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J Ejemplares
F elipe
ueces
El Juez del siglo XX
Serie
4 4 Segunda edición
Sistema Bibliotecario de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
Catalogación
PO
H700.113 López Contreras, Felipe
L663f Felipe Tena Ramírez : el juez del siglo XX / Felipe López Contreras ; [obra a
2011 cargo del Instituto de Investigaciones Jurisprudenciales y de Promoción y Difusión
de Ética Judicial ; presentación Ministro Juan N. Silva Meza ; introducción Francisco
Javier Gaxiola Ochoa]. — 2ª. Ed. — México : Suprema Corte de Justicia de la
Nación, Coordinación de Compilación y Sistematización de Tesis, 2011.
xiv, 344 p. ; 24 cm.— (Serie jueces ejemplares ; 4)
ISBN 978-607-468-366-0
Las ilustraciones que forman parte de la presente investigación jurídico-histórica, se utilizan en térmi-
nos de lo dispuesto por el artículo 148, fracción III de la Ley Federal de los Derechos de Autor, sin
fines de lucro, reconociendo expresamente su autoría.
Prohibida su reproducción parcial o total por cualquier medio, sin autorización escrita de los titulares
de los derechos.
Impreso en México
Printed in Mexico
Esta obra estuvo a cargo del Instituto de Investigaciones Jurisprudenciales y de Promoción y Difusión
de la Ética Judicial.
F elipe
Tena Ramírez
El Juez del siglo XX
Segunda Edición
* Ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN
Primera Sala
Ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea
Presidente
Segunda Sala
Ministro Sergio Salvador Aguirre Anguiano
Presidente
VII
Contenido
Introducción ....................................................................................... 1
Prólogo ................................................................................................ 7
1. Su vida y personalidad
IX
X Serie Jueces ejemplares
XIII
XIV Serie Jueces ejemplares
1
2 Serie Jueces ejemplares
Salí agradecido, con nuestra amistad más que consolidada, lleno de sa-
tisfacción, y por qué no decirlo, de orgullo, para comunicarlo en casa
a los míos. Profesor de la materia y titular de la clase de D. Emilio
Rabasa, del Maestro Manuel Herrera y Lasso y del constitucionalista
Felipe Tena Ramírez, quien en mí confiaba para hacerme profesor.
7
8 Serie Jueces ejemplares
13
14 Serie Jueces ejemplares
El quince de julio
del año sesenta y siete
entró don Benito Juárez
triunfante a la capital.2
1
GONZÁLEZ, Luis, “El Liberalismo Triunfante”. Historia General de México, El Colegio de
México-Editorial Harla, t. II, 2a. reimp. 1988 de la 3a. edición de 1981, p. 899.
2
GONZÁLEZ, Luis, …, op. cit., p. 900.
3
GONZÁLEZ, Luis, …,op. cit., pp. 902-903.
4
Los historiadores denominan República Restaurada a esta década.
F elipe T ena R amírez 15
5
COSSÍO VILLEGAS, Daniel, La Constitución de 1857 y sus críticos, SepSetentas Diana,
México, 1980, pp.8-9.
6
COSSÍO VILLEGAS, …, op. cit., p. 14.
7
GARCÍA CANTÚ, Gastón, El Pensamiento de la Reacción Mexicana. Historia documental
1810-1962, Empresas Editoriales, México 1965, p. 525.
16 Serie Jueces ejemplares
8
GONZÁLEZ, Luis, …, op. cit., pp. 908-909.
9
Peonaje: Conjunto de jornaleros que trabajan en una obra material que no requiere
arte ni habilidad, sin medios de producción propios, a cambio de un jornal pagado parcial-
mente en especie. / Obraje: Prestación de trabajo que se imponía a los indios de América, y
que las leyes procuraron extinguir. / Leva: Reclutamiento forzoso de gente para el servicio
de un Estado o grupo armado./ Real Academia Española, Diccionario de la Lengua Española,
Madrid, 1970.
F elipe T ena R amírez 17
10
GONZÁLEZ, Luis, …, op. cit., pp. 912-913.
11
Ibid., pp. 924-925.
18 Serie Jueces ejemplares
12
El Plan de Palo Blanco (marzo de 1876), en su artículo 2o. enunciaba que la no-
reelección tendría el carácter de ley suprema en tanto se elevaba al rango de reforma
constitucional. Aprobado en 1878, dejó un resquicio que permitía volver a la presidencia
una vez transcurridos cuatro años de haber cesado en sus funciones. “…A partir de enton-
ces, otras reformas le permitieron continuar indefinidamente en el Poder Ejecutivo.”/ Tena
Ramírez, Felipe, Leyes fundamentales de México 1808-2005, Editorial Porrúa, 25a. ed., México,
2008, p. 721.
13
GONZÁLEZ, Luis, …, op. cit., p. 929.
14
GONZÁLEZ, Luis, …, op. cit., pp. 934-936.
F elipe T ena R amírez 19
15
RODRÍGUEZ GÓMEZ, Jesús, “Don Felipe de Jesús Tena”, Homenaje en la Barra Mexi-
cana, Colegio de Abogados, en septiembre 14 de 1959; en Recuerdos, edición privada,
Astrografic, México, 1998, pp. 30-31.
16
Idem.
17
TENA Ramírez, Leyes.., op. cit., p. 722.
1.2. Entorno familiar
18
El Partido Liberal Mexicano de Ricardo Flores Magón y el Partido Antireeleccionista
de Francisco I. Madero, ambos de oposición que coincidían en la cuestión electoral, ya que
sólo el primero buscaba reivindicaciones sociales, en TENA Ramírez, Leyes…, op. cit., p. 727.
21
22 Serie Jueces ejemplares
Por tanto, fue natural que entre los propios maderistas sur-
giera la necesidad de incorporar reivindicaciones sociales —eco de las
propuestas floresmagonistas— mismas que fueron planteadas en
el Plan Político Social, que pedía la restitución de las tierras usurpadas
y la dotación de los terrenos sin cultivar para quienes lo solicitaren, el
aumento de jornales, la limitación de las horas de trabajo, etcétera.20
19
TENA RAMÍREZ, Leyes…, op. cit., p. 725.
20
Ibid., p. 727.
21
Las tropas que tomaron Ciudad Juárez estaban al mando de los generales Pascual Orozco
y Francisco Villa.
24 Serie Jueces ejemplares
22
RODRÍGUEZ GÓMEZ, Don Felipe de J…, en Recuerdos, p. 31.
F elipe T ena R amírez 25
23
TENA RAMÍREZ, …, op. cit., pp. 804-805.
24
Ibid., p. 806.
26 Serie Jueces ejemplares
25
ULLOA, Berta, …, op. cit., p. 1131.
26
RODRÍGUEZ GÓMEZ, … op. cit., pp. 33 y 109.
F elipe T ena R amírez 27
Proscrita la ley del egoísmo, vigente en toda su plenitud la ley del amor,
el mundo de las madres se convierte en un mundo de excepción,…
27
TENA RAMÍREZ, “Felipe de Jesús Tena”. Facultad de Derecho de la UNAM, 25 de marzo
de 1958, en Discursos, edición privada, Fimax Publicistas, Morelia, Mich., 1980, pp. 104-105.
28
RODRÍGUEZ GÓMEZ, op. cit., p. 29.
29
TENA RAMÍREZ, Felipe, “Elogio a la Madre”, Teatro Alameda de la Ciudad de México,
mayo 10 de 1940, en Discursos, pp. 28-29.
28 Serie Jueces ejemplares
30
TENA RAMÍREZ, Elogio…, op. cit., p. 30.
31
DEL ARENAL FENOCHIO, Jaime, Hombres e Historia de la Escuela Libre de Derecho,
ELD, México, 1999, p. 311.
F elipe T ena R amírez 29
Sobre este pensamiento acerca del papel que debe ser desem-
peñado en especial por quienes enarbolan y hacen posible la justicia
32
RODRÍGUEZ GÓMEZ, op. cit., p. 37.
33
SCJN, Ministros 1917-1994 Semblanzas, t. II, México, 2002, pp. 685-688.
34
Felipe de Jesús Tena recibió del Pleno de la Corte la encomienda de proponer un lema,
que lo tomó de un jurista italiano quien a su vez lo citaba de un autor latino que pudo ser
Cicerón;Vid. Barra Mexicana, Colegio de Abogados, entrega del Premio Nacional de Juris-
prudencia 1991, en “Recuerdos”, p.110.
30 Serie Jueces ejemplares
desde el más elevado de los cargos del Poder Judicial, su hijo Felipe
Tena comentó: “Elegante contrapunto, conforme al cual una sumi-
sión conduce a la libertad”.35
35
TENA RAMÍREZ, Palabras del licenciado Felipe Tena Ramírez, pronunciadas durante la sesión
solemne del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el 17 de marzo de 1970, en la que
fue despedido como Ministro, con motivo de su jubilación voluntaria, en Discursos, p. 155.
36
Vid. RODRÍGUEZ GÓMEZ, Recuerdos, p. 36.
