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Caracterización del clima en España.

Introducció n.

España es un país extenso con variadas características climáticas y contrastadas, que son el
resultado de la combinación de los elementos climáticos, su distribución espacial y de la influencia
de una serie de factores climáticos.
Diferencia:
El tiempo atmosférico es el estado de la atmósfera sobre un lugar en un momento determinado.
Tiene variabilidad y se determina mediante observaciones efectuadas directamente. Meteorología
(ciencia del tiempo).
El clima es el estado medio de la atmósfera sobre un lugar, ocasionado por la sucesión de tipos de
tiempo sobre ese lugar a lo largo del año. Tiene rasgos más estables que se determinan
estadísticamente a partir del cálculo de valores medios, para que sean fiables es necesario esperar
hasta 30 años. Climatología (ciencia del clima).

Los elementos climáticos y su distribución espacial.

Los elementos climáticos son los componentes observables y medibles de la atmósfera que pueden
describirse: insolación, nubosidad, temperatura, humedad, presión, viento, precipitaciones,
evaporación y aridez. Pueden variar en función de la influencia de los factores del clima. La
climatología está dividida en dos elementos, la temperatura y las precipitaciones para dar con el
clima de un lugar.
Las precipitaciones y su distribución espacial.
La precipitación es el agua que procede de las nubes y cae a la superficie terrestre, en forma sólida
y líquida, se mide con el pluviómetro en mm o litros por m2 y en los mapas se representa mediante
isoyetas (unen puntos de igual precipitación).
Las causas de las precipitaciones son la elevación, enfriamiento y la condensación del vapor de
agua contenido en el aire. La precipitación puede ser orográfica (debido al relieve), convectiva (por
el calentamiento del suelo) o de frente (al entrar en contacto dos masas de aire de características
distintas, la fría se introduce debajo de la cálida obligándola a ascender).
En España las precipitaciones tienen un volumen anual moderado y una gran variabilidad
interanual, estacional y espacial, debido a: la latitud y la situación determinan el predominio y la
sucesión anual de borrascas y anticiclones. La apertura al mar, las zonas aisladas de la influencia
del mar, el frío del invierno provoca la formación de anticiclones y el calor del verano dificulta la
condensación del aire, a veces también hay precipitación convectivas de carácter tormentoso.
El relieve: las precipitaciones aumentan con la altura y disminuyen en las zonas encerradas entre
montañas.
–La España húmeda: precipitaciones superiores a los 800mm aunque hay puntos que superan
los 2000mm, comprende las vertientes noroeste y norte. Las causas de la elevada pluviometría se
deben a su posición septentrional, con la influencia de borrascas y de los frentes atlánticos y el
relieve. Fuera de estos aires algunos frentes reciben precipitaciones similares, siendo islotes de
humedad en medio de zonas secas. En este caso la causa es la altitud y se relacionan con algunos
sectores de la Penibética, zonas elevadas de la cordillera Ibérica, sierras de Cazorla y Segura y
puntos de los Montes de Toledo y Sierra Morena. La sierra de Grazalema muy importante, zona más
lluviosa de España con 2000 litros anuales.
–La España seca: se da en la mayor parte de España, incluyendo las dos submesetas, el valle
del Ebro y del Guadalquivir, zonas de levante y Cataluña y gran parte de los archipiélagos,
delimitada por isoyetas de 300 a 800mm anuales. Las causas de la disminución de las
precipitaciones son el debilitamiento de los flujos atlánticos hacia el interior y en el caso de algunas
zonas del sur la influencia del clima tropical.
-La España árida: en lugares con menos de 300mm anuales. Se localiza en la mayor parte del
sureste peninsular, en el flanco levantino y algunas zonas del interior peninsular como las
altiplanicies granadinas y el bajo Ebro. La causa de estas escasas precipitaciones se debe al efecto
de pantalla que ejercen los relieves cercanos ante la dirección predominante de los flujos lluviosos y
en otros por su posición interior.

Las temperaturas y su distribución espacial.


