está en el perihelio
subtiende el área S–C–D = S–A–B.
- Momento de inercia constante. En este caso particular, la ecuación de movimiento
rotacional se escribe como
~ O = T~O ,
IO α ecuación del movimiento rotacional
d~`O ~
· `O = ~τO · ~`O .
dt
Integrando en el intervalo de tiempo [ t0 , t ] se obtiene,
Z t
1 2 1 2
` (t) − `O (t0 ) = ~τO · ~`O dt 0 ,
2 O 2 t0
2.3 Análisis del movimiento 41
¶ x
¶ m
y y=f(x)
x
¶
Figura 2.7: Movimiento en plano inclinado.
Por ejemplo, en Fig. 2.7 se muestra el movimiento de una partı́cula que parte del reposo y
desliza sobre un plano inclinado por acción de la gravedad. Se trata de un movimiento con un
grado de libertad. En efecto, dada la simetrı́a que el problema presenta, resultarı́a natural
la elección de una variable cartesiana (x 0 ), paralela al plano, para describir el movimiento
rectilı́neo sobre él. Por otra parte, se podrı́an usar las coordenadas cartesianas (x, y), con x
medido a lo largo de la horizontal, para describir el mismo movimiento sobre el riel. En este
caso, hay que tomar la precaución de incluir la ecuación y = f (x) de la recta sobre la cual la
42 Dinámica de la partı́cula
partı́cula se mueve. En general, no hay dificultad conceptual en seguir uno u otro camino. La
diferencia radica en la claridad y el nivel de dificultad matemática que se encuentra.
- Coordenadas cartesianas
El movimiento se proyecta sobre las direcciones de la base cartesiana {ı̂, ̂, k̂}. En esta
base, la fuerza se expresa como
F~ = Fx ı̂ + Fy ̂ + Fz k̂ , (2.-34)
con (Fx , Fy , Fz ) las respectivas componentes cartesianas. Entonces, las ecuaciones escalares
que describen el movimiento son,
m ẍ = Fx ,
m ÿ = Fy ,
m z̈ = Fz . (2.-35)
- Coordenadas cilı́ndricas
El movimiento se proyecta sobre las direcciones de la base cilı́ndrica {ρ̂, θ̂, k̂}. En esta
base, la fuerza se expresa como
F~ = Fρ ρ̂ + Fθ θ̂ + Fz k̂ , (2.-35)
con (Fρ , Fθ , Fz ) las respectivas componentes cilı́ndricas. Las ecuaciones del movimiento
son,
m ρ̈ − ρ θ̇ 2 = Fρ ,
m ρ θ̈ + 2 ρ̇ θ̇ = Fθ ,
m z̈ = Fz . (2.-36)
Las ecuaciones independientes ahora son dos por la restricción de rotación que el
movimiento tiene.
Con respecto a eje fijo k̂,
En este caso, el momento angular con respecto a eje k̂ constante corresponde a
~` = ~` · k̂ kˆ, = m ρ 2 θ̇ k̂ ,
k̂ O
- Coordenadas intrı́nsecas
La fuerza se proyecta sobre la dirección tangente a la trayectoria y sobre la dirección
normal correspondiente,
F~ = Ft t̂ + Fn n̂ , (2.-39)
con ( Ft , Fn ) las componentes tangencial y normal. Las ecuaciones del movimiento son,
m s̈ = Ft ,
ṡ 2
m = Fn . (2.-39)
Rc
44 Dinámica de la partı́cula
Elementos simplificatorios
En la modelación de problemas reales se acostumbra a simplificar el comportamiento de
algunos elementos de conexión entre objetos o partı́cula cuya mecánica se quiere describir.
También resulta necesario tener una prescripción razonable para el comportamiento de las
fuerzas entre las en superficies en contacto.
- Cuerdas/barras ideales
Se llama cuerda/barra ideal a una cuerda/barra inextensible, de masa despreciable,
flexible y que no admite fuerzas transversales. Esto es una idealización de lo que sucede
con una cuerda sometida a una fuerza F~ . Debido a la condición de masa despreciable,
la fuerza aplicada en el extremo de la cuerda se transmite hasta el otro extremo sin
atenuarse. Esta solicitación recibe el nombre de tensión de la cuerda.
- Fuerza normal en superficie de contacto Corresponde a la fuerza con que una superficie
reacciona cuando un objeto descansa o se desplaza sobre ella. Usualmente se la llama
normal o fuerza normal y tiene siempre la estructura
~ = N n̂ ,
N con ~k y
N = kN n̂ : normal a superficie
2.4. Ejemplos
Solución
2.4 Ejemplos 45
El problema tiene dos grados de libertad que corresponden al movimiento horizontal del cuerpo
de masa M y al movimiento del cubo sobre el plano inclinado. Para su descripción, se eligirá un
sistema de coordenadas cartesianas {ı̂, ̂} como se indica en Fig. 2.9. La posición del cuerpo queda
definida por la coordenada {x}. El cubo puede describirse a través de las coordenadas relativas
{xr , yr } al plano inclinado. Usando las coordenadas indicadas, los vectores posición de M y m son
~rM = x ı̂ ,
~rm = ( x + xr ) ı̂ + yr ̂ .
®
~0 ¶
yr
xr ®
El diagrama de cuerpo libre para cada uno de los objetos permite identificar las fuerzas que sobre
ellos actúan (ver Fig. 2.9) al suponer que no existe roce en las superficies de contacto. Entonces, las
ecuaciones que describen el movimiento son
M ~r¨M ~ 0+N
= F~0 + M~g + N ~p ,
m ~r¨m = m~g + N~ ,
Proyectando las ecuaciones de movimiento según las direcciones {ı̂, ̂} se obtienen cuatro ecuaciones
escalares para describir el movimiento,
M ẍ = F0 − N sen α ,
M ÿ = Np − N cos α − M g = 0 ,
m (ẍ + ẍr ) = N sen α ,
m ÿr = − mg + N cos α .
Esto indica que el cubo puede subir o bajar sobre el plano inclinado, dependiendo de F0 .
El cálculo de la posición del plano inclinado y el cubo sobre él es directo ya que se trata de
movimientos con aceleración constante. Encontrar esas soluciones para las condiciones iniciales.
El movimiento del cubo se observa más fácilmente al elegir el sistema de coordenadas solidario al
cuerpo de manera que un eje coincida con la dirección del plano inclinado. Sea {xr0 , yr0 } tal sistema,
como se indica en la Fig. 2.10. Entonces, la aceleración según el eje ı̂ 0 será
ẍr
ẍr0 = ,
cos α
F
(1 + γ) g sen α − m0 γ cos α
= ,
1 + γ sen2 α
con lo cual el cubo baja/sube relativo al plano inclinado si F0 < / > F0crit .
~ , que es siempre normal al plano, no
Otro punto interesante de observar es que la reacción normal N
es necesariamente perpendicular a la trayectoria que sigue el cubo. Esto es verificable ya que
~ · ~r˙m = N ẋ sen α ,
N
2.4 Ejemplos 47
¶ x
¶
r
yr
xr ®
¶
Figura 2.10: Nuevo sistema de coordenadas.
Casos lı́mites
γ ≈ 0 (M m)
La masa M prácticamente no se mueve. El cubo tiene una aceleración
ẍr0 ≈ g sen α .
La reacción normal es siempre normal a la velocidad del cubo. Si α = 0, el cubo queda en
reposo sobre el cuerpo.
γ 6= 0
F0 = 0
El cubo adquire una aceleración, medida por un observador ligado al cuerpo,
(1 + γ) sen α
ẍr0 = g .
1 + γ sen2 α
Para un observador en el sistema de coordenadas fijo se tiene
m ( ẍ + ẍr ) = − M ẍ ,
lo que refleja la conservación del momentum total lineal del sistema en la dirección ı̂.
* Columpiándose ...
Un anillo de masa M puede deslizar sobre una barra horizontal fija. El roce entre el anillo y la barra
es despreciable. Atada al anillo existe una cuerda ideal, de largo L, con una partı́cula de masa m
en su extremo. El sistema está inicialmente en reposo, con la cuerda haciendo un ángulo θ0 con
la vertical como se indica en la Fig. 2.11. Analizar el movimiento que se produce. En particular,
calcular la tensión de la cuerda en función del ángulo que ella hace instantáneamente con la vertical
y el movimiento de cada una de las masas.
Solución
Este problema presenta las complejidades tı́picas asociadas al estudio de la dinámica de un sistema.
Para su resolución, se seguirá el esquema indicado en sección 2.3. En efecto, una observación
cuidadosa del problema indica que se trata de un movimiento plano, con dos grados de libertad
independientes.
El diagrama de fuerzas para cada masa se muestra en Fig. 2.12. Se identifican el peso M ~g , la tensión
T~M y la rección normal N
~ actuando sobre la masa M y el peso m~g y la tensión T~m actuando sobre
m. Además, como las masas están unidas por una cuerda ideal, se tiene que las tensiones son de
igual magnitud y actúan en sentidos opuestos,
T~M = − T~m = T~ .
2.4 Ejemplos 49
~rm = ~rM + ρ
~.
Introduciendo, como se indica en la Fig. 2.12, la coordenada cartesiana x que mide la posición de
M con respecto al origen O y la coordenada polar θ que mide el ángulo que la cuerda hace con la
vertical, se tiene que las aceleraciones se expresan como
~r¨M = ẍ ı̂ , masa M ;
¨ 2
~ = − L θ̇ ρ̂ + L θ̈ θ̂ ,
ρ masa m ,
completamente,
M ẍ = T sen θ ,
0 = M g + T cos θ − N ,
mẍ sen θ − mL θ̇ 2 = mg cos θ − T ,
ẍ cos θ + L θ̈ = − g sen θ .
El análisis de las ecuaciones indica, trivialmente, que la magnitud de la reacción que la barra ejerce
sobre el anillo es
N = M g + T cos θ ,
es decir, depende del peso del anillo y de la magnitud de la tensión sobre la cuerda. Una expresión
para la tensión T se obtiene de la tercera ecuación, después de reemplazar ẍ (de la primera ecuación)
en ella, h i
m g cos θ + Lθ̇ 2
T = m .
1+ M sen2 θ
La magnitud de la tensión depende de la rapidez angular θ̇ con que la masa m oscila en torno a la
vertical a medida que M se mueve sobre la barra. Este resultado hace explı́cita la dependencia de la
tensión en la dinámica del problema, la cual resulta inevitable de determinar.
Las ecuaciones diferenciales para determinar x(t) y θ(t) se obtienen al combinar las ecuaciones
tercera y cuarta establecidas previamente. Una de ellas establece
h i
MT ẍ = m L θ̇ 2 sen θ − θ̈ cos θ ,
d
θ̇ 2 sen θ − θ̈ cos θ = − [ θ̇ cos θ ] .
dt
Entonces,
m
ẋ = − L θ̇ cos θ ,
MT
al hacer uso de la condición inicial, de reposo de las masas, indicada en el enunciado del problema.
Este resultado no es sorprendente ya que corresponde a la conservación del momentum lineal total en
la dirección del eje x. Indica que si una partı́cula se mueve hacia la izquierda, la otra necesariamente
lo hace hacia la derecha. Esto se hace explı́cito integrando nuevamente la ecuación anterior. Se
obtiene,
m
x(θ) = x0 + L [ sen θ0 − sen θ ] ,
MT
con x0 la posición inicial del anillo y θ0 el ángulo inicial de la cuerda con respecto a la vertical.
La ecuación de movimiento para θ(t) es,
g m d
θ̈ + sen θ − cos θ ( θ̇ cos θ ) = 0 .
L MT dt
2.4 Ejemplos 51
Aunque complicada en aspecto, esta ecuación diferencial puede integrarse una vez sin mayor
dificultad. En efecto, multiplicando la ecuación por θ̇ e integrando en el intervalo temporal [0, t], se
obtiene
m g g
1
2 1− 2
cos θ θ̇ 2 − cos θ = − cos θ0 ,
MT L L
para las condiciones iniciales del problema. Por lo tanto, la rapidez angular será
s g
2 L [ cos θ − cos θ0 ]
θ̇ = .
1 − Mm cos2 θ
T
Es interesante observar que el movimiento es posible sólo para ángulos θ < θ0 , hecho que confirma
su naturaleza intuitivamente oscilatoria. El valor máximo de la rapidez angular se obtiene para
θ = 0, s g
2 L [ 1 − cos θ0 ]
θ̇max = .
1 − Mm
T
Tmax °= m/M
mg
°= 10
°= 1
3.0
°= 0
1.0
O ¼ µ0
2
Figura 2.13: Máxima tensión en cuerda como función del ángulo inicial θ0 .
En Fig. 2.13 se grafica Tmax (θ0 ) (normalizada al peso mg) teniendo γ como parámetro. Por supuesto,
γ = 0 es el caso lı́mite. A medida que existe una relación finita entre las masas, empiezan a aumentar
52 Dinámica de la partı́cula
las solicitaciones en la cuerda y dependiendo del ángulo inicial con que se inicial el movimiento. Sin
duda un resultado a considerar en el diseño de un columpio de estas caracterı́sticas.
La variación temporal de la coordenada angular θ puede, en principio, ser determinada al integrar
la ecuación para θ̇. Se obtiene,
s
1 − Mm cos2 θ0
s Z θ
L
t= T
d θ0 .
2 g θ0 cos θ0 − cos θ0
Casos particulares
Pequeñas oscilaciones
Se trata de estudiar el movimiento del sistema cuando el ángulo inicial θ0 , con respecto a
la vertical, es pequeño (θ0 ≈ 0). Como el movimiento está acotado por la magnitud de este
ángulo inicial, la variación del ángulo θ también será pequeña en el tiempo. Hay varias formas
alternativas de imponer esta situación lı́mite. Por ejemplo, en la expresión para la rapidez
angular, se puede considerar que
θ2 θ02
cos θ − cos θ0 ≈ (1 − 2 + .... ) − ( 1 − 2 + .... ) ,
1 2 2
≈ 2( − θ + θ0 + .... ) ,
θ(t) ≈ θ0 cos( ω t) .
Esta solución hace explı́cito que el movimiento del sistema, para pequeñas oscilaciones, es
armónico en el tiempo con frecuencia angular ω,
q
m g
ω = (1 + M )L .
El perı́odo T de la oscilación,
2π
T = ω ,
r
M L
= 2π m+M g ,
2.4 Ejemplos 53
m
0
* Masa variable
Una cuerda de masa uniforme por unidad de largo λ [Kg/m] se levanta con rapidez constante v0 .
Suponiendo que la cuerda no se elonga, determine la fuerza aplicada a su expremo superior después
que se levanta una altura H. El extremo superior de la cuerda está inicialmente en el piso y desprecie
el movimiento horizontal asociado al desenrrollamiento de la cuerda.
Solución
Resultado:
F~ = λ [ Hg + v02 ] ̂
Fuerzas fundamentales
Las interacciones básicas identificadas en la naturaleza son esencialmente cuatro. Ellas, en
principio, no serı́an reducibles a interacciones más básicas. Clasificándolas de mayor a menor
intensidad se tiene:
• Interacción fuerte.
Es una fuerza de gran intensidad, atractiva, intermediada por gluones, responsable
primariamente de la interacción entre quarks para formar hadrones, tales como protones
y neutrones. Como efecto residual, genera la fuerza nuclear efectiva entre nucleones para
formar el núcleo atómico, teniendo al mesón π como su intermediador principal. El rango
o alcance de la interacción nuclear es finito (≈ 10−15 [ m ] ).
F (nuclear)
0
2 r [fm]
-15
1 [fm] = 10 m
q q0
F~ (e−m) = F (e−m) (r) r̂ con F (e−m) (r) ∼ q, q0 ≶ 0
r2
con q la carga eléctrica y r la distancia entre cargas (electrones). Su dependencia con la
distante se muestra en Fig. 2.17.
F (e-m)
qq¶< 0
0
0.5 r
qq¶> 0
• Interacción débil.
Es la fuerza, de rango finito, responsable de los fenómenos de decaimiento radioactivo de
las partı́culas nucleares. Está intermediada por los bosones W ± y Z0 y tiene rango finito
(≈ 10−18 [ m ] ) .
• Interacción gravitacional.
Llamada también fuerza gravitacional, es consecuencia de la existencia de la masa
como propiedad de la materia. Es siempre atractiva y su rango es infinito. Aún no está
identificada la partı́cula mediadora; tentativamente, se ha propuesto la existencia del
“gravitón”. Más adelante será estudiada en mayor detalle.
La clasificación indicada es sólo referencial. Una comprensión más profunda de las interacciones
elementales indica que ellas podrı́an ser manifestaciones, en última instancia, de una fuerza
2.5 Fuerzas en la naturaleza 57
Intensidad
Relativa
Fuerza
1 Fuerte (nuclear)
quarks/gluones se atraen
}Gran
1 Fuerza Unificacion¶}
137 ¶
Electromagnetica
cargas se atraen/repelen
¶
Electrodebil
-6 Fuerza
10 ¶
Debil
radioactividad }Gravedad
¶
Cuantica }
- 38 Fuerza
Fuerza
10 Gravitacional
Gravitacional
masas se atraen ¶ fuerzas
unificacion
2 16 19
10 10 10 GeV
fundamental. En la Fig. 2.18 se muestra el mapa actual de las fuerzas fundamentales, indicando
sus intensidades relativas a la interacción nuclear en el eje vertical (no a escala) junto con el
rango de energı́as (expresadas en GeV – Giga electron Volt) a las cuales se espera la unificación
de los diferentes campos de fuerzas, en el eje horizontal.
• Fuerza de reacción.
Es la fuerza entre cuerpos en contacto compatible con la Ley III de la Dinámica. Tiene
una dirección arbitraria, dependiendo del tipo de contacto que existe entre los cuerpos. Su
origen microscópico es esencialmente electromagnético ya que tiene relación directa con
la estructura de la materia de los cuerpos que interactúan. Se acostumbra descomponer
la fuerza de reacción en dos componentes:
- Fuerza de reacción normal. Actúa en una dirección normal a la superficie sobre
~ normal a
la que el cuerpo se mueve. En la Fig. 2.19 se muestra la reacción normal N
la superficie. Un modelo mecánico de la estructura cristalina que forma el material
de la mesa sirve para tener una explicación microscópica aproximada de la fuente de
la fuerza en cuestión.
58 Dinámica de la partı́cula
~
N
~
N
mg
~
mg
~
Figura 2.19: Componente normal de la fuerza de reacción.
~aplic
F
~r
F ~aplic
F
• Tensión.
Es la fuerza que existe en barras o cuerdas cuando se conectan al cuerpo cuyo movimiento
se quiere describir, restringiendo sus posibles grados de libertad. Esta solicitación recibe
el nombre de tensión de la cuerda o barra.
• Fuerza de roce. Es la fuerza que aparece, en la superficie de contacto de un cuerpo con
otro o con un fluido y tiende a impedir o retardar el movimiento. En el caso de un cuerpo
sobre una superficie, esta fuerza de roce es la manifestación empı́rica de la componente
paralela de la fuerza de reacción.
• Fuerza de restitución. Es una fuerza que, al actuar sobre un cuerpo, tiende a hacerlo
volver a una posición de equilibrio estable.
Ahora estudiaremos en cierto detalle algunos ejemplos de las fuerzas listadas proviamente: fuerzas
gravitacionales, como ejemplo del cálculo de la interacción entre objetos masivos a partir de la
fuerza elemental entre sus elementos constitutivos; el estudio de las fuerzas de roce muestra las
simplicidades que incorpora un tratamiento fenomenológico y, finalmente, las fuerzas de restitución
(elásticas) permiten entender el movimiento de las partı́culas cuando se ubican en posiciones cercanas
al equilibrio.
2.5 Fuerzas en la naturaleza 59
los planetas describen órbitas elı́pticas en torno al sol, el cual ocupa uno de sus focos;
el vector posición, que describe la posición de un planeta con respecto a uno de los focos,
barre áreas iguales en tiempos iguales, y
T 2 ≈ Ra3 .
m (m¶)
¶
m¶(m)
¶
Figura 2.21: Fuerza gravitacional.
A partir de esta información, fue Newton quien determinó una forma explı́cita para la fuerza entre
dos partı́culas debido a sus masas. Esta fuerza, popularmente conocida como la Ley de la Gravitación
Universal, establece que las partı́culas se atraen con una intensidad proporcional al producto de sus
masas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que las separa y actúa en la dirección
del radio vector que une a las masas. Para precisar el significado de esta ley, basta considerar las
partı́culas descritas por los vectores posición ~r y ~r 0 , como se indica en Fig. 2.21. La magnitud de la
fuerza gravitacional que se ejerce sobre la partı́cula de masa m debido a la atracción de la partı́cula
de masa m0 , ubicada a la distancia k ~r 0 − ~r k, es proporcional a
m m0
kF~m (m0 ) k α ,
k ~r 0 − ~r k 2
= kF~m0 (m) k
con h i
N −m 2
G = ( 6,673 ± 0,003 ) × 10−11 Kg 2
,
la constante de gravitación universal. Es directo verificar que la ley de fuerzas propuesta para el
fenómeno gravitacional satisface el principio de acción y reacción,
Principio de superposición
Es una prescripción para calcular la fuerza resultante sobre una partı́cula a partir de la fuerza
entre pares de partı́culas. Establece que la fuerza resultante sobre la partı́cula de masa m es la
suma vectorial de las fuerzas que, individualmente, ejerce sobre m cada una de las partı́culas
de masa mk ,
N
X
F~m = F~m (m ) ,
k
k=1
N
X m mk
= G ( ~rk − ~r ) .
k ~rk − ~r k3
k=1
El principio de superposición permite generalizar los resultados obtenidos para calcular la fuerza
gravitacional entre una partı́cula puntual de masa m y un cuerpo de una densidad de masa ρ y
masa total M , Z
ρ( ~r ) dτ = M ,
V
~m
dF
¶
R CM
m (M )
x¶
dm¶
¶
Una simplificación adicional es suponer que la geometrı́a del cuerpo no varı́a durante la acción de la
fuerza gravitacional. Entonces, cada elemento infinitesimal de masa (dm0 ) del cuerpo ejerce una
fuerza atractiva infinitesimal sobre la partı́cula de masa m dada por la ley de gravitación (Fig. 2.21),
m dm0
dF~m = G ~r 0 − ~r
,
k ~r 0 − ~r k3
la cual es independiente de la elección del origen de coordenadas por su sola dependencia de la
distancia relativa y la lı́nea de acción entre los elementos de masa dm y m que interactúan. En efecto,
suponiendo que m M , resulta conveniente ubicar el origen O en la posición de la coordenada
centro de masa (CM), Z
1
~
RCM = ~x 0 ρ(~x 0 ) dτ 0 ,
M V
describiendo el punto del espacio que concentra la masa total M de la distribución volumétrica
~
de masa ρ. Esta elección presenta, además, la ventaja que el vector posición ~r 0 = ~x 0 − R CM en
Fig. 2.22 satisface Z
~r 0 ρ(~r 0 ) dτ 0 = 0 .
V
Ası́, la posición ~r de la masa m queda referida a la ubicación del punto centro de masa, representativo
de la distribución de masa que genera la atracción gravitacional. Reemplazando el diferencial de
masa dm0 por la densidad de masa multiplicada por el elemento diferencial de volumen y haciendo
uso del principio de superposición, se obtiene la expresión para calcular la fuerza gravitacional
resultante sobre la partı́cula debido a un cuerpo de masa M ,
m ρ( ~r 0 )
Z
0
0
~
Fm(M ) = G ~
r − ~
r dτ .
V
k ~r 0 − ~r k3
La integral se hace sobre las coordenadas ~r 0 que definen la distribución de masa ρ. La fuerza
dependerá de ~r o las coordenadas que ubican la masa m en el sistema elegido para describir el
movimiento.
Se deja como ejercicio al lector determinar una expresión que permita calcular la fuerza gravitacional
entre dos cuerpos de masas M y M 0 , que se distribuyen en los volumenes V y V 0 respectivamente.
m ρ( ~r 0 )
Z
F~m(M ) ' G ~r 0 − ~r dτ 0 . k~rk >> k~r 0 k .
k ~
r k3
V
Cuando el origen de los vectores posición coincide con el centro de masa del objeto de densidad
ρ, la expresión para la fuerza sobre m se simplifica a
mM
F~m(M ) ' − G r̂ k~rk >> k~r 0 k ,
k ~r k2
mente) a la producida por una partı́cula con la masa total M de la distribución de masa,
62 Dinámica de la partı́cula
ubicada en el centro de masa del objeto, sobre la partı́cula m, e independiente de la forma del
objeto. La fuerza actúa en la dirección radial en este caso lı́mite. A medida que m se acerca a
la distribución de masa, la forma del ella empieza a influir en la magnitud y dirección de la
fuerza ejercida.
m ¶
¶ ¶
¶
Figura 2.23: Fuerza gravitacional sobre masa m debido a distribución esférica de masa.
F~m ( ~r ) = − f (r) r̂ ,
f (r) = − F~m ( ~r ) · r̂ ,
( ~r 0 − ~r ) · r̂
Z
= − G m ρT dτ 0 ,
k ~r 0 − ~r k3
VT
y VT su volumen,
4 3
VT = 3 π RT .
