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SESIÓN NUM.

MANEJO DE BIOMODELOS Y VÍAS DE ADMINISTRACIÓN.


INTRODUCCIÓN.

Los experimentos de farmacología, efectuados para estudiar las


propiedades biológicas de las sustancias químicas, se realizan en animales de
laboratorio. En general, los experimentos son de tres tipos:

a. “in vivo”. Cuando se utiliza al animal íntegro, vivo y consciente para


registrar el cambio en el animal como un todo.

b. “in situ”. Cuando se utilizan animales inconscientes, sometidos a


cirugía para exponer, sin separar, alguno de sus órganos o tejidos en
que se intenta registrar algún efecto. Habitualmente están
anestesiados, desmedulados y/o descerebrados con respiración
asistida.

c. “in vitro” Consiste en obtener de un animal, que fue sacrificado bajo el


efecto anestésico o sin él, una muestra de un órgano o de un tejido y
mantener dicha muestra en condiciones de temperatura y nutrición
similares a las fisiológicas para su estudio.

Independientemente del tipo de experimento de que se trate, es necesario,


en primer lugar, manipular a los animales de laboratorio para administrarles algún
medicamento, anestesiarlo, obtener una muestra de tejido o someterlos a cirugía;
por esta razón todos los individuos, desde el investigador hasta el estudiante, que
van a efectuar un experimento farmacológico deben ser capaces de manejar
apropiadamente a los animales de uso común en el laboratorio y estar enterados de
la mejor manera de sacrificarlos.

Los experimentos biomédicos utilizan una gran variedad de especies


animales, tipo preciso de la rama o área de experimentación biomédica de que se
trate. Así, se han utilizado desde grandes mamíferos hasta células bacterianas o
células cultivadas de diferentes tejidos e inclusive alguna estructura subcelular,
enzimas, o cofactores específicos. En los estudios farmacológicos es muy frecuente
el empleo de vertebrados, particularmente los mamíferos. De ellos destacan los
siguientes: ratón, ratas, rata, cobayo, conejo, gato, perro y, con menor frecuencia
los primates.

Una de las razones para emplear diversas especies animales se refiere al


hecho de que el efecto de ciertos fármacos sólo se observa en algunas de ellas. Por
otro lado, en los estudios relativos al desarrollo de nuevos medicamentos, y con el
fin de determinar todas las posibles acciones biológicas de las sustancias químicas,
es necesario el empleo por lo menos de 4 ó 5 especies animales. El uso de varias
especies animales es particularmente crítico en los estudios toxicológicos, ya que
tales investigaciones son determinantes para la prueba posterior del hombre. En un
buen número de estudios farmacológicos se busca utilizar aquellas especies que
tengan una mayor semejanza fisiológica y bioquímica con los seres humanos. Y
cabe subrayar que no todos los efectos farmacológicos que ocurren en los animales
de laboratorio son extrapolables al hombre; asimismo, que ciertos efectos sólo
pueden estudiarse en la especie humana.

En relación al uso de animales para la investigación, conviene recordar su


calidad de seres vivos, que las distintas especies biológicas han sido y son en
extremo valiosas para el hombre y que se les debe tratar con cuidado y respeto. No
se tiene la certeza de que los animales mantengan una estructura emocional
equivalente a la del hombre, lo que si es incuestionable es que los estímulos
nociceptivos les causan dolor, que parece acompañarse de un sufrimiento similar al
que ocurre en el hombre. Por ello, es absolutamente indispensable evitar su
manejo inadecuado y el sufrimiento innecesario.

En la mayoría de los casos, es necesario sacrificar a los animales que han


sido utilizados en el laboratorio. Existen diversos procedimientos: inhalación de
gases anestésicos, inyección de barbitúricos, golpe en la nuca, etc. Estos
procedimientos deberán llevarse a cabo con la rapidez y seguridad necesaria para
que la muerte ocurra con el menor sufrimiento.

Manejo de animales de laboratorio.

El manejo adecuado facilita la recolección de datos, tanto de los animales


control como el de los tratados. Si el manejo no es el indicado, este solo hecho
puede condicionar respuestas anómalas o alteradas a los fármacos.

Habitualmente, los animales para experimentación se obtienen de un


bioterio, sitio en donde se reproducen, cuidan y domestican; sin embargo, se deben
manipular con calma y precaución para evitar que ataquen por temor o
desconfianza. Al manipular animales se debe tener en cuenta que la conducta social
en cautiverio es distinta a la conducta del estado libre, debido a la influencia directa
del medio ambiente.

Los animales de laboratorio, confinados en jaulas, están imposibilitados para


procurarse agua y alimento y de vivir en el medio ambiente que más les beneficie.
Ello suele inhibir una de las conductas de supervivencia más características de
todas las especies biológicas libre, la agresividad: que también disminuye por el
contacto cotidiano con las personas que los cuidan y alimentan. A pesar de ello,
ninguna de las indicaciones específicas que se describen para cada especie es
innecesaria.

Por otro lado, cuando se efectúa un experimento con varios animales es


necesaria su identificación. Para los experimentos cuya duración es solo de varias
horas, el procedimiento más sencillo es una mancha de tinta en la cola. En los
experimentos crónicos es preferible el sistema de perforación o corte de orejas.

1.- Manejo de rata.

Es recomendable cambiar de sitio la jaula en donde se encuentran, abrir la


puerta para permitir que los animales se asomen y “capten” el hecho de que van a
ser manipulados. Las manos deben estar limpias porque el olor de sustancias
químicas y de otros animales puede inquietarlas.