37
Jesús Rodríguez, a la vez que destaca la admiración de Felipe por su padre, considera
que, en estricta justicia, debe mencionarse la devoción que sentía por su venerable madre.
1.3. El estudiante
31
32 Serie Jueces ejemplares
38
ESTRADA SÁMANO, Rafaél, “Vida, Obra y Legado de Felipe Tena Ramírez”, Revista de
Investigaciones Jurídicas, Escuela Libre de Derecho, año 1995, No. 19, México 1995, p. 436.
También en Jardín Moreliano de Poetas, Balsal Editores, Morelia, Mich. 1970, p. 279.
39
DEL ARENAL FENOCHIO, Hombres e historia…, op. cit., p. 320.
F elipe T ena R amírez 33
1924,
Sociología Luis Chico Goerne
Primer año
1925, II. Economía Política Fco. Javier Gaxiola Jr.
Segundo año
1926, III. Derecho Civil Pedro Lascuráin
Tercer año
40
El maximato es reconocido como la prolongación en el ejercicio del poder del presi-
dente Plutarco Elías Calles, con los dos presidentes subsecuentes.
34 Serie Jueces ejemplares
41
DEL ARENAL FENOCHIO, …, op. cit., p. 312.
F elipe T ena R amírez 35
Felipe incursionó con éxito en la poesía, que sólo recitó a sus amigos
y se abstuvo de publicar salvo alguna, que apareció en la Crestomatía
Michoacana… recordaré nuestra afición al teatro clásico; admira-
mos a doña María Guerrero y a don Ricardo Calvo, dulce su voz en los
Amantes de Teruel; brava como la de un cadete de la Gascuña, cuando
recitaba a Cyrano; y tímidos alumnos de la Alianza Francesa,
asistimos a la comedia de Mme. Gabrielle Dorziat. 42
42
RODRÍGUEZ GÓMEZ, Don Felipe Tena…, en “Recuerdos”, p. 114.
43
TENA RAMÍREZ, Felipe, Tesis profesional, fotocopias de apuntes mecanografiados,
Escuela Libre de Derecho, México, mayo de 1929, p. 3.
44
Paréntesis del autor: Dado que hasta la fecha no ha sido publicada como libro la tesis
profesional de Felipe Tena Ramírez, fue necesario recurrir a la amabilidad de Rafael Es-
36 Serie Jueces ejemplares
Pero yo quiero elegir entre ellos a los dos maestros que dejaron
en mi vida huella más honda: D. Emilio Rabasa y D. Miguel Macedo.
Permitidme, señores, que en esta ocasión en que rindo homenaje
al primero evoque a su lado el nombre del segundo, porque unidos
están en el corazón de la Escuela y en la memoria de sus alumnos.
Y aquí dejo esta siempreviva, para ti, maestro Macedo, que fuiste,
en el mundo del saber, aventurero de todas las latitudes, besado por
la luz de todas las constelaciones.45
Pero había algo en su clase que no había en sus libros. No eran ideas
que vinieran a cambiar la estructura de los sistemas expuestos en
sus obras, porque el pensador de los últimos años jamás desmintió
ninguna de sus doctrinas anteriores. No era la visión de síntesis,
que lo acompañó toda la vida y que ponía en sus panoramas inte-
lectuales los trazos netos y simples del perfil de una serranía. Lo que
tenía en sus clases y no había en sus libros, era la tolerancia, la acti-
tud nobilísima que le dio la Escuela y que él le devolvió multiplicada.
Porque no sé todavía, señores, quien fue maestro de tolerancia, si
la Escuela por una parte o Rabasa y Macedo por la otra… Su mejor
lección fue aquella en que elevó a norma de educación la regla de la
tolerancia. Su mejor actitud, aquella en que afirmó sus ideas y res-
petó las ajenas… Es esa la tolerancia, la educación de más alta
estirpe, porque es cortesía intelectual, urbanidad del espíritu. 46
46
Ibid., pp. 94-97.
38 Serie Jueces ejemplares
47
Ibid., pp. 97-98.
1.4. El maestro
39
40 Serie Jueces ejemplares
48
ESTRADA SÁMANO, Vida, obra y…, op. cit., nota a pie de página 443.
49
Azuela Güitrón fue alumno de Felipe Tena Ramírez en el año de 1956. Fungió como
su Secretario de Estudio y Cuenta en la Suprema Corte de Justicia, por invitación que éste
le hizo, de 1960 a 1970. Fue nombrado Ministro de ese Alto Tribunal en 1983, asumiendo su
presidencia del 2 de enero de 2003 al 31 de diciembre de 2006.
F elipe T ena R amírez 41
50
Nota del autor. Todo lo entrecomillado corresponde literalmente a parte del texto
formulado por Mariano Azuela Güitrón, titulado Mi relación con Don Felipe Tena Ramírez.
51
SERRANO FIGUEROA, Rafael. “Vida y pensamiento de Felipe Tena Ramírez”, en
Serrano Migallón, Fernando (compilador), Estudios Jurídicos en Homenaje a Felipe Tena
Ramírez, Editorial Porrúa, México 1999, p. 408.
42 Serie Jueces ejemplares
52
Documento consultado en los archivos personales de Felipe Tena Ramírez y de Jesús
Rodríguez Gómez, que me fueron amablemente proporcionados por Francisco Rodríguez
Anaya.
F elipe T ena R amírez 43
53
TENA RAMÍREZ, “Emilio”…, op. cit., p. 86.
1.5. Su vida sentimental
45
46 Serie Jueces ejemplares
54
ESTRADA SÁMANO, Vida, obra y…, op. cit. p. 437.
55
RODRÍGUEZ GÓMEZ, “Don Felipe …”, op. cit., p. 114.
F elipe T ena R amírez 47
56
GAXIOLA, Francisco Javier, Memorias,. Edit. Porrúa, México, 1975, p. 126.
1.6. Su trayectoria profesional
49
50 Serie Jueces ejemplares
57
SERRANO FIGUEROA, Vida y pensamiento…, op. cit., p. 409
58
Vid. ARVIZU T., Edmundo, Aquellos años 40. Recuerdos, anécdotas, comentarios, 2a. ed.,
Editorial Consuelo Sánchez y Asociados, México, 2008, pp. 30 y ss.
F elipe T ena R amírez 51
59
Vid. nota 50.
54 Serie Jueces ejemplares
Por otra parte, Luis Chico Goerne —rector de la UNAM entre 1935
y 1938— y Teófilo Olea y Leyva —considerado uno de Los Siete Sa-
bios de México— quienes fueron sus maestros en la Escuela Libre de
Derecho, coincidieron con Felipe Tena Ramírez como Ministros de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación.
…hay un tema que el autor trata con tal largueza que por lo des-
mesurado parece romper la armonía del conjunto; es el estudio sobre
fueros y tribunales especiales, el más acabado acerca de la materia
que ha producido hasta ahora nuestra bibliografía jurídica. En aque-
lla época en que lo excepcional era la jurisdicción ordinaria y la
regla una profusión anárquica de jurisdicciones privilegiadas, el estu-
dio de Peña y Peña esclareció el panorama y fijó definitivamente
60
TENA RAMÍREZ, “Manuel de la Peña y Peña”, Rotonda de los Hombres Ilustres, enero 2
de 1950, en representación de la Academia Mexicana de Jurisprudencia y Legislación, del
Ilustre y Nacional Colegio de Abogados y de la Barra Mexicana, en Discursos, p. 77.
F elipe T ena R amírez 55
61
Ibid., pp. 78-79 (las negrillas son mías).
62
DROMUNDO, Baltazar (en su libro Genios y Líderes de la Historia, vol. III, versión
autorizada por el Fondo de Cultura Económica Promexa, pp. 103-104) afirma que José María
Morelos, adelantándose al siglo XX en los Sentimientos de la Nación, exponía su pensamien-
to social pudiendo observarse que con su patriotismo y perspicacia de estadista, avizoraba el
expansionismo de otros países. “Con menos de cuatro décadas de anticipación, Morelos
parecía considerar los peligros de una política anexionista y su voz adquiría, en los Sentimien-
tos, un acento de advertencia y de presagio.”
63
Destino Manifiesto, frase acuñada por John L. Sullivan en 1845, que no era más que
una manera de justificar el expansionismo norteamericano.
64
CUÉ CÁNOVAS, Agustín, Historia Social y Económica de México 1521-1854, Editorial
Trillas, S.A., México, 1963, p. 402.
56 Serie Jueces ejemplares
65
Ibid., p. 400.
66
TENA RAMÍREZ, “Manuel de la…”, op. cit., pp. 79 y 83.
F elipe T ena R amírez 57
67
Ibid., pp. 79-80.
58 Serie Jueces ejemplares
68
TENA RAMÍREZ, Felipe, “El Amparo de los Derechos del Hombre”, al tomar posesión
como presidente del Seminario sobre Amparo, organizado por las Naciones Unidas y cele-
brado en la Ciudad de México en agosto 15 de 1961, en Discursos, pp. 146-147.