Introduciendo coordenadas esféricas {r 0 , θ 0 , φ 0 } para
describir el vector posición ~r 0 , con el eje
z coincidiendo con la dirección r̂, entonces f (r) se reduce a
ZZZ
r 0 cos(θ 0 )−r 0 2 sen(θ 0 ) dr 0 dθ 0 dφ 0 .
f (r) = − G m ρT 3 r
[ r 0 2 +r 2 −2 r 0 r cos(θ 0 ) ] 2
VT
donde se ha hecho explı́cito el rango de integración para la coordenada radial r 0 . Ahora, según
si la partı́cula se encuentra a una distancia r del centro de la tierra que es menor o mayor que
RT se concluye,
r2
d 2
f (r) = − 2 π G m ρT − − RT , r < RT ,
dr 3
" #
d 2 RT3
= − 2 π G m ρT , r > RT .
dr 3r
Fm
MT
m(G R 2 )
T
0 1 2 3 4 ( Rr )
T
El resultado muestra que la fuerza ejercida por el cuerpo esférico sobre la partı́cula es
equivalente a la fuerza que una partı́cula equivalente de masa variable M (r), ubicada en el
origen de coordenadas, ejerce sobre ella. La masa M (r) correspone a la masa total contenida
en una esfera de radio igual a la menor de las distancias entre la coordenada r y el radio
de la distribución de masa RT . La simplicidad del resultado se debe a la simetrı́a esférica,
la uniformidad de la densidad de masa y a la dependencia con el inverso de la distancia al
cuadrado de la ley de fuerza gravitacional entre dos masas puntuales.
La magnitud de la fuerza gravitacional sobre la masa puntual m se grafica en Fig. ?? como
función de la distancia al centro de la esfera y en unidades relativas al radio RT de la esfera.
En la región donde existe masa, la fuerza atractiva sobre m crece linealmente con la distancia
hasta r = RT , después de lo cual empieza a decrecer en forma inversamente proporcional al
cuadrado de la distancia al centro de la esfera. Es interesante notar que para r < RT , la masa
ubicada entre r y RT no contribuye a la atracción que la esfera ejerce sobre la masa puntual.
* Aplicación
Se puede calcular la atracción gravitacional sobre una partı́cula que se encuentra a una
altura z sobre la superficie terrestre,
m MT
F~m (z) = − G r̂ .
( RT + z ) 2
Una forma alternativa de expresar la fuerza ejercida sobre una partı́cula sobre la superficie
terrestre es,
F~m (z) = m ~g (z) ,
donde ~g (z) es la aceleración, debido a la fuerza de gravedad, a que está sometida la
partı́cula,
2z
~g (z) = ~g 1 − ± .... ,
RT
la cual disminuye con la altura z sobre la superficie. Por razones prácticas se introduce
G MT
~g = − r̂ ,
RT2
la aceleración de gravedad sobre la superficie de la tierra. Esta aceleración depende,
en la práctica, de la latitud en que se encuentre la partı́cula sobre la tierra debido a
efectos rotacionales y a una distribución de masa ligeramente alejada de la esférica que la
tierra presenta. Sin embargo, se acostumbra en primera aproximación a tomar un valor
promedio, a nivel del mar,
k ~g k = 9,81 sm2 .
para poner en movimiento un cuerpo que está en contacto con otro, es necesario aplicar
sobre él una fuerza mı́nima paralela a la superficie de contacto. Esta fuerza mı́nima
externa corresponde a la máxima fuerza de roce estático que impide el movimiento del
cuerpo. Por lo tanto, la magnitud de la fuerza de roce estático varı́a entre cero y un valor
máximo,
0 6 FR(e) 6 FR(e−max) .
La cota máxima para la fuerza de roce (FR(e−max) ), que es independiente del área de las
superficies en contacto, resulta ser proporcional a la magnitud de la fuerza de reacción
normal (N ~ ) de la superficie externa sobre el cuerpo,
~k,
FR(e−max) = µe kN
Los coeficientes de roce, estático y cinético, muestran variaciones al depender de varios factores,
entre los cuales destacan la combinación de materiales en contacto, la calidad del pulido
superficial, el tratamiento de la superficie y el método de lubricación. La tabla siguiente, sin
pretender ser exhaustiva, ilustra los valores relevantes en situaciones comunes de interés.
2.5 Fuerzas en la naturaleza 67
Coeficientes de Roce
(sin lubricación entre superficies)
Material 1 Material 2 estático (µe ) cinético (µc )
S ólidos Caucho 1,0 – 4,0
F ierroF undido F ierroF undido 1,1 0,15
Cobre Cobre 1,0
Caucho Asf alto(seco) 0,5 – 0,8
Caucho Asf alto(mojado) 0,25 – 0,75
V idrio V idrio 0,9 – 1,0 0,4
Acero(dulce) P lomo 0,95 0,95
Zinc F ierroF undido 0,85 0,21
P lexiglas P lexiglas 0,8
M adera Concreto 0,62
Ladrillo M adera 0,6
V idrio N iquel 0,78 0,56
Acero(dulce) Acero(dulce) 0,74 0,57
Cuero M etal(limpio) 0,6
V idrio M etal 0,5 – 0,7
Cobre Acero(dulce) 0,53 0,36
Acero(dulce) Bronce 0,51 0,44
Cuero M adera 0,3 – 0,4
M adera M etales 0,2 – 0,6
Acero Graf ito 0,1
Hielo Hielo 0,1 0,03
T ef lon Acero 0,04
~R
F
(vis)
~v
El efecto de las fuerzas de roce viscoso, al actuar siempre en la dirección contraria al movimiento
del objeto, es disminuir su rapidez hasta finalmente detenerlo. Cuando hay otras fuerzas
presentes, genéricamente ilustradas por una fuerza resultante F~ , la ecuación de movimiento
del cuerpo de masa m es, en un sistema de referencia inercial,
d~
p
= F~ + F~R( vis) .
dt
Proyectando en las direcciones t̂ y n̂, tangente y normal a la trayectoria de la partı́cula en el
medio viscoso (coordenadas intrı́nsecas), se tiene
d~
p
· t̂ = m s̈ = F~ · t̂ − k ṡ ν ,
dt
d~
p ṡ 2
· n̂ = m = F~ · n̂ ,
dt Rc
al identificar la velocidad ~v = ṡ t̂, con s el arco de trayectoria que la partı́cula avanza en la
dirección t̂ y Rc el radio de curvatura. A medida que pasa el tiempo, el roce viscoso anula
el efecto de la fuerza en la dirección t̂, la aceleración tangencial s̈ se anula para t → ∞ y la
rapidez del objeto tiende a un valor constante. Esta situación permite introducir la idea de
velocidad lı́mite o terminal a través de la condición
h i
F~ · t̂ − k (ṡ)lim
ν
=0 ,
t→∞
Es interesante notar que la rapidez lı́mite es independiente de la masa que se desplaza. Para
una fuerza constante, la velocidad lı́mite se simplica ya que para t → ∞ la tangente a la
~
trayectoria coincide con la dirección de la fuerza, con lo cual vlim = kFk k .
• Amortiguador
Se trata de un dispositivo construido para ejercer una fuerza de roce viscoso sobre el
objeto al cual se conecta. Su propósito es disipar la energı́a (cinética) del movimien-
to, disminuyendo ası́ la amplitud de movimiento al que es sometido. Existen diversos
diseños, de diferentes grados de sofisticación, dependiendo del uso al que se destina.
Esquemáticamente, el amortiguador (por simplicidad, de monotubo) es una estructura
rı́gica, consistente de un cilindro que contiene un lı́quido viscoso (aceite), donde se
desplaza un émbolo o pistón que se mueve según el eje del amortiguador como se indica
en Fig. 2.26. Presenta dos etapas: una de compresión, en la cual el émbolo se desplaza
en el aceite, presionando sobre un émbolo móvil que finalmente se detiene por el gas ya
comprimido; la otra etapa, es producto de la expansión del gas que permite al émbolo
desplazarse en sentido contrario a través del medio viscoso. Numerosos otros diseños se
han desarrollado en el tiempo.
¶
expansion
simbolo
¶
embolo
¶
¶
compresion
aceite
embolo
¶
gas alta flotante
presion
¶
d~v c
M = − c ~v , =⇒ ~v (t) = ~v0 e −( M ) t .
dt
Efectivamente, el amortiguador anuló en el tiempo la velocidad inicial de la partı́cula,
dejándola finalmente en reposo.
70 Dinámica de la partı́cula
~r
Punto de equilibrio
Es el punto (o puntos) del espacio donde la fuerza es nula. Llamando E al punto donde ello
ocurre, entonces
F~ (~rE ) = 0 ,
con ~rE el vector posición asociado.
El problema se reduce a estudiar F~ para distancias k~r − ~rE k pequeñas y tal que permita su
expansión en una serie convergente en potencias de la distancia relativa al punto E. Considerando
las componentes cartesianas de la fuerza F~ , {Fx , Fy , Fz } ≡ {Fi }i=1,2,3 en la base {ı̂, ̂, k̂} ≡ {êi }1=1,2,3 ,
se puede realizar un desarrollo en serie de Taylor en torno al punto E. Se obtiene, a primer orden
en la distancia relativa entre la partı́cula y punto de equilibrio,
F~ = F~L + O(k ~r − ~rE k 2 ) ,
donde F~L es la aproximación lineal de F~ ,
h i
F~L = (~r − ~r 0 ) · ∇0 F~ (~r 0 ) ,
r 0 =~
~ rE
Casos particulares
Resorte ideal
El resorte es un dispositivo diseñado para producir, en su régimen elástico, la fuerza lineal de
restitución del segundo tipo mencionado. Genéricamente, consiste en un cable (o barra flexible) de
acero enrollado en forma helicoidal, de sección constante, con posibilidad de elongarse o contraerse
respecto a su largo natural L (Fig. 2.28). Su masa, en una situación ideal, se considera despreciable
en relación a la masa de los objetos que mueve, permitiendo ası́ ignorar deformaciones debido a
efectos gravitatorios o efectos inerciales frente a rotaciones. La estructura rı́gida del resorte produce
una fuerza radial† en la dirección del eje del cilindro que le da forma, de una magnitud determinada
por la constante elástica k propia de cada resorte,
F~L = − k (r − L) r̂ .
El punto de equilibrio corresponde, en este caso, al largo natural del resorte ~rE = L r̂. Por supuesto
que fuera del rango lineal, el comportamiento del resorte se desvı́a de la aproximación lineal de la
fuerza.
†
Originalmente, corresponde a la ley de elasticidad de Hooke o ley de Hooke que establece la relación entre la elongación
o alargamiento que sufre el resorte y la fuerza externa aplicada al extremo del mismo.
72 Dinámica de la partı́cula
En Fig. 2.28 se muestra un resorte, anclado en un extremo pero con capacidad de pivotar, conectado
a un cuerpo de masa M ubicado en el extremo libre. Interesa estudiar el efecto del resorte sobre el
movimiento del bloque, suponiendo por simplicidad que no está afecto al roce con la superficie que lo
soporta, cuando se le saca desde su posición de equilibrio en r = L. En general, el movimiento de M
dependerá de las condiciones iniciales que se establezcan, desarrollándose en una o dos dimensiones
según si la velocidad inicial de M tiene o no la dirección del eje del resorte.
La dinámica de la masa M conectada al resorte está descrita por la ecuación de movimiento,
M ~r¨ = − k (1 − Lr ) ~r ,
donde se han omitido el peso y la reacción normal de la superficie sobre el cuerpo por no incidir,
por ahora, en el movimiento. Una conclusión y una estrategia se desprenden:
El momento angular con respecto al extremo fijo del resorte (punto O en Fig. 2.29) se conserva
durante el movimiento,
d ~`O
=0,
dt
ya que el torque de la fuerza con respecto a O es nulo. Se concluye que el movimiento ocurre
siempre en un plano, definido por la dirección constante `ˆO .
Las coordenadas polares son una elección adecuada para describir el movimiento (Fig. 2.29),
~r = ρ ρ̂ ,
con lo cual la ecuación de movimiento se reduce, después de proyectarla en la dirección radial,
a
M (ρ̈ − ρ θ̇ 2 ) = − k (ρ − L) ,
sujeto a la conservación, en el tiempo, del momento angular ~` = ` `ˆ ,
O O O
`O
ρ 2 θ̇ = ≡ h = ρ02 θ̇0 .
M
El tipo de soluciones (analı́tica, aproximada o numérica) para el movimiento de una masa bajo
la acción del resorte dependerá de las condiciones iniciales del movimiento, esencialmente de la
existencia de un momento angular inicial. A continuación, se analizarán esos casos particulares.
2.5 Fuerzas en la naturaleza 73
En efecto, para las condiciones iniciales ρ(0) = ρ0 y ρ̇0 (0) = k~v0 k, la solución es
k~v0 k
ρ(t) = L + ( ρ0 − L ) cos ωt + sen ωt ,
ω
74 Dinámica de la partı́cula
La Fig. 2.30 muestra este movimiento, indicando como la masa M se desplaza, con frecuencia
angular ω, según el eje del resorte y oscilando alrededor de la posición de equilibrio (L). Su
caracterı́stica periódica se enfatiza al graficar la posición ρ(t) en función de la fase ωt.
Alternativamente, el movimiento armónico simple se puede describir por
con las constantes de integración (A, φ) determinadas a partir de las condiciones iniciales,
r 2
k~v k k~v k
A = (ρ0 − L) 1 + ω (ρ 0−L) , φ = − arctan ω (ρ 0−L) .
0 0
* Resortes en paralelo
Se trata de encontrar el resorte equivalente de parámetros {keq ; Leq } que tenga el mismo
comportamiento fı́sico que un conjunto de N resortes {ki ; Li } colocados en paralelo entre
dos superficies, como se indica en la figura. La condición es que la fuerza resultante sobre
un bloque producto de la acción de todos los resortes sea igual a la fuerza que hace el
resorte equivalente, para una elongación (contracción) dada con respecto a los largos
naturales,
XN
F~i = F~eq ,
i=1
* Resortes en serie
Ahora, se busca el resorte equivalente {keq ; Leq } que tenga el mismo comportamiento
fı́sico que un conjunto de N resortes {ki ; Li } colocados en serie entre dos superficies,
como se indica en la figura. La condición es que la elongación (contracción) del resorte
2.5 Fuerzas en la naturaleza 75
equivalente es igual a la suma de las elongaciones que sufre cada uno de los resortes en
serie, para una fuerza conocida,
XN
~xi = ~xeq ,
i=1
½
E
~v 0
½ (µ) ®
µ
O ½0 ½^0
L = 0
2.6. Ejemplos
2.6.1. Interacción entre distribución de masa y masa puntual
Considere un plano horizontal muy delgado, muy extenso, que tiene una densidad superficial de masa
σ ( Kg
m2
) uniforme. Calcule la fuerza gravitacional con que el plano atrae a una partı́cula de masa m
ubicada a una distancia z. ¿Depende la fuerza del lado del plano en que se ubica la partı́cula?
Solución
Este ejemplo es una aplicación a la situación de ^k
generalizar la fuerza de atracción gravitacional en- m
tre dos masas puntuales a calcular la fuerza entre z
una distribución superficial de masa σ y una masa ~m
F ~m
dF
puntual m. Considerando coordenadas cilı́ndricas, ®
identificamos como masas interactuantes a la ma-
sa puntual m y el elemento infinitesimal de masa
dm 0 del plano, ubicadas respectivamente en
O
~rm = z k̂ y ~r 0 = ρ ρ̂ . ½ dm¶
¾ ½^
El elemento infinitesimal de fuerza gravitacional µ
ejercido por dm 0 sobre m es
m dm 0
dF~m = G (~r 0 − ~rm ) .
k~r 0 − ~rm k 3
2.6 Ejemplos 77
Antes de proceder con el cálculo explı́cito es oportuno observar la simetrı́a que presenta el problema.
En efecto, como la distribución de masa en el plano es uniforme, entonces la contribución a la fuerza
que se ejerce sobre m proveniente de elementos de masa simétricos con respecto al origen O son
iguales en magnitud, con las mismas componentes según eje k̂ y componentes en direcciones opuestas
contenidas en el plano paralelo al plano de la distribución. Se concluye que la fuerza resultante
sobre m tendrá, necesariamente, la dirección k̂,
F~m = − Fm k̂ ,
m dm 0
dFm = − G (~r 0 − ~rm ) · k̂ ,
k~r 0 − ~rm k 3
dS 0 = (dρ) (ρdθ) =⇒ dm 0 = σ ρ dρ dθ .
Juntando todos los elementos, se puede calcular la intensidad de la fuerza Fm integrando y evaluando
para el rango de las variables {ρ, θ} que permitan cubrir el plano de la distribución de masa,
Z ∞ Z 2π
mσz
Fm = G 3 ρ dρ dθ .
ρ=0 θ=0 (z 2 + ρ 2 ) 2
resultado que responde la pregunta planteada. Es interesante destacar que la fuerza sobre la masa
m apunta siempre hacia el plano y tiene una magnitud constante, independiente de la distancia z
a que se encuentra del plano. La razón, por supuesto, está en la presencia de un plano de masa
cuyas dimensiones se suponen infinitas (notar que la masa total de ese plano es infinita!). Además,
razones elementales de simetrı́a indican que la fuerza que se ejerce sobre la partı́cula serı́a la misma,
siempre apuntado hacia el plano, si se ubica en el lado opuesto.
78 Dinámica de la partı́cula
Solución
El problema planteado se reduce a determinar los tipos de movimientos posibles para una partı́cula
(vis)
sometida a una fuerza neta F~ , resultante de la fuerza externa F~0 y la fuerza resistiva F~R que el
medio viscoso ejerce sobre ella,
(vis)
F~ = F~ + F~
0 R .
Considerando la fuerza de roce viscoso previamente discutida y que la velocidad relativa de la
partı́cula coincide con su velocidad absoluta (el medio viscoso está en reposo), la ecuación de
movimiento para la partı́cula en el medio es
d~v
m = F~0 − k v (ν−1) ~v ,
dt
donde k es una medida del coeficiente de fricción y ν es un parámetro que depende de las condiciones
del movimiento. Para estudiar sus soluciones, se escogerá:
un sistema de coordenadas cartesiano, orientado de manera tal que la dirección k̂ coincida con
la dirección de la velocidad inicial ~v0 de la partı́cula,
~v (0) = v0 k̂ ;
F~0 = f0 k̂ ,
con f0 una constante positiva o negativa según el sentido que la fuerza tiene con respecto a la
dirección k̂.
La elección de la fuerza F~0 restringe el movimiento a una dimensión, la cual queda descrita por la
coordenada z en el sistema de coordenadas elegido. Entonces, la velocidad de la partı́cula se expresa
por
~v (t) = ż k̂ ,
2.6 Ejemplos 79
ν−1 f0
z̈ + γ ( ż 2 ) 2 ż = ,
m
k
con γ = m una constante de atenuación. Esta ecuación diferencial inhomogénea es no lineal, razón
por la que se dificulta su solución analı́tica, salvo el caso ν = 1. Ası́, una situación aparentemente
simple de describir se puede complicar por las dificultades matemáticas que aparecen. Por lo tanto,
para no entrar en la búsqueda de soluciones numéricas, se analizarán sólo algunas situaciones
particulares para caracterizar la dinámica de la partı́cula en el medio viscoso.
Velocidad lı́mite.
Resulta claro que, por acción de la fuerza de roce viscoso durante el movimiento, la fuerza
resultante sobre la partı́cula tiende a cero después de un tiempo suficientemente largo (t → ∞).
Entonces, la ecuación de movimiento sugiere la existencia de una velocidad lı́mite (o de
término) de la partı́cula en el medio,
1
f |f0 | ν
v lim ≡ ż(t → ∞) = 0 ,
|f0 | mγ
Régimen laminar.
Corresponde a la situación en que las velocidades que alcanza la partı́cula son pequeñas. En
este caso, la evidencia empı́rica muestra que la fuerza de roce viscoso es proporcional a la
velocidad (ν = 1). Entonces, la ecuación de movimiento para la partı́cula es
f0
z̈ + γ ż = ,
m
que corresponde a una ecuación diferencial lineal, de segundo orden e inhomogénea. Su solución
para la rapidez ż es,
h i
f f
ż(t) = m0γ + v0 − m0γ e− γ t .
h i
f0 f0
1
1 − e− γ t ,
z(t) = z0 + mγ t+ γ v0 − mγ
z_ (t) z(t)
v0 f0 > ° m v0 v0 f0 = ° m v0
f0 > ° m v0 f0 < ° m v0
1
f0 = ° m v0
1
f0 < ° m v0
f0 = 0
Tf f0
f0 = 0
0 0
1 2 t 1 2 3 t
f0 < 0
f0 < 0
Figura 2.33: Movimiento partı́cula sometida a fuerza constante (en régimen laminar).
• t → 0. Se obtiene, h i
f0
ż(t → 0) = v0 + m − γv0 t ,
z̈ + γ ż ν = 0 ,
debido a que ż > 0 para todo tiempo t. La integración de esta ecuación es directa. En efecto,
re–escribiendo la ecuación diferencial como
dż
= − γ dt ,
ż ν
se puede integrar ambos lados de la ecuación y obtener
ż(t) = v0 e− γt , ν =1,
1
= v0 1 + (ν − 1) v0 ν−1 γ t
1−ν
, ν 6= 1 .
ż(z) = v0 − γ z , ν =1,
= v0 e− γ z , ν =2,
1
1 + (ν − 2) v0 ν−2 γ z
= v0 2−ν
, ν 6= 1, 2 .
82 Dinámica de la partı́cula
Estas soluciones, graficadas en Fig. 2.34, indican que la rapidez se anula después de recorrer
una distancia finita para ν ≤ 1 y tiende a anularse a medida que z → ∞ en los otros casos.
Finalmente, el desplazamiento de la partı́cula en función del tiempo se obtiene integrando las
ecuaciones para la componente de la velocidad en la dirección del movimiento. Se obtiene,
v
z0 + γ0 1 − e − γ t ,
z(t) = ν =1,
= z0 + γ1 ln [ 1 + v0 γ t ] , ν =2,
(2−ν)
v0 2−ν
1 − 1 − (1 − ν) v0(ν−1) γ t 1−ν , ν =
= z0 + γ (2−ν) 6 1, 2 .
z(t) º=3
º=2
v0 º = 0.5 º=1
°
O 2 4 t
Figura 2.35: Desplazamiento de partı́cula en función del tiempo.
2.6 Ejemplos 83
Aplicación
0
0
Solución:
F~0 = m ~g
en este caso, con ~g la aceleración de gravedad. Considerando la elección de coordenadas indicada en
la Fig. 2.36 e identificando este problema con los resultados obtenidos previamente, se tiene
f0 = − m g ,
con g la magnitud de la aceleración de gravedad. Luego, la posición de la partı́cula está descrita por
h i
z(t) = z0 − γg t + γ1 v0 + γg 1 − e− γ t ,
y su rapidez por h i
ż(t) = − γg + v0 + g
γ e− γ t .
Suponiendo que la partı́cula se lanza verticalmente desde la superficie terrestre (z0 = 0) con rapidez
v0 , el movimiento que ella describe y su rapidez se grafican en la Fig. 2.37. Como referencia se
grafica el caso correspondiente al movimiento del proyectil sin atenuación (γ = 0, lı́nea cortada)
y se indican las coordenadas relevante con el supraı́ndice 0 00 . Se observa que la partı́cula sube,
disminuyendo su rapidez hasta que se anula. Esto define el tiempo de subida TS ,
h i
ż(TS ) = 0 = − γg + v0 + γg e− γ TS ,
de donde se obtiene, h i
1 γ v0
TS = γ ln 1 + g .
z
zmax
(0 (
° = 0
zmax
O
t
.
z ¶
as
in
to
v0
ta
(0 ( (0 (
TS TSB
O
TS TSB t
g
°
¶
asintota
Una vez alcanzada la altura máxima, la partı́cula empieza a caer por efecto de la gravedad. La
velocidad apunta hacia la tierra, lo que se refleja en el valor negativo que toma la rapidez ż. La
partı́cula cae hasta que su coordenada se anula, situación que define el tiempo total de subida y
bajada TSB ,
z(TSB ) = 0 .
Entonces, h i
− γg TSB + 1 g
1 − e− γ TSB
γ v0 + γ =0,
y el tiempo de bajada TB ,
TB = TSB − TS ,
se obtiene de la relación γ
γ (TS + TB )
e 2 (TS −TB ) = 2 .
senh γ2 (TS + TB )
Su análisis indica que el tiempo de subida de la partı́cula moviéndose en un fluido viscoso y en
presencia de la gravedad es siempre menor que el tiempo de bajada (TS < TB ). Por supuesto que en
caso lı́mite de viscosidad despreciable (γ → 0), se verifica TS(0) = TB(0) . Por otra parte, en Fig. 2.37 se
aprecia el comportamiento asintótico de la rapidez, tendiendo a un valor constante g/γ, caracterı́stica
muy diferente a lo observadoen un medio libre de roce. Fluye entonces que, asintóticamente, el
desplazamiento crece linealmente con el tiempo en un fluido en régimen laminar, lo cual se compara
con el crecimiento cuadrático en el tiempo que la partı́cula muestra en un medio libre.
