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Los 

espíritus son símbolos que se escriben sobre una vocal, diptongo o letra rho (Ρ ρ) iniciales de
palabra. El término espíritu no significa 'alma' como pudiera pensarse sino más bien 'aliento' o 'soplo'
porque indicaba la presencia o ausencia de una aspiración [h] al inicio de una palabra. El espíritu
áspero ( ῾ ) indicaba la presencia de esta aspiración, el espíritu suave ( ᾿ ) indicaba su ausencia.

Los espíritus se colocan:

 encima de una letra minúscula: ἁ, ἀ, ῥ, ῤ

 a la izquierda de una letra mayúscula: Ἁ, Ἀ, Ῥ, ᾿Ρ

 sobre la segunda vocal de un diptongo: αὑ, αὐ, Αὑ, Αὐ

Toda palabra que empieza con vocal o con ro debe llevar espíritu, excepto si la palabra está toda en
mayúsculas. Una iota adscrita no puede llevar diacríticos y es por ello que es posible distinguirla en un
texto: Ἄιδης no inicia con el diptongo ᾱι, porque si lo fuera se escribiría Αἵ- (hay que tener en mente que
es el segundo elemento de un diptongo el que lleva los diacríticos), por lo tanto debe existir un elemento
que impida que la iota sea acentuada, este elemento es una iota adscrita, de tal manera que la palabra
anterior se podría escribir también ᾍ-.

Espíritu áspero[editar]

El espíritu áspero (en griego πνεῦμα δασύ, pneuma dasý, 'soplo rudo') originalmente era usado en el


alfabeto por los atenienses, el fonema [h] se indicaba mediante la letra eta (Η), que posteriormente se
volvió la H del alfabeto latino. A consecuencia de la reforma del año 403 a. C.., con la cual el modelo
jónico del alfabeto se oficializó en Atenas y posteriormente se impuso en el resto de Grecia, la eta pasó a
tener el valor de e larga ya que la aspiración que anteriormente representaba no existía en el dialecto
jónico. La aspiración, sin embargo, seguía existiendo en otros dialectos (inclusive el hablado en Atenas
misma) pero con la implantación del modelo jónico dejó de representarse. Esta situación cambió en el
siglo III a. C. cuando se introdujo el uso de una H partida en dos de manera vertical para representar la
aspiración. Más tarde este símbolo se simplificó en una L hasta que finalmente, en el siglo XII d. C., se
simplificó aún más hasta quedar convertido en el símbolo ( ῾ ). Cabe notar que, sin embargo, en el siglo
XII la aspiración [h] no existía más en el idioma griego por lo que su representación no era ya nada más
que un arcaísmo innecesario.

El espíritu áspero se usa solo en las vocales iniciales y en ro al inicio de palabra, por lo que no hay
manera de indicar una [h] en medio de palabra; por ejemplo, ὁδός ('vía') se lee hodós, pero la palabra
compuesta σύνοδος (sýnodos, 'reunión'), no indica que habría que leer sýnhodos, con h aspirada.

En el dialecto ático de Atenas el fonema /r/ siempre era sordo al inicio de palabra, para indicar este
fenómeno se amplió el uso del espíritu áspero: Toda ro inicial había de llevarlo. Este uso del espíritu
áspero sobre la letra ro es la razón por la cual su nombre en griego, ῥo, se transcribía como rho hasta la
edición de 1992 del DRAE.

Espíritu suave[editar]

Mientras que el espíritu áspero indica la presencia del fonema [h], el espíritu suave indica la ausencia de
tal fonema. De hecho su única función es la de permitir una más fácil lectura ya que, como solo las
vocales iniciales lo pueden llevar, indica claramente el inicio de palabra. En los escritos medievales,
donde convenciones modernas como el espaciamiento entre palabras no es particularmente evidente,
es fácil ver que un signo que indica el inicio de palabra tenía una gran importancia.

Como se indicó anteriormente, la ro es la única consonante que acepta el espíritu áspero; por
convención, en palabras que se escriben con dos ros consecutivas la primera lleva espíritu suave y la
segunda espíritu áspero: πολύῤῥιζος polýrrizdos, 'de muchas raíces'.

Acentos[editar]

El griego antiguo era una lengua con acento tonal, al igual que el sánscrito védico y probablemente el
proto-indoeuropeo. Tenía un tono alto, tal vez un tono bajo y una combinación de tono alto seguido de
un descenso de tono.

