El aumento de control a las importaciones ha empujado a ciertas empresas a invertir en

maquinaria y mejora de instalaciones para sustituir insumos y también para aumentar la

producción y proyectar futuras exportaciones.

Uno de esos casos es el de la empresa Unilimpio, que desde 1999 tiene en Quito su planta
de fabricación de químicos de limpieza, como detergentes, desinfectantes, bactericidas y
cloros. La compañía también comercializa dispensadores e implementos de limpieza.

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Como efecto de la disminución de importaciones enfrentó un periodo de desabastecimiento

de unos 10 ítems de materias primas e insumos hasta mayo pasado.

Emilio Filbig, gerente de esta empresa, explica que si bien esta situación se está superando,
desde junio pasado se decidió producir localmente los dispensadores de jabón, de toallas de
papel y de papel higiénico.

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La firma importaba productos complementarios, como los mencionados desde China,

Taiwán y Corea, hasta $ 1 millón al año, pero los pedidos desde estos países demoraban
entre 3 y 4 meses, lo que implicaba altos costos.

Por ello, se compraron los moldes de los dispensadores a China para fabricarlos en el
Ecuador.

El empresario explica que esta estrategia le permitirá, en unos tres meses, vender en
Colombia y Perú dispensadores, toallas de papel, papel higiénico y pañuelos faciales.

En una primera etapa proyecta ventas por $ 1 millón. Pero los planes son captar entre 3% y
5% del mercado colombiano con ventas por $ 14 millones.

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A mediano plazo el objetivo es lograr un acuerdo con el Gobierno para proveer de estos
dispensadores al país, que hoy importa por $ 6 millones.

En cuanto a la producción de la planta de químicos, la firma invertirá hasta el 2015

alrededor de $ 1,5 millones para comprar maquinaria y adquirir nuevas instalaciones.

Al momento produce 350 mil kilos de químicos y aspira a llegar a los 600 mil kilos
mensuales, con nuevas inversiones.
Unilimpio cuenta con 140 empleados, tiene el 30% del mercado corporativo y ya ha
empezado a vender al consumidor final. En el 2013 facturó $ 11 millones y prevé cerrar
este año con $ 13 millones.

Redacción
 eluniversocom
QUITOQUÍMICAEMPRESASIMPORTACIONES
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maquinaria y mejora de instalaciones para sustituir insumos y también para aumentar la
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Uno de esos casos es el de la empresa Unilimpio, que desde 1999 tiene en Quito su planta
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cloros. La compañía también comercializa dispensadores e implementos de limpieza.

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Como efecto de la disminución de importaciones enfrentó un periodo de desabastecimiento

de unos 10 ítems de materias primas e insumos hasta mayo pasado.

Emilio Filbig, gerente de esta empresa, explica que si bien esta situación se está superando,
desde junio pasado se decidió producir localmente los dispensadores de jabón, de toallas de
papel y de papel higiénico.

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La firma importaba productos complementarios, como los mencionados desde China,

Taiwán y Corea, hasta $ 1 millón al año, pero los pedidos desde estos países demoraban
entre 3 y 4 meses, lo que implicaba altos costos.

Por ello, se compraron los moldes de los dispensadores a China para fabricarlos en el
Ecuador.

El empresario explica que esta estrategia le permitirá, en unos tres meses, vender en

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