2.6 Ejemplos 85
Aplicación
Estudiar el movimiento de un globo (o una burbuja) en un medio que se comporta como un fluido
en régimen laminar.
Solución:
En este caso hay que identificar correctamente la fuerza F~0 que actúa sobre la partı́cula. En efecto,
es necesario considerar la fuerza de reacción (Principio de Arquı́medes) que el medio ejerce sobre el
cuerpo, además de la gravedad (ver Fig. 2.38). Por lo tanto, en este caso
F~0 = (− mg + N ) k̂ ,
m = ρc V ,
F~0 = − m gA k̂ , f0 = − m gA ,
gA < 0 si ρm > ρc . Corresponde al caso de un globo (o burbuja) que asciende (f0 > 0).
Se deja de ejercicio al lector escribir las ecuaciones del movimiento en diferentes situaciones.
86 Dinámica de la partı́cula
Aplicación
^|
Solución:
El problema es de una clase equivalente a los ejemplos ya estudiados, con la diferencia que el
movimiento ocurre en dos dimensiones. La dificultad aparecerá en el tratamiento de la fuerza de roce
viscoso. La ecuación de movimiento para la partı́cula de masa m, atraı́da por el campo gravitacional
y frenada por su desplazamiento en el medios, es
m ~a = m ~g − k v (ν−1) ~v ,
donde ~g es la acelaración de gravedad y se ha elegido una forma general para la fuerza de roce
(v = k~v k). Las condiciones iniciales del movimiento son:
~r = x ı̂ + y ̂ ,
con condiciones iniciales x(0) = 0, ẋ(0) = v0 cos α y y(0) = h, ẋ(0) = v0 sen α. Se trata de
un conjunto de dos ecuaciones diferenciales acopladas, sin solución analı́tica conocida. Es una
caracterı́stica frecuente que se encuentra en problemas en dos o más dimensiones y donde se
consideran fuerzas de roce, debido a la dependencia con la velocidad. La opción numérica es
usualmente el camino más atractivo a seguir. No se tratará en esta oportunidad.
2.6 Ejemplos 87
Regimen laminar
Para el caso ν = 1, las ecuaciones que describen el movimiento se simplifican a
ẍ = − γ ẋ ,
ÿ = − g − γ ẏ ,
ẋ(t) = v0 cos α e − γ t ,
g
ẏ(t) = v0 sen α e − γ t − 1 − e−γ t .
γ
Las componentes del vector posición son
v0 cos α
1 − e−γ t ,
x(t) =
γ
g 1 g
+ v0 sen α 1 − e − γ t .
y(t) = h − t +
γ γ γ
En el caso lı́mite del lanzamiento de un proyectil en el vacı́o (no hay roce), x → xnr , y → ynr ,
se recuperan las ecuaciones tradicionales
° = 0
h
° 1
~
° 2
~
O x
Figura 2.40: Efecto de medio viscoso en trayectoria.
88 Dinámica de la partı́cula
Aplicación
Considere una esfera de polietileno (densidad ρe en el rango 917 − 930 [Kg m− 3 ]) que incide, con
velocidad ~v0 y ángulo α con respecto a la horizontal, sobre agua (densidad ρa = 997 [Kg m− 3 ])
como se indica en la figura. Suponga que en el aire no hay fuerzas de roce viscoso significativas y en
el agua el régimen viscoso es laminar. Además, considere que no hay cambio en la dirección de la
velocidad debido al cambio de medio cuando entra o sale del agua.
El problema es determinar la trayectoria que sigue la esfera. En particular, proveyendo los datos
adicionales que necesite,
- Determinar la altura máxima que la esfera alcanza una vez que ha rebotado una vez en el
agua.
- Haga una estimación de la rapidez inicial v0 y el ángulo de incidencia para que por lo menos
rebote 3 veces. ¿A qué distancia del rebote inicial ocurre el tercero de éstos?
- Grafique la trayectoria.
~g
½e
®
~v
Comentario:
El problema intenta ser un modelo simple que explique una técnica bélica usada (con éxito relativo)
durante la 2a. guerra mundial (bouncing bomb) para destruir represas. En realidad, la fı́sica que
inspira la técnica mencionada tiene mayor complejidad y considera la rotación del objeto lanzado y
la fluidodinámica asociada al choque con el agua.
Se invita al lector a resolver este problema que resume, en gran medida, varios de los conceptos
discutidos previamente.
2.6 Ejemplos 89
~g ~g
L
½e ½
µ
^µ
m
~resorte
F
~
mg ½^
Solución:
m ~a = m ~g + F~resorte .
m [ (ρ̈ − ρ θ̇ 2 ) ρ̂ + (2 ρ̇ θ̇ + ρ θ̈) θ̂ ] = m ~g − k (ρ − L) ρ̂ .
Proyectando sobre las direcciones de la base polar, se obtienen dos ecuaciones escalares que
completamente describen el movimiento de la masa m,
ρ̈ − ρ θ̇ 2 = g cos θ − ωr2 (ρ − L) ,
2 ρ̇ θ̇ + ρ θ̈ = − g sen θ ,
de restitución iguala el peso de la masa según la vertical, con lo cual la coordenada correspondiente
al equilibrio ρe queda determinada por
g
ρe = L + δ , con δ= .
ωr2
Finalmente, el cambio de la variable ρ a η está motivado por razones estéticas de las ecuaciones
resultantes. La complejidad no desaparece. Las ecuaciones del movimiento, expresadas ahora en las
variables {η, θ}, toman la forma
η̈ + ωr2 η ' 0 ,
θ̈ + ωp2 θ ' 0 .
ρ(t) = ρe + ρ0 cos ωr t ,
θ(t) = θ0 cos ωp t .
2.6 Ejemplos 91
µ0 = 15º
½0 = 1.15 ½e
η̈ + ωr2 η ' 0 ,
( 1 + η ) θ̈ + 2 η̇ θ̇ + ωp2 θ ' 0 .
µ0 = 15º µ0 = 60º
½0 = 1.33 ½e ½0 = 1.15 ½e
El movimento angular se desacopla de las oscilaciones del resorte mientras las elongaciones de
éste se ven afectadas por la oscilación que el péndulo tiene. Por supuesto que en este caso,
la oscilación θ(t) del resorte no corresponde a un movimiento armónico simple debido a la
naturaleza no–lineal de la ecuación diferencial que lo describe.
µ0 = 75º
½0 = 1.50 ½e
~r = ~rO0 + ~r 0 .
d~r 0
~r˙ ≡ ~v = ~vO0 + ,
dt
3
X
~r 0 (t) = xi0 (t) x̂i0 (t) ,
i=1
su derivada temporal es
3 0
d~r 0 X 0 0 0 dx̂i
= ẋi x̂i + xi .
dt dt
i=1
i=1 dt
dx̂i0 ~ × x̂ 0 .
=Ω i
Figura 3.2: Derivada vector unitario.
dt
Entonces, la derivada temporal de ~r 0 se expresa por†
d~r 0
= ~v 0 + Ω
~ × ~r 0 ,
dt
†
Relación que no está limitada al vector posición ~r 0 . Cualquier vector ~s proyectable en la base {x̂i0 }, satisface
d~s d~s ~ × ~s .
= +Ω
dt S dt S 0
Con los subı́ndices S y S 0 se enfatiza la ubicación del observador que calcula la derivada temporal.
3.1 Complemento cinemático 95
y la relación entre las velocidades medidas por observadores en los correspondientes sistemas
de referencia se resume en
~v = ~vO0 + ~v 0 + Ω
~ × ~r 0 ,
es decir, la velocidad del punto P en el sistema inercial S expresada como la suma de la
velocidad de traslación del origen O0 del sistema no–inercial S 0 , la velocidad de P relativa al
sistema en rotación y la velocidad debido a la rotación de los ejes en movimiento.
Aceleraciones
La relación entre las aceleraciones medidas por observadores en cada uno de los sistemas de
referencia se puede obtener en forma directa derivando la velocidad con respecto al tiempo,
0 0
~ × d~r + d~v ,
~˙ × ~r 0 + Ω
~a = ~aO0 + Ω
dt dt
~ no
con ~aO0 la aceleración del punto O 0 . La derivada temporal de la velocidad angular Ω
presenta incertidumbre al ser la misma para un observador en S que para otro en S ,0
! !
˙~ ~
dΩ dΩ~
Ω≡ = ,
dt dt 0
S S
~˙ × ~r 0 + 2 Ω
~a = ~aO0 + ~a 0 + Ω ~ × ~v 0 + Ω ~ × ~r 0 ) .
~ × (Ω
~v = ~vA + ~v 0 .
~˙ × ~r 0 + Ω
~aA = ~aO0 + Ω ~ × ~r 0 ) ,
~ × (Ω
96 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
~a = ~aA + ~a 0 + ~aCo ,
~ × ~v 0 .
~aCo = 2 Ω
El término de Coriolis es un efecto cinemático novedoso, el cual está presente cuando hay
movimiento relativo en un sistema de referencia no–inercial en rotación.
Las relaciones entre las magnitudes cinemáticas medidas en dos sistemas de referencia, uno inercial
(S) y el otro móvil con respecto al primero (S 0 ), quedan determinadas por la traslación del origen
O0 y por las rotaciones en torno al eje Ω ~ que pasa por O0 . En el caso particular de rotación nula
~ = 0) y velocidad de traslación ~v 0 constante, se recuperan las transformaciones de Galileo
(Ω O
~v = ~vO0 + ~v 0 ,
~a = ~a 0 ,
~˙ × ~r 0 + 2 Ω
h i
m ~aO0 + Ω ~ × ~v 0 + Ω ~ × ~r 0 ) + ~a 0 = F~ .
~ × (Ω
p0
d~
p~ 0 = m ~v 0 =⇒ = F~ 0 ,
dt
para lo cual debe modificar las fuerzas fı́sicas,
F~ S a F~ 0 = F~ + F~N I S0 ,
3.2 Modificando a Newton 97
Dinámica rotacional
Resulta también interesante analizar la componente rotacional del movimiento para un observador
en S 0 . Para ello, se introduce el momentun angular relativo con respecto al punto origen O0 de S 0
para describir la dinámica correspondiente,
~l 0 = ~r 0 × p~ 0 .
O0
IO0 0 = m k~r 0 k 2 ,
yω~ O0 0 es la velocidad angular relativa de la partı́cula con respecto a O0 , ambas cantidades medidas
por un observador instalado en en sistema no–inercial S 0 .
La dinámica rotacional en S 0 queda descrita por la variación temporal del momentumm angular
relativo,
d~lO0 0
= T~O00 ,
dt
con el torque con respecto al punto O0 producido por la fuerza efectiva F~ 0 en S 0 ,
El cálculo de este torque no es simple, para el observador en S 0 , por la presencia de las fuerzas
no–inerciales. Sin embargo, existen simplificaciones (en casos de interés fı́sico) cuando el sistema
no–inercial rota con una velocidad angular Ω ~ constante. En ese caso se establece una dirección
0
privilegiada Ω̂0 en la espacio, situación relevante para conocer el comportamiento de la proyección
de ~lO0 0 sobre Ω
~ y obtener información sobre la velocidad angular de la partı́cula en el plano definido
0
por Ω ~ .
0
en S : m ~a = F~ ⇐⇒ en S 0 : m ~a 0 = F~ + F~N I
F~trasl
= − m ~aO0 ,
~˙ × ~r 0 ,
~
Ftrans = −mΩ
F~N I = F~trasl + F~trans + F~Co + F~cent con
F~ = −2mΩ ~ × ~v 0 ,
~ Co
Fcent = −mΩ ~ × (Ω ~ × ~r 0 ) .
Estas fuerza no–inerciales aparecen sólo porque se insiste en mantener la proporcionalidad entre
fuerza aplicada y la aceleración que experimenta el objeto, siguiendo la prescripción newtoniana.
Luego, ellas carecen de un significado fı́sico general.
Fuerza de arrastre
con F~A la fuerza de arrastre resultante del efecto de las fuerzas de traslación, transversal y
centrı́fuga,
F~A = F~trasl + F~trans + F~cent .
* Equilibrio relativo
Para un observador en S 0 , la partı́cula está en equilibrio relativo cuando no se mueve
(permanece en reposo) producto de las fuerzas que sobre ella actúan, es decir, ~v 0 = 0 y
~a 0 = 0. Se concluye que esta situación se produce cuando
F~ + F~A = 0 ,
◦ Ejemplo
Considere un recipiente cilı́ndrico transparente, de radio R, que contiene agua hasta
una altura H. El recipiente se hace rotar con velocidad angular Ω~0 constante en torno
a su eje de simetrı́a. Producto de la rotación, la superficie del lı́quido (supuestamente
incompresible) se redistribuye mientras dura la rotación, como se indica en Fig. 3.4.
Tomando una sección del recipiente (es suficiente por la simetrı́a del problema),
determine la ecuación de la sección vertical de la superficie curva, tomando el punto
más bajo como origen. Calcule la altura máxima que alcanza el agua al interior del
recipiente.
100 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
~g ~Ω 0
en reposo ¶
en rotacion
Figura 3.4: Lı́quido incompresible en recipiente en rotación.
Solución:
El análisis de este problema corresponde a la etapa en que el recipiente ha alcanzado
una velocidad angular Ω ~ constante. Un observador instalado en un sistema S 0 con
0
origen en O 0 y solidario al recipiente que rota (Fig. ??) constata que el lı́quido está
en reposo con respecto a él. Al no detectar movimiento de ningún elemento de masa
δm del lı́quido, concluye que la fuerza resultante sobre δm debe ser nula en S 0 .
Para derivar la deformación de la superficie del lı́quido, basta considerar un elemento
de masa δm ubicado en ella como se muestra en Fig. ?? y analizar su diagrama de
cuerpo libre. Como δm está en reposo en S 0 , se tiene
F~ 0 ≡ F~ + F~A = 0 =⇒ δm ~g + N~ − δm Ω ~ × Ω
0
~ × ~r 0 = 0 .
0
~g ~Ω 0
~
N
®
~A
F
±m~g
½^¶
~r 0 = ρ 0 ρ̂ 0 + z 0 k̂ 0 ; ~g = − g k̂ 0 ; ~ = N 0 ρ̂ 0 − N 0 k̂ 0 ;
N ρ z
~ = Ω k̂ 0 ,
Ω 0 0
3.3 Fuerzas no–inerciales y movimiento 101
Nρ 0 = δm g ,
Nz 0 = δm Ω02 ρ 0 .
Por otra parte, la razón entre las componentes de la normal determina la inclinación
de la tangente a la curva en el punto donde el elemento de masa se ubica,
Nz 0 N sen α dz 0
= = tan α = ,
Nρ 0 N cos α dρ 0
con lo cual
dz 0 Ω02 0
= ρ ,
dρ 0 g
es la ecuación diferencial que determina la forma de la superficie. Integrando, desde
el origen hasta la posición ~r 0 del elemento de masa, se obtiene
Ω02 0 2
z0 = ρ .
2g
De este resultado se concluye que la superfie formada producto de la rotación del
recipiente es parabólica, alcanzado el lı́quido una altura con respecto al punto O 0 de
referencia (ver Fig. 3.4)
Ω2
h = 0 R2 .
2g
Para determinar la nueva geometrı́a del lı́quido en rotación, hay que exigir que el
volumen que contiene al lı́quido se mantenga constante para el recipiente en reposo
o rotando. Entonces,
1
Vreposo = Vrotando =⇒ zO 0 = H − h,
2
donde zO 0 es la altura a que se ubica O 0 con respecto a la base del recipiente. Se
concluye de este resultado que la superficie parabólica del lı́quido en rotación es
siempre equidistante de la altura H del lı́quido en reposo.
La componente del movimiento según Ω̂0 en S 0 sólo es afectada por la componente traslacional
de las fuerzas no–inerciales y coincide con la misma componente en el sistema de referencia
inercial S cuando el origen O 0 de S 0 está fijo (en reposo) o se desplaza con velocidad uniforme.
La mayor complejidad del movimiento general tiende a manifestarse en el plano perpendicular
al eje de rotación Ω0 .
Un problema de referencia
Se plantea el caso de un cuerpo puntual de masa m sujeto a la acción de una fuerza constante
F~ = F~0 . La respuesta, dada por un observador en un sistema de referencia inercial S (ya
discutida), es que se trata de un movimiento en un plano, uniformemente acelerado, siendo su
posición temporal descrita por el vector posición
~
F
a partir de las condiciones iniciales del movimiento ~r(0) = ~r0 , ~v (0) = ~v0 y con ~a0 = m,
0
la
aceleración constante que sufre la masa.
~0
F
S
~r
O
~v 0 (0) = ~v00 (coincide con ~v0 si la velocidad inicial de traslación ~vO0 (0) = 0).
3.3 Fuerzas no–inerciales y movimiento 103
m ~a 0 = F~ 0 = F~ + F~trasl ,
= F~0 − m ~at0 ,
relación que muestra a la partı́cula sometida a una fuerza constante, cuya aceleración es
F~ 0
~a00 = = ~a0 − ~at0 .
m
Integrando, la evolución temporal del vector posición, para las condiciones iniciales dadas, es
y describe el movimiento contenido en el plano definido por la dirección n̂ 0 = v̂00 ×â00 . En Fig. ??
se muestra lo observado ahora desde S 0 , para diferentes elecciones (magnitud y dirección) de
la fuerza traslacional. La elección de coordenadas en ambos sistemas de referencia privilegia la
dirección de la fuerza F~0 para definir el eje vertical. Sin duda, la percepción de la trayectoria
puede cambiar considerablemente desde el sistema de referencia no–inercial, aún en su caso más
simple. Las diferencias dependen de la magnitud de la fuerza de traslación F~trasl relativa a F~0 :
si kF~trasl k << kF~0 k, el movimiento en S 0 queda dominado por F~0 y las trayectorias observadas
en S y S 0 no difieren significativamente; en caso contrario, no sólo las magnitudes relativas
importan sino también el ángulo entre ellas, situaciones más cercanas a las desplegadas en
Fig. 3.7.
Hay dos situaciones a analizar,
~0
F
m m
S¶
S ~r ¶
~r
O O¶
• ~a0 = ~at0 . La partı́cula en S 0 no se acelera y sigue una trayectoria rectilı́nea, afirmación que
difiere de lo observado desde un sistema de referencia inercial. Esta situación corresponde,
por ejemplo, al caso de una partı́cula lanzada desde una plataforma que cae en el campo
gravitacional terrestre y donde la opinión sobre su trayectoria por parte de observadores
sobre la plataforma o en la Tierra difiere.
104 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
m ~a 0 = F~ 0 = F~ + F~trasl + F~Co ,
= m ~a 0 − 2 m Ω
0
~ × ~v 0 ,
0
con la aceleración efectiva ~a00 (constante) introducida previamente. Se trata de una ecuación
diferencial lineal para la velocidad ~v 0 , de primer orden e inhomogénea, que en su forma
vectorial se lee,
~v˙ 0 + 2 Ω
~ × ~v 0 = ~a 0 .
0 0
Para encontrar su solución, se destaca que el movimiento presenta dos componentes desaco-
pladas entre si: una longitudinal, en la dirección de la velocidad angular de rotación de S 0
~ = Ω Ω̂ ) y la otra, transversal, contenida en un plano perpendicular a Ω̂ . Proyectando la
(Ω 0 0 0 0
ecuación según Ω̂0 y constatando que la fuerza de Coriolis no contribuye,
d(~v 0 · Ω̂0 )
= ~a00 · Ω̂0 .
dt
El resultado permite concluir que la componente de la aceleración según el eje de rotación es
constante e independiente de lo que ocurre en las otras direcciones. Entonces, se propone des-
componer el vector posición ~r 0 en una componente paralela (longitudinal) y otra perpendicular
(transversal) a Ω̂0 ,
(
~rk0 = (~r 0 · Ω̂0 ) Ω̂0 ,
~r 0 = ~rk0 + ~r⊥0 , con
~r⊥0 = (Ω̂0 × ~r 0 ) × Ω̂0 .
Es directo verificar que ~rk0 · ~r⊥0 = 0 y, consecuentemente, determinar la ecuación del plano
(~r⊥0 · Ω̂0 = 0) donde ocurre el movimiento transversal a Ω̂0 .
Se puede demostrar que las componentes longitudinales y transversales satisfacen las siguientes
ecuaciones diferenciales,
~v˙ k0 = ~a00 k ,
~v˙ ⊥0 + 2 Ω
~ × ~v 0
0 ⊥
= ~a00 ⊥ .
†
Esta ecuación también describe, en un sistema inercial, la dinámica de una partı́cula de masa m y carga eléctrica q en
presencia de un campo eléctrico E ~ y un campo magnético B, ~
~ −qB
m~a = q E ~ × ~v .
3.3 Fuerzas no–inerciales y movimiento 105
• Movimiento longitudinal
Para condiciones iniciales
2 Ω0
^ 0 R^ ¶
Ω ^0
Ω
O¶
~¶
R ^¶
R
~ .
Figura 3.8: Movimiento en plano perpendicular a Ω 0
La trayectoria está indicada por el trazado rojo, con la flecha mostrando el sentido de
avance de la partı́cula. En particular, observar que la partı́cula rota en sentido contrario a
la velocidad angular Ω ~ de S 0 . La trayectoria especı́fica variará considerablemente según
0
las condiciones iniciales escogidas.
Se sugiere analizar algunos casos particulares de este movimiento. Ellos son: aceleración
~ y aceleración transversal ortogonal
transversal ~a00 = 0; aceleración transversal ~a00 paralela a Ω 0
aΩ~ (~a 0 · Ω
~ = 0). Los dos primeros casos tienen una velocidad de desplazamiento nula, con
0 0 0
lo cual la trayectoria ocurre sobre el manto de una hélice recta orientada en la dirección de
rotación Ω̂0 del sistema no–inercial.
~0
F
S
~r
O
m ~a 0 = F~ 0 = F~ + F~trasl + F~cent ,
= m ~a00 − m Ω~ × Ω
0
~ × ~r 0 ,
0
con la aceleración efectiva ~a00 (constante) ya introducida. Se trata de una ecuación diferencial
lineal para el vector posición ~r 0 , de segundo orden e inhomogénea,
~r¨ 0 + Ω
~ × Ω
0
~ × ~r 0 = ~a 0 .
0 0
para obtener dos ecuaciones diferenciales de segundo orden para las respectivas componentes,
~r¨k0 = ~a00 k ,
~r¨⊥0 − Ω02~r⊥0 = ~a00 ⊥ ,
~a 0¶= 0 ~a 0¶== 0
^0
Ω ~v0¶== 0 ^0
Ω ~v0¶= 0
^0
(Ω v^0¶) ^0
(Ω a^0¶)
O¶ O¶
^0
(Ω ^0
v^0¶) Ω ^0
(Ω ^0
a^0¶) Ω
Figura 3.11: Trayectorias en S 0 debido a fuerza centrı́fuga.
Sin entrar en los detalles de la solución, en Fig. 3.11 se grafican casos particulares de trayectorias
bi–dimensionales, correspondientes a ~a00 = 0 y ~v00 = 0 respectivamente. Ellas muestran siempre
el mismo comportamiento: una componente de la trayectoria alejándose perpendicular al eje
~ mientras que la otra se desplaza paralela (o antiparalela) al eje de rotación
de rotación Ω 0
108 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
según sean las condiciones iniciales del movimiento y la resultante de las fuerzas F~ y F~trasl
que actúan. En el caso general, el comportamiento de ~r 0 para tiempos grandes indica que el
movimiento tiende asintóticamente a estar contenido en un plano y la trayectoria converge a
una lı́nea recta perpendicular a la dirección Ω̂0 .
3.3.2. Aplicación
Se invita al lector a imaginar un mundo que transcurre sobre una plataforma circular, de radio
muy grande, que gira con velocidad angular Ω ~ constante. Debido a la masa de la plataforma, existe
una aceleración de gravedad ~g constante en su entorno. Una persona ubicada a una distancia L del
centro O, en reposo con respecto a la plataforma, lanza una moneda al aire en dirección vertical
y con rapidez v00 . Estudiar el movimiento de la moneda según el observador en la plataforma y
determine el punto donde la observa caer.
Solución
Este un problema tı́pico que ilustra la dinámica en un sistema de referencia no–inercial. Sea S 0
el sistema de referencia ligado a la plataforma con origen en el centro de ella. La ecuación de
movimiento para la moneda, desde un observador en S 0 , es
m ~a 0 = m ~g − m Ω
~ × Ω~ × ~r 0 − 2 m Ω
~ × ~v 0 ,
~r 0 = ρ 0 ρ̂ 0 + z 0 k̂ 0 ,
~v 0 = ρ̇ 0 ρ̂ 0 + ρ 0 θ̇ 0 θ̂ 0 + ż 0 k̂ 0 ,
Ω~ = Ω k̂ 0 ,
~g = − g k̂ 0 .
