Está en la página 1de 152

Recto

Testículos

Casos clínicos
A
SERVET
Técnicas
. ;
C1ru g1 a en la clínica de pequeños animales
. ,
C1ru g1 a
en la clínica de pequeños animales

José Rodríguez Gómez

Jaime Graus Morales

María José Martínez Sañudo

Reservados todos los derechos.

No puede rep-oducirse ni total ni parcialmente, almacenarse en un sistema de recuperación

o transmitirse en forma alguna por medio de cualquier procedimiento, sea éste mecánico,
electrónioo, de fotocopia, grabación o cualquier otro Sin el previo permiso escrito del editor.

Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de

esta obra sólo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción pre­

vista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Espaiíol de Derechos Reprográficos) Si necesita

fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra (www.conlicencia.oom; 91 702 19 70 I

93 272 04 47).

Adver1encia:

La ciencia veterinaria está sometida a constantes cambios evolutivos. Del mismo modo que

la farmaoología y el resto de las ciencias también lo están. AS. pues, es responsabilidad inelu­

dible del veterinario clínico, basándose en su experiencia profesional, la determinación y com­

probación de la dosis, el método, el periodo de administración y las contraindicaciones de los

tratamientos aplicados a cada paciente.

Ni el edtor ni et autor asumen responsabilidad alguna por los daños y/o perjuicios que pudie­

ran generarse a personas, allmales o propiedades como consea.iencia del uso o la aplica­

ción correcta o inoorrecta de los datos que aparecen en esta obra.

© 2005 Grupo Asís Siomedia, S.L.

Plaza Antonio Beltrán Martínez. nº 1, planta 8 • letra 1

(Centro empresarial El Trovador)

50002 Zaragoza - Spain

Diseño y oompaginación:

Servet editorial - Grupo Asís Biomedia S.L

www.grupoasis.com

Impreso por:

Impresión: Gráficas Lizarra S.L.

Crta. de Tafalla, km 1

31 132 Villatuerta (Navcrra) Espai'\a

ISBN: 978-84-932921-7-1

D.L.: Z-1999-2012

Impreso en España
~
SERVET
Cirugía en la clínica de pequeños animales Prólogo

La parte posterior

Autores Prólogo

La publicación de un libro de ciencia 'eterinaria es ya de por sí una


De i1.c¡ui1'rda a drl"('('ha: jaim<' Graus, profesor ª'ociado de cirugía y ' eteri­ El enfoque del libro es eminentemente práctico y ,·isual, surgido
nario d<'l 1ICVZ, M' jo<;é MartínC"t, profesora titular de medicina y cirugía agradable noticia, mayor cuando los autores son españoles y mayor de la experiencia propia de I~ autores. Ello permite al lector iden­
clínicas y ~ubdinxtora del HCVZ y José Ro<lrígue-¿, profesor titular <le aún cuando el libro es de cirugía de pc<iucños animales. tificarse rápidamente con los casos expuestos y con las sucesh"as
medicina y cirugla clínicas y director del l ICVZ. fases de las té01icas aplia<bs. Algunas de ellas son sencillas y pue­
l.a rectenll' profusión de publicaciones sobre cirugía veterinaria, así
den ser ejecutadas por cirujanos noveles. Otras, más complejas,
como la clt•\<11la rnli dad de su t'Onknido <lemuestran el interés cre­
requerirán algo más de experiencia.
cien te hacia <»la partl' de la prát:tica clínica. De alguna manera
podemos al1rmar c1uc la cirugla representa la madmez de la ciencia Considero que esta obra no debería faltar en la biblioteca del ciru­
\'('ter inaria. jano vctcrinar io junto con un buen atlas anatómico, un completo
libro de llsiología y un dr tallado com1)('nd io de patología quirúr­
Existe una predisposición natural para practicar la cirugía, pero es
gica y cirugía d1' prqu rfios an imalc·s. Si bi!'n son estos últimos los
de vital importancia un buen proceso de aprendizaje y formación
que sustentan desde el punto dr dsta tr6rico la práctica de la ciru­
continuada, así t'Omo un gran interés por parte del cirujano para
gía, el prrsrntr trabajo aporta una inmed iatez y cercanía que
documentarse en nuevas técnicas que le hagan aYanzar, asumiendo
resultan ele gran utilidad.
así un cierto rie,go. Sin riesgo no hay aprendizaje ni progreso.
Es un libro fácil de leer que ayudará a que d dlnico progrese en su
EstC' libro C'S un gran comp<'ndio de casos clínicos documentado
fa<.'Cta quirúrgica a su ritmo, sin demasiado esfuerLO y de forma
de forma l'xC<'IC'ntc m!'diante imágenes reales de gran calidad, que
an1cna. Gracias a tll, <;('podrán asumir los ricsgm que nos permitan
ratillcan el refrán "una imagen vale más que mil palabras".
progresar.
Dcbcmo~ 'º!orar que detrás del proceso de obtención y selección
de las imágenes se esconde un gran esfuerzo y trabajo que sólo j ordi Cairó
autores con gran profe~ionalidad y sentido de la responsabilidad Doctor en Veterinaria
pueden realizar. CAl"llS, Hospital Veterinari. Girona
Cirugía en la clínica de pequeños animales
Prefacio -Agradecimientos

La parte posterior

Alguien que tiene intención de lanzarse por vez pri­

mera a una piscina y 9ozar de un baño, debería

reflexionar unos segundos antes de tirarse de cabe­

za. Partimos de la premisa de que, mejor o peor,

todos sabemos nadar, pero ¿podemos hacer un

lar90? ¿resistiremos die:t.? ¿o nos anotaremos en las

cuatro primeras brazadas? ¿conocemos la prefundi­

dad de la piscina antes de zambullirnos en ella?


Prefacio

Esta obra está dedicada a la cirugía, la faceta C(Llizás más espectacular Pensamos entonces que tal ve-¿, a algLLien más que a nuestros alum­ cer que a nosotros nos proporciona la cirugía. En todo caso gracias
ele la actividael de un veterinar io clínico. Seguramente porque se nos, le resultaría ele utilidad todo ese trabajo, tan cuidadosamente por vuestra atención.
¡Veo un socorrista cerca y hay más gente nadando!
trata de una terapéutica directa, que se aplica con las manos y c1ue almacenado. Decidimos darle una forma c¡ue permitiera al clínico
es un alivio, aunque lo normal es que no me ocurra
<lota al cirujano de Lma especie <le poder mágico al c1ue contribuye reterinario identificarse fácilmente oon el oontenido cuando se viera Agradecimientos
d hecho <le que, a menu<lo, la resolución <le una patologia en d qui­ ante casos similares.
Queridos todos los que formáis parte de esta pequeña gran familia
nada, si hay al9ún problema tendré ayuda ... rófano sea muy rápida.
En este \'Olumen se recopilan los principales procesos patológicos del Hospital Clínico Veterinario de Zaragoza:
La práctica quirúrgica conshtuye, además, la prueba de fuego para que afectan a la zona perineal del perro y del gato, desde Ja hernia
1\il uchas gracias por vuestra ayuda, colaboración y apoyo, sin los cua­
Ah!Y siempre la escalerilla de salida loca lfaada y el el veterinario novel ya que, así como los éxitos en cirugía son muy perineal y el ano hasta el glande y el prepucio, pasando por el geni­
les indudablemente no habríamos llegado hasta aqLtÍ.
evidentes y contribuyen en gran medida al prestigio del cirujano, tal externo de la hembra.
albornoz a mano. Cuando todo está listoy no hemos también los fracasos parecen ser especialmente relevantes. Gracias a profesores y personal de admi1ústración y servicios, a dí1ú­
&: rccog<'n en cada capítu lo los casos clínicos que consideramos más
cos y no clínicos, porque todas las tareas son igualmente importantes.
dejado nada a la improvisación ya sólo nos queda En cualquier caso, la aureola de mito que rodea a la cirugía yal ciru­ significativos para ilustrar una determinaela patología, haciendo
jano obliga a planificar <.'On detalle cada acto qLtirúrgico, a diseñarlo especial hincapié en aspectos concretos y puntos relevantes que cre­ Gracias también, como no, a los clínicos que nos mnfiaron el trata­
cambiarnos de ropa, ponernos el gorro, la mascari­ cuidadosamente con el objehvo de lograr los mejores resultados en emos deben ser terlidos en cuenta al afrontarla. miento de sus pacientes.
el tJempo más breve y con el menor traumatismo posibles.·Todo ello
Se describen también los tratam ientos relacionadas oon los casos Gracias muy especialmente a los veterinarios internos que se han
lla, la bata y los 9uantesy lan,wrnos, ahora sí, a la contribuirá además a que el clínico disfrute en el quirófuno, porc1ue
presentados, en especial los quirúrgicos, aunque sin pretender mn formado y se forman con nosotros, porque su esfuer¿o constante
la cirugfa puede y debe ser un placer.
dio hacer ele este libro un manual de técnicas quirúrgicas. Los pro­ constituye el mejor de los alicientes para los que ya no somos tan
intervención planteada.
Este es un libro sin pretensiones, que quiere acompañar al veterina­ cedimientos descritos son los que nosotros realizamos en nuestros jóvenes. Gracias a Amaya, Susana y Maitane, a Maria Eugenia, Ana y
rio en el quirófano, reflejo gráfico de la labor el ínica de cada día, de pacien tes habitualmente. A nuestro juicio funcionan bien y por eso Gorka, aAlida y a Oiga, a Ana, María,Ainara yJosé. Vuestra entrega
la experiencia adquirida en ella, de los éxitos y de los fracasos. los escogemos, pero somos conscientes de que existen otros con los ydedicación <liru; as os hat-en merec.-edores del mejor de los füttu-os.
Espejo también, porque no decirlo, del gusto de los alllores por su <1ue también pueden obtenerse buenos resultados.
Gracias en suma a todos por vuestra dedicación diaria ypor vuestro
trabajo y de la ilusión, siempre mantenida, de hacer las cosas bien y
Antes de terminar, queremos pedir elisculpas a los amantes de la entusiasmo, que hacen que el trabajo a vuestro lado sea una tarea
cada dia mejor.
fotografía. Las imágenes que mostramos son instantáneas obtenidas sencilla, gratificante e incl uso divertida.
El alma de la obra que nos ocupa es un material fotográfico que fue por nosotros mismos en la consulta o en el quirófano en los que
Y cómo no, nucstt·o rcmnocimicnto más sincero a todos los <JUC
recogido, aJo largo de los últimos años, con una llnalidad inicial dis­ obviamente nuestra llinción no es la de reporteros, y eso se nota. En
desde la Editorial Servet han sabido sacar a nuestro trabajo el mejor
tinta, la de incorporarlo a nuestras clases en la Facultad. En gran muchas ocasiones no se trata de la mejor imagen que se hubiera
partido.
medida, por tanto, este libro nació de la casualidad. podido obtener desde el punto de vista técnico. No obstante confia­
mos en que el interés clínico sl sea el adecuado y compense el resto.
Una de esas tardes en que nos reunimos a comentar casos cl ínicos, Dr. D. José Rodríguez Góme-L
un paciente nos llevó a otro y éste a otro más hasta que sobre la Si contribuimos, desde la cercanía ele un compai\cro, con alguna Dr. O. Jaime Graus Morales
mesa se acumuló tal cantielad de in formación c1ue nosotros mismos idea c1ue os ayude en vuestra labor diaria, nos daremos por satisfe­ Ora. Oña. Mru·ía José Martínez Sruiu<lo
quedamos sorprendidos. chos. Será estupendo si además conseguirnos transmitJr algo del pla- Hospital Clínico Ve te rinario. Zaragoza.
La parte posterior ¿cómo se maneja este libro?

Manejo de la obra
"La parte posterior" está dividida en nueve capítu­ El último capítulo titulado "Técnicas generales", Los contenidos La barda de color nos indica que estamos
los. El primer capítulo del libro "Generalidades de la incluye un conjunto de técnicas básicas complemen­ ante la descripción de una técnica quirúrgica.
cirugía rectal, anal y perineal" nos introduce en los tarias a las descritas a lo largo de todo el libro. to~w-'WWl'ff/fflcfeCf'f«­

aspectos más importantes a tener en cuenta antes li«»>--~-,,.,_,........,


Ol.lf. . . .ffaoriMdot...,dtll9(901flOIRllllO
, lntrodUCCiOO del caso clínico
.
En el desarrollo de los contenidos se ha diferenciado .._ ode la patologia.
de intervenir quirúrgicamente en esta región.
gráficamente por una lado, la descripción de las téc­ En ocasiones un cua(i'o nos ac!Viertede
~ Estas anotaciones advierten de un riesgo
Los siete capítulos siguientes se ocupan de una zona nicas quirúrgicas y por otro, la presentación clínica la dificultad técnica del procedimiento
1 en laintemnción o de una fase enla (Jle se
anatómica diferente. Explican paso a paso y de de patologías y tratamientos médicos. empleado ydel íncfice de presentación
de la patología descsita (del 1 al 5). deba prestar una atención especial.
forma detallada las intervenciones quirúrgicas desti­
nadas a resolver las patologías más frecuentes. Las referencias aotras técnicas - - - - + - - -..
oexplicaciones del libro están
claramente señaladas para facilitar
.,__
Los procedimientos se ilustran. paso apaso,
las consultas.
___ ___
_
_....
.....................
.eo.--·...·-·­
mediante espléndidas fotografías.

Explicaciones paso apaso de - - - - + -­


la técnica quirúrgica empleada.
__ . --·-··­
...
__
..:::=:::!:::
..·=:.::.:-....:.:::..:
. ...... ____
....,,.. ,..,,.
Las aperturas de capítulo En cada doole página se realiza
unrepaso anatómico ala región mediante -··---··­
dibujos esquemáticos. Nombre del capítulo

---·---
·-·.....·-··.... ...

Ano
Ano SaoAlti> .,,.,,_ ___ Nombre del capít.Jlo doo:le nos encontramos

La banda sincolor describe - - - - - + -..


Saculilisanal.CAsot ,.......,..,~
ypatología tratada.
la patología oun tratamiento médico

-
u~~w,,__,,..._.,~

S...llJUMI rnJ6tt--'••-,,.._.....,

+
C..1~~ CltllKPfr'OJW'°'llJidluf/fM~dfrlo

.......,..._._

{ uwt6tW 11 ll'Wfs dtl-. yw fWl/h d _,.,


c-a~llMillim
""""(MfMfdo"....,,,..."" ,,. ......_.....

Ki$ ltftitftl/fJ dtJ
C..OJ~~ t1/f'l~Ollllll(.tty,..,~fr11,l) . SfloO(to
SM....... llkflica<_. c«lllW"Odt'loJt«OS~~Jll
.............,._ _ ,,. . . . . . .f-. ..- •

Loscuadrosdestacan
Ceo4 'liümMo~ -dUtolbodoft~"""'íflsa.JJ.. ~------~ consejos útiles.
~~c•"4~

C..OJ~tllfllrOlln

--..........
......._._,_,, ,..... _...
··----·-------· .. _. ____
__
....,.

La intemncióo se ilustra, - - - - - t -­

_____.......,___..........
-~·---
___ ....,... ...........
""""..,...._

_- _
-~-._.._...,_......,..

paso apaso, medianteespléndidas


~--

-.. ,"" _____

t61ula>ptrloNle$ fotografías.

...,............
- · - - - • -.......-:ll•!Olo..­
. , _ _ _ _ ,.... _ _ #O _ _

C..1t~.....

Col'lllJ lllrw«l61u1ulrirfit.illllllc.ll
CaoJ~ ..~ . . . .
~­ .........._.._. ___
................ .....

(omplk.... ~. . .
C..4111etui611Cltril*Jlt.I~
Caos bwal6n~w.,.....,,-.&o

-dt•no
C...1.-..1'n'9 . . .

--+
C..2 Aflnil«i•pena

_ _ __.__ Los textos de los pies de foto


describen cada uno de lospasos
Indice de contenidos para facilitar la búsqueda de forma escoota pero completa.
de un caso clínico otécnica CJJirúrgica.
La parte posterior
Índice

Índice
Generalidades de la cirugía rectal, anal y perineal 13
Uretra 137
Prepucio-pene 207

Principios generales de la cirugía de la zona perineal ... . .... .... ... ... .. .. ... .... .. .. ... ... .. .... .. ... ... ... .. 14
Obstrucción uretral en el perro ... .. ... ... .... .. .138
Fimosis ... .. ... .. .. ... .. ... . ... .. .. ... .. .. ....2o8

Cálculos uretrales en el perro .. ... . .. .... ... .... ... 139


Caso 1/ Apertura-ampliación del orificio prepucial .. .... ..... 209

Caso 1/ Técnica de urohidropropulsión .. . .... . .. .. .. ... .. . 142


Caso 2 / Reconstrucción del orificio prepucial. .........210

Neoplasias anales Caso 2 / Uretrotomía preescrotal .... .. ..... .... 145

Recto 17
Parafimosis... ............................................................212

Caso 1/ Adenoma de tamaño pequeño ................ 78


Caso 3 / Uretrostomía escrotal ........................... . .... ... .... ...148

Caso 2 / Adenoma de gran tamaño ... .... ... .. ...... ... ... .. .. .......81
Heridas... ......214

Prolapso de recto ...................... ....... ....... ..............................................18


Estenosis uretrales . .... . ... .... .. ... .. .... ... . . .... 154

Fístulas perianales........ .... ............... ...... 82


Caso 1 f Heridas del prepucio .. ... ... .... .... ....... .. ... 214

Caso 1 I Amputación de recto . ... .... .. ........... ....... .. .......................21 Caso 1/ Uretrostomía escrotal ........ . ................155

Caso 1 / Tratamiento médico ......................................................................84


Caso 2 / Heridas del pene (zona distal) ..... ...... ......215

Caso 2 / Colopexia ..... .... ... ... . . .. . .. ....... .. ... 24


Enfermedad del tracto urinario distal felino
Caso 3 / Heridas del pene (zona perineal)..........................................217

Caso 2 / Resección quirúrgica radical ..........................................88

Estenosis .......... . .26


(FLUTD) .. .. .... 158

Caso 3 / Resección quirúrgica radical.


Tumores .. .. ... ... . ... . . ... .... .. . .... .. ... ... ...................220

Caso 1 / Resección rectal transanal .......... 27


Complicación postoperatoria .. ... ...... ...... ...... ..... .92
Caso 1/ Uretrostomía perineal... .........................160

Caso 2 / Colectomía abdominal .......................................... 30


Caso 2 I Estenosis cicatricial ............ ....... ..........................................166
Caso 1/ Tratamiento médico .................................. ....... ..........................220

Caso 4 / Resección quirúrgica superficial .... ...95

Caso 3 / Inflamación y necrosis cutánea . .... .... ... .. . .... ...169


Caso 2 / Tratamiento quirúrgico ................... ..........221

Caso s I Resección quirúrgica y tratamiento médico .. .99

Prolapso de mucosa uretral ...........................................................222

Pliegues cutáneos de la cola ........................ ............. 102

10 Hernias 11
Caso 1 / Resección quirúrgica.. .......103
Hipospadia ....................................................................................228

Testículos 171J
Hernia perineal ...............................................................................................36 Atresia de ano ........................................................108

Caso 1 / Herniorrafia simple ..... .....J9 Caso 1 / Atresia en la gata...... . ..... .... .......... .......... .......... 109
Neoplasias testiculares.......................................................................172

Técnicas generales 231

Caso 2 / Implante de malla ... .. .... .. . .. ..... .. .... .... ...... ....42 Caso 2 / Atresia en la perra ....................................................... .... ....114
Caso 1 / Tumor de células de Sertoli ...... ...... . .... ....173

Caso 3 / Transposición del glúteo superficial


Caso 2 / Seminoma y adenomas perianales .. . ... .. ... . . ..........178

Sondaje uretral en el gato . ..... ... .. . . ... ..232

y elevación del obturador interno


Caso 4 / Doble transposición muscular
(obturador interno y glúteo superficiaO........................48

............. ... -45

Vulva-vagina m
Caso 3 / Tumor de células de Sertoli y quistes prostáticos . ....181

Caso 4 / Tumor de células de Leydig .. .... .. . .... . .. .... .. .. . 185

Testículos ectópicos ................................ 188

Sondaje uretral en el perro...................... .......................236

Caso 5 I Deferentopexia ..................................... ............ ............53


Cistocentesis. ... ... .. .. .. . .... .. .. .. .. .. ... . .240

Neoplasias . .. .. ... .. ... .. .. .............................................................118


Caso 1 / Monorquidia abdominal ........ 189

Caso 1 / Tumor en el labio vulvar . ......... .. ... .... 119


Caso 2 / Monorquidia inguinal . .... .. ... .. . ... .... 192
Anestesia epidural lumbosacra ................................................242

Caso 2 / Tumor venéreo transmisible .....................................................121


Caso 3 / Criptorquidia inguinal....... . .. ... .. .... ... .... .... 195
Posicionamiento del paciente .. ... ... ... .. .. .. .248

Ano 1fl Caso 3 / Tumor en el suelo vaginal .... ... ... .... ... ...123
Caso 4 / Criptorquidia abdominal ... .... .... ........ ... . .. .... .. 197

Caso 4 / Tumor en el techo vaginal .. ... .... ... .... .... .... ...... ...125
Sutura del ano en "bolsa de tabaco" ... .... ..... .... .. 252

Saculitis anal .. .. . . ..........................................................62 Caso 5 / Pólipos vulvares . ....................... ....127

Lesiones escrotales......................... ..202

Episiotomía ... 254

Caso 1 / Tratamiento preventivo .. .... ... ... ... ... . ..... ... . .. 63
Caso 6 / Tumor vaginal ....................................................................................128

Caso 2 / Tratamiento médico .... . .... . ... .... ..... .. ... 64


Caso 7 / Lipoma subcutáneo .... ...... ............................... .................. 130
Vasectomía . .... .. ...... .. ... .............. .. . .. 259

Caso 3 / Tratamiento quirúrgico.

Saculectomía técnica cerrada ... ... .. . .... . ... ... . ...65 Himen persistente .... ... ... .. ...................134
Orquidectomía en el perro y en el gato .. 264

Caso 4 / Tratamiento quirúrgico.


Caso 1 / Orquidectomía preescrotal en el perro .... .. ... . ... 265

Saculectomía técnica con gel caliente .. . .. .. ... ... 69


Caso 2 / Orquidectomía escrotal en el gato ...... . ... .. ... ... ..271

Caso 5 / Saculectomía en hurones ... .... ... .... . . ... . .. 73


Caso 3 I Orquidectomía con ablación escrotal en el perro . .277

Laparotomía infraumbilical .. . ... .. . ... . .. .. .. ...282

Cistotomía .....289

Técnica 1 . .... ... .. .. .. ..... ............................. . .... . .. .... . .. ..... ..... 290

Técnica 2 .......................................... .....292

Generalidades

de la cirugía rectal, anal y perineal

Principios generales de la cirugía


de la zona perineal

13
La parte posterior Generalidades de la cirugía rectal, anal y perineal

Principios generales de la cirugía de la zona perineal


8 periné es la parte de la pared corporal q.ie cierra la apertura caudal
de la pelvis y que rodea los canales anal y urogenital. En el tacto rectal emplee todo el tiempo necesario, cuando El contenido de bacterias en el colon y en el recto es el más

Las inteNenciones quirúrgicas en esta zona tienen un ~o porcenta­ extraigo el dedo debe estor seguro de que el paciente tiene alto de todo el tubo digestivo, por este motivo se debe

je de complicaciones postoperatorias y de recidivas, por lo que o no lo /esí6n sospechado. extremar lo preporoci6n del paciente antes de lo intervención,

numerosos veterinarios son reacios a realizarlas.


asícomo lo elección adecuado de lo técnico empleado.

Es necesario tener un buen conocimiento anatómico de la zona,

realizar un óptimo diagnóstico patológico, y llevar a cabo un correc­

to protocolo qL.irúrgico.

El diagnóstico de las alteraciones en esta zona del paciente se

Aspectos importantes que debe considerar


debe basar en la historia, los signos dínicos, el examen físico -sien­
ante una cirugía perineal:
do de especial importancia el tacto rectal (Fig. 1)-y en pruelbas diag­

• Alimentación baja en residuos durante los 3 días previos a la inter­ • Evite que el paciente se lama o chupe la zona, recomiende el
nósticas complementarias. La analítica sanguínea no suele aportar datos relevantes, a no ser
vención (hay d~erentes empresas que comercializan este tipo de empleo de collares isabelinos.
Cuando vea una neoplasia en esta localización realice una radio­ que el paciente tenga una neoplasia y aparezcan signos paraneo­
alimentación, o en su defecto se puede dar carne picada con • Revise periódicamente al paciente para comprobar la correcta
grafía abdominal para buscar metástasis tumoralles en los gariglios plásicos (anemia. hipercalcemia .. .), o que exista dificultad en la eli­

arroz blanco). evolución de la intervención realizada, por lo menos a las 24


linfáticos regionales (Fig. 2). minación de orina (uremia postrenal).

• Dieta de sólidos 24 horas antes de la operación. Permitiendo horas, 3 días y 6 días...


beber líquidos hasta 4 horas antes.
• Laxantes como el bisacodilo (5-20 mg VO en perros, 2,5·5 mg
VO en gatos). Contraindicados en casos de obstrucción intestinal.
• Enemas isotónicos nunca el día de la int01Vención, por lo menos
24-36 horas antes.

Está contraindicado realizar un enema el día de lo cirugía.

El contenido intestino/ lfquido no podrá ser retenido

durante lo intervendán y contaminará el campo operatorio.

15

• Profilaxis antibiótica preoperatoria frente a Gram negativos aero­


bios y anaerobios. Pruebe estas asociaciones inyectadas en el
momento de la anestesia:
Fig. 2. Metástasis tumoral en los ganglios linfáticos sublumbares en un paciente

• Cefazolina: 20 mglkg IV

coo un adenocarcinoma perianal.

Metronidazol: 1Omg/kg IV

Observe el Clesplazamiento ventral del colon como consecuencia de la aden~tía

lumbar.
• Enrofloxacina: 5-1Orng/kg IV.

Amoxicilina + ac. clavt.Aánico: 20 mg/kg IM.

• Coloque al paciente en una postura cómoda tanto para usted


como para él, evitandole lesiones en las extremidades posteriores
(Fig. 3).

Ver posicionamiento delpaciente. • pág. 248

• Evite la salida de heces durante la inteNención (Fig. 4).

Versutura del ano en bolsa de tabaw. • pág. 252

• Extreme las medidas asépticas de la int9'V0nción.

Fig. 1. El tacto rectal es una maniob"a explocatoria imp-escindible en tooos los Fig. 3. Posición del ~ciente en decúbito prooo, con las extremidades posteriores

• Utilice material monofilamento, sintético y absorbible, para las Fig. 4. Taponamiento del recto con una venda ele gasa para evitar la
casos en los ciie se sospeche una alteración en el recto, ano o periné. ooocadas sobre el final de la mesa quirúrgiea.
suturas internas. contaminación del campo operatOrio con las heces que puedan salir por el ano
Emplee siemp-e el 3" OOdo (corazón) de su mano dominante. Una sutura en bolsa ele tabaco evita la salida de heces durante la intervención
• Emplee material monofilamento, sintético y no absorbible para las durante la cirugía.
quirúrgica e impide la contaminación del campo operatorio.
suturas cutáneas.
Recto
Prolapso de recto
Caso 1 Amputación de recto
Caso 2 Colopexia

M sacrococcígao

M. c:occtgeo

M. glúteo superficial

Estenosis
Caso 1 Resección rectal transanal
Caso 2 Colectomía abdominal

17

M. coi ISlrictor
de la vulva

M. bi:eps lemoral

M. semitendinoso
La parte posterior Recto / Prolapso

Prolapso de recto
Índice de presentación B prolapso de recto puede afectar sólo a la mucosa (Fig. 1) o a toda

la pared del mismo (Fig. 4).

Es importante diferenciar un prolapso rectal "verdadero" de una intu­

El prolapso de recto se presenta en animales suscepción prolapsada de intestino. Para ello introduzca un termó­

metro entre el ano y la masa prolapsada, si el termómetro se intro­

jóvenes parasitados o con diarreas (Fig. 1), asícomo


duce fácilmente se trata de 1.S1a intususcepción (Fig. 5a), si no pasa

en animales adultos que presentan tenesmo es porque choca contra la mucosa del recto prolapsado {Fig. 5b).

(asociado a pólipos) digestivo (Fig. 2) y en ciertos


casos tras realizar una herniorrafia perineal (Fig. 3).

Cuando se presente un prolapso de reda en un cachorro


piense en una parasitosis intestinal. Si se presenta en un Fig. 1. Prolapso cJe mucosa rectal eo oo gato que presentaba uncuadrodiarreico Fig. 4. Prolapso rectal completoen un gato que sufría un intenso tenesmo.
animal adulto realice un diagnóstico diferencial de secundario auna parasitosis intestinal. Es un buen candidato para la reducción manual.
tenesmo digestivo.

18 19

Fig. 2. Prolapso rectal en un perro adulto quedesde hace 4días tiene problemas Fig. 3. Tras la realización de una herniorrafia perineal se puecJe presentar un Fig. s. a. Prolapso cJe una intususce¡ti)nintestinal. b. Prolapso rectal. Fig. 6. Prolapso recidivantede recto en un cachorro cJe PastorAlemán.

para defecar. Se le ciagnosticó una neoplasiaen el recto. prolapso de recto,sobre todo cuando la desviación rectal ha sido importante. El tejido prola~do se congestiona e inflama. El paso del tiempo agrava este

problema dificultando la reducción manual.

La parte posterior Recto Prolapso de recto

Prolapso de recto. Caso 1 / Amputación de recto

Fig. 7. El prolapso rectal eo este caso ha sufñdo una


Índice de presentaci~ Viene a la consulta un Chow-Chow de 2 años de
necrosis en su zona inferior, yha sido contaminaoo
con huevos y larvas de mosca.En esta paciente está
Dificultad técnica edad remitido por su veterinario para realizarle una
inc.icada la resección QUirúrgK:a. amputación de recto, ya que se ha intentado reducir
el prolapso rectal en varias ocasiones pero no ha
sido posible.

El tejido evertido se inflama por un compro­ La técnica se basa en la resección del recto prolapsado y en la reali­
miso vascular. Más adelante se reseca, zación de una anastomosis término-terminal al mismo tiempo.
aparecen zonas de sangrado y necr05is
• Tras anestesia general y preparación del campo operatorio se
{Figs. 6 y 7).
coloca al paciente sobre la mesa quirúrgica y se desinfecta el
campo operatorio (Fig. 1). La amputación de recta está indicada en casos de
prolapsos que no se pueden reducir manualmente,
Ver posicionamiento del paciente. • p6g. 248 o cuando existen lesiones importantes del mismo.

Posibles etiologías asociadas


a un prolapso rectal

Irritaciones ~ Ci rugía
intestinales liiiíiiiiiíl
Parásitos Enfermedad Hernia
prostática perineal
Enteritis/
Colitis Neopl asias Cirugía
20 de recto perianal 21
Cuerpos
extraños Estreñimiento
Distocia
Urolitiasis

fig. 1. El paciente se coloca siguiendo la técnica descrita, exponiéndose la región Fig. 2. En esta foto se observa la fijacioo inicial de la porciónc.istal del recto con
anal con comocJclad para el cirujano. Observe la congestión y lesión del recio una pinza ele Allys.
prolapsado.

Tratamiento
• Se colocan tres puntos de tracción {a las
Procure localizar el origen del problema y trátelo. 12, 5 y 8 horarias) cerca del ano para
mantener siempre visualizado el recto
durante su anastom05is {Figs. 2 y 3).
Reducción manual Tratamiento quirúrgico
Indicado cuando el prolapso es pequeño o cuando la mucosa no • Amputación.
p<esenta leSiones importantes (Figs. 1-4).
En caso de p<olapsos muy traumatizados, o que no se puedan
• .Aplicación de gasas empapadas en una solución hipertónica o. en reducir.
su defecto, azúcar durante 30 minutos para reducir al mínimo el
edema del recto. VerCaso 1 /Amputación. póg.21
• Compresión manual de la masa prolapsada hacia el ano con pre­
sión moderada y contir-..ia. • Colopexia.
• Realización de una sutl.l'a en bdsa de tabaoo del aio para evitar la En caso de recidivas reiteradas después de una reducción manual o Fig. 3. Algunos cirujaoos recomiendanla cdocación
recidiva. Para impedir el cierre completo del ano anude la sutura de una amputación. de un tubo de ensa)'O en la luz del recto con el fin
sotfe un objeto {<iámetro aproximado 9 mm) intrtXlueidoen el recto. de simplificar las maniObras de colocación ele los
• Indique laxantes (lactulosa aproximadamente 0,3 ml/kg hasta con­ [Ver Caso 2 / Colopexia. ~ p6g. 24 p_intos de tracción, así oomo la amPJtación
seguir el efecto deseado) para facilitar la eliminación de las heces. posterior de la zona lesionacla.
La pa e pos erior Recto Prolapso de recto

• A contirw.ci6n se procede a la resección del recto prolapsado y a


la anastomosis término-terminal, empleándose p1J1tos sueltos de
material sintético absolbible de 3/0 o 4/0 (Figs. 4-8).

En algunos casos está indicado realizar una surura en bolsa de taba·


co en el ano para evitar una recidiva del prolapso durante 1 o 2 días.

Versuturo delano en balsa de tabaco. • pág. 252

22 23

Fig. s. Se (Jlitan los


J:'(Jntos de tracción
y se recoloca el recto Para evitar que el recta se introduzca, inadvertidamente,
anastomosaoo en el en la cavidad pelviana durante la anastomosis se secciona
Ag. 4. La colocación de diferentes puntos de traccioo asegura lacorrecta
Ag. 5. En la síguiente fase se incicla la zona proximal del recto, y comienza la inteñor del canal una parte y a continuación se sutura. Este procedimiento
exposícioo del rectodistal.
sutura término-terminal discontinua coo material absorbible, espacíando los pélvioo. se repite en pequeños tramos de toda la circunferencia
En esta imagen se puede observar la resecciónde la zona dorsal yexterna del
puntos a¡roximadamente 2 mm. Resultado final de la del prolapso.
recto prolapsado.
intervención.

Después de la cirugía Posibles complicaciones


• Continuar con la antibioterapia, profiláctica, iniciada en el preopa­ • Estenosis de recto por englobar excesiva cantidad de tejido en la
ratOlio durante 3 o 4 días. anastomosis.
• Comida baja en residuos. • Dehiscencia de la anastomosis por infección secundaria y por
• Laxante suave para facilitar la eliminación de las heces durante inadecuada realización de la sutura.
dos semanas {lactulosa 0,3 ml/kg/8 h vo hasta conseguir el efec­ • Incontinencia fecal por lesión del esfínter anal o sus nervios.
to deseado).

8 pronóstico es bueno si la causa primaria del tenesmo o de la irri­


tación es controlada satisfactoriamente.

Ag. 6. En esta fase de la inteNención ya se ha realizado la sutura ele 213 partes Rg. 1. Enesta imagen, perteneciente aotro caso, se puede observar el fin de la
ele la circunferencia rectal. Acootinuación se va aproceder ala secciónde la zcna mastomosis CJJEl se ha realizado manteniendo un tuoo de ensayo en el interior de
inferior del recto lesíonado y asu anastomosis. la luzdel recto.

Agradecemos al Dr. Cairó (Clínica Veterinaria Canis. Girona) fa cesión de imágenes en este capítulo.
La pa e pos erior Recto Prolapso de recto

Índice de presentaci~ 1-=r=J La co/opexia se realiza con el fin de crear una Fig. 3. Efl cada punto de sutura se debe englobar la
submucooa del intestino,~ es la capa más
Dificultadtécnica ~ fijación estable entre el colon y Ja pared abdominal resistentec!el mismo. pero evitando penetrar hasta
que impida el moviendo caudal del recto y por tanto la mucosa colónica.
su prolapso.
Utilice agujas cilíndricas,
sin punta biselada, con el fin de
lesionar lo mínimo posible el
La co/apexia est6 indicada para prevenir el prolapso rectal intestino ol atravesarlo.
recurrente.
Una complicación potencia/ es la
peritonitisinfeccioso si na se
maneja adecuadamente el colon,
se perfora descuidadamente o si se
emplean suturas multifilamento.

La técnica comienza realizando una laparo­


tomía infraumbilical y localizánd05e el colon
descendente.

_ __... ____
'(erlopor~~omfo ~ pág. 282
m{roumb1licol. ;..,..

• Se tracciona el colon descendente hacia


la cavidad abdominal para reducir el
prolapso.
24 • Se escarifica, en el borde antimesentéri­ 25
co del colon descendente cercano a la
peMs, una zona de 5 a 1Ocm. Para ello
se puede emplear una torunda de gasa
(Rg. 1).

Fig. 1. Coo una torunda de gasa se frota el borde


antimese11térieo del colon hasta obseivar la initación
ehiperemia del per~oneo que lo recubre.

• La misma maniobra se repite en la pared


abdominal izquierda, a unos 3 cm de dis­
tancia con respecto a la línea de la lapa­
rotomía (Fig. 2).
• A continuación se procede a la sutura.
con material sintético absorbible 3/0, del
oolon al músculo abdominal (Fig. 3 y 4).
• La intervención finaliza cerrando la lapa­
rotomía tal y como se describe en la sec­
ción correspondiente.

Fig. 4. Se realiza la colopexia coo dos líneas de sutura independientes de material monofilamento absortliblepara garantizar la fijacióndel c¡jon ala P0íed abdominal.
Fig. 2. Irritación del peritoneo parietal oon el fin
de aumentar la adherencia del coloo ala pared
atx:lominal.
La parte posterior Recto Estenosis

Estenosis Estenosis. Caso 1 / Resección rectal transanal

Índice de presentación Índice de presentaci~


Se presenta en la consulta un paciente con
Dificultad técnica
dificultad para defecar como único signo clínico.
El recto puede sufrircuadros En la exploración general no se detecta ninguna
de estenosis secundarios Indicaciones de la resección rectal alteración, y en el tacto rectal se advierte una
a neoplasias murales o a fibrosis • Neoplasias. estenosis a una distancia aproximada de 4 cm
secundarias a procesos • Traumatismos y necrosis. del ano (Figs. 1 y 2).
inflamatorios locales (Fig. 1). • Perforaciones y laceraciones. Los resultados de los estudios analíticos son
• Estenosis. normales.

fig. 1. Estenosis que ronprime dorsatmente el recto


y que dificulta la eliminación de heces.

Estos pacientes presentan tenesmo, dis·


quecia, hematoquecia, así como heces
blandas muy finas (en forma de cinta).

Los adenocarcinomas de colon


pueden ser circunferenciales
produciendo una gran estenosis
del intestino. Reo/ice un corredo
diagnóstico diferencia/.
26 27
Estos problemas se pueden afrontar de
diferentes maneras dependiendo de la
localización de los mismos (Fig. 2).

fig. 1. Aplicando un enema de bario se localiza ciaramente la estenosis.


fig. 2 Zooa A: Resección transanal. Asimismo. la radiografia sirve para confirmar que no existen aclenopatías
Zooa B: Ostectomía del puas. sublumbares.
Zooa C: Laparotomía suprapjoca.

