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I.S.F.D.

Nº 41

TRABAJO PRÁCTICO
Nº2

CÁTEDRA: Cine italiano (EDI II)

CURSO: 3º

CARRERA: PROFESORADO EN LENGUA Y LITERATURA

PROFESORA: Zumbo, Matilde

AÑO: 2017

FECHA DE ENTREGA: 24/8

INTEGRANTES:

● Bais, Melanie
● Campetelli, David
● Suarez, Sabrina
● Uhryn, Micaela
● Vargas, Vanina
● Vázquez Ruano, Yanina
Consignas:

1) Argumento de la película.
2) Características de los personajes principales.
3) Justificar las características principales de los personajes con fragmentos de la obra.
4) Breve reseña del director y los actores principales (ideología).
5) Relacionar el argumento con el contexto histórico.
6) Coincidencias y contraposiciones con los otros films.
Película: Porcile.
Año: 1969.
Director: Pier Paolo Pasolini.
Actores: Pierre Clémenti, Jean Pierre Léaud, Alberto Lionello, Ugo tognazzi, Anne Wiazemsky, Margarita Lozano,
Marco Ferreri, Franco Citti, Ninetto Davoli.
Duración: 94 minutos.
Género: Drama.

1) Argumento: “Porcile” es una película de Pier Paolo Pasolini que narra dos historias sin relación aparente. La
primera se puede apreciar desde lo visual y la segunda desde su léxico. Ambas historias narran la bajeza humana
desde diferentes puntos de vista.

La primera es la historia de un caníbal, representación de los impulsos humanos, que deambula en búsqueda de
satisfacer sus necesidades. Paralelamente está la historia de Julián, un joven que, revelándose contra los
mandatos familiares, rechaza casarse con su prometida. De esta manera, protesta por los sucios negocios que
tiene su padre con los nazis. Aquella primera historia del caníbal narra uno de las peores humillaciones en las que
puede verse involucrado el ser humano: canibalismo. En la segunda, la indignidad humana se muestra desde la
perspectiva burguesa, la cual Julián rechaza desde un principio aunque, igualmente, se encuentro atrapado en
ella. Sin duda, este reflejo de la degradación humana va desde lo más primitivo hasta lo más elitista: la corrupción.
Ambos personajes expresan la rebeldía desde distintas perspectivas: el primero se desquita contra los caminantes
que serían una representación simbólica de la sociedad, a quienes devora; dejando al descubierto todo el odio y la
violencia del mundo. En cuanto al segundo, dicha rebeldía se ve expresada a través de una resistencia pasiva
desde su lugar, desde su propia existencia, es decir, que intenta escapar y esconderse, bajo ningún punto de vista
desea ser manipulado.

De trasfondo ambas actitudes son repudiadas por la sociedad. Tanto el caníbal como el marginado serán
destruidos, pero el primero tomará conciencia de aquel horror cometido aunque no haya arrepentimiento; mientras
que el segundo, siendo una víctima de la moral familiar, morirá devorado por los cerdos de una pocilga.

La historia del caníbal transcurre durante la época medieval, en una zona árida, montañosa, llena de volcanes y
cenizas; la acción se centra en las terribles relaciones que entabla un hombre entre el horror y los tiempos
pasados. La historia de Julián sucede en Alemania occidental, Godesberg.

La relación entre Julián e Ida, una joven que busca el amor del muchacho y además una relación conyugal, no
prospera debido a la apatía que muestra en todo momento Julián. Él guarda un oscuro secreto sobre su amor por
algo que no puede ni quiere decírselo a nadie.

El señor Klotz, padre de Julián, recibe la visita de un ex compañero de estudios, con pasado tan o más turbio que
él, el señor Herdhitze. Entre estos dos hombres existe y siempre existió una vieja rivalidad, tanto uno como el otro
intentan, desde hace largo tiempo, quitar del medio al otro de la competencia en los negocios económicos.
Cuando el padre de Julián cree tener a Herdhitze entre sus manos, debido al pasado de asesinatos consumados
que éste tenía, su rival lo sorprende con una confesión sobre Julián y un callado secreto sobre la pocilga del lugar.
Mientras se celebra la fiesta de fusión de las empresas asisten los campesinos de la zona, no para reclamar ni
pedir algo sino para comunicarle al socio más fuerte de la empresa, y no al padre, la noticia de que el joven Julián
había fallecido en la pocilga. Los propios cerdos devoraron el cuerpo entero del muchacho.

La película culmina con el señor Herdhitze pidiendo guardar silencio sobre todo lo que los campesinos pudieron
observar sobre el caso.

2) Características de los personajes principales:

3) Justificación con fragmentos de la película:

● Joven caníbal (Pierre Clémenti): Es un joven que vive aislado de aquella sociedad medieval, se
encuentra deambulando por zonas despobladas de volcanes comiendo todo lo que encuentra, desde
insectos, hierbas hasta animales. Ataca a los caminantes y los devora. A lo largo de toda la película
permanece sin emitir palabra alguna, salvo al final de la misma, cuando es capturado. Allí pronuncia sus
primeras y únicas palabras sin aparentar arrepentimiento alguno por sus actos. Con lágrimas en los ojos,
repetirá cuatro veces esta frase: "Yo maté a mi padre, he comido carne humana, tiemblo de alegría”.
● Julián Klotz (Jean Pierre Léaud): Es un joven de 25 años, que vive su vida apartada en una mansión de
Godesberg, junto a sus padres. Se muestra apático frente a Ida. Sus sentimientos y pasiones serán
ocultados tanto a su familia como a ella. Se da cuenta de que como revolucionario, es conformista y, no
posee opinión alguna formada. Su mundo se muestra aparentemente muy cerrado, casi imposible de
descifrar. Trata de escapar de la realidad, de la repetición infinita de un amor secreto y de su perversa
pasión. Fallecerá devorado por los cerdos, en su totalidad, sin dejar rastro alguno.

_“Me fui de Godesberg porque me dijo que estaba enamorado, pero no de mí.
_ Bueno, Ida. ¿y de quién está enamorado Julian?
_ No lo sé. No ha querido decírmelo.
_ ¿Y por qué razón?
_ No lo sé! ¡No lo sé! Si lo hubiese dicho no estaría así. Todo habría sido más fácil. Bastaba sólo con decir
qué es lo que ama y todo se habría resuelto feliz o infelizmente.
_ ¿Por qué dices “qué” en lugar de “mujer”?” (aquí Ida y Berta hablan sobre lo incierto que les resulta
conocer los sentimientos de Julián).
● Señor Klotz (Alberto Lionello): Es el padre de Julián, muestra apoyo a la Alemania nazi, vive en la
mansión de Godesberg junto a su mujer, Berta, y su hijo Julian. Empresario exitoso, de carácter tranquilo.
Desea el casamiento entre Julián e Ida.
● Herdhitze, ex señor Hirt (Ugo Tognazzi): Es el viejo compañero de estudios del señor Klotz, es un
criminal de guerra nazi, que ha logrado una vida nueva en la nueva Alemania occidental. Cambió su cara
e identidad. Visita al señor Klotz para reclamar la fusión de sus empresas, donde pretende encabezar la
nueva asociación empresarial.

“_ Siempre tan divertido nuestro querido Herdhitze. Además “Herdhitze”, en nuestra lengua materna,
¿verdad, Hans Günter?, significa “hogar ardiente”. ¿Y con qué fuego brilla, si se puede saber, ese hogar?
_ Naturalmente, con el fuego de la gran Alemania, Señor Klotz, que bajo las cenizas renace produciendo
lana, queso, cerveza y botones.”
Su espíritu competitivo lo lleva a amenazar al señor Klotz con la verdad sobre su hijo Julián:
“_ Yo estoy aquí como competidor. Vengo a destruírle como está mandado, para que usted no me
destruya a mí. Así hemos hablado de cerdos, en vez de judíos” (El señor Herdhitze le comunica al señor
Klotz, en tono amenazante, que sabe de la vida de Julián y que la moral de éste y de su familia están en
sus manos).
● Ida (Anne Wiazemsky): Joven de 17 años que busca el amor de Julián. Rubia, de apariencia elegante,
hija de un empresario alemán. A pesar de su condición burguesa y de querer unir a ambas familias, tiene
un pensamiento progresista. “_ Somos dos ricos burgueses, tú y yo, Julián, el destino que nos ha juntado
no es aleatorio”

“_ ¡Esta sí que es buena! Con todo mi pacifismo y mi polémica contra la Alemania opulenta, con todo mi
anticlericalismo, con todo mi culto por el amor libre, y con todo lo que me une a centenares de miles de los
jóvenes más progresistas del mundo, Julián, deja que me escandalice.”

Al no ser correspondida por Julián Klotz, decide marcharse y casarse con otro hombre. “_ Bien, Julián. Es
difícil hablar contigo. Pero he venido a saludarte y decirte adiós. Eso es todo.”

● Señora Klotz (Margarita Lozano): Madre de Julián, su impronta es de carácter fuerte y palabras firmes.
“_ Julián necesita una compañera buena, dulce, que esté enamorada.” (La señora Klotz le afirma a Ida
que debe ser la mujer para su hijo).
● Hans Günther (Marco Ferreri): Es el asistente del señor Klotz, lo mantiene informado de todas las
novedades que surgen.