69
Documento consultado en los archivos ya mencionados.
F elipe T ena R amírez 59
ficó a ese ciclo como el más importante de su vida y reiteró los prin-
cipios que habían regido su pensar y actuar, de esta manera:
Es aquí, y sólo aquí, donde se forma cada uno de los altos Jueces
del país. La escuela para esta clase de alumnos, únicamente la Corte
puede serlo,…
70
TENA RAMIREZ, Felipe, “Palabras del licenciado Felipe Tena Ramírez, pronunciadas
durante la sesión solemne del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, de 17 de
marzo de 1970, en la que fue despedido como Ministro, con motivo de su jubilación volun-
taria”, en Discursos, pp. 152-155.
60 Serie Jueces ejemplares
71
Suprema Corte de Justicia de la Nación. Informe rendido por su Presidente en el año de
1970, Mayo Ediciones, México, 1970.
F elipe T ena R amírez 61
72
Documento consultado en los archivos ya mencionados.
1.7. El jurista poeta
73
TENA RAMÍREZ, “Elogio de…”, en Discursos, p. 29.
63
64 Serie Jueces ejemplares
74
TENA RAMÍREZ, Felipe, “La Oratoria en México”. Ante el Club Rotario de la Ciudad
de México en septiembre 26 de 1939, en Discursos, pp. 11- 12 y 16.
F elipe T ena R amírez 65
Palacio Nacional,
14 de Julio de 1965.
Sr. Lic.
FELIPE TENA RAMÍREZ,
Ministro de la Suprema Corte
de Justicia de la Nación,
C i u d a d.
(firma ilegible) 75
75
Documento consultado en los archivos ya mencionados.
68 Serie Jueces ejemplares
76
TENA RAMÍREZ, Felipe, El Ideario Político-Constitucional de los criollos mexicanos de
1808, Editorial Porrúa, México, 2010, Estudio Preliminar, p. XI.
F elipe T ena R amírez 69
Difícil sería concebir algo más efímero que “la estela en el dorso
de la ola”, bella figura literaria, así como una metáfora más precisa
que la de calificar al año de 1847 como “lívido”, dando la idea de una
palidez de muerte.
77
TENA RAMÍREZ ,Felipe, Formación Histórica y Filológica del Nombre de Morelia. Copia
fotostática del texto original, amablemente proporcionado por Francisco Rodríguez
Anaya, pp. 5-6. (el primer paréntesis es mío).
78
TENA RAMÍREZ, “Manuel de la…”, en Discursos, p. 82.
1.8. Su obra
71
72 Serie Jueces ejemplares
79
TENA RAMÍREZ, “Emilio…”, en Discursos, pp. 89-90.
F elipe T ena R amírez 73
80
Ibid., pp. 91-92.
74 Serie Jueces ejemplares
81
TENA RAMÍREZ. Leyes… op. cit., pp. xxiv.
82
TENA RAMÍREZ, Felipe, Vasco de Quiroga y sus pueblos de Santa Fe en los siglos XVIII y
XIX. Editorial Porrúa, S.A., México, 1977, p. 15.
76 Serie Jueces ejemplares
Para fijar su última empresa, en vísperas del declive del héroe, Ario
acoge en el límite de las tierras altas la fundación del tercer poder
previsto en la Carta de Apatzingán. Allí quedó clavada la enseña
última, la realización final del pensamiento de Morelos, presidiendo
las altitudes todas, la amplitud cabal del futuro de México. Después,
“la trágica expiación de la grandeza”.
* * *
En la trayectoria del derecho positivo de México, su fuente pri-
migenia está sin duda en la Constitución de 1824 y en el Acta
Constitutiva que la precedió. Mas en la entraña social y política de
la nación, aquella que se nutre de veneros sólo accesibles a los inspi-
rados, fermenta siempre un anhelo, cuyo cumplimiento se entrega
al porvenir como un mensaje encomendado a la suerte de los vientos.
83
Discurso oficial pronunciado por el Sr. Ministro Felipe Tena Ramírez, en representación
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la sesión del Pleno solemne celebrado con mo-
tivo del sesquicentenario del Primer Tribunal Supremo de Justicia. (6 de julio de 1965), en
Informe rendido a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por su Presidente el señor Lic.
Agapito Pozo, México, 1965, pp. 65-74.
82 Serie Jueces ejemplares
1. Jesús Romero Flores, Historia de Michoacán, Primera Edición. México, 1946, Tomo I, p. 585. J. E.
Hernández y Dávalos, Documentos para la Historia de la Guerra de Independencia, Instituto Nacional
de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana, Edición Facsimilar, México, 1985, Tomo VI, p. 32.
2. Hernández y Dávalos, ídem. Tomo VI, p. 37
3. Diccionario Porrúa de Historia, Biografía y Geografía de México, 5a. Edición, Editonal Porrúa, S.A.,
México, 1986, p. 2515; Diccionario Biográfico Mexicano, por Miguel Ángel Peral, Editorial P.A.C.,
México, Tomo II, pp. 715 y 716
4. María Teresa Martínez Peñaloza, Morelos y el Poder Judicial de la Insurgencia Mexicana, Gobierno
del Estado de Michoacán. 1985, p. 56.
F elipe T ena R amírez 85
5. Artículos 181. 183. 184. 185. 186, 189 y 195 de la Constitución de Apatzingán.
6. Hernández y Dávalos, ídem, Tomo VI, p. 208.
7. La Constitución de Apatzingán y los creadores del Estado Mexicano, UNAM, México, 1964, p. 666.
86 Serie Jueces ejemplares
8. Fragmento de un artículo publicado en “El Universal”, el 27 de octubre de 1948, citado por Ignacio Burgoa,
El Juicio de Amparo, vigesimosexta edición, Editorial Porrúa, S.A., México, 1989, p. 106, nota 145.
F elipe T ena R amírez 87
desprecio por los honores que los miembros del Congreso quisieron
tributarle llamándolo “Generalísimo” y “Alteza”.
10. La Suprema Corte de Justicia. Sus Orígenes y Primeros Años, 1808-1847. Edición de la Suprema
Corte de Justicia, México, 1986, Segunda Parte, p. 85.
11. La Suprema Corte de Justicia. Sus Orígenes y Primeros Años..., Segunda Parte, p. 85.
F elipe T ena R amírez 91
84
Discurso pronunciado por el Sr. Ministro Felipe López Contreras, durante la cere-
monia del CLXXV aniversario de la instalación del Supremo Tribunal de Justicia de la América
Mexicana, por Don José Morelos y Pavón, en Ario de Rosales, Michoacán. (7 de marzo de 1990),
en Informe rendido a la Suprema Corte de Justicia de la Nación por su Presidente el señor
Lic. Carlos del Río Rodríguez, México, 1990, pp. 373-384.
F elipe T ena R amírez 93
pesina y obrera; las reformas que había desoído el siglo XIX. El Primer
Jefe las acogía, pero consideraba que deberían realizarse como leyes
revolucionarias, más allá de la Constitución, a la manera como Juárez
había expedido las Leyes de Reforma.
85
El Pensamiento Constitucional Mexicano, por el Lic. Felipe Tena Ramírez Ministro
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y Representante del Poder Judicial de la
Federación en la Comisión Nacional para las Conmemoraciones Cívicas de 1966 y 1967.
Publicación de la Comisión Nacional para las Conmemoraciones Cívicas de 1966 y 1967.
1.9. El filántropo
99
100 Serie Jueces ejemplares
86
Testamento Público Abierto de Felipe Tena Ramírez, de fecha 3 de noviembre de 1981,
p. 2-V y 3 (las cursivas son mías).
87
RODRÍGUEZ GÓMEZ, Jesús, Presentación. Felipe Tena Ramírez, en Serrano Migallón,
Estudios Jurídicos…, op. cit., p. xx.
F elipe T ena R amírez 101
88
RODRÍGUEZ GÓMEZ, “Don Felipe Tena…”, op.cit, pp. 114-115.
89
Agradezco enormemente a Jorge Rodríguez Anaya, Tesorero del Patronato de la Fun-
dación de Socorros Sara Ramírez de Tena I.A.P., me haya facilitado la información que detallo
sobre esta gran institución.
1.10. El ocaso
AÑO 2000
103
104 Serie Jueces ejemplares
90
LÓPEZ LARA et al, Jardín…, op.cit., p. 131, en Estrada Sámano, Vida, obra y…, op. cit.,
p. 438.
2. Visión de Tena Ramírez
sobre...
2.1. Vasco de Quiroga y sus
pueblos de Santa Fe
91
TENA RAMÍREZ Felipe, Vasco de Quiroga …, op. cit., p. 10.
107
108 Serie Jueces ejemplares
92
Ibid., pp. 10-11. (las cursivas son mías).
F elipe T ena R amírez 109
93
Ibid., p. 12.
94
Ibid., p. 10.
110 Serie Jueces ejemplares
95
TENA RAMÍREZ, Felipe, Manuel Abad y Queipo en la Historia de México. Investigación
no terminada que en su versión mecanográfica, con correcciones a mano del autor, me fue
proporcionada en copia fotostática por Francisco Rodríguez Anaya, 1973 capítulo II, p. 13.