Antes de la cirugía
• Dieta baja en residuos (arroz blanco y carne picada) 3 das antes.
• Ayuno de sólidos durante 24 horas.
• Enema de agua caliente el día anterior
• Enema oon povidona yodada (10%) 4 horas antes de la cirugía.
• Profilaxis antibiótica (cefalosporina de 'Z" generación).
Fig. 2. La estenosis se observa claramenteen la radiogralía ventrodorsal.

Al localizarse cerca clel ano se puede realizar una resección del recto através

del ano.

La pa e pos erior Recto Estenosis

Técnica quirúrgica
Esta técnica está indicada en la exéresis de una lesión distal que no
se puede abordar a través de una laparotomía, y que está muy cra­
neal para ser extirpada mediante una eversión anal. Complicaciones
Ver posicionamiento del paciente. • p6g. 21¡8
• Tenesmo.
• Hernatoqueeia.
• Dilatación del esñnter anal para poder manipular el recto (Fig. 3). • Sección longitudinal del recto para comprobar si ya se ha alcan­ • Incontinencia fecal temporal por dilatación del ano.
• Colocar unos puntos de fijación en el recto distal para evertirlo zado la zona de lesión (Fig. 8). • Incontinencia fecal permanente por lesión de los nervios rectales o
(Rg. 4). • Al localizar tejido sano craneal a la lesión se realiza la sección del por resección extensa.

• A continuación se colocan unos puntos de tracción en la pared recto en un tercio de su circunferencia (F19. 9). • Estenosis cicatrieial.
del recto, más craneales que los anteriores (Fig. 5). • A medida que se reseca el recto se va anastomosando mediante Para intenta evita estas complicaciones emplee materiales de sutu­
• Se realiza la sección del recto en 360", y se moviliza el recto sutura discontinua con material sintético monofilamento absorbi· ra absorbibles, sea cuidadoso en la disección, no reseque grandes
mediante disección rana a través de su p<V"ed externa (Figs. 6 y 7). ble (Figs. 10-12). longitudes de recto, controle la infección y evite tensiones excesivas.

28 29

Ag. 3. Mediante pinzas yseparaclores se dilata el Fig. 4. Los puntos de fijaciónse colocan Fig. 5. Enuna zona antefior del recto se emplazan Fig. 9. Se secciona el recto sano a 1 cm de la lesión, Fig. 10. Enesta imagen se aprecia la zona que ~eda por seccionar ysuturar
esfinter anal para proer acceder al recto distal. ap-oximadamente a 1cm del esfinter anal. Oe esta dos o tres puntos de tracción, y entreéstos y los yse sutura al esfínter anal conpuntos absorbibles (6-9 horarias). Asimismo, se observa la zonade fibrosis en el segmento rectal extirpaoo.
forma se garantiza la localización de la parte caudal puntos de fijación (realizaoos anteñormente) se monofilarnento de 3/0 o 410. Véase la sutura
de la futura anastomosis. realiza laseoción del recto. comp-endida entre las 12 y3rorarias.

Fig. 13. Segmentointestinal


resecaoo. Observe la zona de
fibrosis central res¡xinsable
de los problema!> que sufría
el paciente.

Ag. 6. Tras lasección circunferencial del recto se Fig. 7. La ciseccióndel recto por su parteexterna Fig. a. Se secciona longitudinalmente el rectocoo el Fig. 11. Finde la anastomosis término-terminal tras Fig. 12. Fin de la intervención.
realiza la disección roma del mismo a lravés de permite su movilización hacia el exterior. finde identificar el área afectada así como el tejido la reseceión del segmentorectal afectaclo por la
incisión realizada. Se deben ligar ocoagular los vasos rectales segm sano por delante de ella. estenosis.
vayanapareciendo.
La pa e pos erior Recto Estenosis

Índice de presentaci~ TO

Dificultadtécnica ~

La propietaria de "Campanil/a" (Fig. 1) la lleva


al veterinario porque desde que nació deposita
heces blandas y muy finas, como sifuesen cintas.

Fig. 1. "Campanilla" es una gata de 2 meses de edad que siempre ha tenido


problemas para defeca.

En el estudio radiográfico oon contraste


baritado se observa una estenosis en el
recto proximal (Figs. 2-4).

30 31

Ag. 2. En la pñmera radiografía, Iras la


administración de un enema de bario, se a¡Jecia
un claro defecto de repleción del recto por delante
delapeMs.

En este caso, dado Que la estenosis se encuentra por delante de la


cavidad pelviana, se decide resecar el segmento intestinal (colecto­
mía) a través de una laparotomía suprapúbica.

Verlaparotomía .
in{raumbilical. p6g. 282

Antes de la cirugía
• Dieta baja en residuos (arroz blanco y carne picada) 3 días antes
• Ayuno de sólidos 24 horas.
• Enema de agua caliente el día anterior.
• Enema con povidona yodada (10%) 4 horas antes de la cirugía.
• Profilaxis antibiótica (cefalosporina de 2" generación).
Ag. 3. Se repite la raciografía 30 minutos más Rg. 4. En la vista ventrodorsal se obseNa que la estenosis afecta a toda la
tarde, comprobándose la fijación de la imagen, circmfereneia del recto.
lo CJJeconfirma la sospecha ciagnóstica de
estenosis intestinal.
La pa e pos erior
Recto Estenosis

Fig. 5. Tras la laparotomía media se diseca el recto Fig. s. La anastomosis término·terminal se realiza
de la cavidad pelviana con el fin de facilitar su con puntos sueltos de material monofilamento,
movilización craneal hacia el abdomen. realizándose primerola cara posterior.

32 33

Fig. 9. Yacontinuación se sutura lacara anterior.


/lJ finalizar la anastomosis es impresdndi~e
comprobar la estanqueidad de la misma inyectando
Fig. 6. Para garantizar lavascularización del recto a suero flSiOOgíco en la luz intestinal, yobselvando que
través de la arteria rectal craneal se coagulan, con no existe salida del mismo através de los puntos.
pinzas bipolares,las ramas de la misma que imgan Antes decerrar la laparotomía, realizar un buen
la zona afectada por la estenosis. lavado atJOOminal con suero estéril atemperado.

Fig. 10. Alos dos meses de la intE!fVención se


comprueba su resutado.
La estenosis ha desaparecido, pero lagata sigue
presentando un megacdonproximal.

Fig. 7. Tras el clampaje intestinal, con una pinzas de En la sutura no debe protruir mucosa
Allys rnocfüicadas, se reseca el segmento intestinal a través de la anastomosis,
estenosado.Debido a la escasa movilidad del recto y ya que este hecho favorecería la
de la ctficultad de su exteriorizaciónse deben aparición de fístulas y peritonitis
extremar las medidas para evitar lacontaminación secundarias.
peritoneal con restos fecales.
Hernias
Hernia perineal
Caso 1 Herniorrafia simple
Caso 2 Implante de malla
Caso 3 Transposición del glúteo superficial
y elevación del obturador interno
Caso 4 Doble transposición muscular
(obturador interno y glúteo superficial)
Caso 5 Deferentopexia
M. glúteo medio

M. glúleo superficial

35

M. obturador
La parte posterior Hernia perineal

Hernia perineal
Índice depresentaci~

Las hernias perineales aparecen casi exclusivamente en perros estreñimiento y tenesmo crónicos, la atrofia senil, la atrofia de la mus­ El contenido más habitual de una hernia perineal es intestino o teji­ Los signos clínicos induyen el abultamiento del periné, generalmen­
machos enteros de meóéMla o avanzada edad. Son anecdóticas en culatura coccígea en perros caudectomizados. las miopatías produ­ do adiposo de origen abdominal. Como consecuencia del fracaso te reducible, a uno o a cmbos lados del ano, según se trate de una
el gato y en las hembras de la especie canina. Las razas más cidas por transtornos endocrinos de las hormonas sexuales y la de la función de la musculatura del diafragma pélvico, muy frecuen­ hernia uni o bilateral (Fig. 6). Podemos hallar también: estreñimiento,
comúnmente afectadas son: Boxer, Boston Terrier, Pequinés, Collie, patología prostática. El resultado, en cualquier caso, es la reducción temente hallamos el recto desviado lateralmente, constituyéndose tenesmo y cisquecia, que en ocasiones alternan con diarreas e incon­
Teckel y Bobtail. También son frecuentes entre los mestizos de del soporte de la pared rectal, de forma que la porción terminal del una flexura en el contenido de la hernia. En otras ocasiooes, se tinencia fecal. Si la vejiga fomna pa-te del oonterWdo de la hernia y se
pequeño tamaño tipo ratonero. tubo digestivo se desvía, se saculiza o forma l.ll divertícoo. fomna una saculación rectal como consecuencia del estreñimiento encuentra en retroflexión, el cuadro clínico puede agravarse al ser
El origen de la hernia es el deterioro de la función del diafragma pél­ El anillo herniario se encuentra habitualmente lateral al esffnter anal O'ónioo, y es la presión ejercida sobre el periné por las heoes reteni­ imposible la micción, llegándose a producir l.1'lél azotemia postrenal.
vico por debilitamiento de su musculatura. Varias causas suelen con­ externo. El contenido herniario puede deslizarse entre el esffnter y el das la que acaba produciendo la hernia. (Figs. 2 y 3). Un diagnóstico completo debe incluir la identificación de las
fluir para que la atrofia y/o degeneración del periné tenga lugar. Entre músculo elevador del ano. Con frecuencia, el elevador está atrofiado La vejiga y/o la próstata también pueden herniarse. Algunas veces estructuras anatómicas herniadas medante radiología y tacto rectal.
ellas cabe destacar la atrofia neurogénica producida por el alarga­ y el contenido abandona el abdomen a su través, entre el esfinter es la vejiga la que se retroflexiona y se harria y otras es la próstata la Sólo así se podrán anticipar los posibles problemas quirúrgicos y
miento de los nervios motores de la zona perineal en pacientes con anal y el músculo ooccígeo (Fig. 1 ). que se hernia, arrastrando tras de si a la vejiga (Figs. 4 y 5). escoger el tratamiento más apropiado al caso. Para ello realizaremos
una radiograña en la que podemos ayudarnos con un contraste en
la vejiga y/o en el recto.

37

Fig. 1. ESQuernaanatómico del periné en el Que se señalan las posibles Fig. 4. Imagen radiográfica de un cistocele en la QUe se localizala vejiga en la Fig. s. En esta cistografía se observa la vejiga oospazada cauclalrnente. lkla parte
localizaciones del anillo herníario zona perineal mediante un cmtraste yodado. de ella se localiza en lacavida:I pélvica yotra en el saco herniario.

El tratamiento médico y dietético tiene como objeto la defecación


y obtención de heces blandas. Se basa en combinar una dieta rica
en fibra y contenido húmedo oon el uso de laxantes formadores de
masa y/o reblandecedores de heces. A esto podemos añadir la
terapia hormonal u orquidectomía en caso de hipertrofia prostática.
Los resultados de estos tratamientos son bastante pobres, de fomna
que generalmente es preciso realizar una intervención quirúrgica que
resuelva el problema.

• Si mediante el estudio radio/6gico hallamos la vejiga como


parte del contenido de la hernia, debe realizarse la
intervención quinírgicc lo antes pasible. Existe riesgo de
que se produzca una retención de orina y azotemia
Fig. 2. Imagen ra:liológica lateral del abOOmen en la Que se aprecia una hernia Fig. 3. lrnagenradiológicaventro-dorsal del abdooien, contrastada cm enema de Rg. 6. Abultamiento en la zona del periné que oorresponde a una hernia perineal postrenal.
perineal unilateral cuyo contenido es el recto saculiza:lo ylleno de heces. bario, en la Que se aprecia una hernia perineal unilateral cuyo contenido es el unilateral. Obsérvese que se trata de un animal caudectornizado.
recto OOsviado.
La parte posterior
Hernia perineal / Herniorrafia simple

Hernia perineal. Caso 1 / Herniorrafia simple

Dificultad té<nica

- Siempre que sea posible realizar una herniorrafia


simple optaremos por ésta técnica, que es la más
sencilla y que consiste en cerrar el anillo herniario
mediante puntos entrecortados. El éxito de la
técnica depende del buen estado de la musculatura
• l.Í'lea de uic1sión para la realzación de una e • Prolong¡ción y ramificOOón de la irdsül ~· Pu1los de relereflCia ublaaoos para el perineal adyacente al anillo herniario,
hemlooafla simple. pera la reaJiZación de l.llél tr<r1Sl))Sieión muscular atxl<Claje de una hernia penneal.
que soportará la tensión de la sutura de cierre.
clel músculo glúteo superroal y/o del músculo
Fig. " Nuestro Otro factor determinante es el tamaño del anillo
obturador interoo.
~nte el tia que
acudió aconsulta por herniario, que condicionará la tensión en la línea
J)imera vez. de sutura.

Seglri la técnica quirúrgica que vayamos a emplear para el cierre del Se presenta a consulta un Caniche, macho de 10 años de edad,
Antes de la cirugía anillo herniario, la incisión cutánea presentará variaciones. Para una con un abultamiento en la zona del periné (Fig. 1). El paciente no
• Mantener en ayunas al paciente 24 horas para garantizar el ade­ herniorrafia srnple o para colocar una malla bastará con una incisión presenta tenesmo ni retención de heces. A la exploración rectal se
cuado vaciamiento del aparato digestivo al objeto de evitar la con­ lateral al ano sob<e el saco herniano que se extenderá longitudinal­ diagnóstica una hernia perineal Dlateral. El recto presenta una dis­
taminación del camPo quirúrgico. mente desde la base del rabo hasta el isquión ventralmente (Fig. 7). posición normal, tal y como se confirma en una radiOgl'afia con con­
Cuando sea preciso realizar una transposíción del glú1eo Sl.4)0rficial, traste (Fig. 2). Se decide intervenir qL1rúrgicamente.
• Administrar un enema con el mismo fin.
será necesario prolongar la incisión dorsaJmente y/o realizar una
• Si la hernia contiene la vejiga de la orina se vaciará mediante siegunda incisión perpendicUar a la primera en drecoón al trocá1ter
sonda o cistocentesis. mayor del fémur (Fig. 8). Para la reaiza=i6n de estoo <ixlrdajes se uti­
• En pacientes deshidratados o tXémicos cano consecuencia de la iz<n cano p..ntoo de referancia la n.tlero5idad isqOOtica, el trocá1ter
retención de onna será necesaria lX13 estabilización antes de la mayor del íéms y el ala del ileOí1 (Fg. 9). Raclogra~a
39
ntervención qurúrgica. YenlrtXilrsal en la que
• Prepcr-ar el carnPo Qúrú'glco y posicionar al paciente cano para
Después de la cirugía se a¡recla, lllEñante
cualQuie.' otra interveroón en la zona del J)Emé. • Colocar al paciente lXl ~ isabeh:> y mantener1o ruante todo cootme llarilaOO,
el postql0ralorio. la cooecta sib.Wóo
La herria pertieal puede resolverse quirúglcanente mediante rrü­ del recto~ ro
• Acmnistrar laxa'ltes con el fin de 81/ltar esfuerzos al defecar.
tiples téc111C3S. La elección de la más adecuada para cada caso coostituye en este
• Indicar una dieta tjandia para evitar el estrei"limiento.
depende pITT;ipalmente de: caso parte ele la Fi , Z(Jl3 (JJir\rglCa una vez ~pn;la de la foona habitual, en la que se
• Advertir al propietario de la importancia de una rigiere cuidadosa
• El estado de la musculatura del penné (tamaño y localiZación del de la región (que lave la zona cada vez que el animal defeque o
hernia aprecia el abl&miento del pariré a ambos lalos del aro.
anülo, mayor o menor grado de atrofia muscular...).
vuelva de la calle).
• El tipo de contenido herniario [intestino, vejiga...). Las complicaciones son poco frecuentes. Están descritas: la infec­

• La experiencia dol cirujano oon cada una de las técnicas. ción de la herida, la incontinencia fecal , la disuria, el tenesmo, el pro­

lapso rectal y la parálisis del ciático.

Entre las técnicas quirll"gicas indicadas para la resolución de la her­ Por el contrario, son relativamente habituales las recidivas, cuya inci­

nia perineal encontramos: dencia oscila, según la Dbliografía, entre un 1Oy un 40%. Estos por­

centajes dependen mucho de la experiencia del cirujano y de la téc­

• Hemiorrafia simple.
nica realizada. La orquidectomfa, según algunos estudios, disminu­

• Elevación o transposición del músculo obttXador interno.


ye a casi una tercera parte esta cifra, además de reducir también la

• Transposición del músclJo glúteo superficial. aparición de la hernia contralateral.

• Transposición del músclJo semitendinoso.


• Colocación do prótesis tipo nnalla.
• Ostopexia Siempre que se intervenga quirúrgicamente una hemia de este
• Defe.'entopexia tipa es precisa recomendara/ propietaria la arquidedamía.
• Colopexia.
La parte posterior Hernia perineal / Herniorrafia simple

Fig. 6. Esquema de la sutura de una hernia perineal en la Que se a¡recia la Fig. 7. Obsérvese el anillo una vez cerrada con puntos entrecorta00s ymaterial
ng. 4. Una vez realizada laincisión so!xe el saco colocación de puntos entrecorta00s entre el esfínter anal ylos músculos elevador reabsortJible
herniaño yabiertoéste,se aprecia Que su contenido del ano ycoccigeo y entre éstos yel músculoobturador interno.
está formado por asas intestinales en buen estado.

40 41

Fig. s. Tras la hemiOrrafia, es importanterealizar una sutura minuciOsa del tejido Fig. 9. Aspecto final de la herida tras la sutura cutánea.En el mismo tiempo
subcutáneo~ conseguir una buena aposieión de los tejidos de la zona, Quirúrgieo se realizó la herniOrrafia contralateral y la ¡receptivaorquidect001ía.
cistendi00s cano consecuenciade la hernia.

! :ando el estado de la musculaturo perineal lo permita y el


defecto no sea demasiado grande, la herniorrafia simple es la
~nica de elección por su sencillez.

Ver orquidectomfa. ~ p6g. 264

Fig. 5. Se reduce el contenido de la hernia con la ayuda de una torunda sujeta por una pinza larga,que nos ayuda a mantene~o en su sitio durante lacolocación de la Fig. 10. ResultadiO efe la inteNenciónen e! momento de la retirada de los puntos.
sutura. Se obseiva que el tamaño del defecto no es demasiado grande asl como la integridad de los músculos coccigeo yesfinter anal externo, que conforman sus tx>rdes. Nótese el aspectototalmente normal del periné yla desapaiieión de la inflamación
por lo que se decide realizar lJla herniOrrafia sim¡je. postquirúrgica, habitual en estazona.
La parte posterior Hernia perineal / Implante de malla

Hernia perineal. Caso 2 /Implante de malla

Dificultad técnica --=mI0


Cuando la musculatura perineal no ofrece garantías
para la fijación de una sutura sometida a tensión,
una alternativa sencilla a la hemiorrafia simple será
la colocación de un implante de malla quirúrgica
de po/ipropileno. El inconveniente de esta opción
es el elevado precio de la malla.

En caso de escoger una malla para resolver una hernia perineal,


la más apropiado es darle forma de cono o cucurucho.

42 43

• No olvide rea/ízar una sutura en bolsa de tabaco del

esfínter anal iy retirarla al terminar la intervención!

Fig. 1. Radiografia ventrooorsal re un pacientere la especie caninaen la que se Fig. 4. La malla quirúrgica es de poliprq¡ileno, material noreabsorbible que Fig. s. Dada la profundidad del defecto anat<mico que da lugar a la hernia
[Ver suturo del ano en bolsa de tabaco. : . pdg. 252 ser\lirá re soporte para el tejido cicatñcial. ÉSte se forma apartir de los perineal, resu1a práctico ciar ala malla forma de cu:urucho, para lo que se
aprecia heroo perineal izquíerda de gran tamaño, cuyo contenido es una
saculización del recto. fit1oolastos que invadenla malla. recorta tal como se apreciaen la imagen.

Fig. 2. Campo qlirúrgico preparaoo.El paciente se coloca en decúbito prono, con Fig. 3. Una vez reducida la hernia ydisecado el anillo. se ooserva el gran tamaño Fig. 6. Una vez fabricado el cucurucoo, se roloca en el defecto con el vértice en la Fig. 7. Se presenta el cucurucho de malla sobre el defecto yse ajusta laamplitud
la cola fijada sobre el dorso yla pelVis elevada. La inciSión se realiZa, al igual que del defecto y la rebilidad de los músculos,por lo cual se decide implantar una parte más profuroa del mismo. de su base alas dimensimes del anillo,abriérdolo más omenos, hasta cubrirlo.
para la hemiooafiasimple, sobreel saco herniario, en dirección oblicua. malla quirúrgica.
La parte posterior Hernia perineal / Transposición de glúteo

Hernia perineal. Caso 3 /Transposición del glúteo superficial y elevación del obt.uraam interno
Dificultad técnica --=-=.J
En aquellos casos en los que el anillo herniario
sea demasiado amplio como para realizar una
herniorrafia simple podemos recurrir,
como alternativa a la colocación de una malla
de polipropileno, a alguna de las técnicas de
transposición muscular. Estas son más exigentes
<ig. a. Se sutura a continuación el perímetro de la técnicamente pero menos costosas desde el punto
base del cono alos músculos que delimitan el anillo, de vista económico. De las técnicas descritas,
asegurándonos de fijar los puntos sobre músculo Fig. 1 . "Monday'' el día
sano y de que no creamos excesiva tensión en la la que según nuestra experiencia ofrece los mejores que acudió anuestra
sutura. resultados, es la combinación de la elevación del consulta.
obturador interno con la transposición del glúteo
superficial. El obturador cubre eficazmente la parte
más ventral del anillo herniario mientras que el
• En casos como éste, en que la vejiga de la orina está
Implicada en la hernia, la resoluci6n del problema es
urgente.
glúteo superficial cierra la zona dorsal del defecto.

Se presenta a la consulta ' Monday", perro macho de 8 años de niario, en retroflexión. Una situación oomo ésta comporta m grave
edad, cruce de Samoyedo (Fig. 1). 8 propietario comenta que su peligro de uremia postrenal que exige una actuación inmediata. Se
44 45

111imal realiza esfuerzos continuos para oñnar desde hace dos días procede como primera medida al sondaje y vaciado de la vejiga.
y que ha observado la presencia de un abiJtamiento al lado del ano. Tras reducir la hernia se realiza una nueva radiografia en la que se

La exploración revela la existencia de una hernia perineal aparente· aprecia que la vejiga ya no está retroflexionada, pero que aún se

mente reducible cuyo contenido, dada la sintomatofogía, parece encuentra desplaza caudalmente junto con la próstata (Fig. 3).

incluir la vejiga de la orina en retroflexión. Al objeto de completar el estudio del contenido herniario, se admi·

La analítica pone de manifiesto ma ligera uremia, siendo normales el nistra al paciente un enema baritado y se realiza una nueva radio·

resto de los parámetros. grafia que muestra una desviación rectal (Fig. 4).

La exploración radológica se realiza tras introducir Lll contraste yoda· Se decide intervenir quirúrgicamente la hernia.

doen la vejiga (Fig.2) queapa-ece efectivamente dentrodel saoo her·

Fig. 2. Radiología lateral de la vejiga contrastada en Fig. 3. Imagen lateral de la vejiga ya reducida Fig. 4. Radiología ventrooorsal, esta vez tras
retroflexiál y formando parte del contenido de la aunque todavía situada en el canal pélvieo. introducir contraste por vía rectal. Se observa la
hernia. desviación del recto en el interior del saco herniario.

Fig. 9. Para la fijación de la malla utilizamos puntos entrecortados simples de material no reabsorbiblemooofilamento distlibuioos alrededor de lamalla.
La parte posterior
Hernia perineal / Transposición de glúteo

Fig. s. Se procede ala pre~ión 00! paciente de la forma acostumbrada.


Fig. 6. Aspecto de la zonaquirúrgica en la que se observa, ala izquierda, el
Se señalala línea de incisión QUe debe ser un am~io aroo que comienza
defecto herniario y, a la derecha, el músculo glúteo superficial. Dada la amplitud
dorsalmente al trocánter mayordel fémur y terminamás allá del isquion.Obsérvese
del anillo se decide en este caso realizar una trans¡xisición del glúteo yuna
la sutura en tdsa de tabaco del ano y la colocacíOCI de la oola soore el dorso.
elevación del músculo obturador interno.

47

Fig. 7. ESQuema anatómico en el que se representa la desinserción del tendón del Fig. s. Una vez desinsertaoo el glúteo y coo cuidado de no lesionar su Fig. 11. Aspecto final de la zonaquirúrgica. Obsérvese a la iZQu;erda el esfínter anal. aniba a la derecha el glúteo superticial traspuesto y abajo el obturador interno una vez
glúteo superf!CÍ31 del trocánter mayor del fémur. vascularización propia. que le llega por su cara interna, es desplazado hacia el elevaoo. Suturanoo entre sí estos tres músculos conseguimos el cierre del anilloherniario. En este caso noha siclo necesario seccionar el tendóndel obturador interno. lo
defecto herniaño. Medianteesta transposición se consigue normalmente cubrir la cual simplifica la técnica.
parte dorsal del anillo herniario, pero no la ventral.

Lo combinación de lo transposición
del glúteo superficial y de la elevación
del obturador interno, es uno técnico
-+-+------'1c-- - - - - Coccígeo
que resuelve lo mayoría de los hernias
J -+------+----~ Ligamento perineales de gran tamaño.
sacrotuberoso
- - - - - - - - - - - -­ - - Esfínter anal externo

---------+-- ­ Obturador interno


(reflejado)

- -+-- - - Biceps femoral


h-- ' - - - - - - - - - - - - 1 Nervio y arteria perineales
Fig.12. Es freo.tente, tal ycomo se aprecia en la
Fig. 9. Se obseria en esta imagen rono el músculo glúteo llega acubrir gran Fig. 10. ESQuema anatómico en el que se representa al mUsculo obturador imagen.que el paciente desarrolleuncierto grado
parte del defectomuscular quedando tan sólo unapequeña parte del mismo sin interno.Obsérvese que clcho músculo se inserta mediante una fina aponeurosis de prolapso rectal tras este tipo de intervenciones.
cerrar. En la imagen se aprecia tejido graso en dicha zooa ventral. en el límite caudal de la tabladel isquion. Es precisamente estaaponeurosis la que, en general, desaparece por si mismo en pocos
quedeberemos desinsertar lo más cerca posible del arco isquiático. con el fin de días.
preservar el tejido fibroso quedara consistenciaa la sutura del obturaoor, unavez
elevado.
La parte posterior
Hernia perineal / Doble transposición

Hernia perineal. Caso 4 / Doble transposición muscular (obturador interno yglúteo suReíficial)

Dificultad técnica --=--::J


Se presenta a consulta "Satán", perro macho entero
de 9 años de edad y raza Pastor Alemán por haber
observado el dueño abultamiento en la zona
perineal izquierda (Fig. 1). A la exploración se
fig. 1. Nuestro diagnostica una hernia perineal cuyo contenido
pacienteel dia que
acudióa consulta
era una flexura rectal (Fig. 2). Se decide intervenir
por primera vez. quirúrgicamente. Fig. '•·Se comienza localizando la inserción clel
Puede Otlservarse el tendón del glúteo superficial en el trocánter mayor
desplazamiento lateral del fémur. Paraello se puede realizar unanueva
de la cola hacia el lado incisión cutánea perpendicular ala antericr, en
contrariode la hernia. dirección al trocánter mayo< del fémur.

49

Fig. s. Una vez seccionadoet tendón de inserción


del glúteo superficial, transponemos el múoculo
Fig. 2. Tacto rectal realizado inmediatamente antes hacia el periné. Ensu disección y manipulación
de la inteivención. se aprecia el deoo hacienoo respetaremos el aporte sanguíneoquellega por su
relieve eo la zona de la hernia. cara interna.

Fig. 3. Una vez realizada laincisióncutánea yla


disección del tejido suOCutáneo, se observael
amplio anilloherniarioy, asu través, el recto ytejioo Fig. 6. El glúteo se lleva caudal ymedialmenteal
graso. se decide realizar una doble transposición de objeto derubrir la parte más dcrsal del defecto
los músculos obturador interno y glúteo superticial. herniario.
La parte posterior Hernia perineal / Doble transposición

Fig. 7. Acmtinuaciónse procede alocalizar el


• Cuando realice una transposición del músculo obturador
interno deberá tener cuidado de no dañar algunas
tendón cJel obturador interno en la cara interna y estructuras vasculares y nerviosas como son los vasos
posterior del fémur. Para ellorotaremos pudendos y el nervio ciático.
rnedialmente la extremidad.

so 51

Fig. s. Al seccionar el tendé:n del obturador


cJeberernos prestar especial atención al nervio
ciático, que cruza sotre él.

Fig. 9. Una vez liberado de su inserción tendinosa y


cJe parte cJe su inserción en la tattl del isquion se
Rg. 10. La partedel músculo obturador desinsertada de la tablaisquiática también se eleva en la misma cirección.
eleva el tendóndel obturador hacia la parteventral

cJel defecto herniario. Nótese la pra<imidad de los

vasos pudendos.

La parte posterior
Hernia perineal / Deferentopexia

Hernia perineal. Caso 5 / Deferentopexia

Dificultad técnica --=-=.J


La hipertrofia prostática, tan frecuente en perros de avanzada edad. Se describe a continuación la técnica de
dificulta la defecación de forma mecánica, al verse desplazada hacia
la entrada de la pelvis durante la prensa abdominal. La consecuen­
la deferentopexia, cuyo objetivo es fijar la próstata
cia es el tenesmo y el estreñimiento crónicos. La próstata actúa y la vejiga en la cavidad abdominal, impidiendo
como un ariete durante los esfuerzos de defecación sobre el dia­ asísu desplazamiento hacia la pelvis y, por tanto
fragma pélvico, contribuyendo de este modo, jl.l'lto con otras cau­
sas ya comentadas, al debilitamiento de la musculatura perineal y
la recidiva.
dando lugar a la hernia. Está técnica es complementaria a las técnicas
En estos casos la próstata se desplaza a la cavidad pélvica arras­ ya descritas de herniorrafia, colocación de malla
trando consigo la vejiga, po.- lo que ambas pueden formar parte del
contenido herniario (Fig. 1). La reduoción de la hernia y reparación
o transposiciones musculares.
Fig. 11. Ambas partes del músculo obturador interno del anillo herniario no serán, entonces. suficiente garantía de que no
se suturanal esfinter anal yal músculo coccígeo. se produzcan recidivas.

52 53

Fig. " Radiograffa lateral del abdooien de nuestro


paciente en la que obseivamos que la próstala
forma parte del contenido 11emiario yha arrastrado
Fig. 12. Acontinuación el glúteo superficial se sutura caudalmente la vejiga.que queda dentro de la
ala parte más dorsal del esffnter anal externo y, cavidad pélvica. El estudio radiográfico se realiza
ventralmente, al músculo obturador previamente administrando enema de bario y mediante una
transpuesto. neumocistograffa.

Para la transposición del obturador La deferentopexia es una técnica

interno es preciso seccionar su quirúrgica complementaria

tendón de inserción. Esto incrementa especialmente indicado en aquellos

la dificultad técnica pero ofrece como hernias perineales que involucran la

contrapartida la posibilidad de cerrar vejiga y/o lo próstata.

grandes defectos herniarios.

Ver orquidectomío. ~ p6g. 261¡

Fig. 2. Se realiza previamente una orquidectomía.


Fig. 13. Aspectode la herida quirúrgicaya suturada. dejando sujetos mediante¡:inzas ambos conductos
Obsérvese la forma de Tde laincisión que permite deferentes y se dejan amoos incisiones sin suturar
alxlrdar lainserción del glúteo superficial en el momentáneamente. Acontinuación se realizaré lila
trocánter mayor del fémur. 1aparot001ia parapeniaoa.
La parte posterior
Hernia perineal / Deferentopexia

Fig. 3. La laparotomía se realiza de la forma habitual Fig. 6. Una vez localizados los conductos deferentes,
una vez lateralizado el pene: ~r linea alba y se sueltanlas pnzas colocadas tras la castración y
protegiendo convenientemente los órganos se tracciooa de uno deellos hasta haC€11o entrar en
abdominales. lacavidad abdominal a través del allllo inguinal.

54 55

Fig. 7. En esta imagense observa uno de los


conductos deferentes ya dentro de la cavidad
Fig. 4. Una vez abierto el abdomen se visualiza la abdominal. La vejiga se mantiene reclinadacon
vejiga y, tras cteS¡llazar cranealmenteel paQuete ayuda de unpunto de tracción y de una J)nza
intestinal, identificamos el colon. atraumática.

Fig. 5. Se reclinacaudalmente lavejiga con el objeto Fig. a. Tras sujetar el primer cooductocon una pinza
de localizar los cmductos deferentes eo su camino que lo mantiene localizado, se procede de igual
hocia la próstata, cruzando los uréteres. forma con el otroconducto.
La parte posterior
Hernia perineal / Deferentopexia

Rg. 11. lntrooucimos una pinza de mosquito P<J la


ioosióo realizada con la que abrimos un blnel,
de 1cm de loogitud aproximadamente, par debajo
de la fascia del músculo transverso del abdomen.
Ayudamos ala salida de la pinza de nuevo mediante
el bisturí.

57

Flg. 9. Ambos conductos deferentes se encuentran bien localizados en el interior del abdomen, unidos ya únicamente a la próstata.

Fig. 12. Se observa el túnel preparaoo para pasar a


su través el cond\Jcto deferente.

Fig. 10. se pretende que ambos cooductos


deferentes acblencomo verdaderos tirantes de la
próstataal anclarlos aambos laoos de la pared
alxlominal mediantela realización de sendas
tunelizaciones asu través. Para ello se comienza
realizando una pequeña incisiónen la zona lateral de Hg. 13. Con la ayuda de otra pinza de mosqutto se
la pared abdominal, cranealmente ala vejiga. hace pasar el conducto deferente através del túnel.
La parte posterior
Hernia perineal / Deferentopexia

Fig. 14. Se traociooa del cooducto deferenteen sentido craneal, tensándolo hasta Fig. 1s. Una vez replegado el condocto deferente sooce si mismo se pasa una
conse~ir que la prootata ~e fija eo la cavidad alxlominal. De~ se repliega ligadura alredeoor de ambos segmentos.
el conducto soore sí mismo para aseguraf10 me<iante ligadura.

58 59

íig. 17. La deferentopexía realizada garantiza que la


próstata no pueda desplazarse de nuevo ala
cavidad pélvíca ni arrastrar consigo ala vejiga, pero
no impide que la vejiga se retroflexione. Para evitar
esta posibilidad, podeiros realizar aelemás una
cistopexia.

Como complemento a la
deferentopexia puede ser conveniente
reolizor una cistopexia que tenninar6
de fijar la vejiga en su lugar
anatómico impidiendo que se
retroflexione.

Flg. 18. una vez cerrada la caviclad abdominal se


coloca al paciente en decúbito prono y
Fig. 16. Aspecto del oonducto deferente una vez aseguraoo sobre sí mismo medianteoos ligaduras. Se procederáde igual fonna conel cooducto deferente del otro lado. Trendelent.irg para proceder acerrar el anillo
herniario con alguna ele las técllicas ya descritas.
En estecaso se escoge colocar una mallaele
polipropileno en cono.
Ano

Saculitis anal
Caso 1 Tratamiento preventivo
Caso 2 Tratamiento médico
Caso 3 Tratamiento quirúrgico.
Saculectomía técnica cerrada
Caso 4 Tratamiento quirúrgico.
Saculectomía técnica con gel caliente
Caso 5 Saculectomía en hurones

Neoplasias anales
Caso 1 Adenoma de tamaño pequeño 61

Caso 2 Adenoma de gran tamaño

Fístulas perianales
Caso 1 Tratamiento médico
Caso 2 Resección quirúrgica radical
Caso 3 Resección quirúrgica radical.
Complicación postoperatoria
Caso 4 Resección quirúrgica superficial
Caso 5 Resección quirúrgica y tratamiento médico

Pliegues cutáneos de la cola


Caso 1 Resección quirúrgica

Atresia de ano
Caso 1 Atresia en la gata
Caso 2 Atresia en la perra
La parte posterior Ano / Saculitis anal

Saculitis anal Saculitis anal. Caso 1 Tratamiento preventivo

Índice depresentaci~ La impactación simple se puede tratar mediante


presión manual de los sacos para vaciar su
La sacul~is es la inflamación e infección de los sacos anales.
contenido.
Es una patología muy frecuente, que afecta al 10% de los perros,

En los perros se introduce el tercer dedo


especialmente de razas pequeñas.

(corazón) a través del ano, y se realiza el tacto


rectal, centrando la exploración en los laterales del
Los sacos anales se encuentron a ambos lados delano, No realice demasiada fuerza, se podría romper el saco.
esfínter anal (4-5 y 7-8 horarios) (Fig. 2). Se vacía
localizados entre el es{fnteranal intemo y el externo. Actúan como Tome precauciones paro que el contenido de éstos no acabe en
reservorio de la secreción de las glóndulas apacrinas y sebóceas. coda uno de los sacos comprimiéndolo desde su su bata.
zona distal hacia el orificio anal (Rg. 2).
Fig. " Contenido obtenido, mediante ~sión manual, de un saco anal de un gato
Etiología
coo un cuadro tí¡joo de saculitis.
La etiología de la saoulitis no está pertectamente definida. Se asocia
con dietas inapropiadas, heces blandas, falta de ejercicio, alte<acio­
nes funcionales del esfinter anal, fístulas perianales... En definitiva,
situaciones en las que no se consigue una correcta evacuación del En las razas miniatura, en los gatos, y en los que no se puede reali­

contenido de los saoos anales durante la defecación, infectándose a zar el tacto rectal, realice la presión para vaciar el saco desde el

continuación su contenido. exterior, comprimiendo el saco anal desde la piel (Fig. 3).

También estaría indicado el lavado de los saoos con suero fisiológi­

Signos clínicos co atemperado para realizar una limpieza mecánica de los mismos.

• Picor de la zona: Cuando existe infección e inflamación local intensa, además de

- Marcha en trineo, para rascarse el ano sobre el suelo. vaciar los sacos anales, se deben irrigar con suero fisiológico atem­

- Lamido e incluso autolesión de la zona anal. perado y con una solución de povidona yodada al 10% o clomexi­

dina al 0,5%.

• Dolor.
En casos de absceso se debe prescribir un tratamiento antibiótico­

62 • Tenesmo. antiinflamatorio tópico en crema, y en casos severos antibioterapia,

• Oisquecia. también, por vía Sistémica.

• Hematoquecia. Recomiende al..lllentar la fibra en la óeta para facilitar la evacuación

del contenido de los sacos anales.

• lnfl<:rnación perianal.
• Contenido denso, maloliente, hemorrágico o purulento (Fig. 1).
Fig. 2. Fístula perianal a las 5 horanas oomo consecueocia de un absceso del fig. t. Identificación de los orificios de los sacos anales. En este caso su apeitura
• Fístula o fistulas perianales (Figs. 2 y 3). saco anal del lado derecho es más dorsal que en el resto de los casos.