“_ ¡Buenas noticias señor Klotz!

_ ¡Me congratulo, mi querido Hans Günther!

_ Gracias, señor Klotz” (Günther le comunica al señor Klotz la verdadera identidad del señor Herdhitze).

● Caníbal (Franco Citti): Personaje que ayuda al joven caníbal en el asesinato de sus víctimas. Será
condenado junto al mismo y tendrán un final desdichado, serán comidos por los lobos. Ante la muerte
próxima llora de rodillas frente la autoridad eclesiástica.
● Maracchione (Ninetto Davoli): Es un joven campesino que admira a Julián. Trabaja en la mansión de la
familia Klotz. “_ ¡Buen día, Señorito!”

Se muestra afligido por el atroz fallecimiento del hijo de los Klotz.

● Wolfrang: Es un campesino alemán, que se compadece por el final del joven Julián.
“_ ¿Cómo condenarlo, todos nosotros, si ha sufrido tanto, cerrándose en sí mismo? Y cerrando los ojos
que nos han visto. Julián no ha sido una de esas víctimas que hablan con el verdugo, y no ha pedido
confesores. No se ha confundido con nadie. Su vileza ha sido una gracia. Nos ha traicionado a todos, pero
sin haber prometido nunca sernos fiel.” (Wolfrang le dice al señor Herdhitze que Julián no es un ser
pervertido, sino una víctima a la que no se puede condenar).

4) Biografía del director:


Pier Paolo Pasolini nació en Bolonia, Italia, el 5 de Marzo de 1922. Fue escritor, poeta y director de cine italiano.
Hijo de Carlo Alberto Pasolini, teniente del ejército italiano y de Susana Colussi, maestra. Su familia paterna era
descendiente de una antigua familia noble de Romaña; por parte de su madre descendía de una familia de
campesinos que llegaron a ser pequeños burgueses. Durante su infancia su familia se trasladó por varias
ciudades, entre ellas: Casarsa, Cremona, Scandiano, Reggio Emilia, Parma, etc.

Pasolini pasaba sus ratos libres leyendo a autores como Dostoievsky, Tolstoi, Shakespeare, entre otros. Fue en
Bolonia donde concluyó sus estudios secundarios y en 1939 ingresó al Colegio de Literatura de la Universidad de
Bolonia. En 1941 publica sus primeros poemas y sus pinturas. Además fue director de la revista El Tamiz, donde
fue despedido rápidamente por tener diferencias con sus colegas por estar ligados al régimen fascista. En ese
momento comenzó a tener pensamientos alineados a una posición comunista. Considerando esta parte de la
vida del autor, podemos inferir como grupo una relación que se aprecia en el film designado. Julián es hijo
de burgueses con ideas fuertemente fascistas. Su ideología se contradice, claramente, con la de estos
últimos. Julián podría tener, de una manera general, grandes y fuertes rasgos comparables y relacionados
con la ideología de Pasolini respecto a su círculo familiar.

En 1942 junto a su familia espera el término de la Segunda Guerra Mundial; en septiembre de dicho año fue
capturado como prisionero de la Wehrmacht Alemana, pero escapó disfrazado de campesino y regresó a la ciudad
de Casarsa. En 1943 enseñó en distintas escuelas y tuvo su primera experiencia homosexual con un alumno. En
1945 asesinan a su hermano; en noviembre de este año se gradúa presentando una tesis final acerca de los
trabajos de Giovanni Pascoli.

Su ideología política se inclina hacia el comunismo italiano en 1945; luego se unió a la asociación Patrie Tal Friul
en donde se pretendía una tradición basada en Friuli, atacando así a la religión cristiana. Además fue fundador del
partido Movimento Popolare Friulano. Tiempo después se alejó del partido comunista. En 1947 volvió a sentar las
bases de su ideología cuando escribió una declaración en el periódico Libertà: “(...) pensamos que actualmente
solo los comunistas son capaces de proveer una nueva cultura”.

En 1957 publicó el poema Le Ceneri di Gramsci; en 1960 Passione e Ideologia; en 1955 Antologías poesía
dialectal del Siglo XX; y Antología de la poesía popular. En 1954 publicó La mejor juventud; entre 1961-1964
Poesía en forma de rosa; algunas literaturas de posguerra tales como: Muchachos de la calle (1955), Una vida
violenta (1959), Mujeres de Roma (1960). También este considerable escritor escribió un libro llamado Petróleo,
donde investiga sobre algunos asesinatos cometidos en los ‘70. Dicho libro poseía un capítulo extraviado en
donde se narra el asesinato de Enrico Mattei, presidente de la petrolera ENI, asesinado en 1962; además incluye
el asesinato del propio Pasolini.

Su carrera cinematográfica se inicia en 1961 con un segundo neorrealismo, explora la vida cotidiana haciendo
hincapié en personajes marginales, delincuentes y mostrando la pobreza de Italia luego de la guerra. En sus films
predomina un humor lleno de ironías y cierto patetismo. Debutó con Accattone; su segunda película fue Mamma
Roma (1962); en 1964 estrena El evangelio según San Mateo. En 1966 Pajaritos y pajarracos, toca temas
políticos y humanísticos, es una película en donde la música ocupa un lugar suma importancia. Otros films:
Teorema (1968); Pocilga (1969); Medea (1970). En este último año da comienzo a su trilogía integrada por El
Decamerón, Los cuentos de Canterbury (1972) y Las mil y una noches (1974). En 1975 se estrena Salò o los 120
días de Sodoma donde se muestra al Marquéz de Sade con gran crudeza, además muestra sadismo,
degradaciones humanas, erotismo, pornografía, etc.

El 2 de Noviembre de 1975 es asesinado a los 53 años en Ostia, Italia. Pier Paolo Pasolini fue arrollado con su
auto, luego de ser robado por un jóven llamado Giuseppe (pino) Pelosi. Presentaba múltiples fracturas y sus
testículos fueron golpeados brutalmente hasta estallar; su cuerpo se encontraba quemado con gasolina. En ese
momento se lo consideraba como un intelectual que gozaba de una buena posición económica, pero su vida se
tornó de gran polémica por sus aspiraciones ideológicas. El asesino declaró que lo mató porque el director habría
tenido intenciones homosexuales para con su persona; lo cual no fue de gran creencia ya que se sospechó que
fue asesinado debido a sus constantes críticas presentadas en sus libros, películas y discursos políticos. Fue
sepultado en Casarsa, Friuli. Veintinueve años después de su muerte, exactamente en el 2005, Pelosi confesó
haberlo asesinado por tener amenazas contra su familia, en donde también aclaró que Pasolini era “un sucio
comunista”. En Julio del 2017 muere Pino Pelosi sin haber aclarado nunca con detalle el brutal asesinato que
había cometido. Sergio Ctti, amigo de Pier Paolo Pasolini, declaró en el año 2005 que algunos rollos de la película
“Saló” habían sido robados y que Pasolini en aquel momento (1975) habría buscado a los ladrones.

Reseña de los actores:

● Pierre Clémenti: Actor francés, nacido el 28 de Septiembre de 1942 en París. Fue actor y director del cine
francés. Durante los años 1960-1970 fue muy reconocido en el ambiente artístico. Actuó en películas
dirigidas por Luis Buñuel, Bernardo Bertolucci, Pier Paolo Pasolini y Luchino Visconti, así como también,
dirigió algunos films del movimiento Underground de su país. Muere en su ciudad natal a los 57 años de
edad, el 27 de diciembre de 1999.
● Jean Pierre Léaud: Actor francés, nacido el 5 de Mayo de 1944 en París. Hijo de Pierre Léaud y
Jacqueline Pierreux, actriz. A sus catorce años participa de una película de Truffaut, director de cine
reconocido para el momento, adquiriendo el papel protagónico. La misma se titula Los cuatrocientos
golpes. Trabajó también en otros films de este director, tales como: El amor a los 20 años (1962); La
noche americana (1973), entre otros. En 1966 ganó el Festival Internacional de Cine de Berlín y, fue
nominado como mejor actor de reparto en 1988. Actualmente tiene 73 años de edad.
● Alberto Lionello: Nacido en Milán, Italia, el 12 de julio de 1930. Hijo de padres venecianos: Luigi Sastre y
Giuditta Bruneri. Fallece el 14 de julio de 1999 a la edad de 64 años en Fregene, Italia. Cuando tenía
dieciocho años se unió a la Filodrammatici de Milán, donde se graduó con honores y debutó en 1949 con
la compañía Nino Besozzi, que meses más tarde abandonó por la de Antonio Gandusio. Tras trabajar para
distintas compañías, en 1951 alcanzó el éxito personal y en 1957, junto a Ernesto Calindri y Tino
Buazzelli, fundó su propio conjunto. También obtuvo gran popularidad en la televisión y ha formado parte
del Teatro Stabile di Genova dirigida por Ivo Chiesa. Murió de cáncer, en su casa de Fregene. A su lado se
encontraban Erika Blanc y los niños Gea y Lucas. El funeral se llevó a cabo en la Iglesia de los artistas en
la Piazza del Popolo.
● Ugo tognazzi: Actor italiano, nació en Cremona en 1922 en el seno de una familia burguesa. Se inició en
el teatro y fue un destacado animador del music-hall hasta convertirse en una de las figuras más
populares de la televisión italiana y también del cine de su país, se destacó como actor cómico a partir de
su trabajo en La abeja reina (1963), de Marco Ferreri. A los cinco años participó por primera vez en un
espectáculo teatral; a los catorce regresó a Cremona y trabajó en una fábrica de embutidos. Con el dinero
que ganaba pudo pagarse sus estudios de arte dramático pese a la oposición de sus padres. Durante la
Segunda Guerra Mundial, creó distintos espectáculos teatrales para los soldados italianos. Luego se mudó
a Milán donde debutó profesionalmente en 1945, y se dedicó a pleno a la comedia musical. Su primer
trabajo para el cine fue un papel en el filme I cadetti di Guascogna (1950), dirigido por Mario Mattoli. Siguió
trabajando como actor secundario en varios films; en 1961 actuó en la película El Federal. Alcanzó
reconocimiento internacional gracias a La abeja reina, se lo considera un célebre actor cómico italiano. En
1961 dirigió El mantenido, le siguen El fiel servidor (1968) y Los viajeros del atardecer (1979). Tuvo varios
hijos de distintos matrimonios. Falleció el 27 de octubre de 1990 a causa de un derrame cerebral en una
clínica de Roma.
● Anne Wiazemsky: Actriz, escritora y directora de cine, nacida en Berlín, Alemania, en 1947. Estuvo
casada con Jean-Luc Godard (1967-1979) y es nieta de François Mauriac (reconocido escritor francés,
premio Nobel de Literatura en 1952), su lengua materna era el francés. Se crió en un ambiente burgués e
intelectual presidido por el carisma de su abuelo materno que se convirtió en su tutor cuando el padre de
Anne falleció prematuramente. Su carrera comenzó hacia 1966 cuando protagonizó Au Hasard Balthazar
de Robert Bresson. Actuó en varios films dirigidos por Godard, entre ellos: Week End, Le gai savoir, Vent
d'est, Tout va bien, Vladimir et Rosa, de quien se divorciaría en 1979. Se destacó en 1968, con Pier Paolo
Pasolini, en el papel de Odetta, en Teorema, y también en Porcherie. Además ha escrito varios libros
como Jeune Fille (2007); Une année studieuse (2012), etc.
● Margarita Lozano: Actriz nacida el 14 de febrero de 1931 en Tetuán, protectorado español de Marruecos.
Hija de un militar. Su infancia transcurre en Lorca, Murcia; a los 19 años viaja a Madrid donde estudia
moda y diseño, lo que rápidamente abandonó para comenzar su carrera teatral. Actúa en Fedra (1957); en
La señorita Julia (1961); La camisa (1962); etc. Para el cine interpretó papeles secundarios: El lazarillo de
Thormes (1959); Un ángel tuvo la culpa (1960) por la que obtuvo el premio a la mejor actriz. Reduce su
actividad profesional en España a partir de 1963, después de rodar Los Tarantos. En 1964 participa en Un
puñado de dólares y, en 1980 trabaja con los hermanos Taviani. En 2002 interviene en las películas
Octavia, Nos miran, entre otras. Y entre 2005 y 2007 se despide con éxito de los escenarios siendo la
protagonista de La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca.
● Marco Ferreri: Actor italiano, nació el 11 de mayo de 1928 en Milán; fue director de cine, guionista y actor.
Previamente a su incursión en el cine estudió para ser veterinario y trabajó en una sociedad de licores.
Este trabajo lo llevó a realizar comerciales y tuvo así su primer fogueo con el mundo del cine. Junto a
Riccardo Ghione funda para el año 1952 una revista filmada, llamada Documento mensile, en la que
colaboraron Vittorio de Sica, Luchino Visconti, Michelangelo  Antonioni y Alberto Moravia. Su película más
conocida es La gran comilona. Se inició como director en España; en este país conoció a Rafael Azcona y
participó del rodaje de El pisito en 1959 y El cochecito en 1960. Su idea filosófica impone un universo
original, con humor negro, de situaciones paradójicas y meditaciones sobre el sexo y la muerte. La
descripción de la alienación del hombre moderno y su esfuerzo casi inútil por escapar de esta quedan
plasmados en sus films: Una Storia moderna: L'ape regina (1963), Dillinger ha muerto (1969). Como actor
participó en Casanova ’70 (1965), Il fischio al naso (1967), Porcile (1969), Le Vent D’est (1970) y Cial
Gulliver (1970). Con poco reconocimiento, sus films fueron clasificados como de tercera categoría por la
crítica oficial, debido a esto la explotación comercial de los mismos resultaba casi imposible. Su último
trabajo, Nitrato de plata, es un homenaje al cine y a la sala cinematográfica realizado con amor. Ferreri
fallece en París, de un ataque al corazón, el 9 de mayo de 1997.
● Franco Citti: Nacido en Roma, el 23 de abril de 1938, es un actor italiano reconocido por su papel en
Accattone, película de Pasolini filmada en 1961. Con el director prosiguió una relación de varios films entre
los que se destacaron Edipo Rey (1968) y uno de los cuentos de Il Decameron (1971). En gran parte del
mundo es recordado por sus papeles en El Padrino (1972)  y El Padrino III (1990). Muchos de los papeles
que interpretó para Pasolini transitaban la desgracia debido a las acciones de los mismos o como parte de
un fenómeno que los excede. Sus personajes siempre fueron agentes de acción. Junto a su hermano
Sergio (quien se convertiría en un interesante director que continuaría la escuela Pasoliniana) fueron
viejos amigos y colaboradores del director de Porcile.
● Ninetto Davoli: Nacido en Calabria, en 1948, es un actor italiano que alcanzó la fama en películas del
director Pier Paolo Pasolini. Actor fetiche de este gran poeta y director, integró elencos en más de
cuarenta films sin ser el protagonista en ninguno de ellos. Once de sus participaciones se cumplieron con
Pasolini como director, donde las principales fueron Pajaritos y Pajarracos (1966), Porcile (1968) y El
Evangelio según San Mateo, además de los films de la trilogía de la vida. Con más expresividad física
–casi un arlequín- que con dotes dramáticas, Davoli no alcanzó mayor vuelo en el resto de su carrera.
Luego de la muerte de su mentor continuó trabajando junto a los hermanos Franco y Sergio Citti, antiguos
colaboradores y amigos de Pasolini.

5) Contexto Histórico de la película:

En Italia en 1969 ocurre un fenómeno revolucionario influenciado por los acontecimientos de 1968. Italia vivió una
explosión de luchas sindicales obreras y, supuso el preludio del período histórico conocido como los años de
plomo u Otoño caliente.

No es casualidad que esta película haya surgido durante este contexto. Como ya hemos indicado, Porcile,
además, se destaca por su fuerte crítica a la burguesía italiana de la Segunda Guerra mundial. Las orientaciones
políticas de Pasolini están ligadas al comunismo.

6) Relación con otras películas


Título: 8 ½ (ocho y medio).
Año: 1963.
Director: Federico Fellini.
Actores: Marcello Mastroianni, Anouk Aimée, Sandra Milo, Claudia Cardinale, Rossella Falk, Mario Pisu, Guido
Alberti, Mario Conocchia, Jean Rougeul.
Género: Drama.
Duración: 146 minutos.

Biografía del director: Federico Fellini

(Rímini, Italia, 1920-Roma, 1993)


