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Coltivatore S.P.A. es una industria importante de cereales para desayuno, productos enlatados,
café instantáneo, comidas congeladas y alimentos en general. Las ventas totales de la compañía
en 1993 fueron de 1000 millones de dólares, aproximadamente, y tiene nueve subsidiarias
manufactureras y diez puntos de comercialización en el mundo. Las operaciones internacionales,
incluyendo exportaciones, sumaron 50 % de las ventas totales de la compañía. Las ventas
internacionales han tenido una tasa de crecimiento importante durante el decenio de 1980.
Global Rural parecía ser una contraparte potencialmente atractiva. A inicios de 1985, la compañía
empezó un activo programa de diversificación en nuevos productos alimenticios. La compañía
entró con éxito en estos nuevos mercados, incluyendo la salsa de tomate, espárragos frescos,
néctar de maracuyá, mango, concentrado de piña y otros productos. Tenía reputación por su alta
calidad.
Hacia mediados de 1985, Globo Rural S.A. comenzó a buscar nuevos productos. Estaba
particularmente interesada en cereales, crema para café artificial, sopa enlatada, alimentos
congelados y frutas frescas. La compañía consideró que a través de las concesiones o de un joint
venture con una compañía extranjera importante, podría conquistar nuevos mercados e
incrementar sus exportaciones, pues de esa manera estaría preparada para enfrentar a sus
mayores competidores, tanto de Argentina y Brasil como de Perú y Colombia. Su interés en
Coltivatore S.P.A. estaba en función de la experiencia en marketing internacional y el control de los
canales de comercialización y uso de marcas en Europa. Por su parte, esta empresa estaba
ansiosa por tener una presencia permanente en América Latina y deseaba establecer un joint
venture de manufactura.
Las negociaciones fueron difíciles, porque fue la primera experiencia de este tipo para ambas
compañías. Coltivatore S.P.A. prácticamente no tenía experiencia previa en América Latina y para
Globo Rural era el primer joint venture con una compañía extranjera, a pesar de que sí se había
involucrado en procesos de concesión y exportaciones a través de trading companies con muchas
firmas americanas y europeas.
Las compañías estuvieron de acuerdo en que el co-venture italiano podría nominar al presidente,
aunque esto estaba sujeto a la aprobación de la empresa latinoamericana, que podría designar una
persona para la posición de vicepresidente ejecutivo. Coltivatore S.P.A. tendría cuatro miembros en
la Junta Directiva: el doctor Andrea Salvattore, el señor Helio Sirimarco (que fue la designación de
Globo Rural S.A. para vicepresidente ejecutivo) y el presidente y vicepresidente ejecutivo de
Coltivatore S.P.A. Representando a la compañía latinoamericana estaban el presidente y
vicepresidente ejecutivo de Globo Rural S.A. y dos ejecutivos designados para esa ocasión: el
ingeniero Claudio Petribú y el doctor Roberto de Meirelles.
Coltivatore S.P.A. había preparado para la reunión un proyecto de contrato-base, en tanto que
Globo Rural S.A. encomendó a un equipo de abogados la preparación de un modelo de contrato
con los lineamientos básicos. Ambos documentos se habían elaborado teniendo en consideración
las gestiones y negociaciones comerciales sostenidas un año antes.
El presidente ejecutivo de Coltivatore S.P.A. estaba preocupado por el doctor Roberto de Meirelles,
quien no tenía experiencia en la línea y no podía entender porqué Globo Rural S.A. proponía a tal
persona para la presidencia del comité de gestión del joint venture, particularmente cunado estaba
en una etapa crítica de crecimiento.
No se trataba sólo de que el presidente ejecutivo de Coltivatore S.P.A. sintiera que el doctor
Meirelles no tuviera ni la calidad ni la experiencia para la presidencia, sino que también le
disgustaba el hecho de que Globo Rural S.A. estaba usando el joint venture para acomodar al hijo
de un político. Sería justificado que Globo Rural S.A. usara esto, por ejemplo, para alguna de sus
subsidiarias o dentro de su organización, ya que el doctor Meirelles había sido un empelado
efectivo y leal que había hecho contribuciones significativas, pero tampoco había razón para que el
joint venture tuviera que asumirlo. Sobre todo porque el joint venture necesitaba una guía dinámica
para establecer una posición de mercado viable.
El presidente de Coltivatore S.P.A. sugirió como presidente a otra persona: el doctor Luiz Carauta,
gerente de Marketing de Globo Rural S.A., quien había realizado un año atrás los primeros
contactos con las actuales empresas. Tenía cincuenta años y había sido trasladado al equipo
ejecutivo del joint venture.