La temperatura: grado del calor del aire, se mide en grados centígrados con el termómetro. En los
mapas aparece representado con isotermas (líneas que unen los puntos con igual temperatura).
Además en España las temperaturas medias presentan notables diferencias por la influencia de
diversos factores.
La latitud: hace que las temperaturas aumenten de norte a sur. La costa cantábrica es más fresca
inferior a 15ºC, en el resto la península con más de 15ºC y en el valle del Guadalquivir se
aproximan a los 20ºC; y entre medias están las submesetas y tierras extremeñas.
La influencia marítima: se da en la mitad occidental de la Península donde las temperaturas son
más frescas que en las áreas cercanas al Mediterráneo, además es la causante de temperaturas
elevadas hasta la costa mediterránea y la distancia al mar justifica que las temperaturas se extremen
en el interior.
La altitud y disposición del relieve: provocan que las isotermas en el interior de la península se
ajusten a las curvas del nivel con bastante fidelidad por lo que los puntos más fríos coinciden con
las áreas más altas de la Península.

Aspectos importantes de la temperatura es la relación con el clima son la amplitud térmica anual y
las heladas.
La amplitud térmica anual es la diferencia entre la temperatura media del mes más cálido y la del
mes más frío. En España las amplitudes más altas se dan en el interior peninsular, en las
submesetas, en el valle del Ebro y en las campiñas béticas, debido a la escasa influencia del mar en
estas zonas. El resultado de esto es un fuerte enfriamiento en invierno y recalentamiento en verano.
En la periferia marítima existe una relativa uniformidad debido a su posición entre la costa
atlántico-cantábrica, la cual origina inviernos suaves y veranos frescos y la costa mediterránea con
inviernos más cálidos y veranos calurosos, como consecuencia de la temperatura del mar y el viento
cálido del norte de África.

Las heladas se producen cuando la temperatura del aire baja a 0º C. El agua se congela y se
deposita en la superficie en forma de hielo. Estas pueden ser de irradiación cuando el enfriamiento
del suelo entra en contacto con el aire o de advección producidas por la llegada de masas de aire
muy frías. En España El mayor número de heladas se da en la zona de la submeseta norte y el valle
del Ebro y el menor número se da en la costa donde el mar suaviza la temperatura.

La humedad del aire es la cantidad de vapor de agua que contiene, esto depende de la proximidad
del mar y de la temperatura. En España se supera la media del 70% anual en las costas y en la
submeseta norte.

La niebla es la suspensión de diminutas gotas de agua en la capa inferior de la atmósfera. Se


produce cuando el aire de la capa inferior de la atmósfera se enfría y se condensa. Es frecuente en
zonas de montaña, en valles y cuencas fluviales.

La calima está causada por la presencia de finas partículas de polvo en las capas bajas de la
atmósfera. Se forma en la España seca en verano, cuando los suelos están resecos y las partículas
son elevadas y mantenidas en suspensión por movimientos ascendentes causados por el
recalentamiento del suelo

La aridez es la falta de agua en el suelo o en la atmósfera y depende de las precipitaciones y la


temperatura. Es mayor cuando las precipitaciones son menores y la temperatura alta. En España las
irregulares precipitaciones, la fuerte insolación y las elevadas temperaturas provocan que tres
cuartas partes de España se caractericen por la escasez de precipitaciones estivales.
La aridez mensual se realiza mediante el índice de Gaussen y la aridez general de una zona se
calcula con el índice de De Martonne. Se puede hablar de zona húmeda, semihúmeda, semiárida,
esteparia y desértica.

La insolación es la cantidad de radiación solar recibida por la superficie terrestre. La nubosidad es


cuando el cielo está cubierto de nubes. Debido a la posición latitudinal, en España se superan las
2.000 horas de sol al año, pero existen contrastes entre la cornisa cantábrica donde no se alcanzan
casi las 1.700 horas y el suroeste peninsular (San Fernando con 3.233 horas) y Canarias.