F elipe T ena R amírez 111
96
TENA RAMÍREZ, Vasco de Quiroga… , op. cit., p. 25.
112 Serie Jueces ejemplares
97
Nota. Los viajes de Marco Polo al Oriente habían resultado en exitosos intercambios
comerciales, científicos y culturales altamente redituables para Europa por el papel, la pól-
vora y la pimienta principalmente, productos que llegaron a ser muy codiciados en la época.
98
PARRY, John H., Europa y la expansión del mundo 1415-1715, Breviarios No. 60, Fondo
de Cultura Económica, 1a. reimp. de la 3a. edición en español, México, 2003, p. 12.
F elipe T ena R amírez 113
99
TENA RAMÍREZ, Vasco de Quiroga…, op. cit., p. 47.
100
Ejemplos de esas sociedades ideales son Utopía (1516) de Tomás Moro, La Ciudad del
Sol (1623) de Campanella, Mundus Alter (1605) de Joseph Hall, la Nova Atlantis (1624) y la
114 Serie Jueces ejemplares
103
Ibid., p. 67.
104
La Línea Alejandrina era una frontera que iba de norte a sur, cien leguas al occidente
de las islas Azores y de Cabo Verde. A petición de Portugal, España aceptó que esa línea
fuera trasladada 270 leguas más al oeste (tiempo después eso significaría la posesión del
territorio de lo que hoy es el Brasil). PARRY, John H., Europa y…, op. cit., pp. 67-73.
116 Serie Jueces ejemplares
105
TENA RAMÍREZ, Vasco de Quiroga y…, pp. 65-66.
106
Codicilo. Instrumento en que, antes de ser promulgado el código civil, se podían y solían
hacer con menos solemnidades las disposiciones de última voluntad.
107
TENA RAMÍREZ, Vasco de…, p. 69.
108
La encomienda indiana o la convivencia entre indios y españoles fueron ensayos
fallidos, en tanto que el proyecto de los pueblos-hospitales fundados por Vasco de Quiroga
F elipe T ena R amírez 117
si funcionó. Esos datos constan en su Información en Derecho, de julio de 1535; Ver TENA
RAMÍREZ, Vasco de…, pp. 70-76.
109
MORENO TOSCANO, Alejandra, “La Era Virreinal”, en Historia Mínima de México,
Colegio de México, México, 1995, cap. II, pp. 53-54.
118 Serie Jueces ejemplares
110
POSADAS OCAMPO, Juan Jesús, “Ahí tienes a tu madre”, Homilía en los 450 años
de Nuestra Señora de la Salud y los 425 años de la muerte de don Vasco de Quiroga. Arzobis-
pado de Guadalajara, Pátzcuaro, Mich., 1990, p. 5.
111
MORENO TOSCANO, La era virreinal, op. cit., p. 54.
F elipe T ena R amírez 119
112
POSADAS OCAMPO, “Ahí tienes a tu madre”…, op. cit., p. 5.
113
MIRANDA, Francisco, Vasco de Quiroga Varón Universal, Editorial Jus, México,
2007, p. 22.
114
Vid. MIRANDA, Francisco, Vasco de…, op.cit., pp. 22-23.
115
En la Primera Real Audiencia de México fue designado como presidente Nuño Beltrán
de Guzmán y en calidad de oidores Alonso de Parada, Francisco Maldonado, Juan Ortiz de
Matienzo y Diego Delgadillo
F elipe T ena R amírez 121
116
La Segunda Real Audiencia estuvo integrada por Sebastián Ramírez de Fuenleal en la
presidencia y por los oidores: Juan Salmerón, Alonso Maldonado, Francisco Zeinos y Vasco
de Quiroga.
117
Años contados a partir del 9 de enero de 1531 en que arribó a la capital del virrei-
nato de la Nueva España, en HERNÁNDEZ, Francisco Martín, Don Vasco de Quiroga (Protector
de los Indios), Publicaciones Universidad Pontificia de Salamanca / Caja Salamanca y Soria, Sala-
manca, 1993, p. 24.
122 Serie Jueces ejemplares
Ahí nació (en 1451), la que sería la reina Isabel, también llamada
la Católica, patrocinadora de los viajes de Cristóbal Colón; ahí fue la
última morada de fray Luis de León, donde se conservan sus restos;
espacio donde vio la luz primera (aproximadamente en 1410) Alonso
118
HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco…, op. cit., p. 31, la fija en 1485; SERRANO
GASSENT, Paz, Vasco de Quiroga. Utopía y derecho en la conquista de América, Fondo de Cul-
tura Económica de España, España, 2001, p. 15 en nota 1, dice: “Tradicionalmente se databa
la fecha en 1470, lo que confirmaba la idea general de que había muerto a los 95 años y
habría pasado a las Indias como Juez a los 60 años, aproximadamente. Otras interpretaciones
como la de J. B. Warren, sostienen que debe retrasarse la fecha ocho años, y Francisco Miranda
la sitúa en 1488.”; TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op.cit., p. 27, refiere: “…Don Vasco de Qui-
roga, nacido en el año de 1470, según cronología tradicionalmente aceptada”.
119
LANDA, Rubén, Vasco de Quiroga, Grijalbo, México-Barcelona 1965, p. 16.
F elipe T ena R amírez 123
La única vez que he pasado (nada más que pasar) por Madrigal de las
Altas Torres, lo hice con catedráticos de la Universidad de Salaman-
ca. A la vista del pueblo se habló de Isabel la Católica y del Tostado,
no de Don Vasco, aunque los tres nacieron allí…121
Madrigal de las Altas Torres, aun cuando era una ciudad ilus-
trada, conservaba las ventajas de una pequeña comunidad en la que
predominaban las labores del campo. De ahí puedo inferir que ese am-
biente plácido hizo posible que el joven Vasco conviviera desde muy
120
HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco…, op. cit., pp. 29-30.
121
LANDA, Rubén, …, op. cit., p. 13.
124 Serie Jueces ejemplares
122
Ibid., pp. 17-19.
123
LEÓN, Francisco de P., Iconografía, Epigrafía y Prosapia, Juegos Florales 1970 en honor
de Vasco de Quiroga/ Documento consultado en los archivos personales de Felipe Tena Ramírez
y Jesús Rodríguez Gómez, que me fueron amablemente proporcionados por Francisco Ro-
dríguez Anaya.
F elipe T ena R amírez 125
124
LEÓN, Francisco, Iconografía…, op.cit., p. 55.
125
HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco…, op. cit., nota 7, a pie de pág. 32.
126 Serie Jueces ejemplares
126
ARCE GARGOLLO, Pablo, Biografía y guía bibliográfica de Vasco de Quiroga. Jurista con
mentalidad secular. Editorial Porrúa – Universidad Panamericana, México, 2007, p. 12.
127
Arzobispado de Morelia, Vasco de Quiroga y Obispado de Michoacán. Edición pastoral
del 450 aniversario, Fimax Publicistas, Morelia, Mich., 1986, pp. 179-180.
128
HERNÁNDEZ, Francisco, …, op. cit., p. 33.
F elipe T ena R amírez 127
129
LANDA, Rubén, …, op. cit., p. 23.
130
HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco…, op. cit., p. 34.
131
Vid. TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit., pp. 30-33.
128 Serie Jueces ejemplares
132
Testimonio recogido por Cristóbal Cabrera, en HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco…,
op.cit., p. 45.
F elipe T ena R amírez 129
133
ARCE GARGOLLO, Biografía y…, op.cit., pp. 21-22.
134
Vid. WARREN, J. Benedict, Vasco de Quiroga en África, Fimax Publicistas, Morelia,
Mich., México, 1998, pp. 10-13.
135
HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco…, op. cit., pp. 45-46.
130 Serie Jueces ejemplares
136
WARREN, J. Benedict, Vasco de…, op. cit., pp. 9-16. La nota se encuentra en la p. 13.
137
ARCE GARGOLLO, Bibliografía y ..., pp. 15-16.
F elipe T ena R amírez 131
138
“Tratado de paz ajustado entre Pedro de Godoy, teniente del marqués de Comares,
capitán general de los reinos de Tremecén y Túnez, y el Licenciado Quiroga, Juez de resi-
dencia de Orán, y ciertos embajadores del rey de Tremecén, fecho en Orán a 12 de agosto de
1526.”, en HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco …, op. cit., pp. 46-47.
139
ARCE GARGOLLO, Biografía y…, op. cit., pp.16-17.
132 Serie Jueces ejemplares
trabó amistad con Juan Bernal Díaz de Luco, prelado de alto rango —que
llegaría a ser el obispo de Calahorra—, culto hombre de letras, refor-
mador, miembro del Consejo de Indias y consejero principal de Isabel
I, quien en ese entonces desempeñaba la regencia en ausencia de
Carlos I (desde julio de 1529 hasta abril de 1533).140 A través de las
conversaciones con Bernal Díaz, Quiroga conoció de las quejas por
la actuación infame hacia los indígenas de los miembros de la Pri-
mera Audiencia, presidida por Nuño de Guzmán. También durante su
estancia en la Corte ganó el reconocimiento de Juan Tavera, canciller
y arzobispo primado de España.
