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CANTOS PARA LA EUCARISTÍA DEL DOMINGO 16 DE MAYO DE 2021

(Primera Comunión de Anaís)

Canto de entrada: Tomado de la mano


Tomado de la mano con Jesús yo voy,
le sigo como oveja que encontró el pastor.
Tomado de la mano con Jesús yo voy a donde Él va. (BIS)
Si Jesús me dice: “Amigo, deja todo y ven conmigo,
donde todo es más hermoso y más feliz”.
Si Jesús me dice: “Amigo, deja todo y ven conmigo”,
Yo mi mano pondré en la suya e iré con Él.
Tomado de la mano…
“Yo te llevare, amigo, a un lugar conmigo
donde el sol y las estrellas aún brillan más.
Yo te llevare, amigo, a un lugar conmigo
donde todo es más hermoso y más feliz”.
Tomado de la mano…

Acto penitencial: Tú que siempre nos perdonas…


Tú que siempre nos perdonas porque nos quieres mucho.
Tú que siempre nos perdonas, Señor, ten piedad.

Tú que siempre nos escuchas porque nos quieres mucho.


Tú que siempre nos escuchas, Cristo, ten piedad.

Tú que siempre nos ayudas porque nos quieres mucho.


Tú que siempre nos ayudas, Señor, ten piedad.

Gloria: Gloria, gloria a Dios en el cielo.


Gloria, gloria a Dios en el cielo y en la tierra a los hombres paz. (BIS)

Te alabamos y te bendecimos, te adoramos y glorificamos


y nosotros hoy te damos gracias por tu grande y eterna gloria

Gloria, gloria a Dios en el cielo y en la tierra a los hombres paz.

Señor, Dios nuestro, Padre, (Padre)


Señor, Dios Hijo, (Piedad, piedad, piedad, Señor)
Tú que quitas los pecados del mundo (Escúchanos, escúchanos)
Tú que estás a la derecha del Padre (Piedad, piedad, piedad, Señor).

Sólo Tú eres santo, sólo Tú, Señor;


sólo Tú, Altísimo Jesucristo,
con el Santo Espíritu en la gloria de Dios Padre. Amén, amen.

Aleluya (antes del Evangelio)


Ofertorio: Todo lo que tengo (El milagro de los panes)
Todo lo que tengo en tus manos ahora está;
son los frutos de la tierra que Tú multiplicarás.
Son también mis manos y con ellas Tú podrás
repartir al mundo entero el pan que a todos saciará.
Sólo una gota has puesto entre mis manos,
sólo una gota que ahora quieres que te dé. (Ah, ah, ah…)
La gota que, entre tus manos, en lluvia se convertirá y la tierra fecundará.
Todo lo que tengo…
Y nuestras gotas, todas hechas lluvia en Ti,
serán la ninfa de una nueva humanidad. (Ah, ah, ah)
Y la tierra preparará la fiesta de este pan que el mundo compartirá.
Y otra vez el viento desde lejos traerá
el perfume de trigales que el mundo llenará.
Y el amor a todos la cosecha repartirá
y el milagro de los panes de nuevo se repetirá.
Y otra vez el viento…

Ofertorio: Un niño se te acercó.


Un niño se te acercó aquella tarde; sus cinco panes te dio para ayudarte.
/Los dos hicisteis que ya no hubiera hambre/ (bis)

La tierra, el aire y el sol son tus regalos y mil estrellas de luz sembró tu mano.
/El hombre pone su amor y su trabajo/ (bis)

También yo quiero poner sobre tu mesa mis cinco panes que son una promesa.
/De darte todo mi amor y mi pobreza/ (bis)

Santo (de A. Luna)


Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del universo.
Llenos están el cielo y la tierra de tu Gloria, ¡hosanna!
¡Hosanna, hosanna, hosanna en el cielo!
¡Hosanna, hosanna, hosanna en el cielo!
¡Bendito el que viene en nombre del Señor, hosanna en el cielo, hosanna!
¡Hosanna, hosanna, hosanna en el cielo!
¡Hosanna, hosanna, hosanna en el cielo!