Director de cine italiano. Su infancia evocada, posteriormente, en películas en gran parte autobiográficas, como
“Ocho y medio” y “Amarcord”, transcurrió en su ciudad natal, Rímini, donde estudió en la escuela del asilo San
Vincenzo. Sus primeras grandes aficiones, antes de descubrir su pasión por el cine, fueron el dibujo y la
caricatura. A los diecisiete años publicó en una revista sus primeras caricaturas que, representaban a los
compañeros del campamento de verano de la organización juvenil del Partido Nacional Fascista al que había
asistido en 1936.
A partir del año siguiente, colaboró en los seminarios La Domenica del Corriere y el político-satírico florentino 420,
en los cuales publicó relatos, viñetas y dibujos, todo ello bajo el seudónimo de «Fellas». En 1939, junto a su madre
y su hermana, se trasladó a Roma con la intención de cursar estudios de derecho y jurisprudencia en la
Universidad de Roma. Nunca terminó dicha carrera.
En Roma adquirió cierta notoriedad, sobre todo entre los lectores más jóvenes, gracias a las viñetas y los cuentos
por entregas que publicó en la revista Marco Aurelio. Por aquellas fechas, además, conoció al cómico Aldo Fabrizi,
con quien colaboró intensamente durante los años siguientes como autor de gags para sus espectáculos de
variedades.
En 1940, tras un breve paso por la radio, hizo su primera incursión en el mundo del celuloide al participar en
calidad de guionista, en la película “¡El pirata soy yo!”, dirigida por Mario Mattoli. Fue el primero de una larga lista
de filmes en los cuales se ejerció su rol como guionista. En 1943 se casó con Giuletta Masina, una joven actriz de
teatro. En marzo de 1945, el primer y único hijo del matrimonio murió a las dos semanas de nacer.
Fecha clave para Fellini en su relación con el cine fue 1944, año en que conoció a Roberto Rossellini, uno de los
más importantes directores del neorrealismo italiano. Junto a Rossellini, quien se convirtió en su tutor, colaboró
como guionista en Roma, ciudad abierta a otras películas suyas.
En 1951 debutó como director, primero co-dirigiendo, junto a Alberto Lattuada, el film “Luces de varieté” y,
posteriormente, en su ópera prima “El jeque blanco”, basada en una idea de Michelangelo Antonioni. Al año
siguiente ganó su primer premio: un León de Plata por “Los inútiles en la Mostra de Venecia”. En 1954, en el
mismo certamen, ganó un León de Plata por su siguiente película: "La strada”, su primer film de resonancia
internacional y que le reportaría, asimismo, su primer Oscar. Estuvo protagonizada por su esposa. Dicha película
da inicio a la transición del director desde el movimiento neorrealista hacia un cine más personal, de marcado tono
autobiográfico y repleto de elementos fantásticos.
Sus siguientes películas recibieron toda clase de premios internacionales, como la Palma de Oro en el Festival de
Cannes por La dolce vita (1960), con la cual obtuvo un importante éxito comercial y supuso el inicio de su
colaboración con el actor Marcello Mastroianni, que se convertiría en algo habitual a partir de ese entonces.
Ocho y medio (1963) marca claramente el comienzo de la segunda etapa del cine felliniano, de exuberante
fantasía y barroquismo y con un humor de rasgos surrealistas.
Giulietta de los espíritus (1965) originó cierta polémica, que se repetiría en otras películas, por el impúdico
erotismo que la atraviesa y por la ironía con que se trata a sí mismo y a la sociedad italiana, especialmente la
Iglesia. Películas como “Romao” y “La nave va” marcan la posterior producción de este cineasta, dueño de un
universo muy personal y de un estilo extremadamente libre. En 1993, poco antes de su muerte, recibió su quinto
Oscar al conjunto de su carrera en una conmovedora ceremonia en la que estuvo flanqueado por Sofia Loren y
Marcello Mastroianni, sus dos más célebres actores y, su esposa, Giulietta Masina.

Otto e Mezzo – Federico Fellini:

“Otto e Mezzo“ es un film del año 1963, fue premiado con un Oscar dentro de la categoría mejor película
extranjera.
Este film narra la búsqueda de ideas por parte de un director de cine para su nueva película, tarea que le resultará
sumamente compleja, es decir, se cuenta la historia de Guido Anselmi, un reconocido cinematógrafo, quien se
sentirá presionado por varias personas a lo largo de la historia. Entre ellos, por su guionista, su productor, quien se
ha embarcado dentro de un ambicioso proyecto sin perseguir aún una idea clara. Así también, en varias escenas
de la película Anselmi también se verá presionado por su amante, llamada Clara.
Guido intentará buscar inspiración tanto en sus sueños como en sus fantasías, con la intención de encontrar
situaciones que lo alimenten para componer su nueva película Más adelante en el film, aparece su mujer, quien se
hospeda en el hotel en el que se encuentra Guido y lo supuestos personajes a participar en la película a filmar,
quienes esperan que les sea asignado un papel histriónicamente.
A pesar de engañar a su mujer, el director nunca la abandona del todo, precisamente, porque tiene la necesidad
de tenerlo todo sin relegar nada para ser feliz.
Más adelante se van a entrecruzar todas las amantes de la vida de Guido, junto a las demás actrices, en su
“harem” idealizado, donde él tiene el control total de la situación.
Al ver que no hay progresos en el proyecto , su productor le exige una respuesta, así sea mínima para darle vida
al nuevo proyecto.
LLega el momento de la presentación ante la prensa y todos los que esperan una respuesta por parte de él. Guido
decide renunciar al rodaje, quedando su propia vida, profesión y demás cuestiones en crisis total.
La última escena va a tener a todos sus personajes, familiares, amigos, incluso fallecidos danzando una pegadiza
melodía.

Coincidencias y contraposiciones con “Porcile”

Como contraposición creemos como grupo que en el film “Otto e Mezzo “ Guido, el personaje principal, vive
constantemente situaciones que evocan su nostalgia, sus sentimientos, su mayores deseos, incluso recurre al
mundo onírico, fantasías y su pasado para lograr su cometido finalmente trunco. En cambio, en el film “Porcile”
Julián va intentar esconder constantemente su ser como persona y, esto se refleja en su relación para con los
demás. En un punto se avergüenza de su manera de ser, busca refugio con los cerdos, aislándose de su familia y
conocidos.
Como contraposición, como grupo, se nos ocurre destacar que sobre el final del film, “Otto e Mezzo”, Guido
culmina exhibiendo al protagonista en libertad, su armonía se intensifica y mezcla con sus recuerdos de su mundo
interior, dicha intención se traduce en un baile junto a todos sus seres queridos. Mientras que en “Porcile” el deseo
de Julian ha sido reprimido, marcando su triste final, así como también, muere el caníbal privado no solo de su
libertad, sino también de la vida.

Idea filosófica y estilo cinematográfico del director:


El más famoso y notorio director italiano, Federico Fellini, también director de “La Dolce Vita”, tiene una filosofía
basada en la nostalgia, los episodios autobiográficos y la temática del varieté. Su estilo cinematográfico es
fabulesco y agudo, contrastante con el existencialismo de directores como Michelangelo Antonioni.

Título: Riso Amaro (Arroz amargo)


Año: 1949
Director: Giuseppe De Santis
Actores: Silvana Mangano, Vittorio Gassman, Doris Dowling, Ralf Vallone.
Género: Drama.
Duración: 108 min.

Biografía del director: Giuseppe De Santis.

Cineasta y guionista italiano, nacido el 11 de febrero de 1917 en Fondi.


Cursó estudios de derecho y obtuvo su diploma de director cinematográfico en el Centro Sperimentale de Roma.
Desde 1940 escribió en la revista Cinema.
Fue en ese mismo año cuando colaboró en la elaboración del guión de Ahora me caso yo (Don Pasquale, C.
Mastrocinque), en 1942 en el de “Obsesión” de Visconti, y en 1943 en el de “Desiderio” Roberto Rossellini, M.
Pagliero.
Cuando la guerra llegó a su fin, coordinó la realización de “Giorni di gloria” (1945) película colectiva sobre la
resistencia al fascismo.
En 1946, dirigió su primera película ‘Caza trágica”. Su estilo realista se explayó en “Arroz amargo” (Riso amaro,
1949), drama de lucha de clases localizado en Padua.
“Non c'è pace tra gli ulivi” (1950) es un drama de campesinos que volvía a mezclar la denuncia de la explotación.
Con Roma, once horas (1952), se inspiró en un trágico suceso para hacer una gran composición de los medios
obreros de Roma. Las películas que llegaron a continuación, le hicieron perder la estima de los críticos, pero
continuó su análisis sobre temas políticos y éticos: “Un marito per Anna Zaccheo” en 1953, un melodrama con
Silvana Pampanini; “Días de amor” (Giorni d'amore, 1955, comedia de costumbres); Hombres y lobos (Uomini e
lupi, 1957, drama pasional). “La strada lunga un anno” (1958), drama coral, fue una metáfora sobre las esperanzas
del socialismo, “La garconnière” (1960) un melodrama sobre un ambiente corrompido.
En la Unión Soviética rodó “Italiani brava gente” (1964), película sobre la derrota del Ejército italiano en Rusia. Con
“Un apprezzato professionistla di sicuro avvenire” (1972), realiza una sátira sobre la nueva burguesía que
ostentaba el poder.
Giuseppe De Santis falleció en Roma el 18 de mayo de 1997.

Riso Amaro – Giuseppe de Santis


El film analizado en este caso será “Riso Amaro” del director italiano Giuseppe de Santis, película perteneciente al
año 1949 . Este director va a compartir con Passolini una mirada crítica de la sociedad.
La película comienza con el viaje emprendido por unas campesinas, en su mayoría operarias y amas de casa
desocupadas que se dirigen hacia las plantaciones de arroz, ubicadas en las provincias de Pavía: Novara y
Vercelli.
La trama está centrada, en primer lugar en la lucha laboral que sucede entre las trabajadoras que han sido
contratadas y las que están realizando el trabajo clandestinamente.
Una vez resuelta esta cuestión, el foco se posa sobre una historia de amor y de traición, a la vez, entre sus dos
protagonistas: Silvana y Francesca, quienes se enamoran de Walter, un ladrón que se mueve durante todo el film
sin demasiados miramientos morales. Además aparece un reflexivo sargento llamado Marco Malli .
La película concluye con el trágico suicidio de Silvana, quien se siente culpable por destruir las esclusas que
servían de resguardo para las plantaciones de grandes cantidades de agua y, traicionar de esta manera a sus
compañeras por un ilusorio amor profesado por Walter.

Coincidencias y contraposiciones con “Porcile”


En cuanto a las coincidencias con “Porcile”, podríamos comenzar mencionando el origen de los trabajadores
rurales. En el film Riso Amaro las trabajadoras del arrozal van a ser mujeres de origen italiano, de clase social baja
que van a necesitar este trabajo estando contratadas o no. Mientras que en el film de Pasolini, los trabajadores
pertenecerán al mismo origen, pero con la salvedad que éstos hablarán algunas palabras en alemán.
En algún punto la promesa de amor que nos muestra Giuseppe de Santis en Riso Amaro a través de Francesca y
Walter, es semejante al intento de noviazgo entre Ida y Julián que se nos presenta en Porcile. Ninguna de las
relaciones se concretará por diversos motivos o razones.
Francesca dejará de creer en Walter e intentará dejarlo, mientras que, por su parte, Ida se alejará de Julián, una
vez que éste se rehuse a tener un vínculo con ella.