140
HERNÁNDEZ, Francisco, …, op. cit., pp. 47-48.
F elipe T ena R amírez 133
141
Ibid., p. 53.
134 Serie Jueces ejemplares
que viajaron juntos con destino a la Nueva España, formuló los retra-
tos psicológicos de sus colegas. Definió a Maldonado como “hombre
noble y de buen seso y aficionado a andar y ver tierras”; a Ceynos lo con-
sideraba como “hábil para disponer” advirtiendo que “se aplica bien a
ello”; sobre Vasco fue más explícito y decía de él: “es hombre virtuoso,
buen cristiano y muy celoso del servicio de Dios, en este género de
conversión y conservación de indios y es de parecer tímido, encogido y
muy escrupuloso, y de esta guisa es más para ejecutar que para dis-
poner”.142 Indudablemente que, al menos en lo que respecta al último de
los mencionados, comparto sin reservas lo acertado de sus apreciaciones.
142
MIRANDA, Francisco, Vasco de Quiroga, … op. cit., p. 19.
143
ARCE GARGOLLO, Biografía y…, op. cit., p. 28.
F elipe T ena R amírez 135
144
TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit., p. 73.
136 Serie Jueces ejemplares
…andan por los tianguez e calles a buscar de comer lo que dexan los
puercos y los perros, cosa de gran piedad de ver y estos guérfanos
son tantos, que no es cosa de se poder creer si no se vee.146
145
MIRANDA, Francisco, Vasco de Quiroga, op. cit., pp. 32-34.
146
AGI: Patronato Real, Ramo 15, en TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit. p. 62.
F elipe T ena R amírez 137
Sin embargo, para que se pudiese dar ese nuevo tipo de sociedad
a la que aspiraba, se tenía que partir de la confianza —que en Quiroga
es evidente— de que los indios naturales del Nuevo Continente, conta-
ban con las cualidades humanas que habían desaparecido en el Antiguo.
147
TENA RAMÍREZ, Vasco de Quiroga y sus…, op. cit., p. 74.
138 Serie Jueces ejemplares
148
REYES, Alfonso, Utopías americanas (1938), en ZAVALA, Silvio, Recuerdo de Vasco de
Quiroga, Editorial Porrúa, S.A., 4a. ed., México, 2007, p. 139.
149
Arzobispado de Morelia, Vasco de…, op. cit., p. 12, dice: “Pero aquéstos naturales
vémoslos todos naturalmente inclinados e dados a todas estas cosas que son fundamento
y propios de nuestra fe y religión cristiana, que son humildad, paciencia y obediencia, y
descuido y menosprecio de estas pompas, faustos de nuestro mundo y de otras pasiones del
ánima, y tan despojados de todo ello, que parece que no les falte sino la fe y saber las cosas
de la instrucción cristiana para ser perfectos y verdaderos cristianos”.
150
SOLÍS, Felipe y GALLEGOS Angel, Tariácuri y el reino de los purépechas, Editorial
México Desconocido VIII, Pasajes de la Historia, México, 2002, p. 79.
F elipe T ena R amírez 139
151
SERRANO GASENT, Paz, Vasco de Quiroga. Utopía y derecho en la conquista de América,
Fondo de Cultura Económica de España, Madrid, 2001, p. 20.
152
ZAVALA, Silvio, Recuerdo de…, op. cit., p. 139.
140 Serie Jueces ejemplares
153
LANDA, Rubén, Vasco…, op. cit., pp. 27-28.
154
TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit., pp. 64-66.
155
POSADAS OCAMPO, “Ahí tienes a tu madre”…, op. cit., pp. 3-4.
F elipe T ena R amírez 141
Eso hizo nada más Tata Vasco y al punto empezó a saltar entre las
piedras un chorro de agua azul… Eso sucedió hace más de cuatro
siglos y la fuente sigue ahí… Queda justamente a un lado de lo
que fue la catedral y frente a la portada barroca del viejo Colegio de
San Nicolás.
156
SANDOVAL GODOY, Luis, Lugares, Ediciones del Banco Industrial de Jalisco,
Guadalajara, 1973, p. 101.
157
Ibid., pp. 102-103.
142 Serie Jueces ejemplares
158
Ibid., pp. 100.
F elipe T ena R amírez 143
Las manecillas del reloj ya señalaban las seis formando una ver-
tical, por lo que se esperaba que en unos instantes empezaran a sonar,
una a una, las seis campanadas. El verdugo parecía prepararse tomando
con fuerza el hacha que haría rodar al pie del cadalso la cabeza del
malhechor.
“—Y bien, su paternidad… ¿cree que podría ser útil a aquella ciudad
un reloj de campanas? Bien regalaría a aquellos súbditos míos el reloj
que ha causado aquí tan enredadas controversias. Lléveselo, su
paternidad; sólo pido lo coloque dignamente en un sitio principal de
la ciudad.
159
Vid SANDOVAL GODOY, Luis, op. cit., pp.102 a 105.
F elipe T ena R amírez 145
160
REYES, Alfonso, Utopías…, en ZAVALA, Silvio, Recuerdos de… op. cit., p. 140.
161
TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit., p. 63.
146 Serie Jueces ejemplares
raza o clase social,… sino como realización del tipo de vida social más
elevado, no para los indios, sino para la humanidad entera.162
162
LANDA, Rubén, Vasco de…, op. cit., p. 143.
163
Vid. HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco de…, op. cit., pp. 144-145.
164
Vid. REYES, Alfonso, Utopías… (1938)/ en ZAVALA, Silvio, Recuerdo de …, op. cit., p. 139.
F elipe T ena R amírez 147
165
TENA RAMÍREZ, Vasco de Quiroga y sus…, op. cit., p. 85.
166
Ibid., p. 75.
148 Serie Jueces ejemplares
167
BATAILLON, Marcel, Estudios sobre Bartolomé de las Casas, Península, Barcelona, 1976,
p. 90; citado en SERRANO GASSENT, Vasco de Quiroga, Utopía…, op. cit., p. 92.
168
Vid. SERRANO GASSENT, …, op. cit., pp. 90-100.
150 Serie Jueces ejemplares
169
Ibid., p. 105.
F elipe T ena R amírez 151
170
Ibid., p. 204. (el paréntesis es mío).
152 Serie Jueces ejemplares
171
Arzobispado de Morelia, Vasco de Quiroga y…, op. cit., p. 154.
F elipe T ena R amírez 153
172
SERRANO GASSENT, Vasco de …, op. cit., p. 213.
154 Serie Jueces ejemplares
173
HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco de…, op. cit., p. 140.
174
Vid. LANDA, Rubén, Vasco de…, op. cit., pp. 176-179.
F elipe T ena R amírez 155
175
MORENO, J. J., Quiroga, Vasco, Reglas y Ordenanzas para el gobierno de los Hospitales
de Santa Fe de México y Michoacán, dispuestas por su fundador el Rvmo y Venerable sr. D. Vasco de
Quiroga, Primer Obispo de Michoacán, en HERNÁNDEZ, Francisco, …, op. cit., p. 290.
156 Serie Jueces ejemplares
El interés que guió a Felipe Tena para estudiar las causas de la extin-
ción de los pueblos-hospitales de Santa Fe, que serán comentadas en
el inciso siguiente, me impulsan a centrar la atención en las bases
que estableció su fundador para garantizar la larga supervivencia de
esas comunidades. La respuesta se encuentra en la autonomía con la
que logró dotarlos.
176
MORENO, Juan Joseph, Reglas y…, op. cit., en HERNÁNDEZ, Francisco, …, op. cit.,
p. 181.
158 Serie Jueces ejemplares
Primero, porque una de las cosas que quiso conseguir con sus fun-
daciones fue, sobre todo, liberarlas del sistema fiscal y administrativo
177
SERRANO GASSENT, Vasco de Quiroga, …, op. cit., pp. 35-41.
F elipe T ena R amírez 159
178
MARTÍN HERNÁNDEZ, Francisco, Don Vasco..., op. cit., pp.146-147.
160 Serie Jueces ejemplares
179
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo…, op. cit., p. 13.
F elipe T ena R amírez 161
180
MARTÍN HERNÁNDEZ, Francisco, …, op. cit., pp. 265-266.
181
Idem.
182
TENA RAMÍREZ, op. cit., p. 110.
162 Serie Jueces ejemplares
183
Ibid., p. 156. En la nota 21 consta un fragmento del texto de la Real Cédula, en la cual
también se concede la exención de diezmos.
184
SERRANO GASSENT, …, op. cit., p. 25.