El doctor Carauta fue enviado varias veces a las oficinas centrales de Coltivatore S.P.A. en Roma,
para que se empapara de las operaciones de mercadeo de la compañía. Estuvo casi tres meses en
Italia. Parecía dinámico, altamente motivado y pragmático, cualidades que el presidente de
Coltivatore S.P.A. admiraba. Además, tenía un conocimiento razonable del italiano. La
comunicación no era sencilla, pero era posible sostener conversaciones sobre aspectos
sustanciales.
Sin embargo, los directivos de Globo Rural S.A. insistieron en mantener al doctor Roberto de
Meirelles como candidato a la presidencia del comité de gestión, debido a sus contactos con
algunos políticos de su país, sobre todo porque Globo Rural S.A., pretendía ingresar a la licitación
internacional de una planta de tratamiento de pulpa de tomate que el gobierno estaba vendiendo
dentro del programa acelerado de privatizaciones. Por otro lado, dijeron que ello se definiría
durante la negociación de los acuerdos de formación del joint venture.
Ambas empresas tenían el mayor interés por formalizar la operación de joint venture, cuyas
características básicas serían:
1. Global Rural S.A. es una empresa que se dedica a la producción de productos naturales ya
detallados y demostrados en calidad y volumen durante los contactos previos y su
contribución será proveer tales mercancías según las exigencias del mercado europeo.
Al respecto, en las primeras investigaciones se había determinado que el conocimiento de
las cantidades importadas por los países europeos, para cada una de las especies
incluidas en el grupo de tropicales, resultaba muy difícil de conocer, dado que no poseían
un código tarifario específico sino que todas ellas iban englobadas en una partida
arancelaria denominada “otros zumos de frutas y hortalizas”. Las estadísticas nacionales
de los lugares de producción tampoco ayudaban a solucionar este problema, y lo único que
cabía hacer era deducir las cantidades de importación de un producto en función de sus
lugares de procedencia.
3. Gran parte del comercio realizado por Filipinas, Tailandia y México, se destina a abastecer
el mercado de EE.UU. y la Unión Europea (UE). Tanto Brasil como Sudamérica ejercen un
papel importante. En general, puede decirse que el crecimiento de las exportaciones es
paralelo al aumento de la producción: hacia 1988 las primeras se calculaban en 116.500
toneladas y las segundas en 177mil toneladas.
Por lo que se refiere al comercio establecido con los países integrantes de la UE, en 1987
supuso una cantidad de 45.385 toneladas, de las cuales 21.164 corresponden al comercio
de reexportación a través de los mercados europeos, por lo que sólo cabe tomar como
válida la cifra de 24.221 toneladas como importación procedente de terceros países.
Los mercados de mayor crecimiento en Europa son Francia, Italia y España y a ellos cabe
atribuir el aumento experimentado en las importaciones de la UE.
4. La exportación mundial de mango, expresada en zumo sencillo no concentrado, es de 25
mil toneladas, de las cuales 22 mil corresponden a la India, que es el principal país
productor y casi la mitad de sus exportaciones en forma de puré se orientan hacia Arabia
Saudita y Rusia. El principal problema que se enfrentó fue la falta de variedades de gran
calidad, como por ejemplo la variedad Alfonso. Por lo tanto, si esta variedad pudiera ser
superada, podría haber un mayor desarrollo del mercado.
6. Los extremos del “contrato-base” podrían estar referidos a los siguientes contratos
satélites:
6.1. Acuerdo de licencia por el cual Coltivatore S.P.A. facilita a Globo Rural S.A. la
tecnología y el know –how para la manufactura y marketing de productos tropicales,
zumos, pulpas y néctares, a cambio de un porcentaje del volumen total de ventas. Tal
acuerdo incluye entrenamiento, capacitación al personal latinoamericano y asistencia
técnica. El caso de patentes, trade markes y copyrights también entra bajo esta categoría.
6.2. Convenio industrial por el cual Globo Rural S.A. fabrica componentes o productos
terminados para /y de conformidad con las especificaciones de Coltivatore S.P.A., quien
vendería el producto bajo su nombre y a través de su sistema de distribución.
6.4. Acuerdo de know how según el cual Coltivatore S.P.A. proveerá asistencia técnica y
know-how a Globo Rural S.A. para la producción de todos los productos que elabora a la
fecha.
Tanto Coltivatore S.P.A. como Globo Rural S.A. tienen trabajos previos e incluso han elaborado
sus planteamientos. Al momento de negociar el contrato de joint venture, ninguna de ellas conoce
los esquemas detallados de la otra. Sin embargo, conocen minuciosamente las ventajas de la
unión.
Asimismo, se deberá tener en cuenta la legislación del país en el cual se instalará la planta del joint
venture.
3.2 HOJA INFORMATIVA DE COLTIVATORE S.P.A