Idea filosófica y estilo cinematográfico del director:


Las obras de Giuseppe de Santis, si bien tienen un sustento basado en dramas de tipo sentimental, realizan a su
vez una denuncia acerca de las condiciones paupérrimas de trabajo en las que se veían las clases bajas para
conseguir algo de dinero. A su vez esto puede tomarse como una prueba de las grandes desigualdades sociales
que afrontaba la sociedad de esa época.
Al igual que Pasolini, es de perfil comunista. El gran aporte de este director al neorrealismo italiano fue la película
“Riso Amaro”. Film del año 1949.

es
Título: La grande guerra
Año: 1959
Director: Mario Monicelli
Actores principales: Vittorio Gassman, Alberto Sordi y Silvana Mangano
Duración: 137 minutos
Género: Bélico

Biografía del director:


Mario Monicelli nació en Toscana en 1915.
A diferencia de Pasolini, se licenció en filosofía e historia. Debutó en la dirección en 1935 con “I ragazzi della via
Paal” Desde entonces se dedicó a la escritura de guiones hasta fines de la decada ‘40. Su carrera como director
comenzó en 1949 con su película “Toto busca el piso”. En su carrera de director se distinguen “Totò e Carolina”
(1955), “Totò e le donne” (1952) y “Totò e i re di Roma” (1951).
El título más popular de Monicelli es “Rufufú” (1958), una película de ladrones de medio pelo, luego mil veces
imitada, donde junto con la comedia, no deja de pintarse las miserias propias de la condición humana. Una de las
grandes críticas a los males que acarrean los conflictos bélicos es “La gran guerra” (1959), donde un par de
pícaros están exentos de cualquier motivación idealista, lo suyo es buscar la supervivencia y pasar la vida lo mejor
posible sin pensar en los demás. El libreto lo firman, además de Monicelli, otros importantes colaboradores del
director como Agenore Incrocci y Furio Scarpelli. La película ganó el León de Oro en Venecia y fue candidata al
Oscar al mejor título extranjero.
En la década 60, se imponen la crítica social y los experimentos. En “Camaradas” (1963) describe las vicisitudes
de unos huelguistas. Y satiriza la Edad Media en algo cercano al esperpento en “La armada Brancaleone” (1966),
que contará con su secuela. A partir de este momento, como le ocurre a otros coetáneos, Monicelli se sumerge en
el desconcierto; en el tipo de películas que hacía ya no interesan tanto la crítica como las dictaduras militares de
“¡Queremos a los coroneles!” (1973), son irregulares y han envejecido mucho. No obstante, hay que reconocerle la
audacia de abordar nuevos temas, como los efectos de la revolución sexual del 68 y la desintegración familiar en
“Querido Michelle (1976).
Entre los actores que trabajaron con Monicelli están: Totò, Aldo Fabrizi, Marcello Mastroianni, Alberto Sordi,
Vittorio Gassman, Gina Lollobrigida, Silvana Mangano, Claudia Cardinale, Sophia Loren, Vittorio de Sica, Monica
Vitti.
Se suicidó en el 2010, a los 95 años, tirándose por la ventana de la clínica donde estaba internado debido a un
cáncer de próstata.

Coincidencias y contraposiciones con “Porcile”


Los contextos de ambas películas se asemejan en que ambas tienen contacto con determinado conflicto bélico.
En el caso de “La Gran Guerra”, ésta se sitúa durante la Primera Guerra Mundial y, los protagonistas son
partícipes de la misma. La obra de Pasolini, en cambio, sitúa una de sus historias en la Segunda Guerra mundial.
Una diferencia que encontramos se refiere a que los personajes de ambas películas pertenecen a diferentes
ámbitos. Podemos distinguir en Julián a un joven que se siente paralizado en su familia burguesa que sólo
transgrede sus mandatos como un acto de rebeldía en contra de los suyos y el sistema burgués. En cambio, los
picarescos personajes que nos presenta Monicelli, transgreden las normas para intentar sobrevivir en ese mundo
bélico que se ven obligados a vivir.
La supervivencia es otro tema que podemos ver en ambas películas. Como dijimos anteriormente, Monicelli le da
la virtud de pícaros a sus personajes para que puedan evitar morir en la guerra. Con tal de “zafar” del combate, se
ofrecen como voluntarios en todo lo que sea necesario para escapar.
Por otro lado, Pasolini en una de las historias, situada a fines del siglo XV, tiene como protagonista a un hombre
joven de quien sólo sabemos que sufre un hambre extremo y, para saciarla, ataca a viajeros que encuentra en
caminos solitarios, los asesina y luego los come. Se puede decir que las actitudes de estos personajes son
egoístas, pero eso también es parte de la supervivencia y de la sociedad en sí.
Ambos autores dejan explícito su disconformidad con la autodestrucción de la especie humana. Inferimos como
grupo que Pasolini utiliza la historia del canibalismo, además, para comparar y figurar la guerra, así como
también, la corrupción como un acto de autodestrucción.

Título: Boccaccio '70


Año: 1962
Dirección : Mario Monicelli, Federico Fellini, Luchino Visconti, Vitorio De Sica.
Actores principales: German Giglioli, Marisa Solinas, Peppino de Filipo, Anita Ekber, Antonio Acqua, Eleonora
Nagy, Dante Maggio, Donatella Della Nora , Giacomo Furia, Alfredo Rizzo, Alberto Sorrentino, Monique Berger,
Polidor, Romy Scheneider, Tomás Milán, Romolo Valli, Sophia Loren.
Duración: 210 min (versión italiana con los 4 episodios)
Género: Comedia.

Contexto histórico - Biografía del director


No se podrá tratar por aislado a Boccaccio ’70 sin mencionar el Neorrealismo Italiano y antes, el escritor Giovanni
Boccaccio (Italia, 1313 – 1375), puesto que de su famoso libro “El Decamerón” se extrajo el espíritu pícaro y
callejero (a diferencia de Pasolini que sí adaptó nueve relatos para su film del mismo nombre) que recorre las
cuatro historias de los cuatro directores (De Sica, Fellini, Monicelli y Visconti) que realizaron el film colectivo
llamado Boccaccio ’70 en 1962, y que cuenta, entre otras, con el aporte de Italo Calvino en el guión y con tres
horas y media de película reunida en los cuatro mediometrajes.
En referencia a Giovanni Boccaccio, acotamos que fue hijo de noble cuna, cuyo padre, un banquero y mercader
florentino, siempre se encargó de que recibiera la mejor educación. Así, Boccaccio quedó bajo la tutela de
Mazzuole Da Strada, un reconocido hombre de letras, que le inculcó la pasión por Dante Alighieri que albergaría
durante toda su vida. Luego, debido a que el joven Boccaccio demostrara escasas aptitudes para las finanzas, su
padre lo envía a Nápoles, en donde recibiría una sólida formación literaria a cargo de eruditos de la corte
napolitana, la misma que cobijaba los matices de las culturas italiana, bizantina y árabe. Esto dilucida el alto valor
estético de la obra de Boccaccio, aunque siempre dispuesto a plasmarle su visión coloquial.
La confluencia de dichas culturas significaba, también, las interrelaciones entre ellas: sus intrigas, ambiciones
cortesanas, sensualidad urbana, seducción y bajas pasiones callejeras, las mismas que plasmaría en El
Decamerón, considerado el primer gran libro de cuentos de la historia de la literatura universal, y que gira en torno
a su heroína, Fiammetta. Cinco años tardó Boccaccio en escribir su obra maestra, la misma que fue inspirada en
la peste que fulminó Florencia en 1348, año en que emprendió el proceso de su escritura.
La elección por parte de algunos directores de algunas historias de El Decamerón descontando el merecido
reconocimiento mundial que posee Giovanni Boccaccio, se debió a que las historias narradas en el libro
mostraban siempre al ser humano tal y como es en la realidad. Otra vez este sustantivo: "realidad”. Sucede que el
significado del Neorrealismo está indicado en su nombre: la nueva realidad. Es decir, la vida luego de la Segunda
Guerra Mundial (que podría tomarse como una plaga, una devastación, que fue lo mismo que llevó a Boccaccio a
escribir los 100 cuentos que contiene el libro). En él, los personajes se contaban sus historias tendidos en la
hierba (locaciones exteriores), despreocupados de cualquier molde impostor, y se enfrascaban en parlamentos tan
cotidianos y quizás por ello, entretenidos. Es decir, eran personajes llenos de defectos y pecados, de deseos y
frustraciones, de sueños y dudas y bastante semejantes a los tipos de personajes de los que se vale el
Neorrealismo. Lo que está claro a través de la historia, es que El Decamerón rompió con la conservadora tradición
literaria de relatos míticos, muy en uso en la época. Vale decir, que junto con La Divina Comedia, de su amado
Dante Alighieri o acaso, los textos de Petrarca, anunciaba la existencia de una corriente artística que fuera
llamada más tarde “Renacimiento”. Entonces, no es extraño que estos cuatro directores del Neorrealismo (¿un
tipo de Renacimiento?), Federico Fellini, Luchino Visconti, Vittorio De Sica y Mario Monicelli se sintieran atraídos
por Boccaccio, el maestro de la prosa vulgar italiana, al punto de homenajearlo con un film: Boccaccio ’70, un título
que pretendía mostrar la vigencia del escritor del trecento en ese presente (comienzo de los sesenta) y proyectarlo
al tímido futuro de la próxima década, los setenta; década paradójica, además, en la que dos de ellos murieron.