Esta patología podría ser una de las


etiologías de las fístulas perianales
en razas como el Pastor Alemón.

• Los sacos anales se deben palpar


y vaciar en cualquier exploración
física rutinaria, así se podró
detectar su alteroción en los
primeros estadios.

Fig. 3. En ciertas razas de gran tamaño los sacos


anales se encuentran más profunoos, pir este fig. 2. Vaciamiento del saco anal oomprimiéndolo desde su zona más interna. Fig. 3. Vaciamiento del saoo anal derecho mediante presión digital externa.
motivo cuando se infectan yse rompense crea una
celulitisdifusa alreOOdor clel ano y varias trayectos
fistulosos.
La parte posterior Ano / Saculitis anal

Saculitis anal. Caso 2 Tratamiento médico Saculitis anal. Caso 3 / Tratamiento quirúrgico: Saculectomía técnica cerrada

"Sam" es un gato macho, castrado, de raza Europea Dificultad técnica ~


llevado a la consulta porque no deja de chuparse
la zona posterior, que también le sangra. La saculectomía es la resección de los sacos anales El paciente que se presenta a continuación sufóa cuadros recidivan­
tes de saculitis bilateral, y la propietaria decidió eperar1o para resol­
En la exploración clínica no se detecta ninguna cuando éstos sufren saculitis recidivantes. verle definitivcwnente su problema.
alteración sistémica, y en la zona perineal se aprecia
una pérdida de sustancia en la zona ínfero-lateral Antes de la cirugía
Recuerdo anatómico
del ano (Ag. 1). • Vacíe el contenido rectal de heces.
El saco anal se encuentra entre las fibras musculares del esfínter
• No emplee laxantes en las 24 horas previas a la cirugía.
anal, cerca del recto, y por su parte interna discurren las ramas de la
cneria y vena caudal rectal, así como los ramos del nervio pudendo • Vacíe el contenido de los sacos anales.
que inervan el ano. • Depile y prepare de forma aséptica la zona quirúrgica.

Se tranquiliza al paciente y se realiza una limpieza mecánica de la


Técnica quirúrgica
zona con suero fisiológico y solución acuosa de povidona yodada

diluida al 50%.

Se prescribe una pomada antibiótica-antiinflamatoria que el propie­

tario deberá aplicar a "Sam" dos veces al día a través de la fístula,

primero, y después a través del ano.

En este caso no se indicó tratamiento antibiótico sistémico.


Paro reducir las complicaciones postoperotorios de esto
técnica procure no reolizorla mientras los sacos est6n
inflamados e infectados.

• No se olvide recordar a los propietarias la necesidad de


que el paciente lleve un collar isabelino para evitar que se
Cuando el problema es unilateral recomiende extirpar
los dos sacos anales. Evitará el mismo cuadro en el lado
lama la zona. controlaterol ol cabo del tiempo.

Fig. 1. En la parte infefior-lateral del ano se identifica una rona fistulosa amplia, Fig. 1. Preparacioo del campo Of)eratooo sobre el que se va a intefV€11 ir.
coo salida de secreción ¡x¡rulenta.

Evolución

Fig. 2. Alos siete días de tratamiento la evolución es favorable. Fig. 3. A los 1odías de tratamiento la fístula está cerrooa y se suspende la Rg. 2. Tras vaciar los sacos anales, se deben irrigar con unasolución antiséptica Fig. 3. En el recto se introduce un "tapón" de gasa con antiséptico para desinfectar
Controlada la infección la cicatrización de la zona es correcta. a¡¡licación de la pomada. (povidona yodada o clorhexidina), para eVitar una contaminación seclJ'daria Si se la zona, yevitar la salida de heces durante la cirugía. Yel paciente se coloca en
rompe el saco durante la disección. decúbito estema! sobre la mesa de operaciones.

Verposicionamiento del paciente. • p6g. 248


La parte posterior Ano / Saculitis anal

Durante la cirugía
• Sea lo menos traumático posible y muy cuidadoso, sobre todo
por la zona más interna. No lesione los vasos y nervios que irrigan
e ineNan el ano.
• Irrigue periódicamente, con suero fisiológico estéril, los tejidos
para que no se resequen.

Fig. 4. Los sacos anales quedan marcados en verde yla incisión cutánea en rqo. Fig. 9. Repita los mismos pasos en el lado contralateral. En este caso, el saco anal Fig. 10. Se lavanlas incisiooes con suero fisiológioo, y se realiza unasutura continua
En este caso se ha introWcido una pinza hemostática para poner en evidencia el derecho estaba menos roherido al esfinter anal, por lo que su disecciál fue más de las fibras musculares disecadas oseccionadas con material absorbible 4/0.
saco izquierdo. sencilla yrápida.

• Evite los coaguladores monopolares, ya que podñan causor


una gran destrucción tisulary una excesiva fibrosis cicatridal.

Las inflamaciones e infecciones recidivantes de los socos


onales conducen a uno mayor fibrosis y adherencias de los
mismos a las fibras del esfínter anal. Por este motivo es
m6s difícil su disección y m6s f6cil su perforación.

Sea extremadamente precavido en la disección craneal


66 del saco, recuerde que por ahídiscurren vasos y nervios 67
importantes para la correcta fisiolagfa del ano.

Fig. 5. La iocisión cutánea es paralela alas fibras del esfínter anal. Se realiza la Fig. 6. Durante la diseoc«in clal saco anal es posible que se rompa accidentalmente. Fig. u. La heñc:ta cutánea se suturacon puntos sueltoo recurrentes verticales de
hemostasia de los vasos sangrantes mediante clampaje con pinzas hemostáticas Enestecaso se debe extremar la metículosidad para eliminar todo el tejido, y no material monofilamentono alJsort:JítMl 3/0.
ocoagulaciál bipdar. dejar ningún resto de saco queproouciría fístulas recidivantes.

Después de la cirugía Laxantes Perro Gato

• Collar isabelino para evitar que el paciente se lama la zona. l actulosa 1ml/4,5kg/8hVO 5ml/VO
• Tratamiento antibiótioo sistémioo durante 3 o 4 días, si no existen
5·20mgVO i.s·smgVO
complicaciones infecciosas. Bisacodilo 1 a 3veces al día 1 a 3 veces al día
• Limpieza periódica de la zona con agua y jabón.
• Recetar medicación que ablande las heces para favorecer
su eliminación.

• Es posible que se presente incontinendo, temporal, de heces


(dura menos de una semana), odviértaselo al propietario.

Fig. 1. Sujete el saco anal con delicadeza ydi~elo de las fibras musculares Fig. s. Una vez aistroo el saco anal realice laligadura de su conducto, con material
hasta que sólo quede fijopor su conducto. absortlible, lo más oerca positMl de su orificio en el ano. Acontinuación secciónelo
con tijeras y extraiga et saco.
La parte posterior
Ano / Saculitis anal

Saculitis anal. Caso 4 / Tratamiento quirúrgico: Saculectomía técnica con gel caliente

Dificultad técnica ~

• Cuando la disección de los sacos anales se prevé difícil por


la existencia de fístulas perianales, infecciones crónicas

Se presenta un perro mestizo de 4 años de edad con


un cuadro de fístulas perianales que no cicatrizan
recidivantes o por la poca experiencia del cirujano,
a pesar del tratamiento médico instaurado para
se recomienda el empleo de gel especial para facilitar esta corregir la sacu/itis primaria.
inteNenci6n.

Este gel distiende el saco anal, facilitando su identificación

intraoperatoria, y el calorrompe las adherencias fibrosas,

facilitando la disección.

No se han encontrado problemas postoperatorios por

emplear este gel caliente.

Para este tipo de cirugía es necesarioun material específico Q.Je está


ccmpuesto por un cartucho de gel especial, su jeringa de aplicación
y la ag~ roma para su introdJcción en los sacos anales (Figs. 3·5).

68

(t!_ _ _:·~.J

Fig. 12. Siguienclo estos pasos yrecomendaciones la infección, si la hay, yla inflamación postquinírgica oon mínimas. En el día 8° del postoperatoriose Quitan los puntos, Fig. 1. "Figo"sufre unas fistulas perianales como consecuercia de una saculitis
c1anclo el alta clefinitiva al pacíente. bilateral complicada.

• Las complicaciones suelen ser frecuentes en cirujanos


inexpertos, o excesivamente agresivos.
Figs. 3-4 ys. Material necesario para la técnica.

El cartuchode gel se introduce en agua hirvierdo

durante cinco minutos.Apertura de la jeringa por su

1 parte posterior para intrOOJcir el cartucho de gel.

Cierre de la jeringay acoplamiento de laaguja roma.

Complicaciones
• Incontinencia de heces. Es una complicación relativamente fre­ En el primer supuesto se deberá realizar el ccrrecto tratamiento anti·
cuente, se debe a l.líl excesivo traumatismo del esfinter anal. biótico, y en el segundo deberemos recUrTir a tratamientos médieos
Normalmente no debe preocupamos, y debemos tranquilizar al pro­ que faciliten la eliminación de heces o a la resección quirúrgica de
pietario porque en unosdías se normaliza la eliminación de heces. las cicatrices caus~tes del cuadro.
Si persiste en el tiempo habrá que pensar en una lesión neNiosa • Recidiva del cuadro fistuloso. Está asociada a una resección
irreve<Sible (rama anal del reNiO pudendo), y debe'emos pantear un incompleta del saco. Asegúrese de realizar la ligadura del conduc·
tratamiento médico·detético o quirúrgico. to lo más cerca posible de su salida, para que no queden restos
• Tenesmo y disquecia. Son dos problemas que pueden aparecer si del saco o de sus glándt.Aas. Fig. 2. Tras la deplación de la zona se aprecian correctamente las fístulas a
se produce infección local en los primeros días del postoperatorio. • Infección local y aparición de fístulas. Puede estar asociada a ambos laclos del ano,como consecuencia de una infección en los sacos anales.
Pero Si se presentan a medio plazo puede deberse a una excesiva un fallo en el cierre del conducto del saco, lo que permite el paso
cicatrización que estenose la salida de las heces a través del ano. de gérmenes desde el ano al tejido celular subcutáneo.
La parte posterior
Ano / Saculitis anal

Antes de la cirugía
• Vacíe el contenido rectal de heces.
• No emplee laxantes en las 24 horas previas a la cirugía.
• Vacíe los sacos anales e irríguelos oon una solución antiséptica.
• Depile y aplique asepsia correctamente sobre la zona ql..Írúrgica.

Ver posicionomiento del pociente. . . p6g. 248

Fig. 6. El paso del gel al saco anal desplaza yhace ciie salga al exterior
Fig. 11. La cavidad resultante se irliga con suero fioológico atemperado para Fig. 12. Se debe cohibir la hemorragia de todos los vasos sangrantes con pinzas
la solución antiséptica intrOOxida anteri01TT1ente.
eliminar restos tisulares, coágulos ybacterias. hemostáticas ocon un coagulador bipolar. Le rec001endarnos está última opción.
En razas peque~as se íntroduce la mítad de un cartucro en cada saco, mientras

que en razas graneles se debe emplear uno entero para cada lado.

70 71

Fig. 7. Inyección del gel caliente eo el saco anal derecho.


Fig. s. Tras la preparación del campo operatoriO y el tapooamiento del ano, Fig. 13. Sutura coo material aooorbible monofilamento 4/0 de las fil:ías musculares Fig. 14. La heíida culanea se sutura con l)líltos sueltos, recurrentes veílicales,de
ObseNe que la aguja no impide la salida del gel cuando ha rellenado el saco,
se realiza la incisión elíptica de la píe! alrededor del lrayecto fisluloso. ydel tejido celular subcutáneo. Los mismos pasos se realizan en el lado il(Jlierdo. material monofilarnento noabsooxble. tomando la precaución de ciie los nudos
así se evíta la rotura del mismo por uro excesiva distensión.
En esta imagen se observa la ligadura del conducto yel inicio de la sección del queden en la parte exterior con el fin de evitar su contacto conlas lleces al defecar.
mismo.

)
\ ,.,¡r ,.,~
~ --~

• 1
Si existe saculitis, el saco puede romperse durante la

••
introducción del gel. Para evitarlo inyecte el gel lentamente
yprocure que la aguja no cierre completamente el orificio
o el conducto para que el gel pueda salir con facilidad en 1
caso de hiperpresión intraluminal.

Fig. 9. Gracias al empleo del gel, que ya se ha endurecido, el saco se identifica


Fig. 10. Disección cooipleta elel saco anal. Sólo queda unido ¡xir su coooucto. Fig. 15. Los dos sacos anales se han extirpado íntegramente.

perfectamente entre las fibras musculares del esfinter anal.


Acontinuación se realiza la ligadura del mismo con material absorbible fino lo Seccim de los mismos, obseivándose el gel empleado para simplificar su disección.

De esta foona la diseccioo del saco es más sencilla, minimizando la posibilidad de


más cerca posible ele la pared anal. Para esta ligarura se emplea un hilo
unaperforación accidental.
absorbible sintético 310.
La parte posterior Ano / Saculitis anal

Saculitis anal. Caso 5 / Saculectomía en hurones

Índice de presentación Los hurones son cada día más populares como
Dificultad técnica animales de compañía, pero su gran inconveniente
es el olorde la secreción de los sacos anales.
Como en el resto de los carnívoros los sacos anales
se encuentran a ambos lados del ano,
localizados entre las fibras de los esfínteres anal
externo e interno.
Se recomienda realizar esta cirugía en los hurones
de ambos sexos entre los 6 y 8 meses de vida.

• La saculectomía en los hurones elimina el olor de los sacos


anales, pero no evita el olor de las glándulas sebáceas y
1

apacrinas localizadas en la región perianal.

Recomiende realizar también la ganadectomfa paro evitar


72 el mal olor futuro, y sobre toda paro prevenir el desarrollo 73
de anemias aplásicas en aquellas hembros que no vayan a
criar (secundaria o hiperestrogenismo por celos
prolongados).
1

Fig. t6. Alos 3 cias de evolución la cicatrizaciónes correcta, no hay signos de infección. Fig. t. Mantenimiento anestésioo oon isoflurano mediante intubación traQueal y un
circlito abierto de T·A'fíe.

Después de la cirugía Antes de la cirugía


• Antibioterapia sistémica durante 4 o 5 Determinar el hematocrito (normal 52.4%) y el nivel de proteínas séri·
días, si no existen complicaciones infec­ cas (6,0 g/dl).

ciooas.
La preanestesia del hlXón se realiza con dosis bajas de acepromazi­
• Limpieza cada 12 horas de la zona anal na (O,1·0,3 mg/kg), diacepán (2 mg/kg) y xilacina (1 mg/kg) por vía
con agua y jabón neutro. intramusclAar o subcutánea. La inducción y el mantenimiento anes­
tésico se debe realizar con isoflurano (Fig. 1).
• Empleo de collar isabelino para impedir
Una alternativa a la anestesia inhalatoria es el empleo de 1.11a combi­
que el paciente se autolesione.
nación de ketamina (15 mg/kg), butorfanol (0,2 mg/kg) y xilacina

(2 mg/kg) por vía intramuscular.

El paciente se coloca en decúbito esternal al final de la mesa qt.irúr·

gica, sobre una colchoneta para evitar leSiones en las extremidades

y para que no pierda excesivo calor y baje su temperatlXa (Fig. 2).

Fig. 2. Pre¡x¡.ración del campo operatorio e inmovilización de la oola sobre el d<JSO


del paciente. Es importante extremar las medidas asépticas, sobre todo si se Muy importante controlar la hipotermia en estos animales.
Fig. t7. Alos 10 días de postoperatorio se Quitan los
realiza tamllén la castración.
~ntos y"Figo· es doclo de alta.

La part po rior Ano / Saculitis anal

Se reaiza la sactAectomía cerrada descnta anteriormente (Rgs. 3-6}.

Esta téct'ica QJiúgica suele tener 1111/f pocas compícacicnes.

• Lo ligoduro del condudo, con material absorbible, se debe

realizar junto o lo piel del ono.

[ ._.,suturo del ano en bolso de tabaco. ~ pdg. 252

74 75

flv. Tras la reaizaciOO de la SUll.ra en ~ de taooeo en el m, se practica Fg. 4. 8 saco anal se klentiflca con facílidad in- su color~~ (con l1l3l«

una 100Sión me el saco anal (derectq. laciGKJ Si se em~ea el gel caliente dentro del saco)

La dsecdón del esfinter anal externo no es mltj complicada. Hay <JJe extremar

las precauciones para no perforar o rasgar el saco anal.

fiv , La hemooagia se debe COOlnllar con t>rurdas de gasa ocoo un Gg. . A cootiruacm se irocede a la SU\Jra de la pel con maleñal Sinléti:o
~tAm IJOlla'.
cmoml*! nmdianento. A9Jros Ci~ no suturan esias herllas, ~
El cmU;to se Clebe clsecar hasta su salida al eQi!na para garanti2ar la exéresis
(JJe Cicall'a!n in- seglfl(la iltenocln.
de las ~ acceoorias <JJe se encuentran asu alrmla.

La parte posterior Ano / Neoplasias anales

Neoplasias anales
Índice depresentaci~

Los tumores que se encuentran alrededor del ano son los adeno­
Son neoplasias hormonodependientes, y gran número de pacientes Los carcinomas de las glándulas perianales no se pueden dife­
Los adenocarcinomas de las glándulas apocrinas se localizan

mas y los carcinomas de las glándulas perianales, así como los ade­
también tienen tumores testiculares intersticiales {tumor de Leydig). renciar macroscópicamente de los adenomas.
en los sacos anales.

nocarcinomas de las glándulas apocrinas alojadas dentro de los


Normalmente son pequeños, lisos, múltiples, bien delimitados y Normalmente son solitarios, ulcerados e invasivos localmente
Suelen ser unilaterales y su crecimiento es lento. En principio sólo

sacos anales.
ulcerados (Fig. 1). No obstante, también pueden ser únicos y gran­ (Fig. 3). Además su crecimiento es más rápido que en el caso de los
afectan a los sacos anales pero más tarde invaden los tejidos vecinoo.

Los adenomas perianales son las neoplasias más frecuentes que


des {Fig. 2). Su crecimiento es lento. adenomas.
Su malignidad es muy alta y metastatizan a múltiples órganos.

se encuentran en esta zona (800,{,). También se pueden encontrar en


Estas neoplasias no son hormonodependientes.
También causan hipercalcemia, anorexia, vómito, constipación,

otras localizaciones como el prepucio, el rabo o el dorso del área


Metastatizan, pñncipalmente, en los gangliOs linfátieos intrapélvicos
debilidad muscular, polidipsia y poliuria.

lumbosacra.
y sublumbares (Fig. 4).

• Los odenomos perianales se


estímulan por desequilibrios de
• El pronóstico de los pacientes que
presentan hipercalcemia es peor
las hormonas sexuales. Por este que el de aquéllos cuyos niveles
motivo, está recomendada la séricos de calcio son normales.
castración en los machos
afectados.

76 77

Rg. 3. Carcinomas circunanates, ulceraOO> e


Rg. 1. Tumores circunanales en un perro de 8 aros infectados.Las masas más pequems se podrían
relacionado coo un tumor testicular de Leydig. ooofundir con fistulas peóanales.

Rg. 4. En estos pacientes se deben realizar estudios

radiográficos o ecográfioos para detectar me~

tumorales.

Fig. 2. Adenoma peñanal de gran tama~o localizado En esta radiografía del caso antefiOr se observa la

entre el ano y la base de la cola. metástasis en los ganglios sublumbares.

La parte posterior Ano / Neoplasias anales

Neoplasias anales. Caso 1 /Adenoma de tamaño pequeño


..
Dificultad técnica Este paciente presenta varias neoplasias perianales
de distinto tamaño, estando algunas de ellas
ulceradas (Fig. 1). En la exploración fTsica el testículo
derecho es más pequeño y blando que el izquierdo.
El estudio de metástasis tumoral es negativo,
y la analítica sanguínea normal.

Tras la preparación del campo operatorio se coloca el paciente


sobre la mesa en decúbito estema!, y se realiza una sutura en bolsa
• No abuse de la coagulación monopolar ya que puede
producír una excesiva fibrosís y estenosis anal íatrogéníca.
1

de tabaco alrededor del ano (Fig. 1). 1

• No emplee enemas el día de la operación, se contaminará el


campo operatorio con heces líquidas que no podrá controlar.

Ver posicionomiento del pociente. ~ pág.21¡8

Versuturo del ono en bolsa de tabaco. ~ pág. 252

78 79

Fig. t. Depilación y asepsia del campo operatorio. yrealización de la sutura


alrededOr del ano para evitar la contaminación con heces.

Fig. 2. Se incide, con un bislurí, la piel que rodea cada una de las neoplasias, y se Fig. 3. Los adenomas de las glároulas pertanales se disecan oon facilidad, Fig. 4. Esta zona cutánea está bastante vasculasizada por lo que se debe controlar la Fig. s. Tras oomprobar que no existe sangrado activo en el lecho de la zona
realiza la disección subcutánea de las mismas. Es una técnica sencilla ya que los y raramente se debe incidir el esffnter anal externo. hemorragia intraoperatoria meciante presión con gasas. Sólo cuando la hemorragia resecada se procede a la sutura del tejioo celular subcutáneo con material
tumores noonalmente no son infiltrativos. sea intensa se coagulará oon un bisturi eléctrioo, o mejor aúncon un ooagutador absortlible 310.
tipolar.
La parte posterior Ano / Neoplasias anales

Neoplasias anales. Caso 2 /Adenoma de gran tamaño

Dificultad técnica "Papu" (Fig. 1) es un perro mestizo de 10 años


de edad que acude a la consulta de cirugía porque
se lame continuamente el ano, y le cuesta defecar.
Además, se visualiza una masa en la zona (Fig. 2).

Fig. t. "Papu"
¡yesentaba tenesmo
desde hacia vanas
semanas. se rascaba
el ano con lrecuencia, Las radiografias abdominales y torácicas son normales. Y la analíti­

y manchaba de sangre ca sanguínea no presenta ninguna alteración.

la nmietade la Como en todos estos casos se realiza la orquidectomia para reducir

JYQpietaria. la probabilidad de recidiva.

80 8t

Fig. 6. La sutura de la piel se realiza con puntos recurrentes verticales de material Fig. 7. Las suturas de la piel en las proximiclacles del ano se deben realizar de fosma Fig. 2. En este caso se obseiva una masa solitaria en la zona ventro-lateral Fig. 3. La intervención quirúrgica se basa en la resecciónsuperficial del tum0<.
morofilamento no abmible 310 raclíal (perpe00icula~ al mismo con el fin ele no alterar su luz y ftromamiento en el derecha del ano ccn varias zonas ulceradas.Su base no es infiltrativa y su gran Preparación del campo operatorio y realización de una sutura en bolsa de tabaco
pos~ra!OOo. tama~o ocluye el ano, dificultando la salida ele las heces. del ano.

Evolución
El estudio anatomopatológioo de este caso reveló la existencia de
Con el fin de reducir lo probabilidad de recidivas se realiza ta un tumor de Leydig en el testículo derecho.
orquidectomía bilateral.
Después de la cirugía
• Continuar con la antibioterapia durante vanos días Si se considera
Ver orquidedomío. ~ pág. 261,
que se ha producido contaminación intraoperatoria
• Recetar laxantes suaves para que el paciente no haga esfuerzos
para defecar.
• Obligue al propietario a poner un collar isabelino a su perro, y a
que extreme las medidas higiénicas en la zona Oavar vanas veces
al día la región perianal con agua y jabón, sobre todo después de
defecar).
• Revise periódicamente la evolución de la cicatrización.
• Revise al paciente a las 6 semanas para evaluar la poSibilidad de
Fig. 4. La resecciónsupeñicial de la neo~asia no afecta al esfínter anal ylasutura Fig. 5. Si la intefVención se realiza correctamente, la cicatrización es rápida.

recidivas.
del defecto cutáneo se realiza con pU11tos recurrentes verticales de material Al <J' día de postoperatorio se quitan los puntos yse da de alta al paciente.

Algunos autores recomiendan la orquidectomíacomo técnica previa monofilamentonoalJsolbitje.


a la resección de las neoplasias con el fin de reducir el tamaño de las
mismas.
La parte posterior Ano / Fístulas perianales

Fístulas perianales
Índicede presentaci~

Las fístulas perianales se caracterizan porque alrededor del ano apare­


ce l.l'la lesión inflamatoria crónica, ulcerada, supurativa, oon múltiples Algunos pacientes requieren ser
trayectos fistulosos intercomunicados y una infeoción severa (Fig. 1). tranquilizados e incluso anestesiados
Afecta principalmente a los machos de ciertas razas como el Pastor para poder explorar la zona perineal.
Alemán y el Setter Irlandés.

Historia clínica
• Dolor en la zona perianal.
• Mal olor.
Fig. 1. Imagen de un ooadro de fístulas perianales en un PastorAlemán, macho,

• Lamido constante de la región perineal. de 6años de edad


Fig. 4. La unión de diferentes trayectos fistulosos
• Problemas digestivos (constipación, diarrea. tenesrno, disquecia...). El paciente ¡:resenta gran oolor eo la zooa yproblemas para defecar.
crea amplias zonas ulceradas. Existe un intenso
• Úlcera, secreción sanguinolenta o pVrulenta. dolor yuna infección local importante.

Signos clínicos Se debe informar al propietario de la grave·


dad del proceso, del tratamiento que se va
• Dolor muy intenso de la zona, agravándose cuando se intenta
a realizar, de los resultados esperados y, lo
levantar la cola.
más importante, contar con su colabora­
• Fístulas alrededor del ano (Figs. 2 y 3). ción y constancia a largo plazo durante el
• Úlceras y necrosis tisular alrededor del ano (Figs. 4-6). postoperatorio.
• Estenosis CW'lal por excesiva fibrosis postinflamatoria

82

• Precauc/6n al explorar la zono perineal, un animal padf/co


• La recidiva es frecuente,
independientemente del
se puede volver agresivo por el dolor. tratamiento aplicado.

Fig. 2. Pequeños orificios fistulosos en una perra de raza Pastor Alemán en el lado
izciiierdo del ano. Fig. s. Fístulas perianales en un PastorAlemán
de 8 años que al irse uniendo han afectado a toda
la circunferencia del ano.

Rg. 6. Las lesiaies perianales son muy amplias.


Fig. 3. Paciente con fístulas perianales recidivantes. el paciente ¡:resenta un gran dolor, tiene ¡:roblemas
ObseNe los pequeños orificios fistulosos del lado para defecar,se lame la zona y sangra.
izquierdo y la úlcera del lado derecho. A este paciente se le va arealizar un tratamiento
También presenta estenoSis anal secundaria. quirúrgico.
La parte posterior Ano / Fístulas perianales

Fístulas perianales. Caso 1 Tratamiento médico

Se presenta en la consulta "Zar" (Fig. 1), un Pastor La exploración sistémica es normal, así como el análisis hematológi­
• Limpieza mecánica diaria de la zona con agua y jabón neutro,
oo realizado.
sobre todo después de defecar.
Alemán, macho, de 6 años de edad, porque tiene un La exploración de la zona perineal, aparentemente, no es dolorosa,
• Pomada antibiótica {bacitracina-neomicina-polimixina B) tres
problema alrededor del ano, la zona está enrojecida, y el paciente noo permite levantarle la cola, limpiar la zona y observar
veces al día.
le cuesta defecar y se lame continuamente (Fig. 2). las ñstt.Aas perianales {Fig. 3).

• Pomada de tacrolimus al O, 1% dos veces al día {el tratamiento


Se informa al propietario de la posible patología que sufre su animal,

con esta pomada puede rep<esentar un gasto impor1ante).


y se instaura un tratamiento médico basado en:

• Controlar las heces y, si existe tenesmo o disquecia, administrar


lactulosa por vía oral (1 ml/5 kg) varias veces al día hasta conse­
guir el efecto deseado.

Fig. 1. •zar" en laconsulta esperando aque le hagamos una exploración general


y la inspeccióo de la zona perineal.

Fig. 2. La zona perianal estáinflamada e infectada. Rg. 3. Tras la limpieza de la zona se pueden identificar diferentes orificios fistulosos en la zona inferior del ano, y una gran zona ulcerada en el lateral derecoo del mismo.
La parte posterior Ano / Fístulas perianales

El tratamiento se debe mantener durante meses y se debe inspec­


• AntibiOterapia tópica y Sistémica en casos avanzados.
Evolución
cionar al paciente periódicamente para comprobar la evolución del
• lnmunosupresores sistémicos:
mismo.
Ciclosporina A (1, 75·5 mg/kg/12 h VO). Se puede asociar a
Otras formas de enfocar el tratamiento médico:
ketoconazol (12-15 mg/kg/24 h VO) para reducir el metabolis­
• Laxantes suaves para favorecer la eliminación de las heces (Fig. mo de la ciclosporina y por tanto su dosificación, disminuyendo
8). Las heces deben ser blandas pero no pastosas, para que no el coste del tratamiento. El tratamiento se continúa hasta
se adhieran al ano y no contaminen la zona. 2 semanas después de la desaparición de las fistulas.
• Limpieza con agua y jabón de la zona perianal, sobre todo des­ Azatioprina (50 mg/24 h VO) asociada a metronidazol (400 mg/
pués de defecar. Recuerde que después, la zona debe quedar 24 h VO). Su empleo está indicado 3-4 semanas antes y des­
seca para no favorecer una dermatitis secundaria. pués del tratamiento quirúrgico.

Fig. 4. Durante el primer mes de tratamiento la


e110lución es satisfactocia, las lesiones van
disminuyeroo de tamaño ygravedad.
El propietario comenta que el perro está más
contento,le ha cambiado positivamente el carácter.

El tratamiento médico es largo, caro y


requiere constando por parte del
propietaria, pera se mantiene la
continencia fecal en todos los casos~

86

Fig. s. Alos 50 días de tratamiento. La evoluciónno


sigue el ritmo de los dias anteriores,no acaban de Fig. 7. Cuatro semanas más tarele las lesiones soo
cicatrizar loo ~ueños trayectos fistuloooo. mínimas, el paciente no tienedificultad para defecar.
Con el fin de reactivar el proceso de cicatrización se Se cambia el tratamiento tópico aplicándose la
cauterizan con una solución de yodo al 7% las zonas pomada ele tacrolimus amenor concentración
lesionadas. (0,03%).

Fig. 8. Muchoo pacientes tienen J)"oblemas para


Fig. 6. Cuatro dias más tarde se advierte una ligera defecar por el intenso doloc en la zona perianal.
mejoría. Se repite la aplicaciéxl de lasolución yodada Se deben evitar cocnplicaciones digestivas
cacla 4días.Asimismo, se continúacon la aplicación secundarias, iocluso sistémicas, administrando
ele la pomada {tacrolimus) una vez al cia. laxantes suaves yenemas no hipertónicoo.
La parte posterior Ano / Fístulas perianales

Fístulas perianales. Caso 2 / Resección quirúrgica radical

Dificultad técnica --=--

La resección radical se basa en la exéresis de toda

la zona perianal afectada, eliminándose el tejido

fistuloso y ulcerado.

"Kaiser" es un perro Pastor Alemán. macho, de 8 años de edad, que

presenta un cuadro grave de fistulas perianales que no responden

satisfactoriamente al tratamiento médico (Fig. 1).

La pmpietaria es informada de la intervención qLirúrgica que se va a

realizar, así como de las posibles complicaciones que pueden apa­


Fig. 3. Tras la resección de todo el tejido afectado, se sutura el rectoalapiel.
recer. Acepta estas condiciones. y asume los cuidados que debe Mantenga todo el tiempo el tapón rectal para evitar que las heces puedan
seguir "Kaiser" durante el postoperatorio irmediato y a largo plazo. contaminar el campo operatorio.

Antes de la cirugía
• Laxantes suaves durante varios días antes de la intervención.
• Enema rectal 48 horas antes.
• Limpieza exhaustiva con agua y jabón antiséptico.
• Profilaxis antibiótica (Gram negativos y anaerobios).

• No emplee enemas en las 24 horas previas a la cirugía.


Las heces pueden ser muy líquidas y contaminaron el
campo operatorio.

Verpaslcionomiento del paciente. ~ pdg. ~48


Fig. 2. Oooerve la am~ia zonade tejioo afectado, incluido el esfínter anal. Fig. 4. Se emplea una sutura discontinua, de puntoo simples de material
Se incidecoo un bisturl la f)el po< la parteexterna yel esfínter anal po< la parte monofilamooto no absorbible
interna. Se reseca tocia lazona afectacla:piel.tejido subcutáneo,músculo,fascia y
la mayor parte del aoo.

• Procure preservar lo máximo posible de esfínter anal para


reducir la incidencia de incontinencia de heces.

Fig. 1. Las lesiones perianales son muy importantes, afectándose los 360º de la
zcna. El tratamiootomédico ha mejorado lasintomatología, ha reducido el tamaño Fig. 5. Antes de finalizar la sutura se colocan uoo o
de las mismas, pero no han terminado de cicalrizar. oos drenajes de Penrose para evitar la formacióo de
seromas durante el postoperatorlo.
La parte posterior
Ano / Fístulas perianales

Después de la cirugía Posibles complicaciones


• Collar isabelino. • Incontinencia fecal (24-28%).
• AnalgéSicos sistémicos. • Recidiva{17-33%).
• Limpieza varias veces al día de la zona anal, sobre todo después • Estenosis anal {14%).
de defecar. • Diarrea.
• Laxantes suaves durante 3 o 4 semanas. Las heces se deben eli­ • Tenesmo.
minar oon facilidad, pero no deben ser excesivamente pastosas.
• Disquecia.
• Antibioterapia sistémica.
• Constipación.
• Revisiones cada 2 días hasta dar el alta, y después una vez al mes.

Evolución
Las revisiones deben ser periódicas para ir
obseNando la evolución del paciente.

91

Fig. 6. La evolucim alas 36 horas de postoperntorio


Fig. s. Alos 15 días la cicatrización es correcta. "Kaiser" defeca coo normalidad,
Fig. 9. Atos 3meses el paciente ha recuperado su peso inicial, lleva una vida
es satiSfactoria.
no pcesenta dolor enla zona. y laevolución es satisfactoria.
completamente ne1mal, y no se observan signos de recidiva de tas fístulas
Es muy impol1ante que el paciente lleve un callar
Durante estos días de p:istoperatorio se ha observado la ausencia de infección y
perianales. La retracción cicatñcial no produce estenosis ni problemas para
isabelino constantemente.
la progresiva retracción de los labios de la herida.
defecar.

A partir de este momento se deben seguir haciendo revisiones


periódicas cada mes para comprobar la ausencia de recidivas.
Si apareciesen se deben tratar lo antes posible con sustancias cau­
• La incantinenáa de heces es la complicación postoperatoria
más frecuente en este tipo de intervenciones.
terizantes.

Fig. 7. Alos 4dias el área quirúrgica evoluciona Agentes cauterizantes


satisfactoriamente salvo la pequena dehiscencia de
• Nitrato de plata.
la suturaque se observa en la zooa lateral.
Se retira el drenaje yse vigíla la cicatlización por • Fenal {solución 5%).
segunda intención de estos defectos • Yodo (solución 7%).
Este caso pertenece al Dr. Cajró, de la. Clinica Veterinaria Canis. Girona.
La parte posterior Ano / Fístulas perianales

Fístulas perianales. Caso 3 / Resección quirúrgica radical. Complicación postoperatoria


..
Dificultad técnica --=-­ Evolución

Se presenta en la clínica un perro, PastorAlemán, A las 24 horas de postoperatorio la evolución es favorable. pero en Se instaura lJ1 tratamiento médico basado en:
la siguiente visita, a las 48 horas, el aspecto es desolador (Fig. 3). • Limpieza, lJ"la vez al día, con agua atemperada a presión (la que
macho, de 4 años de edad con un cuadro de fístulas El paciente no ha estado vigilado correctamente, no lleva el collar sale del grifo de la ducha) y jabón neutro para arrastrar el material
perianales (Fig. 1). isabelino, y ha tenido un cuadro diarreico sin que el propietario se contaminante.
haya dado cuenta.
• Limpieza y desinfección, con la solución comercial de yodo diluida
al 50% con suero fisiológico, de la zona siempre que el animal
defeque o vuelva de la calle.

• Los cuidados postoperatorios son fundamento/es en este


tipo de patología.
• Antibioter<Pa sistémica. Amoxblina + ácido clavulánico (20 mg/kg)
y enrofloxacina (5 mg/kg).
Y se deja que las lesiones cicatrioen por segunda intención.

92 93

Fig. t. Zona ulcerada einfectada que afeclaba atoda la región perianal. Fig. 3. La autclesión y la infección oonducen ala dehiscencia de la mayoría de los Fig. 4. Dos días más tarde la infección va remitiendo y el aspecto general es
puntos de sutura. mejor. Se mootienen los drenajes yse continúa con el tratamiento médioo.

Se instaura un tratamiento médico basado en la limpieza de la zona.

antibioterapia tópica y sistémica, y se propone el tratamiento con

inmunosupresores sistémicos.

Dado el elevado coste del tratamiento médico, y siendo infoonado el

propietario de las posibles complicaciones de la intervención quirúr­

gica, se realiza la resección radical de la zona afectada, tal y como

se describe en el caso rf' 2 {Fig. 2).

Fig. 2. Resección radical de la zona perianal, suturándose el recto a la piel. En este Fig. s. Alos 6días, la infección está controlada y las heridas cicatrizanpor Fig. 6. 13 dias de evolucióo.
caso se hancolocado dos clrenajes de Penrose acada lado segl#lda intención correctamente. Enestemomento se le quitan los drenajes.
Apartir de estemomento laevoluciál del cuadro es favorable y pr~resiva,
observándose la correcta cicatrización de las lesiones.
La parte posterior
Ano / Fístulas perianales

Fístulas perianales. Caso 4 / Resección quirúrgica superficial

Dificultad técnica ~

"Linda" (Fig. 1) es una perra Pastor Alemán,

En el PastorA/em6n los sacos anales son m6s profundos que


de 5 años de edad.
en otras razas, por este motivo su rotura postinfecciosa es
Acude al hospital remitida porsu veterinario
hacia dentro, el material purulento se infiltra entre las fibras
porque presenta orificios fistulosos en el lado
musculares creando diferentes trayectos fistulosos al exterior.
izquierdo del ano (Fig. 2).

Fig. 7. 17 días cla evctución.

Nuestro paciente se ha recuperado de sus En el historial enviado por su veterinario se recoge que hace unos

lesiones iriáaes y gracias a la insistencia y meses se le realizó una saculectomia bilateral por Lll cuadro recidi­

constancia del propietario también se ha vante de saculitis.

recuperado de las complicaciones secun­ A las dos semanas de esta intervención aparecieron trayectos fistu­

darias a la infección local losos a ambos lados del ano. Se resecaron quirúrgicamente.