F elipe T ena R amírez 163
Esa ley, junto con otras dos más: La Ley Juárez (23 de no-
viembre de 1855) sobre administración de justicia y la Ley Iglesias
(11 de abril de 1857) que señala los aranceles parroquiales para el
cobro de derechos y obvenciones de los servicios religiosos, formaron
el primer paquete legislativo de reformas derivadas del Plan de Ayu-
tla. Unos días antes de la publicación de la Ley Lerdo, el 15 de mayo
anterior, Comonfort había expedido el Estatuto Orgánico Provi-
sional de la República Mexicana, anticipo de la Constitución de 1857.185
185
TENA RAMÍREZ, Leyes fundamentales…, op. cit., p. 491.
186
TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit., p. 95.
164 Serie Jueces ejemplares
187
Ver Ibid., pp.148-149. Nota.- Santa Fe del Río, en un rasgo de fidelidad a la voluntad
de Vasco de Quiroga, continuó cubriendo sus cuotas para el Colegio de San Nicolás.
F elipe T ena R amírez 165
188
Ibid., …, p. 164.
189
Ibid., nota 4, pp. 165-166.
166 Serie Jueces ejemplares
Durante los años de esa guerra, y tal vez orillado por los em-
bates en su contra por parte de la Iglesia católica, Benito Juárez expide
la Ley de Nacionalización de los Bienes Eclesiásticos del 12 de julio
de 1859, que forma parte del conjunto de las Leyes de Reforma. Su radi-
calismo liberal estaba encaminado a abatir el poder del clero, privándolo
de predios, inmuebles, derechos y acciones sin reciprocidad económica.
Por tanto, considero necesario precisar el alcance de los términos: la
desamortización operaba a favor de aquellos particulares que podían
adquirir en subasta las propiedades tasadas en su valor por el go-
bierno; en cambio, la nacionalización consistió en la expropiación de
los bienes de la Iglesia a favor de la nación, sin conceder indemniza-
ción al expropiado.
190
Idem.
F elipe T ena R amírez 167
agrario. Esto dio lugar a que los indígenas presentaran sus quejas al
Cabildo. En la sesión del 27 de enero de 1871, el superintendente de
los rectorados de Santa Fe les dio una vaga respuesta a los quejosos
y los exhortó a cumplir con sus deberes cristianos, lo que equivalía
prácticamente a negarles el apoyo. Ahora los acechaban dos codicias:
la de la Iglesia y la de los latifundistas. Sólo sería cuestión de tiempo
para que el Cabildo se desprendiese de los Rectorados, arguyendo que
habían cambiado las condiciones bajo las cuales fueron fundados.
191
TENA RAMÍREZ, …, op. cit., p. 162.
192
Vid. TENA RAMÍREZ, Vasco de…, op. cit., pp. 172 y 176. (las cursivas son las del texto
que aparece en este libro).
168 Serie Jueces ejemplares
193
Ibid.,…, op. cit., p. 165.
F elipe T ena R amírez 169
194
LANDA Rubén, Vasco de Quiroga, Editorial Grijalbo, México – Barcelona, 1965, texto
incluido en la sobrecubierta del libro.
F elipe T ena R amírez 171
195
TENA RAMÍREZ, Felipe, “Regreso de don Vasco”, en Discursos, p. 60.
2.2. Manuel Abad y Queipo
(obra no terminada)
196
TENA RAMÍREZ, …, Vasco de Quiroga y sus pueblos de Santa Fe en los siglos XVIII y XIX,
Editorial Porrúa, S.A., México, 1977, p. 10.
173
174 Serie Jueces ejemplares
En las copias del avance del estudio sobre este personaje de que me
fue posible disponer197 se puede constatar que Manuel Abad y Queipo
García nació en España en 1751. Felipe Tena se dio a la tarea de vi-
sitar Villarpedre, lugar de nacimiento de su biografiado, en el Concejo
de Grandas de Salime. La información parcial que pudo obtener del
concepto Concejo data de la Alta Edad Media, hasta integrarse en
el de Municipio, que derivó con el tiempo en Ayuntamiento. Sin embar-
go, en el caso concreto del Concejo asturiano se rebasan los perí-
metros usuales de los ayuntamientos ya que incluye varios poblados
bajo su compleja jurisdicción.198 Asimismo, Grandas deriva etimológi-
camente del portugués, y significa “terreno estéril”, la característica
más representativa de la región. Y, por último, Salime es el nombre
de la villa vecina que fue cabecera del Concejo, que con el decurso del
tiempo se integró en una sola con el de Grandas, por lo que de ahí
deriva el nombre dual.
197
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo…, capítulo I, pp. 11-12, 20.
198
Ibid., p. 2.
176 Serie Jueces ejemplares
villa y más que una aldea, y con parroquia se designaba una jurisdic-
ción eclesiástica y era también una designación empleada con fines de
administración civil.199 Acerca de esta última función, cabe destacar
el registro de la población a través de padrones y su riguroso método
de custodia en el templo de la capital; esto es fundamental para cons-
tatar la veracidad de lo asentado en tales documentos. Para los inves-
tigadores, la consulta de fuentes originales de información reviste
una gran importancia. Tena Ramírez lo relata de esta manera:
199
Ibid., pp. 3 y 5.
200
Idem.
F elipe T ena R amírez 177
lativa “y” entre los dos apellidos para formar el de Abad y Queipo,
apelativo con el que se le conoce. En esos tiempos era importante com-
probar, sobre todo, la rama de varonía, pues era el padre quien fijaba
las características genealógicas de la descendencia. 201 En la partida
de bautismo de Abad y Queipo consta que se le puso como nombre
“Manuel Joseph, hijo de Josepha García de la Torre, soltera y —se dice
por su declaración— de Joseph Abad, mozo soltero vecinos deste
lugar y Parrochia…”. 202 Siendo solteros ambos progenitores, de cali-
dad noble y sin que entre ellos mediara impedimento canónico para
contraer matrimonio, 203 según la información testimonial rendida
por doce testigos en el padrón de 1806.
201
Ibid., pp. 9-10.
202
Ibid., p. 11.
203
Abad habría de explicar con el tiempo que si a raíz de su nacimiento sus padres no
contrajeron matrimonio, debióse a la muerte de la madre”.
204
Tena Ramírez se basa en varias constancias del Archivo de Indias expedidas “con
presencia de los documentos que pasan en la Secretaría del Gobierno Diocesano”, según se dice
en las Letras Testimoniales. (AGI.- México, 1894, No. 5 y 6). / Abad y Queipo…, op. cit., capí-
tulo I, nota 23, pp. 40-41.
178 Serie Jueces ejemplares
205
Ostiarado. Órden de ostiario que es la inferior de las menores. Ostiario, clérigo que
había obtenido uno de los cuatro grados menores, cuyas funciones eran abrir y cerrar la
iglesia, llamar a los dignos a tomar la comunión y repeler a los indignos. Real Academia
Española, Diccionario de la Lengua Española, XIX edición, Madrid, 1970, p. 953.
206
Ibid., p. 21.
207
Ibid., p. 22.
F elipe T ena R amírez 179
208
Ibid., p. 26.
209
Ibid., p. 23.
180 Serie Jueces ejemplares
210
Ibid.., capítulo II, pp. 4-5.
211
BRADING, David A., Una iglesia asediada. El obispado de Michoacán 1749, FCE, México,
1994.
212
Las órdenes religiosas ya asentadas en Valladolid eran: franciscanos, agustinos, car-
melitas, juaninos, mercedarios, dieguinos, catalinas y capuchinas; en TENA RAMÍREZ, Felipe, “El
Obispo Abad y Queipo”, Revista Historia Mexicana, Colmex, vol. 1, No. 1 (jul-sep, 1951),
pp. 62-77.
F elipe T ena R amírez 181
213
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo,… op. cit., capítulo II, pp.10-11.
214
TENA RAMÍREZ, “El obispo Abad y Queipo”, p. 65.
215
Ibid., p. 68.
182 Serie Jueces ejemplares
216
Es obligado hacer referencia a José Rafael Campoy, Agustín Castro, Diego José
Abad, Francisco Javier Alegre; y en ciencias experimentales a Antonio Alzate.
217
TENA RAMÍREZ, “El obispo …”, op. cit., p. 68.
218
Idem., y nota 13 de MÉNDEZ PLANCARTE, Gabriel, Humanistas del siglo XVIII, México,
1941.
F elipe T ena R amírez 183
219
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo…, op. cit., capítulo I, pp. 21-22 (las cursivas son mías).
184 Serie Jueces ejemplares
…el campo mexicano estaba dominado por unas diez mil haciendas
que habían crecido casi continuamente desde el siglo XVI y que en
algunos casos cubrían distritos enteros. Al disponer de fondos de la
Iglesia, las haciendas habían podido crecer en tamaño, y esto tam-
bién había impedido su partición.
220
AGUILAR MANDUJANO, Ariosto, “Manuel Abad y Queipo”, Cambio de Michoacán,
15 de marzo de 2008.
