Está en la página 1de 12

 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 

EL FEMINISMO LATINOAMERICANO ES UNA APUESTA AL FUTURO

Luciana Peker*
21 de octubre de 2021

Resumen
El pañuelo verde nació en 2003, en un Encuentro de Mujeres en Rosario, en Argentina. Fue
elegido porque simboliza la esperanza y la salud. Su origen está en el pañuelo blanco de las
Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, que buscaban a sus hijas y nietos desaparecidos du-
rante la dictadura (1976-1983). Desde 2018, cuando el aborto legal avanzó en el Congreso
argentino, se ha constituido una “marea verde” en América Latina. El pañuelo representa la
pelea por el derecho a decidir, la autonomía y las maternidades deseadas. Arraiga en la lu-
cha por los derechos humanos, la memoria y la justicia, y se cruzó, durante el exilio, con los
feminismos español y francés. Pero hoy los feminismos no solo representan una agenda de
derechos y democracia, sino un modo de potenciar la esperanza y apostar a un futuro mejor:
una vía para fortalecer, igualar y diversificar democracias más participativas.

El feminismo latinoamericano es una La especulación de los capitales actuales


apuesta al futuro1 arrasa con la tierra, el aire y el agua, y las
El feminismo latinoamericano pelea con- enfermedades zoonóticas saltan de anima-
tra la violencia hacia las mujeres y por el les a seres humanos. El coronavirus no
derecho al aborto legal. Pero no es solo fue una pandemia azarosa, sino el virus
una agenda de género, es mucho más que que azotó al planeta después de muchas
eso, y no solo en cuanto a sus demandas, alertas. La desigual distribución de la
sino en la potencia del deseo de cambio. vacuna entre países desarrollados y sub-
Por eso es, sobre todo, una forma de or- desarrollados mostró que la desigualdad
ganizar la pelea por una sociedad más no incide solo en cuáles son los proble-
igualitaria, inclusiva y democrática. mas, sino en cuáles son las salidas a los
problemas.
En el actual escenario social —dramática-
mente enfrentado a su propio colapso por En este contexto global las democracias
la pandemia— con un mercado cada vez no alcanzan, pero fuera de las democra-
más voraz y menos sensible —y ni siquie- cias solo hay más autoritarismo. Los fe-
ra, filántropo, caritativo o solidario— el minismos no son solo una parte del rom-
problema de las enfermedades se encuen- pecabezas que falta, una deuda histórica
tra en las sociedades, despojadas en sus que necesita recomponerse y seguir avan-
recursos y desprovistas de soluciones. zando. Son más que una pieza: son una
forma de avanzar en rearmar las piezas.
                                                            
* Periodista y escritora argentina, especializada
en género.
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
Si llevamos la metáfora al ajedrez, el El deseo no es un componente menor,
gambito de damas que proponen los mo- sino el mayor capital político de un mo-
vimientos políticos y sociales latinoame- vimiento que generó una revolución del
ricanos no implica solo hacer avanzar a deseo. Si las mujeres y la comunidad
las fichas negras —cuando siempre avan- LGTTBQ fueron despojadas de la posibi-
zaron las blancas— y que las damas dejen lidad de ser protagonistas deseantes de su
de estar jaqueadas. No es solo un tablero vida sexual, reducidas a objeto de los
binario entre varones y mujeres. Es salir demás, lo que les motiva cuando pelean
de la dualidad como forma de moverse. por sus deseos (a terminar con los abusos
Es cambiar las reglas de juego. sexuales, a poder abortar con seguridad,
al matrimonio igualitario o a la identidad
O sea: no se trata solo de pedir tener más de género) no es solo conseguir un dere-
fichas en un mundo que acumula riquezas cho para sus deseos.
y distribuye miserias como en un Mono-
poly global. No es pedir que las mujeres El quid de la cuestión es que pelean con
que siempre estuvimos relegadas tenga- deseo por sus deseos. El gran problema de
mos ahora más acciones ante la escasez un mundo en crisis es que la crisis genera
de recursos de la desigualdad global. Es, desánimo. A mayor dramatismo (¿qué
por el contrario, proponer una forma justa más dramático que el 50% de la pobla-
de distribución, que tiene como eje la ción mundial confinada durante, por lo
equidad de género, pero que piensa en menos, el año 2020 y gran parte de
nuevas formas de distribución de la rique- 2021?), menor pasión por generar modifi-
za, en la biodiversidad del ambiente y en caciones ambientales, económicas y so-
la igualdad de género. ciales.

