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Se dice que la belleza depende de quien admire.

Es decir, la belleza puede ser una hermosura


relativa o realmente belleza. En el caso de los cristianos, ¿en qué consiste la belleza espiritual? Así
que analicemos tres cualidades que le dan al cristiano esa apariencia agradable que contribuye a
que realmente Jehová se complazca en los cristianos.

Y eso es lo que vamos a analizar en esta sección de Tesoros de la Biblia con el título: "Jefté era un
hombre espiritual". Veamos en qué consistía su personalidad, su belleza espiritual. El primer punto
es que el era un hombre pacificador. Dejaba siempre a un lado los problemas que tenía con otros.

Veamos la situación que se presenta aquí en Jueces el capítulo 11:6, 7 y 9. Veamos Jueces 11:6, 7 y
9. Los ancianos se le acercan a Jefté y le piden que regrese para ayudarlos. Y leemos lo que dice el
versículo 6 y 7

Así que su belleza espiritual hacía que él ponga en primer lugar el defender en nombre de Jehová
más que cualquier otra cosa. Esa determinación de no perder la fe lo benefició a él y también a los
israelitas.

Veamos el segundo aspecto el hombre espiritual conoce a fondo la Palabra de Dios y sus leyes. En
el relato de Jueces, el capítulo 11:12 - 15, se presenta que una vez que Jefté se hace cargo de
dirigir esta batalla contra los ammonitas, manda mensajeros a averiguar por qué quieren
atacarlos.

Luego el rey de los ammonitas le responde que ellos estaban ocupando tierra que les pertenecía a
los ammonitas. Pero veamos lo que sucede aquí en el versículo 14 y 15 del capítulo 11 Jueces
11:14, 15.

Aparentemente una respuesta muy sencilla, pero llena de conocimiento. Aquí Jefté estaba
demostrando que no era un guerrero inculto y tosco, sino que era un estudioso de la historia y en
especial de los tratos de Dios con su pueblo. Por eso es que refutó el argumento ammonita,
demostrando que Israel no molestó ni a Ammón ni a Moab en Edom.

Asi mismo, demostró que no poseía la tierra en disputa cuando se produjo la conquista israelita, y
como tercer punto no había cuestionado la ocupación israelita durante los pasados 300 años, así
que no tenían ninguna base para exigirlo. Ahora, pensando en la época de Jefté, ellos no tenían
toda la Palabra de Dios compilada como nosotros en un solo libro donde fácilmente era de
comprobar o leer la historia bíblica.

Hay fragmentos, se utilizaron distintos materiales, pero eso indica que usted era un hombre
espiritual que conocía a fondo las leyes de Dios y para eso se exigía mucho esfuerzo debido a la
dificultad de tener la información a la mano.

necesitamos conocer a fondo la Palabra de Él.

Por esa razón estamos estudiando la Palabra de Dios, profundizando, sabiendo las cosas no de
oído, sino que sabemos exactamente lo que debemos responder y conocer tanto la historia
bíblica. Las leyes de Jehová y poder ayudar a otros a tener una fe firme basada en conocimiento
exacto.
El tercer aspecto de un hombre espiritual es que sabe exactamente a quién deben rendirle
adoración, a Jehová. Veamos lo que se menciona aquí en el relato de Jueces capítulo 11:23, 24, lo
que dijo Jefté a favor de Jehová.

En este punto Jefté estaba poniendo muy claro que la adoración que él realizaba era a favor de
Jehová y que no iba a permitir que se entregara ni un palmo de la tierra a adoradores falsos. Es
decir, no iban a compartir lo que le pertenecía a Jehová.

Otra característica de un hombre espiritual, de un siervo de Dios, espiritual, sin duda, Jefté
demostró estas tres cualidades dejar a un lado los problemas y mantener la paz, ser un buen
estudioso de la ley de Dios, lo que hoy día tenemos toda la palabra de la Biblia y por supuesto, no
dar la adoración a Jehová a nadie más. Esa es la belleza espiritual.

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