El paciente debe seguir con controles Tres semanas más tarde volvieron a aparecer orificios fistulosos en el

periódicos para comprobar que no existe lado izquierdo del ano, pero no así en el derecho.

una recidiva de las fistulas perianales. Se informa a los propietarios de cual es el origen más probable de

las fístulas: la persistencia de tejido glandular del saco anal, que

sigue secretando material al tejido perianal, y de que la perra debe­

94 ría ser intervenida de nuevo para eliminar1o.


95
Los propietarios prefieren probar un tratamiento médico antes de

volverla a operar.

Se introduce por los orificios fistulosos una solución alcohólica de

yodo al 7%. Y a continuación se receta una pomada antibiótica para

fig. 1. "linda"el dia de la consulta esta muy asustada, ypresenta una gran aplicación tópica cada ocho horas.

mctestia cuanoo se intenta levantar lacola para explorar la zona perianal.

• La paciente debe llevar un collar


isabelino para evitar que se lama
la zona anal.

Fig. 2. En el laoo izquierdodel aoo aparecenoos


orilicíos fistulosos, uno junto al esfínter anal y el otro
Fig. s. 20 días de evolución.
en la zona súpero-lateral, junto ala base de la cola.
Este caso pertenece al Dr. Cairó, de la Clínica Veterinaria Canis. Girona.

La parte posterior
Ano / Fístulas perianales

Fig. s. Con el fin de identificar con clalidad los trayectos fistulosos se inyecta un Fig. 6. Se reseca la piel que se encuentra sobrelos trayectos fistulosos. quedando
colorante oológico (azul de metileno) através de los orificios superiOf y medial. éstos visibles gracias al colOíanteempleado.

97

Fig. 3. A los 5 dias los olificios fistulosos son menores, y la supuración por los mismos es escasa. A los 1odías del tratamiento médico las lesiones siguen siendo las
mismas. no han seguido evolucionando.
Fig. 7. Se incide y extirpa todo el tejido afectado y
teñido por el colOíante.

Como a partir del décimo día las lesiones Fig. s. Mediantepuntos sueltosde material
no mejoran y no terminan de cicatrizar, los monofilamento absorbible se aproximan los tejidlos
propietarios acceden a la reintervenci6n subcutáneos.
quirúrgica de la zona. La pel se sutura con material monofilamento no
absorbi~ empleándose puntos recurrentes verticales.
El ano (JJeda ladeado hacia la sutura, pero en los
siguientesdías se reposicionará.

Después de la cirugía
8 tratamiento postoperatorio se basa en
Fig. 4. Tras la preparación del campo operatorio se limpieza diariade la zona, antibioterapia sis­
ollservan con claridad los orificios fistulosos en la témica y un laxante suave durante dos
ZCXJa izquierda del ano. semanas.
La parte posterior Ano / Fístulas perianales

Fístulas perianales. Caso 5 / Resección quirúrgica y tratamiento médico

Dificultad técnica ~

En la consulta de cirugía se atiende a un perro


Pastor Alemán (Fig. 1), macho, de nueve años de
edad, con fístulas perianales (Fig. 2).

• Cuanto menores sean las lesiones fistulosas, mayores el


porcentaje de éxito de la resecdón quirúrgiro de las mismas.

Como las lesiones son poco extensas se propone al propietario la


intervención q¡jrúrgica (Figs. 3-7).

99

Fig. 9. Alos 1odías la cicatJizaciónes oorrecta, yno existen signos de recidiva de las fístulas. Se retiran los puntos. Fig. 1. "Larry" tiene muy buen carácter pero ·no le gusta• que le levanten la cola, Fig. 2. Las lesiones se localizan principalmente en la zona dorsal del ano.
y que le exploren la zona perianal. Tambiénse localiza otra fístula en la zooa ventrolateral izquíerda.

Fig. 3. Tres días antes de la cirugía empieza


Fig. 10. Al mes de la intervención la cicatrización es correcta aexce¡:ción de la
Fig. 11. En la revisión realizada 23 días más tarde se obseNa la c0«ecta
el tratamiento antibiótico sistémicoy tópico, jlllto a
pequeña úlcera que se observa en el laoo izquierdo del ano.
cicatrización de lazona y la ausencia de recidivas.
la limpieza con agua y jabón de la zona.
Se realizan, únicamente, pincelaciones con una solución yodo al 7% cada 3 días
"linda"es dada ele alta.
En estaimagen vemos al paciente preparado y en
{tres sesicnes).
decúbitop-ono para et inicio ele la operación.
La parte posterior
Ano / Fístulas perianales

'

lo aplicación de lo pomada de tocrolimus se va espaciando en


Fig. 4. Es una cirugíabastante hemorrágica por la el tiempo según la evolución de las lesiones.
gran vasc!Aarización superficial ele la zona. Procure Realice revisiones periódicos para identificar pequeñas
utilizar 10 mínimo posible la coagulaciónmonopolar lesiones fistulosos y trátelos lo antes posible.
para rerucir la incidercia de fibrosis secundarias.

100 101

Fig. 5. Tras la resección del tejioo afectado se realiza


la aproximación de los tejidos subcutáneos con
puntos sueltos de material absolbitie 310 La sutura
ele la Pel se realiza con J).Jntos sueltos de material
monofilameoto no absatlible de 310.

Evolución
Durante el postoperatorio se continúa con
el tratamiento antibiótico sistémico durante
7 días, y se extreman las medidas higiéni ­
cas y antisépticas locales.

Fig. 6. Durante los primeros días del postqieratorio


la evduciónes correcta ycicatriza con noílllalidacL
Pero el día 20 se identifica un inieiode recidiva en la
zooa dorsal al ano. Se vuelven a instaurar las Fig. 7. Se realizan revisiones periódicas observándose la correcta evolucióndel proceso.

medidas higiénicas locales, y se indica laaplicacioo En esta imagen se obselVa la región perianal del paciente alos 2 meses de la intervención

ele una pomada de tacrolimus al 0,03% dos veces


al día
La parte posterior Ano Pliegues cutáneos de la cola

Pliegues cutáneos de la cola Pliegues cutáneos de la cola. Caso 1 / Resección quirúrgica

Índice de presenlaeión • Dificultad técnica

En rruchos perros y gatos cle cda corta puede haber lM'a desvia­
8 tratamiento cp..irUgico se basa en la resección de los ~egues "Christopher" es un Bulldog, macho, de 6 años
ción hacia lKl lado de las vértebras coccígeas (cola en ·sacaccr­
cutáneos, asociado o no a la~ cle las Yértebas coccígeas.
chos1. QU9 conduoe a la aparición cle piegues cutáneos en la zona
de edad, que es remitido al hospital porque
lateral y ventral de la cola (Figs. 1 y 2).
presenta una gran infección en los pliegues
En el interior cle estos piegues se arurua gooa, secreciones de las
cutáneos de su cola, y que no ha respondido
glándulas apocrinas y material fecal que producen infecciones gra­

ves de la zona.
a ninguno de los tratamientos médicos instaurados
(Figs. 1-3).

• La ploderma que se produce en los pliegues de la cola na


responde al tratamiento médica, por la que la única
Este tratamiento quirúrgico Invalido al paciente para
presentarse o exposiciones caninos, adviértase/o al Fig. 1. "Chlisto¡jler" el ~principal problema poro lo propietario es el desagradable
solución efectivo es lo quirúrgica. propietario antes de operar. l)lmer dia que viene a ~or que tiene su perro como consecuencia de lo lnfecci6n.
la oonsultade cirugía.

102 103

r La tateraización del raro hacia ta derecha irrlJ!iea 1a fOflllaciOO de

Fi, Raro en "sacaco'ctl<6· en lJ1 Bul~ macro


1 1m¡mantes ptiegueS cutáneos.

de 3éiloo.Este paciente no presenta ninguna La sáida de material iuuteoto del ¡jiegie illfeoor es muy evidente.

patología.

Técnica quirúrgica
La intervención quirúrgica se basa en ta resección de los pliegues
cutáneos. intentando preservar las vértebras ooccígeas.

Antes de la cirugía
• Profilaxis antibiótica empezando 3 días antes de la cirugía.
• Lavados antisépticos de la zona con jabón Yodado. intentando eti­
mini:r el material cont~nante de los pliegues cutáneos.

~
Ver posidorromiento del paciente. ~ p6g. u,B
Versuturo del ono en bolso :..._ p6g. 252
de tabaco. :"Y'

• 2. Este paciente sufre l.fl3 piodetma túneda


rooy intensa en el raro. <X>sEM la ~óa de matenal
• Es una intervención que puede ser bastante largo, no
tengo prisa.
Fig. J. El p¡egue cutáneo YOCitral es muy prof\#'00. Obselve córro se introdu:e el
dedo Rice ha&a la seglllda falang¡?.

piruerno pa la rore \'OOtral ~da del llllSlllO.


La parte posterior Ano / Pliegues cutáneos de la cola

Fig. 4. Preparación del campo operatorio ymarcaje de la incisión cutánea que se Fig. 5. lnciSión de la piel sobre la marca realizada anteri0ITT1ente.
Fig. 9. Instante final de la cisección cuanoo se secciOna la zona profunda del Fig. 10. En esta imagen se puede apreciar claramente toda lapiel resecada, así
va arealizar para eliminar los pliegues cutáneos. La resección triangular de la piel y su posterior sutura en "T" permitirá conseguir
pliegue ventral. como la profundidad de los pliegues cutáneoo.
un resultado estético satisfactorio, y una alteración mínima del esfínter anal.

104 105

Fig. 6. La cisecciónse realiza através del tejioo celular subcutáneo, siguiendo una Fig. 7. Es una cirugía sangrante por~e la zona está muy vasculanzada, utilice 1"
Rg. Antes del cierre de la piel es recomendable
línea paralela alos pliegues cutáneos coogulacióo bíp~ar para rerucir al mínimo las lesimes tisulares. realizar una limpieza conabundante suero fisiOlógico
apresión, para eliminar restos necróticos ybacterias
que hayan podido entrar en el campo operatOlio.

• Recuerde que el recto se encuentro pordebajo, muycerca,


no lo lesione.

Rg. 12. Debido ala gran cisección y manipulación


de los tejidos se colocan dos drenajes de Penrose.
Fig. s. Cefea de las vértebras la piel está muy adherida aéstas y la disección es
Se cierra el tejido celular subcutáneo conpuntos
más difícil. Algunos autores recomienclanla amputación de las vértebras
sueltos de material monofilamento absorbible 310.
coccígeas aeste nivel con una sierra de Gigli.
La piel se sutura con puntoo recurrentes verticales
El dedo índice del cirujano está palpando las vértebras coocigeas.
de material monofilamento no absorbible.
La parte posterior Ano / Pliegues cutáneos de la cola

Después de la cirugía
• Mantener la antibioterapia iniciada en el preoperatorio.
• Limpieza de la zona para evitar la contaminación por heces a tra­

vés de los drenajes.

Evolución

106 107

Fig. 13. Alas 24 hcras de la inteivención la evolucióo es satisfactoria. Rg. 14. Alos10 días se quitanlos puntos y se da el alta al paciente.
Alas 48 horas la eliminacióo de exooados por los dren..es es mínima. y por tanto se retiran inmediatamente.
La parte posterior Ano / Atresia de ano

Atresia de ano Atresia de ano. Caso 1 /Atresia en la gata 1


Índice de presentación • 1 ro "Zara" es una gata Europea, de tres meses de edad
(Fig. 1). Su propietaria la presenta a consulta
La falta de desarrollo del ano es una CW"lomalía poco frecuente en la En estoo animales la salida de las heces se realiza a través de fistulas porque no defeca con normalidad; le cuesta mucho
clínica de pequelíos animales. Se puede dasificar en cuatro tipos: rectovaginales en el caso de las hembras (Figs. 1 y 2).
eliminar/as y las heces son como cintas.
• Tipo l. Estenoois congénita de ano. El tratamiento es qiJrúrgioo ampliardo el ano, abriéndolo o anastomo­
sando el recto a la piel de la zona perineal según el tipo de aronaia.
• Tipo 11. P9'Sistencia de una membrana CW"lal que ocluye el ano.
El pronóstico es reservado debido al estado inicial de debilidad y
• Tipo 111. Existe impertoraeión de ano, y el recto se encuentra sepa­ desnutrición del paciente, del megacolon secundario que se ha
rado del mismo podido desarrollar y de las posibles complicaciones postoperatorias
• Tipo IV. El ano se ha desarrollado pero el recto se cierra en un (estenosis de CW"IO, infección, dehiscencia de las suturas...).
fondo de saco dentro de la cavidad pelviana.

Fig. 1. "lara" el cía


que vinoal hospital.

to8 109

Fig. 2. En la exploracióndínica se detectó uo cúmulo de heces en el tubo Fig. 3. En la radiografía simple se identifica una granretención ele heces en el
cligestivo diStal.En la zona pe<ineal se obseNó la ausencia de apertura clel aoo. colon.

Tratamiento quirúrgico

Fig. 1. Salida de heces pastosas por la vulva en una gatitapersa de 2meses. Fig. 2. lmperforacióo de ano y salida de heces através de los labios vulvares. Fig. 4. Al introducir uncontraste yodaoo en la vagina se comprobó que lauretra y
Fig. s. Al anestesiar ala pacienteyrelajarse la musculatura se observa la salida

la vejiga erannocmales.
de heces por la vulva.

En la raciograffa se intuye la fistula recto vaginal (zona ventral del final del recto),
La paciente se coloca en decúbito estema! y se prepara el campo quirúrgico.

y el foroo de saco clel recto junto al esfínter anal interro.

Ver posicionamiento del paciente. • pág. 21¡8


La parte posterior
Ano / Atresia de ano

Cierre de la fístula rectovaginal Apertura del ano

Dificultad técnica .. [ ! ] Dificultad técnica

Fig. 6. se introduce una sonda en la vagina, yse


realiza la incisión cutálea entre la zona anal yla
vulva, de esta forma se ~ede localizar ycerrar la Fig. 9. se identifica la zona oonde se localizael
fistula rectovaginal. esfínter anal y se realiZa una incisiónvertical en
Mediante disección roma del espacio situado entre forma de 'Y" con el fin de obtener el mayor diámetro
la vagina y el recto se localiza la fistula rectovaginal, cle la anastomosis posterior.
que se encuentra rodeada por gran canlidad de Recuerde dónde se localiZanlos sacos anales para
tejido fibroso. no lesionarlos.

Fig. 10. Acontinuación se diseca en cJrección


craneal para localiZar el fondo de saco rectal, que se
moviliza yse desplaza caudalmente sin que exista
tensión.

;}' '~~,, .· ~"


110 111

Á
Fig. 11. En la siguiente fase se reseca el tondo de
Fig. 7. La fístula se ~ede ligar osuturar y seccionar, soco yse sutura el recto al esfínter anal, por su cara
esta opción dependerá del tamaño del paciente y de interna. con puntos sueltos de material sintético
la amplitud del campo operatorio (jsponible. absoroble monofilamento 410 o 510 Se debe
En este caso se realizó la ligadi.ra con material no emplear el meoor número de ~ntos posible, pero
absorbible 3/0. siempre garantizanoo la impermeabilidad de la
anastomosis.

Fig. s. Tras el cierre de la fístula se sutura la piel con Fig. 12. Rn de la anastomosis recto-anal.

puntos sueltos de material monofilamento no La incisión cutánea en "Y" ha permitioo obtener una

absorbible 4/0. luz suficiente para la eliminación de las heces.

La parte posterior
Ano / Atresia de ano

Colotomía Evolución
A partir del día siguiente a la intervención la
Dificultad técnica
• El pronóstico de estos pacientes es bostonte reservado
debido o lo posible pérdida de funcionalidad del colon
alimentación de "lara" fue baja en residuos.
Se le administraban laxCM"ltes suaves por vía
oral para facílitar la elininación de las heces,
como consecuencia de su distensión por lo retención fecal. y la propietaria le realizaba mas~s abdomi­
nales para mejorar el vaciamiento intestinal.

Fig. 14. Imagen el día siguiente ala cirugía.


como en tooas las cirugías de esta zona se deben
extremar lasmedidas higiénieas locales.

112 113

fig. 15. Alos 3 dias de postoperatorio la paciente

oomía oon normalíclad pero no defecaba ydebía ser

ayudada con enemas isotónicos.

Alos 1odías la eliminación de heces Sía escasa,

y en el colon se volvi€1' on aacumular heces.

A los 17 días de la intervencíón "Zara· no

oonseguía defecar con normalidad, y dado

que la prcpietaria noquería someterla a otro

tipo de cirugía para paliar el megacolon

secundario, se decidió la eutanasia (Fig. 16).

• Este tipo de intervenciones se


deben realizar lo antes posible,
con el fin de evitar lesiones
nerviosas secundarias
e irreversibles del colon.

Fig. 13. Para finalizar se realiza unalaparotomía infraumbilical, se extelioriza y aísla el colon descendellte, y se efectúa unacolotomía para la extracción de las heces fig. 16. Tras la eutanasia, al relajarse los músculos y hacer compresión abdominal, se pudo oomprobar
retenidas en este segmento intestinal. la funcionalidad de lacorrección de la atresia det ano. Oesoo el punto de viSta técnieo laintervención fue
correcta, pero el resultado funcional no fue el esperado por la falta de movimientos peristálticos del colon.
La parte posterior Ano / Atresia de ano

Atresia de ano. Caso 2 /Atresia en la perra

Dificultad técnica ~

Acude a la consulta de Cirugía un cachorro de


Yorkshire Terrier, hembra, de dos meses de edad,
porque es más pequeña que el resto de hermanos de
camada y tiene problemas para defecar (Ags. 1 y 2).

Fig. 4 Ozda.). En este caso se decidió incidir la


fistula rectovaginal y suturar independientemente
recto y vagina.

Fig. s (dcha.). Aquí se obsel'la el cierre del techo de


la vagina con puntoo sueltos de material absortíble
410.

114 115

Fig. 6 Ozda.). Acontinuación se procede ala


incisil'.n de lazona anal, la disección del rectoyasu
apertura.

Fig. t. Tambiénpresentaba tenesmo yheces muy blaJldas. Fig. 2. Al explocar la zona perineal se obseria la ausencia de perforación del aJlO, Fig. 7 (dcha.). En este caso.al no identificarse el
ycómo las heces salen por los latías vulvares. esfínter anal, se anastomosa directamente la
apertura del recto ala piel con material sintético no
absolb~ 4/0.

Técnica quirúrgica Evolución


Se plantea una intervención quirúrgica en la
que se realizará el cierre de la flSlula recto­ Fig. s. Alas 48 horas la recuperación de la paciente
vaginal y la apertura del ano oon su anasto­ es satisfoctoria, está comiendo ydefecando sin
mosis al recto. ciftultad.

pdg.248

Después de la cirugía
• Extremar las medidas de asepsia y anti­
sepsia.
• Instaurar una correcta antibioterapia.
• Realizar una buena limpieza de la zona
durante el postoperatorio.
Fig. 3. Mediante una incisión cutánea perpendicular • Vigilar estrechamente al paciente.
al periné y por debajo del ano se accede al espacio • Evitar que se lama la zona mediante un
existente en1re el recto y la vagina. oollar isabelino.
Vulva-vagina

Neoplasias
Caso 1 Tumor en el labio vulvar
Caso 2 Tumor venéreo transmisible
Caso 3 Tumor en el suelo vaginal
Caso 4 Tumor en el techo vaginal
Caso 5 Pólipos vulvares

Sínfisis pélvica Caso 6 Tumor vaginal


Cuerpo
Caso 7 / Lipoma subcutáneo
del útero

Himen persistente

117
La parte posterior Vulva - Vagina / Neoplasias

Neoplasias Neoplasias. Caso 1 / Tumor en el labio vulvar

Los tumores de vulva y vagina son los más frecuentes en la perra Se presenta a consulta una hembra de raza Boxer
después de los de mama. En la gata sin embargo son muy raros.
Esta patología es propia de hembras de edad media o avanzada En
y 7 años de edad con una masa redonda a nivel
todo caso, el 70-80% de ellos son benignos. vu/var. A Ja exploración se observa que Ja masa
es pediculada y se inserta en un labio de Ja vulva,
en Ja zona de transición mucocutánea.
Tras Ja citología se diagnostica un fibroma y se
La mayaría de los tumores en esta zona son benígnos
decide extirpar/o (Fig. 1).
y responden a la cirugfa, a pesar de que a menudo sean muy
t__:aratosos.

Fig. 1. Pólipo vaginal.

Habitualmente se tratan de fibromas, lipomas o leiomiomas. Estos


tres tipos de tumOí suelen ser indistinguibles a simple vista. Se trata
de masas firmes, esféricas, de superficie lisa y frecuentemente
pedunculadas, que adoptan a menudo una forma polipoide.
El leiomiosarcoma es el tumor vaginal maligno más frecuente,
mientras que el tumor venéreo transmisible ha pasado a ser una
rareza en nuestro medio y sólo en zonas rurales, donde los perros
andan sueltos, es todavía habitual. Este último, también llamado lin­
fosarcoma de Sticker, es de superficie irregular, sangrante, frecuen­
temente ulcerado y puede ser simple o múltiple, con fOíma de coli­
118 flOí y más o menos pedunculado. Otros tumores malignos descritos
son el mastocitoma y el carcinoma de células escamosas. En
todo caso. las metástasis de los tumores vaginales son muy poco
habituales.
A la exploración, lo habitual es hallar un prolapso de tejido tumoral
por la vulva o un abombamiento de la zona perineal. Puede haber Fig. 2. Tumor venéreo transmisible. fig. 1. Vista de la masa tumoral localizada en el labio vulvar derecho. fig. 2. una vez preparado el campo qururgico. se ioooo sobre el peclícub con tistuf.
secreción sanguinolenta o purulenta.
El diagnóstico se completa con una palpación rectal y vaginal. Las
radiografias torácicas y abdominales detectarán posibles metástasis.
Hay que prestar especial atención a la posible invasión de los gan­
glios inguinales, ilíacos y sacros. En este sentido también puede ser
útil la ecografia abdominal. La citología nos orienta acerca de la
naturaleza del tumOí, que confirmaremos con la histopatología del
tejido extirpado.
El diagnóstico diferencial debe realizarse con la hiperplasia vaginal
y el prolapso uterino. La primera se da en perras jóvenes, en relación
con el celo y tiene su origen en el suelo de la vagina, craneal al orifi­
cio uretral. El prolapso uterino tiene relación con el parto y es más
frecuente en gatas.

Ante una masa vagínal, sospeche que se trota de un tumor sí la


paciente es una perra mayor. Sí esjoven y está en celo, lo más
probable es que se trote de una hiperp/asía vaginal.

8 tratamiento es eminentemente qL.irúrgro y en el caso del turncr vené­ Fig. 3. Hiperplasia Víl!Jinal. fig. 3. Se colocan a continuación pinzas hemosláticas en los puntos C1.Je sangren Rg. 4. l.hl vez terminada la resección tumoral se completa la hemostasia
reo transmiSible es además posiJle la ql.imiotercpa con vinoistina y se termina la disección del pedículo con tijera obistuli. mediante bisturíelécbico y ligadura de los vasos sangrantes.
La parte posterior
Vulva - Vagina / Neoplasias

Neoplasias. Caso 2 / Tumor venéreo transmisible

Paciente de la especie canina de nombre "Pitusa",


hembra, de 5 años de edad, que se presenta
a consulta con síntomas de parto desde hace
aproximadamente 12 horas.
Se realiza una radiografía que muestra un feto en
posición de parto. La relación entre el tamaño de la
cabeza del feto y el diámetro pélvico no justifica la
distocia. (Figs. 1 y 2).

Fig. 5. El tumor, una vez extirpado se remtte para diagnóstioo anatomqiatológico, Fig. 6. Se realiza el cierre de la herida mediante suturacontinua que interesa
confirmándose el ciagnóstico de fibroma. ala ¡jel ya la mucosa de loo labios vulvares. Se utiliza para ello mateñal
monofilarnento reabsorbible de 210.

120 121

Fig. 1. Nuestra pacíente el dia que acudió al seivicio


de urgencias del hospital.

Fig. 2. Radiografía del abdomen caudal en la que se


obselVa la cabeza del único feto encajada en el
canal pélvico.

Fig. 7. Aspecto final de la sutura Se obseiva la reconstiu:ción del bo<de del lal)o de la vulva. Fig. 3. En la exploración se observa !Kla masa con aspecto de coliflor en el foooo Fig. 4. Se ~para al paciente para la episiotomia de la manera habitual:en
de la vagina, compatible con un tumor venéreo transmisible (TVl) y que obstruye decúbito prono. ligero Trendelenoorg, sutura del ar() en bdsa de tabaco y fijación
el canal del parto. Se decide realizar una cesárea para resolver la distocia de la cola sobre el oorso. Tras la colocaciónde los paños de campo y para
yacontinuación.una episiotomía que permita extirpar la masa wmoral. minimizar el sangrado, se colocandos pinzas de Doyen limitandO la linea de
incisiónde la episiotomía. Se comienza la episiotomia incidiendo la piel con l)stun.
La parte posterior Vulva -Vagina / Neoplasias

Neoplasias. Caso 3 / Tumor en el suelo vaginal

Paciente de la especie canina, de nombre "Honey",


hembra y de 11 años de edad que se presenta
a consulta con secreción vulvar purulenta
y sanguinolenta de dos meses de evolución.
A la exploración se aprecia un abultamiento en la
zona perineal, entre la vulva y el ano, de consistencia
el6stica y el tamaño de una mandarina. Mediante
tacto vaginal se localiza el tumor en la luz vaginal
implantado, como es habitual, en el suelo de la
Fig. 5. Se completalaepisiotomíacon tijera hasta alcanzar la luzde la vagina, Fig. 6. Una vez completada la episiotomía y separando ampliamente loo bordes de vagina y craneal al meato urinario. (Figs. 1 y 2).
protegieroo su interioc conlos deOOs. la incisión,quedan expuestos et intelioc de la vagina yla masa tumcra.

Ante cualquiermasa en ta zona perineat sobre todo sí, como en


este caso, no asoma al exterior, es imprescindible ta reatízación
tanto de un todo vaginal como redol, para loco/izarsu origen. _J

122 123

Ag. 7. Antes de proceder aextirpar la masa tumoral es muy convenieote sondar la Ag. s. Se diseca la masa tumoral a nivel de su peciculo realizaroo la hemostasia Fig. " La paciente durante la preparación quirúrgica.
uretra con el fin de tene~a localizada, evitando así lesíonarla. coo ligaduras y/o bisturí eléctrico según el calibre de loo vasos.

Comentario final
La éU"latomía patológica confirmó el diagnóstico de TVT, por lo Que
se instauró tras la intervención una pauta de Quimioterapia con vin­
cristina para completar el tratamiento.

La quimioterapia postquirúrgica es obligoda en un TVT.

La cirugía na garantiza, porsi sólo la eliminación de todas

las células tumorales.

Ag. 9. Se realiza el cierre de la efASjotomía poc planoo según la técnica ya desclita. Fig. 2. Oooérvese el gran aWlalllientoentrela vulva y el ano. Rg. 3. Tras realizar la episiotomia se visualiza en el interior de la vagina lamasa
tumoral. El paso siguienteserá et sondajede la uretra para preseniarla durante et
resto de la intervención. Es importante noconfl.lldir el meato urtnario con la fooa
clitoriana.
La parte posterior
Vulva - Vagina / Neoplasias

Neoplasias. Caso 4 / Tumor en el techo vaginal

Se presenta a la consulta una hembra de raza


Schnauzer Gigante de 8 años de edad por realizar
continuos esfuerzos, tanto para la micción como
para la defecación.
Se realizan radiografías en vacío de la cavidad
abdominal en las que se observa una notable
retención fecal y una gran distensión vesical
(Ags. 1y2).
Fig. 1. "Belle' el dia
Fig. 4. Este tiPo de tumores suelen estar pediculoclos y se exteriorizan fácilmente Fig. 5. Se colocan en la base del pedículo tumoral dos pinzas de Kocher en que acudió anuestra
medianteuna simplepresióo. Se obseiva su implantación carooterística. direcciones opuestas, para evitar la hemwagiaen el momento del oorte. consulta con
Distalmente alas pinzas, se inicia el corte del pedículooonbisturí, para terminarlo sintomatologia de
cootijera. tenesmo.

124 125

Ag. 6. Se procede al cierrede la mucosa vaginal mediante p!Wltos en "U", por Ag. 7. Se finaliza la interveOOóncerrandola episiotomía como es habitual,en tres Fig. 2. Radiografia lateral del abdomenen la que se aprecia la reteOOón fecal y Ag. 3. flJ sondar ala paciente para vaciar la vejiga se apreció una masa de gran
debajo de las pinzas. Esto favorecerá la hemostasiade la línea de corte al planos. vesical. tamaño que llenaba tacavidad vaginal, presionando sobre uretra yrecto y que
retirarlas.Los bordes de la herida de la mucosa se unen mediante sutaa continua explicaba la sintomatdogia observada. La profunda implantacióo de estetumor
por encima de los puntos en "U". Cm ello se consigue la reconstrucción del suelo hacía que pasara desapercibido desde el exterior.
vaginal y una mejor hemostasia

Un tumorvaginal implantado muy


profundamente puede no ser visible
y ocasionar un cuadro obstrudivo
uretral y/o intestinal como única
sintomatología.

Fig. 4. Se prepara al paciente de la forma habitual,


Fig. s. Aspecto del tumor una vez extirpado. ya descrt!a, para una episiotomía, mediante la cual
La biopsia oonfirmó nuestra sospecha inicial de que se eXJ)One la masa tumoral. La uretra deberá
se trataba de un fibroma. permanecer sondada durantetoda la intervención.
La parte posterior
Vulva - Vagina / Neoplasias

Neoplasias. Caso 5 /Pólipos vulvares


Perrita Caniche de 9 años de edad cuya dueña
comenta que "de repente le han salido unos
testículos". A la exploración se aprecian dos masas
pediculadas que asoman a través de la abertura
vulvar y cuyo aspecto recuerda, efectivamente,
a unos testículos. Se trata de dos pólipos vaginales,
uno de ellos se halla torsionado y de ahísu color
(Figs. 1 y 2).

Fig. 5. Apesar de la profuooa inserción de este tumor, se oonsigue exterioriza~o Fig. 6. Unavez exteriorizada la masa tumoral se tracciOna suavementede ella
mediante"maniobras obstétricas". paraexponer su oorto pedículo. Fig. t. "Bolita" el día de
su primera visita al
hosJ)tal.

126 127

Ag. 7. Acontinuación se diseca el pediculo coo tijera. Realizaremos la hemostasia Ag. s. Se procede al cierre de la episiotomía de la forma ya descrita,comenzando Fig. 2. Los "supuestos testículos"de "Bolita". Ag. 3. Se decide extirpar los pólipos, para locual es preciso realizar una pec¡ueña
medianteligaduras oelectrocoagulación. por suturar el tecro de lavaginay siguienoo P<J el tejioo subcutáneo y la piel. episiotomía Que permita acceder asu inserción. Estos pólipos sonpediculados
y se originanen el suelo de la vagina,cranealmente al meato urinario,como es
característico.

Ag. 9. Aspectofinal del periné unavez coocluida la interveoción. Ag. to. Sección longitudinal del tumor. Mediante biopsia se diagnosticó Que se Fig. 4. Observese el origen comúnde ambos p:ilipos, sujeto por la pinza. Ag. 5. Aspecto final de la herida Quirúgica mavez suturada la episiotomía.
trataba de m fibroleiomioma. Ala izQuierda se apreciala torsión del pe()'culo del pólipo congestivo.
La parte posterior Vulva - Vagina / Neoplasias

Perrita Schnauzerde 8 años de edad que se presenta


a la consulta, de urgencia, por la aparición de forma
repentina de una masa en la zona vulvar. Se aprecia
en la exploración una masa congestiva, con zonas
de necrosis, que asoma entre los labios de la vulva.
Es de suponer que el tumor se formó dentro de la
Fig. 3. Siempre que se interviene (JJirúrgicamente la
vagina, exterioriz6ndose en un momento dado vagina, es obligado mantener sondada la uretracano
(Fig. 1). forma de teneila localizada en todo momentoy evitar
así lesionarla. En este caoo dicha medida resulta
especialmente im¡n1ante dada la inoorporación
Fig. i. Vista posterior del paciente en la que se aprecia la masa. del meato al pedículo tumoral. Para resecar la masa
se coloca en la base de su pedículo una ligadura
de tramtixión oon mater1al monolilamento absorbi~
de 210.

128 129

Fig. 4. se secciona el pedículo distalmentea la


ligadura. sujetándolo oon una pinza con el finde
mantenerlo a la vista. Para asegurar lahemostasia,
se realizará una segunda ligadura proximal a la
anterioc.

Es imprescindible, en cualquier
cirugía vaginal, mantener sondada la
uretra durante toda la intervención.

Fig. 2. Una exploración más detallada revela que el origen del rumor se encuentra más caudal de lo QUe es habitual en estos casos. B sondaje de la uretra nos
descubre un meato uñnalio incluido en la base del largo pedículo. Se decide resecar el tumor. Dado su fácil aoceso no será necesario realizar una episiotomía.
Fig. 5. Aspecto final de la zona al término de la
intervención quinlrgica.
La parte posterior Vulva - Vagina / Neoplasias

Se presenta a consulta una perra cruce de Pastor


Alemán, de 7 años de edad, con una masa de gran
tamaño en la zona del periné, dorsal a la vulva.
El propietario indica que la tumoración ha crecido
rápidamente en las últimas semanas. La paciente
no presenta dificultad para defecar u orinar,
ni tampoco flujo vaginal. A la exploración se
comprueba que la masa ocupa todo el periné,
desde la comisura dorsal de la vulva hasta el ano.
El aspecto nos hace sospechar que se trata de un Fig. 1. Nuestra pacienteen el momentode lapreparación para entrar al quirófano.
tumor vaginal. No obstante, la exploración vaginal Fig. 4. Se comienza iOOcliendo el peliné en su linea
media. se realiza una disecciónrana separanclo la
nos revela que el tumor se localiza fuera de la piel de la cápsuladel tumor, hasta alcanzar su base.
vagina, ocupando el espacio subcutáneo
comprendido entre la vulva y el ano (Ags. 1 y 2).
Esta zona anatómica está muy

vascularizada por lo que tiene que

prever una gran hemorrogia.

130 ~ro un correcto diagnóstico diferencial de un abultamiento1 131


del periné es imprescindible determinar su origen exacto,
mediante tacto rectal y vaginal. Ello condicionará la técnica
quirúrgica a aplicar.

Fig. 2. Aspectodel pelinéde la paciente una vez depilada tras haber realizado la
asepSia de la zona.
Fig. s. Se clampa la base del tumor mediante oos
pinzas al oqeto de evitar hemorragias.

Ver posicionamiento :..._ pág.


248
del poctente. :"Y'

Fig. 3. Se decide resocar quirúrgicamente la masa. Fig. 6. se finaliZa la reseceión secciOnaroo el


Para ello se preparaal paciente dela forma habitual. pedículo.
La parte posterior Vulva - Vagina / Neoplasias

D 530 p\us
Fig. 7. Antes de retirar las pinzas se realizan las

ligaduras precisas para unacCJTecta hemostasia.

132 133

Fig. s. Se cierrala heñda en dos planos, oomenzaooo por el subcutáneo mediante


Fig. 9. Se cierra la piel con puntos eo "U" coo monofilamento oo absomble, tras
morofilamentoabsortlible 2/0.
resecar tocia la piel sobrante ycolocar un drenaje Penrose.

Fig. 10. El tumoc resultó ser un lipoma del tejido


subcutáneo. Susituación anatómica en la linea
media del periné, de tonna simétJica, nos indujo a
pensar, en un principio, eo un tumor vaginal.
La parte posterior
Vulva - Vagina / Himen persistente

Índicedepresentací~
Dificultad técnica
m
Debido a alteraciones en la fusión de los conductos
de Mül/erdurante el desarrollo embrionario pueden
aparecer distintas formas de himen persistente.
Tanto la forma anular como el septo vertical
producen una estenosis a nivel de la unión
vestrbu/ovaginal.
Fig. 1. Gracias al empleo oo un endoscq:¡io se puede identificar el oñgen del

problema. Se trata de una banda fibrosa vertical Que divide y estenosa la vagina a

nivel de la uniónvestíbulovaginal.

Enla parte inferior de;eclla de la imagen se oooerva la papila uretral.

Esta perra presentaba infecciones recidivantes de vagina que se tra·


taban con diferentes fármacos sin conseguir resultados satisfacto·
rios. En el último tratamiento su veterinaria le recetó unos óvulos
vaginales. que no se podían introducir.
La paciente fue remitida al Hospital para realizarle una vaginoscopia
(Ftg. 1).
Fig. 4. Aoontinuación, y siempre bajo estricto control de la papila uretral parano Fig. 5. Para garantizar la hemostasia de la mucosa vaginal puede ser necesar1a la
lesionarla. se secciona la parte ventral del himen. realización de una su!IJ'a oontinua entrelazacla con material monofilamento

• Lo vaginitis persistente se produce por el incorrecto


drena¡e de los [luidos uterinos y vaginales que favorece
absortlible 310.

134
lo colonización bacteriano. Con el fin de controlar la hemorragia que se produce en la mucosa 135
vaginal reoomendamos realizar una sutura continua con material sin·
tético absorbible (Fig. 5).

Verposicionamiento del poclente. ~ pdg. 248

t erepisiotomío. ~ pdg.254 Fig. 2. Una episiotomía nos permite visualizar la papila uretral (A) así como el
himen persistente (B).
• Controle en todo momento la papila uretral para no
lesianarlo, si no la identifico fácilmente sándelo con un
catéter.

Tratamiento quirúrgico Algunas pacientes pueden presentar los dos tipos de himen persis·

tente (banda vertical y estenosis anular), por este motivo no se otvi·

Tras realizarse una episiotomía se retraen late<afmente los bordes de de de explorar de nuevo el diámetro vaginal.

la incisión para ooservc:v la unión vestíbulovaginal (FIQ. 2). Después de la corrección quirúrgica se tiene que cerrar la episioto·

A continuación la banda fibrosa es seccionada oon tijeras (Fig. 3 y 4). mía (Fig. 6).

Después de la cirugía
• limpieza tópica de la vagina con irrigaciones locales de una solu·
ción de povidona ycdada.
• Si existe vaginitis, tratamiento médico en base al cultivo y antibio·
grama realizado.
El pronóstico es muy bueno ya que tras la resección de la banda
fibrosa desaparecen tos signos clínicos iniciales.

Fig. 3. Tras la exposición del himenpersistente se resecan sus fijaciones dorsal y


Fig. 6. l.a episiotomía se cierra en tres planos con material absortlible 2/0 la
ventral a lavagina.
mucosa yla capa muscular. y oon material monofilamento no absorbible la piel.
En esta imagen se oooerva la secciál de la ~e dorsal de la banda.