Padre nuestro: (En el mar)


En el mar he oído hoy, Señor, tu voz que me llamó
y me pidió que me entregara a mis hermanos.
Esa voz me transformó; mi vida entera ya cambió
y sólo pienso ahora, Señor, en repetirte:
Padre nuestro, en ti creemos;
Padre nuestro, te ofrecemos;
Padre nuestro, en nuestras manos de hermanos.
Cuando vaya a otro lugar tendré, Señor, que abandonar
a mi familia, a mis amigos, por seguirte.
Pero sé que así algún día podré enseñar tu verdad
a mi hermano y, junto a él, yo repetirte:
Padre nuestro, en ti creemos,
Padre nuestro, te ofrecemos,
Padre nuestro, en nuestras manos de hermanos.
(Uh, uh, uh…Rezamos el Padre Nuestro)
Padre nuestro, en ti creemos;
Padre nuestro, te ofrecemos;
Padre nuestro, en nuestras manos de hermanos.

Comunión: Tú nos invitas, Jesús.


Tú nos invitas, Jesús. Para ti siempre somos importantes.
En tu mesa nos das la comida mejor: /el Pan de la Vida y el Amor/. (bis)
DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUEN, DEJAD QUE VENGAN A MÍ. (BIS)
Un mismo pan se nos da, es el Pan de tu Cuerpo y de tu Sangre
que nos une en familia y nos llena de Dios: /el Pan de la Vida y el Amor/. (bis)
DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUEN, DEJAD QUE VENGAN A MÍ. (BIS)
Para crecer y vivir cada día tendré que alimentarme;
para el alma nos das la comida mejor: /el Pan de la Vida y el Amor/. (bis)
DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUEN, DEJAD QUE VENGAN A MÍ. (BIS)

Comunión: Por las calles y ciudades.


Para que pueda sentir tu presencia, quiero servirte, mi Señor del cielo.
Mientras mi cuerpo viva en esta tierra, predicaré por siempre tu Evangelio.
Predicaré por calles y ciudades. Yo les diré que he nacido de nuevo.
Y así verán que tengo nueva vida; comprenderán que Tú eres Dios Eterno.

Y los que sigan tu Palabra en la tierra, Señor,


tendrán la nueva vida por siempre, Señor,
y juntos cantaremos a Ti, mi Señor. A Ti te alabaremos.
Y por las calles y ciudades saldremos por Ti,
sembrando tu Palabra, simiente de amor,
que tiene vida eterna, simiente de amor, que me lavó mi alma.

Si no te alabo, me falta el aire. Si no te alabo, me falta vida.

Y es que no puedo vivir sin Cristo en la vida


ya no puedo vivir, ya no puedo vivir. (BIS, 3 veces)

Acción de gracias: Vaso nuevo.


Gracias quiero darte por amarme. Gracias quiero darte yo a Ti, Señor.
Hoy soy feliz porque te conocí. Gracias por amarme a mí también.
Yo quiero ser, Señor, amado como el barro en manos del alfarero.
/Toma mi vida, hazla de nuevo; yo quiero ser, un vaso nuevo/. (bis)
Te conocí y te amé. Te pedí perdón y me escuchaste.
Sí, te ofendí; perdóname, Señor, pues te amo y nunca te olvidaré.
Yo quiero ser, Señor, amado…
Canto de despedida: Salve: Eres Tú, dulce Señora.
Eres Tú, dulce Señora, por quien mi corazón llora
Implorándote en mi Salve: ¡sálvame!
Eres Tú consoladora de mi alma pecadora
y refugio de mis males: ¡sálvame, sálvame
Esperanza mediadora y bendícenos, Señora, sálvame!

¡Sálvame, Madre, Sálvame! ¡Sálvame, Madre, Sálvame!


¡Sálvame, Madre, Sálvame! ¡Sálvame, Madre, Sálvame!

Tú eres lucero de mis mañanas. Tú eres la copla. Tú eres la fe.


Tú eres la madre del mundo entero y todo el pueblo reza a tus pies: ¡sálvame!

¡Sálvame, Madre, Sálvame! ¡Sálvame, Madre, Sálvame!


¡Sálvame, Madre, Sálvame! ¡Sálvame, Madre, Sálvame!

¡Sálvame, Esperanza mediadora y bendícenos, Señora, sálvame!

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