Durante el periodo helenístico, los filólogos alejandrinos introdujeron la convención de indicar la


posición de estos tonos, cosa que los textos clásicos no hacían hasta ese entonces. El sistema elegido fue
muy simple: la elevación en el tono de voz se indicó con una rayita que subía ( ´ ), la elevación e
inmediato descenso del tono, con una rayita que subía y bajaba ( ^ ) y la ausencia o descenso del tono,
con una rayita que bajaba ( ` ). Al principio, estos símbolos se colocaban sobre todas las vocales de una
palabra: Ἂφρὸδίτὴ; pero pronto se impuso el uso de únicamente el acento agudo por no haber riesgo de
malinterpretación ya que solo podía haber un acento tonal por palabra: Ἀφροδίτη.

La posición de los acentos es semejante a la de los espíritus:

 encima de una letra minúscula: ά, ᾶ, ὰ

 a la izquierda de una mayúscula, pero después del espíritu: Ἄ, Ἂ, Ἆ

 sobre la segunda vocal de un diptongo y si el diptongo es inicial, después del espíritu: αύ, αὺ, αῦ,
αὔ, αὒ, αὖ, Αὔ, Αὒ, Αὖ

Cuando el texto está todo en mayúsculas los acentos, al igual que los espíritus, no se escriben.

Acento agudo[editar]

La elevación en el tono de voz se representaba con el acento agudo, τόνος ὀξύς, tónos oksýs, 'tono
agudo'. De acuerdo con testimonios de gramáticos antiguos, esta elevación en el tono llegaba hasta una
quinta (esto es, cinco notas musicales de diferencia).

El acento agudo se puede escribir sobre cualquier vocal o diptongo, pero su posición no puede ir más
allá de la antepenúltima sílaba si la última vocal es breve o no más allá de la penúltima si la última vocal
es larga.

Acento grave[editar]

El acento grave (en griego τονὸς βαρύς, tonòs barýs, 'tono pesado') se utilizaba para señalar un tono
cuya pronunciación no se ha podido determinar con exactitud. En los primeros escritos, todas las vocales
átonas lo llevaban lo que haría pensar que no se trataba de un tono verdadero (como un tono bajo) sino
más bien que se trataba de la ausencia del tono alto. Con el paso del tiempo, su uso se ha limitado a
escribirlo sobre palabras con acento agudo en la última sílaba cuando son seguidas de otra palabra en la
misma frase, sin saber con certeza qué es lo que indica. De esta manera, el acento grave se escribe en
lugar del agudo en casos como el siguiente: τονός (con acento agudo) se vuelve τονὸς (con acento grave)
en la expresión τονὸς βαρύς, por ejemplo, porque τονός no es la última palabra de la frase.

Diéresis[editar]

La diéresis apareció en griego durante la Edad Media colocándola sobre una iota o ípsilon para indicar
que estas letras no eran la segunda vocal de un diptongo sino el inicio de una nueva sílaba. Por ejemplo:
αὐτή, autế [aʷtɛ́ː] 'ella misma', pero ἀϋτή, aütế [a.yːtɛ́ː] 'grito de guerra'.

La diéresis a veces se omite en la escritura cuando no hay peligro de ambigüedad, pero si el escriba
decide usarlo, se usa inclusive en textos escritos totalmente en mayúsculas, a diferencia de los acentos y
los espíritus que se omiten en este caso.

Iota muda[editar]

El griego antiguo poseía diptongos cuya la primera vocal era larga (ᾱι [aːʲ], ηι [ɛːʲ] y ωι [ɔːʲ]). Sin embargo,
en el dialecto de Atenas (que se volvió el más influyente) estos diptongos fueron simplificados a partir
del siglo III, ya sea for abreviación de la vocal larga ([aːʲ] > [aʲ]) o más frecuentemente por
monoptongación ([aːʲ] > [aː]). Las inscripciones antiguas escriben ΑΙ, ΗΙ, ΩΙ antes del siglo III y Α, Η, Ω
después de ese tiempo.

Las manuscritos medievales, apelando a un purismo etimológico, decidieron reintroducir la iota perdida
en esos diptongos, pero, para indicar que no se pronunciaba, la colocaban debajo de la vocal afectada
(iota subscripta): νεανίᾳ, neanía(i), 'joven'.

Las mayúsculas también pueden llevar la iota etimológica subscripta (ᾼ, ῌ, ῼ) o adscripta ( Αι, Ηι, Ωι).
Cuando la iota es adscripta, no lleva nunca ningún signo diacrítico para indicar que no se pronuncia. Si en
una reunión de dos vocales la segunda lleva diacríticos, se trata en ese caso de un verdadero diptongo y
no de una iota adscripta.