Sección mediana del pene del perro Uretra


Obstrucción uretral en el perro
Cálculos uretrales en el perro
Caso 1 Técnica de urohidropropulsión
Recto Caso 2 Uretrotomía preescrotal
Caso 3 Uretrostomía escrotal

Estenosis uretrales
Caso 1 Uretrostomía escrotal
Uretra 'tv·

Ve¡iga
137

~Conductos deferentes
Cuerpo cavernoso

Enfermedad del tracto urinario


Hueso peniano
distal felino (FLUTD)
Bulbo del glande Caso 1 Uretrostomía perineal
Caso 2 / Estenosis cicatricial
Caso 3 / Inflamación y necrosis cutánea
La parte posterior Uretra / Obstrucción uretral en el perro

Obstrucción uretral en el perro Cálculos uretrales en el perro


Índicedepresentaci~ Índice de presentaci~

La obstrucción uretral se produce por cálculos que quedan atrapa­


La litiasis urinaria es la causa más frecuente de obstrucción uretral
Tipos de cálculos Frecuencia de presentación
dos en la uretra, y por estenosis postinflamatorias secundarias al
tanto en el perro como en el gato.
paso de cálculos, traumatismos previos (accidentes. peleas...) o
Estruvita'
inteNenciones quirúrgicas realizadas en la uretra.
Signos clínicos Diagnóstico
En estos casos se recomienda la intervención quirúrgica con el fin de
Oxalato cálcico
• Disuria, hematuria, anuria, tenesmo, distensión abdominal, dolor. Se debe realizar en base a los signos clínicos, la exploración ñsica
resolve< el problema obstructivo (Figs. 1 y 2), y analizar la composi­

Urato • Signos de uremia (postrenal): vómito, depresión, anorexia, deshi­ del paciente y sobre todo en la radiología, donde se deben visualizar
ción de los cálculos. De esta forma se podrá instaurar un régimen

dratación.. los cálculos (Rgs. 1-5).


médico-dletético que prevenga la recidiva de los mismos.
Sílice
• Ocasionalmente se puede romper la vejiga urinaria produciendo
Cistina uroabdomen.
Mixtos

' Fosfato amónico magiésioo

138 139

Fig. t. Cálculos extraidoo ele la uretra ele un perro.

Fig. 2. Estenosis uretral secundaña a una Rg. t . El lugar más frecuente para localizar loo cálculoo es la base del hueso peniano.

uretrootomía realizada para laextrao::ión de un En este caso se trata de un cálculo ele gran densidad que se identifica con facilidad en la racJografía por delante del hueso peniano.

cálcoo alojaoo juntoal rueso peniano.


En este caso la dificultad urinaóa era mínima.
La parte posterior
Uretra / Obstrucción uretral en el perro

Fig. 2. No obstante, también se debenbuscar en Fig. 5. Los contrastes positivos tambiél"I son útiles en
toda lalongitud de la uretra, incluida sucurvatura la identificación efe estenosis uretrales.
isquiática. Enesta raclograffase observa un gran Este paciente manifestaba gran dificultad para
número de cálculos de clferentes diámetros que orinar.
obstruyen la uretra.

Radiodensidad de los cálculos en base al tamaño y a su composición Analítica


Oxalato

Estruvita

Apatita
• •
.•• •.
Grande-Único

Pequeños-Múltiples
• Hematología completa, así como un perfil bioquímico general
incluyendo electrolitos (potasio. sodio y cla<o).
• Urianálisis y cultivo microbiológico, obteniendo la orina PO< cisto­
centesis.
Estos pacientes suelen presentar uremia postrenal e hipercaliemia,
Sílice

Cistína
• .• • que deben ser controladas antes de realizar la cirugía:
• Fuerce la diuresis con suero fisiológico salino isotórico, sólo si el
paciente está sondado o desobstruido.
140 141
Urato ·:=:·~::~·:~·:.:~::~·. Arenilla • Administración de dextrosa al 50% en bolos por vía intravenosa.
• Administre insiJina (0,5 Ullkg IV) junto a dextrosa (2 g por lJ1idad
Fig. 3. Para obtener la mejor imagen de la zona
de insulina) para reducir la concentración de potasio.
perineal sin que las extremidades J'.X)Steílores se
superpongansobre la uretra, éstas se debendirigir
hocia delante enel momento deobtener la Ypara proteger el corazón de la hiperca/iemia administre

radiografía. Enesteperro no se identifica ningún gluconata cálcico.


Vercistocentesis. • p6g. 240
cálculo apesar de tener sintooiatología obstructiva.

En todos los cosos de litiasis sospeche la existencia de


Tratamiento
infección urinaria, identifíquela y trótela correctamente, mejor La obstrucción uretral se intenta resolver trasladando los cálculos a

antes de la cirugía. la vejiga mediante la urohidropropu1sión. De esta forma se consegui­

rá liberar la vía urinaria y se concentrarán todos los cálculos en la

vejiga, desde donde se extraerán con mayor facilidad.

Si no fuese posible la movilización de los cálculos a la vejiga se debe­

rá realizar una uretrotomía (ver caso 2), y en casos recidivantes una

uretrostomía permanente (ver caso 3).

Fig. 4. El empleo de medios decootraste yodaoos


(urológicos) Introducidos en la uretra
retrógradamente (uretrcx:istogralía) ponen de Una cistotomía es m6s sencilla de realizar. y cursa con
manifiesto la existencia de los cálculos raoolúcioos menos complicaciones intraoperatorias y sobre todo
Qnlrecuentes) queno se observabanen la imagen postoperatorias, que una uretrostomía.
anterior.
a pa te pos enor Uretra Obstrucción uretral en el perro

Dificultad técnica "Blacky" es un perro mestizo de 10 años La urohidropropulSión se realiza para reintroducir los cálculos uretra­
les en la vejiga, de esta forma se consigue desobstruir la uretra.
de edad que no puede orinar, realiza numerosos
intentos pero sólo le salen unas pequeñas gotas.
Técnica
Algunas veces también gotea sangre y se lame
• Sedación y/o anestesia epidural.
reiteradamente el pene.
• Sondaje uretral hasta el PIXlto de obstrucción (Figs. 3-5).
Fig. 1. "Blacky"
• Se introduce IXl dedo pee- el ano, se palpa la uretra sobre el suelo
también tiene el
de la pelvis, y se oomprime oon fuerza (Ftg. 6).
alxlomen distencido
y molestias a la • Se cierra el glande del pene sobre la sonda para evita- la salida de
palpación aboominal. suero al exterior.
Se realiza una radiograffa de la región perineal para identificar la loca· • Se inyecta suero salino estéril a presión moderada en la uretra Fig. 3. Se inyecta en la luz uretral un lubricante urol(:gico asociOOo a lfl anestésico
lización de la obstrucción i..rinaria (Fig. 2). mientras se mantiene ocluida por el dedo introducido pee- el recto. local. Se deja actuar durante unos minutos mientras se preparael resto del
En el tacto recta se nota perfectamente oomo la uretra se óstierde. material.
• Pasados IXlOS segundos se libera la presión de la uretra membra­
nosa. dejando que el suero pase a la vejiga y con él los cálculos
(Fig. 6).

VerS-Ondoje uretral en el perro. • p6g. 236

142 No utilice catéteres que sean excesivamente rígidos, 143


ya que lesíonaría la mucosa uretral. No intente empujar

los c61culos con una sanda rígida lo único que canseguirfa

es traumatizar aún más la zona.

Fig. 4. Introducciónde un catéter vesical estéril en la uretra hasta llegar a la


obstrucción.

Fig. 2 . En la uretra peniana se observan gran cantidad de cálculos, así rono lila f\iperplasia de la próstata.
Rg. s. Es necesaria una radiogralia previa a la urohidropropulsiónpara localizar Fig. 6. Coo un tacto rectal se comprime la uretra contra el suelo de la pelvis.

En este caso se ha puesto un enema de bario con el finde identificar mejor la zona abdominal caudal y perineal. No es necesariO realizarlo de rutina.
los cálculos yrealizar las posteriores comprobaciones. Se presiona el glande del pene sobre la sonda vesical.

Se introduce el suero apresióo moderada.

Al notar la distensión uretral se libera lapresión y los cálculos pasan a lavejiga.

a pa te pos enor
Uretra Obstrucción uretral en el perro

• Se repite el mismo procedimiento dos o Dificultad técnica


tres veces y se realiza una radiografía de
la zona para comprobar el éxito de la
misma (Figs. 7 y 8). Antes de la cirugía La uretrotomía se realiza para eliminar los cálculos
Corrija las alteraciones hídricas, electrolíticas y metabólicas antes de
que quedan retenidos pordelante del hueso
operar.
peniano, y que no se han podido movilizar a la
¿Ha intentado realizar una hidropropulsíón (ver caso 1) de los cálcu­
vejiga mediante la urohidropropulsión.
los a la vejiga, pero ha Sido infructuosa?

Anestesia La uretratomfa puede complicarse por una fibrosis


En pacientes urémicos o muy deprimidos se puede realiza la técni­ cicatricial que estenosaró la uretra a medio plazo.
Fig. 7. Tras el primer intentode urdlidropro~lsión ca b~o sedación profunda y anestesia local.
parte de los cálculos se han movilizado. pero se
observan todavía los más grandes en el inteñor de la
uretra.

Recuerde que la vejiga puede


Técnica
estar muy distendida par la • Preparación del campo quirúrgico
retención urinaria, o su pared (Flgs. 1 y 2).
lesionada por la cistitis
secundaria. Vigile la sobrecarga Ver sondaje uretral en el perro. • pdg. 236
vesical por el suero introducido.

144 145

Fig. 1. Oe¡:ilación y preparacMíndel campo


operatorio de f(IITTla estándar, centráOOonos en el
área comprendida entre los testículos yel ¡:repucio.
B paciente se cctoca en decúbitosupino.

Fig. s. Tras repetir la técnica dos veces más se Fig. 2. Tras la cciocacié:n de los paños de campo se
consigue propulsar todos los cálculos al interior de introduce una sonda urinaria, estéril, hastael punto
la vejiga. de obs1nX:cMín.
...
Procure introducir los có/cu/os en
la vejiga, y a continuación realice
una cistotomfa para extraerlos.
Tendrá menos complicaciones que
si hace una uretrotomía.

pdg.289

Fig. 9. Acontinuación se realiza unacistotomía para


laextracción de todos los cálculos.
a pa te pos enor
Uretra Obstrucción uretral en el perro

• Con un bisturí se realiza la incisión de la • Si no se tiene demasiada experiencia, o no se cuenta con el mate­
piel y el tejido celular subcutáneo entre el rial apropiado para reconstruir la uretra, es mej0< dejar sin suturar
escroto y la parte caudal del hueso la herida peniana para no crear LJ1a fibrosis excesiva.
peniano (FIQ. 3). En este caso, la posibilidad de hemorragia local al despertar el
paciente de la anestesia es muy alta. Complicación que se méWl­
• Con una hoja de bisturí fina (nº 11 ) se
tendrá dlJ'ante 4 o 5 días después, sobre todo cuéWldo miccione el
hace una incisión en la uretra po< su rafe
paciente.
medio hasta llegar a su luz, evitando
lesionar los cuerpos cavernosos (Fig. 4). • Es preferible la sutura de la uretra Ydel pene para evitar el sangrado No se olvide de anolizor los cálculos poro instaurar el
duréWlte el postoperatorio, así como el paso de orinaal tejido oelular tratamiento dietético que evite o reduzca la probabilidad
• Si es necesario ampliar la incisión se
subcutáneo que puede causar oelulitis y necrosiS focal (Fig. 6). de recidivo.
empleará una tijera fina de iris. Siempre
sobre la línea media de la uretra. • Finalice suturando la piel con la técnica que más le guste (Rg. 7).

Fig. 3. se identifica el músculo retractor del pesie, se


diseca y se lateraliza para JX)der acceder ala uretra.

Irrigue periódicamente el campo


Después de la cirugía
operatorio con suero fisiológica Dejamos la sonda vesical durante 2 días con el fin de garantizar la

atemperado para evitar la lesión tisular eliminación de la orina.

pordesecación. Si no se sonda y durante el postoperatorio inmediato se produce

una exoesiva inflamación de la uretra. o se obstruye por coágulos de

sangre. el paciente volverá a tener retención urinaria. En este caso

se debería volver a sondar la vía urinaria. Esta maniobra puede lesio­

nar la zona intervenida, romper ta sutura, e incrementar la inflama­

ción con el consiguiente exoeso de fibrosis cicabicial.

146 El mayor problema de dejar LJ1a sonda vesical colocada es la posi­


147
ble infeoción ascendente de la vejiga a través de la uretra. Por este

Fig. 4. La iociSión de la uretra es hemorrágica;

motivo se recomienda et empleo de antibióticos de amplio espectro

procure C1J8 sea por la línea media para evitar un


de eliminación renal (por ejemplo amoxicilina + ácido clavulánico)

excesivo sangrado (por lesión de los cuerpos


mientras se esperan tos resuttados del antibiograma.

cavernosos).
fig. 6. Suture ta uretra con material absorbible sintético monofilameoto 510 o6/0

La colocación de unos puntos de tracción facilita la


empleando puntos independientes y sencillos.
Complicaciones
visualizacioo de laluz uretral sin lesiooar la mucosa
Procure englObar la mínima cantidad de tejioo posible, pero garantizando la
Hemorragia dlJ'ante varios días después de la intervención si no ha
dela misma.
estabilidad de la sutura.
suturado la uretra. En algunos casos el sangrado es muy albundante
y preocupa mucho al propietario y por supuesto al veterinario.
• Extraiga los cálculos con una pinza de Para minimizar1a sutúrela con material sintético albSO<bible fino.
disección fina y con perfusión de suero Si no lo ha hecho adviértaselo al propietario, hospitalice al paciente y
atemperado a través de la sonda uretral. controle el sangrado de la uretra mediante presión de la zona, con
• Una vez eliminados los obstáculos se una t0<L11da de gasa. sobre todo después de orinar.
introduce la sonda urinaria hasta la veji ­ Estenosis cicatriciales por una gran fibrosis en la zona debida a un
ga, comprobándose que no existen más excesivo tralJllatismo, inflamación o lesión de la uretra como conse­
cálculos (Fig. 5). cuencia de ta litiasis o de la intervención quirúrgica realizada.
Para solucionarla intervenga lo antes posible al paciente. evite son­
dajes reiterados de la uretra, no intente empujar los cálculos con la
sonda, intente la urohidroprqiulsión de los cálculos a la vejiga, Si rea­
liza la uretrotomía, hágala con delicadeza, (siendo lo menos traumá­
tico posible) y emplee material monofilérnento sintético absorbible.
Si se presenta este problema tendrá que recurrir a la uretrostomía
permanente (ver caso 3).

fig. 7. En este caso se harealizado una sutura intradérmica conmaterial


monofilamento sintético no absorbible.
Fig. 5. En esta imagen se puede observar la sonda a
través de la uretrotomía.
a pa te pos enor Uretra Obstrucción uretral en el perro

Dificultad técnica "Bulit" es un perro Bu//dog, de 6 años de edad que


Es la técnica de elección en el caso de tener que realizar una

Técnica quirúrgica
vuelve al hospital por un problema recidivante de uretrostomía permanente.
Indicaciones de la uretrostomía esaotal:
obstrucción uretral. A este nivel la uretra es más ancha (tiene mayor diámetro
• Calculosis uretral obstructiva y recidivante, que no se puede con­
interno), es más superficial, y el espesor del tejido cavernoso
trolar médicarnente.
que la recubre es menor.

• Cálculos que no se pueden eliminar mediante urohidropropulsión


Por estos motivos las hemorragias postoperatorias son

(ver caso 1) o l.l'etrotomía (ver caso 2).


menores, así como las estenosis cicatriciales.

El inconveniente es que requiere la castración del paciente.


• Estenosis uretrales.
• Neoplasias distales del pene o de la uretra.
• Traumatismos distales del pene.
Historia clínica
Fig. t. A"Bulit" le Hace unos meses fue atendido por un problema obstructivo urina­ Antes de la cirugía
cuesta orinar. y lo hace rio. En aquella ocasión se identificaron diferentes cálculos localiza­
• Desobstrucción de la uretra (urohidropropulsión). si es posible, y
en peco valumen y con dos en la vejiga y en la uretra peniana a la altura del hueso peniano.
sondaje de la misma.
frecuencia. (Fig. 2).
• Toma de una muestra de orina para realizar el correspondiente
cultivo y antibiograma.
Se realizaron distintos intentos infructuosos
de l.l'ohidropropulsión (ver caso 1). • Corregir los desequilibrios hídrioos y electrolítioos secundarios a la
AJ no poder movilizar los cálculos a la vejiga obstrucción urinaria.
se practicó una uretrotomía para la extrac­
ción de los cálculos atrapados en el hueso Durante la cirugía
peniano.
Tenga paciencia con el sangrado incisional de la uretra, no se ponga

En la actualidad y desde hace 3 días el


nervioso. No emplee técnicas hemostáticas agresivas.

perro vuelve a tener problemas para orinar,


Suture la muoosa de la l.l'etra a la piel oon un material monofilamen­

a pesar del tratamiento médico-dietético


to que esté montado en una aguja cilíndrica.

que se instauró. Le cuesta mucho miccio­


nar, hace grandes esfuerzos y sólo salen 149
unas gotas. a veces con algo de sangre. Ver orquidectomía. ~ pdg. 264
Ver técnica de urohidropropulsión. • p6g. 142

Ag. 2. Los cálculos uretrales se encootraban fig. 4. En la J)'imera fase de la inteNención se realiza la orquidectomia escrotal
atrapaoos en et hueso peniano.En el interior de la del paciente.
vejiga se identificaron gran cantidad de cálculos de
difefentes tamaños.

Radiología • Depilación y preparación del campo ope­


ratorio de forma estándar.
En la radiografía lateral de la zona perineal
• Decúbito supino.
se observan varios cálculos en el interior de
• Preparación del campo quirúrgico sobre
la vejiga, pero ninguno en la zona l.l'etral.
Por este motivo, y para comprobar la posi­ la región escrotal.
ble estenosis uretral secundaria a la inter­ • Colocación de una sooda urinaria estéril en
vención realizada anteriormente, se realiza la uretra periara, si es posible, para facilitar
una uretrografía retrógrada con contraste la incisión y sutura posterior de la uretra.
yodado (Fig. 3). • Incisión elíptica de la piel en la base del
esaoto (Fig. 4).
• Disección delicada de la zona ventral del
pene (Fig. 5).
• Identificación e incisión de la uretra (Figs.
Fig. 3. Gracias al empleo de un oontraste yooooo se
6-8).
comp11Jeba la existencia de unaestenosis cicatricial
en la zona ~via al hueso peniano, así oomo Rg. s. Seguiclamente se proceoo a la identificacíón y
defectos de llenado en la vejiga por la J)'esercia de disección del músculo retracto< del pene, con el fin
cálculos en su interior. de visualizar oorrectamente la uretra.
a pa te pos enor
Uretra
Obstrucción uretral en el perro

Fig. 7. La introducción de una pinza por la luz uretral


pemlite asegurarnos que hemos alcanzado nuestro
objetivo.

150 151
Fig. s. La inciSión uretral se ampia por su rafe
mediocon unas tijeras de iris.
La longitud de la uretrotomía debe ser
a(Jfoximadamente 4 o 5 veces el diámetro de la luz
uretral de esta zona.
La hemostasia del teiiclo esponjoso de la uretrase
realiza cm torundas de gasa, ycon pinzas de
fo<cipresión en caso de hemorragias puntuales y
copiosas.

Fig. 6. Tras la lateralizacióo del músculo retractor del pene se identifica la uretra (de uncolor azuladlo) fla~ueada por dos estrocturas blanquecinas que son los cue¡µJS
cavemsos del pene.
A oontinuacióo se incide la uretra por su rafe medio con una hqade bistu~ del rf' 11.Al seccionar el tejido espon.Íi)So,que rodea la uretra, se l)'oduce una hemorragia más
omenosintensa.

El tejido uretral es bostonte fibroso, por ello hay que hacer


bastante presión para secdanarla.

La sección de la uretra implico una hemorragia, continua y Fig. 9. Acontiluación se sutura la mucosa de latretra

difusa, que debe controlarse mediante presión con ala piel oon material Sintético monofilameoto tiro.

torundas de gasa. En caso de hemorragia intensa puntual La aguja debe ser cilinctica para ro desgarrar la

se puede cohibir con una pinza hemostática. No emplee mucosa uretral.

coagulación térmico a eléctrica. En este caso se está empleando un hilo absort:Jítje

del 5/0.

a pa te pos enor Uretra Obstrucción uretral en el perro

• Sutura de la uretra a la piel (l.l'etrostomía Después de la cirugía


permanente) (Figs. 9 y 10). • A partir de ahora el perro orinará de lado, por lo que es frecuente
• Control de la infección local y urinaria con antibióticos de amplio que lo haga sobre una de sus extremidades. Reconiende el seca­
• Las heridas cutáneas anterior y posterior
espectro inicialmente, y a oontinuación con el indicado tras el anti­ do de la zona y la higiene local para evit<W" dermatitis secundarias.
a la uretrostomía se suturan siguiendo
técnicas oonveneionales (Rg. 11). biograma realizado en una muestra de orina.
• Limpieza diaria de la uretrostomia. Evolución postoperatoria
• Aplicación de pomadas y vaselina tópicas para evitar lesiones El paciente se debe vigilar estrechamente durante los primeros días
locales oomo consecuencia de la salida de orina. del postoperatorio ya que la hemorragia por la uretrostomía suele ser
una oonstante en todos los pacientes (Figs. 12-15).
Advertencias al propietario
Fig. to. Es importante QUe cada punto &lo englobe
• Es normal el sangrado de la zona cada vez que el paciente orine,
incluso puede ser bastante copioso.
la mucosa uretral yla piel. Asegúrese ele no irduir
en esta sutura otros tejiclos adyacentes. • Enséñele a detener la hemorragia mediante presión con gasas
Amedida que se va suturardo la uretra ala piel se estériles humedecidas en agua oxigenada diluida al 50% oon
va reduciendo la hemorragia de la misma. suero salino.

152 153

fig. t2. Alas24 horas de la inteivenciónse obseNa una moderada hemorragia Fig. 13. Alas 48 horas se oonprueba la correcta evolución del proceso. La
incisional, que se agrava cuaooo el paciente orina. hemorragia es mucho menor. Hayque extremar lasmedidas de limpieza y
antisepsia de la zona. se deben eliminar los coágulosque queden adheridos alos
hilos de sutura para evitar U11a infecciónsuboostrácea.

Fig. tt. Este es et resultaclo al finalizar la ínteivención.


fig. 14. Alos13 días de postoperatorio se obseNa una inflamación de las zooas Fig. 15. Alos 15 días de postoperatorio se <iiitan los puntos y se da de alta al
Al terminar lacirugía no es necesariO dejar sondada la uretra. DescJe et cJa siguiente ala intervención el paciente orinará con normalidad.
craneal ycaudal a lauretrostomía por un descuido en la vigilancia postoperatoria. paciente.
La parte posterior Uretra Obstrucción uretral en el perro

Estenosis uretrales Estenosis uretrales. Caso 1 / Uretrostomía escrotal

Índice de presentación Dificultad técnica ''lan" es un perro mestizo de 8 años de edad que
tiene problemas para orinardesde hace 2 semanas.
Las estenosis uretrales se pueden deber a fibrosis secundarias a Al principio le costaba mucho, hacía grandes
uretritis por litiasis recidivantes, intervenciones quirúrgicas realizadas El 5% de los perros que sufren traumatismo de codera
esfuerzos, pero actualmente sólo orina unas gotas.
anterionTlente, asi CXlf110 por traumatismos y heridas externas (mor­ (principalmente por atropellos) presentan lesiones
deduras, cortes.. .) (Figs. 1 y 2). uretrales. Considere lo posible rotura de lo mismo cuando
Las estenosis extrapélvicas se deben resolver mediante uretrostomías atienda a un paciente atropellado.
permanentes realizadas sol:J<e la zona estenosada. En este coso deje colocado uno sonda urinario durante
4 o 5 días.

Radiología
Siguiendo el protocolo establecido para
este tipo de obstrucciones se procede a la
urohidropropulsión del cálculo a la vejiga
urinariacon el fin de extraerlo mediante una
cistotomía (Fig. 2).

Ver cistotomfo. ~ pdg.289

154
Ver técnica 155
de urohidropropulsión. . póg.142

Ag. ,_Eneste caso se oooerva una estenosis


importante de la uretra por delantedel hueso
peniano. El origen fue una intervención quirúrgica Rg. " En laradiografía peñneal se obselva un
previa en la uretra. cálculo atrapado en lazona media de la uretra.

Ag. 2. Fkltura de la uretra intrapélvica corno


consecuencia de unafractura de cadera.
Se debe sondar al paciente para evitar la salida de Rg. 2. En estaradiografía se observa el cálculo
orina, y así minimizar la reaccióncicatricial dentro de la vejiga,no identificándose ningún otro
secundaria. obstáculo en la vía urinaria.
a pa te pos enor Uretra Obstrucción uretral en el perro

Reflexionando sobre el caso. no parece lógico que la uretra se obs­

Rg. 5. Disección y retr~ción del músculo retractor

truya a nivel escrotal, debería existir una estenosis.

del pene, fase previa ala uretrotomía.

Para estudiar correctamente la uretra se realizan radiografias perine­

ales oon medios de contraste (Figs. 3-4).


Rg. 6. Se incide la uretra JX>r su rafe mecfio,

aproximadamente 3 o 4 centimetros. A oontinuación

se sutura la mucosa uretral a la piel c:irectamente

oon material monofilameoto.

En este caso se ha empleado unhilono absorbible

de 410.

Fig. 3. lnyoctando aire en lauretra se observa la distensión de la vejiga (con


aumentodel grosor de su pared como coosecuenciade una cistitis), yla uretra
dilatada en toda su longitud aexcepción de una zooa localizada por delante de la
bolsa escrotal.

Indicación quirúrgica
Uretrostomía escrotal para evitar la recidiva
de la obstrucción por un pequeño cálculo
que p::xjría ser eliminado oon la orina de no
existir la estenosis uretral (Figs. 5 y 6).

Evolución
Durante el postoperatorio se debe efectuar
una correcta antibioterapia en base al anti­ 157
biograma realizado en una muestra de crina.
Vigile estrechamente la evolución de la cica­
trización. Hay que evitar que el paciente se
lama la zona, así como contaminaciones
secundarias que produzcan la dehiscencia
de los puntos (Rgs. 7 y 8).

Fig. 4. Empleando un medio de oontraste yodado (hidrosoluble) se identifica con mayo< precisión el grado de estenosis ysu extensión. Fig. 7. Imagen alos 3 días de la uretrostornia. Fig. s. A los 11 días de postoperatofio se Quitan los puntos yse da de alta a"Jan".
8 resultallo está siendo satisfactorio. Actualmente han ~do 2años yel perro no havueltoatener p-oblemas
obstructivos.
La parte posterior Uretra / Enfermedad del tracto urinario distal felino

Enfermedad del tracto urinario distal felino (FLUTD)


Índice depresentaci~

Este síndrome se caracteriza por una inflamación idiopática del trac­

to urinario inferior, el gato tiene dificultad para la eliminación de la


Este síndrome representa el 10% de las patologías felinas
orina, asociada o no a obstrucción o litiasis uretral.
que atiende un veterinario.
La etiología en la que existen predisposiciones individuales y causas

desencadenantes no está perfectamente clara. Es un proceso mul­


No todos los gatos con FLUTD tienen cristales o cálculos en
tifactorial.
la uretro.

Posibles etiologías asociadas al FLUTD


• Obesidad.
Diagnóstico Fig. 2. Rotura de vejiga en un gato con FLUTD. Se manifiesta gracias al empleo de Fig. 3. lmageo intraqierator!a de un gato con FUJTD
• Dieta.
un contraste 1.1dógico introducido retrógradamente por soodaje vesical. y rotura vesical.
• Orina muy concentrada. • Historia clínica. Los síntomas suelen ser bastante característicos
• Cristaluria. de este cuadro.
• Infecciones (bacterias, virus, hongos...). • En la exploración fisica se palpa la vejiga aumentada de tcrnaño, y
el paciente muestra signos de dolor (tenga precaución porque se
• Anomalías anatómicas (estenosis lJ'etraJ.. .).
puede romper la vejiga en gatos obstruidos).
• Neoplasias (vejiga, uretra ..).
• La radiograña demuestra el estado de la vejiga, su integridad, así
• Traumatismos.
como posibles causas del problema (Flgs. 1-3).
• Lesiones nerviosas.
• CtJtivo y antibiograma de una muestra de orina obtenida por cis­
• Causas iatrogénicas ... tocentesis antes de empezar el tratamiento.
En la anamnesis se recogen los siguientes datos: • El análisis de orina permite identificar células vesicales. bacterias y
cristales.
• Va constantemente a la bandeja e intenta orinar, pero no puede.
• Elimina sólo unas gotitas de orina. • Hematología completa, perfil bioquímico general, sobre todo BUN,
creatinina, fósforo. potasiO y, si es posible, el pH de la sangre. 159
• Orina con sangre.
• Se lame frecuentemente la zona del pene.
• Se queja, le duele cuando orina. El fallecimiento de estos pacientes puede aparecer como
consecuencia de la deshidratación, de los desequilibrios
e/edro/íticos y de las alteraciones ócido·base. Fig. 4. Sondaje uretral para la extracción ulinaria ydescompreSión vesical. Rg. 5. La sonda uretral se fijaal prepucio con dos puntos de sutura, yse conecta
a un sistema de recolección urinaria mientras et gato está traí(luilízado.

Tratamiento Tratamiento quirúrgico


El tratamiento debe ser individualizado para cada paciente en fun­
La uretrostomía perineal está indieada para evitar la obstrucción en
ción de las posibles causas que lo hayan provocado.
los casos recidivantes, o para tratar aquellos gatos que no se pue­
En líneas generales se basará en:
den sondar.
• Ruidoterapia por vía endovenosa, lo antes posible, para corregir la
• Disuria. • Depresión. deshidratación, la uremia y la hipercaJiemia. Ver uretrostomfa perineal en el gato. • p6g. 16o
• Polaquiuria. • Deshidratación.
• A conti~ación se procede al sondaje vesical (Figs. 4 y 5).
• Tenesmo. • Anorexia.
En animales muy deprimidos no es necesaria su tranquilización,
• Hematuria. • Vómito.
otros se deberán sedar e incluso anestesiar.
• Micción pequeña y con fuerza. • Halitosis.
• Lamido continuado del pene. • Úlceras en la boca (por uremia). 8 sondaje urinariO en muchas ocasiones es laborioso y lento debido
• Dolor abdominal. • Aumento del abdomen a la gran inflamación de la uretra u obstrucción de la misma por el
El 39% de los gatos que padecen este síndrome sufren
(si la vejiga no está rota). depósito de microcristales. recurrencias periódicas.
• Trastornos cardiacos
por aumento del potasio.
Versondaje uretral en el gato. • póg. 232 Las infecciones urinarias ascendentes son mós frecuentes
Fig. 1. Dstensién vesical en un gato con FLUID como consecuercia de
una obsb\Jcción uretral por Cristales de fosfato amónico magnésieo. en los pacientes que han sufrido una uretrostomía
• Antibioterapia. Inicialmente usamos amoxicílina + ácido clavuláni­ perineal.
co hasta obtener los resultados del antibiograma.
a pa te pos enor Uretra Enfermedad del tracto urinario distal felino

Índice de presentación
.,. Fig. 3. Se realiza una inciSión elíptica de lapiel alreded<1 del eSCfoto y del
prepucio, (Jlevan a ser resecados acontinuación. Se identifican los testículos en
Dificultad técnica

los arimales enteros. oun pa(Jlete graso en los castrados.


Controle el sangrado de los pequeños vasos subcutáneos.
"Ceniza" es un gato Europeo, de tres años de edad, Fig. 4. En los animales enteros se debe realizar la orquidectomía bilateral como
sin castrar, que desde hace un año presenta crisis fase previa para, acontinuación, visualizar y disecar la uretra.
y
obstructivas cada pocos meses (Fig. 1), y que no se
pueden prevenir con el tratamiento dietético.

Fig. t. En el último episodio ·ceniza" se sondó, y acontinuacioo se propuso ala


propietaria laintervención quirúrgica.

La uretrostomía perineal está indicada en casos de obstrucción ure­


tral cuando es imposible su sondaje, así como en los casos recidi­
vantes que se obstruyen periódicamente, a pesar del tratamiento
médico-dietético instaurado para controlarlo.
Es necesario tener un buen conocimiento anatómico de la zona
para conseguir el objetivo marcado y minimizar las complicaciones.

Antes
• Descomprima la vejiga mediante cistocentesis o sondaje uretral.
160 • Controle y corrija las alteraciones sangl.Íneas (uremia.. ,) y electrolí­ .,. Fig. 5. El pene se desplaza dorsalmente yse realiza la diseocioo del tejido
t6t
ticas (lipercaliemia...), peripeniano en dirección hacia la pelvis.
Haga una correcta hemostaSia de los pequeños vasos sangulneos locales para
Versondaje uretral en el gato. • p6g. 232 que el sangraoo no dificultelas maniobras de disección.

Vercistocentesis, ' .• p6g. 240

Fig. 6. Es muy importanteliberar todas las uniones del pene con el pubis.

Anestesia
Esta disecciónva apermitir la movilización del penehacia el exterior.

• Preanestesia: ketamina 20 mg/kg + buprenorfina 0,06 mg/kg y


+ maleato de acepromacina 0,01 mVkg.
• Inducción: propofol, dosis según efecto de la preanestesia
• Mantenimiento: isoflurano + fentanilo a demanda

Técnica quirúrgica

Ver posicionamiento del padente. • p6g. 248

Versutura del ano en bolso


de tabaco, ~ pdg.252

Durante la cirugía
• Controle las hemorragias con un coagulador bipolar.
• Si es posible se sonda la uretra para que sea más fácil su identifi­
cación más adelante (Fig. 2). Fig. 2 . Preparacióndel campo operatorio estéól.

• Irrigue periódicamente los tejidos con suero fisiológico estéril. Es muy importante haber realizado una sutura en bolsa de tabaco alrededor del

• Realice una correcta disección de las uniones del pene a la peMs. MOpara evitar una contaminación intraoperatOfia por heces.

• Tenga precaución en la disección profunda del campo operatorio. Soode la uretra Si es poSible.

a pa te pos enor
Uretra Enfermedad del tracto urinario distal felino

Fig. 10. Acontinuación se identifica. se diseca yse reseca el músculo retractor del
Fig. 11. Con lKI bisturí fino (nº 11) se incide la uretra po< su rafe medio para evitar

pene.permitiendo la correcta visualización de la uretra, que discurrepor debajo


una hemorragia excesiva de los cuerpos cavernosos.

del mismo.
Esta maniobra es más sencilla si el pacienteestá soodado.

Si la incisión no se realiza en el rafe medio la sección de


Jos cuerpos cavernosos vo a producir una hemorrogio
importante.

En cada punta de suturo se debe englobar la mínima


cantidad posible de tejido celular subcutáneo para no
incrementar la estenosis cicatricial postquirúrgica.

162 163

Fig. 7. Aamoos lados del pene, y fijándolo a la pelvis,se encuentran los músculos
Fig. s. Para evitar el sangrado de los músculos isquiocavernooos eisQUiouretrales
Fig. 12. La i!Usióo se prolonga cranealmente con tijeras de disección fina hasta

isquiocavernooos eiSQuiouretrales.
se recomienda la desinserción de su fijación ósea.
las glándulasbullJouretrales. quese identificanbienen los machosenteros. pero

Para la correcta identificación y disección de los mismos se diógeel pene hacia el


La tijera en estazooa siempre debe ir paralela al hueso para evitar lesionar la
QUeestán atrofiadas en los animales castrados.

lado opuesto.
uretra. Se realizan las mismas maniobras aambos lados del pene.
No es necesario resecar estas glándulas.

Con lo correcto disección del pene y Jo liberoción de sus


fijaciones a la pelvis, se consigue que éste se pueda
movilizar hacia el exterior sin que existan tensiones.

Fig. 9. En esta imagen se obseivan los músculos iSQuiocavernosos e Fig. 13. Aeste nivel se consigue undiámetro amplio de la uretra.
Fig. 14. Se visualiza la mucosa uretral de la zona pelvi<m y se sutura ala piel con

isquiouretrales desinsertados aambos laoos del pene.La tijera se~ala el punto Para comprobarlo podemos utilizar una pinza hemostática Pean recta cerrada.
material monofilamento absorbible 4/0 o510.

donde se creará la nueva aperturade la uretra al exterior. QUese podrá introducir hasta su bisagra sinresistenciaalguna.
Los dos puntos superiores se realizan a45º con respecto ala línea media,de esta

forma se consigue la máxima apertura de la uretraa este nivel.

a pa te pos enor Uretra Enfermedad del tracto urinario distal felino

Al finalizar la intervención no se olvide quitar la sutura en


bolsa de tabaco del ano.

Fig.15. Seva realiZando la sutura con matelial Sintético absorbible monofilamento Fig.17. Cuando el paciente se recupera de la aoesteSia es frecuente obse1Var la
Fig. 18. Imagen obtenida alos 3 días de postoperatorio.
fino,cJstribuyéodose los puntos uniformementesobre la uretra hastallegar al hemorragia de la uretra.

tercio distal del pene. COntrólela oonuna ligera presión externa durante unos minutos.

No es necesario dejar una sonda vesical, el paciente orina con nor­ Complicaciones
malidad desde las primeras horas del postoperatolio.
La recurrencia de la obstrucción i..rinaria por estenosis cicatricial de
Después de la cirugía la uretrostomía es la complicación más frecuente. Se debe a:
• Disección incompleta de la uretra, y por tanto a un orificio uretral
• Controle la hemorragia por la línea de sutura con una p<esión ejer­
pequeño.
cida con t0<undas de gasa y agua oxigenada diluida al 50% con
suero salino estéril. • Excesiva reacción fibrosa PO< paso de orina al tejido celular sub­
cutáneo.
• Cambie la sepiolrta en la bandeja del gato PO< papel de periódioo
en tiras. el objetivo es impedir q.¡e se obstruya accidentalmente la • Incontinencia fecal y urinaria por lesión nerviosa al disecar la i..retra
uretra. intrapélvica.
• Instaure el tratamiento antibiótico apropia.do. • Infecciones urinarias recicivantes debido a las alteraciones anató­
micas que se han creado Oa uretra más corta ofrece menor resis­
• Empleo de un collar isabelino para que el paciente no se lama la
tencia al paso de bacterias desde el exterior a la vejiga).
helida. evitándose su contaminación y la dehiscencia de los pun­
tos de sutura Consideramos que este collar isabelino lo debe lle­
var puesto el mayor tiempo posible, incluso semanas, si no oca­
siona demasiado estrés.

Evolución
• Se debe ir controlando periódicamente la evolución de la interven­
ción realizada.
• La limpieza de la zona debe ser lo más escrupulosa posible, se
debe controlar periódicamente que no exista infección en los
labios de la herida, y que no hay ningún tipo de obstrucción en el
nuevo orificio uretral (Figs. 17-20).

Fig. 16. La parle final del penese secciooa ypara contrdar la hemorragia efe los
Fig. 19. Resultado alos 3 meses de la inte1Vención QUillirgica. Fig. 20. Imagen de la uretrostomía perineal un año más tarde.
cuerpos cavernosos se realiza un punto recurrenterorizontal de todo el espesor

del pene con el mismo material de sutura.