F elipe T ena R amírez 185
Al mantenerse sin cambios las políticas dictadas por España, era natu-
ral que fuesen subiendo de nivel las inquietudes existentes por la
inequidad con que eran mantenidos criollos, indios y demás castas
en que se encontraba dividida la sociedad virreinal. En la capital de
Michoacán, tales inconformidades se manifestaban, primero, de ma-
nera subterránea entre estudiosos interesados en que esa situación
fuese corregida y, después, se harían evidentes con los sucesos ocurri-
dos en 1808 y 1809 que desembocarían en el estallido social de 1810
hasta concluir con la independencia de México once años después.
221
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo,…, capítulo I, pp. 20, 25, 29-30.
186 Serie Jueces ejemplares
222
TENA RAMÍREZ, Felipe, El Ideario Político-Constitucional de los criollos mexicanos de
1808, Editorial Porrúa, México, 2010, p. 104.
F elipe T ena R amírez 187
223
TENA RAMÍREZ, El obispo Abad y Queipo, op. cit., p. 70, nota 15.
224
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo,…, op. cit., pp. 20-21.
188 Serie Jueces ejemplares
225
TENA RAMÍREZ, Ibid., capítulo II, p. 20.
226
TENA RAMÍREZ, Ibid., capítulo II, p. 28 (las negrillas son mías). Egresados del
Seminario de Valladolid eran: los hermanos Nicolás y Mariano Michelena; el cura de Huango,
Manuel Ruiz de Chávez; el licenciado José Antonio Soto Saldaña; el clérigo Manuel de la
Torre Lloreda; el alférez Mariano Quevedo; José María Izazaga, Francisco Chávez y Camilo
Camacho. Tena Ramírez incluye también a José María Abarca.
F elipe T ena R amírez 189
227
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo…, Ibid., capítulo I, p. 24. Palabras de Lucas Alamán,
citadas en este estudio.
228
TENA RAMÍREZ, Ibid., capítulo I, pp. 27-28.
190 Serie Jueces ejemplares
229
Una de las causas esgrimidas por sus opositores era por su condición de hijo ilegí-
timo. Tena Ramírez dedica, como ya se dijo, en relación al punto una amplia parte del capítulo
I de su estudio sobre este personaje.
230
Página Internet. cambiodemichoacán.com.mx, op. cit., 15 de marzo de 2008.
F elipe T ena R amírez 191
231
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo…, capítulo II, pp. 31-33. (las cursivas son mías).
192 Serie Jueces ejemplares
232
Idem.
F elipe T ena R amírez 193
233
TENA RAMÍREZ, Felipe, Leyes fundamentales de México 1808-2005, 25a. edición actua-
lizada, Editorial Porrúa, México, 2008, p. 25.
234
TENA RAMÍREZ, Ibid., pp. 28 y ss.
194 Serie Jueces ejemplares
235
TENA RAMÍREZ, Abad y Queipo…, op. cit., p. 35.
F elipe T ena R amírez 195
236
TENA RAMÍREZ, El obispo Abad y Queipo…, op. cit., pp. 76-77 (las negrillas son mías).
3. Primera obra del jurista:
su tesis profesional
3.1. Visión preliminar
Sin la preparación lenta y ardua que presume la materia que toco
y sin la madurez que logran los años y el talento,
mi tesis no pretende sino la solidaridad,
la independencia y la cortesía para todas las ideas.
Felipe Tena Ramírez
199
200 Serie Jueces ejemplares
237
PESCHARD, Jaqueline, Hacia la sociología. Editorial Pearson Educación, México, 1999,
p. 83.
204 Serie Jueces ejemplares
238
Es imperativo remarcar la importancia que Felipe Tena Ramírez otorga a la norma
como instrumento para limitar las facultades de los individuos, estableciéndola de la siguiente
manera: “La norma es el derecho objetivo, que la fuerza pública sanciona; las facultades del indi-
viduo , limitadas por la norma, constituyen el derecho subjetivo”.
F elipe T ena R amírez 205
TESIS
México
1929
207
Índice bibliográfico
209
210 Serie Jueces ejemplares
Jellinek, Teoría general del Estado, trad. Fernando de los Ríos, 1914.
213
214 Serie Jueces ejemplares
Mayo de 1929
Primera Parte
215
216 Serie Jueces ejemplares
1
Gaius, I, párrafo 1, 189; L. I, pr., de adqu. Rer. Dom. (XLI, 1). Para evitar numerosas inte-
rrupciones en la exposición de las ideas, solamente doy la colección de las citas tomadas literal-
mente; las ideas ajenas expuestas por mí van acompañadas del nombre de su autor, cuyas
obras consultadas constan en el índice bibliográfico que figura al frente de esta tesis.
218 Serie Jueces ejemplares
sólo le importa el individuo, porque las cosas no valen nada sin las
personas, como decía Portalis. Si el individuo interesa al derecho, es por-
que tiene facultades físicas, intelectuales y morales de cuyo desarrollo
dependen su existencia y bienestar. La necesidad natural de ejercitar
las facultades, funda el derecho natural del individuo al ejercicio de
esas mismas facultades. Pero si los hombres gozaran de completa liber-
tad en el juego de las facultades, los más fuertes impedirían el ejercicio
a los más débiles; es, pues, necesaria una norma que, al limitar las facul-
tades de todos, haga posible la existencia de las mismas. La norma
es el derecho objetivo, que la fuerza pública sanciona; las facultades
del individuo, limitadas por la norma, constituyen el derecho subje-
tivo. Por restringir las facultades individuales, observa Beudant, toda
ley es un mal; pero es un bien al par, porque protege las facultades
limitadas, que son las únicas posibles.
2
Ihering, El Espíritu del Derecho Romano, trad. Príncipe y Satorres, Madrid, IV, p. 145.
F elipe T ena R amírez 221
3
Planiol, Traité Elementaire de Droit Civil, París, 1915, I, p. 718.
222 Serie Jueces ejemplares
4
Sehm, Instituciones de Derecho Privado Romano, trad. Roces, Madrid, 1928, p. 257.
F elipe T ena R amírez 223
Según que sean de una u otra clase, la violación de las leyes impe-
rativas tiene diferente gravedad. Los legisladores individualistas han
establecido toda una jerarquía de sanciones, cuyo rigor es propor-
cional a la importancia de la infracción.
sumo interés para los individualistas; por eso las leyes que protegen
directamente al Estado tienen sanciones más enérgicas que las que se
refieren a los simples particulares: la violación de las primeras compro-
mete a todos los hombres; la de las segundas, sólo al particular afectado.
IV. El Estado
5
Montesquieu, Esprit des Lois, L XI, cap. IV.
230 Serie Jueces ejemplares
237
238 Serie Jueces ejemplares
V. El Estado
Este postulado del trabajo como deber para todos, entraña como
ultimo resultado una transformación fundamental en la técnica del an-
tiguo derecho privado. Si el trabajo es la pauta de toda actividad social
y el inspirador de toda regla de derecho, no hay razón para que sub-
sista la diferencia entre los códigos civil y mercantil, que son verda-
deros códigos de clase. Ambos deben fundirse en un solo cuerpo de
leyes, que puede denominarse “Código Único de las Obligaciones”, como
el de Suiza. Todo acto jurídico, así mercantil como civil, quedará subor-
dinado a la norma superior de la función social.
con el fin de que el rico no triunfe del pobre por medio de defensores
más hábiles que puede pagar; 3a. Es preciso aplicar efectivamente
los medios de conciliación, a fin de evitar los juicios en lo posible; 4a.
Para establecer la igualdad entre las partes, el Juez debe tomar la
iniciativa de los trámites. Menger llega a decir que el Juez está llamado
a restablecer el equilibrio entre las partes, reivindicando de oficio los
derechos del débil, lo que convierte la justicia en función del Estado.
263
264 Serie Jueces ejemplares
6
Comte, Systeme de Politique Positive, Paris, 1881, I, p. 364.
F elipe T ena R amírez 265
7
Aristóteles, Política, trad. Azcárate.
F elipe T ena R amírez 267
La regla jurídica debe dictarse ante todo en vista de los dos fac-
tores económicos que influyen en la coexistencia. No pueden estar some-
F elipe T ena R amírez 273
III. El Estado
7
Duguit, Soberanía y Libertad, trad. Acuña, Madrid, 1924, p. 131.
278 Serie Jueces ejemplares
8
Duguit, La transformación del Estado, trad. Posada, p. 217.
F elipe T ena R amírez 279
9
Duguit, Soberanía y Libertad, cit, p. 295.
280 Serie Jueces ejemplares
rante, sólo puede servir para provecho de los políticos sin escrúpulos
y de los agitadores sin decoro.
283
284 Serie Jueces ejemplares
FIN
4. El Juez y sus resoluciones
4.1. Criterios de la Sala Auxiliar
287
288 Serie Jueces ejemplares
La única tesis que se comentará —de entre las tres analizadas por el
Pleno— estimo que puede ser la más significativa en los términos que
F elipe T ena R amírez 289
239
Semanario Judicial de la Federación, Quinta Época, Tomo CXIX (Sentencias dictadas
por la Suprema Corte en el primer trimestre de 1954), México, 1954, pp. 12-13.
240
Semanario Judicial, op. cit. p. 18.