Pero, además, se trata de un proyecto más La ecuación que trae el feminismo latino
amplio que la mera reivindicación de no es por una tajada, es por despertar las
derechos para las mujeres, porque el fe- ganas de cambio en un mundo que, a ma-
minismo no es un movimiento con una yor crisis, genera más desidia, resigna-
lógica equivalente a la cosmovisión polí- ción, desánimo o protestas aisladas que se
tico partidaria. En ese sentido, es supera- encienden como el fuego, pero se apagan
dor a una fuerza política que solo quiere sin poder encarrilar el desánimo o la críti-
ser elegida para ganar una campaña elec- ca contra el racismo, la carga tributaria, la
toral. universidad arancelada o la falta de liber-
tades individuales.
Por supuesto, las ventajas también tienen
el doble filo de la vulnerabilidad. La po- El principio, entonces, es reconocer al
tencia del feminismo como movimiento movimiento feminista como motor más
político es la pasión. Y no se limita sola- que como destino. Por supuesto, si fuera
mente a lo que demanda, sino que es una una energía lineal, sería tan sencillo como
demanda sostenida por el deseo de obte- arrancar un auto para encarrilar la ruta
ner más derechos. hacia la posibilidad global de no estrellar

 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
aún más un planeta recalentado en su Ese valor lo tiene el feminismo. Pero ese
propia ingobernabilidad. valor también lo vuelve vulnerable. Si
todas podemos opinar, se cotiza alto la
Su fuerza no está en lo que genera, sino opinión, pero se reblandecen los lideraz-
en su inspiración potencial para generar gos que marquen opinión y tendencia
esperanzas y expectativas de cambios. cuando avanzan grupos reaccionarios a
Pero su propia fuerza también es su fragi- los progresos de las mujeres (generalmen-
lidad. Su forma de organización, en donde te engarzados con proyectos de ultradere-
las opiniones personales son vitales, apa- cha que no apelan a la participación ni a
sionadas y no manejables, son su virtud y los buenos modales para avanzar sin pedir
su alarma. perdón, ni permiso). Y esa diferencia
entre espacios participativos y espacios
El movimiento de mujeres es más endeble indomables puede hacer la diferencia
que otras formas conocidas de organiza- entre superación y retroceso.
ción política (lobbies, corporaciones, sin-
dicatos, etc.) porque la horizontalidad El reparto de representación genera con-
—es un movimiento con alta participa- fusión interna, enfrentamiento, caos y,
ción y masividad, donde cada opinión y descapitalización y dispersión de un fe-
cada voto cuentan de igual manera entre nómeno que tiene la ventaja de ser con-
las diferentes personas— es su potencia, vocante, pero que todavía tiene que lograr
pero también su perdición, si no se puede canalizar la convocatoria sin que su po-
graduar en su justa medida con formas tencialidad se desperdicie.
alternativas de generar referencias socia-
les, políticas y mediáticas. Pero, si se usan para despertar y no se
desperdician en su potencial, los femi-
El feminismo es la gran revolución del nismos en este escenario pospandémico
siglo XXI porque es un movimiento en el no se limitan (solo) a quienes piden que
que la participación es más alta que en las se frene la violencia de género, que se
corporaciones conocidas (partidos, sindi- repartan las tareas de cuidado, que se
catos, empresas, etc.) que ya no despier- garantice la libertad sexual de las muje-
tan entusiasmo ni ganas de invertir en res, o que la diversidad sexual vaya de la
tiempo, trabajo y esperanzas. mano de la biodiversidad de los recursos
naturales.
La desilusión de la política genera pocos
militantes fervorosos y el fervor lo des- El movimiento protagonizado por las
piertan las protestas (que irrumpen con mujeres —e impulsado especialmente
fuerza y, en muchos casos, con violencia: desde Argentina a partir de 2015, con el
ocupan las redes y las conversaciones, movimiento “Ni Una Menos”— conforma
pero como una ola alta con mucha espu- una agenda de género, sí, pero mucho
ma, hasta que después baja y llega sin más que eso, repercute en una forma de
sostenerse a la costa), por lo que la pasión construcción ciudadana de manera colec-
sostenida es un valor en caída. tiva, apasionada, ágil, moderna, con
transversalidad partidaria, con intersec-
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
ción de clases y de personas racializadas, Ellos quieren que la vida sea como siem-
con diversidad sexual y con intercambios pre fue —que es un utopía más imposible
generacionales. que las utopías revolucionarias aunque
parezca una consigna conservadora—
La manera de disputar leyes, derechos y mientras que nosotras queremos que la
reclamos despierta deseos y enciende la vida sea mejor de lo que nunca fue (que