3.3 Fuerzas no–inerciales y movimiento 109
Ω ¶
¶ ¶
¶
¶
¶
Figura 3.13: Coordenadas cilı́ndricas para moneda en S 0 .
z¶
O¶
L y¶
~v 0
O¶ y¶
L
x¶
x¶
• Solución simple
Este problema puede ser entendido en forma trivial por un observador en un sistema de referencia
inercial S con origen en el centro de la plataforma (Fig. 3.15). En efecto, la ecuación del movimiento
de la moneda será
m ~a = m ~g ,
es decir, un movimiento uniformemente acelerado. Eligiendo las cordenadas cartesianas {x, y, z}
para describir la posición de la moneda en S y suponiendo que ésta se lanza en coincidencia con el
eje x, se tiene que
ẍ = 0 , ÿ = 0 , z̈ = − g ,
y el conjunto de condiciones iniciales
x0 = L, y0 = 0, z0 = 0 ,
ẋ0 = 0, ẏ0 = L Ω , ż0 = v00 ,
describen completamente el movimiento. La solución es,
x(t) = L ,
y(t) = L Ω t ,
1 2
z(t) = v00 t −gt ,
2
tı́pica de lanzamiento de proyectiles. Una simple transformación a los ejes {x 0 , y 0 } ligados a la
plataforma permite obtener el movimiento de la moneda visto por el observador en el sistema
no–inercial.
¶
nutacion ¶
precesion
¶
tacion
¶
plano de la ecliptica
eje terrestre
¶
o eje de rotacion
como se muestra en Fig. 3.16. Para puntos en la superficie, la rapidez (tangencial) asociada a
la rotación varı́a en el rango,
0 ≤ vt ≤ ΩT RT ≈ 0, 47 km
s ,
con el mı́nimo valor para puntos en los polos y el máximo en el Ecuador. Correspondientemente,
la magnitud de la aceleración (hacia el eje de rotación) variará en el rango
S
~Ω T
S¶
†
Se define como el plano imaginario que contiene la órbita (elı́ptica) de la Tierra alrededor del Sol.
114 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
Es usual introducir un sistema de referencia S fijo en el espacio, con su origen coincidente con el
centro de la esfera terrestre, para describir el movimiento. Este sistema se considera, en buena
aproximación, inercial cuando se ignora el movimiento de traslación de la Tierra alrededor del
Sol. Por otra parte, la observación (o medida) de los fenómenos son realizadas por un observador
instalado en la Tierra, situación que aconseja la introducción de un sistema de referencia ligado a la
Tierra y cuyo origen coincide con el punto de observación en la superficie terrestre. Entonces, un
sistema de referencia S 0 , con origen en un punto O 0 de la superficie y rotando con la misma velocidad
angular Ω~ que gira la Tierra, satisface los requerimientos del observador terrestre. Claramente,
T
debido a las traslaciones y rotaciones que sufre, S 0 es un sistema de referencia no–inercial.
La posición de una partı́cula de masa m sobre la Tierra queda identificada por el vector posición ~r
con respecto al sistema S y ~r 0 con respecto al sistema S 0 . La posición del origen O 0 de S 0 queda
descrita por el vector posición ~rO0 y cuya magnitud corresponde al radio terrestre, k~rO0 k = RT .
La fuerza fı́sica resultante sobre la partı́cula en S 0 está dada
F~ = F~G + F~R ,
donde se ha expresado, para efecto del análisis, como la suma vectorial de la fuerza gravitacional
F~G con que la Tierra atrae a la masa m y la resultante de todas las otras fuerzas fı́sicas F~R que
actúan sobre la partı́cula. Para r ≥ RT , F~G toma la forma
M m
F~G = − G T2 r̂ .
r
Además, está implı́cito que MT >> m, con lo cual el origen del radio vector ~r coincide con el centro
de la distribución esférica de la masa terrestre uniformemente distribuida. Las fuerzas no–inerciales
sobre la partı́cula son
h i
F~N I = − m ~aO0 + 2 Ω~ × ~v 0 + Ω
~ × Ω ~ × ~r 0 ,
T T T
al considerar la velocidad angular constante. La aceleración ~aO0 del origen O0 se puede calcular
directamente a partir de su velocidad,
~vO0 = ~r˙O0 = Ω~ × ~r 0 ,
T
O
~aO0 = ~v˙ O0 = Ω
~ × Ω
T
~ × ~r 0 ,
T O
m ~a 0 = F~G0 + F~R − 2 m Ω
~ × ~v 0 .
T
Al combinar la fuerza gravitacional con las fuerzas no–inerciales de traslación y centrı́fuga, se redefine
la fuerza gravitacional en una fuerza efectiva F~G0 (~r),
F~G0 = F~G − m Ω
~ × Ω
T
~ × ~r 0 − m Ω
T O
~ × Ω
T
~ × ~r 0 ,
T
M ~ × Ω
~ × ~r
= − m G 3T ~r + Ω T T ,
r
3.4 Movimiento en la superficie terrestre 115
+
asociado a la fuerza centrı́fuga. Los casos excep- ~G
F
cionales ocurren en los Polos y el Ecuador. Para
un observador instalado en la Tierra que rota, la ~G¶
F
partı́cula es atraı́da con una fuerza que, en ge-
neral, no apunta hacia el centro de la Tierra. La
distancia al centro dependerá de la magnitud de
~ y de la distancia de la O
la velocidad angular Ω T
masa al eje de rotación. Al respecto, distancias en
o sobre la superficie son considerablemente meno- RT
res que el radio terrestre con lo cual el efecto de
la fuerza centrı́fuga es una perturbación pequeña
a la fuerza gravitacional. Por otra parte, para dis- Figura 3.18: Fuerza gravitacional efectiva en S 0 .
tancias k~rk < RT , cuando la fuerza gravitacional
es lineal con la distancia al centro de la distribución de masa, el efecto rotacional permite entender
cualitativamente el rompimiento de la simetrı́a esférica de la distribución de masa para consolidarse
en una geometrı́a elipsoidal, con un semieje en la dirección polar menor que el semieje ecuatorial
(objetivamente, radio ecuatorial es alrededor de 21 [km] mayor que el radio polar).
~g 0 ≡ ~gO0 0 = 1
m F~G0 (~r = ~rO0 ) .
Esta aceleración de gravedad efectiva corresponde a la fuerza gravitacional por unidad de masa en
el punto origen del sistema de referencia no–inercial S 0 . Explı́citamente,
~g 0 = ~g − RT ΩT2 Ω̂T × (Ω̂T × r̂O0 ) ,
donde
MT
~g = − G r̂ ,
RT2 O0
es la aceleración de gravedad que experimenta un cuerpo en su superficie, considerada una distribución
uniforme de masa, esférica y de radio RT , con una masa total MT . La magnitud y dirección de ~g 0
dependen del punto sobre la superficie terrestre que se elige como origen O0 de S 0 y de la velocidad
angular que rota la Tierra. En detalle,
~g 0 (λ) = − g r̂O0 − RT ΩT2 cos(λ) n̂ ,
con g = k~g k, la latitud λ midiendo la posición del punto O0 con respecto al Ecuador y n̂ señalando
la dirección perpendicular al eje de rotación Ω~ (Fig. 3.19). La magnitud de ~g 0 es
T
q
g 0 (λ) = g 2 sen2 λ + ( g − RT Ω2T )2 cos2 λ .
116 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
ΩT
¶
O¶
vertical ¶
Los valores extremos de g 0 corresponden a las latitudes del Ecuador (mı́nimo) y de los Polos
(máximo),
λ = 0 (Ecuador) −→ gE 0 = g − RT ΩT2 ,
λ = ± π2 (Polos) −→ gP 0 = g .
Esto significa que la aceleración de gravedad, para un observador en la superficie terrestre, aumenta
desde los Polos al Ecuador debido a la rotación de la Tierra. Es interesante calcular su desviación
porcentual con respecto a la aceleración de gravedad g del modelo estático, es decir,
g
η =1− 0 ,
g (λ)
cantidad que se ilustra en Fig. 3.20. En los Polos, al no tener efecto la rotación en la aceleración
de gravedad efectiva, se tiene η = 0. La magnitud de g 0 disminuye con respecto g a medida que la
latitud (norte o sur) disminuye hacia el Ecuador, llegando a ser alrededor de 0, 34 % menor que g.
Esta menor aceleración de gravedad en el Ecuador debido a la rotación de la Tierra es coherente
cualitativa y cuantitativamente con la deformación oblonga que muestra. Por último se destaca que
~g 0 no pasa por el centro de la Tierra, desviándose un ángulo con respecto a la dirección radial r̂O0 ,
como se indica en Fig. 3.19. Esta nueva dirección se identifica con la dirección de la vertical sobre la
superficie terrestre† . Tomando
k~g 0 × r̂O0 k = g 0 sen() = RT ΩT2 cos(λ) sen(λ) ,
entonces, la desviación con respecto a la dirección radial queda determinada por
RT Ω 2
sen() = 2g0
T
sen(2λ) .
La desviación máxima se obtiene para λ = π4 . En este caso,
RT Ω 2 1 ◦
sen(max ) = 2g0
T
, −→ max ≈ 10 ( ) .
En el Ecuador y los Polos la desviación es nula.
†
También llamada la lı́nea de la plomada.
3.4 Dinámica en superficie terrestre 117
¸
90º N
0E
-0,5 ´ [ %]
90º S
¸
Figura 3.20: Desviación relativa de g 0 con respecto a g.
m ~a 0 = m ~g 0 + F~R − 2 m Ω
~ × ~v 0 ,
T
con ~g 0 tomando el valor correspondiente a la latitud del observador que describe el movimiento. La
diferencia con respecto al movimiento descrito desde un sistema de referencia inercial es la presencia
del término de Coriolis. Naturalmente, la determinación del movimiento dependerá de la fuerza
resultante F~R , más allá de la gravedad, que actúa sobre la partı́cula.
~a 0 = ~g 0 − 2 Ω
~ × ~v 0 ,
T
con ~v00 la velocidad inicial. Ello permite encontrar una solución aproximada para ~r 0 ,
cuando se mantienen sólo los términos lineales en ΩT . La posición inicial de la masa está
descrita por ~r0 . Los primeros tres términos corresponden al movimiento de una partı́cula
bajo el campo gravitacional en un sistema inercial. El término adicional es la correción al
movimiento debido a la rotación terrestre, a primer orden en ΩT , para un observador terrestre.
El detalle del movimiento dependerá de las coordenadas elegidas en el sistema de referencia
no–inercial S 0 que rota con la tierra y tiene su origen O 0 en la superficie terrestre. Para
describir objetos en las cercanı́as de O 0 , es razonable aproximar la superficie curva por un
plano definido por la dirección ĝ 0 de la aceleración de gravedad local, como se indica en la
Fig. 3.21. Además, la geodésica† que pasa por O 0 e incluye a ambos polos, establece un eje de
referencia en el plano con respecto al cual medir la posición de la partı́cula en él.
ΩT Ω ¶
¶
S¶
O¶
sferi
hemi te
Nor
¸+²
hemi
sfe
¶
Sur
~g 0 = − g 0 (λ) k̂ 0 .
†
Geodésica: denota la trayectoria más corta posible entre dos puntos. En el plano, las geodésicas son lı́neas rectas.
Sobre una esfera, las geodésicas son los grandes cı́rculos (intersección de una cáscara esférica con planos que contengan
al centro de la esfera).
3.4 Dinámica en superficie terrestre 119
Identificando {x00 , y00 , z00 } y {ẋ00 , ẏ00 , ż00 } con las condiciones iniciales del movimiento en coorde-
nadas cartesianas, se obtiene
Estas expresiones hacen explı́citas las correcciones que sufre la descripción del movimiento
debido a la rotación terrestre.
x 0 (t) = 0 ,
y 0 (t) = −ΩT t 2 v00 − 31 g 0 (λ) t cos (λ)
z 0 (t) = v00 t − 1
2 g 0 (λ) t 2 .
∆ ≡ y 0 (TS−B ) − y 0 (0) ,
1
= − ΩT g 0 TS−B 3
cos λ .
6
El resultado negativo indica que el desplazamiento del punto de caı́da es siempre
hacia el Oeste, independiente del hemisferio, es nulo en los Polos y alcanza su valor
máximo en el Ecuador.
120 Dinámica en sistema de referencia no–inercial
* Péndulo de Foucault
Esta es una invitación a estudiar el Péndulo de Foucault y demostrar que el plano en el
que se desplaza rota debido a la rotación de la Tierra. Determinar su perı́odo.
CAPITULO 4
Trabajo y energı́a
4.1. Trabajo
Considerar que la partı́cula describe la trayectoria (C − C 0 ) en Fig. 4.1 al moverse bajo la acción de
una fuerza resultante F~ . Su posición al tiempo t está descrita por el vector posición ~r y tiene una
velocidad ~v en la dirección de la tangente a la trayectoria. La acción de la fuerza se hace manifiesta al
describir el movimiento en coordenadas intrı́nsecas, donde las componentes tangenciales y normales
de la aceleración están dadas (partı́cula de masa m constante) por
m s̈ = Ft = F~ · t̂ ,
ṡ 2
m = Fn = F~ · n̂ ,
Rc
P v ^t
~
^
n ¶
Figura 4.1: Acción de fuerza resultante F~ sobre una partı́cula que sigue la trayectoria C − C 0 .
dW = F~ · d~r ,
cuando ésta se desplaza una distancia infinitesimal d~r bajo su acción. De la definición fluye que
el trabajo infinitesimal realizado puede ser positivo, nulo o negativo dependiendo de la dirección
relativa de la fuerza con respecto a la dirección del desplazamiento. Ello es explı́cito al desplegar el
producto escalar,
dW = kF~ k kd~r k cos θ S 0 ,
donde θ es el ángulo que, en cada instante, la fuerza F~ hace con el desplazamiento infinitesimal
d~r. En particular se concluye que si el desplazamiento de la partı́cula se mantiene perpendicular
a la fuerza (θ = π2 ), no se realiza trabajo (dW = 0). Ejemplos de esta situación son la fuerza de
gravedad en la superficie de la tierra para desplazamientos horizontales de una partı́cula o la tensión
de una cuerda que sujeta una masa describiendo un movimiento circular, entre otros.
Más allá del trabajo infinitesimal dW que realiza la fuerza para cada desplazamiento d~r, interesa
conocer el trabajo total realizado por F~ sobre la partı́cula cuando ésta se desplaza a lo largo de una
trayectoria (C) del movimiento, desde un punto A (definido por el vector posición ~rA ) a un punto
B (definido por el vector posición ~rB ). Sumando todos los trabajos infinitesimales realizados por la
fuerza a lo largo de la trayectoria C se tiene,
Z ~
rB
(C)
WA→B = [ dW ]C ,
~
rA
Z ~
rB h i
= F~ · d~r .
~
rA C
†
En el caso de masa variable, es posible variar la rapidez de la partı́cula aún cuando la componente tangencial de la
fuerza es nula
4.1 Trabajo 123
El trabajo realizado sólo depende de las posiciones inicial y final de la partı́cula, no importando la
trayectoria seguida en el espacio.
Unidades
La unidad de trabajo corresponde, por definición, a la medida de la acción de una unidad
de fuerza en el desplazamiento de un objeto en una unidad de longitud en la dirección del
movimiento. En el sistema internacional de unidades (SI), la unidad de trabajo se denomina
joule (J),
Kg · m2
1 J = 1 [N · m] = 1 ,
s2
y corresponde al trabajo realizado por la fuerza de 1 Newton para un desplazamiento de 1
metro. Una unidad práctica de trabajo es el kiloWatt–hora (kW·h),
1 kW·h = 10 3 W × 3600 s = 3, 6 10 6 [ J ] ,
* Ejemplo
Calcular el trabajo que realiza la fuerza F~ = x y ı̂ para mover una partı́cula en el plano
{x, y}, desde el punto origen O(0, 0) al punto A(1, 1).
Se trata de una fuerza unidireccional, que cambia de sentido, y cuyo valor depende en
cada punto del plano {x, y} del valor de las coordenadas. En Fig. 4.3 se ha graficado
el campo de fuerza correspondiente, con las flechas indicando su dirección y el tamaño
es descriptivo de su intensidad (muy débil alrededor del origen O y creciendo a medida
que se aleja). Se indica, además, el punto A. También se ha graficado la intensidad de la
fuerza F (x, y) para conocer explı́citamente su intensidad en cada punto del plano {x, y}.
124 Trabajo y energı́a
^|
A F(x,y)
1.0
y
0.5
A(1,1)
O
-0.5 O 0.5 1.0 ^{ x
-0.5
F(x,y)=xy
4.1.1. Potencia
Un concepto ı́ntimamente ligado a la idea de trabajo es aquél de potencia, como la medida instantánea
de la tasa de variación temporal del trabajo realizado por la fuerza,
dW
P (t) = .
dt
La aparente simplicidad de la notación no debe inducir a error. La potencia, en general, es una
medida del trabajo que se realiza por unidad de tiempo y por ello dependerá de la trayectoria
seguida. La relación con la fuerza F~ se explicita al considerar el trabajo infinitesimal realizado por
ésta e identificar la velocidad ~v = d~
r
dt del objeto en movimiento. Se obtiene una forma alternativa
para la potencia instantánea,
P (t) = F~ · ~v ,
El conocimiento de la potencia permite, a su vez, calcular el trabajo realizado en un cierto intervalo
de tiempo [ tA , tB ],
Z t
(C) B
P (t 0 ) dt 0 ,
Wt →t =
A B C
tA
WtA →tB = P̄ ( tB − tA ) ,
Unidades
La unidad de potencia mide el trabajo realizado por unidad de tiempo. En el sistema SI, la
unidad de potencia se denomina Watt (W) y queda definida por
J
1W = 1 .
s
Esta relación permite redefinir la unidad de trabajo (J) como,
1J = 1W s ,
es decir, el joule como el trabajo necesario para producir un Watt de potencia durante un
segundo.
Una unidad práctica de potencia es el Caballo de Fuerza o Horsepower (HP),
1 HP = 746 W .
k p~ k 2
K= = 1
2 m k ~v k 2 ,
2m
126 Trabajo y energı́a
Ejemplos
A continuación se discutirán un par de ejemplos que relacionan la dinámica de una partı́cula
con el trabajo que realizan las fuerzas que sobre ellas se aplican.
^{
^|
4.1 Trabajo 127
Solución:
Este problema puede enfrentarse en la manera habitual, planteando y resolviendo la
ecuación de movimiento para el objeto. Alternativamente, se puede evitar la ecuación de
movimiento y analizar la variación de la energı́a cinética de la partı́cula con respecto a su
situación inicial. Ello significa evaluar el trabajo que las fuerzas actuantes (el peso m~g ,
la reacción normal de la superficie N ~ y la fuerza de roce cinético F~ (c) ) realizan sobre la
R
partı́cula.
Por la condición inicial del movimiento, el objeto tiene una trayectoria recta sobre el
plano. Ello sugiere elegir un sistema de coordenadas cartesiano como se indica en la
figura. La posición y velocidad del objeto sobre el plano serán,
~r = x ı̂ , =⇒ ~v = ẋ ı̂ .
Para calcular el trabajo realizado por las fuerzas se necesita identificar el elemento de
trayectoria d~r en las coordenadas del problema. Para una trayectoria recta d~r = dx ı̂,
con lo cual el trabajo para ir desde el punto inicial (que coincide con el origen de las
coordenadas) hasta un punto de coordenada x es
Z x
~ + F~ (c) · d~r ,
W0−→x = m ~g + N R
0
Considerando que N ~ no realiza trabajo por ser siempre normal a la trayectoria del objeto,
el trabajo realizado por las otras fuerzas será
Z x Z x
W0−→x = − mg sen α dx 0 − µc mg cos α dx 0 ,
0 0
= − mg x sen α − µc mg x cos α ,
= − mg x sen α [ 1 + µc cot α ] .
Se destaca que el cálculo del trabajo realizado por la fuerza de roce es, en este caso, muy
simple (porque ella es constante durante el movimiento). No es una situación general y,
en realidad, dicho cálculo puede ser fuente de una dificultad mayor.
Llamando W0− (no−roce) al trabajo realizado sólo por la fuerza gravitacional,
→x
(no−roce) (no−roce)
W0−→x
= − mg x sen α =⇒ W0−→x < W0−→x
,
128 Trabajo y energı́a
lo que siginifica que más energı́a se pierde (más trabajo es requerido) por la existencia
del roce, con la consiguiente disminución de la energı́a cinética con que el objeto llega al
punto de coordenada x.
El cálculo de la rapidez es directo.
q
K(x; t) − K(0; 0) = W0−→x =⇒ ẋ(t) = v02 − 2 g x sen α [ 1 + µc cot α ] .
Naturalmente, para una velocidad inicial dada existirá una desplazamiento máximo xmax
(y una altura máxima sobre la horizontal hmax = xmax sen α) del objeto sobre el plano
inclinado, el que ocurre cuando el objeto se detiene,
1 v02
xmax =
,
1+µc cot α 2 g sen α
ẋ(t) = 0 =⇒
1 v02
hmax = ,
1+µ cot α
c 2g
x¹
max
xmax
x¹max = 2
( v2g )
0
¹c
2 0.0
0.75
0.50
1
1.0
0 ¼ ®
¹2
En la figura anexa se ha graficado el desplazamiento máximo que tiene el objeto, depen-
diendo de la inclinación α del plano y del coeficiente de roce cinético. Para roce nulo,
el desplazamiento máximo es infinito para el plano horizontal (α = 0) ya que el objeto
mantiene todo el tiempo su velocidad uniforme; en el otro extremo, si el plano es vertical,
el máximo desplazamiento vertical que el objeto alcanza es el compatible con la fuerza de
v2
gravedad ( 2g0 ). Para una superficie excepcionalmente rugosa (µc ∼ 1,0) el desplazamiento
deja de ser dominado por la inclinación del plano.
Un resultado interesante fluye de la dependencia de xmax con α. La función tiene un
mı́nimo para un ángulo αc ,
d xmax 1
=0 =⇒ tan αc = .
d α α=α µc
c
x(t) = v0 t − 12 gef t 2 .
~v0
~r
x
Solución:
El problema invita a calcular la velocidad que alcanza el cohete en un punto cualquiera
del espacio después de haber sido lanzado con una velocidad inicial ~v0 y estar sometido a
la fuerza gravitacional que la Tierra ejerce sobre la nave. No hay otras fuerzas envueltas
(de roce viscoso, por ejemplo) y el exceso de masa inicial es el combustible que permite al
cohete alcanzar su velocidad inicial v0 . Con ese conocimiento, se tratará de caracterizar
la llamada velocidad de escape.
Para calcular el cambio en su energı́a cinética tenemos que conocer el trabajo que la
fuerza gravitacional hace sobre el cohete en su trayectoria. Sin embargo, a priori no
conocemos la trayectoria que sigue, lo que podrı́a representar una dificultad. Inicialmente,
el cohete es lanzado desde un punto sobre la superficie de la Tierra descrito por el vector
posición R~ = R R̂ y se quiere conocer su velocidad en el punto descrito por el vector
T T T
posición ~r = r r̂ como se indica en figura. Para caracterizar un elemento de trayectoria
general d~r, la elección de coordenadas esféricas, con origen en el centro de la distribución
de masa, es la opción adecuada por la simetrı́a esférica que domina el problema. Entonces,
d~r = dr r̂ + r dθ θ̂ + r sen θ dφ φ̂ .
130 Trabajo y energı́a
WR~ −→~
r
= F~cohete · d~r ,
T
~
R
T
Z r
dr
= − G Mcohete MT ,
R
r2
T
1 1
= G Mcohete MT − = WR −→r .
r RT T
Observar que el cohete se aleja de la Tierra en la medida que k~v (r)k > 0. Ello significa
que su velocidad inicial v0 debe tener un valor mı́nimo para ello ocurra. Caso contrario,
la velocidad se anula y la fuerza de gravedad lo atrae de regreso.
La velocidad de escape vescape se define como la velocidad mı́nima de lanzamiento de un
objeto desde la superficie de la Tierra (o cualquier distribución de masa esférica) para
que nunca regrese. Entonces, para que no exista retorno basta imponer
s
2 G MT
k~v (r −→ ∞)k ≥ 0 =⇒ v0 ≥ ,
RT
que hemos estudiado, la velocidad inicial no tiene componente azimutal (en la dirección
φ̂) y es predominantemente una velocidad radial vr (dirección r̂, normal a la superficie
terrestre en punto de lanzamiento). Por lo tanto, vescape ' vr . Pero, en realidad, la Tierra
rota con rapidez angula Ω modificando la velocidad de escape a
q
vescape ' vr2 + vφ2 ,
* Considere un objeto de masa m que incide con velocidad horizontal ~v0 y desliza sobre
una superficie semicircular de radio R. Existe un coeficiente de roce cinético µc entre la
superficie y el objeto. El problema es calcular el movimiento del objeto y la altura máxima
que alcanza
~g
Solución:
El problema es un ejemplo clásico, para el cual bastarı́a identificar las fuerzas y resolver la
ecuación de movimiento (no necesariamente fácil) del objeto. Alternativamente, se puede
calcular directamente la variación de energı́a cinética que experimenta el objeto debido a
la variación del trabajo realizado por las fuerzas sobre él. Ası́, tenemos información sobre
la rapidez del objeto y se puede analizar su comportamiento.
El movimiento esperado se presenta en varias formas, dependiendo de la rapidez inicial
de la partı́cula y del roce. La dificultad proviene de que tanto la rapidez como la reacción
de la superficie sobre el objeto pueden anularse pero no necesariamente en la misma
posición. Ello condiciona el movimiento posterior, tema a discutir en esta solución.