Boccaccio ´70 - Mario Monicelli, Federico Fellini, Luchino Visconti, Vitorio De Sica.
Esta película es una comedia satírica en la que cuatro de los directores italianos más brillantes de todos los
tiempos hacen una adaptación cinematográfica de algunos cuentos de Boccaccio.
Boccaccio '70, fue una idea única que mostró la nueva perspectiva que el cine italiano presentaba al mundo. La
nueva generación se reía de su antiguo Fascismo, sin remordimientos ni silencios (a diferencia de la Alemania
Nazi). Las escenas crudas de Vittorio De Sica, tienen esa sensación de hiperrealidad que rodea las historias.

Coincidencias y contraposiciones con la película “Porcile”


La primera diferencia que encontramos entre ambos films es que “Boccaccio '70”, es una comedia, mientras que
“Porcile” es un drama.
Las similitudes que se destacan en ambos films, son las bajezas humanas, la religión, el canibalismo, la
corrupción, el poder, lo prohibido, la represión sexual, el romance trunco, la locura, la perversión.
En primer lugar podemos destacar la importancia de la religión en ambas películas y la liberación de los pecados.
Podemos notar en "Porcile" que, cuando, finalmente, atrapan a los caníbales, "les rezan limpiandolos de pecado"
y luego los dejan tirados para que, luego, sean comidos por animales. En la sátira de Boccaccio, podemos notarlo
en el episodio del doctor Antonio, donde todo el tiempo hace referencia a la iglesia y se hace la señal de la cruz
constantemente al sentirse acorralado por todos los pecados que "corrompen a la ciudad". Se refugia en la iglesia
y en Dios para liberar su mente de toda tentación.
También podemos destacar la locura y la represión sexual que padece Julian en la película "Porcile", haciendo
referencia a su amor por los animales (los cerdos), reprimiendo su deseo sexual y fantasías, al igual que, el Doctor
Antonio (en Boccaccio) que comienza a tener fantasías eróticas con el cartel que ponen frente a su ventana, de
una bella mujer que lo invita a tomar leche. Al comienzo tenía una obsesión por sacarlo porque decía que
perturbaba la mente de todo el pueblo, pero luego se convierte en una tentación que lo lleva a la locura.
Por último destacar el rol de la mujer en ambos films, la mujer explotada o mujer-objeto, que se puede ver en la
película "Boccaccio" en el episodio de La Rifa, donde la protagonista realiza una rifa en la cual el premio es ella,
también, en el episodio de "El Trabajo" en el cual el marido "El Conde", engaña a su mujer con prostitutas. Ella se
entera y decide, que en vez de separarse, le cobrará por cada relación sexual que mantengan. Mientras que, en la
película "Porcile" se puede observar este rasgo durante la escena de los caníbales cuando aparecen las mujeres y
una de ellas se insinúa mostrandoles las piernas y un caníbal se le tira encima y caen al piso.

Título: La Aventura
Año: 1960
Director: Michelangelo Antonioni
Actores: Monica Vitti, Gabriele Ferzetti, Lea massari, Renzo Ricci, Dominique Blanchar.
Duración: 135 min
Género: Drama
Biografía del director: Michelangelo Antonioni

Antonioni nació en Ferrara en el año 1912. . En 1960 cosechó su primer éxito internacional dentro del cine italiano,
“La aventura”, que supuso la culminación de la madurez tanto de su estética irrepetible como de sus temas y estilo
de cámara. El tema dominante de esta película y, de las otras dos que componen la llamada trilogía de Antonioni,
“La noche” y “El eclipse”, así como de la posterior “El desierto rojo” (1964), se centra en la esterilidad emocional
del hombre moderno, en su inútil intento de afirmarse en un mundo tecnológico. Es uno de los artistas del cine de
posguerra dotados de más talento para la creación.
Nacido en el seno de una familia de clase media, cursó estudios de Filosofía y Letras, Economía y Comercio en el
Instituto Técnico de Bolonia. Se dedicó al periodismo en calidad de crítico cinematográfico en las páginas del
diario Il Corriere Padano. A finales de los años treinta marchó a Roma y continuó su labor cinematográfica en la
revista Cinema.
A partir de La aventura (1960), inició y consolidó un periplo por el universo de la incomunicación del hombre en la
sociedad en la que pretende sobrevivir. Por eso, más allá de explicaciones innecesarias (en muchas de sus obras
quedan en el aire temas sin resolver), sigue con la cámara, como extensión de su mirada, el deambular de los
personajes en su fragilidad, en sus ineludibles fracasos que no son más que una proyección del vacío que les
envuelve.
La obra de Antonioni se vio inmersa en la corriente crítica que analizó todo aquello que se entendía como
canalizador de ideología renovadora o de izquierdas en general. Cada una de las películas del director italiano se
vio, pues, delimitada por unos patrones que se entendieron más allá del propósito del propio autor. Antonioni
propuso siempre una reflexión sobre su entorno, sobre la sociedad que le sofocaba, que le aislaba de otros
personajes (cercanos o lejanos) que se movían a la par. Para ello intentó transmitir en cada plano, en cada
situación, esas inquietudes que le mantenían intelectualmente vivo. Sus películas son desencantos, están repletas
de pesimismo, de acritud, y cada personaje transmite la indiferencia y se revela en la incomprensión.
En el Festival de Cannes, marco en el que seis años antes había sido abucheado, obtuvo la Palma de Oro por
Blow-up. Deseo de una mañana de verano (1966), una historia en la que apostó por sorprender al espectador con
dos modelos de estructura: la acción que se desarrolla en la calle y la que surge en el laboratorio, en la cual
emerge con fuerza la esencia misma del relato.
A partir de este momento, la carrera de Antonioni perdió la fuerza personal que tanto se había destacado en los
ámbitos críticos. El público mayoritario mostró siempre un distanciamiento (debido en gran parte al
desconocimiento) con respecto a su trabajo que no logró superar las metas ya propuestas posteriormente.
Zabriskie Point (1970) y El reportero (1975) retomaban algunos elementos de su cine, pero no progresaron en
ellos, mientras que El misterio de Oberwald (1980) no dejaba de ser para muchos un experimento televisivo, e
Identificación de una mujer (1982), una historia sin fuerza. El intento de Wim Wenders de recuperarlo para la
dirección en Más allá de las nubes (1995), codirigida por ambos, no fue suficiente para que una nueva generación
de espectadores mostraran su interés por el director de Ferrara. En enero de 2000 publicó el libro Comincio a
capire, en el que resume 50 años de su vida artística.
El director muere en Roma en el transcurso del año 2000.

La aventura – Michelangelo Antonioni


La película parece basarse, en un primer momento, en un argumento central: la desaparición de Anna, una de sus
protagonistas, lo que nos lleva a nosotros como espectadores a imaginarnos las más locas y escabrosas hipótesis
pero, al transcurrir el film se va corriendo totalmente de eje ese tema y se pone foco en la relación de amor cuasi
“prohibida” que se da entre el prometido de Anna, Sandro, y, su amiga, Claudia.
Pasado un tiempo, Anna y Sandro comienzan a tener diferencias en su relación. Ella se siente aburrida e infeliz
con la actitud de Sandro, por lo que, deciden tomar una siesta entre las rocas y, cuando despiertan, Anna ha
desaparecido.
Enfadados por la actitud de Anna, Claudia y Sandro comienzan a buscarla; al no encontrarla, se preocupan. La
búsqueda de Anna continúa por días y días sin obtener resultados.
Al quedar solos en la isla, comienza a surgir una atracción entre Claudia y Sandro. Regresan a tierra firme y
continúan la búsqueda, sin embargo, pareciera ser que Anna ha desaparecido para siempre. Se comienza a leer
entre líneas que a nadie le importa lo que sucedió con ella : "Hace unos días, la idea de que Anna estuviera
muerta me mataba. Ahora ya ni lloro, tengo miedo de que esté viva" A partir de esta cita, podemos notar que
Claudia claramente, se debate entre un sentimiento de felicidad debido a su amor por Sandro y, un sentimiento de
culpabilidad por la desaparición de su amiga.
Lo que parecía una intriga policiaca con trazas de ser un crimen, un suicidio, un accidente o una desaparición
planeada se va transformando en una historia de amor llena de conflictos emocionales, donde aparecen la
soledad, la incomunicación, el tedio y el aburrimiento.
El aspecto que resulta más controvertido del film aún hoy en día es el hecho de que en ningún momento se nos
explica qué le ha sucedido a Anna. A Antonioni no le importa lo que le ha pasado a su personaje, sino las
consecuencias que tiene su desaparición y el consecuente accionar de los personajes que representaban figuras
importantes en la vida de la desaparecida.
Con respecto a las repercusiones del film, podemos aportar que tuvo su presentación en Cannes en el año 1960 y
fue fuertemente criticada porque se la consideró una obra de una transgresión inusitada, quasi revolucionaria en
su momento. Quizás a un espectador actual se le escape esa modernidad que por entonces era tan obvia, aunque
hizo gala de un gran rechazo por parte del público, entre silbidos y aplausos muy pausados. Meses más tarde, en
el festival de Londres, fue premiada por ser "la más original e imaginativa concursante exhibida".