posibilidad de cambio. Lo más trascen- todavía es posible) y menos mala de lo
dente de los feminismos no son solo los que es, y peor de lo que va a ser si no se
cambios que se piden, ni siquiera los que frena a tiempo el choque entre la ambi-
se consiguen (aunque las victorias incen- ción y el despojo de recursos.
tivan y la posibilidad de reconvertir las
derrotas estimulan), sino la voluntad de La lucha es desigual porque tienen el po-
cambio. der y la pulsión de gobernar de quienes
han mandado siempre. Pero la esperanza
No hay dudas que estamos en un mundo está del lado de quienes arriban al poder y
que necesita cambios. Incluso reducir no de quienes solo tienen una idea nostál-
daños (ambientales) es un cambio que gica de un poder en decadencia y que solo
hoy queda lejos de las expectativas. Pero puede ser ejercido —en un mundo arrasa-
la angustia de mirar de frente la incerti- do— por un corto plazo.
dumbre, la inseguridad y la injusticia no
activa los cambios, por el contrario, los Los feminismos apuestan a que la historia
diluye. La pulsión de cambio es el valor del mundo continuará. Y, por lo tanto,
central de los feminismos. todavía vale la pena conservar. Solo el
mundo que se piensa habitar es el que se
La lucha de las mujeres genera mejores quiere cuidar. La apuesta del feminismo
democracias en sociedades amenazadas es cuidar, pero sin que eso signifique ba-
por las crisis económicas, la corrupción y jar la cabeza, sino levantarla para ver más
el crimen organizado. Pero, frente a una allá de lo que —en el presente— la reali-
pandemia que desnuda un colapso am- dad plantea como posible.
biental mundial, son mucho más fuertes
los lazos que pueden hacerse con otros ¿Por qué la lucha de Argentina es central,
movimientos sociales globales. no solo para el desarrollo local de las
mujeres, sino como forma de motivar al
Si las mujeres vivimos mejor en la actua- resto de la región para que crea que el
lidad que en el pasado y aspiramos a vivir cambio todavía es posible y que luchar
mejor todavía en el futuro, el mejor tiem- vale la pena? ¿Por qué desde el Sur se
po para nosotras es el que vendrá. Esa impulsó un feminismo latinoamericano
diferencia es la reina de las diferencias que disputa poder con el poder central del
políticas hoy en día. Los varones reaccio- Norte como hegemonía de un mundo que
narios que perdieron un mundo en donde se enferma globalmente y se cura de-
tenían más poder y que ya no pueden sigualmente?
recuperar (y no por culpa de las mujeres)
quieren volver el tiempo atrás.
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
El feminismo argentino no disputa una La posición geopolítica de Argentina —al
porción del reparto de poder en la demo- sur del Sur—, su historia, su desgracia
cracia; el feminismo sube la calidad de la con dictaduras y desapariciones, y la re-
democracia. No pedimos una porción en sistencia protagónica de las mujeres, ma-
la torta, mejoramos la cocción, la hace- dres y abuelas frente a las torturas y
mos más grande para que más personas muertes de quienes eran considerados
puedan comer, nutrirse y saborearla, y le subversivos por querer subvertir el orden
ponemos más frutillas al postre. establecido, la convierten en protagonista
de un impulso de los feminismos latinoa-
El nivel de participación ciudadana; el mericanos.
interés en los debates; la calidad académi-
ca en la argumentación de contenidos; la Argentina es un país con pretensiones de
participación masiva en las movilizacio- ser mirado como la Europa latinoameri-
nes; la audiencia en los canales legislati- cana, por sus fuertes corrientes migrato-
vos donde se discuten las leyes; la creati- rias españolas, italianas, inglesas, polacas,
vidad de la narrativa, la literatura, el hu- ucranianas, etc. Por el contrario, no se
mor y las formas de plantear los debates; trata de revalidar el rol distante de lo lati-
o la invitación a sectores artísticos a su- noamericano en Argentina, sino de resal-
marse al escenario público, son algunas tar que el corazón de la lucha por los de-
de las muchas formas de democracia acti- rechos humanos —que surge a partir de la
va que los feminismos han activado. Así dictadura— la convierte en un órgano que
sucedió, por ejemplo, en la reivindicación irradia sangre rebelde al resto de la re-
por el aborto legal, seguro y gratuito, en- gión.
cauzada como una “marea verde”, y en
los debates legislativos de 2018 (donde la No porque es superior, sino porque —al
ley tuvo media sanción en la Cámara de contrario— su único sentido no es refle-
Diputados, pero no logró aprobarse) y de jarse fuera de sus ríos, sino como parte de
2020, cuando la Ley de Interrupción Vo- un continente sometido, en el siglo XXI,
luntaria del Embarazo (IVE) fue sancio- por fenómenos más complejos que el
nada por el Congreso de la Nación. escondite de las urnas.