La partı́cula describe una trayectoria circunferencial a partir de las condiciones iniciales
del movimiento, por lo cual el uso de coordenadas polares es pertinente. La velocidad
de la partı́cula para un instante t es ~v = R θ̇ θ̂, con θ̂ la dirección de la tangente a la
trayectoria. Entonces, la energı́a cinética inicial (cuando objeto entra a la superficie curva)
y a un tiempo arbitrario t será,
1 1
K(t = 0) = 2 m v0 2 y K(t) = 2 m R 2 θ̇ 2 .
132 Trabajo y energı́a
O
~
N
µ µ^
½^
~R
F
(c)
m~g
El diagrama de cuerpo libre indica que las fuerzas sobre la partı́cula son el peso, la
reacción normal de la superficie sobre el objeto y la fuerza de roce. En las coordenadas
consideradas se expresan por
m ~g = mg ( cos θ ρ̂ − sen θ θ̂ ) , ~ = − N (θ) ρ̂ ,
N F~R(c) = − µe N (θ) θ̂ ,
= mg R [ cos θ − 1 ] − µe R N (θ 0 ) dθ 0 .
0
0
N
mg
¼/2
1 ¼
µ
0
1 2 R .2
g µ
-1
Resulta central encontrar la dependencia angular de la rapidez angular θ̇(θ) para una
resolución detallada del problema. Relacionando la variación de la energı́a cinética con el
trabajo realizado por las fuerzas se obtiene,
Z θ
1
2 m R 2 θ̇ 2 − 21 m v0 2 = mg R [ cos θ − 1 ] − mg µc R sen θ − m µc R 2 θ̇ 2 (θ 0 ) dθ 0 .
0
v0
con θ̇0 = R es la rapidez angular inicial y θ̇ 2 es solución de la ecuación integral indicada† .
†
La ecuación de movimiento para la partı́cula conduce a la siguiente ecuación diferencial de segundo orden, no lineal,
para la variable angular θ(t),
θ̈ + µc θ̇ 2 + R
g
[ sen θ + µc cos θ ] = 0 .
Sin embargo, la ecuación se hace manejable si se busca conocer θ̇(θ) en lugar de θ̇(t). Se obtiene una ecuación lineal,
inhomogénea, para la variable θ̇ 2 . Una forma de escribir su solución es la ecuación integral previamente indicada.
134 Trabajo y energı́a
y reconocemos que
d [ F ] = − β H(t) e− β t dt + [ d H ] e− β t = − β F (t) dt + [ d H ] e− β t .
v02 − 2 µ θ
o
2 g 2 n
2 − 2 µc θ
θ̇ (θ) = e c + ( 2 µc − 1 ) ( e − cos θ ) − 3 µc sen θ .
R Rg 1 + 4 µc2
Para tener una idea del comportamiento con la variable angular y su dependencia de
la condición inicial v0 (expresada a través de γ), en la figura próxima se grafican la
magnitud de la normal normalizada al doble del peso de la partı́cula y el cuadradado
de la rapidez tangencial normalizada a la rapidez inicial. Se consideran sólo valores
fı́sicamente relevantes en el rango angular completo. Las lı́neas llenas se refieren
a la rapidez tangencial mientras que las lı́neas cortadas describen la magnitud de
la normal. Además, se han enlazado los pares de curvas que corresponden a un
mismo valor de γ y, en especial, es importante observar los ángulos donde se anulan
las magnitudes comparadas. Para γ > 1, vt = 0 para un ángulo menor que el
correspondiente a N = 0. La situación se invierte para 0, 5 ≤ γ ≤ 1, 0. Se hace notar
que gamma = 0, 5 corresponde a la mı́nima energı́a cinética inicial para superar la
energı́a potencial 2 mg R. Para gamma < 0, 5, la rapidez tangencial vt es siempre
positiva aunque la normal se anula para 0, 4 ≤ γ < 0, 5. Para γ < 0, 4, la partı́cula
nunca se detiene ni pierde contacto con la superficie en el rango 0 ≤ θ ≤ 2 π.
136 Trabajo y energı́a
v t2 N ¹ c = 0.
v02 2mg ° > 1.0
° = 1.0
° = 0.3
° = 0.4
° = 0.5
0
¼
4
¼
2
3¼
4
¼ 2¼ µ
+ Caso γ ≥ 1 √
Significa que para una rapidez inicial v0 ≤ 2 g R , la partı́cula se detiene antes
que la reacción normal se anule, situación que le permite regresar al punto de
partida siguiendo la trayectoria circunferencial sobre la superficie. Si θv es el
ángulo para el cual vt (θv ) = 0, la partı́cula alcanza una altura H = R (1 − cos θv )
sobre el el nivel horizontal.
+ Caso γ < 1 √
Cuando la rapidez inicial v0 > 2 g R , la partı́cula supera el ángulo θ = π2 antes
de, eventualmente, detenerse. Sin embargo, en esta condición la reacción normal
se anula y pierde contacto con la superficie. Hay dos casos a analizar:
a) 25 ≤ γ < 1
Corresponde a la situación en que la reacción normal siempre se anula para algún
ángulo θN en el intervalo ( π2 , π], la partı́cula pierde contacto con la superficie y
sigue la trayectoria correspondiente al lanzamiento de un proyectil en el campo
4.1 Trabajo 137
gravitacional con velocidad inicial ~vt (θN ). En la figura anexa se grafican dos
trayectorias
√ para
√ un objeto que incide con dos velocidades diferentes y tal que
5 g R ≥ v0 > 2 g R . La partı́cula sigue la trayectoria circular, definida por
la superficie sobre la cual se desplaza, hasta el punto en que la normal se anula.
Luego, se empieza a alejar de la superficie en una trayectoria parabólica debido
a la aceleración de gravedad.
~v0
En esta situación hay dos alturas identificables: aquélla que alcanza sobre la
la superficie circular, posición que corresponde al punto de despegue H =
R(1 − cos θN ) sobre la horizontal y el ángulo θN definido por N (θN ) = 0; la otra,
corresponde a la altura máxima H 0 que alcanza el movimiento parabólico que
sigue la partı́cula después de abandonar la superficie.
b) γ < 25
En esta situación, tanto la velocidad tangencial como la magnitud de la reacción
normal serı́an siempre positivas si la superficie circular se cerrara completamente.
Para esta condición, la altura máxima está limitada por la geometrı́a de la
superficie, es decir, H = 2 R.
- Roce presente
Indudablemente, el análisis de las expresiones para la rapidez tangencial y la magnitud
de la reacción normal es más elaborado cuando se considera el roce entre el objeto y
la superficie.
La caracterı́stica del movimiento de la partı́cula está determinado, nuevamente, por
el valor de γ para el cual vt y N se anulan. Ello conduce a
γ
e− 2 µc θ + ( 2 µc2 − 1 ) e− 2 µc θ + 23 cos θ − 3 µc sen θ
1+4 µc2
=0,
π 1 + 4 µc2
θ= y γ(µc ) = .
2 3 µc e µc π + 1 − 2 µc2
138 Trabajo y energı́a
°
1,0
0,5
0 0,5 1,0 ¹c
Por supuesto, para la situación de roce nulo se recupera el valor γ(µc = 0) = 1. La
disminución del valor de γ a medida que µc aumenta es la manifestación de la pérdida
de energı́a mecánica debido al trabajo que realiza la fuerza de roce oponiéndose
al movimiento. Para µc 6= 0, se requiere una mayor velocidad inicial (más energı́a
cinética) para alcanzar el desplazamiento angular θ = π2 ,
s
2gR
v0 (µc ) = > v0 (0) .
γ(µc )
v t2 N
v02 2mg ¹ c = 0.3
1
° = 1.0
° = 0.5 ° = 0.1
° = 0.2
° > 1.0
0
¼
4
¼
2
3¼
4
¼ 2¼ µ
4.2 Fuerzas conservativas 139
También se puede determinar el ángulo θmin para el cual la rapidez tangencial alcanza
un valor nulo en el intervalo [0, 2 π]. Se deja al lector demostrar que ese ángulo queda
determinado por
tan θmin = − µc .
El valor de γ correspondiente a θmin es
1 + 4 µc2
γ(θmin ) = .
1 − 2 µc2 − ( 1 + µc2 )e 2 µc θmin cos θmin
Para el caso de µc = 0, 3 mostrado en la figura previa, se tiene θmin = 163, 3 ◦ y
γ = 0, 2063, valores que casi corresponden a la curva de γ = 0, 2 que muestra un
mı́nimo que se aprecia hacia la derecha del punto medio entre 34π y π. Bajo estas
condiciones de roce, se requerirı́a una velocidad inicial de algo más del doble de la
necesaria para llegar al punto superior de la superficie curva sin roce.
Sin embargo, para efectos de determinar la trayectoria de la partı́cula interesa conocer
el ángulo θN para el cual la magnitud de la reacción normal se anula, N (θN ) = 0. Es
directo demostrar que ello ocurre para
1 + 4 µc2
θN = π y γ(µc ) = 3 .
2 e 2 µc π + 1 − 2 µc2
Para µc = 0, 3 se tiene que γ = 0, 1271 (ver figura). En general, este resultado permite
calcular la velocidad inicial mı́nima para que la partı́cula llegue a la parte superior
de la superficie (θN = π) sin despegarse en superficies con diferentes coeficientes de
roce cinético. A partir de la relación entre γ y v0 se obtiene,
s
(min) 2gR
[ v0 ]θ =π ≡ v0 = .
N γ(µc )
(min)
v0
5gR
el trabajo total que realizan sobre una partı́cula, entre dos puntos A y B arbitrarios, es
independiente de la trayectoria seguida,
(C) (C 0 )
WA→B = WA→B ,
para cualquier trayectoria C o C 0 elegida. En particular, el trabajo total realizado por una
fuerza conservativa según una trayectoria cerrada es nulo,
I h
(C,C 0 )
i
WA→A ≡ F~ (c) · d~r =0, ∀ C, C 0 .
C,C 0
La caracterización de una fuerza como conservativa fluye de la definición del trabajo. En efecto,
se puede inferir que el trabajo total entre dos puntos será independiente de la trayectoria seguida
cuando el trabajo infinitesimal realizado por la fuerza F~ (c) (~r) corresponde al diferencial exacto
donde U es una función escalar, continua y diferenciable en la región del espacio donde actúa la
fuerza y recibe el nombre de función energı́a potencial de la partı́cula. Representa el trabajo realizado
por una fuerza externa F~ ext = − F~ (c) ( explica el signo menos) contra el trabajo realizado por la
fuerza F~ (c) propiamente tal. La función U no es única ya que toda otra función U 0 = U + constante
produce el mismo trabajo infinitesimal. El elemento infinitesimal de energı́a potencial se expresa por
∂U ∂U ∂U
dU (~r) −→ dU (x, y, z) = dx + dy + dz ,
∂x ∂y ∂z
para una descripción del movimiento en coordenadas cartesianas. Las derivadas parciales indican que
la función se deriva con respecto a la variable especificada mientras las otras permanecen constantes.
Introduciendo el operador diferencial gradiente en las coordenadas correspondientes† ,
∂ ∂ ∂
∇ ≡ ı̂ + ̂ + k̂ ,
∂x ∂y ∂z
dU (~r) ≡ ∇U (~r) · d ~r ,
relación válida en general, independiente del sistema de coordenadas. Entonces, es directo encontrar
una relación que explı́citamente define, de todas las fuerzas F~ , las denominadas conservativas
se calcula a partir de
∂U (x, y, z)
Fx(c) (x, y, z) = − ,
∂x
∂U (x, y, z)
Fy(c) (x, y, z) = − ,
∂y
∂U (x, y, z)
Fz(c) (x, y, z) = − . (4.-20)
∂z
En otros sistemas de coordenadas, la fuerza conservativa se calcula en forma análoga. Por ejemplo,
en coordenadas cilı́ndricas, la proyección de una fuerza conservativa según su base de referencia
indica
F~ (c) (~r) = Fρ(c) (ρ, θ, z) ρ̂ + Fθ(c) (ρ, θ, z) θ̂ + Fz(c) (ρ, θ, z) k̂ ,
con lo cual, al usar la expresión correspondiente para el operador gradiente, se establece que
∂U (ρ, θ, z)
Fρ(c) (ρ, θ, z) = − ,
∂ρ
1 ∂U (ρ, θ, z)
Fθ(c) (ρ, θ, z) = − ,
ρ ∂θ
∂U (ρ, θ, z)
Fz(c) (ρ, θ, z) = − . (4.-21)
∂z
Por supuesto, es notable observar como la complejidad de la fuerza conservativa puede obtenerse de
una única función escalar, simplificando notablemente la descripción de la fı́sica correspondiente.
Para tener una idea de lo caracterı́stico asociado a una fuerza conservativa se puede tomar, por
ejemplo, una fuerza constante F~0 , constante en magnitud y dirección. En la clase previa verificamos
que el trabajo realizado por ella es independiente de la trayectoria seguida por un objeto entre dos
puntos y serı́a simple determinar la función energı́a potencial asociada (lo haremos más adelante
explı́citamente). Otro par de ejemplos pueden resultar interesantes, como se muestra en Fig. 4.5.
Son casos de fuerzas que actúan en un plano ({x, y} por ejemplo) para tener una visualización de
ellas.
El primer caso trata de una fuerza radial, lineal (∼ ~r), atractiva o repulsiva, que se muestra en
el lado izquierdo del gráfico. Las flechas, a través de su tamaño y dirección, indican la magnitud
y dirección que la fuerza tiene. Corresponde a una fuerza conservativa, resultado comprobable
calculando el trabajo para cualquier trayectoria cerrada. El ejemplo al lado derecho del gráfico
(∼ ~r × k̂, con k̂ perpendicular al plano {x, y}) es también una fuerza proporcional a la distancia
al origen pero su dirección cambia continuamente, con el campo de fuerzas rotando alrededor del
eje k̂. Se trata de una fuerza no–conservativa. Podemos, tentativamente, concluir que las fuerzas
conservativas se caracterizan por no rotar.
~ ~ ~r
F ~ ~ ~r ^k
F
+
20 20
10 10
0 0
- 10 - 10
- 20 - 20
- 20 - 10 0 10 20 - 20 - 10 0 10 20
• El trabajo realizado por una fuerza conservativa a lo largo de una trayectoria cerrada (C)
es nulo. En efecto, considerando dos puntos arbitrarios A y B sobre dicha trayectoria, se
tiene
I Z ~
rB h i Z ~
rA h i
F~ (c) · d ~r = F~ (c) · d~r + F~ (c) · d~r ,
C ~
rA C ~
rB C
Este resultado muestra que el trabajo realizado por la fuerza conservativa para ir de
A a B es igual a menos el trabajo realizado para ir de B a A, independiente de las
trayectorias seguidas,
(C) (C)
WA→B = − WB→A , ∀C .
• Una fuerza conservativa es irrotacional. Esto significa que la acción del operador diferencial
rotor sobre la fuerza produce un vector nulo. Para verificarlo, basta considerar la definición
del operador rotor al actuar sobre una función vectorial diferenciable G. ~ En coordenadas
cartesianas se tiene
ı̂ ̂ k̂
~ ≡
∂ ∂ ∂
∇×G ∂x ∂y ∂z ,
G G G
x y z
~ En forma explı́cita, el
donde (Gx , Gy , Gz ) son las componentes cartesianas del vector G.
~
rotor de G significa,
~ ≡ ı̂ ∂Gz ∂Gy ∂Gx ∂Gz ∂Gy ∂Gx
∇×G − + ̂ − + k̂ − .
∂y ∂z ∂z ∂x ∂x ∂y
4.2 Fuerzas conservativas 143
dU = − dW = − dW 0 = 0 ,
concluyéndose que
F~ (c) · ( d~r − d~r 0 ) = 0 .
‡
La acción del rotor sobre un vector que se expresa como gradiente de una función escalar es siempre nula. Esto surge
del hecho que el operador ∇ × ∇ es nulo,
∂2 ∂2 ∂2 ∂2 ∂2 ∂2
∇ × ∇ ≡ ı̂ − + ̂ − + k̂ − ,
∂y ∂z ∂z ∂y ∂z ∂x ∂x ∂z ∂x ∂y ∂y ∂x
≡ 0.
144 Trabajo y energı́a
Fx(c) = f (r) x ,
Fy(c) = f (r) y ,
Fz(c) = f (r) z ,
p
con r = x2 + y 2 + z 2 la magnitud del radio vector ~r. Calculando el rotor de la
fuerza central se comprueba que es nulo. En el caso que la fuerza central tenga como
foco un punto arbitrario ~r0 en el espacio,
Para ilustrar la relación entre la función energı́a potencial y la fuerza que de ella se deriva,
en Fig. 4.7 está graficado una función U (x, y) caracterizada por un monte y una depresión
con respecto a un nivel de referencia U (0, 0) = 0. Los detalles de la función no son, por
ahora, relevantes. Al lado derecho de la figura se indica la fuerza obtenida al aplicar
el operador diferencial gradiente a la función escalar (F~ = − ∇U ). La distribución de
flechas (representando magnitud y dirección de la fuerza) indica que a partir del monte,
las fuerzas apuntan en la dirección descendente, salvo en la cima del monte donde la
fuerza es nula. Por otra parte, al acercarse al centro de la depresión, la fuerza siempre
apunta hacia el punto donde la depresión es mı́nima. Observar que la distribución de
fuerzas puede curvarse pero no rota, verificando que la fuerza calculada es conservativa
(∇ × F~ = 0). En términos de la dinámica de una partı́cula sometida a F~ en el plano
{x, y}, la Fig. 4.7 proporciona una idea gráfica del tipo de movimiento que experimentará,
según las condiciones iniciales que tenga. En particular, puede quedar atrapada en la
depresión si no tiene la rapidez suficiente como para superar el efecto de la fuerza que
trata de confinarla en esa zona del espacio. En la zona del espacio alejada del monte y el
valle la fuerza tiende a anularse y la partı́cula viajarı́a con velocidad uniforme.
4.2 Fuerzas conservativas 145
U(x,y)
¢
y ~
F =- U
y
x
x
Computed by Wolfram|Alpha
Ejemplos de las primeras han sido discutidos previamente. Entre las fuerzas no conservativas
se reconocen a las fuerzas de roce viscoso y deslizante, ambas del tipo disipativas que realizan
un trabajo negativo sobre una partı́cula (W < 0) durante el movimiento. Las fuerzas de
ligazón tienen como caso tı́pico a las fuerzas normales que una superficie ejerce sobre un
cuerpo, restringiendo el movimiento y permaneciendo ortogonal a la trayectoria. En general,
son las fuerzas no conservativas quienes se caracterizan por realizar un trabajo que depende
de la trayectoria seguida. Las fuerzas de ligazón no contribuyen al trabajo.
Ahora es posible establecer un resultado de amplio interés. La variación infinitesimal de la
energı́a cinética que experimenta una partı́cula bajo la acción de la fuerza F~ es igual al trabajo
infinitesimal que ésta ejerce sobre ella a lo largo de una trayectoria (C),
h i
dK = F~ · d~r ,
C
h i h i
= F~ (c) · d~r + F~ (nc) · d~r ,
C C
h i
al recordar que F~ (lig) · d~r = 0. Entonces, la condición de fuerza conservativa para F~ (c)
C
permite establecer que h i
d [ K + U ] = F~ (nc) · d~r ,
C
146 Trabajo y energı́a
es decir, la variación de la energı́a cinética más potencial de una partı́cula es igual al trabajo
infinitesimal hecho sobre ella por la fuerza no conservativa según una trayectoria particular
(C). Introduciendo una magnitud E que mide la energı́a mecánica total de la partı́cula,
E = K +U ,
pk 2
k~ 1
= + U (~r) = 2 m k~v k 2 + U (~r) ,
2m
e integrando entre los puntos A y B según la trayectoria (C), se tiene
(C)
E( ~rB ) − E( ~rA ) = W~r →~
rB .
A
El resultado establece que la variación de la energı́a mecánica total entre dos puntos es igual
al trabajo realizado por las fuerzas no conservativas sobre la partı́cula al ir de un punto al
otro a lo largo de una trayectoria especı́fica (C). Cuando sólo existen fuerzas conservativas
presentes, se concluye que la energı́a mecánica total E es una cantidad conservada durante el
movimiento o constante de movimiento,
E( ~rB ) = E( ~rA ) = E .
• Ecuación de movimiento.
Es interesante verificar que la ecuación de movimiento de una partı́cula sometida a fuerzas
conservativas F~ (c) se recupera a partir de la conservación de la energı́a mecánica E. Ası́,
se tiene un enfoque alternativo para la descripción del movimiento.
Considerar,
E = 21m p~ · p~ + U (~r) .
Como la energı́a es conservada, su derivada temporal es nula,
Ė = 1
m p~˙ · p~ + ∇U · ~v = 0 ,
concluyéndose que h i
p~˙ + ∇U · p~ = 0 .
Reconociendo que para una fuerza conservativa ∇U = − F~ (c) , entonces para todo
momentum p~ necesariamente debe cumplirse,
p~˙ = F~ (c) ,
~g
R
• Un ejemplo
Se construye un péndulo amarrando una masa m al extremo de una cuerda ideal de largo
L. El otro extremo de la cuerda se amarra en el punto superior de un disco colocado
verticalmente, de radio R (R < Lπ ), como se muestra en la figura. Encontrar la ecuación
de movimiento del péndulo. Determine la frecuencia de las oscilaciones pequeñas.
Solución
con lo cual la tasa de variación temporal de ρ se relaciona con la rapidez que el punto P 0
~v = [ L − R θ ] θ̇ θ̂ .
U ( θ ) = − m g [ ρ sen θ + R ( 1 − cos θ ) ] .
U(µ)
mg
° = 3¼
¼ ° = 2¼
2
° = ¼ µ
2R
° = L
R
con E la constante de movimiento determinada por las condiciones iniciales del problema.
La ecuación de movimiento para la coordenada θ se obtiene derivando la relación previa
con respecto al tiempo y haciendo las simplifaciones correspondientes,
( L − R θ ) θ̈ − R θ̇ 2 − g cos θ = 0 .
significa que
L π 3π
θe =
, y ,
R 2 2
son puntos de equilibrio. Estudiando el valor de la segunda derivada de la energı́a
potencial con respecto a θ,
d 2U
= m g [ R cos θ + ( L − R θ ) sen θ ] ,
dθ 2
en los puntos de equilibrio, se concluye que sólo para θe = π2 la segunda derivada
es positiva y se tiene un punto de equilibrio estable. Este resultado coincide, por
supuesto, con lo que intuitivamente se espera al observar el movimiento del péndulo.
La ecuación que describe las pequeñas oscilaciones de la partı́cula en torno al punto
de equilibrio estable se puede obtener de la ecuación de movimiento general, haciendo
las aproximaciones adecuadas‡‡ . Para ello, basta considerar que alrededor de θe la
rapidez angular es muy pequeña a primer orden (θ̇ ≈ 0). Entonces, la ecuación de
movimiento se simplica a
g sin θe
θ̈ + ( θ − θe ) = 0 ,
L − R θe
después de expandir en serie de Taylor alrededor de θe = π2 . Esta ecuación describe
un movimiento armónico simple, de frecuencia angular
s
g sin θe π
Ω= , θe = ,
( L − R θe ) 2
relativa al valor que se le asigna en un punto arbitrario del espacio, tal indeterminación no afecta a
las fuerzas que de ella se derivan.
La función U (~r) se obtiene por integración directa. Tomando cualquier trayectoria (C) que parte
desde un punto de referencia (~rref ) hasta un punto genérico ~r, como se indica en Fig. 4.8, y evaluando
el trabajo hecho por la fuerza a lo largo de la trayectoria se tiene,
h i
[ ∇U (~r) · d~r ]∀ C = − F~ (c) (~r) · d~r .
∀C
~ ~
F
(c)
~
F
(c)
~
F
(c)
Considerando que ∇U (~r) · d~r = dU e integrando desde la posición inicial ~rref a la final ~r se obtiene,
Z ~
r h i
U ( ~r ) = U ( ~rref ) − F~ (c) (~r 0 ) · d ~r 0 .
~
rref ∀C
Esta expresión hace explı́cito que el valor de la energı́a potencial en un punto cualquiera es relativa
a un valor de referencia U ( ~rref ) escogido arbitrariamente. Sin embargo, la diferencia de energı́a
potencial entre dos puntos tiene un significado fı́sico preciso en términos del trabajo total realizado
por la fuerza para mover una partı́cula entre dichos puntos,
Casos particulares
U(x,y)
y
y
1.0
y
0.5
0.0
x
x - 0.5
- 1.0
La función energı́a potencial, que toma la forma de una montura, es parabólica según los
ejes x e y, pero de distinto signo. La fuerza conservativa varı́a su comportamiento según
que dirección se trate: según el eje x actúa como una fuerza atractiva lineal, mientras
que según el eje y es linealmente repulsiva. La fuerza es nula en el origen.
= U (zref ) − f0 ( z − zref ) .