Coronis[editar]

La crasis es la contracción de dos vocales en hiato en palabras contiguas y se indica mediante el símbolo
llamado coronis (κορωνίς / korônís) sobre la vocal que sobrevive la contracción. La coronis es muy
semejante en apariencia al espíritu suave, pero como el espíritu suave solo se encuentra al inicio de
palabra no hay riesgo de confusión: καὶ ἐγώ / kaì egố ('también yo') se vuelve κἀγώ / kagố después de la
crasis.

Cuando la primera de las dos vocales que se contraen lleva aspiración, la coronis se reemplaza por un
espíritu áspero: ὁ ἐμός, ho emós > οὑμός, houmós ('el mío'). Si es la segunda vocal la que lleva la
aspiración y si esta aspiración se puede sustituir por una consonante aspirada, la coronis permanece
como espíritu suave: τῇ ἡμέρᾷ / tễi hêmérâi > θἠμέρᾷ / thêmérâi ('el día', dativo singular). La coronis es
un símbolo usado solo a partir de la Edad Media.

Tabla de diacríticos[editar]

Mayúsculas[editar]

espíritu, acento — vocales rho


etc. — adscrito

—   Α Ε Η Ι Ο Υ Ω ᾼ ῌ ῼ Ρ

— agudo ´ Ά Έ Ή Ί Ό Ύ Ώ        

grave ` Ὰ Ὲ Ὴ Ὶ Ὸ Ὺ Ὼ        

— ᾿ Ἀ Ἐ Ἠ Ἰ Ὀ Ὠ ᾈ ᾘ ᾨ  

agudo ῎ Ἄ Ἔ Ἤ Ἴ Ὄ Ὤ ᾌ ᾜ ᾬ  
suave
grave ῍ Ἂ Ἒ Ἢ Ἲ Ὂ Ὢ ᾊ ᾚ ᾪ  

circunflejo ῏ Ἆ Ἦ Ἶ Ὦ ᾎ ᾞ ᾮ  

— ῾ Ἁ Ἑ Ἡ Ἱ Ὁ Ὑ Ὡ ᾉ ᾙ ᾩ Ῥ

agudo ῞ Ἅ Ἕ Ἥ Ἵ Ὅ Ὕ Ὥ ᾍ ᾝ ᾭ  
áspero
grave ῝ Ἃ Ἓ Ἣ Ἳ Ὃ Ὓ Ὣ ᾋ ᾛ ᾫ  

circunflejo ῟ Ἇ Ἧ Ἷ Ὗ Ὧ ᾏ ᾟ ᾯ  

diéresis ¨ Ϊ Ϋ

macrón — ˉ Ᾱ Ῑ Ῡ

breve ˘ Ᾰ Ῐ Ῠ

Minúsculas[editar]

espíritu vocales
, acento — rho
etc. — suscrito

— α ε η ι ο υ ω ᾳ ῃ ῳ ρ

agudo ´ ά έ ή ί ό ύ ώ ᾴ ῄ ῴ  

grave ` ὰ ὲ ὴ ὶ ὸ ὺ ὼ ᾲ ῂ ῲ  

circunflejo ῀ ᾶ   ῆ ῖ   ῦ ῶ ᾷ ῇ ῷ  

suave — ᾿ ἀ ἐ ἠ ἰ ὀ ὐ ὠ ᾀ ᾐ ᾠ ῤ
agudo ῎ ἄ ἔ ἤ ἴ ὄ ὔ ὤ ᾄ ᾔ ᾤ  

grave ῍ ἂ ἒ ἢ ἲ ὂ ὒ ὢ ᾂ ᾒ ᾢ  

circunflejo ῏ ἆ   ἦ ἶ   ὖ ὦ ᾆ ᾖ ᾦ  

— ῾ ἁ ἑ ἡ ἱ ὁ ὑ ὡ ᾁ ᾑ ᾡ ῥ

agudo ῞ ἅ ἕ ἥ ἵ ὅ ὕ ὥ ᾅ ᾕ ᾥ  
áspero
grave ῝ ἃ ἓ ἣ ἳ ὃ ὓ ὣ ᾃ ᾓ ᾣ  

circunflejo ῟ ἇ   ἧ ἷ   ὗ ὧ ᾇ ᾗ ᾧ  

— ¨ ϊ ϋ

agudo ΅ ΐ ΰ
diéresis
grave ῭ ῒ ῢ

circunflejo ῁ ῗ ῧ

macrón ˉ ᾱ ῑ ῡ

breve ˘ ᾰ ῐ ῠ

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