La democracia es más y mejor democra- La raíz de un feminismo popular, demo-


cia si hay feminismos. Pero la democracia crático, autónomo y no de los que buscan
no es natural en América Latina, sino una romper (solamente) el techo de cristal
conquista frente a la conquista de las dic- —como algunos sectores norteamericanos
taduras que provienen del pecado original o europeos, cuyos feminismos sí pueden
de la conquista en 1492. Un mundo que asimilarse a una agenda de género y no a
aparece como descubierto, y no como un movimiento social— nace en la resis-
legítimo, y que se descubre deseante tencia de las mujeres que tuvieron que
cuando solo había sido concebido como el enfrentarse a los pozos de los centros
fruto prohibido o el deseo saqueado de las clandestinos de detención durante la dé-
dominadas por parte de los dominantes. cada de los años setenta.

 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
La lucha de los organismos de derechos integrantes del colectivo de la diversidad
humanos —encabezados por mujeres, sexual.
madres, abuelas e hijas de detenidos y
desaparecidas— fue para que la democra- Por supuesto que las situaciones son
cia no admitiera asesinatos, desaparicio- complejas y cambiantes. En estos tiempos
nes y torturas. Esa lucha impulsó la gim- hay estallidos sociales que no siempre
nasia de una protesta social íntegra y acti- derivan en cambios políticos —como ha
va. El feminismo masivo no nace de un pasado en Ecuador, República Dominica-
repollo: nace de la lucha contra la dicta- na, Puerto Rico, Brasil, Chile y Colombia,
dura y por la plena vigencia de los dere- por denuncias de corrupción, homofobia,
chos humanos. aumentos del metro, reformas tributarias,
manejo de la pandemia, etc.—. Y aunque
La lucha de los organismos de derechos los golpes militares no interrumpen los
humanos —encabezados por Madres y procesos electorales, las democracias son
Abuelas de Plaza de Mayo— generó con- de baja intensidad y son menos represen-
diciones para que los asesinatos, deten- tativas puesto que la capacidad de inci-
ciones arbitrarias, desapariciones y la dencia de la ciudadanía en las decisiones
represión a la protesta social recibiesen del poder político es menor.
una alta condena social.
En 2018, la movilización de un millón de
Este escenario de democracia participati- mujeres frente al Congreso de la Nación,
va, con una alta implicación social y ga- en Argentina, para reclamar por la Ley de
rantías para protestar, abrió la posibilidad Interrupción Voluntaria del Embarazo
de un movimiento feminista fuerte, activo —que se ha puesto de ejemplo, incluso,
y callejero. La lucha de las mujeres en frente a la restricción del aborto a un pla-
Argentina no es una historia de la lucha zo de solo seis semanas en Texas, que
solo por los derechos de las mujeres, sino equivale prácticamente a su prohibición—
de las mujeres que lucharon por hacer no fue un fenómeno aislado.