Coincidencias y contraposiciones con “Porcile”


Las coincidencias que podemos notar en los dos films son, en una primera instancia, que las historias se llevan a
cabo por protagonistas pertenecientes a la clase burguesa. De hecho “La aventura” empieza con una excursión
que realizan un conjunto de personas de clase alta en un yate privado y todo el film transcurre en ese ámbito,
entre fiestas, paseos y excursiones que se dan con personajes de un nivel social alto. Lo mismo notamos en una
de las historias que conforman la película “Porcile”, tal es el caso de la familia de Julián, la trama se da en una
familia burguesa con fuertes tradiciones, costumbres e ideas políticas.
A diferencia de “Porcile”, film en el que Pasolini pretende realizar una fuerte crítica al accionar de algunos
ciudadanos en particular, consecuencias contraproducentes en la sociedad que rodea a los personajes, las
tradiciones arraigadas a ideas fascistas, el desamparo de la familia y las costumbres; “La aventura” dirigida por un
hombre independiente, como lo es Michelangelo, éste intenta transgredir el cine de la época y convertirse en un
hito de la modernidad cinematográfica, por ejemplo a través de su notable estilo en cuanto a los espacios y
paisajes presentes en la película, se puede apreciar la belleza de sus imágenes, mientras que los protagonistas se
trasladan constantemente de un lugar a otro, provocando la difícil repetición de espacios en las distintas escenas.
Mientras que, en “Porcile” abocándonos específicamente a la historia del caníbal, podemos notar el mismo
ambiente despoblado, rodeado de soledad, repetición de colores en tonos marrones y grises, silencio rotundo por
parte de los personajes destinado a la interpretación profunda del público.

Idea filosófica y estilo cinematográfico del director:


Es posible adjudicarle a Michelangelo el título de vanguardista antes que moderno, entre otras cosas, porque sus
obras generaron grandes controversias y espantos en el público en general. Su obra hoy día, continúa estando
plenamente vigente, ya sea ideológica y/o estéticamente. Sus grandes films, de alguna manera, profetizaron una
sociedad futura y, al mismo tiempo, llevaron en su seno la clave para comprenderla. Pocos autores pueden
ofrecernos semejante capacidad de trascendencia cultural.
Desde sus comienzos, Antonioni decidió abordar en sus obras temáticas como la incomunicación entre las
personas, la dificultad para establecer relaciones, los amores imposibles y el desarraigo del individuo en una
sociedad fría y deshumanizada.
Es remarcable la forma que tiene Antonioni de mostrarnos todo el vacío existencial y la incomunicación que rodea
a estos personajes.
Dicho esto no debería considerárselo como un autor especialmente ideologizado, no al menos respecto a las
ideologías tradicional y, en concreto, respecto al contexto en el comenzó a trabajar: cuando el neorrealismo era la
moda. Solo extrajo algunos elementos de aquello, pero no se ligó a esa corriente exclusivamente.
Su ligazón con la realidad está en las raíces de su filmografía, realizó documentales, jamás abandonó el género
de los cortometrajes, pero más que nada por su forma de entender al cine como el arte para hablar de la vida. Es
decir, que su análisis de la angustia vital del hombre ante la sociedad (del hombre burgués, singularmente), lo
realiza desde una perspectiva básicamente anti burguesa, es decir, comprometida con la sociedad. En este
sentido, la reconstrucción de esa grieta emocional del hombre respecto al mundo que le rodea es, esencialmente,
un grito sobre la necesidad de cambio. Que no es poco, si hablamos de ideología.

Título: Europa 51
Año: 1951.
Director: Roberto Rossellini.
Actores: Ingrid Bergman (Irene Girard), Alexander Knox (George Girard), Ettore Giannini (Andrea), Giulietta
Masina (Passerotto), Teresa Pellati (Ines), William Tubbs, Antonio Pietrangeli, Maria Zanoli (Mrs. Galli)
Género: Drama
Duración: 113 minutos.

Biografía del director: Roberto Rossellini.


Nacido en la capital italiana, el 8 de mayo de 1906, Roberto Rossellini se crió en el seno de una familia burguesa
romana católica (formación cristiana que heredó de su madre). Fue hijo de uno de los cuatro hijos de Elettra Bellan
y Angélico Giuseppe, prestigiosos arquitecto autor de importante edificios romanos, entre ellos, Corso, el primer
cine moderno de Roma. Gracias a su padre, tuvo ocasión de conocer a los grandes de la industria, asistir a
numerosas proyecciones, nutrirse de ese ambiente. Películas como: “Y el mundo marcha”, “Aleluya” marcaron un
antes y un después en su vida.
Tras la muerte de su padre, durante los primeros años de la década del 40, comienza sus primeros trabajos en la
industria cinematográfica. Desde ese entonces el director se consolidó gracias a dos circunstancias: los contactos
que había hecho gracias al negocio de su padre y, la amistad personal con Vittorio Mussolini, hijo del dictador.
Sus primeros trabajos fueron como técnico de sonido, luego, también, como asistente de montaje. En esta época
rueda “Prélude á l'après-midi d'un faune” (1937), su primer corto, justo antes de empezar a ejercer como ayudante
de los directores Goffredo Alessandrini y Francesco De Santis.
Su primer largometraje, “La nave bianca” (1941) fue financiada por el Centro Cinematográfico del Ministerio de la
Marina y presentada al Festival de Venecia, donde ganó la Copa del Partido Fascista Nacional. Esto le abrió
círculos de contacto en el gobierno y ayudó a que la censura fuera más permisiva con él. De esta manera, el cine
de Rossellini, comenzó a caracterizarse por agruparse en trilogías temáticas. La primera fue la Trilogía Fascista,
que el director abordó para celebrar a los héroes de guerra. Este período abarcó desde 1941 a 1943. En 1942,
filma “Un pilota ritorna” siguiendo la línea conmemorativa de la anterior, pero esta vez patrocinada por las Fuerzas
Aéreas. La censura detectó, no obstante un atisbo antibélico y, Rossellini recibió un nuevo guión, lo que fue
sorprendente para él ya que que nunca trabajada con guiones. “L’uomo della croce” (1943) tuvo como eje central
la victoria italiana sobre Rusia y fue rodada en condiciones precarias. La película se estrenó un mes antes de que
las tropas aliadas invadieran Sicilia. Durante este período, el gobierno fascista exigió a Rossellini realismo
principalmente basado en el uso de material documental, referencia a acontecimientos contemporáneos y rodaje
en los propios lugares de referencia.
Al final de la guerra, las medidas represivas de Mussolini se suavizaron y Rossellini comenzó a gozar de mayor
libertad creativa la Trilogía Neorrealista, optando por una postura moralista, dos meses después de que Roma
fuera liberada, comenzó a filmar su obra maestra: “Roma, ciudad abierta” (1945). Con dificultades económicas,
solicitando la ayuda de amigos, incluso, algunos préstamos, da comienzo a una nueva etapa del cine.
La revolución de su estilo fue aún mayor con “Paisà” (1946). Dicho film se rodó con actores elegidos, colocando
una cámara en medio de la plaza de un pueblo y aprovechando las reacciones de los curiosos que se acercaban a
ella.
En 1948 Ingrid Bergman se le ofreció como actriz para sus películas y Rossellini la aceptó. Al año siguiente
hicieron “Stromboli” juntos sin utilizar guión previo y, posteriormente, “Europa 51” (1951), película que se rodó en
cuarenta y seis días. La relación con Rossellini llevó a Bergman a divorciarse de su primer marido e iniciar una
relación amorosa con dicho director.
En 1957 la pareja se separa. Luego, Roberto, comienza a grabar historias documentales para la televisión,
producidas y emitidas por RAI, varias de estas dedicadas especialmente a repasar vida y obra de personajes
famosos, como ser, “La India vista por Rossellini” (1959). Durante ese mismo año, ganó un nuevo y trascendente
reconocimiento a nivel de público y crítica con el premio León de Oro del Festival de Venecia, presentando la
película “El general della Rovere”.
El 3 de junio de 1977, muere en Roma, ciudad que lo vio nacer, Rossellini tras un ataque al corazón, víctima de un
infarto.