En lo esencial, el resultado indica que salvo una constante indeterminada (U (zref )+f0 zref ),
la función energı́a potencial varı́a linealmente con la distancia z. Eligiendo, por ejemplo,
zref = 0 como nivel de referencia con respecto al cual se mide la energı́a potencial y
asignando un valor U (zref ) = 0 a la energı́a potencial en ese nivel, entonces la energı́a
potencial referida a dicho nivel es
U (z) = − f0 z .
- Aplicación
El resultado previo es directo de aplicar a la fuerza de gravedad que actúa sobre una
partı́cula de masa constante m en la superficie terrestre. Haciendo coincidir el origen
152 Trabajo y energı́a
del sistema de coordenadas con la superficie terrestre, tal que zref = 0 y el eje k̂ que
apunta alejándose de la tierra, se tiene que
f0 = − mg ,
U (z) = mg z ,
obteniéndose,
U(~r)
~ (c)
F
U ref
~r
O
~rref
C
Z ~
r
U (~r) = U (~rref ) − f (r0 )dr0 ,
~
r
ref
∂U
f (r) = − .
∂r
Integrando esta ecuación se recupera el resultado para U (r).
Casos frecuentemente estudiados corresponden a
f (r) = Cn r n , n entero ,
k
El gradiente de una función escalar U (~r), en coordenadas esféricas {r, θ, φ}, es
∂U 1 ∂U 1 ∂U
∇U (r, θ, φ) = r̂ + θ̂ + φ̂ .
∂r r ∂θ r sin θ ∂φ
En el caso de fuerzas centrales,
∂U ∂U
=0 y =0,
∂θ ∂φ
concluyéndose que no existe variación de U en las variables angulares polar (θ) y azimutal (φ).
154 Trabajo y energı́a
◦ Fuerza lineal.
Corresponde al caso n = 1, es decir, F~lineal (c) = flineal (r) r̂ con el factor de forma
flineal (r) = C1 r. La energı́a potencial es, en este caso,
h i
Ulineal (~r) = Ulineal (~rref ) − 21 C1 r2 − rref
2 ,
una función que depende cuadráticamente con la distancia. Tomando el origen como
coordenada de referencia (rref = 0) y un valor nulo para la energı́a potencial en ese
punto (Ulineal (~rref ) = 0), entonces
flineal
Ulineal
f @ Ulineal
=
2 C1 lineal @r 2 C1
C1 C1
0 0
1 2 r 1 2 r
- C1 - C1
Figura 4.11: Factor de forma y energı́a potencial para fuerza lineal atractiva.
U ~ r2
U ~ r2
Superficies equipotenciales
2
y y 0
-1
-2
-2 -1 0 1 2
x
x
* Resorte ideal
El resorte ideal de largo natural L y constante elástica k es un ejemplo natural de
una fuerza lineal. La salvedad está en que el punto de de fuerza nula corresponde
al largo natural y no al origen de coordenadas. En efecto, recordando que la
fuerza ejercida por el resorte sobre un objeto, cuando está fijo en un extremo y
ligado al objeto en el otro, es
F~resorte = − k (r − L) r̂ ,
1
rref = L y Uresorte (L) = 0 =⇒ Uresorte (r) = 2 k (r − L) 2 .
Este es una resultado general para el resorte que indica que su energı́a potencial
es proporcional al cuadrado de la elongación que sufre con respecto a su posición
de equilibrio.
156 Trabajo y energı́a
U ~ (r -L ) 2
~ - (r -L ) r^
F ~
2
-1
-2
-2 -1 0 1 2
◦ Fuerza gravitacional.
Considerar dos masas M y m y un sistema de coordenadas tal que su origen
coincida con la masa M que, por simplicidad, se supone fijo. La fuerza gravitacional
gravitacional que actúa sobre la masa m ubicada a la distancia r de M y en la
dirección radial r̂, es
Mm
F~m (M ) = − G 2 r̂ .
r
Comparando con el caso general se concluye que gravitación corresponde a una fuerza
conservativa del tipo n = −2 y C−2 = − G M m. Debido a que C−2 < 0, entonces el
factor de forma de la fuerza gravitacional también lo es,
C−2
F~m (M ) = fG r̂ , con fG = .
r2
UG (rref → ∞) = 0 .
4.3 Energı́a potencial 157
1 2 r 1 2 r
0 0
- C -2 - C -2
-4 C -2 -4 C -2
= 0
0
1 r
RT
= 0
Este resultado difiere en una constante del valor obtenido previamente. La discre-
pancia se debe (Fig. 4.16) a las diferentes elecciones realizadas para determinar
una energı́a potencial de referencia. En efecto, si para esta aplicación particular
se cambia el criterio utilizado anteriormente y se toma
UG (rref = RT ) = 0 ,
4.4 Movimiento y energı́a potencial 159
Se toma la raı́z positiva ya que por definición k~v k ≥ 0. Fluye de la relación que el movimiento de la
partı́cula sólo es posible en aquella zona del espacio donde
E ≥ U ( ~r ) ,
* Velocidad de escape
Para ilustrar la relación entre rapidez y energı́a potencial, considerar una partı́cula de masa
m en un campo de fuerza conservativo y atractivo, que inicialmente se ubica en el punto
identificado por el vector posición ~r0 . Interesa conocer la mı́nima velocidad (velocidad de
escape) que debe tener para nunca regresar al punto de partida.
Por tratarse de una fuerza conservativa F~ (c) , es posible definir una función energı́a potencial
U (F~ (c) = − ∇U ) y una energı́a mecánica total E conservada en todo el espacio,
1 1
E(~r0 ) = E(~r) =⇒ 2 m k~v (~r0 )k 2 + U (~r0 ) = 2 m k~v (~r)k 2 + U (~r) .
Para que la velocidad en ~r0 corresponda a una velocidad de escape, se debe exigir que la
fuerza sea una función monótona creciente con la distacia a su foco y que se anule para puntos
infinitamente alejados. Entonces, existe un mı́nimo valor para ~v (~r0 ) para que la partı́cula
supere la acción de frenado de la fuerza y tienda a detenerse en puntos muy alejados del foco
de atracción (y no puede regresar porque la fuerza es nula en ese punto),
El resultado indica que vesc existe en la medida que U (∞) > U (~r0 ).
160 Trabajo y energı́a
Claramente, no hay mayor información que se pueda obtener para los diferentes grados de libertad
del movimiento que se describe. Por ello, simplificaremos el enfoque, analizando casos simplificados.
* Movimiento en 1–dim
Llamemos q a la variable, con dimensiones de longitud, que describe el grado de libertad
relevante para el movimiento de una partı́cula de masa m. Esto significa asociar q a una de las
coordenadas que describe el grado de libertad de interés, teniendo cuidado con las variables
angulares que deben multiplicarse por una longitud constante y atingente a la descripción del
problema correspondiente. Por ejemplo,
x, y, z , coordenadas cartesianas ,
q identificable con ρ, (R θ), z , coordenadas cilindricas ,
etc.
4.4 Movimiento y energı́a potencial 161
~q˙ = q̇ q̂ ,
donde ± indica que q̇ puede ser p positivo o negativo dependiendo del sentido en que se mueve la
partı́cula relativo a q̂ (q̇ = ± k~v k 2 ). El movimiento es posible para E ≥ U (q). Por lo tanto,
dependiendo de U (q) y del valor de la energı́a E, la partı́cula está restringida a moverse en un
rango de valores de q. La identificación de la energı́a potencial es con la fuerza conservativa
que produce el movimiento y que, en este caso, se relacionan por†
d U (q)
F~ (c) (q) = F (c) (q) q̂ −→ F (c) (q) = − .
dq
q
± dq 0
Z
t= q .
2
q0
m [ E − U (q 0 ) ]
En principio, todo lo que resta es identificar el potencial U (q) e integrar para obtener q(t),
haciendo uso de técnicas analı́ticas o numéricas si es (a menudo) necesario.
- Oscilador armónico
Considerar una masa m ligada a un resorte de constante elástica k y largo natural L,
como se indica en Fig. 4.17. El resorte ejerce sobre la masa una fuerza lineal proporcional
al desplazamiento con respecto al punto de equilibrio qE = L,
F~L (q) = − k ( q − L ) q̂ .
†
La derivada parcial asociada al operador gradiente coincide con la derivada total en 1–dim,
∂ U (q) d U (q)
∇U (~r) −→ q̂ ≡ q̂ .
∂q dq
162 Trabajo y energı́a
U(q)
O L q0 q
1
Uresorte = 2 k (q − L)2 .
Las condiciones iniciales del movimiento de la masa son q(0) = q0 y q̇(0) = 0, es decir, el
resorte se elonga una cantidad (q0 − L) y se suelta desde el reposo. Con esta información
se determina la energı́a mecánica total del sistema masa–resorte,
1
E =K +U =⇒ E= 2 m q̇(0) + 12 k [ q(0) − L ] 2 = 1
2 k [ q0 − L ] 2 .
k
Introduciendo la frecuencia propia del resorte como ω 2 = m, la relación a integrar es
q
dq0
Z
±ωt = p ,
q0 ( q0 − L )2 − ( q 0 − L )2
q(t) = L + ( q0 − L ) cos ω t ,
U(q)
1.5
E1 > 0
1.0
0.5
E2 > 0
2 4 6 8 10
q
- 0.5
E3 < 0
Computed by Wolfram|Alpha
+ Puntos de equilibrio
Corresponden a las coordenadas en las que la función energı́a potencial presenta
extremos (máximos o mı́nimos, globales o locales). Si llamamos qE al punto en que
la función tiene un extremo, cada punto de equilibrio queda definido por
d U (q)
=0,
dq q=q
E
[ q̇(q) ]q=q ⇐⇒ U (q = qr ) = E .
r
zona permitida confina el movimiento de la partı́cula a esa zona, oscilando entre los
puntos de retroceso. Se dice que la partı́cula está ligada a esa zona del espacio por la
fuerza presente, no pudiendo liberarse de ese confinamiento salvo que un mecanismo
externo le proporciona la energı́a adicional que necesita para liberarse.
Finalmente, también es posible el movimiento para una energı́a mecánica E = E 3 < 0.
Se trata de una partı́cula también ligada en el potencial, con un movimiento oscilatorio
alrededor del punto de equilibrio. Este caso podrı́a ser un análogo mecánico para los
electrones ligados al núcleo de un átomo por la fuerza eléctrica. Como se observa, las
partı́culas ligadas requerirı́an una cantidad considerable de energı́a para liberarse. A gran
escala, el movimiento de planetas alrededor de un centro de fuerzas gravitacionales, con
q describiendo la coordenada radial, queda representado por una situación similar.
- Estabilidad
La discusión previa sugiere el estudio del movimiento en la zona cercana a un extremo
del potencial. Como la fuerza conservativa deriva de la función energı́a potencial, los
puntos de equilibrio corresponden a puntos en que la fuerza se anula.
En general, se dice que una partı́cula está en equilibrio en un punto del espacio si la
resultante F~ de todas las fuerzas que actúa sobre ella es nula en ese punto. Corresponden
a los puntos de equilibrio y se determinan a partir de
h i
F~ (~r) =0,
~
r =~
r
E
por
dF
m q̈ − (q − qE ) ' 0 ,
dq q=q
E
U(q)
1.5
estable
1.0
0.5
qE
2 4
qE
6 8 10
q
- 0.5
Computed by Wolfram|Alpha
inestable
Figura 4.19: Puntos de equilibrio estable e inestable.
Equilibrio estable
Cuando se tiene que
d 2 U (q)
dF
<0 =⇒ >0,
dq q=q d2 q q=q
E E
Equilibrio indiferente
Es lo observado cuando
d 2 U (q)
dF
=0 =⇒ =0,
dq q=q
d2 q q=q
E E
F~ (c) = − kx x ı̂ − ky y ̂ ,
1
U (x, y) = 2 kx x 2 + 12 ky y 2 .
1 1
k x2 + y2 , ρ2 ,
U (x, y) = 2 =⇒ U (ρ) = 2
U(x,y) U(x,y)
y y
x x
a x
~r
F~ (~r) = f (r) r̂ , donde r̂ = .
k~rk
Observar que la conservación de la magnitud del momentum angular permite relacionar las
variables radiales y angulares. Usando dicha relación, la expresión para la conservación de
la energı́a se simplifica, describiendo la dinámica de un movimiento en 1–dim (usualmente
la coordenada radial),
h2
1 2
2 m ρ̇ + ρ 2 + U (ρ) = E .
h2
Uef ec (ρ) = U (ρ) + 12 m ,
ρ2
Mm
U −→ UG (ρ) = − G ,
ρ
con M la masa que atrae a la partı́cula m. En Fig, 4.22 se grafica este potencialp en función
de las coordenadas (x, y) en el plano y, por supuesto, la coordenada radial ρ = x 2 + y 2 .
Se destaca la simetrı́a del potencial radial y su comportamiento singular en el origen y
anulándose en el infinito. El movimiento de una partı́cula en el potencial depende de las
condiciones iniciales. Si parte del reposo o con una velocidad inicial que es sólo radial (su
momentum angular inicial es nulo y por consiguiente h = 0), la partı́cula acelera hacia
el centro de la fuerza. Si la velocidad inicial tiene componentes radial y tangencial, el
movimiento es más interesante con varias opciones que se deja al lector investigar.
UG (x,y)
G
y Uefec
Barrera
centrifuga
O
r
x
UG
ρ(t) se tiene,
Z t
h h
θ̇ = =⇒ θ(t) = θ0 + dt0 ,
2
ρ (t) 0
ρ 2 (t0 )
donde θ0 es el ángulo que define la condición inicial de la rotación. Alternativamente, se
puede calcular la trayectoria ρ(θ) que sigue la partı́cula en el plano a partir de ρ̇(t),
dρ 0
Z ρ
dρ h dρ
ρ̇(t) = θ̇ = 2 =⇒ θ = θ0 + h q
dθ ρ dθ 0 ρ0 2 m 2
E − Uef ec (ρ 0
CAPITULO 5
Oscilaciones
Fenómenos oscilatorios† son parte natural del mundo fı́sico. Sus causas tienen un origen mecánico,
electromagnético o nuclear, dependiendo del sistema bajo estudio. Su comprensión, a desarrollar en
las próximas clases, estará motivada por el análisis de sistemas mecánicos simples que sirven para
caracterizar y comprender un fenómeno de caracterı́sticas universales.
Para motivar el tema se puede recordar que el estudio del movimiento de una partı́cula en torno a
los puntos en que la fuerza neta que sobre ella actúa se anula, indica la posibilidad de oscilaciones
alrededor de la posición de equilibrio, dependiendo de las caracterı́sticas que la fuerza presenta.
El carácter oscilatorio del movimiento será posible en la medida que la fuerza neta sea restitutiva,
es decir, su dirección apunta siempre hacia el punto de equilibrio. Esta propiedad se presenta
frecuentemente en sistemas fı́sicos diversos y asociada a su estabilidad alrededor del equilibrio. La
naturaleza de la fuerza restitutiva no está limitada a una naturaleza mecánica. De hecho, es la fuerza
electromagnética quien es fundamental en dar una estructura a los medios materiales y permitir su
oscilación alrededor de las configuraciones de equilibrio que se producen. Otro tanto ocurre con las
fuerzas nucleares, responsables de la estructura del núcleo de los átomos.
Las condiciones que deben cumplirse para potenciar la presencia del fenómeno oscilatorio pueden
resumirse en:
* perturbado del equilibrio, el sistema tiene mecanismos de restitución que favorecen su oscilación
(en forma simple o compleja, periódica o no), en el tiempo, en torno a su situación inicial de
equilibrio;
†
Videos motivacionales:
Péndulo simple
Péndulo doble
Sistema masa-resortes
Simulación del agua - Dinámica molecular
Oscilaciones libres de la Tierra
Copa de cristal - resonancia
Puente Tacoma - resonancia
172 Oscilaciones
* los sistemas pueden ser forzados externamente, permitiendo la activación de sus modos de
oscilación;
5.1.1. Simplificaciones
Es oportuno introducir algunas simplificaciones para una mejor comprensión del fenómeno a estudiar.
* Sobre la fuerza
Fx (x, y, z) → Fx (x)
~ ~
F (~r, ~v , t) −→ estática −→ F (~r) −→ usual −→ F (x, y, z) → Fy (y)
y
Fz (x, y, z) → Fz (z)
La lógica de aproximar la interacción por una fuerza estática expresada, por simplicidad,
en términos de sus componentes cartesianas (Fx , Fy , Fz ), representa una forma simple y
razonablemente realistas de describir el mecanismo responsable de las oscilaciones. Más aún,
supondremos que cada conponente depende sólo de la coordenada asociada al eje respectivo,
desacoplando ası́ el movimiento según cada uno de los ejes de la base de referencia.
* La aproximación lineal
La situación que analizamos se muestra en la Fig. 5.1. Suponiendo que la fuerza tiene un punto
de equilibrio en ~re = xE ı̂ + yE ̂ + zE k̂ y queremos estudiar el movimiento de una partı́cula
en ese entorno, resulta razonable expandir cada una de las componentes de la fuerza en esa
región. Para la componente según el eje ı̂,
(l)
d2 Fx (x)
d Fx (x) 1
Fx (x) ' Fx (xE ) + (x − xE ) + (x − xE )2 + . . . ,
dx x=x
2! d x2 x=x
E E
Por supuesto, la derivada de la fuerza indicada debe ser negativa para tener una aproximación
lineal a la fuerza que siempre atraiga la partı́cula hacia el punto de equilibrio estable.
Un análisis similar puede hacerse para establecer las componentes Fy(l) y Fz(l) de la fuerza
lineal atractiva. Resumiendo,
(l)
Fx = − kx (x − xE )
F~ ≈ F~ (l) = Fx(l) ı̂ + Fy(l) ̂ + Fz(l) k̂ con F (l) = − ky (y − yE )
y(l)
Fz = − kz (z − zE )
- Ejemplo
Analizar la diferencia entre dos fuerzas lineales restitutivas que actúan en el plano {x, y},
cuando en una de ellas las constantes elásticas son iguales (fuerza lineal central) y en la
otra son diferentes. El resultado se muestra en en Fig. 5.2.
y y
En una interpretación mecanicista, la fuerza lineal serı́a el producto de la acción de tres resortes
diferentes, de largos nulos (un exceso del lenguaje, pero que sin embargo ayuda a recordar el
mecanismo de funcionamiento de estas fuerzas), según cada uno de los ejes coordenados.
después de haber introducido una frecuencia angular asociada a la acción de cada componente
de la fuerza,
r r r
kx ky kz
ωx = , ωy = , ωz = .
m m m
m ẍ = − k x =⇒ ẍ(t) + ω 2 x(t) = 0 .
Esta es una de las ecuaciones más repetidas y por ello conocidas en el estudio de fenómenos en
que la variable fı́sica (el desplazamiento en nuestro caso) describe un movimiento oscilatorio. Su
solución‡ , para condiciones iniciales x(0) = x0 , ẋ(0) = ẋ0 , es
r 2
2 + ẋ0
0
A = x 0 ω ,
x(t) = A0 cos (ω t + φ0 ) con
φ = arctan − ẋ0 .
0 ωx 0
En Fig. 5.3 se grafica la solución armónica simple x(t), destacando la amplitud A0 y el desfase φ0
que establecen las condiciones iniciales.
x(t)
A0
A0
O
!t
Á 0
!¿
La perioricidad temporal de la solución indica que existe un perı́odo τ después del cual el desplaza-
miento se repite espacialmente,
r
2π m
x(t + τ ) = x(t) =⇒ τ= = 2π .
ω k
Ası́mismo, se puede introducir la frecuencia ν que cuenta el número de ciclos que ocurren en un
punto, cantidad inversamente proporcional al perı́odo τ ,
r
1 ω 1 k
ν= = = .
τ 2π 2π m
‡
Supongo conocidos los métodos de solución de ecuaciones diferenciales lineales, homogéneas y de coeficientes constantes.
176 Oscilaciones
1 1 1
m ẋ 2 + ω 2 x 2 = m ω 2 A02 = k A02 ,
E= 2 2 2
K, U
-A - x
0 0 O x A
0 0 x
Figura 5.4: Diagrama de energı́a.
* Diagramas de fase
El estado de movimiento de la partı́cula, oscilando armónicamente debido a la fuerza restitutiva
lineal, que hemos estudiado en una dimensión, está completamente especificado como función
del tiempo una vez que se han especificado, en un instante t0 , las condiciones iniciales x(t0 ) y
ẋ(t0 ). Entonces, se puede pensar que las cantidades x(t) y ẋ(t) corresponden a las coordenadas
de un punto P (x, ẋ) en un espacio bi–dimensional, el espacio de fase. En dos dimensiones,
el espacio de fase corresponde a un plano, el plano de fase. Ahora, a medida que el tiempo
varı́a, el estado de movimiento (P ) de la partı́cula oscilante sigue una trayectoria de fase en el
plano de fase, volviendo al punto de partida debido a la perioricidad del movimiento armónico.
Además, como el estado de movimiento inicial fija la energı́a mecánica E del sistema, este
valor caracteriza a la trayectoria de fase, existiendo en consecuencia diferentes trayectorias
para diferentes valores de E. Siendo E una constante de movimiento, se concluye que las
trayectorias no pueden cruzarse para evitar una violación al principio de conservación de la
energı́a mecánica.
Se llama diagrama de fase del sistema oscilante a la totalidad de las posibles trayectorias de
fase, descibiendo ası́ todos sus posibles estados de movimiento.
5.2 Oscilaciones libres 177
ẋ 2 x2
2E
+ 2E
=1,
m k
ecuación que representa, en general, a una familia de elipses con la energı́a E el parámetro
que la describe. Una forma alternativa de escribir la trayectoria es
2
ẋ 2E
+ x 2 = A02 = ,
ω k
donde recordamos que ω es la frecuencia caracterı́stica del sistema oscilante y A0 la amplitud
de su oscilación.
.
x
E
O x
En Fig. 5.5 se muestra el diagrama de fase del sistema bajo estudio. Además de las trayectorias
elı́pticas, se destaca el sentido de circulación del punto que representa el estado de movimiento
para una energı́a especı́fica: siempre ocurre en el sentido de los punteros del reloj, conclusión
que fluye de la ecuación de conservación de la energı́a.
En problemas de mayor complejidad, puede ser recomendable obtener x(t) y ẋ(t) como solución
de la ecuación de movimiento y usar estas soluciones paraméricamente en el tiempo t para
obtener las trayectorias de fase en el plano de fase. La desviación que pueda existir del
comportamiento elı́ptico de la trayectoria es indicatorio de la presencia de otra fı́sica que
modifica el comportamiento de una oscilación libre.
ẍ + ωx 2 x = 0 ,
m ~r¨ = F~ (l)
=⇒
ÿ + ωy 2 y = 0 ,
con ωx y ωy las respectivas frecuencias angulares. La solución, en este caso, es simple de escribir
generalizando el resultado obtenido para el movimiento unidimensional,
ẋ ẏ
φ0x = arctan − ω 0x , φ0y = arctan − ω 0y .
x 0 y 0
El momento angular de la partı́cula con respecto al origen ~`O = m ~r × ~r˙ no se conserva para el
caso general de la fuerza de restitución lineal. La razón es que F~ (l) ejerce torque sobre la partı́cula,
haciéndola rotar en el plano en torno al punto de equilibrio.
La energı́a mecánica total se expresa como la suma de la energı́a mecánica asociada a cado grado de
libertad del movimiento,
1 2 ,
Ex = 2 kx A0x
E = Ex + Ey con
Ey = 12 ky A0y2 .
Trayectorias
Analicemos las posibles trayectorias que sigue la partı́cula sujeta a esta fuerza restitutiva lineal pero
de intensidades diferentes según la dirección en que actúa. Es usual expresar la trayectoria a través
de sus ecuaciones paramétricas,
x(t) = A0x cos (ωx t + φ0x ) ,
conocidas usualmente como curvas de Lissajous† . La derivación de una expresión explı́cita para
la trayectoria en el plano, x = x(y), no es evidente. Alternativamente, podemos estudiar el
comportamiento cualitativo que esas trayectorias presentan.
* Trayectorias cerradas
†
Curvas de Lissajous
5.2 Oscilaciones libres 179
Por supuesto que el movimento es periódico según cada uno de los ejes, con perı́odos τx y τy ,
pero la idea es determinar si la perioricidad se proyecta al movimiento compuesto. Imponiendo
la condición de perioricidad, ésta se satisface en la medida que simultáneamente se cumpla
ωx τ = 2 π p , y ωy τ = 2 π q ; p, q enteros ≷ 0 .