justicia con sus hijas e hijos, sus madres y
nietas. Argentina es un país con una gran capaci-
dad de movilización y con garantías de-
En otros países de América Latina las mocráticas para hacerlo. Por contraste, en
salidas de las dictaduras —o de procesos 2019 un grupo de chicas en Medellín me
autoritarios— fueron menos claras y con contaron que pidieron permiso a las auto-
una presencia más fuerte de los efectos ridades para poner un pañuelo verde
del crimen organizado, el narcotráfico, los —emblema de la lucha por el derecho al
abusos militares y policiales y los grupos aborto y de lo que ya se conoce como la
paramilitares al margen del Estado (pero “marea verde”— a una estatua de Fernan-
con aval estatal). Esa corrupción generó do Botero.
mayor represión en las protestas, mayor
miedo en la ciudadanía y más violencia Eran apenas un puñado. Pero igual tenían
específica contra las mujeres y personas miedo y, aun con permiso, fueron corridas
por la policía. El símbolo artístico de las
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
mujeres con traseros enormes del artista nace de casualidad en Argentina, pero que
colombiano se escapa de la uniformidad irradia más democracia, aun en los territo-
de la delgadez, pero los uniformados no rios donde la democracia falta. Y que eso
dejan escapar a las chicas que luchan por no es elevar el ego de una Argentina que
la autonomía de sus cuerpos. no es superior, sino que tiene una respon-
sabilidad más alta con las mujeres latinas.
En Nicaragua, en 2019, llevé 20 libros de
La revolución de las hijas en la parte bajo El pañuelo verde es una contraseña que se
cierre de la valija. No me revisaron. Si los convierte en lengua universal y no marca
veían no me iban a dejar ingresar. En el solo una posición frente al aborto legal;
aeropuerto de Managua las preguntas dice un idioma universal como cuando,
tardaban más que en ningún otro lugar al frente a un semáforo, el verde es una se-
que haya llegado a dar una charla. La ñal inequívoca de que ya podemos cami-
orden era clara: no salir del hotel y no nar.
decir que hacíamos una presentación del
libro. Ir a un lugar seguro, no circular y El verde dice que nos cuidamos de lo que
que en las redes nadie dijera nada. Las no nos cuida nadie, que nos entendemos
chicas tenían pañuelos verdes, igual que aunque debatamos, que nuestros proble-
en Argentina, pero venían de correr por mas sí son centrales, que no tenemos
hacer protestas universitarias y de ser miedo a decir lo que no se puede decir y
corridas por sus compañeros de rebeldías que además de luchar queremos disfrutar.
que alegaban —como siempre— que los Pero no es lo mismo sacar el pañuelo
problemas de las mujeres no eran centra- verde en todos lados. Porque somos igua-
les, sino un problema posterior a que se les frente a nuestras diferencias. Y porque
resuelvan la falta de garantías democráti- no es un pañuelo que sale por arte de ma-
cas. gia.