Europa 51 - Roberto Rossellini


La película se desarrolla en la Italia de la segunda posguerra mundial. El personaje protagonista de la misma es
Ingrid, una mujer perteneciente a la alta burguesía. Tras el suicidio de su único hijo, su vida da un giro inesperado,
permitiéndose encaminar su propia redención por sentirse tremendamente culpable de la muerte del pequeño.
Comienza a frecuentar barrios marginados, realiza obras buenas destinada a la vida de los más necesitados. Dos
ejemplos claros que se aprecian en el film son la ayuda que le presta a una familia comprando una medicación a
un niño que padece una fuerte enfermedad, o bien, cuando ayuda a la mujer prostituta que padece tuberculosis
durante sus últimos días de vida.
Su marido, George, y su madre no pueden comprender el porqué de su accionar ni las continuas desapariciones.
Incluso su marido llega a pensar que Irene tiene un amorío con Andrea, un viejo amigo de la familia, quién la
orienta y le da a conocer un ideal comunista que la lleva a sumergirse en los bajos fondos y alejarse cada vez más
del universo de lujos que la rodeó hasta ese momento. Se aparta así, de su familia conservadora y reaccionaria,
por ser incapaces de comprender el irremediable sentimiento de culpa que invade su corazón, el corazón de una
madre que perdió, ya sea por negligencia o falta de amor y atención, al fruto de sus entrañas, su único hijo.
Como consecuencia de semejante cambio, es decir, ese arrebato repentino e incomprensible para los demás
como es abocarse por completo a los más desfavorecidos sin pedir absolutamente nada a cambio, la reacción de
la sociedad a través de sus más allegados, se reduce a un intento por encasillar a Irene dentro de una etiqueta. Se
la cuestiona sobre sus ideales y su programa, si es o no comunista, si quiere hacerse monja. La someten a una
serie de estudios físicos-psicológicos, hasta que finalmente deciden dejarla internada en una clínica psiquiátrica
por considerarla enferma. Durante el final de la película se puede observar la escena donde aparece Irene atrás
de una ventana con rejar fuertes saludando a aquellos únicos ciudadanos que no la creyeron loca o enferma, los
amigos y compañeros que hizo en su recorrido por los barrios. Se oyen voces gritando: “Es una santa, no está
loca, es una santa”

Coincidencias y contraposiciones con “Porcile”


En ambas películas el contexto histórico cumple un rol sumamente importante, la trama de las mismas no se
entendería de igual manera, sin un previo conocimiento de lo que transcurría en ese entonces. El impacto de la
Segunda Guerra Mundial, ya sea, en el transcurso de la misma o durante los años siguientes dejó grandes
secuelas en la ideología de la sociedad en general.
Irene se siente tremendamente angustiada por su vida, la muerte de su hijo actúa como desencadenante de una
serie de arrepentimientos y deseos de revertir su condición, a partir de un despertar social-colectivo. Asimismo,
Julián, uno de los personajes principales en “Porcile”, también busca revelarse contra sus padres, su pretendiente
y los consensos sociales en general. Encuentra asilo y compañía entre los cerdos, cuyas pocilgas se encontraban
cerca del lugar donde habitaban los empleados de su propia casa. Aquí se puede observar un notorio deseo de
sentirse más cerca de la gente común y corriente, la gente trabajadora, quienes lo aceptaban y querían sin
importar su condición; los mismos que se entristecen y lloran desconsoladamente, tras descubrir la muerte del
joven. Del mismo modo se siente Irene al buscar apoyo y compañía en los brazos de completos desconocidos que
finalizan convirtiéndose en sus fieles amigos, el motivo de su salvación, los únicos que saben rotúndamente que
no está loca.
La temática de la muerte es un hecho recurrente en ambos films. Muere Julián devorado paradójicamente por
quienes eran objeto de amor para él, los cerdos. Muere el muchacho que confiesa haberse convertido en canibal,
haber matado a su padre y aún así sentirse a gusto con dicho accionar. Muere, también, Michelle, el hijo de Irene
y George. En todos los casos la muerte representa un antes y después en cada película, permite entrever la
temática del director de mostrar la cruda realidad, el sistemático accionar de la sociedad de culpar sin
remordimientos ni juicios previos, ocultar la verdad, juzgar con liviandad, diagnosticar, etc.
La zoofilia, el canibalismo, la muerte, son temáticas tabú para la época de rodaje que, tanto Rossellini como
Pasolini utilizaron para generar un fuerte impacto en los espectadores. La decadencia de la sociedad, la venganza
de los humanos contra los humanos y el deseo de concientizar al futuro, podrían ser algunos de los mayores
mensajes que nos pretenden dejar estos directores.

Idea filosófica y estilo cinematográfico del autor.


Abocándonos puntualmente a la idea que pretende instalar el director con esta película, podemos afirmar que, la
misma, sostiene un fuerte deseo de situarnos en contexto antes que nada para comprender su propósito. Ya
desde el título, se nos invita a imaginar Europa seis años después de culminar la Segunda Guerra Mundial, es
decir, plena Guerra Fría. Las secuelas de la posguerra fue curando dando paso a una sociedad que ha vuelto a la
presuntuosa “normalidad”. De esta manera, muestra a una familia bien establecida económicamente, como lo es
la de Irene, que hacen cenas de sociedad con otros personajes elegantes, en las que se discute de política desde
una distancia prudentemente acomodada, por ejemplo. Se preguntan si habrá guerra o reinará la paz con tal
liviandad, siendo que hace solo unos años atrás experimentaron terribles y atroces consecuencias. El clic del
cambio se da cuando Irene le confiesa a su marido, luego de la muerte de su hijo: “Tenemos que cambiar nuestra
manera de vivir”.
Las raíces neorrealistas de Rossellini se hacen presentes a partir de aquí, cuando Irene se sumerge en una
depresión de la que solo logra resurgir entregándose por completo a ayudar a los más desfavorecidos. Las
escenas de Irene vestida elegantemente con el fondo contrastante de las otras familias, la conversión de la frívola
dama de sociedad a madre abnegada hasta alcanzar una especie de redención como salvadora los pobres, son
ejemplos claros de lo expresado con anterioridad.
Roberto, además, intenta demostrar, haciendo una leve pero no menor comparación con la sociedad real, que esa
sociedad democrática bienpensante, que, paradójicamente cuenta con su memoria histórica por todos los sucesos
atroces sucedidos durante la guerra, aun no tolera el surgimiento de figuras tan extravagantes como la de Irene,
no tolera los cambios abruptos y castiga con liviandad a aquellos que considera diferentes. Un intento, quizás, de
recobrar los valores morales esenciales de la existencia de la humanidad, tanto a nivel individual como social,
rasgo característico de la corriente neorrealista, así como también, el intento de narrar una realidad social a través
de las experiencias individuales de personajes comunes, por ejemplo en la escena que Irene llega a rozar el delito,
poniendo su propia vida y libertad en peligro, intentando proteger a un delincuente marginal acechado por la
policía. O bien, cuando decide reemplazar en su trabajo en una fábrica a una obrera con la que entabla una
amistad. Esta sola secuencia, con la entrada al establecimiento, la descripción minuciosa del trabajo en cadena,
las filas de obreras, las sirenas marcando las entradas y salidas, está magistralmente realizado con rigurosidad y,
prácticamente, incita al espectador a regresar a la producción artesanal.
En cuanto a su ideología, realizando un pantallazo general, podemos remitirnos, por ejemplo, a la infancia del
director, afirmando que su afán por la mecánica y su cercanía con el ambiente cinematográfico, le permitió
desarrollar una nueva pasión; experimentó y creó ingeniosos inventos. Ya de grande ese entusiasmo generó la
creación de algunos curiosos procedimientos como el pancinor o el zoom óptico para facilitar rodajes. Este hecho
da cuenta de la vehemencia e ímpetu en su manera de ser: lograr lo que uno se propone.
En 1923, cuando se produjo la llamada Marcha sobre Roma que colocó en el poder a Benito Mussolini, el futuro
director tenía 16 años. A pesar de que la familia del cineasta no se relacionó nunca directamente con el fascismo,
su elevada posición social les permitió acercarse al poder. Durante los años de su juventud, Rossellini fue
educado bajo la influencia del fascismo, pero diversos testimonios coinciden en indicar que su sentido de la
amistad le permitía relacionarse con cualquier persona, independientemente de su ideología política.
El contacto de Rossellini con el fascismo se produjo a través de la revista Cinema fundada por Vittorio Mussolini y
en la que colaboraban algunos intelectuales antifascistas como Giuseppe De Santis, Carlo Lizzani, Luchino
Visconti y Michelangelo Antonioni; contrarios todos ellos a que el cine italiano adoptara fórmulas expresivas
italianas. Durante los años fascistas se rodaron más de 700 películas. El régimen no promovió directamente
películas de propaganda sino que ejerció un fuerte control ideológico sobre ellas, aplicando un código muy estricto
que impidió que el cine reflejara la realidad italiana. El contacto de Rossellini con Cinema fue escaso hasta el año
1943, fecha en al que hizo amistad con algunos de los redactores de dicha revista, quienes colaboraron en sus
películas. De todas formas en ningún momento demostró una clara lealtad hacia el movimiento
Rossellini anunció en 1963 su decisión de abandonar el cine por la televisión, medio que se estaba imponiendo en
ese momento. El director creía que el deber de una televisión estatal era la promoción de la cultura y de la
educación. A priori, parecía que éste era el medio ideal para desarrollar la teoría didáctica de la visión ya que
permitía más flexibilidad en los esquemas de producción, además podía conseguir un mayor impacto en el público
que el cine, utilizando para ello el lenguaje del cine. Sin embargo, la utopía educativa, fracasó ante la cruda
realidad y la miseria cultural que habían rodeado las televisiones estatales.

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