En Fig. 5.6 ilustramos las oscilaciones armónicas de las componentes cartesianas del movimiento
cuando la trayectoria que describe es cerrada y r = 2. Para un instante cualquiera t se pueden
identificar la proyección del movimiento según los ejes x e y (puntos negros). Cada uno de los
puntos oscila en el tiempo con la frecuencia caracterı́stica a su eje para que, después de un
tiempo τ , vuelvan a tener las mismas proyecciones originales (la partı́cula volvió a pasar por
el mismo punto en el plano).
x/Ax 0
y/A y0
¿
donde se debe determinar el mı́nimo entero p (ó q) compatible con el número racional r
cuociente entre las velocidades angulares. Por ejemplo,
2π
si r = 2 =⇒ p = 2 , q = 1 , −→ τ = 2 ,
ωx
mismo rsultado que se obtendrı́a de hacer el cálculo a partir de ωy y usar la relación entre las
fecuencias angulares para tener una trayectoria cerrada. Sin embargo, pequeños cambios en la
relación entre las frecuencias altera notablemente el perı́odo del movimiento. Suponiendo que
ωy disminuye ligeramente para una misma ωx y tal que r = 2, 1, entonces
2π
si r = 2, 1 =⇒ p = 21 , ; q = 10 −→ τ = 10 ,
ωx
y/Ay 0 y/Ay 0
y/Ay 0
1 1 1
± = ¼/4
± = 0 ± = ¼/3
-1 1 x/Ax -1
0 1 x/Ax -1
0 1 x/Ax 0
-1 -1 -1
El otro punto a destacar es la fuerte dependencia de estas trayectorias con un desfase inicial
que puede existir entre las oscilaciones según cada eje. Introduciendo el desfase δ = φx0 − φy0 ,
en Fig. 5.7 se muestran dos trayectorias adicionales, con los mismos parámetros que la indicada
en la figura izquierda, pero con desfases de δ = π/3 y π/4. El cambio que sufren las trayectorias
a pesar de estar todas ellas caracterizadas por un mismo perı́odo.
Las curvas de Lissajous pueden, con facilidad, tomar formas más complejas. Para ilustrar el
punto, en Fig. 5.8 se ha grafica una trayectoria cerrada de la misma frecuencia ωx que en
Fig. 5.7, un desfase δ = − π/2 y una relación entre frecuencias angulares de r = 13/6 = 2, 16667.
Es simple observar (y deducir) que la complejidad de las trayectorias dependerá tanto de r
como de los enteros p y q que lo reproducen. Para números enteros grandes, el perı́odo de la
5.2 Oscilaciones libres 181
trayectoria aumenta lo que se refleja en el número de veces que la proyección del movimiento
de la partı́cula oscila según cada eje.
y/Ay 0
-1 1 x/Ax 0
-1
Figura 5.8: Trayectoria cerrada de mayor complejidad.
* Trayectorias abiertas
Las trayectorias abiertas no tienen una caracterización especial. En Fig. 5.9 se grafica la
trayectoria que sigue una partı́cula, en un tiempo finito, cuando las frecuencias angulares ωx y
ωy no se correlacionan de una manera especı́fica como en el caso de las trayectorias cerradas.
Para el gráfico, se ha tomado el valor π (no expresable como el cuociente de dos números
enteros) para r. La trayectoria no muestra perioricidad alguna y, si se le deja evolucionar por
un tiempo suficientemente largo, tiende a copar la superficie correspondiente en el plano.
y/Ay 0
-1 1 x/Ax 0
-1
Figura 5.9: Trayectoria abierta.
* Trayectorias para ωx = ωy = ω
182 Oscilaciones
apuntando siempre al punto de equilibrio ~rE = 0. Las ecuaciones paramétricas del movimiento
se simplifican a
x(t) = A0x cos (ω t + φ0x ) ,
En este caso, se puede eliminar el tiempo de ambas ecuaciones con relativa facilidad. Introdu-
ciendo el desfase previamente mencionado δ = φx0 − φy0 , se puede escribir
y que corresponde a curvas que van desde una recta acotada (por lo tanto es cerrada) a
una circunferencia según el valor que toma el desfase δ. En términos de las coordenadas
normalizadas a la amplitud de sus oscilaciones, x/Ax0 y y/Ay0 , los casos lı́mites ocurren para
δ = 0 (trayectoria es una recta que pasa por el origen) y para δ = π2 (trayectoria es una
circunferencia de radio unitario). Por supuesto, en términos de las coordenadas fı́sicas x e y,
en el primer caso puede cambiar la pendiente de la recta dependiendo del valor relativo entre
las amplitudes; en el segundo caso, la circunferencia se deforma a una elipse con Ax0 /Ay0 su
semieje mayor/menor si Ax0 > Ay0 y viceversa.
y/Ay 0
± = ¼/2 1
± = ¼/3
± = ¼/6
± = 0
-1 1 x/Ax 0
-1
estas trayectorias se deforman dependiendo de los valores relativos entre las amplitudes Ax0
y Ay0 . En las coordenadas indicadas, las trayectorias se deforman desde una recta a una
circunferencia, según el valor de δ. Para desfases entre [ π2 , π], las trayectorias corresponden
a las indicadas pero reflejadas según uno de los ejes de referencia. Por claridad, no se han
graficadoen Fig. 5.10.
El caso general a considerar muestra una fı́sica menos intuitiva. A pesar que el caso tri–
dimensional se trata como una generalización de las situaciones en dimensiones menores, lo
que mantiene una descripción teórica relativamente simple, la obtensión de resultados y su
visualización queda supedita a la capacidad de cálculo numérico disponible. Nuevamente,
el movimiento que ahora experimenta la partı́cula puede entenderse como la superposición
lineal de las oscilaciones armónicas simples que ocurren según los ejes x, y, z. Resumiendo, el
movimiento de la partı́cula de masa m para una fuerza de restitución lineal queda descrito
por el sistema de tres ecuaciones diferenciales escalares, independientes,
ẍ + ωx 2 x = 0 ,
¨ ~
m ~r = F (l)
=⇒ ÿ + ωy 2 y = 0 ,
z̈ + ωz 2 z = 0 .
con ωx , ωy y ωz las respectivas frecuencias angulares. La solución, en este caso, es una simple
generalización de los resultado previos,
~r(t) = A0x cos (ωx t + φ0x ) ı̂ + A0y cos (ωy t + φ0y ) ̂ + A0z cos (ωz t + φ0z ) k̂ .
Las constantes de integración se determinan de las condiciones iniciales en el eje respectivo
(ver caso en dos dimensiones).
La fuerza de restitución ejerce torque sobre la partı́cula, cuando se toma con respecto al origen
de coordenadas, impidiendo tener restricciones al movimiento. Cuando la fuerza de restitución
es central ( las constantes elásticas son iguales), el movimiento queda restringido a ocurrir
en un plano por conservación del momentum angular. Esta situación especial se discutirá
posteriormente.
Trayectorias
No es tema simple tratar de eliminar la variable temporal y obtener una forma analı́tica
para la trayectoria. Sin embargo, la naturaleza armónica del movimiento según los ejes
184 Oscilaciones
* Trayectorias cerradas
Buscamos soluciones con la propiedad de ser periódicas, es decir, después de cada perı́odo
τ la partı́cula pasa, una y otra vez, por el mismo punto y con la misma velocidad. Para
que tal condición sea posible, se debe cumplir
ωx τ = 2 π p , ωy τ = 2 π q , ωz τ = 2 π s ; p, q, s enteros ≷ 0 .
Se concluye que las trayectorias serán cerradas cuando los cuocientes entre las velocidades
angulares satisfacen
ωx p ωy q ωz s 1
= = r1 , = = r2 , = = r3 = , r1 , r2 racionales
ωy q ωz s ωx p r1 r2
Las trayectorias que se obtienen ocurren el espacio y no son, necesariamente, simples de
visualizar. Con el propósito de ilustrar el tema, en Fig. 5.11 se muestra una trayectoria
cerrada que tiene r1 = 1, 25 = 5/4, r2 = 0, 6667 = 4/6 y r3 = 1, 2 = 6/5. La frecuencia
angular ωx = 1 rad/s y φx = π/4, φy = φz = 0. Las amplitudes de las oscilaciones
armónicas fueron elegidas 1, 0 , 1, 3 y 1, 5 en los ejes x, y y z respectivamente. Además, el
cálculo de la trayectoria se ha detenido para un tiempo t justo antes de cerrarse, como
se indica al señalar con una masa negra el punto de partida y una masa gris el punto
de casi retorno al inicio. Pequeños cambios en las amplitudes o en las fases modifican
sustancialmente la trayectoria, resultado que enfatiza la complejidad de la dinámica bajo
estudio.
z
y
C t d b W lf |Al h
* Trayectorias abiertas
El caso general de una partı́cula sometida a una fuerza restitutiva lineal, sin que exista
una relación especı́fica entre las frecuencias angulares de las oscilaciones según los ejes
cartesianos, presenta un desafı́o no menor de visualización de la trayectoria seguida.
Eligiendo una relación entre las frecuencias angulares que especı́ficamente no resulte del
cuociente de dos números enteros, en Fig. 5.12 se grafica la trayectoria de la partı́cula
para diferentes tiempos. La ubicación inicial está señalada por una pequeña esfera de
color negro, con la dirección de la velocidad inicial indicada por la flecha. Para tiempos
breves, se puede distinguir como la partı́cula oscila alrededor del punto de equilibrio (el
origen). Sin embargo, al no existir perioricidad en la trayectoria, ésta empieza a cubrir
todo el espacio el espacio disponible y compatible con la conservación de la energı́a.
z z
t = 10 s y t = 50 s y
x x
C t d b W lf |Al h C t d b W lf |Al h
z
t = 100 s z
y t = 1000 s y
x
x
3
C d parametric
t d b W lf |Al h plot (cos ( t +pi/4)
C t d b W lf |Al h
El resultado deja de manifiesto que h = 0 cuando φ0x = φ0y = φ0z , condición que ocurre
en las tres alternativas ya indicadas. La dirección n̂ queda dada por
1 h i
n̂ = A0y A0z sen (φ0y − φ0z ) ı̂ + A0z A0x sen (φ0z − φ0x ) ̂ + A0x A0y sen (φ0x − φ0y )k̂ .
h
Resumiendo, el tratamiento de la fuerza central se reduce a identificar el plano donde el
movimiento ocurrirá (según las condiciones iniciales) e introducir en ese plano el sistema
de coordenadas más adecuado para describir las trayectorias (genéricamente elipses) que
en él ocurren. Usualmente se asocia la dirección constante n̂ con el eje k̂ 0 de un nuevo
sistema de coordenadas en el cual la fuerza actúa en el plano {ı̂ 0 , ̂ 0 } perpendicular a k̂ 0 ,
(por simplicidad, ~rE = 0). Como la partı́cula oscila usualmente en un medio, puede ser un gas o un
fluido, modelaremos el mecanismo de pérdida de energı́a a través de una fuerza de roce viscoso, no
conservativa, resultado de su interacción con el medio donde se desplaza. En su versión más simple
(la usamos por conveniencia y facilidad de cálculo) se tiene,
F~R(vis) = − c ~vrel ,
donde c : es el coeficiente de roce viscoso y ~vrel la velocidad relativa de la partı́cula con respecto al
medio. Versiones más complicadas de estas fuerzas empı́ricas se expresan a través de la dependencia
con la magnitud de la velocidad relativa elevada a potencias diferentes de 1.
El estudio de oscilaciones libres (debido a fuerza de restitución lineal) amortiguadas (debido a
fuerzas de roce viscoso) significa identificar la dinámica que describe tal sistema. Para una partı́cula
desplazándose en un medio, su ecuación de movimiento toma la forma
Para la fuerza de restitución lineal escogeremos la versión central, con constantes elásticas iguales
según los ejes de un sistema cartesiano, kx = ky = kz = k. El caso de constantes diferentes no
cambia la esencia del fenómeno a describir. Considerando que el medio donde la partı́cula se mueve
está en reposo (~vrel = ~v ), la ecuación de movimiento queda
m ~r¨ = − k ~r − c ~r˙ .
~r¨ + 2 γ ~r˙ + ω 2 ~r = 0 ,
una ecuación diferencial de segundo orden, vectorial, lineal y homogénea. Se destaca que, en ausencia
de amortiguamiento (γ = 0), se recupera la ecuación del oscilador armónico.
La solución a la ecuación de movimiento sigue las técnicas estándares de las ecuaciones diferenciales
una vez que el problema ha sido reducido a ecuaciones diferenciales escalares. Un camino alternativo
es hacer hacer una adivinanza sobre el tipo de soluciones a encontrar. Ası́, por ejemplo, supongamos
~r(t) = e− γ t H(t)
~ ,
~¨
H(t) ~
+ ( ω 2 − γ 2 ) H(t) =0,
~
H(0) = ~r(0) = ~r0 , ~˙
H(0) = ~r˙ (0) + γ ~r(0) = ~r˙0 + γ ~r0 ,
188 Oscilaciones
consecuencias de las condiciones iniciales, posición ~r0 y velocidad ~r˙0 , para el movimiento de la
partı́cula.
Sin entrar todavı́a en los detalles para calcular la función H,~ se puede concluir que el desplazamiento
~r(t) está caracterizado por un factor de amortiguamiento e− γ t que tiende a anular el desplazamiento
~r(t) a medida que el tiempo aumenta. Las oscilaciones se amortiguan de tres formas posibles,
dependiendo de la relación entre ω 2 y γ 2 ,
q
> 0 Ω s = ω 1 − ( ωγ ) 2
(ω 2 − γ 2 ) −→ =0 q
Γs = γ 1 − ( ωγ ) 2
<0
* Amortiguamiento crı́tico
Corresponde al caso en que la frecuencia angular propia iguala a la constante de amortigua-
miento, ω = γ. La ecuación diferencial para H(t) toma la expresión
Ḧ(t) = 0 ,
El tiempo T es siempre mayor que cero, salvo que la velocidad inicial ẋ0 sea nula y en cuyo
caso T = 0. Para conocer el tipo de extremo que tiene la función, se evalúa la segunda derivada
de la función en t = T ,
ẋ0
mı́nimo si ẋ0 < − γ x0
ẍ(T ) = − x0 γ γ + e− γ T =⇒ no tiene si ẋ0 = − γ x0
x0
máximo si ẋ0 > − γ x0
x(t)
.
x > -° x
x 0
0 0
.
x0 = -° x
0
O
t
.
x 0 < -° x
0
El amortiguamiento crı́tico y sus propiedades son de gran utilidad en el diseños que requieren
minimizar las oscilaciones. Un dispositivo que produce el efecto de la fuerza restitutiva
combinado con el amortiguamiento es el sistema resorte–amortiguador que, por ejemplo, se
utiliza en vehı́culos.
- Diagrama de fase
En Fig. 5.14 se grafican diferentes trayectorias que representan la evolución del estado
de movimiento de la partı́cula para diferentes condiciones iniciales. En estos diagramas
de fase, la partı́cula siempre parte del mismo punto x0 como se aprecia en el gráfico.
Debido al amortiguamiento, la partı́cula evoluciona hasta alcanzar su estado de reposo
en el origen del diagrama. Destaca, además, la deformación de la trayectoria como una
manifestación de la no conservación de la energı́a mecánica (recordar que si no hay
amortiguamiento, la trayectoria esperada en el espacio de fase es una elipse).
190 Oscilaciones
.
x .
x 0 > -° x 0
x 0
O x
.
x0 = -° x 0
.
x
0 < -° x 0
- Energı́a
En Fig. 5.15 se estudia el comportamiento de la energı́a mecánica (energı́a cinética
más energı́a potencial) de la partı́cula, señalado por las curcas llenas. Las curvas de
lı́nea punteada corresponden a la energı́a cinética en cada caso. La diferencia entre las
curvas respectivas es la energı́a potencial que experimenta la partı́cula. La diferencia
de E(t) con respecto a la energı́a inicial E(0) es la medida de la energı́a disipada por
la presencia de la fuerza de roce viscoso. La evolución temporal de la energı́a depende
de las condiciones iniciales del movimiento. Ası́, en el gráfico se observan diferencias
notables para cuando, partiendo de la misma posición inicial, la velocidad tiene la misma
magnitud pero inicialmente tienen direcciones opuesta (ver también Figs. 5.13 y 5.14).
E(t)
E(0)
.
x 0 > -° x 0
.
x 0 < -° x
0
O
t
* Amortiguamiento sub–crı́tico
Es el tipo de oscilaciones que ocurren cuando la constante de amortiguamineto es menor que
la frecuencia angular propia o caracterı́stica del sistema, γ < ω. Para mejor compresión se
5.3 Oscilaciones amortiguadas 191
con solución
Usando las condiciones iniciales para determinar las constantes de integración, es cuestión de
operaciones algebraicas simples para determinar el movimiento de la partı́cula. Introduciendo
la constante
γ x0 + ẋ0
η= ,
x0 Ωs
el desplazamiento temporal es
p
x(t) = x0 1 + η 2 e− γ t cos ( Ωs t + φs ) , φs = arctan (− η) .
x(t)
x 0
-° t cos(Ωt)
~e ~
O
t
- Diagrama de fase
.
x
x
.
0
O x
0 x
- Energı́a
E(t)
E(0)
O t
* Amortiguamiento super–crı́tico
Corresponde al caso γ > ω. Resulta entonces conveniente introducir una constante de amorti-
guamiento modificada,
s 2
ω
Γs = γ 1 − <γ,
γ
para caracterizar el amortiguamineto que efectivamente sufrirá la partı́cula. En lugar de
continuar con la resolución de la ecuación diferencial que ahora corresponde para la función
auxiliar H(t), es interesante notar lo siguiente en relación al problema del amortiguamiento
sub–crı́tico ya resuelto,
√
Ωs = − i Γs , i = −1 .
γ x0 + ẋ0
ξ = =⇒ η = iξ ,
x0 Γs
p
= x0 1 − ξ 2 e− γ t cosh ( Γs t + φso ) ,
con lo cual, p
x(t) −−−→ 1
2 x0 1 − ξ 2 e− ( γ−Γs ) t ,
t→∞
Para conectar con las clases previas, se introducen la frecuencia propia o caracterı́stica del objeto
oscilante ω 2 = k/m y la constante de amortiguamiento γ = c/(2 m), con lo cual
~r¨ + 2 γ ~r˙ + ω 2 ~r = 1
m F~ (ext) (t) .
5.4 Oscilaciones forzadas 195
entonces lo relevante es entender la dinámica de la partı́cula, descrita por la posición x con respecto
a la posición de equibrio, en la misma dirección ı̂,
Para resolver esta ecuación diferencial se necesita hacer explı́cita la dependencia temporal de la
fuerza externa. Y esa elección es una cuestión de la fı́sica que se describe. La observación de los
fenómenos a modelar indica que, a menudo, las fuerzas son periódicas o muy cercanas a ello. Por
supuesto que esa elección no es arbitraria sino que se relaciona con la fuente y el modo ondulatorio de
propagación de una perturbación en el medio (recordar sus conocimientos sobre ondas mecánicas).
F (ext)(t)
¿1
¿ 2
¿3
O
t
En Fig. 5.19 se despliega la dependencia temporal de una fuerza externa. A pesar de su forma
compleja, es posible identificar perı́odos (varios) después de los cuales la función toma el mismo
valor,
F (ext) (t + τn ) ≈ F (ext) (t) n entero .
Esto sugiere que la función F (ext) puede expresarse como una combinación lineal de funciones
armónicas, múltiplos enteros de la menor frecuencia angular identificada (mayor perı́odo τ ); de ser
posible, la ventaja es simplicar la descripción de la fuerza y con ello, la resolución de la ecuación de
movimiento.
La frecuencia angular Ω = 2πτ está asociada al perı́odo τ que caracteriza a la fuerza. Alternati-
vamente, la descomposición se puede realizar en términos de funciones seno y coseno pero usar
la fórmula de Euler es matemáticamente más eficiente. La consecuencia es advertir que los
coeficientes An son números complejos. La combinación de los coeficientes con la exponencial
debe producir una cantidad real, que es la propiedad de la fuerza externa.
El problema es determinar los coeficientes An . Para ello, multiplicamos ambos lados de la
ecuacuión por e− i m Ω t e integramos en el intervalo [0, τ ],
Z τ ∞
X Z τ
F (ext) (t) e− i m Ω t dt = An e− i (m−n) Ω t dt
0 n=− ∞ 0
∞
X i An τ An n=m,
= e− i (m−n) 2 π − 1 =
(m − n) Ω
n=− ∞ 0 n 6= m .
Se concluye que, Z τ
1
An = F (ext) (t) e− i m Ω t dt ,
τ 0
- Ejemplo
Considerar la siguiente función real, periódica,
+1 0 ≤ t ≤ τ0 , 2 τ0 ≤ t ≤ 3 τ0 , etc
F (ext) (t) =
−1 τ0 ≤ t ≤ 2 τ0 , 3 τ0 ≤ t ≤ 4 τ0 , etc
que tiene un perı́odo τ = 2 τ0 , como se muestra en Fig. 5.20. El cálculo de los coeficientes
An es directo, obteniéndose
0
n par ,
An =
− 2 i n impar .
nπ
Se concluye que la función F (ext) se desarrolla como
∞
X 2i
F (ext) (t) = − einΩt , n impar
n=− ∞
n π
X 2i
e i n Ω t − e− i n Ω t ,
= −
nπ
n=1,3,5,...
4 X 1
= sen n Ω t .
π n
n=1,3,5,...
5.4 Oscilaciones forzadas 197
F (ext)(t)
+1
O
¿0 ¿0 ¿0 ¿0 t
-1
Ḧ(t) + (ω 2 − γ 2 ) H(t) = 0 .
- Sobre la amplitud AF
En Fig. 5.21 se grafica la amplitud AF , normalizada a la masa m y la intensidad F0 de
la fuerza externa, en función de la frecuencia angular ΩF de la perturbación forzante. Se
observa, en general, un aumento considerable de la amplitud cuando la frecuencia ΩF está
en las cercanı́as de la frecuencia caracterı́stica del sistema libre, efecto que a su vez depende
5.4 Oscilaciones forzadas 199
mA F °~0
F0
= 0.5
= 0.75
1.0
1
! 2
2.0
3.0
! ΩF
Figura 5.21: Amplitud de la oscilación forzada.
- Sobre la fase φF
ÁF
°~0
= 0.75 = 0.5
180º
90º
0
! ΩF
Figura 5.22: Cambio de fase que sufre la oscilación forzada.
- Fenómeno de resonancia
Corresponde al comportamiento de un sistema oscilatorio cuando es perturbado por una
fuerza o una señal armónica o con componentes armónicas que que tienen frecuencias
que coinciden o son cercanas a la frepcuencia propia o caracterı́stica del sistema. Se dice,
entonces, que el sistema entra en resonancia. La energı́a que entrega la fuerza externa
afecta al sistema oscilante, situación que se manifiesta en el aumento de la amplitud de
la oscilación del objeto perturbado y en un cambio significativo de la fase de la oscilación
con respecto a la perturbación.
La máxima amplitud se alcanza para la llamada frecuencia angular de resonancia,
d AF p
, =⇒ Ωres = ω2 − 2γ2 < ω ,
d ΩF Ω =Ωres
F
√
que existe para ω ≥ γ 2. El máximo valor de la frecuencia de resonancia ocurre cuando
no hay amortiguamiento. La fase no tiene un valor extremo en el intervalo [0, π]. Para la
frecuencia de resonancia, la fase toma el valor
s
ω 2
φres = arctan −2
γ
* Medidor de oscilaciones
Por el interés que despiertan los fenómenos sı́smicos, se propone estudiar el funcionamiento de
un dispositivo que permite medir propiedades asociadas a los temblores, tales como la energı́a
asociada a una onda sı́smica y las aceleraciones que produce.
5.4 Oscilaciones forzadas 201
k
z¶
z m
zE¶ c
h O
En la Fig. 5.23 se muestra un instrumento, en su diseño básico, para medir las oscilaciones
producto de una onda sı́smica que se propaga por la superficie terrestre. Se trata de una caja
masiva, fuertemente anclada a la tierra, en cuyo interior hay una masa m amarrada a las
partes superior e inferior por medio de un resorte de constante elástica k y un amortiguador
de constante c, que ejerce una fuerza de roce viscoso proporcional a la velocidad de la masa.
El movimiento relativo de la masa suspendida con respecto a la caja da información sobre las
amplitudes, velocidades o aceleraciones que perturban la caja. Se supone que la posición de
equilibrio zE0 de la masa en el interior de la caja es conocida.
Suponiendo que, una vez perturbada, los movimiento relevantes de la caja son verticales
(los horizontales se minimizan por la presencia de los anclajes a tierra), se introducen dos
sistemas de coordenadas verticales: uno asociado a un sistema de referencia inercial (la tierra)
y donde los desplazamientos se miden por la coordenada z; el otro, donde z 0 describe el
desplazamiento de masa m con respecto a la posición de zE0 , está asociado a un sistema de
referencia no–inercial (ya que sufre aceleraciones verticales debido a la perturbación sı́smica).
La ecuación de movimiento que describe el movimiento de m en el sistema ligado a la caja es,
genéricamente,
m ~r¨ 0 = F~ + F~N I ,
= ( − k ~r 0 − c ~v 0 ) + − m ~r¨ ,
con ~r la posición de la base de la caja. Proyectando según la dirección vertical, el movimiento
de la masa m queda descrito por la solución a
m z̈ 0 = − k z 0 − c ż 0 − m z̈ ,
Para resolverla, hay que especificar el modo de oscilar que tiene la superficie terrestre como
consecuencia de la onda sı́smica que viaja por la zona del instrumento. Suponiendo que la
oscilación superficial esta modelada por
z(t) ≈ h sen ΩF t ,
para el origen de la coordenada z coincidiendo con el nivel tierra, con h la amplitud de
la perturbación externa y ΩF su frecuencia angular. La ecuación de movimiento se reduce
202 Oscilaciones
entonces a
z̈ 0 + 2 γ ż 0 + ω 2 z 0 = h ΩF2 sen ΩF t
con las definiciones usuales γ = c/(2 m) y ω 2 = k/m.