Ellas y yo hablábamos el mismo idioma, ¿Cómo reconoces a una persona que no


algo más que el castellano: el de las ganas conoces en un bar? Hoy se conoce a quien
de ser libres, la pelea compartida por salir no se conoce porque se ve su foto de per-
de la violencia y disfrutar de una sexuali- fil en el chat del teléfono. Las Madres de
dad libre, la preocupación por cómo criar Plaza de Mayo se reconocieron, en 1977,
a las hijas y que no se choquen con el en un bar, con una contraseña clave: un
machismo en la escuela y la emoción de pañal de tela (en la época en que los paña-
las hijas cuando las madres no entienden les no eran descartables, sino que había
bien qué es eso del feminismo pero les que lavarnos a mano y secarlos al sol) de
cocinan una torta con un pañuelo verde. cuando sus hijos e hijas eran pequeños.
El mismo idioma, pero sin libertad.
El pañal se lo colocaron en la cabeza. Se
Así, en las palabras compartidas sin que lo ataron al cuello. Y se convirtió en un
se pueda compartir la convocatoria, com- emblema mundial de la lucha por los de-
prendí que el pañuelo verde es hoy una rechos humanos. Los pañuelos blancos de
bandera que trasciende fronteras. Que no las que fueron llamadas Las locas de Pla-
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
za de Mayo, como tituló su libro el escri- —amenazado ahora por un nuevo nega-
tor francés Jean-Pierre Bousquet. cionismo de derecha— que logró un con-
senso social de repudio a los métodos de
Las mujeres siempre fueron las locas, las las dictaduras, las desapariciones y los
brujas, las irracionales. Pero, en la lucha asesinatos emblemáticos en la región y el
contra la dictadura militar en Argentina, mundo.
la maternidad irrumpió desde un lugar
novedoso. En las revistas femeninas pre- El consenso en torno al lema “Nunca
guntaban: “¿Usted sabe dónde está su hijo Más” y la no aceptación de la impunidad
ahora?”, y orquestaban notas que culpa- militar (y la responsabilidad cívica, ecle-
ban de malas madres a las madres que siástica y empresarial) son hitos en la
reclamaban la aparición con vida de sus construcción democrática de Argentina,
hijas e hijos. que encarceló y juzgó a los máximos res-
ponsables de la dictadura.
La dictadura militar (1976-1983) desapa-
reció a las y los militantes políticos que Las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo
querían cambiar el mundo y pedían mayor generaron otro fenómeno de filiación
distribución de la riqueza, boleto estu- política: los hijos e hijas de los desapare-
diantil, reforma agraria (entre otras cidos que pelean por la justicia para sus
reivindicaciones) en campos de concen- madres y padres. Entre las feministas
tración, a través de tortura y de vuelos de pioneras y más emblemáticas está, por
la muerte en donde los cuerpos torturados ejemplo, Marta Dillon, integrante de
fueron arrojados al Río de la Plata desde H.I.J.O.S., que fue a buscar a los genoci-
aviones de las Fuerzas Aéreas. das para denunciarlos y que escribió el
libro Aparecida sobre la búsqueda de los
La resistencia más valiente a esa dictadu- huesos de su madre junto con el equipo de
ra feroz fue la de las Madres de Plaza de Antropología Forense.
Mayo: las madres de las jóvenes y los
jóvenes desaparecidos por la dictadura La hija que busca sepultar a su madre, la
que no eran notificados ni como vivos, ni militante juvenil que no baja los brazos
presos, ni muertos. Ellas se juntaban a cuando no había justicia, y la activista
reclamar —a pesar de las amenazas y que feminista que tiene experiencia en cortar
algunas de ellas también fueron desapare- una calle cuando se decide hacer una
cidas— frente a la Casa Rosada, la central huelga para protestar por un feminicidio,
de gobierno, en la Plaza de Mayo. se cruzan en un cuerpo que se multiplica
en muchos cuerpos. Y no es casualidad,
Ellas reclamaron memoria, verdad y justi- es voluntad personal y tradición política.
cia durante la dictadura y en democracia,