Los vientos son movimientos horizontales del aire en relación con la superficie terrestre. Se
producen debido a las diferencias de presión, que van desde las altas hasta las bajas presiones. En la
Península predominan los vientos del oeste y en Canarias predomina el viento aliso del noreste. Las
diferencias de presión provocan también vientos alternantes como las brisas marinas y de montaña.

Los factores del clima.


Son rasgos permanentes que ejercen una influencia constante e inalterable sobre el clima

1) Factores astronómicos.
Son constantes y están relacionados con la situación de España. La latitud influye en los balances de
radiación solar y en la duración de los días y las noches. Los movimientos de rotación y traslación
causan la sucesión de los días y las noches y las estaciones.
La posición de España (36º y 44º de latitud norte, en la zona templada del Hemisferio Norte) da
lugar a dos estaciones invierno y verano y dos estaciones intermedias primavera y otoño. La
proximidad de Canarias al Trópico de Cáncer hace que los contrastes entre estaciones sean menores.
También determina la duración de los días y las noches y la cantidad de radiación solar recibida.

2) Factores geográficos
Modifican la influencia de los factores astronómicos y dan diversidad al clima.
La Península está situada entre dos mares (Atlántico y Mediterráneo) y dos continentes (Europa y
África) convirtiéndola en un lugar donde se mezcla aire de propiedades distintas según su
procedencia: húmeda las marinas, secas las continentales; frías las europeas y cálidas las africanas.
Canarias recibe influencias atmosféricas diferentes debido a su proximidad a las costas africanas.
La influencia del mar es escasa; debido a la gran anchura de la meseta, sus costas poco recortadas y
la existencia de sistemas montañosos paralelos a la costa. Esto provoca diferencias climáticas en la
zona periférica abierta al mar y en las tierras interiores caracterizadas por su continentalidad.

El relieve tiene una gran importancia debido a su altitud media, su orientación y disposición
periférica. Los sistemas montañosos paralelos a las costas frenan la influencia del mar, excepto en la
zona del Guadalquivir. La orientación oeste- este de estos dificultan la entrada de masas de aire
procedentes del norte o sur y favorecen la entrada por el oeste de masas de aire, las cuales pierden
gran parte de su humedad y extreman su temperatura al entrar el interior. En las cuencas del Duero
y del Ebro las precipitaciones son escasas ya que descargan su humedad en los sistemas
montañosos que las rodean. Las nieblas son frecuentes por el estancamiento del aire, la altitud
disminuye la temperatura 0,5º por cada 100 m de ascenso. También provoca precipitaciones
orográficas (en las laderas por las que asciende el aire), precipitaciones horizontales (estancamiento
de las nubes en las laderas) y precipitaciones ocultas (escarcha y rocío). La orientación origina
contrastes climáticos locales entre las solanas y las umbrías.

3) Factores termodinámicos
Es el responsable de la sucesión de masas de aire, que determina los distintos tipos de tiempo
atmosférico y de clima. La circulación atmosférica está regida en altura por las corrientes en chorro
y en superficie por los centros de acción, las masas de aire y los frentes.

La circulación en altura; la corriente en chorro.


La circulación atmosférica de la zona templada está dirigida por la corriente en chorro o Jet stream,
la cual es una fuerte corriente de viento de estructura tubular, que circula en dirección oeste-este
entre los 9 y 11 km de altitud. El chorro separa las bajas presiones polares de las altas presiones
tropicales. La corriente en chorro es la responsable del tiempo en superficie, dependiendo de la
variación de la velocidad de las corrientes y de sus desplazamientos estacionales.
Cuando circula rápido (más de 150 km/h) tiene un trazado zonal con suaves ondulaciones, que
corresponde en superficie con el frente polar y sus borrascas, cuando la velocidad disminuye,
realiza profundas ondulaciones, crestas o dorsales (altas presiones) y valles o vaguadas (bajas
presiones), ambas se reflejan y dan lugar a anticiclones y borrascas. En España, los desplazamientos
estacionales del chorro en latitud afectan en invierno, cuando circula más en el sur. En verano se
traslada hacia el norte, hacia la franja cantábrica peninsular.