En estos problemas con una fuerza forzante, interesa la solución forzada o permanente que
se mantiene para tiempos suficientemente largos y cuando la solución transiente ya no es
relevante,
z 0 (t) −−−→ zf0orz (t) = zF0 sen (ΩF t − φF0 ) .
t→∞
Introduciendo el factor de amortiguamiento ξ se tiene
2
ΩF
ω
Amplitud zF0 = h s ,
2 2 h i2
Ω Ω
1 − ωF + 2ξ F
ω
γ
ξ= −→
ω
ΩF
2ξ ω
0 = arctan
Fase φ 2 ,
F
Ω
1 − ωF
relaciones que dan cuenta de los desplazamientos de la masa en el interior de la caja. En Fig. 5.24
se grafica la amplitud zF0 de la oscilación normalizada a la amplitud h de la perturbación y
como función de ΩF /ω. Presenta la tı́pica forma del fenómeno resonante, con la amplitud
creciendo para frecuencias ΩF ∼ ω. Sin embargo, el gráfico también muestra dos casos lı́mites
interesantes cuando ΩF está lejos de la frecuencia propia del instrumento, rango en los cuales
la amplitud es independiente del factor de atenuación γ.
(zh¶ )
F
ÁF¶
4 »=0.0
180º
»=0.0 2
( ) ΩF
! 0.25
0.5
3
1.0
0.25
2
90º
0.50
1 0.75
1.00
0
0 1 2 3 4 (! )
5 ΩF 1 2 3 4 (! )
5 ΩF
- Sismómetro
Corresponde al caso en que la frecuencia propia del instrumento es mucho menor que la
frecuencia de la perturbación, ω << ΩF . Entonces,
- Acelerómetro
Corresponde al caso en que la frecuencia propia del instrumento es mucho mayor que la
frecuencia de la perturbación, ω >> ΩF . Entonces,
2
Ω2
ΩF z̈(t)
xF ' h y φF ' 0 =⇒ zf0orz ' h 2
sen ΩF t ≡ − 2 .
ω ω ω
En la clase previa vimos el caso de un sistema, formado por un objeto en movimiento bajo una
fuerza restitutiva lineal y una fuerza de roce viscoso que simula su pérdida de energı́a en el medio,
cuando recibe la acción de una perturbación externa armónica. En ese análisis, se ignora el efecto
que la oscilación de la masa puede tener en la fuente que, en primera instancia, la perturba. La
suposición implı́cita, para el tipo de aplicaciones que aparecı́an de interés, es que la fuente de
la perturbación y la forma como interactúa con el objeto es independiente del movimiento que
éste sufre. Sin embargo, esa mirada cambia al considerar la situación cuando el mismo tipo de
perturbación armónica es producida por otro sistema de caracterı́sticas similares al pertubado, en
cuyo caso se produce interacción mutua - se transfiere energı́a - entre los participantes que no puede
ignorarse. Hay, entonces, un nuevo grados de libertad a considerar (reflejado en la coordenada
que describe su movimiento) y cuya variación está ı́ntimamente ligada al grado de libertad que
se describe. Ası́, resulta fı́sicamente significativo el entender la forma de oscilar del sistema como
un todo más que cada uno de sus componentes. En general, el acoplamiento del movimiento entre
los objetos que interactúan puede ser complicado. En situaciones donde los objetos permanecen
en el entorno a sus posiciones de equilibrio, la descripción se simplifica y estamos en presencia de
oscilaciones acopladas, el tema de esta clase.
204 Oscilaciones
~g
m1 ~g m1 m2 m2
m1
m2
En Fig. 5.25 se muestran algunos casos simples de dos masas, donde un resorte (equivalente a una
fuerza restitutiva lineal cuando funciona en su régimen elástico) es el mecanismo de acoplamiento.
Sistemas oscilantes de mayor complejidad resultan de la interacción de un número variable de grados
de libertad, mas allá de la dimensión espacial en que ocurren. Los ejemplos mostrados tienen el
valor de sugerir como modelar y tratar situaciones fı́sicas que involucran el acoplamiento de una
gran número de participantes.
En esta oportunidad, mostraremos las herramientas básicas por enfocar el tema de las oscilaciones
acopladas a partir del esquema de Newton. Ello significa tomar ejemplos simples e introducir los
conceptos nuevos asociados. Para un tratamiento general, el camino aconsejable es la formulación
de la Mecánica debido a Lagrange† .
Se quiere estudiar el problema de dos masas m1 y m2 conectadas por resortes de largos naturales y
constantes elásticas {`1 , k1 }, {`12 , k12 } y {`2 , k2 }, respectivamente, como se indica en la Fig. 5.26.
La distancia L entre los extremos es fija. Las únicas fuerzas relevantes son aquéllas que ejercen los
resortes (se puede pensar que el sistema está desplegado sobre una superficie horizontal, sin roce).
†
Para los interesados en tener una mirada introductoria a la Mecánica de Lagrange y aplicaciones, se les sugiere
consultar la bibliografı́a del curso
5.5 Oscilaciones acopladas 205
m1 m2
El planteamiento más general considera un punto de referencia O con respecto al cual se miden la
posiciones x̄1 y x̄2 de las masa m1 y m2 respectivamente. Al ser unidimensionales las oscilaciones
de las masas y bajo la suposición que los resortes funcionan es su régimen elástico‡ , basta con
plantear las ecuaciones de movimiento para cada masa,
¨1
m1 x̄ = − k1 (x̄1 − `1 ) − k12 [`12 − (x̄2 − x̄1 )] ,
¨2
m2 x̄ = − k12 [(x̄2 − x̄1 ) − `12 ] − k2 [x̄2 − (L − `2 )] .
* Posiciones de equilibrio
Para simplificar la descripción del problema, es conveniente identificar las posiciones de
equilibrio de las masas para después preocuparse sólo de los desplazamientos relativos a ellas.
Imponiendo la condición de equilibrio para cada masa (aceleraciones nulas)
¨1 = 0 ,
x̄ (k1 + k12 ) x̄E1 − k12 x̄E2 = k1 `1 − k12 `12 ,
=⇒
¨2 = 0 ,
x̄ (k2 + k12 ) x̄E2 − k12 x̄E1 = k2 (L − `2 ) + k12 `12 ,
‡
Ley de Hooke: la fuerza que el resorte ejerce sobre la masa es proporcional al desplazamiento con respecto a su largo
natural que éste experimenta,
~ = − k (x̄ − `) x̄
F ˆ.
206 Oscilaciones
donde x̄E1 y x̄E2 determinan las posiciones buscadas. Resolviendo el sistema de ecuaciones
algebraicas, los puntos de equilibrio son
h i
L−`12 −`2
k1 k2 + k12 k1 + k2 `1
x̄E1 = `1 ,
k1 k2 + k12 [ k1 + k2 ]
h i
`1 +`12
k1 k2 + k12 k1 L−` + k2
2
x̄E2 = ( L − `2 ) .
k1 k2 + k12 [ k1 + k2 ]
+ Casos particulares
Considerar resortes de igual constante elástica, k1 = k2 = k12 . Entonces,
x̄E1 = `1 + 13 [ L − `1 − `12 − `2 ] ,
x̄E2 = ( L − `2 ) − 13 [ L − `1 − `12 − `2 ] .
Si, además, los resortes tienen el mismo largo y L es la suma del largo de los resortes,
entonces
x̄E1 = 13 L , x̄E2 = 23 L ,
un resultado esperado.
* Cambio de variables
La dinámica del sistema bajo estudio está relacionada con el mo vimiento de las masas en
torno a sus posiciones de equilibrio. Por ello, simplifica la descripción del movimiento hacer el
cambio de variables,
x̄1 = x̄E1 + x1 , x̄2 = x̄E2 + x2 ,
donde x1 y x2 son los desplazamientos de las masa relativos al equilibrio. Entonces, las
ecuaciones de movimiento en las nuevas coordenadas serán,
Ası́ formulado, queda explı́cito la acción forzante que el movimiento de una masa hace sobre
el movimiento de la otra.
+ Caso lı́mite
Cuando el acoplamiento es muy débil, k12 ' 0, ocurre lo siguiente: los puntos de equibrio
coinciden los largos naturales de los resortes ubicados en los extremos,
y cada masa oscila armónica e independientemente alrededor de xE1 y xE2 con frecuencias
angulares s s
k1 k2
ω1 = , ω2 = .
m1 m2
* Esquema de resolución
Basados en el comportamiento oscilatorio armónico que cada masa tiene cuando están desaco-
pladas, se analiza la posibilidad de tener soluciones de tipo armónico, con la misma frecuencia
angular y fase (desconocidas), para ambas masas simultáneamente,
x1 (t) = A1 cos (ωt + φ) , x2 (t) = A2 cos (ωt + φ) ,
con ω la frecuencia angular incógnita y φ la fase. Las amplitudes A1 y A2 son, en principio,
diferentes. Introduciendo x1 y x2 en las ecuaciones diferenciales que describen el movimiento,
se tiene
− m1 ω 2 + ( k1 + k12 ) A1 cos (ωt + φ) = k12 A2 cos (ωt + φ) ,
relaciones que deben satisfacerse para todo tiempo t. Consecuentemente, para que ambas
masas oscilen con la misma frecuencia angular se debe cumplir la relación, escrita en forma
matricial,
− m1 ω 2 + ( k1 + k12 )
[ − k12 ] A1 0
= .
− m2 ω 2 + ( k2 + k12 )
[ − k12 ] A2 0
208 Oscilaciones
En este caso, es una ecuación algebraica de segundo orden para ω y cuyas raı́ces son
k +k
a 2 = 1m 12 ,
1
s
k 2
ω±2 = 12 (a 2 + b 2 ) ± c 2 + 12
, con k +k
b 2 = 2m 12 ,
m1 m2
2
c = 1 (a 2 − b 2 ) .
2
Estas frecuencias angulares ω± se conocen como las frecuencias caracterı́sticas o normales del
sistema bajo estudio. Sugieren la existencia de dos tipos de desplazamientos caracterizados
por las frecuencias ω− y ω+ > ω− .
Para determinar los tipos de movimientos asociados, se puede calcular la relación entre las
amplitudes de cada desplazamiento a partir de las ecuaciones que relacionan las amplitudes
A1 y A2 ,
m1 2 2 m2 2
b − ω 2 A2 .
A2 = a − ω A1 o A1 =
k12 k12
Cuál relación a usar es, en principio, irrelevante en problemas de pocos grados de libertad.
Pero, en presencia de N grados de libertad, es preferible sistematizar su uso. Su ventaja se
hará explicita más adelante. Por ahora, reemplazando ω± , escogeremos la combinación
(−) (−) (−)
A2 = δ
A1 ,
ω = ω± =⇒
A(+) = δ (+) A(+) ,
1 2
" s #
2
(−) m1 k12 (+) m2 (−)
δ = c+ c2 + δ =− δ ,
k12 m1 m2 m1
para simplificar la notación. Observar que la cantidad entre los paréntesis cuadrados es siempre
− +
positiva, concluyéndose que siempre δ > 0 y δ < 0. Ası́, aparecen dos formas especı́ficas
en que pueden oscilar las masas dependiendo de la frecuencia caracterı́stica de la oscilación.
Mientras que para la menor frecuencia ω− , las amplitudes tienen siempre el mismo signo, lo
que significa que los desplazamientos de ambas masas ocurre siempre hacia el mismo lado
respecto a sus posiciones de equilibrio, para la mayor frecuencia ω+ ocurre lo contrario ya que
−
las amplitudes correspondientes tienen siempre signos diferentes. El tamaño relativo de δ y
+
δ depende de los valor que toman las masas.
5.5 Oscilaciones acopladas 209
m1 m2
+ Solución general
El sistema de masas acopladas va a oscilar, dependiendo de la condición inicial que
cada masa tiene (posición y velocidad), como una combinación lineal de los modos de
oscilación simétrico y antisimétrico que se han establecido,
(−) (+)
x1 (t) = C1 x1 (t) + C2 x1 (t) ,
(−) (+)
x2 (t) = C1 x2 (t) + C2 x2 (t) .
(+) (−)
Reemplazando x1 y x2 ,
(−) (+) (+)
x1 (t) = C1 x1 (t) + C2 δ x2 (t) ,
(−) (−) (+)
x2 (t) = C1 δ x1 (t) + C2 x2 (t) .
210 Oscilaciones
(±)
Como las amplitudes de x1 están indeterminadas, entonces se puede tomar C1,2 = 1 sin
perder generalidad y expresar la solución general como
(−) (+) (+)
x1 (t) = A1 cos (ω− t + φ− ) +δ A2 cos (ω+ t + φ+ ) ,
(−) (−) (+)
x2 (t) = δ A1 cos (ω− t + φ− ) + A2 cos (ω+ t + φ+ ) .
Las constantes de integración se determinan imponiendo las condiciones iniciales {x1 (0), x2 (0)}
y {ẋ1 (0), ẋ2 (0)}.
Para ilustrar los modos caracterı́sticos de oscilación y la solución completa a un problema
especı́fico, en Fig. 5.29 se han graficado los resultados correspondientes a m1 = 3 y
m2 = 1 y las constantes elásticas de los resortes k1 = 2, k2 = 1 y k12 = 3, todas las
magnitudes en la unidades correspondientes. Los largos de los resortes sólo importan en
determinar las posiciones de equilibrio, pero al graficar los desplazamientos relativos a
las posiciones equilibrio, no es relevante definirlos. La magnitud de las amplitudes de
las soluciones simétricas y antisimétricas dependen en forma importante de la razón
(+) (−)
entre las masas. Por ello, al tener que δ = 13 δ , se explica la pequeña amplitud que
(+)
muestra x1 . La solución general fue construida con condiciones iniciales x1 (0) = x10 y
x2 (0) = x20 = 12 x10 . Las velocidades iniciales de las masas se tomaron nulas.
x (-)
1
Modo Simetrico
¶ x (+)
1
Modo Anti-simetrico
¶
(-)
A1
x
x (+)
E1
E1
k 12 t A1 k 12 t
x (-)
2 x (+)
2
(-)
A2 (+)
A2
x E2
x E2
t t
x 1
Solucion
¶ general
x 10
xE1
x 2
x 20
xE2
* Modos normales
5.5 Oscilaciones acopladas 211
La naturaleza revela que todo medio fı́sico oscila con amplitudes que pueden aproximarse a la
combinación lineal de amplitudes de diferentes frecuencias cuando se le perturba de su posición
de equilibrio estable. Estas frecuencias, caracterı́sticas del sistema bajo estudio, identifican los
llamados modos normales de oscilación (vibración) del medio (un objeto, una estructura, un
sólido, etc) de interés.
Para un sistema susceptible de ser perturbado linealmente (existen fuerzas restitutivas atrac-
tivas hacia el punto de equilibrio o se pueden aproximar a ellas) alrededor de su estado de
equilibrio, se identifica un modo normal de oscilación cuando todos sus grados de libertad
oscilan armónicamente con la misma frecuencia. Fluye de esta definición que existirán tantos
modos como grados de libertad tenga el problema bajo estudio. Para ilustrarlo, en el ejemplo
que se ha desarrollado existen dos grados de libertad, cada uno asociado al movimiento de cada
masa, y hemos encontrado dos maneras posibles en que ellas pueden oscilar (las frecuencias
caracterı́sticas).
(α)
Suponiendo que la coordenada normal q` describe el grado de libertad ` de un sistema en su
modo normal α, entonces
(α) (α)
q` (t) = A` cos (ωα t + φα ) , `, α = 1, . . . N , ,
(α)
donde A` es la amplitud de cada coordenada en el modo α, ωα es la frecuencia normal
del modo α determinada de la ecuación secular del sistema bajo estudio y φα es una fase
caracterı́stica para ese modo. Las amplitudes no son independientes, salvo una, en cada modo
α lo que permite expresarlas como
(α) (α)
A` = ∆`α Aα ,
con ∆`α midiendo la amplitud relativa del grado de libertad ` con respecto a la amplitud
del grado de libertad α que tomamos como referencia, ambos en el modo α. La amplitud
α
Aα ahora normaliza la influencia del modo alpha para todas las coordenadas y su magnitud
quedará determinadas por las condiciones iniciales que se impongan al sistema.
La solución general de un sistema acoplado, para una perturbación arbitraria, queda descrita
por el comportamiento de cada coordenada q` expresada como la combinación lineal§ de los
distintos modos normales en que ese grado de libertad puede oscilar,
N N
α (α)
X X
q` (t) = C α q` −→ ∆`α qα (t) ,
α=1 α=1
(α)
donde Cα se ha identificado con la amplitud (indeterminada) Aα del modo correspondiente.
(α)
Ası́, las constantes {Aα , φα } para cada modo α corresponden a las constantes de integración
a determinar de las condiciones iniciales q` (0) = q`0 y q̇` (0) = q̇`0 (2N constantes de integración
para 2N condiciones iniciales).
x̄E1 = ` , xE2 = 2 ` .
- Coordenadas normales
(−,+) (1,2)
(1) (1) (2) (2)
x1 −→ x1 x1 = A1 cos (ω1 t + φ1 )
x1 = − x2
(2) 1
A2 = 2 ( x20 − x10 ) , φ2 = 0 ;
Solución simétrica
Para la elección x10 = x20 = X0 , es decir, ambas masas parten desplazadas una
misma cantidad y en el mismo sentido,
Solución asimétrica
Para la elección x10 = − x20 = X0 , es decir, ambas masas parten desplazadas
una misma cantidad pero en sentido opuesto,
x1 (t) = X0 cos (ω2 t), x2 (t) = − X0 cos (ω2 t), modo normal 2 (asimétrico)
5.5.2. Un ejemplo
Estudiar los modos normales del dispositivo indicado, que consiste en 3 masas iguales m conectadas
por resortes de igual constante elástica k. No hay otras fuerzas presentes. Las masas pueden deslizar
sin roce entre las guı́as circulares.
Solución
* Ecuaciones de movimiento
Suponiendo que cada resorte, forzado a funcionar según el eje circular del dispositivo, se
contrae o elonga linealmente con el arco de desplazamiento x que experimenta (razonable para
pequeñas oscilaciones alrededor del equilibrio), es directo escribir las ecuaciones de movimiento
para las tres masas,
m x¨1 = − k [ x1 − x2 ] − k [ x1 − x3 ]
m x¨2 = − k [ x2 − x1 ] − k [ x2 − x3 ]
m x¨3 = − k [ x3 − x2 ] − k [ x3 − x1 ]
Introduciendo la frecuencia angular angular asociada a una masa oscilando libremente,
r
k
Ω= ,
m
214 Oscilaciones
* Frecuencias normales
Buscar soluciones al movimiento en que todas las coordenadas oscilen con la misma frecuencia,
x` = A` cos (ωt + φ) , ` = 1, 2, 3 .
* Coordenadas normales
+ ω1 = 0
Reemplazando en las ecuaciones para las amplitudes se concluye,
(1) (1) (1)
A1 = A2 = A3 ,
es decir, cada coordenada puede desplazarse una cantidad constante, y la misma para
todas ellas, en este modo. El sistema de las 3 masas sufre una traslación finita, a partir
(1)
de su posición de equilibrio a otra desplazada en A1 cos φ1 .
No obstante lo anterior, al satisfacer los modos normales una ecuación diferencial de
segundo orden, es posible construir una solución más general que la obtenida. El pro-
blema radica en que la suposición inicial sobre el movimiento armónico que las masas
experimentan limita las posibles soluciones no armónicas que existan. En efecto, una
función armónica de frecuencia nula corresponde una constante, con lo cual ẍ1 = 0 se
(1) (1)
satisface trivialmente. Pero x1 = A1 + B1 t también satisface una aceleración nula para
los desplazamientos x` , constituyendo ası́ la solución más general, no–oscilatoria, que
puede construirse,
(1) (1) (1) (1) (1) (1) (1) (1) (1)
x1 = A1 + B1 t , x2 = A1 + B1 t , x3 = A1 + B1 t ,
(1) (1)
con A1 y B1 constantes de integración. Estas soluciones representan un movimiento
traslacional, el mismo para las tres masas. Una mejor visualización se tiene al usar una
variable angular para describir la posición de las masas.
√
+ ω2 = ω3 = ω̄ = Ω 3 .
Esta
√ situación corresponde a una degeneración doble de la frecuencia caracterı́stica
Ω 3 , es decir, dos modos posibles oscilan con la misma frecuencia. La relación entre las
amplitudes satisface, después de reemplazar ω2,3 en la ecuación de movimiento,
(2,3) (2,3) (2,3)
A1 + A2 + A3 =0
El resultado indica que sólo pueden existir dos soluciones linealmente independientes.
Por ejemplo,
(2) (2) (2) (2)
modo 2: A1 = − A2 , A2 6= 0 , A3 = 0 ,
* Solución general
El desplazamiento de cada masa alrededor de su posición de equilibrio se determina de la
superposición lineal de los modos de oscilación del sistema,
(1) (1) (2)
x1 (t) = A1 + B1 t − A2 cos (ω̄t + φ2 ) ,
(1) (1) (2) (3)
x2 (t) = A1 + B1 t + A2 cos (ω̄t + φ2 ) − A3 cos (ω̄t + φ3 ) ,
(1) (1) (3)
x3 (t) = A1 + B1 t + A3 cos (ω̄t + φ3 ) ,
216 Oscilaciones
y donde las 6 constantes de integración quedan determinadas por las condiciones iniciales para
x` (0) y ẋ` (0),
(1)
A1 = 13 [ x10 + x20 + x30 ]
(1)
B1 = 13 [ ẋ10 + ẋ20 + ẋ30 ]
s 2
(1)
(2) (1) 2
ẋ10 −B1
A2 = x10 − A1 +
ω̄
x` (0) = x`0
" #
(1)
ẋ` (0) = ẋ`0 10
ẋ −B
φ2 = − arctan 1
(1)
ω̄ x10 −A1
` = 1, 2, 3
s 2
(1)
(3) (1) 2
ẋ30 −B1
x30 − A1
A3 = + ω̄
" #
(1)
ẋ30 −B1
φ3 = − arctan
(1)
ω̄ x30 −A1
+ Aplicación
Para condiciones iniciales x` (0) = x`0 y ẋ` (0) = 0 las constantes de integración toman
valores
(1)
1
A1 = 3 ( x10 + x20 + x30 ) ,
(2)
1
A2 = 3 ( x20 + x30 − 2 x10 ) ,
(3)
1
A3 = 3 ( 2 x30 − x10 − x20 ) ,
y el resto son nulas. Entonces, los desplazamientos que experimentan las masas en el
tiempo serán,
(1) (2)
x1 (t) = A1 − A2 cos ω̄ t ,
(1)
h (2) (3)
i
x2 (t) = A1 + A2 − A3 cos ω̄ t ,
(1) (3)
x3 (t) = A1 + A3 cos ω̄ t .
Claramente, existe una traslación del punto de equibrio y una oscilación de la misma
frecuencia angular pero diferente amplitud para cada una de las masas. Algunos casos
especiales son:
- Caso: x10 = x20 = x30 = x0
Entonces,
(1)
A1 = x0
(2)
A2 = 0 x1 (t) = x2 (t) = x3 (t) = x0 .
(3)
A3 = 0
5.5 Oscilaciones acopladas 217
Las masas no se trasladan y cada una oscila con su misma amplitud inicial, es
decir, oscilan como si estuvieran desacopladas aunque existe un desfase de π (por
construcción) entre una masa y las otras dos (ver Fig. 5.30).
x x1(t)
x30 x3(t)
x20
xE
x2(t) t
x10
x10 = - ( x20 + x30 )
Figura 5.30: Oscilaciones de las masas sin traslación.
En Fig. 5.31 se grafica el movimiento de las masas: una de ellas masa se desplaza
a su nueva posición de equilibrio y queda en reposo mientras las otras dos oscilan
antisimétricamente alrededor alrededor de sus respectivas posiciones de equilibrio
desplazadas. Este gráfico es consistente con Fig. 5.30, en el sentido que los valores de
x20 y x30 son los mismos. Sin embargo, la magnitud de las oscilaciones resultantes
son notablemente diferentes (menores) debido al acoplamiento presente entre las
masas.
218 Oscilaciones
x
x3(t)
x30
x10 x1(t)
x2(t)
x E
- Caso general
Ilustramos en Fig. 5.32 los desplazamientos de las masas en el tiempo, a partir de su
situación inicial, en un caso general. Hemos mantenido, por razones de comparación
con las otras figuras, la misma magnitud para x20 y x30 . La coordenada inicial x10
fue escogida libremente. Debido a la presencia de una frecuencia única, ésta se ha
mantenido en todas las ilustraciones. La simetrı́a que presenta el sistema en sus
componentes, masas y resortes de acoplamiento iguales, hace que los desplazamientos
de las masas una vez perturbadas sigan un comportamiento sistemático: el desplaza-
miento de una masa está siempre desfasada en π de los desplazamientos de las otras
dos. Este resultado fluye también del análisis de las soluciones generales para los
desplazamientos x` .
x
x1(t) x3(t)
x30
x20 x2(t)
x E
x10 t