y son un emblema mundial de la lucha Los factores posdictadura son muchos
más valiente, no violenta y comprometida más. Otra centralidad en las consecuen-
por los derechos humanos. Y, gracias a cias de la persecución política a las mili-
ellas, Argentina logró un proceso de con- tantes de los años setenta es que muchas
solidación de juicios por lesa humanidad de ellas se van del país para lograr sobre-
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
vivir. Y en el exilio se cruzan con un fe- movimiento de mujeres y de la diversidad
minismo organizado del que toman mu- sexual muy fuerte, masivo, organizado,
chas de sus consignas políticas. que hereda y reconstruye formas de movi-
lización ya practicadas contra la impuni-
El cruce entre militancia política tradicio- dad de los genocidios militares y con
nal (con interés en cuestionar los privile- prácticas europeas que fueron traídas di-
gios de clase, pero sin foco en las cues- rectamente por quienes se vieron obliga-
tiones de género) y el feminismo, da fru- das a huir de la dictadura y regresaron con
tos que empiezan en 1976 y tal vez se la democracia al país.
consuman en resultados en 2020, con la
aprobación de la ley de aborto legal, segu- Los efectos de la lucha contra el terroris-
ro y gratuito. mo de Estado y el fuerte consenso contra
las muertes, desapariciones y la criminali-
Las militantes que lograron huir del país y zación de la protesta social, generan un
viajaron, especialmente, a Francia, Espa- escenario propicio para que el feminismo
ña, Suecia y México, se van perseguidas se convierta en un movimiento de masas,
por querer redistribuir el ingreso a través con una organización precisa y con de-
de una revolución. Pero vuelven permea- mandas que pueden ser llevadas a la calle,
das por el movimiento de liberación fran- al Congreso, a la academia, a las librerías
cés y otras autoras feministas que recla- y a la televisión.
maban el derecho al aborto legal, entre
otras demandas de autonomía femenina. Del pañuelo blanco nace el pañuelo ver-
de. En un Encuentro de Mujeres, en Rosa-
Argentina logra una gimnasia de protesta rio, en 2003, la campaña por el aborto
y movilización social que constituye la legal, seguro y gratuito (cuya precursora
base para una democracia participativa, es la abogada ya fallecida, Dora Cole-
movilizada, atenta, activa y con experien- desky, que se convirtió en feminista du-
cia en construcción política y activismo rante su exilio en Francia) decidió elegir
ciudadano. Las mujeres, en democracia, un símbolo identitario de la lucha por la
se unen para reclamar sus derechos a tra- Interrupción Voluntaria del Embarazo.
vés de multitudinarios Encuentros de Mu-
jeres que sientan las bases de una forma La psicoanalista pionera de la campaña,
de reunión popular, masiva, autónoma del Martha Rosenberg, afirma que pensaron
Estado, horizontal (sin líderes, donde un color que no podía ser blanco ni tam-
todas tienen el mismo derecho a voz y poco violeta (el color clásico del femi-
voto) y federal (en todas las provincias y nismo), y así surgió el verde (parecido al
no solo en las ciudades centrales). del Movimiento Feminista de Liberación
- MFL francés) también como símbolo de
En definitiva, la lucha contra la dictadura salud y esperanza.
militar, la defensa de los derechos huma-
nos en democracia y el impulso a un fe- Pero ese verde de los pañuelos de la lucha
minismo transversal a los distintos parti- por el aborto legal se convirtió en una
dos políticos generan la plataforma de un “marea verde” en 2018 (cuando, con un
 
 
 

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 
millón de jóvenes en la calle, se logró la es la disputa central del feminismo: mos-
media sanción en el Congreso de la Na- trar que todavía luchar vale la pena.
ción y se perdió la votación en el Senado)
y en una bandera de triunfo el 30 de di-
ciembre de 2020, con la aprobación de la
Ley de Interrupción del Embarazo.