Para sacar una rata de la jaula se le debe sujetar suavemente del cuerpo o
de la cola; si se inquieta, apoyarla en el otro brazo; así por unos minutos para que
se tranquilice y luego colocar la palma de la mano sobre el dorso del animal y cerrar
los dedos pulgar, índice y medio alrededor del cuello; el anular y el meñique
alrededor del tórax para sostenerla. Se debe presionar firme pero suavemente y
evitar brusquedades para no producirle asfixia. Si el animal opone resistencia,
deslizar el dedo pulgar hacia la mandíbula inferior y al presionarla se cierra el hocico
para evitar que muerda.

El sexo se determina al levantar al animal por la cola; en el macho se aprecia


la bolsa escrotal que contiene los testículos y que está ausente en la hembra.

a. Administración de fármacos por vía parenteral.

Una vez que la rata está sujeta e inmóvil, con la otra mano se toman los cuartos
traseros, se estiran y se presenta el abdomen de la rata para que otra persona
inyecte, por vía intraperitoneal, en el cuadrante inferior a la derecha de la línea
media del biomodelo y a la izquierda de la línea media del explorador: la aguja
(27x6mm) de la jeringa debe formar un ángulo de aproximadamente 90 grados con
la superficie de la piel, para evitar penetrar la vejiga o un asa intestinal y provocar
con ello la muerte del animal. Dosis 2 ml/100 gr. de peso.

Al penetrar la aguja se jala el émbolo de la jeringa y si aspira algún líquido


(punción visceral) retirar un poco la aguja hasta que ya no fluya, entonces se pueden
depositar el fármaco.

Si la administración es por vía intramuscular, se presenta el dorso del animal y


el fármaco se deposita, a través de una aguja (27x13 mm.), en la parte posterior de
los cuartos traseros. En ambos casos se inyectan pequeños volúmenes,
habitualmente 0.2 ml/ 100 g. de peso.

b. Administración de fármacos por vía oral.

Para la administración oral, antes de tomar al animal, debe atarse un hilo


grueso en el dedo índice; una vez sujeta la rata, se pasa el hilo por el maxilar inferior,
al tirar de él, suave y firmemente, de regreso hacia el meñique y enredar en éste,
se abre el hocico, ahora se introduce al hocico una sonda gástrica, flexible hacia el
esófago; si el animal tose o se torna cianótico probablemente la cánula se fue a la
tráquea, y si esto ocurre, retirarla inmediatamente. Si no hay contratiempo, se
introduce la sonda hacia el estómago y se deposita el fármaco.

2. Manejo del ratón

El ratón es un animal muy sensitivo, nervioso y rápido, siempre trata de no


ser atrapado y arremete cuando se siente amenazado. Es capaz de detectar
inmediatamente a una persona extraña manipulándolo. Se recomienda no introducir
bruscamente la mano en la jaula.

Para sacarlo de la jaula se puede introducir la mano y colocar los dedos por
debajo de su cuerpo para que suba a la palma o sujetarlo por la cola. Con esta
maniobra se determina el sexo como se hizo con la rata.

a. Administración de fármacos por vía parenteral.

Se puede llevar a cabo a través de dos procedimientos. En uno de ellos se


deposita al animal sobre una superficie rugosa que le sirva para hacer tracción, se
toma de la cola y se coloca entre los dedos meñique y anular, se flexiona el dedo
mediano sobre el dorso del animal, con los dedos índice y pulgar se le toma suave
pero firmemente de la piel del dorso del cuello para inmovilizar la cabeza; se le
levanta para proceder, con la otra mano, a la inyección intraperitoneal. El cuadrante
inferior derecho del abdomen es el sitio para la administración. Dosis 0.1 ml/10 gr.
de peso.

El segundo procedimiento requiere de la participación de dos personas y es


relativamente seguro. En este caso, con una mano se toma la cola y se jala
suavemente hacia atrás y, con la otra, se toma al animal de la piel del dorso. Se
presenta la cara ventral para la inyección intraperitoneal o se jala de las
extremidades posteriores para la administración intramuscular en la parte superior
y cara dorsal de la misma. La inyección subcutánea se efectúa en el dorso del
animal.

COMPETENCIAS DE LA PRÁCTICA.

1. El alumno será capaz de inmovilizar o sujetar correctamente al ratón y a la


rata.
2. El alumno determinará la eficacia de diferentes vías de administración en
función del tiempo.
REQUISITOS:

Clasificación de las vías de administración, estableciendo ventajas y desventajas.


Definición de latencia.
Investigar el mecanismo de acción de los barbitúricos.

MATERIAL Y PROCEDIMIENTO

a) Material.

1.- 1 ratón y una rata por equipo.


2.- 2 jeringas de 1 ml.
3.- Solución de salina al 0.9%.
4.- Balanza para pesar animales.

b) Procedimiento.

El alumno inmovilizara correctamente al ratón y a la rata.

1. Marcar y pesar a cada ratón.


2. Aplicar Pentobarbital Sódico a la dosis de 50 mg. / kg. de peso por las
siguientes vías:
Intramuscular (IM)
Intraperitoneal (IP)
Subcutánea (SC).

3. Inmediatamente después de aplicado el fármaco activar el cronómetro


para determinar el tiempo de latencia por las distintas vías.

El alumno realizara un diagrama de flujo de las ventajas y desventajas de las


vías de administración con ejemplo.

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