En esta imagen se obse1Va el fin de la inte1Vención.

a pa te pos enor Uretra Enfermedad del tracto urinario distal felino

Índice de presentación Hace un año a "Pituso" se le realizó una uretrostomía


Dificultad técnica perineal como consecuencia de un FLUTD
recidivante. Durante este tiempo no ha vuelto a tener
problemas urinarios hasta la semana pasada.
En la exploración perineal se observa el cierre casi
completo de la uretrostomía (Fig.1).

Fig. 2 . Después de rasurar la zona perineal se puede apreciar el pec¡ueño orificio Fig. 3. Se realiza una inciSión cutánea en foona cuadrangular alrededor de la
uretral. Haga una sutura en bcisa de tabaco en el ano para evitar la salida de estenosis. yse disecan las adherencias del tejido suOCutáneo. Se debe realizar
heces durante lacirugía. una hemostasia cuidadosa de los vasos subcutáneos.

La uretrostomía se puede estenosar por una excesiva fibrosis de la


zona. Estó indicada una disección mós profunda cuando en la
Aspectos que se deben revisar en la técnica quirúrgica PéW'a minimi­ primera intervención no se hizo la correcta disección y
zar esta fibrosis: sección de los músculos isquiocavemosos e isquiouretro/es.

• Técnica quirúrgica aséptica.


• Correcta resección cutánea. Ver suturo del ano en bolsa de tabaco. • pág. 252
• Disección delicada de los tejidos.
• Irrigación continuada de los tejidos con suew fisiológico estéril.
• Desinserción muscular completa del pene de la peMs. t67
• Tipo de sutura empleada. Evitar los materiales multifilamento y los
absorbibles no sintéticos.
• Mínima lesión de los cuerpos cavernosos.
• Englobar peco tejido cutáneo en los puntos de sutt.ra de ta muco­
sa t.retral. Fig. 4. Oisec¡ue ligeramente et pene del tejido fibroso que lo rodea. No realice una

• No englobar tejido subcutáneo en la sutura. excesiva manipulación de estos tejidos.

Hay que ser lo menos traumático positle para reducir al mínimo la inflamación y

• Correcta colocación y distribución de tos puntos.


posterior fibrosis local.

• Vigilar ta infección postquirúrgica local, así como la posible infec­


ción subcostrácea.
• Evitar la excesiva manipulación de la zona, limpieza. comproba­
ción de la permeabilidad del conducto, o et empleo de catéteres
vesicales.
• Empleo de collar isabelino durante largos periodos de tiempo.

Técnica quirúrgica

Corrija las alteraciones eledrol11icas y metabólicas

presentes con anterioridad a la intervención quirúrgica.

Fig. t. El orificio uretral es difícil de identificar. Sólo se aprecian algun~ gotas de


Fig. 5. Con una tijera fina y aguda se ir.:ide la uretra,dorsalmente, para ampliar Ag. 6. La incisiónen la uretra se debe P'Qlongar hasta (JJ6 se pueda introwcir,
Olina mojaroo los pelos de la zona.
su abertura. sin resistencia, una pinza hemostática (mosquito) hasta su bisagra.
La estenosis no deja pasar ni la sonda uretral más fina.

a pa te pos enor Uretra Enfermedad del tracto urinario distal felino

A este gato se le realizó una uretrostomía perineal


hace tres semanas, pero desde hace siete días tiene
problemas para orinar, y le han aparecido diversas
lesiones cutáneas por las que sale orina (Fig. 1).

Fig. 7. Acontinuación se reseca la zona cutánea que está alrededor de la Fig. s. En este caso se haempleado material monofilamento no absorbible510. Este problema se ha producido por paso de la orina al tejido celular
estenosis, y se suturalamucosa uretral a45º en los cuatro ángulos del defecto subcutáneo debido a suturas mal colocadas, o a dehiscencias de
cutáneo. los puntos oomo consecuencia de unaexcesiva tensión de la uretra
hacia la cavidad pelviana.

No está indicado el sondaje de la


uretra en estos casos porla gran
permeabilidad de to uretra, y para
evitar lesiones e infecciones
innecesarias.

168 169

Evolución
Ag. 9. Resultado a los 3días de la inteivención. Rg. 1. l esiones cutáneas alrededor de la uretrostomia yen la cara fX)Sterior del Ag. 2. Para sducionar este problema se debe volver a suturar la mucosa uretral a
La evolucim es correcta Recuerde al propietario la muslo como consecuencia de una salida de orina en una uretrostomía realizada la piel. En el fondo del campo operatorio se obseiva uno de los puntos que se
necesidad de mantener al máximo las medidas hace tres semanas.
soltaron de lacirugíaanterior.
higiénicas.

El cuadro es más grave


si la orina drena hacia la
cavidad abdominal, ya que
se producirá uno peritonitis.

Fig. 3. En esta imagen se aprecia la disección de la uretra, por suzonadorsal, Ag. 4. Se deben seguir los mismos principios que se
Ag. 10. Alos diez dias de la intervencióo la para lapostenor sutura de la misma a lapiel. describieron en la técnica de la uretrostornía.
cicatrización es C01Tecta, se quitan los puntos de Asimismo,se deben reconstruir las lesiones
sutura yse da de alta al paciente. cutáneas con la sutura IJ!e prefiera para la piel.
Testículos
Neoplasias testiculares
Caso 1 Tumor de células de Sertoli
Caso 2 Seminoma y adenomas perianales
Caso 3 Tumor de células de Sertoli
y quistes prostáticos
Caso 4 Tumor de células de Leydig

Testículos ectópicos
Caso 1 Monorquídia abdominal
Caso 2 Monorquidia inguinal 171

Caso 3 Criptorquidia inguinal


Caso 4 Criptorquidia abdominal

Anillo inguinal

Fascia espermática

Cavidad vaginal
del testículo
Lesiones escrotales
La parte posterior Testículos Neoplasias

Neoplasias testiculares Neoplasias testiculares. Caso 1 / Tumor de células de Sertoli -

Índice de presenlaeión Dificultad técnica

Los tunares escrotales y testio.Aares son más frecuentes en penos


que en gatos. Se suelen dar en pacientes mayores de 10 años.
~ en los cnptórQuíóos, en los que aparecen a partir de los 6
• Precisamente los tumores testiculares con un
comportamiento más maligno, son los que más fácilmente
Se presenta a consulta un Aireda/e Terrier macho,
de nombre ·~nso", de 12 años de edad, por
años. B testículo criptórqtióo está aproximadamente veinte veces posan desopercib/dos por ser lntraabdominales. aumento del tamaño testicular. Se observa pérdida
más predispuesto a óesarrdla' h.rnores que el escrotal. Ante un cuadro de {eminizoci6n en un perro criptárquido
de pelo e hiperpigmentación compatible con un
debemos sospechar un tumor de Sertoli.
Los tres tipos de tlf110(es testiculares más frecuentes son: síndrome de feminización (Fig. 1).
• Tl.ITlQ( de células sustentaculares o de Sertd1.
• Tl.ITlQ( de células interSbciales o de Leydig.
Fig. 1. "Ansa' el día~ llegó a las coooultas del Hoopital. Se aprecian claramente
• Tl.ITlQ( de células germinales o seminoma.
alopecias en su capa.
La malignidad o benignidad de los tumores testiculares depende en Dependiendo del tipo de tumor puede presentarse un paciente asin­
gran medida de que el testículo sea escrotal o criptórquido. En prin­ tomático por haber detectado el propietario una masa en el testícu­
cipio los tumores que asientan en un testículo escrotal suelen ser lo. En otras ocasiones el tumor se descub<e al estudiar un caso de
benignos. Por el contrario, si el testículo es criptórquido. es más pro­ un paciente que nos lloga con síntomas de un transtomo endocrino, A la exploración se palpan ambos testícl.Aos
bable que la neoplasia sea maligna. Es por este motivo por to que es con cambios en el pelo, síndrome de feminización, tumores peria­ en el escroto. B testículo hipertrófico es el
importante detectar precozmente, con ocasión de las revisiones ruti­ nales o enrermedad prostátíca. derecho, estando el izquierdo atrófico {Fig.
ncrias del cachorro, la existencia de un testícl.Ao no escrotal, con el En la localización de los tumores de testículos criptórq.iidos, la radio­ 2). Se observan además otros signos de
fin de aconsejar una orquidectomía profitoctíca. logía y la eoografia suponen una gran ayuda La hematdogía puede remin1zación como ginecomastia e hipertro­
ester alterada en el caso del tumor do Sertc:ll. Puede darse una apla­ fia de los pezones (FIQ. 3). Se realiza una
sía medtJarcomo oonsecuencia de la produooi6n tumoral de estró­ punción y la aspiración con aguja fina de la

• Explore siempre el escroto de los cochorros y. en caso de


criptorquidia, recomiende al propietorio la arquidedomía
genos, que se manfiesta por inma. trombocitoperl¡¡ y IEu:operla.

Síntomas del síndrome de feminización


mama. La otología resuta congruente con
un adenocatinoma de mama Dada la sir­
tomatolo¡ja, se sospecha un tumor de
172 173
profil6ctlca. Sertoi a pe5al" de su locajjzación escro~.
• Redxx:ión de la libido.
poco habitual para este bpO de neoplasia.
• Machos que atraen a otros machos.
• F~ del levantariento de la pata en et moriento de orinar.
Las metástasis son rcras en este bpo de neoplasias. ClSldo se P'O­ • Mucosas pálidas por ma-iífestación de anema y supresión de la
du::en, lo hacen ta-cíamente y de rorrna prelerente en ganglios linfá­ médJaósea flg. El pro¡jetaro roca tJl irnemen10 611 el
ticos lun'lbares, péMcos e inguí:1ales. Son raras las metástasis en tamaro test~r. f'J ~la zooa escrotal
• Alopecia sinétnca bilateral que comenza en los flancos y periné.
pulmón e hígado. apreoaroos cp.ie era debiOO al aumento del testículo
• Hipe«pigmentac1ón cutánea OOrechl
Los tumores de células intersticiales o de Leydig, son benignos
y suelen producir testosterona Que inrluye en la aparición de adeno­ • Gineoornastia
mas perianales, hernias perineales e tlpertrofia prostática benigna. • Prepucio péndulo.
Son más frecuentes en testículos escrot~es. a pesar de lo cual pue­ • Prostatomegalia.
den pasar desapercibidos a la palpación dado su pequeño tamaño
• Quistes o abscesos prostáticos.
(1 o 2 cm de diámetro) y su textura blanda, similar al parénquima
testicular. Se trata de tumores bien encapsulados. que crecen en el
La orquidectomia de ambos testículos es el único tratamiento prác­
interior testiculcr sin hacer relieve en la superficie y su color es ama­
tico y eficaz para tratar los tumores testiculares. La cirugía suele ser
rino-naranja.
curativa, dada la tardanza con que estos tipos de tumores generan
Los tumores de Sertoli proceden de las células de sostén del testí­
metástasis. El síndrome de lerninización y la aplasía medular propios
ctJo. Su capacidad de metástasis es mayor que la del resto de los
de los tumores de Sertoli suelen desaparecer en 2 o 3 semanas.
tumores testiculares. Suelen producir estrógenos, que inducen
metaplasía esccrnosa de la próstata y sus oonsecuencias: quistes y
abscesos iltra y pa-aprostáticos, síndrome de feminización y rnielo­
toxicidad. 8 ll.ITlQ( de Sertd1 es más frecuente en los testículos crip­
tórQuidos. t.:nto 1ílQUnales oomo abdominales. Es un ll.ITlQ( firme a
la palpación, mlitiloblAado, que suele hacer reóel.'e en la superiicie
testicular y de cdor !115.
Los seminomas proceden de las cétJtas germinales. No suelen d:r
metástasis y raramente dan síntomas de desajuste hormonal. Se 1 ~ de la a.teracitJn de la') mimas halada
dan tallo en lestÍClAOS escrotales como CliptórQuidos. wrantela~.
La parte posterior Testículos Neoplasias

Fig. 6. Visualización del plexo pampiniforme,


conducto deferente con su vascularízación y
músculo cremáster.

174 175

Fig. 4. En este caso se prepara al paciente para una O<Quiclectomía escrotal puesto C1J0 existe la posibilidad de que haya adherencias entre el testículo tumoral y el escroto.
En cualquier caso, puede resultar difícil movilizar hastala región preescrotal un testículo hipertrófico. Obsérvese la diferenciade tamaño entre ambos testículos, tumoral y
atrófico. Rg. 7. Desinserción del músclAocremáster y pliegue
de la túnica vaginal del polo caudal del testículo.

Cuando exista patología testicular.


ya sea inflamatoria, infecciosa
oneop/6sico, se recomienda la
orquidectomía.

Ver orquidectomío. ~ pág. 264

Fig. s. Estáindicada laextirpación de amoos


testiculos, que se realizará a través de una incisión
única de la piel en la base del eSCfoto. Por lo demás,
la técnica quirúrgica es idéntica ala castración Fig. s. Realización de una ventana entre plexo
preescrotal descota. En la imagen el aoordaje del pampiniforme y ccnducto deferente, con ayuda de
testiculo tumoral en laque se aprecian, ya incididas. una ~nza mosquito, para la colocación de ligaduras
todas las capas del escroto. iooepemi entes.
La parte posterior Testículos Neoplasias

Fig. 12. Sutura de la incisión cutánea con material


Fig. 9. Ligadura con material absorbible del no absorbible, nylon, en puntos entrecorta00s
conducto deferente juntocon su vascularización. simples.

176 177

Fig. 10. Ligadura del plexo pamJ)niforme con et


mismo material y seccionar las estructuras ligadas.
colocanoo una pinza en el extremo proxímal al
testiculo con o~eto de evitar et sangrado eo el
momento del corte.

Fig. 13. Detallede los testirulos extirpados. Ala derecha ele la imágen el testirulo tumCX"al. El exámen anatomopatológico confirmó la sospecha de que la neoplasia era un
tumor ele Sert~i.
Fig. 11. Orquidectoma del testirulo atrófico através

ele la misma incisiónque el tum<X"al.

La parte posterior Testículos Neoplasias

Dificultad técnica

Se presenta a consulta un Fox Terrier den años,


macho por una tumoración en la zona perianal
que sangra. El exámen citológico de la masa es
compatible con un adenoma. Se decide extirpar
el tumor y, además, realizar una orquidectomía
bilateral, dada la hormonodependencia de los
adenomas perianales (Rgs. 1 y 2).
Fig. i. ' Rex• una vez anestesiaoo para la doble intervenciál quirúrgica.
Fig. 4. Una vez extirpaoo el tumor yconseguida una
correcta hemostasia, se procede al cierre de la
hei1da quirúrgica.

Los adenomas perianales se

presentan casi exclusivamente en

machos enteros, puesto que los

niveles de testosterona condicionan

su desarrollo. Por este motivo la

orquidectomía bilateral forma parte

obligado de su tratamiento para

reducir la incidencia de aparición de

nuevas neoplasias.

178 179

Fig. 5. Aspecto de los testículos. Se aprecia la gran


diferencia de tamaño entre ambos, lo que nos hace
sospechar <iie podemos encontramos ante un
tumor testicular productor de hormonas. La atrofia
Fig. 2 . Aspecto de la tumoraciál perianal del testículo contralateral se debería a la inhibición
inmediatamente antes de la cirugía. Se le ha de la FSH hipofisaJia producida por los altos niveles
realizado ya la sutura en bolsa de tabaco del ano. de hOITTlonas generados por el testículo tumoral.

Versutura del ;¡;;;-i


en bolsa de tabaco.
pág.252 Verorquidectomía. ~ pág. 264

Fig. 3. Por disección roma se realiza la resección


Fig. 6. Detalle quirúrgico de la or(JJÍdectomía del
Quirúrgica del tumor peñanaL
lesliculo hipertrófico.
La parte posterior Testículos Neoplasias

Neoplasias testiculares. Caso 3 / Tumor de células de Sertoli y quistes prostáticos

Se presenta a consulta un Col/ie, macho, de 6 años


de edad, con alopecia de 6 meses de evolución.
El dueño indica que los otros machos intentan la
monta con su perro.

A la exploración se observa que la alopecia es troncular y simétrica


y se acompaña de otros síntomas como la hiperpigmentación y la
ginecomastia. A la palpación apreciamos una gran masa abdominal.
Fig. 1. "Branct( el día La exploración del escroto noo revela una criptorquidia unilateral y un
Fig. 7. Extirpacim del testículo atróflOO. Fig. 8. TesOCIJlos extirpados. Nótese ta diferencia de tamaño y estructura entre que acudió por testíct.fo escrotal atrófico. En base a todos estos datos se sospecha
ambos testiculos. pnmera vez aconsulta de la presencia de un tumor de Sertoli en el testículo abdominal. que
por presentar una constituiría la gran masa palpada y justificaría la sintomatología des­
alopecia grave. crita (Figs. 1-4).

Ante una alopecia en un perro


cript6rquido, debemos considerar el
tumor de Sertoli como ta hipótesis
diagnóstica más probable.

180 181

Fig. 2 . Se aprecia una hiperpigmentacioo de las


wnas alopécicas tronculares.

Fig. 3. La alopecia se extiendetambién al cuello del


paciente.
Fig. 9. El estudio anatomopatológico oonfirmó Que el testículo hipertrófico era tumoral. Se trataba de un seminoma productor de hormonas, algo poco habitual en este tipo
ele neoplasias. El examen 001 tumor perianal coofirmó que era un adenoma. Fig. 4. Obsérvese la alopecia, lahiperpigmentación
en la zona perineal y la presencia de un solo
testiculo escrotal.
La parte posterior
Testículos Neoplasias

Fig. s. Para completar el diagnóstico se realiza ooa


pñmera radiografía en vacío en la que aparece una
masa que ocupagran parte del abdomen. Podría Fig. 9. Se decide realizar una laparotomía
corresponder aun testículo tumoral, pero tambiéna exploratoria enla que encontramos el testículo
la vejiga, auna hipertrofia prostática oa unquiste criptórquido con el aspectocaracteóstico de un
paraprostátíoo. tumor de Sertoli: grande, multilobulado y firme al
tacto.Su localízacim y tamaño coinciden con la
masa hallada m<ls cranealmente en la radiograffa.

Ver laparotomía infraumbi/ical. rt pdg. 282

182 183

Fig. 6. Al objeto de identíficar lavejiga realizamos un


neumocistograma en el CJJe se aprecia la vejiga
desplazada oorsalmente. Ventralmenteseguimos
viendo la masa ycranealmente aella nos aparece
otra formación redonda de menor tamaro. Se Fig. 10. Btestículo criptórc¡uido se extirpa
descarta de este modo que lamasa corresponda a quirúrgicamente junto con unos quistes encontrados
la vejiga. en el conductodeferente.

Fig. 11. La masa identificada en la rroiografia,


de mayor tamañoy más caudal resultó ser un quiste
Fig. 7. Una ecografia nos permite afirmar quela gran masa es una cavidad Fig. 8. La masa más craneal y pequMa es hiperecogénica, y podria corresponder para¡:¡rostático actyacente ala vejiga, que se visualiza
tabicada llena de líquido. Esto parece corresporder aun quiste paraprostático. al tumor testicular. l.)la de las coosecuencias de la producciOO de estrógenos p:¡r ala derecha de esta imagen. Se procedió ala
un tumor de Sertolies el desarrollo de quistes prostátioos yparaprostáticos. resección quirúrgica y posteñor marsupializaciál de
su implootación en la próstata.
La parte posterior
Testículos Neoplasias

Al resecar un tumor de Sertoli


intraabdominal se debe revisar
siempre la próstata para descartar
Dificultad técnica
posibles quistes o abscesos.

Se presenta a consulta un perro mestizo, macho,


entero, de 10 años de edad, por una tumoración que
sangra periódicamente, localizada en la zona peria­
nal con una evolución de varios meses. (Fig. 1).
Fig. 12. Piezas anatómicas: a la izquierda el testículo
tumoral, a la oorecha, arriba, el testículo escrotal
atrófico yabajo los dos quistes ~ aparecieroo en
Fig. 1. Aspecto 001
et conducto deferente. La anatomíapatológica
periné elel paciente
confirmó que se trataba efectivamente oo un tumor
durante la preparacioo
ele SertaL
quirúrgica en el que se
F<>ID realizada por el Or. ~sé l'<\lllllio Garciade Jallo Ciércolas,
Prdesor r11u1ardel Oepar1amento de Palolog~ Animal de la
obseiva et tumor
FOOJllad deVelerin:Jia de Zllra!J01A. perianal.

A fa exploración se encuentran ambos tes·


ticulos en el escroto, apreciándose una
notable diferencia de tamaño entre ambos
(Fig. 2). Blo nos hace sospechar la presen­
cia de un tumor testicular.
El diagnóstico citológico de la tumoración
perianal revela que se trata de lXl adenoma
Dada la relación de hormonodependencia
de este tipo de tumor con los andrógenos
testiculares, se decide realizar la orquidec­
184 tomia bilateral en el mismo acto quirúrgico 185

que la resección tumoral.

Fig. 2. La preseroa de un testículo hipertróflCO.


juntocon la del adenoma perianal, nos hace pensar
que se trata ele un tumor oo células intersticiales o
de Leydig que, por otra parte, son los tumores más
Fig. 13. Cuatro meses después ele la cirugía. frecuentes en et testiculo escrotal y característicos
'Brandy" tiene muy buen aspecto yha gana::lo peso. de pacientes ele avanzada edad.

Fig. 14. Nótese el crecimiento del pelo. La zona


afeitada en los flancos corresponoo ala preparación
del paciente para un cootrol ecográfico de la Fig. 3. Se realiza una disección roma elel tumor
próstata, que apareció n0<mal. peílanat.
La parte posterior Testículos Neoplasias

Los tumores perionales son

carácterísticas de perros mayores y la

mayoría son hormanodependientes

por lo que se debe realizar siempre

una arquidectomía bilateral.

Frecuentemente, al realizar la

castración se descubre un tumor de

Leydig que puede incluso haber

pasado desapercibida a la

exploración dada su consistencia,

similar a la del parénquima testicular,

y que no hoce relieve en lo superficie.

Fig. 4. Aspecto de la zona una vez resecadoel tumor


yantes del cierre de la hericla (1Jinírgica.

186 187

Fig. s. La orquidectomíase realiza de la fCJma


habitual, identificando las estructuras del oordón
espermático yligándolas por separado.

pág.265

Fig. 6. Aspecto de los dos testículos.Obsérvese la Fig. 7. El diagnóstico anatomopatológico ooofirmó la

diferencia de tamaño entre amoos. soopecha de un tumor de células de Leydig.

La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

Testículos ectópicos Testículos ectópicos. Caso 1 / Monorquidia abdominal

Índice de presentación O Se presenta a consulta un Basset macho de 6 años


de edad (Fig. 1) con un cuadro recidivante de dolor
El testículo, corno es sabido, se forma en el interior de la cavidad Los tratamientos médicos y quirúrgicos para trasladar el testículo abdominal. A la exploración se aprecia la presencia
abdominal, descendiendo a su localización definitiva en et escroto ectópico al escroto dan malos resultados, lo cual, unido a la mayar
de un solo testículo en la bolsa escrotal.
poco después del nacimiento. tanto en et perro corno en et gato. incidencia de tumores y torsiones en este tipo de testículo. justifica la
La criptorqt.idia es consecuencia de un fallo en et descenso de uno orquidectomía profiláctica del órgano ectópico. Clásicamente se
o de ambos testículos hacia et escroto. Los estudios acerca de su recomienda la orquidectomía bilateral con el fin de impedir la trasmi­ Se realiza una radiografia lateral del abdomen en la que se aprecia
incidencia proporcionan datos muy varíables, que oscilan entre el 1 sión genétiea del defecto una masa del tamaño de una mandarina en el abdomen caudal.
y el 10% de los perros, según las fuentes. Los testículos preescrotales y los inguinales se extirpan incidiendo Esta masa era fácilmente palpable y podría ser compatible, dado su
La criptorquidia es hereditaría, aunque sus bases genétieas no están directamente sobre ellos. En el caso de que et testículo sea abdomi­ tamaño, con un testículo intraabdorninal tumoral, por lo que se deci­
nada claras. La incidencia varía con las razas y es casi tres veces nal, tras realizar una laparotomía infraumbilical, es preciso localizar1o. de realizar una laparotomía (Fig. 2).
mayor en las pequef\as que en las medianas o grandes. Es espe­ Esto no siempre es fácil. Si el testículo es atrófico podemos servir­ Fig. 1 . "Rayo" et día que acució al Hospital. El dolor atxlominal lo había vuelto un La ecograña de la zona nos permitió medir la masa, que presentaba
cialmente frecuente en el Yorkshire Terrier y en el Schnauzer nos de alguna referencia anatómica para localizalo. Lo más sencillo poco agresivo yhubo que cdocarleun bozal para poder explorarlo. un patrón compatible con un tumor testicular de Sertoli (Fig. 3).
Miniatura. Dentro de las razas grandes. se ve afectado con mayor es seguir et conducto deferente desde la próstata hasta el testículo.
frecuencia et Boxer. La mayoría de las veces et testículo abdominal se identificará al lado
El diagnóstico defiritivo de la criptorquidia se realiza a partir de los de la vejiga.
3-6 meses. dependiendo de la raza. En los cachorros, el pequef\o
tamaño de los testículos hace dificil su palpación, en especial en ani­
En los pacientes criptórquidos, los
males obesos o en aquéllos en los que el testículo se mueve libre­
cuadros de dolor abdominal
mente entre escroto y et canal inguinal. Además, en estas edades Levantando la vejiga visualizaremos los conductos deferentes.
episódicos pueden deberse a
todavía es posible el descenso al escroto. El correspondiente al testículo escroto/ se dirige al anillo
torsiones testiculares reversibles.
El testículo ectópico puede hallarse en posición preescrotal, inguinal inguinal interno, mientras que el otro nos guiar6 hasta el
Dada la alta posibilidad de que el
o abdominal. Estadísticamente. lo más frecuente es la criptorquidia testículo criptórquido.
paciente evolucione hacia un
abdominal y. en concreto, la unilateral del testículo derecho. Un diag­
abdomen agudo es recomendable
nóstico completo de la ectopia testicular incluye su localización
realizar la arquidectomía lo antes
exacta. En caso de atrofia esto puede resultcw- dificultoso. En gene­
posible.
188 ral, el testículo ectópico es menor que el escrotal. a meros que sea Ante cualquier sospecha y de cara al pronóstico. es conveniente
tumoral o esté enfermo. Es preciso explorar minuciosamente la zona realizar el análisis anatomopatológico de los testículos. No obstante,
preescrotal y la del canal inguinal. Los testículos intraabdominales no dada la baja malignidad de las neoplasias testiculares. et pronóstico
suelen ser palpables. La ecograffa abdominal es una gran ayuda del paciente criptórquido tras la cirugía es bueno incluso si el testí­
para confirmar la presencia de un testículo en el abdomen. culo resultara tumoral.

Fig. 2. Radiografíadel abdomen del paciente que


nos permitió sospechar la presencia de un testículo
Antes de decidirse a realizar una laparotomía, debemos estar
criptórquido y tumoral.
seguros de que el testículo no se encuentre en la zona
inguinal. Ello exige una detenida exploración.

Detbido a que los testícoos ectópicos están sometidos a una mayor


temperatura, fracasa tanto el desarrollo del epitelio germinativo
como la producción de espermatozoides. Las células intersticiales
sin embargo, son funcionales y la producción de andrógenos casi
normal, por lo que se mantienen las características sexuales secun­
darias, incluso en la criptorquidia bilateral.
Los testícúos ectópioos, sobre todo si son intraabdominales, desarro­
llan tumores y torsiones con mucha maycr frecuencia que los escrota­
les. La torsión es fruto de la mayor movilidad del testícoo dentro del
abdomen. El riesgo de q.Je se origine un tumor es unas veinte veces
mayor que el de los testículos escrotales. Además, los testiculos crip­
tórquidos desarrollan neoplasias a una edad oorrparativamente más
temprana. En caso de que se trate de un tumor de Sertoli, los signos
de feminización aparecen con más frecuencia si et testículo afectado Fig. 3. Ecograficamente pudimos mecir la masa
es ectópieo. aboominal.
La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

Fig. 6. Se procede al cierre de la herida Quirúrgica


por planos.

Rg. 7. Se realiza la orquidectomía del testículo


escrotal.

Fig. 4. Dada la localización caudal de la masa,se


realiza una laparotomía media infraumbilical. Verorquidectomía. ~ pág. 264
Tal ycomo se sospechaba, se trata de un testículo
criptórQUido de gran tamaño, Que hallamos aun
lado de la vejiga.

Ver laparotomra infraumbilical. ~ p6g. 282

Fig. 5. Se realiza la orquidectomía del testiculo Fig. s. AspectoClel testículo tumoral. El diagnóstico
intraabdominal de la foona habitual, ligaooo y anatomopatológico nos confirma la sospechadeQue
seccionandolas estructuras del cordón espermático. se trataba de un tumor de Sertoli.
La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

Dificultad técnica El propietario señala que el animal ha sido diagnosticado como crip­
tórquido derecho en las revisiones nJtinarias realizadas con el fin de
vacunarlo. Su veterinario le indicó que era conveniente castrarte a
Se presenta a la consulta un cachorro Cockermacho partir de los 6 meses. A la exploración se aprecia efectivamente, un
solo testículo escrotal (Fig. 2). El testículo ectópioo se encuentra en
de 7 meses de edad (Fig. 1).
la región inguinal derecha y presenta un tamaño algo menor que el
escrotal (Fig. 3). Puesto que por la edad del animal ya no es previsi­
ble el descenso del testículo, se considera llegado el momento de
realizar t:11a orquidectornia bilateral.

La palpación de los testículos debe


formar parte de la exploración
rutinaria del cachorro que se realiza
al tiempo de la vacunación. En caso
de detectar una criptorquidia, se hace
un seguimiento en las sucesivas
visitas. Si la ectopia persiste más allá
de los 6 meses, se aconseja la
orquidectomía profiláctica.
193

Tig. 1. Nuestropaciente una vez premedicado el día


de la intefvención quirúrgica.

Fig. 3. En la palpación encontramos el testiculo en la


zona inguinal derecha

Rg. 4. Una vez preparado el camix> quirúrgico. se


incide directamente lapiel con bisturí sobreet
Fig. 2. En el saoo escrotal sólo enoontramos un tesliculo ectópico, manteniéndolo fijo entre los
testiculo. dedos pulgar eín(Jce con laotra mano.
La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

Testículos ectópicos. Caso 3 / Criptorquidia inguinal

Dificultad técnica Se presenta a consulta un Caniche macho de 1 año


de edad, por haber detectado el propietario la
ausencia de ambos testículos. A la exploración se
aprecia además la ausencia de la bolsa escrotal,
característica de las criptorquidias bilaterales
(Fig. 1). Tras una meticulosa exploración de
la región inguinal, se localizan en ella ambos
La probabilidad de que un testículo cript6rquido degenere en testículos (Fig. 2). Para evitar la posible
una neoplasia es hasta veinte veces mayor que la del testículo
degeneración tumoral de los testículos,
escrotal y aparece en pacientes m6s jóvenes, a partir de las 6
Fig. 5. Me<liante una suave presiónse extertoriza el testículoectópico por la Fig. 6. Se disecanyligande la manera habitual las diferentes estructuras del meses de edad. se aconseja al propietario la orquidectomía
incisión cutánea. rudón espermático. bilateral.

194 195

fig. 7. Acontinuación se realiza la orquiclectomíadel

testiculo escrotal.
fig. " Nuestro paciente presenta criptorquidia bilateral acompañada ele ausencia Fig.2. Ambos testículos se encuentran eo la zona inguinal.
ele saco escrotal.
1 Ver orquidecto_m_ia_
. __pd_g_.2_64...

Fig. s. Para terminar se cierran las dos heridas fig. 3. Se realiza una incisión cutánea sobre el testículo. Fig. 4. En esta región se halla amenudo una gran cantidad de grasa subcutánea
quirúrgicas mediante puntos entrecortados con que exige una disección roma paralocalizar el testiculo ectópico.
material no absorbibleefe 2/0 o 310.
La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

[Dificultad técnica -=-=rJ


Se presenta a la consulta un
perro de raza Golden, macho, de
4 años de edad, al que se le ha
diagnosticado una criptorquidia
bilateral (Fig. 1). Se aconseja a su
propietario una orquidectomía
preventiva.
Fig. 1 . "Yako" el día que nosviSitó por primera vez. Fig. 2. Los testículos no se oo:uentranni en la zona
escrotal ni en la inguinal.
se
Fig. 5. exteóoriza el testículo toclavía envuelto eo
la túnica vaginal.

En la exploración de la zona inguinal y pre·


escrotal no se encuentran bs testiculos, por
lo que se decide buscarlos en el abdomen
mediante ecografia (Fig. 2). Se localizCMl en
la zona caudal del abdomen. uno a cada
lado de la vejiga y dorsalmente a ella.

197

se
Fig. 3. realiza unalaparotomíamedia
Fig. 6. se realiza la orquiclectomía ligando las infraumbilical tras una incisión cutánea parapeoiana.
estructuras vasculares y el conducto deferente. una vez enel interior del abdomen se visualiza en
se repiteel procedimientoen el otro testiculo. primer término lavejiga.

pág.264 Ver laparotomía infraumbilical. ~ pág. 282

Fig. 4. Al reclinar cauclalmente la vejiga


Fig. 7. ftspecto de las heridas ciiirúfgicas al acabar encontramos el conducto deferentederecho que se
la inteNención. dirige hacia la próslata.
La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

Fig. 7. La fascia espermática limita la extenorización


del órgano por lo que, en pñmer lugar, procooemos
asu ligawra y sección.

199

Rg. a. Se p-ocede aligar doblemente el ~xo


pampinibme antes deseociooarlo.

Fig. 5. Siguienoo el conwcto deferente llegamos al


testiculo ylo exterioózamos.

Fig. 6. Encontramos un testículo unido por el corooo


espermático.Diferenciamos la fasciaespermática
queenwelve al resto ele estructuras: conducto
cleferente, plexo pampiniforme, arteria testicular Fig. 9. Asímismo, se liga ysecciona el conducto
y músrulo cremaster. deferente junto consu vasculanzación.
La parte posterior Testículos Ectopias testiculares

Fig. 10. Con el fin de hallar el otro testiculo,


buscamos su conductodeferente al otro 1000 de la
vejiga.

200 Todo perro criptórquido debería ser 201


castrado lo antes posible y. en

cualquier caso, antes de cumplir los

6años.

Fig. 13. El tamaño yaspecto de ambos testiculoo es totalmente nonnal.

Fig. '1. Se visualiza el conducto deferente entre la

vejiga y el coloo.

Fig. 12. Traccionando suavemente del conducto


deferente se exterlonza el testiculo yse procede
como coo el contralateral.
La parte posterior Testículos Lesiones escrotales

Índice depresentació~
Dificultad técnica
m
Se presenta a la consulta un PastorAlemán, macho,
de 6 años de edad. El propietario señala que el
animal fue mordido hace una semana en los
testículos y acude a la consulta por apreciar una
fuerte inflamación en la zona. A la exploración se
aprecian varias heridas infectadas en el escroto.
En el interior de una de ellas se observan larvas
Las lesiones escrotales y testiculares extensas obligan a
de la mosca de la carne. Se decide realizar una realizar una orquidectomía con ablación del escroto.
orquidectomía con ablación del escroto.

202 203

Fig. 1. El paciente antes de ser anesteSiado al objeto


de intelvenirlo quirúrgicamente.

Fig. 3. Detalle de la zona lesiooada. Se apreciM varias he<idas infectadas. En ef inte<ior de una de ellas se observan larvas de la mosca de la carne.

Fig. 2 . El escroto presenta un aspecto muy


inflamado y coo varias ulceraciooes.
La parte posterior Testículos Lesiones escrotales

Fig. 7. Tras seccionar las estructuras clel cordón


Fig. 4• Para realizar la orquidectomía con ablación espermático se retira el escroto junto con los
clel escroto se hace una incisión elíptica en su base. testículas.

Ver orquidedomío
con oblación escrotal.

204 205

Fig. 5. Se disecan los tejidos hasta viSualizar ambos

cordones espermátioos.

Fig. s. Para terminar la intervención se proo:de acerrar la hefida quirúrgica por planas.
Fig. 6. Tras abrir latúnica vaginal se proo:de a la
ligadura de las clistintas estructuras del cordón
espermático.
Prepucio-pene

Fimosis
Caso 1 Apertura-ampliación del orificio prepucial
Caso 2 Reconstrucción del orificio prepucial

Parafimosis

Heridas

Caso 1 Heridas del prepucio

Caso 2 Heridas del pene (zona distal)

Caso 3 Heridas del pene (zona perineal)

Tumores
Caso 1 Tratamiento médico
Caso 2 Tratamiento quirúrgico

Prolapso de mucosa uretral


207

Hipospadia
La parte posterior Prepucio - Pene Fimosis

Fimosis Fimosis. Caso 1 /Apertura-ampliación del orificio prepucial


Índice de presentación •

La fimosis es la imposi)idad de exteriorizacól del pene. Se puede


deber a causas congéritas pa falta de OOficio prepuca (no es fre­
cuente), o a causas adqo.jridas tras lesiCWles trallláticas y~-
Dificultad té<nica

- Se presenta en el hospital un cachorro, mestizo,


de 4 meses de edad, con un cuadro de imperforación
prepucial. La orina salía al exterior a través
de diferentes orificios localizados en la zona.
81 tocbs estos casos hay ófioJtad en la micción, la cma sale a1 exte­
rior PCt U10 o vaios peQU(flos criflcioo locaiizrooo al fnal del pepx:io.
La retención de olina en el intesia< del prepucio puede causar inita­ Técnica quirúrgica
ción, bai<rq)OStitis y dolor. AsimismO. el paciente tiene ~OSibiidad
La intervención se basa en la creación de un nuevo olificio prepucial

para copular. Fig. 1. Se prepara el (Figs. 1-6).

El tratamiento quirúrgico se basa en la incisión triangular sobre el campo operatorio de Después se procede a la orQUidectomía bilateral para evitar una

teórico orificio prepucial, llegando hasta la mucosa del mismo. Se Fig. 1. ' Rayas" es un gato comin m<dlo CJJC tlcoo áficultad para orinar, y el fOITTia estándar. posible parafimosis cuando el animal sea adulto.

reseca la menor cantidad posible de piel, asegurándonos de no propielalio comenta que ·sus partes" están muy inflamadas. Depilación ylavado
de¡ar al descubierto el pene. A continuación se sutura la mucosa ¡xeoperat~io de la Verorqu/dectomía. • p6g. 264
directamente a la piel con material monofilamento (Fig. 3). zona.

En los cosos congénitos


recomiende lo orquldectomfo.

