BIOLÓGICAMENTE LIMITADOS

BY ERIKA SANTOS

El mundo es una incertidumbre, lo que se conoce ahora sobre él es lo que se ha

podido deducir después de cuestionar la existencia del ser humano y lo que le
rodea por miles de años. Sin embargo, aquello que sabemos puede que no sea
lo que piensa, ¿quién garantiza que la percepción del mundo sea la correcta?,
¿Cómo se podría estar seguro de que se tiene toda la información necesaria?
Lo que se conoce, se basa en las leyes que han establecido los mismos seres
humanos basado en los datos recolectados, analizados e interpretados. Por
tanto, ¿El ser humano posee racionalidad ilimitada?

Es complicado poder responder esa pregunta, según el diccionario de la RAE

razón es el “acto de discurrir el entendimiento”, es decir, pensar o imaginar, lo
que permite concebir las cosas, comparlas, juzgarlas e inducir o deducir otras de
las que ya se conocen haciendo referencia al entendimiento. Por tanto, los seres
humanos confían de esa razón para entender todo lo que han construido y
aquello que falta por descubrirse, incluso el ensayo que está leyendo, todo está
allí, en una relación biológica, la confianza se deposita en la razón.

En consecuencia, al ser seres dotados de razón que han adoptado su existencia

en comunidad ha sido necesario que dentro de su misma supervivencia tomen
decisiones en diferentes grados de dificultad, desde elegir que comer en la
mañana hasta escoger el tipo de procedimiento que deba aplicársele a una
persona para salvarle la vida. En este sentido, el mundo está lleno de decisiones
que se enfrentan a diario, lo ideal sería que las decisiones que toma cada
persona sean basadas en la búsqueda del camino cercano al optimo, a lo
correcto, a lo esperado y la razón es la herramienta.

Por otro lado, diversos estudios se han hecho alrededor del concepto de razón,
uno de ellos es la racionalidad limitada, concepto acuñado inicialmente en 1947
por Herbert Simon en su libro comportamiento administrativo, el planteó que los
seres humanos toman decisiones de forma parcialmente irracional en razón a
las limitaciones cognitivas, de información y de tiempo, lo que contradijo la idea
concebida en el siglo XIX por el economista John Stuart Mill bajo el término
“Homo economicus”, donde el hombre es una persona racional, que busca
maximizar sus utilidades. En este enfoque se asume que el hombre tiene
información perfecta de su realidad, busca su beneficio individual y para ello
pondera las posibilidades con total racionalidad en busca de la mejor opción, de
esta manera si se suman todos los intereses individuales se logra un interés
social.

Adicionalmente, también existe un enfoque bajo la psicología evolutiva la cual

conecta la psicología y la economía para mostrar como las adaptaciones
mentales están relacionadas con las restricciones de los ambientes sociales y
físicos, este campo ha encontrado que factores como la herencia (Hamilton), el
rango social (Fiddick & Cummins), los parentescos y lazos personales (Landa &
Wang), el seguimiento de reglas (McFadden), el tamaño de la información
(Dudey & Todd),el género (Saad & Gill), los sesgos cognitivos (Kahneman &
Tversky) entre otros afectan directa o indirectamente la toma de decisiones y en
general la interacción de hombre con su entorno y con los demás.

Dado lo anterior, es menester aclarar que la psicología evolutiva es “una rama

de la psicología que tiene como objeto el estudio del desarrollo del ser humano
a lo largo de todo su ciclo vital” [1] por tanto está sustentada en varios campos,
algunos de ellos son la evolución de la biología, la antropología biológica y social,
genética poblacional y ecología del comportamiento. Por tanto, los hallazgos que
argumentan la toma de decisiones son inherentes a la naturaleza humana
tomando aspectos de interacción con el medio y características biológicas donde
la racionalidad del hombre es limitada en presencia de recursos cognitivos
limitados.

En ese sentido, para mi concepto no se puede asegurar una racionalidad

ilimitada, aunque el cerebro sea un potente órgano capaz de captar, procesar y
almacenar miles de millones de información, una persona no llega a conocer
todo, la racionalidad es limitada en razón a la biología limitada, puesto que no ha
sido posible estar en varios lugares al mismo tiempo o poder conocer todos los
aspectos relacionados a un tema; aunque el cerebro tenga la capacidad de
captar no posee los medios necesarios para desarrollar su potencial, lo que
vemos, sentimos, olemos, oímos, probamos todo está limitado a nuestra
naturaleza biológica, por tanto, aunque puede que sintamos la sensación de
saberlo todo no es así.

Adicionalmente, la propia biología inherente a cada ser humano hace que

desarrolle una personalidad ligada a la herencia, a los entornos sociales y a las
posibilidades que ofrece el entorno, somos seres emocionales que se
complementan, puesto que unos desarrollan habilidades en mayor proporción a
otros y de esta misma manera las experiencias, influencias, logros no son los
mismos y por tanto, la caja de herramientas es limitada a la vida misma de cada
ser humano concluyendo así que somos biológicamente limitados y por tanto
nuestra racionalidad es limitada.
REFERENCIAS
[1] Psicología evolutiva: qué es, principales autores y teorías. (2020). Retrieved
9 May 2020, from https://psicologiaymente.com/desarrollo/psicologia-evolutiva
BIBLIOGRAFIA
[1] Introduction: Bounded Rationality of Economic Man: New Frontiers in
Evolutionary Psychology and Bioeconomics - ProQuest. (2020). Retrieved 9 May
2020, from
https://search.proquest.com/openview/1c8ae8c359f68289e17211b13cdce0c6/1
?pq-origsite=gscholar&cbl=25710