La circulación en superficie: centros de acción, masas de aire y frentes


Está dirigida por los centros de acción, masas de aire y los frentes:
1. Los centros de acción son áreas de altas y bajas presiones. Esta presión atmosférica es el peso
del aire sobre una unidad de superficie, se mide en milibares con el barómetro. En los mapas se
representan mediante isobara que van de 4 en 4, su presión normal es de 1013mb (en los mapas
1016mb). En España dominan las altas presiones en invierno y en verano, en otoño y primavera las
bajas presiones, aunque en el interior se produce presiones bajas por el calentamiento del suelo. En
Canarias, predominan las altas presiones.
Un anticiclón es una zona de alta presión rodeada de otras presiones más bajas, produce tiempo
estable, el viento circula en sentido de las agujas del reloj.
Una borrasca es una zona de bajas presiones rodeadas de otras presiones más altas, produce tiempo
inestable y lluvioso, el viento va en sentido contrario al de las agujas del reloj.

Su origen puede ser térmico, se forman por el enfriamiento o calentamiento del aire.
-Un anticiclón térmico se forma cuando una masa de aire se enfría, este aire pesa más, por lo que
desciende y ejerce una alta presión.
-Una baja térmica se forma cuando el aire se caliente, este aire pesa menos, por lo que se eleva y
ejerce una baja presión.
Los centros de acción dinámicos se forman a partir de las crestas (generan anticiclones) y las
vaguadas (borrascas) de la corriente en chorro, que se reflejan en superficie.

Los principales centros de acción que dirigen la circulación atmosférica en la Península.

Anticiclón de las Azores: Masa de aire tropical, marítimo, estable y permanente que se desplaza al
norte en verano, provocando un tiempo cálido, seco y soleado, en invierno se desplaza hacia el sur
provocando borrascas atlánticas.
Anticiclón de Europa Central: Masa de aire frío, continental y térmico, provocando un tiempo frío,
seco y soleado, aparece en invierno, con un frío intenso y fuertes heladas.
Otros centros de acción anticiclónicos serían el anticiclón escandinavo, con aire polar, frío intenso
de corta duración y anticiclones térmicos en el interior formados por el enfriamiento del aire en
invierno.
Borrasca de Islandia: Masa de aire frío marítimo, se localiza en el Atlántico Norte, es una baja
presión permanente que empuja hacia nuestras costas vientos fríos y húmedos. Se desplaza hacia el
sur en invierno, llegando a nuestra Península, especialmente a la cornisa cantábrica, provocando
precipitaciones. Se suaviza en verano por la influencia de la corriente marina cálida procedente del
golfo de México.
Depresión del Norte de África: Masa de aire cálido, continental, seca y estable en su origen pero
que, al atravesar el Mediterráneo, se carga de humedad y se inestabilidad, provocando lluvias en el
litoral mediterráneo.
Centros de acción depresionarios serían la borrasca del golfo de Génova, formada cuando las
coladas de aire frío continental europeo llegan al Mediterráneo, más cálido y húmedo; activa en el
otoño dando lugar precipitaciones cuando coincide con una gota fría. La depresión del golfo de
Cádiz, formada al retirarse hacia el sur el Anticiclón de las Azores; se forma en invierno y deja
lluvias en el oeste de Andalucía, y la depresión térmica del interior peninsular, formadas por el
calentamiento del aire en verano.
2) Las masas de aire son porciones de aire con unas características concretas de temperatura
humedad y presión. Estas propiedades las consiguen en su lugar de origen.
España recibe masas de aire frías árticas o polares y masas de aire cálidas tropicales. Dependiendo
de la superficie sobre la que se forman, pueden ser marítimas húmedas o continentales secas, estas
características pueden modificarse. Estas masas son las causantes de los anticiclones y borrascas.
3) Los frentes son superficies que separan dos masas de aire de características distintas, a cada lado
de un frente se produce un cambio brusco de las propiedades del aire. El frente más importante en
España es el frente polar que separa las masas de aire tropical y polar, sus ondulaciones originan
borrascas de dos frentes que provocan precipitaciones.

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