Hoy los pañuelos verdes son la bandera


simbólica de los feminismos en toda
América Latina. Es casi el único signo
político surgido en el siglo XXI (que no
recuerda viejas luchas, sino que encarna
un movimiento vital, presente y con una
pulseada por disputar futuro): una bande-
ra trasnacional que con su sola presencia
—extendido, triangular, en la muñeca, en
la cabeza, en el pecho o agitado— dice
algo sin que haya que explicar que quiere
decir: libertad, autonomía, solidaridad,
independencia, goce sexual, freno a la
violencia, etc.

“Hoy representa y une el movimiento por


el derecho a decidir en toda América La-
tina”, señalan desde la organización Cató-
licas por el Derecho a Decidir de México,
en un posteo en Instagram, del 13 de oc-
tubre de 2021, en el que preguntan “¿Qué
simboliza el pañuelo verde?” y respon-
den: la lucha por el aborto legal, seguro y
gratuito; respeto a los derechos y autono-
mía de las mujeres y personas con capa-
cidad de gestar; garantía de derecho a
decidir, cada persona debe ser libre de
decidir lo mejor para sí misma, sin juicios
ni estigmas; maternidades deseadas y
libres de violencias.

Una bandera que se puede ver en un video


de Ricky Martin, en Tik Tok, en las mar-
chas y en la muñeca de una actriz como
Jane Fonda. El verde es esperanza y esa

 
 
 

10

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 

Conclusiones

 El feminismo latino no apela a una tajada, sino a despertar las ganas de cambio en un
mundo que, a mayor crisis, genera más desidia, resignación, desánimo o protestas.

 La pasión por el cambio y la horizontalidad con que se organizan los feminismos son su
fuerza y su vulnerabilidad. La forma de organización en donde las opiniones personales
son vitales, apasionadas y no manejables son su virtud y su alarma.

 El reparto de representación genera confusión interna, enfrentamientos y, en muchos


casos, descapitalización y dispersión de un fenómeno que tiene la ventaja de ser convocan-
te pero que tiene que lograr canalizar adecuadamente esa convocatoria para que su poten-
cialidad no se desperdicie.

 El feminismo masivo es heredero y nace de la lucha contra la dictadura y por la plena


vigencia de los derechos humanos, del pañuelo blanco nace el verde.

 El pañuelo verde es una bandera que trasciende fronteras, una contraseña que se convier-
te en lengua universal, que irradia democracia a territorios donde falta, un signo político
que con su sola presencia quiere decir: libertad, autonomía, solidaridad, goce sexual, freno
a la violencia.

 
 
 

11

 
                                                                                                      
 

ANÁLISIS CAROLINA 25/2021


SERIE: GÉNERO
 

Fundación Carolina, octubre 2021

Fundación Carolina
C/ Serrano Galvache, 26.
Torre Sur, 3ª planta
28071 Madrid - España
www.fundacioncarolina.es
@Red_Carolina

https://doi.org/10.33960/AC_25.2021

La Fundación Carolina no comparte nece-


sariamente las opiniones manifestadas en
los textos firmados por los autores y auto-
ras que publica.

Esta obra está bajo una licencia de Crea-


tive Commons Reconocimiento-
NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Inter-
nacional (CC BY-NC-ND 4.0) 

 
 
 

12

 
                                                                                                      

También podría gustarte