Alumno: José Maurilio Castro Valencia.

Matricula: 145225.

Grupo: E097

Materia: Didáctica y Evaluación de la Educación Superior.

Profesor: Dr. Arturo Magaña Contreras

Actividad de aprendizaje: 4. La evaluación de la educación superior en México

Villahermosa, Tabasco; a 01 de noviembre de 2021.

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Introducción.

Este ensayo se va en mi experiencia como alumno de educación media superior,

principalmente porque no he dado clases en ningún nivel educativo, para comenzar hay
que definir que es evaluación, la cual se define como, “acción e efecto de avaluar”,
(Española, 2021).

Enfocando a un contexto escolar se define como “estimar los conocimientos, aptitudes y

rendimiento de los alumnos”, (Española, 2021), es decir que una evaluación no es solo un
resultado de la suma de puntos positivos, sino de otros elementos no físicos o duros sino
sociables o intelectuales para una buena evaluación.

Desarrollo.

Entonces, la evaluación de la educación superior en México se puede definir de acuerdo a

Thorndike y Hagen como “Señalar y definir la cualidad o atributo que habrá medir,
determinar un con junto de operaciones y procedimientos o definiciones para traducir las
observaciones” (Liza, 2005),.

Actualmente, la evaluación mexicana es definida con el proceso de la evaluación de la

educación con calificaciones definidas de proceso de evaluación y la evaluación del
conocimiento por agrupaciones y asociaciones nacionales e internacionales como la
prueba PISA, los organizados y diseñados por el Consejo Nacional de Ciencia y
Tecnología (CONACYT) y el Centro Nacional para la Evaluación de la Educación Superior
(CENEVAL).

En este contexto se debe de considerar la educabilidad, la cual es para educar como

humanos y no en conocimiento, dado que para eso existe la educación, entonces
podemos decir que la educabilidad se evalúa no por conocimientos sino actuación.

Esta se define como “contribuir a la construcción del hombre y de la humanidad de

acuerdo con las exigencias de realización que vamos descubriendo en cada momento
histórico”, (López, 2000).

En mi proceso de educación superior, no se establece una calificación en este rubro, dado

que es algo que se aprende desde casa y se refuerza en las instituciones educativas,
además de que de tomarse en cuenta no es una evaluación separada del resultado final
de la materia o clase, sino se toma en cuenta.

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Por otra parte, e l educar para la educabilidad en educación superior podría englobarse en
algunas materias específicas, pero ya no como algo indispensable a evaluar para formar
al alumno, dado que es algo que se contempla más en educación básica, es decir, en
preescolar, primaria y secundaria.

En síntesis, considero que se evalúa a través de las actitudes en el salón de clases de

cada alumno, lo cual podría contar como un punto o dos, dentro de la misma materia,
aunque no es algo esencial para poder evaluar los conocimientos.

En el caso de las evaluaciones de educación superior debe ser basada y generado por
otras instancias como el CENEVAL, Comisión Nacional de Evaluación de la Educación
Superior (CONEVA), la Asociación Nacional de Universidades e Instituto de Enseñanza
Superior (ANUIES) y la Coordinación Nacional para la Planeación de la Educación
Superior (CONPES).

Estas instituciones establecen los criterios y medidas de evaluación, así como vértice de
las materias a estudiar y evaluar en las carreras universitarias, sin embargo, existe un
problema no siempre se cumple, dado que, en una experiencia de mi educación superior,
para poder titularme de la licenciatura en comunicación, el examen tiene el procedimiento
de cualquier prueba ejecutada por esta institución.

Al realizar la prueba algunos temas o preguntas del examen son de algunos

conocimientos que no se obtuvieron, no porque no son contemplados en los planes de
estudio, sino el docente no compartió el conocimiento a los alumnos, resultando en
posibles fallas en la prueba para titularse.

Estas instituciones establecen un objetivo en común que es generar los conocimientos

necesarios en los educandos para un bien común, “la educación superior mexicana ha
adoptado a la planeación integral como instrumento idóneo para que las instituciones de
educación superior respondan eficazmente a las demandas sociales y se articulen de
manera equilibrada, coordinada para atender las necesidades y retos”, (Thierry, 1993).

Aunque no se refleja este hecho en la realidad de la educación superior, si se cumplen en

algunos casos, dependiendo de las estrategias de los docentes, el centro educativo y el
nivel de cada institución y de sus alumnos.

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En el caso de que la acreditación y la evaluación tiene que ver, si no son similares, no
puede existir una sin la otra, pero para comenzar hay que definir que es acreditación,
dado que evaluación ya lo definimos anteriormente.

“Dar seguridad de que alguien o algo es lo que representa o parece o dar testimonio en
documento fehaciente de que alguien lleva facultades para desempeñar comisión o
encargo diplomático, comercial, etc”, (Española, 2021).

Para lograr la acreditación de algún nivel educativo, curso o el nivel superior, se requiere
de una o varias evaluaciones, a pesar de que son procesos paralelos, complementarios e
interdependientes, es decir, que un correcto desarrollo de la evaluación a lo largo del
curso se determina que se cumplen satisfactoriamente los criterios de acreditación

Finalmente, la evaluación revisa los conocimientos y actitudes de un curso, materia o nivel

educativo, y la acreditación es la suma positiva o aprobatoria de las evaluaciones que
aprueba con documento oficial el haber logrado una meta.

Conclusión.

Desde mi experiencia como alumno, más que resarcir los daños, yo pondría definir como
el modificar algunos Aspectos o criterios para poder mejorar la evaluación superior, como
el generar estrategias y políticas públicas para poder mejorar la evaluación de la
educación en las instituciones educativas generales del país.

Primero se debe de generar acciones y medidas que no coloque tantos candados a la

evaluación y ingresos de programas y proyectos, además de la ejecución de evaluaciones
no del sistema o los alumnos, dado que esas ya existen, sino de las instituciones de
educación superior y sus docentes, como se hace en educación básica.

Otra mejora podría ser, que los académicos entregaran el conocimiento y evaluar
contemplando más que el conocimiento teórico, también las actitudes de conocimiento de
aprendizaje y de participación dentro y fuera del aula, para generar una evaluación más
digna y completa que resulte en una acreditación más amplia.

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Bibliografía:

Española, D. d. (31 de octubre de 2021). Diccionario de la Real Academia Española .

Obtenido de Diccionario de la Real Academia Española : https://dle.rae.es/evaluaci
%C3%B3n

Liza, j. (2005). Propuesta de Evaluación y Acreditación del Proceso de Enseñanaza-

Aprendizaje en la Perspectiva de la Didáctica Critica y Calidad de la Educación.
Educación, Cultura y Sociedad., pp. 175-184.

López, C. M. (2000). Evaluacióin como Proceso de Conciencia y Autocorreccion

(conciencia). En C. M. López, Planeación y Evaluación del Proceso Enseñanaza-
aprensizaje. (págs. pp. 123-137). México: Trillas.

Thierry, R. L. (1993). LA EVALUACION DE LA EDUCACION SUPERIOR EN MEXICO.

Brasilia, Brasil.