El molerlo/ debe ser


monofilomento, sintético y
absorbible si los puntos no se von
o quitor por lo /ocollzocl6n de los
mismos o por el cor6der del

2o8 209

fig. 2 En la exploraciOO de la ZOOél se obsefva un fig.2 En este pacier«e se a¡Jecia la auseroa de Fig. 3. 81 estl inagen se observa la zona cut.na Fig. 4 A 001111UDón se sun.ra 001 ma!Efial
onfoo IJepooal mw peQUel'o. adicio Pfll1lJOOl llOllM. resocada, así romo la ideritilicOOón de la muoo;a nmOOlamento 6IO la moo>sa del ¡xepu:i:J a la Jlel
Corro conseruenCia de la retención de onoa se ha Se del mila con un ronJaOO' negro la 2lll13 cutánea IJBIIDal y el pene. con PlJllDS <lscontirUJS.
producido una balanojlostitis, dificultérldo aún más que se va aresec<r, yque es la QUe contiene los 8 sorda¡e de la urelta permle Identificar
la mlCCiOn. lrayoctos fistulosos IX>' los que sale la orina. continuamente el pene.

Posibles complicaciones
• Persistencia de la fimosis por resección
cutánea insuficiente.
• Exposición del glande por excesiva
resección cutánea, o por realizarla en la
zona ventral.

No reseque demosiodo piel en el

orificio prepucio/ poro evitor uno

posible poro{imosis iatrogénico.

fig. 3 AesUtado de la in1lll'Vefldón (9 cJas de Fig. s. Fira1lllda la suttra del orifü> IJepucial se Fig. 6. ftJ carur la reconstrucción del ormoo
postOl)lratakl) en la que se lll éDerto de 1UMJ el COllbrUI 001 el oerre de la piel,~ el IJepwal y la SU1Ura de la ¡;ei se retira la oorm
orifiClo IJepwal en un ~le que súria firoosas msmo matel1a. unnaria.
poo1raum\oca.
L pa e os rior Prepucio - Pene Fimosis

Este caso corresponde a un cachorro de Pastor


Alemán de 4 meses de edad que presentaba
dificultad para orinar, asícomo inflamación
del prepucio (Fig.1).

En la exploración se observa la ausencia de una abertura prepucial En este caso se ha empleado oomo material de sutura un hilo multi­
normal, y un pequeño orificio (en la zona despigmentada) por el que filarnento. Pero recuerde que es preferible emplear un material
sale la orina (Ftg . 2). monofilamento para evitar el efecto capilar (que poseen los multifila­
La intervención quirurgica se basa en la reconstrucción del orificio mento), y así reducir las infecciones e írritaciones secundarias oca­
prepucial suturando la mucosa del mismo directamente a la piel Fig.1. En esta imagen se ooserva lainflamación del prepucio como consecuencia sionadas por dicho efecto.
(Fig. 3). de la retención de orina en su interior.

210 211

Fig. 2. Ausencia de un desarrollo rormal del ¡repucio. Existelilazooa sinpigmento y en su centro unpequeño ortficio. Rg. 3. La inteNención Quirúrgica se basa enla resección de la piel donde en principio debería localizatse laapertura prepucial.
La mucosa del prepucio se suturadirectamente a lapiel del mismo.
La parte posterior Prepucio - Pene / Parafimosis

Parafimosis
Índice de presentación

Tratamiento
La parafimosis se debe a la imposibilidad que tiene el paciente para
Para desinflamar el pene se puede aplicar azúcar directamente
Otra posible causa de exteriorización del pene puede ser la rotura

retraer el pene dentro del prepucio.


Lo hiperactividad sexual es uno causa {recuente de sob<e la zona, así como soluciones hiperosmolares.
traumática del hueso peniano (Figs. 3 y 4).

Es más frecuente que aparezca tras el coito o la masturbación,


parafimasis, principalmente en animales jóvenes. A continuación se limpia el pene y el prepucio con una solución anti­
Si el desplazamiento de los fragmentos es pequeño se puede resol­

sobre todo en animales jóvenes. También puede aparecer en gatos


séptica jabonosa, aplicándose a continuación lubricantes para facili­
ver mediante sondaje uretral mientras consolida la fractura.

de pelo largo en los que el pene queda •atrapado" por los pelos de
Recomiende la castración en casas de hiperactividad tar su reintroducción.
Si la fractura ha producido una lesión importante de la uretra, oomo

la zona.
sexual para evitar la recidiva. También puede estar indicada la apertura quirúrgica del orificio pre­
es este caso, estaría indicada la amputación parcial del pene, y posi­

También se observa como consecuencia de traumatismos, infeccio­


pucial para facilitar la introducción del pene.
blemente la realización de una uretrostomía escrotal.

nes o priapismo (por lesiones espinales o infecciones genitourinarias).

El paciente requiere sedación o incluso anestesio poro poder


ser explorado.

212 213

Fig. 1. El pene exteriorizado se congestiooa con lo


que se dificultasu reintroducción en el prepucio.
El pelode la zona puede cificultar esta retracción. Rg. 3. Este ~ciente ha sufrido un traumatismo
Estecuadro se agrava ¡xirque el animal se está aboomioal intenso quele ha producK:lo un cuadro de
lamieooo frecuentemente la zooa. aboomen aguoo y exteriorización del pene.

Fig. 2. Las lesiones del pene se van agravando con


el tiem¡xi. El pene se reseca, se inflama, el animal
se autolesionay la aparición de zonas necrosadas Rg. 4. En la radiografía se aprecia la roturadel
pueoo ser rápida. hueso peniano.
L pa e os rior
Prepucio - Pene Heridas

Índice de presentación Las heridas del prepucio y del pene se producen Índice de presentación

como consecuencia de peleas, enganches al saltar Dificultad técnica

vallas, accidentes automovilísticos, heridas por Las heridas del pene se caracterizan por la hemorragia, que no

disparos o por arma blanca, o bien tras la cópula. siempre es contirua, pero sí es bastante importante.

Las heridas superficiales de poca extensión se pueden tratar médi­

camente. aplicando pomadas antibióticas. cicatrizmdo por segunda

intención (Fíg. 3).

Las heridas más mporta'ltes y a::¡uéllas que sangran profusamente se

deben sutura' empleándose material absorbible del cabe adecuado.

Las heridas del prepucio se deben tratar como el resto de las heri· Fig. 3. Las heridas superficiales no producen una excesiva hemorra­
das cutáneas (Figs. 1 y 2). Se debe evitar la erección en el paciente administrándole gia. y se pueden tratar aplicando tópicamente antisépticos locales y
sedantes durante el periodo de cicatrizaci6n. pomadas antibióticas.

214 215

Fig. 4. Las heridas del pene se suturan recoostruyerido los tejidos lacerados
empleándose puntos discontinuos de material absorbible.

Las heridas en el glande del pene son relativamente


frecuentes al finalizar la c6pula, asícomo en la masturbación
compulsiva (Ags. 1¡ y 5). Otras casas pueden requerir lo
reconstrucción de la uretra (Ags. 6-8).

Técnica quirúrgica
Tras el tratamiento antiséptico del prepucio y el pene, se exterioriza
éste último deslizando retrógradamente el prepucio. Se mantiene así
colocando una venda de gasa en la base del pene.
A continuación se realiza una sutura discontinua de las lesiones oon
material sintético (Figs. 4-8).
Fig. 1. Herida en la base del prepucio al sallar una veqa.
Fig. 2. Estas heridas se deben suturar lo antes positil, empleánOO;e material Fig. s. En la sutura de estas heridas se debe emplear material absollfüesintético
El glarde del pene quecla expuesto al exterior. se reseca yse lesiona al falta~e la
Sintético absor1Jiblepara lamucosa del prepucio, ymaterial ro absorbible para la piel. monofilamento 5/0 o6/0.
protección cutánea.
Encaso de infección no se debe suturar hasta que noesté oontrolacla, mientras
tantop-oteja adecuadamente al pene.
L pa e os rior
Prepucio - Pene Heridas

Índice de presentaci~
Las heridas de la zona perineal que afectan al pene
Dificultad técnica
y la uretra son muy sangrantes, y si no se tratan
rápidamente producen estenosis cicatriciales,
necrosis tisulares porsalida de orina al tejido
cutáneo y problemas en la micción.

Se presenta en laconsl.ita Ll'l perro mestizo Que hace 10 días tuvo una
pelea, y oomo consecuencia de ella te rl'lO"dieron en la zona perineal.
Las lesiOnes se trataron con antisépticos tópicos y antibióticos sisté­
micos, dejérldo Que las heridlas cicatrizasen por segunda intención.
Se reruperó satisfactoriamente de dichas lesiones, pero a los 5 días
comenzó con problemas evidentes para orinar, saliendo práctica­
Fig. 6. En la exr:*Jración clel pene se aprecia la
rotura ele su parte más externa,con afectaciónde la mente toda la orina por la zona perineal (Fig. 9).
uretra.

216 217

Fig. 7. Se procede al tratamiento antiséptico del


campo operatoriocon la solución acuosa de yodo
diluida al 50% con suero fisiológico. La sonda uretral Fig. 9. En la zona perineal se observó una amplia cicatriz transversal a la uretra
facilita la sutura. peniana aestenivel, así como un trayecto fistulOGO por el que salía olina.

Fig. s. Se emplea una sutura discontinuade puntos


sencillos, empleánoose material sintético,
mooofilameoto,absortfüe de 510-610.

Después de la cirugía
• Mantenga la higiene local realizando lava­
dos prepuciales con la dilución al 50% de
yodo u otro antiséptico tópico.
• lml)'escindible el ef'r4JIOO de collar isabelino.

Evite la excitación sexual del


paciente durante elperiodo de
cicatrización (7-w días), si es Fig. 10. Se realizó una uretrografia retrógrada concontraste yodado, observándose Fig. 11. Mediante sondaje del trayecto fistuloso de la zona perineal einyección del
necesario recu"a atranquilizantes salida del mismo en la zooa de lesión. medio de contraste se apreció una evidente estenosis distal yunagran dilatacióo
sistémicos. uretral por delante ele la misma.
L pa e os rior
Prepucio - Pene Heridas

Fig. 12. Se realiza un abordaje ala uretra


membranosa de la zona perineal, meáiante una
incisión IOngitudinaJ sobre ella.
Se idenMica la uretra lesionada, asf como el orificio
fistuloso ¡:roximaJ, que se sonda para que quooe
identificado. Fig. 15. Lasuturase realiza sobre un catéter urinario
osobre una sonda FOO)I, empleándose puntos
rVersondaje uretral. ~ pdg. 236 seocillOs de material sintético absorbible
monofilamento 5/0 o6/0.

2 18 219

Fig. 13. La incisión se ¡:rolOngaventralmente para Rg. 16. Tras la anastomosis uretral S(jo Queda
localiZar eidenMicar el extremo distal de la uretra. reconstruir lazona pelineal.aproximando y
Desde el exterior se introduce otra sonda hasta la suturando los tejidos subcutáneos con material
zcna de lesión C<Jl el fin de facilitar las maniobras absorbible yla piel con matelial monofilamento no
de disecciónuretral. absorbible.

La sonda urinaria se deja colocada en la vejiga durante al menos 5 o El pronóstico es bueno, aunque pueden aparecer estenosis uretra­
6 días con el fin de garantizar la eliminación de la orina mientras dure les por fibrosis en casos de lesiones muy importantes o tras cirugías
el prooeso de cicatrización de la uretra. no realizadas con meticulosidad.

Después de la cirugía Alternativa quirúrgica


• Estos pacientes requieren un cuidado postoperatorio meticuloso. Si la lesión no se puede reconstruir, o la estenosis es muy grcride y
Deben llevar collar iSabelino pa-a que nose quiten el catéter urinario. la resección l.l'etral no es posible, realice una uretrostomía perma­
• Este catéter debe quedar protegido por un vendaje abdominal, y nente en la zona proximal para permitir la correcta eliminación de la
debería estar conectado a 1.11 sistema de recogida de orina cerra­ orina.
do para reducir la posibilidad de infecciones ascendentes.
• La permeabilidad del catéter se debe oomprobar periódicamente
Fig. 14. Las estenosis cicatriciales de ambos mediante inyecciones de suero fisiológico.
segmentos se resecan con el fin de reconstruir la
• Se deben realizar análisis urinarios oon frecuencia.
uretra. Esla resección debe ser lo más peQUeña Si el paciente se quita el catéter y el c/fnico intenta vol verlo
posible (1 o 2 mm) para no crear tensi<Jles en la • Realice una cobertura antibiótica apropiada. a colocar "a ciegas" el resultado puede tener unas
anastomosis, que oonduzcan ala dehiscencia de • Recomiende el empleo de dietas de recuperación nutrieional de consecuencias desastrosas.
la misma. postoperatorio, y asegúrese de la correcta hidratación del paciente.
La parte posterior Prepucio - Pene / Tumores

Tumores. Caso 1 / Tratamiento médico


Tumores. Caso 2 / Tratamiento quirúrgico

Índice de presentación

Los tunores de pene representan tan s6b el 0,3% de los tunores en
los pelTOS. Entre ellos se deben ccnsidera- tunores venéreos trasmi­ No se hon descrito tumo~ de pene o prepudo en lo
Índice de ptesentaci6n
Dificultad tknica

süis, papbnas, carcinOmaS de céUas escanosas y otros tunores espede felino.


rnesenqUmalosos. CCITlO ll'llosa-ooma o hEmalgiornal'sarcana
Los tumores venéreos trasmisibles responden muy bien al trata­ Los tumores venéreos se trasmiten con mucha fad/ídad.
miento médico con vinorist1na (0,025 mg/kg IV, Sin exceder 1 mg Explore lo covidod nosol, es posible que el pociente
una vez a la semana). Deben reaizarse controles hematológicos presente también epistoxis.
(para controlar la posible leucopenia), y repetir el tratamiento hasta la
desaparioón de las masas tumorales (Figs. 1 y 2).

Fig. 3. "Sam" ¡:resenia prial)smo, se cllupa


constantementeet pene y sangra IXJ4" el preJXJCio.

Otro tipo de tumores del pene


requerlr6n la exéresis quirúrgico
empleando bisturí eléctrica con el fin
de minimizar la hemorragia, así como
reducir la pasibilidad de recidivas
locales (Figs. 3-5).

220 221

fig. 1. Los tumaes 'leréoos trasmisibles sm ~


~ con l1l3)0' fi'eruroa se obselv.Wl.
SOn masas imruams runerosas,~ se suelen
asenaen la base OOI pene. ynarnamem
presentiJl zooas ulclmas y sangrantes. Ag. 4.N retraer el ¡yepucio <J.ieda expues'.o el
B cia~ se debe confirmar con una d1okx.lía pene, asi como la masa tumOOll {!ibrooia) localizada
exfollativa o biopsia. jlJlto al glande.

Flg. s.Para controlar et sangrado re la resección de


la masa tunoral está indieado el empleo del bisturí
e1oc1~co.

La reconstrucci6n de las lesiones


mucosos se real/za con suturo
discontinua con material obsorbible,
como se describió anteriormente.

n8 z Se JlslatJa lJl tral31lient> con Yilcr!Slm y


esta magan muestra el ~ al lnal re las Verheridas del ¡»ne ~ p6g. 215
(zona distoQ. :.""'
sesmas ll~ramalas.
Este caso ha sido ttatado por el O: Díaz-Otero Medra.
L pa e os rior Prepucio - Pene Prolapso mucosa uretral

Índice de presentación 8 tratamiento inicial se basa en la coloca­


ción de un catéter urinario en la uretra pro­
curando que no llegue a la vejiga, fijándolo
El prolapso de la mucosa uretral se presenta con dos puntos de sutura durante 2 o 3
días (Figs. 4-6).
principalmente en animales jóvenes por una
prolongada excitación sexual. El perro está
continuamente lamiéndose el prepucio y el glande
del pene.

Flg. 4. se aplica un gel hidrosoluble urológico para


Fig. " El diagnóstico es seocillo exteriorizando el pene y visualizando la mocosa anestesiar la zona y facilitar el sondaje uretral.
uretral p-dapsada.Toda la zona está muy rongestiva.
Versondoje uretrol. • pág. 236

Tratamiento conservador

Dificultad técnica
C I LI l
·Bullit" es un Bulldog, macho, de 8 meses

de edad, que ha sido referido por su veteri­

nario porque está continuamente sangran­

do por el pene {Flg. 2).

222 El problema empezó hace dos días cuan­ 223


do intentó, Sin éxito, montar a una hembra

en celo.

Rg. s. Con delicadeza se sonda la uretra para que


Fig. 2. "Bullit' está sangrandorontinuamente P<J el cuando el paciente v~a amiccionar la salida de
pene, sotl'e todo cuando se levanta después de orina se realice sin problemas y oo se prdapse fa
estar tumb&'.Jo un rato. mucosa al exterior.

En la exploración del pene tras la retraoción Rg.6. La soo:la se fija ala piel cm dOs puntos de
del prepucio se observa el origen de la sutura para que no se salga de su sitio durantelos
hemorragia (Fig. 3). próximos días.

Después
• Tratamiento antibiótico-antiinflamatorio
tópico durante 5 o 6 días.
• Collar isabelino del tamaño suficiente
Fig. 3. La exteriorización del glande permite la
para que no pueda lamerse esta zona.
identificación de la mucosa uretral prolapsada a
• Empleo de tranquilizantes, dependiendo
través del orificio peniano. del carácter del paciente.
L pa e os rior Prepucio - Pene Prolapso mucosa uretral

Tratamiento quirúrgico

Dificultad técnica
• LI l
Este paciente respondió, inieialmente, bien al tratamiento conserva­

dor, obseNándose una recidivaa los pocos días, por lo que se reco­ En coso de recidiva o de lesión importante de la uretra

mendó el tratamiento quirúrgico (Rgs. 7-14). estará indicada la resección de la mucosa pra/apsada.

Antes
Previamente a la cirugía se debe desinfectar el pene y el interior del
prepucio con una solución yodada al 50% cada diez minutos hasta Fig. 9. Para evitar la retrocción de kls labios ele la
que entremos en el quirófano. herida al resecar la uretra se colocan unos puntos
de tracción~ mantengan siempre visible la
mucosa uretral.

224 225

Fig. 7. Para mantener la exteriorizacióndel pene se

coloca una gasa amodo de bufanda en la oose del


Fig. 10. Se secciona con tijeras la mucosa
mismo, de tal forma que impida el deslizamiento del prolapsada entre dos puntos de tracción.
prepucio asu posición lWlatómica. Se prcduce una intensa hemorragia eo la herida.

Fig. a. En esta imagen se puede visualizar la Fig. 11. Para evitar un sangradoexcesivo se sutura
mucosa uretral prola~cla. que es la que va aser la mucosa uretral ala peniana al mismo tiempo que
resecada. se reseca.
L pa e os rior Prepucio - Pene Prolapso mucosa uretral

Fig. 13. Para asegurar la correcta eliminacióo efe la


orina durantelos prime.-os días del postoperatorio,
cuando está inflamada la uretra intervenida, se
recomieooa el sondaje urínarío sin llegar ala vejiga.

Versondoje uretral. • pág. 236

227

Fig. t 2. Se han realizado clos suturas continuas entrelazadas,empleándose matelial sintético absorbible monofilamento de 6/0.

Fig. t4. la sonda se fija coo dos puntos de sutura al


prepucio.

La aguja de las hilos empleados


Después
debe ser cilíndrica y atraumática • Tratamiento antibiótico-antiinflamatorio
para minimizar la lesión de la tópico durante 5 o 6 días.
mucosa uretral. • Antiinflamatorio sistémico (AINE) durante
6 días.
• Collar isabelino del tamaño suficiente
para que no pueda lamerse esta zona.
• Empleo de tranquilizantes, clependíendo
del carácter del paciente.
Es normal que durante el postoperatorio el
paciente sangre ligeramente por el pene.
Hemorragia muy leve que va disminuyendo
con el transcurso de los días.

Fig. •s. Alos tres días de la intervenciónse retira la


sonda y se comprueba lacorrectaevoluciónde la
cicatrízación.
La parte posterior Prepucio - Pene / Hipospadia

Hipospadia
Índice de presentación

La hipospadia es la anomalía congénita que con mayQr frecuencia


se observa en los órganos genitales externos del macho.
Se puede presentar en diferentes grados, desde la forma menos
severa en la que la apertura prepucial se localiza en la zona ventral
(Fig. 1), hasta grados severos en los que falta el desarrollo del pre­
pucio y pene.
Se debe a 1..11 fallo en la formación y unión de los pliegues urogen~a­
les, así como en el desarrollo de la uretra peniana. El orifteio uretral
puede abñrse al exteñor en cualquier punto de esta zona.
La hipospadia normalmente se acompaña con diversas anomarias Fig.1. Hipoopadia yparafimosis en un York>hire Terrier. Se observa la apertura Fig. 6. Usanc:X> un mediode C011traste yodado
del pene, incluso su ausencia (Figs. 2-6). ventral del orificio prepucial, yla exteriorización del glande por un defecto en el (urológico) se pone de manifiesto la uretra y la vejiga
recubrimiento del mismo. del paciente al introducirtopor el ortticiO uretral
localizado eo el periné.

La intervención quirúrgica en estos pacien­


tes sólo está indicada en casos muy gra­
ves, en los que las reminiscencias de los
tejidos. mal desarrollados, se traumatizan e
infectan con frecuencia. En estos casos se
debe realizar la exéresis de los mismos.
Pero generalmente no es necesarianinguna
intervención quirúrgica a este nivel. Controle
periódicamente al paciente para detectar
oon prontitud posibles infecciones l..l'inarias
228 ascendentes (Figs. 7 y 8). 229

Fig. 2. Cachorro de 3semanas Que acude ala consulta porque "tiene el pene Fig. 3. Se observa la falta de fusión del prepuciO, así como el desarrollo anómalo
fuera·. del pene. Fig. 7. Dos meses más tarde se puede apreciar el
crecimiento del rrepucio, así como la falta de
desarrollo del pene.

Fig. a. La piel de la zona perineal se está cerrando


sobre el clefecto, y el paciente sigue afinando con
Fig. 4. La anomalía congénita del prepucio es evidente, así como la falta de Fig. 5. Enla zona perineal se puede identificar el orificio uretral, a través del cual el normalidad por el orificiO uretral.
clesarrollo del peoe. Observe la ause~ia de orificio uretral en su extremo. <Mlimal orinaba. Ya ambos lados del mismo el esbozo ele las bolsas escrotales. Sólodebe realizar controles peliódicos para obseivar
la evolucioo del paciente, y detectar posities
infecciaies urinarias ascendentes.
Técnicas

generales

Sondaje uretral en el gato

Sondaje uretral en el perro

Cistocentesis

Anestesia epidural lumbosacra

Posicionamiento del paciente

Sutura del ano en "bolsa de tabaco"

Episiotomía

Vasectomía
231

Orquidectomía en el perro y en el gato


Caso 1 Orqu1dectomía preescrotal en el perro
Caso 2 Orquidectomía escrotal en el gato
Caso 3 Orquidectomía con ablación escrotal
en el perro

Laparotomía infraumbilical

Cistotomía
Técnica 1
Técnica 2
or
Técnicas generales Sondaje uretral en el gato

Índice de presentaci~"í~

Dificultad técnica j 1

La obstrucción uretral es un problema muy


frecuente en el gato macho que plantea un reto al
veterinario clínico, dadas las graves repercusiones
en el estado general del paciente que produce.
La resolución de la obstrucción debe realizarse Ag. 4. Una vez localizado el meato urinario externo
de manera rápida e inmediata. Para ello debemos se introduce por él la sonda previamente lubricada.
de disponer de un método sencillo y eficaz que nos Fig." Antes de sondar la uretrade un gato con obstrucción uretral, puede ser Los dedos que sujetan el pene deben evitar que éste
necesaño aliviar el exceso de presión intravesical mediante unacistocentesis. se retraiga hacia el interior del prepucio,
permita solucionar el problema con una ligera El lugar idóneo para lapunción se encuentra en lalínea media, entre el pubis y la manteniéncblo al mismo tiempo en dirección
sedación en la mayor parte de los pacientes. cicatriz umbilical. La aguja debe diligirse cauclatmente. caudal.

¡~

232 233

Fig. 2. El uso de sondas rigidas de punta abotonada,como las que se muestran Ag. 5. Se introduce suavemente la sonda
eo la imagen, facilita en gran medida el sondaje de la uretra obstruida hasta notar resistencia asu paso.
Habitualmentehallaremos la obstrucciOO en el tercio
distal del pene.

Paro facilitar la entrada de la sonda Una vez que la sonda llega al


hasta la vejiga es imprescindible que punto de la obstrucción no se
el pene esté dirigido cauda/mente debe empujar con ella el topón
y paro/e/o a la columna vertebral, sino que intentaremos desalojarlo
de forma que la uretra quede alineada mediante hidropropulsión.
can el cuello vesical.

Fig. 3. El primer paso para el soo:laje es la Ag. 6. En estemomento se conecta a la sonda una
exterioriZaciOO del pene retrayendo el pre~io jeringa de 20 o50 mi cargada con suero
cranealmente. Es muy importante que el pene La desobstrucción de la uretra se consigue
quede dirigicb en dirección caudal, ele modo que la movilizanoo el tapón, empujando de foona
uretra quede completamenterecta. intermitente el émbolo de la jeringuilla.
or Técnicas generales Sondaje uretral en el gato

La resolución de los obstrucciones


urinarias felinas se ve facilitada en
gran medida por la utílízación en
primera instancia de este tipo de
sonda rfgida, en lugar de intentarlo
con sondas flexibles.

Fig. 10. Durante el tiempo en que el paciente


Fig. 7. Mediante los pulsOG de presi(Ji obtenidos permanece sondado, la micciónse realiZa por goteo
ylos sua11es avances de la sonda, se logra que los oontirw. De esta forma evitamos la distensión de la
tapones se desplacen hasta la vejiga, vejiga y facilitamos la recupel'acióndel tono del
clesobstruyeroo así la uretra. músculodetrusor.

234 235

Fig. s. Una vez que la uretra se encuentra


permeable se puede realizar un aspírado de laorína Fig. 11. la sondase asegura al prepocio mediante
contenida en la vejiga y unlavaoo de la misma con unos puntos practicados a través de los orificios de
solución salina. su collarete.

En nuestra opinión y ounque es un


tema controvertido, es necesorio
proporcionar cobertura antibiótica
durante dos o tres dios, mientras el
paciente se mantiene sondado.
Durante este tiempo
complementamos el tratamiento
Fig. 9. En una segunda fase se sustituye la sonda médico con el uso de un corticoide
rígida por una sonda uretral felina clásica que y un espasmolrtico.
clejaremos coloc<Kla durante dos o tres días
or Técnicas generales Sondaje uretral en el perro

Índice de presentación El sondaje de la uretra es una de las maniobras


Dificultad técnica que con mayorfrecuencia deberemos realizar en la
práctica clínica veterinaria. Será necesario sondar
a aquellos pacientes que presenten retención
urinaria por algún motivo. Es la forma de asegurar
la permeabilidad uretral en caso de obstrucción
de cualquier tipo. Por último, puede ser necesario
sondar la vejiga para obtener orina para analizar.

Fig. 2. Una vez aclministra:Ja la solución antiséptica


en el interiCJ det prepucio, sacaremos la jeringl.illa.
cerranoo con los dedos pulgar eíndice el orificio
prepucial.

236 237

Flg. 3. Mantendremos asi el antiséptico en contacto


con los tejidos durante unbreve espacio de tiempo,
tras et cual lo clejamos salir.

Fig. 1. De foima previaal sondaje uretral, es necesaiio 11eparar la zona lo más aséptica posiblemedianteuna solución de povidona yodada, queintroduciremos por et Flg. 4. Procederemos acontinuación aexteliorizar
Olificio prepucial con ayuda oo una jeringuilla. el pene. Para ello retraeremos el prepucio con una
mano mientras empujamos el pene cranealmente
con laotra, colocada sobre so base.
or Técnicas generales Sondaje uretral en el perro

Fig. 5. La son<la que vamos a utilizar debe ser


estéril. Es importante CJJ8 entre encontacto
direc1amente con el pooe, sin contaminarse antes
delsonda_íe.

El sondaje vesical puede ser fuente


de infección. Es Importante realizar
el procedimiento de forma aséptica.

238 239

Fig. s. Proceden.is avaciar la vejilJa urinaria conectando una jeringuilla, tambiénestéril, al extremo terminal de la sonda.

Fig. 6. Manteniendo extefiOrizado el pene con una

maro,localizaremos el meato urinario externo e

introduciremos asu través el extremo de la sooda.

Fig. 7. Progresaremos suavemente con la sonda


hasta alcanzar la vejiga. El uso de sondas
semirrígidas facilita la maniobra, especialmente
en caso de obstrucción uretral.
or
Técnicas generales Cistocentesis

Índice de presentación
Dificultad técnica

La técnica de cistocentesis se realiza para obtener


La cistocentesis es uno técnica rápida y sencillo, y es mejor
muestras estériles de orina directamente de la tolerado que et sondoje en cosos de perros y gatos.
vejiga. De esta forma no se contamina con
bacterias o restos tisulares procedentes de las vías Para facilitar lo punción vesical se recomiendo dirigir el
bisel de lo aguja hacia et exterior (Fig. 2).
urinarias inferiores. También se evitan infecciones
ascendentes de la vejiga secundarias al sondaje
de la misma. Asimismo, está indicada para
descomprimir la vejiga en casos de obstrucción
uretral cuando no se puede realizar mediante
sondaje retrógrado.

Técnica
• Depilación y preparación aséptica de la zona.
• Localización e inmovilización de la vejiga hacia la pared abdominal,
pero sin hacer excesiva presión (Fig. 1). Si se comprime demasia­
do se favorecerá la salida de orina alrededor de la aguja hacia la

240
cavidad peritoneal.
• La punción se realiza con una aguja 22-21 G con una longitud de
.. 241
40 mm, a través de la línea meda en las hemb<as y paramedial en
los machos.
• La aguja se introduce de forma oblicua (45'? en la zona media de
la vejiga, dirigiéndola hacia el trígono vesical (Figs. 2 y 3).
• La jeringuilla se debe agarrar de tal forma que nos permita mover Fig. 1. Fijación de la vejiga para asegurar la correcta ~nción de la misma.
Fig. 4. Una vez puocionada la vejiga la extracción de la orina se debe realizar sinmovimientos bruscos, eYitamo lesiooar tanto la mucosa como la ~red.
el émbolo sin tener que soltarla, y aspirar la orina de forma conti­ Si la vejiga tiene JX)C()Vdumen, y eo los gatos,es mejor inmO\lilizarla desde la

nua (Fig. 4). pelvis.

Lo cistocentesis está contraindicado cuando no se puede

Complicaciones
palpar la vejiga, bien porque no tenga volumen suficiente o
• Normalmente es una técnica que no tiene complicaciones secun­
porque et paciente no colabore.
darias.
No realice uno punción "o ciegos".
• No obstante, pueden aparecer lesiones vesicales, hemorragias,
peritonitis, fistulas urinarias y adherencias en pacientes que no
Si utilizo diuréticos (furosemido) previamente a la colaboran y en el caso de que la vejiga sea muy pequel'la.
cistocentesis recuerde que se modificarán la densidad
urinaria, et pH y ta cantidad de bacterias/mm'.

Fig. 2. La introducción angulada de la aguja crea un trayecto ~icuo en la ~red Fig. 3. La ~nta de la agujase dirige hacia la zona distal de la vejiga, hacia el
vesical que favorece el Cierre del mismo cuando se retire la aguja, minimizándose trígono vesical, con el fin de garantizar la extracción de todo su contenido, Si es
la pérdida de orina hacia la cavidad atx1001inal. necesaño,sin tener (1Je reintroducirla repetidas veces.
or Técnicas generales Anestesia epidural lumbosacra

Índice de presentación Puntos de referencia


Dificultad técnica
Alas del íleon, apófisis espinosa de la
ya vértebra ILJTibar y apófisis espinosa de la
1• vértebra sacra (Fig. 3).
Objetivo
Disminuir los requenmientos anestéSicos generales y ampliar la anal­

gesia en las inteNenciones quinxgicas del tercio posteri0<.

Para ello se inyecta el fármaco c0<respondiente en el espacio epidu­

ral, a través de una aguja espinal introducida entre la última vértebra

Rg. 3. Relaciones anatómicas para lalocalización


lumbar y la primera vértebra sacra (Fig. 1).
del punto de introduoción de la aguja espinal en el
canal vertebral :
Fig. 1. Radio;¡rafia obtenida para visualizar la localizaciónde la aguja espinal.
No use sólo uno anestesia epidural. Si no va a emplear • Alas del íleon.
Realicela cuaooo no tenga claro la profundidad ala que se encuentra el espacio
anestesia genero/ realice previamente una sedad6n profunda. epidural. • Apófisises¡jnosa l 7.
• Apófisis es¡jnosa S1.

Con el pulgar y el dedo medio (corazón) de


Material necesario (Fig. 2) la mano no domnante se palpan las alas del
• Rasuradora eléctrica. íleon a ambos lados de la cdumna vertebral.
• Antisépticos locales Con el dedo índice de la misma mano se
identifica la apófisis espinosa de la vértebra
• Guantes quirúrgicos estériles.
L7, se desplaza caudal y cranealmente
• .A.gujas espinales desechables. para localizar el espacio lumbo-sacro (L7­
• Jeringuillas para la comprobación de la correcta colocación de la S1), que se nota como una depresión (Figs.
aguja 6dentificar la pérdida de resistencia). 4y5).
• Jeringuillas de diferentes capacidades para la administración del
242 243
fármaco.

Tamaño del paciente Tipo de aguja

Longitud Grosor

Pequeño 2,5cm 22G Rg. 4. Los dedos pulgar y corazón se colocan sobre
las alas de los huesos ilíacos. yel dedo íroiee parpa
Mediano 3,8cm 20G la apófisis espinosa de L7.
Grande 7,scm 18G

Fármacos utilizados
Anestésicos Dosis Toxicidad Duración Pote~cia
(IV) efecto analges1ca

Lidocaína2% >t omg/kg 6ominulos


1ml/
Mepivacaina 2% >JOmg/kg 2 horas
4,5.<)kg
Bupivacaína o,s% >3 mg/kg 4-6 horas

\
Fig. 2. Material necesario para la realización de una anestesia epidural:
Los anestésicas /acotes pueden producir hipotensión. • Jeringuillas de baja resistencia para localiZar el espacio epidural. Fig. 5. Acontinuación se palpa la apófisis espinosa
Camjala, si existe, antes de realizar ta anestesia epidural. • Agujas es¡jnales de diferentes calibres yloo;¡itudes. de S1 para identificar el espacio en el que se va a
introducir la aguja espinal.
pa pos nor Técnicas generales Anestesia epidural lumbosacra

Técnica
Colocación del paciente
Tras la sedación o tranquilización se coloca al paciente dependiendo
de la comodidad y hábito del veterinario:
• Sobre el esternón con las extremidades posteriores dirigidas hacia

delante (Fig. 6).

• En decúbito lateral dirigiendo las extremidades posteriores hacia la

cabeza.

De ambas formas se conseguirá una correcta separación de la

unión lumbo-sacra.

Despl.Jés de la inyección del anestéOOC> se odoca al paciente en decú­


Fig. 6. En decúbito estemal las extremidades ¡mteñores se dirigen hacia delante
bito prono o supino para una distribuciál uniforme del fármaco emple­
con el objetivo de ampliar el espacio lumoo·sacro.
ado en ambos lados del raquis. Si se coloca al individuo en decúbito Rg. 9. La introdocción de la aguja debe ser
lateral se potenciará la anestesia de las raíces nerviosas de este lado. perpencllcular a la piel.

Preparación del campo


• Se depila y se prepara de forma aséptica

la zona en la que vamos a tralJajar (Fig. 7).

• Se deben emplear guantes quirúrgicos

estériles. y se deben extremar las medi ­

das asépticas de la técnica para no pro­

ducir infecciones internas.

244 245

Fig.7. La zona se prepara como cualquier campo Rg. 10. Al atravesar el ligamento interarcuato se
operatoóo, se depila, se lava con jabón antiséptico nota un ruido metálico yuna falta de resistencia a la
y se aplica povidona yodada. introducción de la aguja.

Introducción de la aguja
En algunos ocasiones, sobre todo
Con la mano dominante se introduce la
cuando se tiene poco experiencia, lo
aguja espinal, pe;pendict.Jarmente al dorso
aguja choco contra el cuerpo vertebro/
del animal, entre las apófisis espinosas de
de L7, en este coso se debe reorientar
L7 y $1 (Figs. 8 y 9). Se inserta lentamente lo aguja, cauda/mente, poro poder
hasta atravesar el ligamento interarcuato, acceder al amo/ vertebral. Hasta que
momento que se identifica por Lll pequeño se obtiene experiencia suficiente sería
ruido característico, y la sensación de falta recomendable obtener una radiografío
de resistencia (Fig. 10). lateral de esta zona con el fin de
determinar lo longitud de aguja que se
debe elegir, así como ta profundidad o
lo que la debemos introducirporo
alcanzar et canal vertebral (Fig. 1).

Rg. 11. Una vez alcanzado el espacio epidural se


retira el fiaoor de la aguja espinal.Si d~
Fig. s. La aguja se introru:e entre las apófisis reposicionar la aguja hágalo siempre con el fiooor
espinosas de L7 y S1. colocado dentro de la misma.
or Técnicas generales Anestesia epidural lumbosacra

A continuación se retira el fiador de la aguja espinal (Fig. 11), y se


debe observar que por el racor de la misma no sale líquido cefao­ Administración del fármaco
rraquídeo ni sangre (Ftg. 12). 8 fármaco se debe calentar a la temperatu­
La salida de líquido cefalorraquídeo (Fig. 13) (por punción subarac­ ra corporal del paciente, inyectándose len­
noidea) puede ser frecuente en razas pequeñas y miniatura, en tamente en 30-60 segundos, y corno en la
estos casos se debe recolocar la aguja caudalmente o reducir a un prueba anterior, sin notar resistencia exter­
tercio la dosis inicial calculada. na (Figs. 15 y 16).
Si se inyecta la dosis teórica se puede producir la anestesia espinal Una dosis de prueba de 0,5-1 mi de hidro­
total, con depresión cardiovasctJar y respiratoria o colapso. cloruro de lidocaína al 2% produce rápida­
Si se observa sangre es porque se ha pl.J"lcionado el seno venoso mente la dilatación del esfinter anal externo,
ventral, que discurre por el suelo del canal vertebral. En este caso se de estar forma se volvería a comprobar la
debe extraer la aguja, y se realiza otro intento para colocarla correc­ correcta realización de la técnica.
tamente. Fig. t 2 . Observe que por el racor de la aguja no sale liCJJido cefalorra(Jlídeo ni
Si se observa el movimiento de la cola podría ser por punción de teji­ 5a11Jre.
do nervioso, en este supuesto se modifica levemente la localización Rg. •S· Se intrcduce el fármaco en el espacio
de la aguja sin necesidad de extraerla de nuevo. epiduraL

Rg.t6. Ycomo en la prueoo, el pro<llcto eotra sin


Si se inyecta el anestésico resistencia.
introvasculármente pueden aparecer
canvulsiones, depresión Efectos no deseados
cardiopulmonar y falta de anestesia
regional. • Se pueden presentar parálisis de los
músculos respiratorios, hipotensión san­
guínea, síndrome de Horner, hipogluce­
mia por bloqueo simpático, contraccio­
nes musculares, convulsiones y coma
por inyecciones subaracnoideas o intra­ 247
vasculares.
• Pueden aparecer, si la técnica de inyec­
ción no es correcta, retraso en la apari­
ción de la anestesia, o ausencia de la
misma, paresia o sepsis.
Fig. •3· Si observa la salida de liquido Realice una correcta técnica. Elija el fárma­
cefalorraquídeo debe cdocar la aguja más co adecuado y calcule correctamente su
caudalmente o re~ntear la doSis del fármaco. dosificación. Asegúrese de la correcta colo­
cación de la aguja espinal. Realice una
Comprobación de su localización inyección de prueba.
Para comprobar que la aguja se encuentra
correctamente colocada en el espacio epi­ Contraindicaciones
dural se inyectan 0,5 mi de aire o suero sali­ • Anomalías anatómicas locales.
no estéril, que deben entrar sin ningún tipo
• Dermatitis local QLl'Tlbar).
de resistencia, en este sentido es mejor
emplear jeringas especiales para técnicas • Sepsis.
de detección de pérdida de resistencia (Fig. • Coagulopatías y hemorragias.
14), o en su defecto jeringuillas de cristal. • Hipovolemia no corregida.
• Enfermedades nerviosas centrales
o periféricas.
• Presión intracraneal elevada.