F elipe T ena R amírez 291
241
Ibid., p. 19.
242
Ibid., p. 21.
292 Serie Jueces ejemplares
243
Ibid., pp. 21-22.
244
Ibid., pp. 22-23.
F elipe T ena R amírez 293
245
Ibid pp. 25-26.
4.2. Criterios en la Segunda Sala
295
296 Serie Jueces ejemplares
246
Nota del Autor. Todo lo entrecomillado corresponde literalmente a parte del texto
formulado por Mariano Azuela Güitrón, titulado “Mi relación con Don Felipe Tena Ramírez”.
4.3. Una importante resolución como
legado jurídico de Felipe Tena
299
300 Serie Jueces ejemplares
dentro de la cual afectaba 99 hectáreas del quejoso que, según él, cons-
tituía una pequeña propiedad ganadera en explotación, dado que un
anterior Decreto Presidencial que dotó de ejidos y respetó la ahora pro-
piedad del amparista como pequeña propiedad, hacía las veces de
“certificado de inafectabilidad” para los efectos de la promoción del
amparo.
247
La fecha de la ejecutoria es el 4 de marzo de 1970.
F elipe T ena R amírez 303
309
Epílogo
Esto es lo que el hombre actual necesita:
un filósofo capaz de crear un poema
que nos haga creer en la bondad.
Juan Díaz Romero
311
312 Serie Jueces ejemplares
Como todo gran hombre, Felipe Tena siempre fue ejemplo a seguir
en cada una de sus funciones, tanto en el servicio público como fuera
de él. Como Juez buscó siempre la probidad y la entereza; como
maestro, la indescriptible cualidad del formador y, como escritor,
supo reconocer la importancia de difundir el conocimiento por su
valor intrínseco, dejar constancia, en todas sus publicaciones, de los va-
lores que invariablemente hacen funcionar a nuestra sociedad.
este mundo y, sobre todas las cosas, dejando registro del porqué debe-
mos recordarlos y agradecerles.
248
TENA RAMÍREZ, Felipe, La ética del Juez, tomo 9 de la Serie Ética Judicial, SCJN,
México, 2006.
314 Serie Jueces ejemplares
249
Discurso pronunciado por el Ministro en retiro Juan Díaz Romero en ocasión de la
entrega de la Dirección General del Instituto de Investigaciones Jurisprudenciales y de
Promoción y Difusión de la Ética Judicial de la Suprema Corte de Justicia. México, D.F. 31
de agosto de 2010.
5. Discursos pronunciados con motivo
de la Presentación de la
Primera Edición*
Moderador
Ministro en Retiro Mariano Azuela Güitrón
Presentadores
Ministro en Retiro Juan Díaz Romero
Lic. Francisco Javier Gaxiola Ochoa
*Evento realizado el 26 de mayo de 2011, en el Edificio de Revolución, sede alterna de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Moderador: Ministro Mariano Azuela Güitrón
Seguramente algunos de los presentes lo saben, fui por varios años Se-
cretario de Estudio y Cuenta del Ministro Tena Ramírez. Cuando en el
año de 1960 llegué a este Alto Tribunal como Secretario Auxiliar de la
Sala, los secretario de Don Felipe eran Arturo Serrano Robles —él, como
en muchas ocasiones, nos honra con su presencia—, y ha de estar muy
contento de que hoy hablemos de un juez ejemplar, Felipe Tena
Ramírez, gracias a la obra de mi compañero secretario Felipe López
Contreras. Así que no solamente es un aspecto formal porque ahora
tengo la responsabilidad que anteriormente tenía Juan Díaz Romero.
La obra surge, tengo entendido, gracias a que este último estuvo
impulsando a Felipe para que escribiera sobre este gran Juez mexicano.
317
318 Serie Jueces ejemplares
“Para mí, Don Emilio Rabasa, jurista del último cuarto del siglo
XIX y primero del XX, sembró el Derecho Constitucional Mexicano en
F elipe T ena R amírez 321
De entre todas las aristas de esa vida tan interesante que nos allega
el autor —la edad temprana, familiar, la de estudiante, la de catedrático,
la de ensayista, el autor de obras jurídicas, el literato, el investigador
histórico, el orador, el juez, el filántropo—, permítanme referirme a
dos o tres lances que me resultan inolvidables.
1
Tomando de SERRANO FIGUEROA, Rafael “Vida y Pensamiento de Felipe Tena Ramírez”,
en Estudios Jurídicos, Compilador Fernando Serrano Migallón, Porrúa, 1999, p. 410
F elipe T ena R amírez 325
Pero había algo en sus clases que no había en sus libros, No eran
ideas que vinieran a cambiar la estructura de los sistemas expuestos
en sus obras… Lo que tenían sus clases y no había en sus libros, era
la tolerancia… Su mejor lección fue aquella en que elevó a norma de
educación la regla de la tolerancia. Su mejor actitud aquella en que
afirmó sus ideas y respetó las ajenas. Es esa, la tolerancia, la edu-
cación de más alta estirpe, porque es cortesía intelectual, urbanidad
del espíritu2
2
LÓPEZ CONTRERAS, Felipe, Felipe Tena Ramírez, El Juez del Siglo XX, Serie Jueces Ejem-
plares número 4, Suprema Corte de Justicia de la Nación, México, 2010, p. 37.
3
Ibidem, p. 42.
326 Serie Jueces ejemplares
4
Ibidem, p. 59.
5
COMTE-SPONVILLE, Pequeño Tratado de las Grandes Virtudes, Ed. Andrés Bello,
Santiago de Chile, 1995, p. 165.
F elipe T ena R amírez 327
Como se ve, ya desde esa temprana edad, Tena Ramírez sabía que
la tolerancia es el vehículo mágico que nos permite conciliar posiciones
aparentemente contrarias.
6
LÓPEZ CONTRERAS, Felipe, op. cit., p. 240.
328 Serie Jueces ejemplares
Este libro es como un barril sin fondo ¡tantas cosas da para co-
mentar!, pero terminaré con algunas vivencias que me quedaron
grabadas del maestro Tena Ramírez como Ministro, no con la cercanía
F elipe T ena R amírez 329
que tuvieron Don Mariano Azuela Güitrón y Don Felipe López Con-
treras que fueron sus secretarios, ni muchos menos de Don Francisco
Javier Gaxiola Ochoa que lo trató más tiempo.
Dijo por ejemplo, cuando tomó la palabra por primera vez, que
“…temería dar apariencia de alegato a lo que no debe ser sino exposición
razonada y cauta del juzgador…”, para explicar después de tan fina y
comedida introducción las convincentes razones de la Auxiliar.
Como dijo Don Juan, el libro esta lleno de elementos que podrían desta-
carse. Alguno de ellos que yo quisiera comentar, es el relativo a una
aportación que hace en su tesis profesional. Con una gran sapiencia,
señala: “Sin la preparación lenta y ardua que presume la materia que
toco y sin la madurez que logran los años y el talento, mi tesis no
pretende sino la sinceridad, la independencia y la cortesía para todas
las ideas”. Y algo que también llama la atención, es una carta que le envía
el Presidente de la República, y que Felipe López Contreras destaca con
332 Serie Jueces ejemplares
Además, debo decir que las expresiones de todos ellos, son más
que nada fruto de su afectuosa amistad.
Me llevó con Don Felipe su dilecto amigo el Lic. Don Jesús Rodrí-
guez Gómez (quien es otra de las personas que recuerdo con respeto,
gratitud y afecto por su bondadosa intervención no sólo en mi vida
sino en la de varios de mis hermanos). Fui recibido con la serenidad
característica de Don Felipe. Hablamos, entre otras cosas, sobre mi
experiencia profesional que se centraba en la materia laboral. Me dio
tres expedientes para que los estudiara y formulara el proyecto de sen-
tencia que le debía entregar a la semana siguiente. Realizada la, para
mí, ardua tarea, rindo el resultado. Pocos días después, una vez revisa-
dos los proyectos, Don Felipe me explica, con amabilidad, las razones
por las cuales dos de ellos, aun cuando llegaban a la conclusión correcta,
no contenían los argumentos jurídicos idóneos, y el tercero presentaba
una solución incorrecta. No acababa de levantarme, seguramente con
la cara larga y triste y extender mi mano para agradecer la oportunidad
brindada, cuando Don Felipe me dice, serio pero afable (así lo sentí):
Usted se queda conmigo porque me agrada su manera de razonar.
Deseo concluir estas palabras con otro bello recuerdo: Cuando fui
recibido en el más Alto Tribunal expresé que el haber trabajado en la
entonces Segunda Sala como Secretario de Estudio y Cuenta, me dio
la oportunidad de aquilatar la sabiduría, rectitud, entrega y caballero-
sidad de sus integrantes y que ello fue factor determinante para formar
en mí una franca y decidida vocación por la función jurisdiccional. Mas
estimé ineludible referirme concretamente a dos de ellos: Don Felipe
Tena Ramírez y Don Jorge Iñárritu.
Muchas gracias
Bibliografía
339
340 Serie Jueces ejemplares
Discursos