Fig. t4. Para comprobar (Jlela aguja se encuentra Las ventajas de la anestesia
correctamente colocada inyecte una pequeña epiduro/ superan las posibles
cantidad de aire, (Jle debe pasar con mucha riesgos de la misma.
facilidad, sin resistencia.
or Técnicas generales Posicionamiento del paciente

Índice de presentación

La preparación del campo operatorio y la colocación


del paciente sobre la mesa quirúrgica son muy
importantes en este tipo de intervenciones.

Fig. " Deesta formase accede con facili<lad ala zona peílneal. Fig. 4. Una alternativa aesta técnica es el empleo de un tampón, (Jlecumple las mismas funciones que la vencla de gasa.

El almohadíllaoo de la zona ventrocaudal del paciente reduce la lesión de los

nervios femorales.

Antes
• Dieta baja en residuos durante los 3 o 4 días previos a la cirugía.
• No aplicar enemas en las 24 h0<as anteriores a la intervención.
• Evacuar manualmente las heces del recto.
• vaciar los sacos anaes.

Técnica
• Depilación de la zona perineal, incluyéndose la base de la oola, y
249
preparación aséptica de la zona.
• El paciente se coloca en decúbito prono sobre la parte final de la
mesa. Para evitar lesiones nerviosas (nervio femor¡j) se debe colo­
car el animal sobre una oolchoneta o unas toallas (Rg. 1).
Las extremidades inferiores no se sujetan a la mesa para no
aumentar la tensión en la zona. Fig. 2. Los sacos anales,que ante<ionmente han siclo vaciados, se sondan ylavan
coo una solución antiséptica.
• Los sacos anales se lavan con una solución de povidona yodada
al 50",.{, (Fig. 2) y, a continuación, se vuelve a desinfectar el campo
operatorio.
• Después se realiza una sutura en bolsa de tabaco para impedir la
salida de las heces, y evitar que oontaminen el campo operatorio.

Versuturo del ano en bolsa de tabaco. • pág. 252

Cuando no se puede realizar este tipo de sutura, porque se va a


intervenir sobre el ano, se puede taponar el recto con una torunda
de algodón, con un ovillo de venda gasa o con un tampón oomer­
cial (Figs. 3 y 4).
• En la siguiente fase se inmoviliza la cola del animal sobre el dorso
usando esparadrapo (Fig. 5), o mejor aún empleando una venda,
ya que nos permite un mej0< control de la tensión sobre la cola
(Figs. 6-9).
Fig. 3. Se introru:e en el recto un ovillo de venda dejando un extremo en el Rg. 5. Fijación e inmovilización de la cola ala mesa quirúrgica con el fin de exponer adecuadarneflte la zona perineal.
extelior para controlar su posición durante la cirugía, ypara facilitar su extracción
al finalizarla.
or
Técnicas generales Posicionamiento del paciente

Fig. 6. Se venda la cola comenzaroo por su base.


Con unacinta de esparaciapo se fijan los cabos de
la oolsa de tabaco ylavenda ala piel para impedir
Quese muevan.

250 251

Fig. 9. Para conseguir la PJSieión deseada de la cola lo único CJJ8 hay Que hacer es agarrar el nudo ydeslizarto. Al solta~o queda fijoy no se mueve retrógradarnente.
Fig. 7. La venda se pasa alrededor del cuello ode
las extremidades anteriores del paciente para
inmOYilizar la cola sobreel dorso del animal.

• Ya está preparado el campo operatorio y podemos comenzar la


intervención quirúrgica diseñada

Recomendamos la fijación de la cola con una venda de


gasa sobre el dorso del animal siguiendo la técnica
Fig. s. Se emplea un nudo específico, "cote de descrita con el fin de minimizar la posible lesión sobre los
guardiamarina•. Es un nudo corredizo~ soporta nervios coccígeos.
bien la tensión de la cola.
or Técnicas generales Sutura del ano en "bolsa de tabaco"

Índice de presentación
Recuerde que a ambos lados del
Dificultad técnica
ano se encuentran los sacos
anales. No los puncione y evite
La sutura en bolsa de tabaco es una sutura continua contaminaciones secundarias.
Antes
que se realiza alrededor del ano con el fin de evitar • Dieta baja en residuos durante los 3 o 4 días previos a la cirugía.
la salida de heces durante la cirugía perineal, y así • No aplicar enemas en las 24 horas anteriores a la intervención. • Al finalizar la intervención no se olvide de
dificultar la contaminación bacteriana del campo • Evaruar manualmente las heces del recto. quitar la sutura realizada para que el
paciente defeque con normalidad.
operatorio. • Vaciar maroalnnente los sacos anales.
• Sondar, lavar y aplicar asepsia en los sacos anales.

Fig. 3. Rn de la sutura al realizar entre 5 y 6 puntos


alrededor del ano.

Técnica
• Depilación de la zona perineal, incluyen­
do la base de la cola. y preparación
aséptica de la zona
• Se realiza una sutura contil"(Ja alrededor
del ano con puntos. englobando cada
uno de ellos aproximadamente 6 o 7 mm
de piel (Figs. 1·4). Los puntos deben
incluir suficiente cantidad de tejido para
252 253
soportar la tensión creada.

Fig. 1. La sutura comienza en la zona superior del


aoo, empleándose un hilo monofilamento 210 o 310.

Fig. 4. Al anudar la sutura se cierra el orificio anal y se evita la salida de heces.


Fig. 2. Cuando se den los puntos en las ZOllaS
laterales e inferiores del ano se debe tener la
precaución de no lesionar los sacos anales.
or
Técnicas generales Episiotomía

Dificultad técnica

Es la técnica para acceder quirúrgicamente al


interior del vestíbulo y de la vagina con el fin de:
extirpar pólipos, tumores, reparar desgarros,
facilitar la fase de expulsión en el parto, etc.

Fig. 2. El pñmer paso para la realización de una


episiotcrniaes la colocación de dos pinzas de Dwen
aambos laoos de la línea de incisión, al objeto de
reducir el sangrado.

La paciente debe posicionarse en decúbito prono y en posición de La incisión del músculo y de la pared de la vagina puede hacerse

Trendelenburg. La ocia debe sujetarse de modo seguro fuera del con tijera (Figs. 5 y 6). La hemorragia, que no suele ser muy intensa.

campo Quirúrgico, realizándose Ll'la sutura en bolsa de tabaoo del se controla bien con bisturí eléctrioo, pinzas hemostáticas o alguna

esfinter anal (Rg. 1). ligadura si llega a ser necesario.

Cualquiera que sea el procedimiento quirúrgico a realizar en este

momento, es muy importante sondar la uretra para tenerla en todo

momento controlada y evitar lesionarla (Rg. 7).

Ver suturo del ano en bolso


de tabaco. pdg. 252 El cierre de la episiotomia puede hacerse en tres capas (Figs. 8-1 2).

La primera, de la mucosa vaginal, con una sutura continua con

Es muy útil, para evitar hemorragias, colocar Ll'las pinzas intestinales material absorbible 2/0 o 310; la segunda, del músculo y tejido st..t>­

254 255
de Doyen a cada lado de la línea media dorsal, pcr la que se va a cutáneo, también continua y con el mismo material y, por último, la

incicir; una rama de la pinza por dentro y la otra por fuera de la vagi­ piel puede cerrarse mediante PLl'ltos simples o una sutura intradér·

na (Ag. 2). mica. Es importante cuidar Que los bordes de la herida a nivel de la

La incisión se hace por la comisl.l'a dorsal de los labios de la vulva, comiSUra vulvar superior Queden perfectamente ooaptados, evitan­
Fig. 3. Se realiza a continuación una incisiónsobre
siguiendo la línea media y hasta llegar Ll'1 pooo por debajo del esfin­ do la aparición de un escalón. Por último, Ll'1 collar isabelino evitará
la piel del rafe medio del periné. La incisión se
ter aria! (Figs. 3 y 4). el lamido de la herida, con su consecuente inflamación.
extiende desde la comisura dO<Sal de la vulva hacia
el ano, tanto como sea preciso para obtener un
acceso cómodo al interior de la vagina.
Es imPortante respetar el esfinter anal.

Las complicaciones más {recuentes de


las cirugías en las que se recurre a
una episiotomfa son el sangrado y la
lesión accidental de la uretra. Las
evitaremos realizando la incisión
justo por el rafe del periné y
localizando la uretra mediante
sondaje.

Fig. 4. La incisión se profundiza a través del tejido


subcutáneo y la capa muscular de la ~ de la
Fig. 1. Se coloca al paciente en decúbito prono, vagina. El uso del bisturí eléctñco y el mantenerse
con el tercio posteiior en un extremo de la mesa y sobre la línea media contribuyen a disminuir el
con la cola bien asegurada. sangrado.
or
Técnicas generales Episiotomía

Fig. s. Cuanclo se alcanza la mucosa del techo Fig. a. El cierre de laepisiotomía se realiza por
vaginal,se profundiza la incisión coo tijera hasta planos,comenzando por unasutura cooUnua en el
accede.- a la luzde la vagina techo de lacavidad vaginal coo material absorbible.

257

Fig. 6. Una 11ez en el interior de la luz vaginal, se


realiza el procecimieoto quirúrgioo motivo de la
episiotomía.

Fig. 7. Resulta muy convenientesondar la uretracoo Fig. 9. La sutura progresa en cfirección ala vulva. Conviene asegurarse de la oorrecta reconstrucción de la luz vaginal.
el objeto de mantenMa localiZada yevitélí así
lesionarla durante lainteNención, sea cual sea el
proc€dimiento area.lizar en la luz vaginal.
or
Técnicas generales Vasectomía

Dificultad técnica La vasectomía es una técnica quirúrgica que


permite la esterilización del macho sin afectación de
la fisiología sexual. Consiste en interrumpir el paso
del esperma por el conducto deferente mediante
oclusión mecánica y;b sección transversal del
mismo cerca del epidídimo, de forma que el resto
de los fluidos seminales síque son eliminados en
el eyaculado.

Fig. 10. Con el finde garantizar una correcta


coaptación c!e los bordes de la vulva ensu oomisura
oorsal, se colocan dos pinzas de rnOS!lJitoa modo
ele guía.

Debe ser planteada al propietario del paciente como técnica irre· Unida por un pequeño meso a él hallaremos su vascularización pro·
versible ya que, aunque en condiciones experimentales pueda pia. Es preciso incidir el meso para separarlo del oonducto deferente
revertirse, las posibilidades de que el conducto sea correctamente e introducir a través del ojal realizado una pinza hemostásica con
repermeabilizado y de que el macho pueda volver a ser fértil, son una ligadura de material absorbible. Ligamos con ella exclusivamen­
escasas. te el conducto deferente, preservando intacta su vascularización, y
Puede ser una alternativa para la esterilización, menos cruenta y lo seccionamos a oontinuación doblemente por debajo de la ligadu·
más fisiológica que la orquidectomía, siempre y CUa'ldo, el compor· ra, resecando un fragmento de 1 o 2 cm de oordón. El extremo del
tamiento sexual del macho no resulte un inconveniente para el pro­ conducto más próximo al testículo queda abierto, mientras que el
pietario. En el gato, la primera causa de petición de esterilización es extremo más alejado del testículo, queda ligado. Mediante esta téc·
el marcaje territorial que, obviamente, no desaparece tras la vasec· nica, denominada "de extremo libre", evitamos la atrofia testicular
258 tomía, por lo que rara vez se realiza. En el perro su uso como técni· por presión que se produce cuando se ligan ambos extremos del 259
ca de esterilización es más frecuente. conducto.
La túnica vaginal puede cerrarse con un punto cruzado o dejarse
abierta.
Para terminar, cerramos la herida quirúrgica en dos planos, el sub·
Venta1as Inconvenientes cutáneo y la piel.
Fig. 11. Se ~ocede acootinuaciónal cierreclel plano • Técnica menos agresiva • Persiste marcaje territorial La complicación más frecuente de esta sencilla técnica quirúrgica es
subcutáneo meciante sutura continua 001 el mismo • No afe<ta a los inslíntos Yla libido el hematoma causado por 1.11 manejo poco cuidadoso de las estruc·
tipc¡ de material. del animal • No disminuye ni la agresividad turas vasculares que, junto oon el oonducto defe1Bnte, constituyen el
• No influye en la ganancia de peso ni la tendencia al vagabundeo cordón espermático.
Debido a que con esta técnica no se modifica la libido, el perro
deberá mantenerse separado de las hembras en celo durante el
mes siguiente a la intervención, tiempo necesario para que seé\'l eli·
Los cordones espermáticos se localizan por palpación en situación minados todos los espermatozoides del oonducto deferente.
preescrotal y a ambos lados del pene. Se fija entre los dedos índice
y pulgar y se aborda realizando sobre él una pequeña inciSión cutá·
nea (2·3 cm son suficientes) y profundizando mediante disección Para garantizar la eficacia de esta técnica puede realizarse un
roma hasta alcanzarlo. Tras incidir con tijera la túnica vaginal, quedan espermiograma un mes después de la intervención,
a la vista los componentes del cordón espermático, entre los cuales manteniendo hasta entonces al paciente separado de hembras
hallamos una estructura nacarada y dura al tacto que se correspon­ que puedan estar en celo.
de con el conducto deferente.

Fig. 12. Rnafmente,se surura la piel con puntos


entrecortados Simples conmaterial monofilamento
no reabsorbible.
or
Técnicas generales Vasectomía

Fig. 1. Se localiza por palpación el oordón


espermático en su trayecto desde el testículo hasta Fig. 4. COO ayuda de una pinza rcxna se exteñoriza
el canal inguinal. el cordón toclavía envuelto pcr la túnica vaginal.

260 261

Fig. s. Se ~ la pinza por debajo del coroon yse


Fig. 2. Se incide la piel sotJe el cordón espermático mantiene así al objetode trabajar con comooiclad
previamente localizado. durante toda la intervención.

Fig. 3. Se diseca el tejido suocutáneo hasta Fig. 6. COO la tijera. se incide la túnica vaginal
visualizar el c~n espermático que se diferercia directamente sobre el conducto deferente, evitando
fácilmente de los tejidos circuooantes pcr su oolor. así lesíonar el plexo pampinttorme.
or
Técnicas generales Vasectomía

Fig. 10. Distalmente alaligadura se secciOna un


pequeño segmento del conductocleferente,dejando
Fig. 7. una vez alilrta la túnica vaginal se visualizan de esta forma alilrta la luz de la parte del conducto
las estructuras del cordón espermático. más cercaiia al testículo.

262

Fig. s. se exteñoriza el conducto deferente a través Fig. 11. Mediante un punto cruzado, con el mismo
ele la incisión realizada en latúnica vaginal yse abre mateñal utilizaoo para la ligadura, puede cerrarse la
una ventana entreel conducto ysu vascularización. túnica vaginal.

Fig. 12 Tras realizar el procedimiento en el otro lado,


se p<ocede ala sutura de ambas incisiones
cutáneas en un solo plano. Podemos utilizar para
Fig. 9. se coloca una ligadura de material absorbible ello una sutura intradérmica con material
ele 210 en el coo:Jucto, respetando su monofilamento absorbible, de foonaque no sea
vascularización. necesario retirar el materialde sutura.
or Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Orquidectomía en el perro y en el gato Orquidectomía. Caso 1 / Orquidectomía preescrotal en el perro

Dificultad técnica La extirpación de los testículos es posiblemente Dificultad técnica


la intervención quirúrgica más frecuentemente
realizada por los veterinarios. Sus indicaciones
son múltiples y van desde el control de la población
hasta la resolución de problemas endocrinológicos,
prostáticos, tumorales y de comportamiento.

Fig. 1. Para realizar


la CJQuidect001ia
preescrotal se de¡jla
y se P"OCede ala
asepsia efe una amplia
zooa alrededor del
escroto.

En caso de plantearse la orquidectomía oomo técnica de esteriliza·

En pacientes agresivas o de diffcil manejo sometidos a ción, debemos asegi.xarnos de que el CXllTiportamiento sexual resul·

orquidectomía, es recomendable cerrar la herida mediante ta molesto al propietario ya que, de no ser así, quizás la vasectomía,

sutura continua y material absorbible. Evitamos asísedar al menos agresiva y sin efectos secundarios. esté más indicada

animal de nuevo para retirar los puntos. La orquidectomía puede ser preescrotal, escrotal y oon ablación

escrotal.

En el perro se suele realizar la técnica preescrotal, empujando a los

testículos hacia la incisión desde el escroto.

Para impedir que la hemorragia del pedículo testicular se La orquidectomía con ablación del escroto se realiza menos fre·

produzca en el interior del abdomen, debemos mantenerlo cuentemente y está indicada cuando se tiene que hacer una ure­

pinzado al seccionarlo, hasta cercioramos de que no hay trostomía perineal por obstruoción uretral y en caso de lesiones trau­

sangrado. máticas del escroto.

En el gato la técnica de elección suele ser la escrotal, realizando una

única incisión en el rafe medio del escroto o dos, 1..11a en cada bolsa

Sea cual sea la variante quirúrgica, el procedimiento siempre consis·

te en incidir la piel y la tiJlica vaginal parietal. Se exterioriza el testícu­

lo por la incisión y digitalmente se separa la túnica de la cola del epi­


Fig. 2 . Se realiza unaúnica incisión en la piel,
dídimo mediante tracción. A oontinuación se identifican las estructu·
inmediatamente craneal ala tx>lsa escrotal, en la
ras del cordón espermático y se ligan por separado vasos y con­
linea media.
ducto deferente, con material absorbible.

El cierre de la incisión escrotal es optativo. En el gato no se suele

realizar. En la técnica preescrotal se sutura la piel mediante puntos

entrecortadoo simples. Otra opción, que nos evita la retirada de los

puntos es realizar una sutura intradérmica con material monofila·

mento absorbible.

Las principales complieaciónes penoperatorias de la orquidectomía

son los seromas e inflamaciones de la bolsa escrotal y las hetnorra­

gias. Si las ligaduras del plexo pampiniforme no se colocan suficien­

temente apretadas o se aflojan, puede producirse más fácilmente

una hemorragia en el interior del abdomen que pasa inadvertida.

Fig. 3. Se p-ofuooiza la incisión disecando con tijera


el tejido suOCu!áneo.
or
Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Fig. 4. Se empuja el primer testículo hacia la incisión Fig. 7. Para liberar el testiculo de su unión con el
mediante una suave presión hasta visualizal1o repliegue de la túnica vaginal y la insercióndel
envuelto en la túnica vaginal. músculo cremáster podernos ayudarnos de gasas.

266

Fig. s. Utílizaroo el bisturí se incíde la túríca vaginal


procurando no dañar el parénquima del testículo,
evitando asi la consiguiente hernmagia.

Fig. 6. La túnica vaginal, una vez abierta, queda


unida por unrepliegue al pOlocaudal del testiculo
junto a la inserción del músculo crernáster. Dicha
unión se rompe mediante diseociónroma utilizando Fig. a. En el cord:in esperrnático identificarnos PO< un lado el plexo parnpiniforrne Fig. 9. Se procede acontinuacióna ligar doblemente las estructuras vasculares
los deoos pulgar eíndiee de ambas manos. ypor otro el coooucto deferente consu vasculañzacioo propia. Ambas estructuras del cordón espermático constituidas por el plexo parnpinilorrney la arteria
La ventaja de esteprocedimientofrente al corte es se incividualizan abrieooo una ventana con ayuda de una pinza roma en el meso testicular, (Jle no resulta visible porque discurre PCf su interior. Se escoge para
que minimiza el sangrado. que las une. ello un rnateñal rnonofilarnentoabsolbble de 2/0 ode o.
or Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Fig. t3. se empuja el segundo testículohacia la


misma incisión, exteriorizándolo aún cubierto PO< la
túnica vaginal,QUe abriremos como en el primer
testículo. Como hemos realizado anteriormente.
Fig. to. se seccionan los vasos por encima de las se individualizan, ligan y seccionan los componentes
ligaduras. del corcl:'.>n espermático.

268

Fig. t4. La herida Quirúrgica se sutura en dos


Fig. t t. El conwcto deferente se liga junto con su planos. Cooienzamos por el subcutáneo. realizando
vascularizaciónmroiante ligadura simple con el una sutura continua con material atisorbíble
mismo material y se secciona igualmente. monofilamento de 2/0 ode 310.

Fig. t2. Una vez comprobada la ausencia de


sangrado. se empujan con una pinza los pedículos Fig. t5. Terminamos el cierre realizando una sutura
hacia el interi0< de la túnica vaginal, en dirección al intradérmica de la piel conel mismo tipo de material
anillo inguinal. Que el utilizado en el plano subcutáneo.
or Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Dificultad técnica

Fig. 1. Nuestro paciente.

270 271

Fig. 16. Mediante la sutura intradérmica evitamos al

pociente una nueva manipulación para la retiracla de

puntos.

Rg. 2. En pñmer lugar se procede a la depilación manual del escroto.

Fig. 17. Aspecto final de la zona quirúrgiea en dorde

se aprecia la bolsa escrotal vacíay la herida

quirúrgica ya cicatrizooa.

pa pos nor Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Fig. 6. Se abre una ventana en el meso testicular


Fig. 3. Para lograr una buena expooición del camPo separarm a un lado las estructtras vasc~ares del
operatono,se coloca al paciente en decúbito supino cordón junto con el conducto deferente, y al otro el
con las extremidades posteriores en dirección repliegue de la túnica vaginal y el músculo
craneal. cremáster.

272 273

Fig.4. Se incide el escroto directamente encima del Fig. 7. La ventana se agranda lo suficiente como
pñmer testículohasta visualizar la túnica vaginal, para IJ()der pasar las ligaduras asu través con
Que también se cortará. comocfldad.

Fig. 5. Se prolonga longitudinalmentelaincisión de Fig. s. Tras independizar el oonwcto deferente de la


la vaginal al objeto de visualizar las estructuras del vasculañzacioo testicular se rodea éste con una
cordónespermático. ligadura.
pa pos nor Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Fig. 12. Se seccionan acontinuación ambas


Fig. 9. Se anuda la ligadura sobre el conducto estructuras. manteniéndolas pinzadas hasta et final
deferente y su vaso. de la intervención.

274 275

Fig. 10. Ap'ovechando la misma ventanaen el meso

testicular, ligamos aoontinuoción la vascularización


Fig. 13. Sección del repliegue de la !única vaginal
de fCtma inde~ndiente. ydel músculocremáster.

Fig. 11. El material utilizado ¡x¡ra las ligaduras debe Fig. 14. Através de la misma incisión se procede ool
ser absortJi!Xe. mismo modo con el otro testículo.
or Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Dificultad técnica

Fig. t . Para la realizacióo de lacastración con


Fig. t5. Tras comprobar que rjnguno de los 00s ablación del escrOlo se coloca al paciente en
p00ículoo sangra, se íntroduceo hacía el canal decúbito supino yse prepara un campo quirúrgico
inguinal. amplio alrededor del mismo, de la forma habitual.

Las principales indicaciones de la


castración con ablación del escroto 277
son las lesiones escrotales traumáticas
o tumorales y la realización de una
uretrostomía escrotal.

Fig. 2. Se realiza una incisiónelíptica en la piel,


alrededor de la implantacióo de la bolsa escrotal.

Fig. 3. Al ser un territolio muy vasc!Aarizado es


Fig. t6. Aspecto del escroto una vez finalizada la preciso realizar unameticulosa hemostasia, para lo
O<Quidectomía. En el gato es habitual no suturar el cual podemoo ayudarros de un electrocauterio
escroto. bipdar.
L p o Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Fig. 4. Una vez oonpletada la irrjSión cutánea


alrededor del escroto. se levanta éstejuntocon
ambos testículoo, meciantedisección del tejido
suOCuláneo,quedando al descubierto el cordál Fig. 7. A través de la misma ventana se pasan dos
espermático. ligaduras más para el plexo pam1dorme.

279

Fig. 5. Se incide la túnica vaginal sobre el testículoy Fig. a. Se secciona el plexo pampinilocme
se prolonga longitudinalmente sobre el cordón diStalmente alas ligacllras. Conviene mantenei10
espermático, de forma que QUedan expuestos et pinzaoo ¡:roximalmente hasta asegurarse de que no
conducto deferente yel plexo pampiniforme. sangra.

Fig. 6. Se abre unaventana entreel plexo


pampiniforme y el conructo deferente,
independizando así ambas estílJCtUras Se pasa asu
través una ¡:cimeraligadura para el condocto Fig. 9. Se procede de igual manera con el conducto
deferente. deferente.
or Técnicas generales Orquidectomía en el perro y en el gato

Fig. 10. Antes de seccionar el repliegue de la túnica

vaginal junto con el músculo cremáster, se cauteriza

éste con una pinza bi1X>lar.

280 281

Rg. 13. Una vez realiZada la orquidectomía de ambos testículos, se termina dedisecar la bolsa escrotal, que forma junto con los testiculos una sota pieza.
Fig. 11. Una vez seccionado el cremáster,se termina
ele liberar el testiculo mediante cisección roma y una
suave tracción.

Rg. i4. Para finalizar lainteNeneión se realiZará


una sutura en dos planos: tejido celular subcutáneo
y piel. En este caso, el objeto ele la orquidectomía
con abloción del escroto fue la realizoción de una
Fig. 12. Se rep~e el procedimiento con el segundo uretrostomia escrotal. En la imagense a¡:recia la
testiculo. sutura de la mucosa uretral ala piel.
Técnicas generales Laparotomía infraumbilical

Dificultad técnica

La laparotomía infraumbilical es el acceso quirúrgico


de elección al abdomen caudal. En el macho se
realiza esta técnica muyfrecuentemente, con el
objeto de extirpar testículos criptórquidos, realizar
cistotomías o accedera la próstata.

Fig. '· Se pre~ para laJXirotomia infraumbilical el


campo quirúrgico. Para ello se sujeta el prepucio
con una pinza atraumática late.~izándáo al laoo
contrario en el que se va a incidir.

A diferencia de la hembra, en el macho no podemos incidir la piel


El lavada del campo quirúrgico antes de cualquier tipo de directamente sobre la línea alba. Será preciso realizar una incisión
laparotomfa debe ser escrupuloso. En este caso hay que cutánea parapeniana y, una vez lateralizado el pene, poder acceder
prestar especial atención o la limpieza de pene y prepucio. De a la línea alba.
esta forma evitaremos muchas infecciones. Se coloca al paciente en decúbito supino. Con una pinza se fija el
prepucio a un lado de la línea media. La incisión de la piel comienza
caudalmente al ombligo en la linea media y, al llegar al prepucio, se
curva a un lado u otro para evitarlo y continua caudalmente en para­
Poro evitar la eventración tros uno laparotomía, es lelo oon el pene, para terminar i1mediatamente por delante del pubis.
determinante que lo suturo de lo lfneo albo incluyo lo Cuando no es preciso realiza una incisión tan amplia, será suficien­
282
{ascio externo de los rectos del abdomen. Es ésta copa lo te una incisión cutánea recta y paralela al pene en toda su longitud.
que da resistencia a la sutura. En cualquier caso, la incisión se profundiza disecando el tejido si.b­
cutáneo hasta llegar a la línea alba. D.Jrante la disección de la zona
paralela a la porción más craneal del prepucio, hallaremoo la rama
prepucial de la arteria epigástrica caudal superficial. Dicha rama será
pinzada y cauterizada, o bien ligada, antes de seccionarla.
Una vez que se ha disecado bien la zona y se visualiza en toda su Fig. 2. Se realiza una incisión paralela al pene, de la
longitud la línea alba. se incide ésta con bisturí o tijera y se prolonga longitud precisa para el procedimiento que se va a
la incisión, protegiendo en todo manento los órganos internoo. realizar. La piel se incide con tistuó.
Una vez llevado a cabo el procedimiento quirúrgico del que se trate,
procederemos al cierre de la linea alba. que puede realizarse
mediante puntos entrecortad05 simples o oon una sutura continua,
reforzada con tres o cuatro puntoo cruzadoo o en ··x". Si está última
se realiza adecuadamente, no aumenta el riesgo de dehiscencia y se
consigue un cierre más rápido de la cavidad abdominal. Está
demostrado que, para evitar adherencias por respuesta inflamatoria
al material de sutura, es preferible no inclu'r al peritoneo parietal en la
sutura de la línea alba. Actualmente salbemos que en pooo tiempo el
peritoneo tapizará por migración celular la cara interna de la cicatriz.
En el cierre de la cavidad abdominal es muy importante la elección
del material de sutura. Actualmente estamos utilizando con muy
buenos resultados, material sintético absorbible monofilamento o
multifilamento (poligliconato y ácido poliglicólico). El calibre utilizado
tanto en la sutura continua como en los puntos cruzados, va de 210
a 1/0 según el tamaño del paciente.
El tejido subcutáneo lo cerramos con otra sutura continua del mismo
material, de 2/0 o 3/0. Para la piel utilizamos una sutura intradérmioa
también con poliglioonato del 2/0 o 3IO o bien puntoo entrecortados
Fig. 3. Se proful}jiza la incisión con tijera a través
simples o en "U" de material no aooorbible sintétioo y monofilarnento.
del tejido subcutáneo.
or Técnicas generales Laparotomía infraumbilical

Fig. 4. Al disecar el tejido so!Jcutáneo se encuentra


la arteriaepigástrica caudal superticial, paralela al Fig. 7. Unavez ligados ambos extremos de la arteria
pene, que es preciso respetar. Dicllaarteria da lugar prepucial, se prosigue ladisección del tejido
ala rama prepucial. subcutáneo.

285

Fig. 5. Se pinza acontinuación doblemente la rama Fig. a. La incisión se continúa hada la línea media
prepucial. hasta visualizar lalínea alba.

Fig. 9. Mediantedisecciónrema se expone la


longitud ele línea alba a incicfr, retiranoo la grasa que
Fig. 6. Después se seccionala arteria con tijera lacubre. El tejido adiposo suele ser abundante en
entre ambas pinzas. esta zona caudal del abdomen.
or Técnicas generales Laparotomía infraumbilical

Fig. 13. Para la realización de la sutura continua es


suficiente con abarcar en cada ~nto la fascia
externa del músculo recto abd001inal.En cualquier
caso no es necesario induir en la sutura el peritoneo
Fig. to. con tijera ocon bistun, según se prefiera, se parietal. Se ha deimstrado que de este modo se
realiza un ojal en la misma línea alba. producen menos acllerencias.

286

Fig. 11. La incisión se continúa coo tijera en toda su

longi!OO, protegiemo en todo m001ento las visceras


Fig. t4. Se continúa de la forma descritala suturade
ab:Jominales. la lineaalba.

Fig. t2. Una vez realizado el llQCedimiento


quirúrgico del que se trate. se procede acerrar el
ab:Jomen. Para ello se utiliza unasutura cootinua
con material absorbible multifilamento de 2/0, o
o 110,según el tamaño del paciente. El puntoinicial
debe anclarse en tejido no incidido, inmediatamente
por delante opor detrás del c001ienzo de la incisión. Fig. t5. Una vez sobrepasada la comisura opuesta
Será anudado cuidadosamente dado que de él de la herida,se anda el punto final, tan importante
depende en gran parte la integridad de la sutura como el inicial para la integñdad de la sutura.
or
Técnicas generales Cistotomía

Índice de presentación La cistotomía es la incisión quirúrgica de la vejiga


Dificultad técnica con el fin de extraer cálculos (Fig. 1), resecar
tumores, tomar biopsias o reparar lesiones.

La obstrucción urinaria puede producir hiperpatasemia y


trastornos cardiacas secundarios. Corríja/a antes de
anestesiaral paciente.

Sospeche infección de las vfas urinarias inferiores en todos


los animales que presenten litiasis vesical. Emplee
Fig. 16. la sutura oontinua se retuerza mediante puntos cruzados entrecortooos. Fig.17. En cada punto procuraremos incluir únicamente la tascia externa del antibióticos de eliminación renal y evite los nefrotóxicos
Unos 4 o 5 serán habitualmente suficientes para una incisión de este tipo. músculo recto, a cada loclo de la incisión.Al dar la puntada es importante alejar la como aminog/ucósidos y tetraciclinas.
aguja ele la sutura continua previamente realizada, para evitar cor1311a.

288

Fig. 1. Paciente que sulria una obstrucción urinaóa


po< cálculos alojaclos en la uretra.
En la primera tase del tratamiento se ha realizado la
Fig. 18. Acontinuación se cierra et plano subcutáneo urohictopropulsión de los cálculos al interior de la
mediante una sutura continua con material vejiga. En la siguiente tase se llevará acabo una
absorlli~e monofilamento de 2/0 o 310. cistotomía para extrae~os de la vejiga.

• Para acceder a la vejiga se debe realizar


una laparotomía media entre el ombligo y
et pubis.
Verlaparotomío •

lnfmumbilico/. pdg. 282

• Sonde la vejiga y realice un lavado de la


misma con suero fisiológico estéril con et
fin de eliminar la orina y fa mayor cantidad
de gérmenes posible (Fig. 2).

Fig. 2 . 8 lavado ele la vejiga,realizado valias veces


Fig. 19. Para terminar se cierra la piel mediante con suero estéril, rewce la p-obabilidad de
puntos entrecortados en "U", utilizando para ello peritonitis en caso de saliela del contenido vesical al
material monofilamento no absorbible de 210 o 310. peritoneo.
or
Técnicas generales Cistotomía

• Aislar la vejiga del resto de la cavidad abdominal (Fig. 3). • Sondar la uretra y realizar un lavado retró­
• Colocar dos puntos de fijación para inmOVilizar y manipular la veji­ grado de la vejiga para eliminar cálculos
ga (Fig. 4). de pequeño tamaño y arenilla que haya
podido q.¡edar en el fondo vesical (Fig. 7).
• La incisión de la vejiga se debe hacer por la cara ventral de la
misma, lejos de los uréteres y de la uretra (Fig. 5).
• Extraiga los cálculos vesicales, y tome una biopsia de la mucosa
para remitirla para un clAtivo y antibiograma (Fig. 6).

Rg. 7. Antes de suturar la vejiga se debe realizar un


lavado con suero fisiológico atemperado de la
misma para arrastrar pequeños cálculos yarenilla
Identifique, localice y no lesione los uréteres ni la uretro. difíciles deeliminar manualmente. Sería un gran
error dejar urolitos en el interior de la vejiga.

• Cierre de la vejiga en dos planos con


material sintético absorbible monofila­
mento (Fig. 8).
• Al finalizar la sutura se recomienda com­
probar la estanqueidad del cierre realiza·
do (Fig. 9).
• Para evitar adherencias no deseadas de
la vejiga a otras estructuras abdominales
le recomendamos que la rodee con epi·
pión antes de cerrar la l~otomia.

Fig. 3. Se colocan clferentes paños quirúrgicos estériles ix>r debajo y alrededor ele Fig. 4. La colocación de dos o tres puntos en el ápiee ycerca del cuello vesical Flg. a. La vejiga se cierracon dos suturas continuas,

lavejiga para evitar el paso de orina a lacavidad peritoneal. facilitan la manipulaciónde la vejiga. siendo la segunda irriaginante.

El tipo de punto empleroo se deja a la elección del

cirujano (Cushing, Lembert ...).

En los suturos de vías urinarias


se debe empleor material
mono{ilamento absorbible para
evitar la formación de cálculos
alrededor del hilo empleado.

Fig. s. La incisión vesical se realiza con bisturíen una zona cerca del ápice ylejos Fig. 6. Extracción de los diferentes cálculos vesicales. Rg. 9. Para confirmar la ausencia de fuga de orina
ele los vasos sangulneos mayores. Acontinuación se amplia distalmentecon rXJr la sutura se inyecta suero fisiológico en la luz
tijeras. vesical ,y se comprueba que no existe salida del
mismo a través de los pt11tos realizados.
pa pos nor Técnicas generales Cistotomía

Una alternativa al aislamiento de la vejiga


con paños de campo puede se< la realiza­
ción de una sutura de la vejiga a la pared
abdominal (Rgs. 10y 11).

Fig. 10. Se realiza una microlaparotomía


su¡:rapúbica. se localiza y exterioriza la vejiga. Fig. 13. Extracción oo los cálculos. Fig. 14. 8iminación de urolitos pequeños y arenilla mroiante sondaje uretral y
Con una sutura continua de mateílal monofilamento lavado retrógrado vesical.
310 se fija el contorno de la vejiga a la apooeUfosis
anterior de la pared abdominal.

293

Fig. 11. Al finalizar la sutura y tensar el hilo, la pared Rg. 15. Cierre oo la vejiga con sutura continua em¡Xeando material sintético. Fig. 16. Gracias al empleo de mateñal monofilamento esta sutura se retira con
vesical queda íntimamente unida al abdomen. monofilamento absorbible de 310 facilidad y Sin lesionar la pared vesical.
impidiendo casi pcr completo la contaminación
peritoneal pcr orina.

Las siguientes fases de la intervención son • En este caso. y antes de cerrCI' la lapCl'o­
las descñtas anteriormente (Figs. 12-15). tomía, es necesario retirar la sutura conti­
rua realizada entre la vejiga y el abdomen
(Fig. 16); como en la opción anterior
rodee la vejiga con epiplón.
• En ambas técnicas recomendamos dejar
sondado al paciente durante 24-36
horas (Fig. 17).

Rg. 17. Durante las primeras horas del


~tqieratolio se deja sondada la vejiga yse vacía
cada poco tiempo (3·4 horas).De esta forma
consegLiremos evitar sotvetensiones en la sutura
Fig. 12. Incisión de la vejiga con bisturf, comenzando vesical por cúmulo de orina o po< esfuerzos para
en el ápice vesical. elimina~a.
Esta obra publicada por Servet se acabó de imprimir
en IMPULSO Global Solutions en septiembre de 2013.

También podría gustarte