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El uso de la fotografía en la investigación educativa

© J. Félix Angulo Rasco-2007 (Materiales para la Consejería de Educación-


Junta de Andalucía)

“A diferencia de otras imágenes visuales, la fotografía no es una imitación o una interpretación


de su tema, sino una verdadera huella de éste. Ninguna pintura o dibujo, por muy naturalista
que sea, pertenece a su tema de la manera en que lo hace la fotografía” (Berger 2001: 56)

“las imágenes que perduran, perduran sólo como testimonio del arte de quien las pintó. En la
fotografía, en cambio nos sale al encuentro algo nuevo y especial… queda algo que no se agota
en el testimonio del arte del fotógrafo…, algo que se resiste a ser silenciado…, sin querer
entran nunca en el ‘arte’ del todo”
Walter Benjamín
Pequeña Historia de la Fotografía.

Introducción

Estamos tan acostumbrados que no nos llama la atención que en muchos


acontecimientos ordinarios y extraordinarios de nuestra vida la gente haga
fotos, ya sea con sus cámaras o con sus teléfonos móviles. Parece que nada se
escapa, que no hay acontecimiento que no sea susceptible de quedar
registrado, con la nuevas tecnologías puestas al servicio de cualquier usuario.
La densidad icónica en la que el ser humano se ha desarrollado de forma
creciente durante los últimos cuatro siglos, se ha incrementado de manera
exponencial desde que la ‘mecánica fotográfica’ -tal como la llamaba Walter
Benjamín- se ha transformado en digital.

La fotografía como arte permanece en el foto-reportaje, en la moda y en


algunos retratos; también el oficio del fotógrafo, renovado tecnológicamente,
se mantiene en ese mar de cámaras y móviles que se lanzan con verdadera
pasión a capturar los acontecimientos sociales en bodas, bautizos, eventos
deportivos y otras celebraciones e incluso desgracias.

Fotografía y sociedad.

Pero ¿por qué es tan importante la imagen fotográfica? No es necesario


remontarnos al papel clave que las imágenes han jugado en la evolución
humana (en sus religiones y sus representaciones más esenciales); basta con
que tengamos en cuenta que la imagen fotográfica, ese arte tecnológico
introdujo desde su invención a finales del siglo XIX un fuerte sentido realista y
documental; las fotos de Bateson y Mead de la sociedad Balinesa son un típico
ejemplo de ello (Sullivan 1999). Otros autores en los albores mismos de su
descubrimiento, documentaron parcelas ocultas o marginadas de la sociedad en
la que vivían, con una fuerza evidencial desconocida hasta entonces. Estoy
pensando en Tina Modotti (1896/1942) y sus fotografías sobre la revolución
mexicana; en Dorotea Lange (1895/1965) y su crónica de la transhumancia de
familias empobrecidas de granjeros norteamirecanos y, desde luego, en Lewis
W. Hines (1874/1940) y sus excelentes reportajes gráficos sobre el trabajo
infantil y la llegada de la inmigración a Estados Unidos. Todos ellos nos
ofrecieron y documentaron territorios de nuestra propia sociedad urbana, fabril,
revolucionaria, pobre, desplazada, desamparada, acosada y maltratada por el
capitalismo salvaje de principios del siglo XX; y el valor de documento
fotográfico, de ‘verosimilitud incuestionable e ineludible’, fue justamente clave
para promover el cambio político. Por ejemplo, las imágenes de Hines sobre el
trabajo de menores en las fábricas algodoneras de California, sirvió para
aprobar legislación contra el trabajo y explotación de menores.

Imagen nº 1 (Niña manejando el telar)


(Lewis W Hines. Algodoneras en California. 1908:
http://www.historyplace.com/unitedstates/childlabor/)
Imagen nº 2 Niña entre los telares
(Lewis W Hines. Algodoneras en California. 1908:
http://www.historyplace.com/unitedstates/childlabor/)

Pero más allá de ello, Hines nos mostró con toda su crudeza, no exenta de arte,
el trabajo infantil en la América capitalista que se presentaba a ojos de los
inmigrantes europeos y asiáticos, como la tierra promisoria, el nuevo paraíso.

Este equilibrio entre documento-contenido y arte, es quizás uno de los temas


claves de la fotografía como estrategia de investigación cualitativa. En 1980
Roland Barthes (1982) publica un excelente libro sobre la fotografía titulado
Cámara Lúcida (La chambre Claire)1; en él, entre otras cosas, identifica dos
elementos que determinan su interés particular por las imágenes fotográficas.
Uno es el studium, término que aplicado a la fotografía señala el contenido de
la misma, su objeto.

“Por medio de studium me intereso por muchas fotografías, ya sea porque las
recibo como testimonio políticos, ya sea porque las saboreo como cuadros
históricos…, pues culturalmente… como participo de los rostros, de los
aspectos, de los gestos, de los decorados, de las acciones” (58).

En las imágenes de Hines, su studium es ese contenido que podemos apreciar:


la niña entre los telares, en posición firme, como si estuviera acostumbrada no

1
Véase que el título es intencionado. Representa lo contrario de la Cámara Obscura: el
dispositivo renacentista, ancestro de la fotografía, que Leonardo da Vinci en el siglo XV
y que Johannes Vermeer en el XVII, aplicaron a la práctica del dibujo y la pintura.
(Véase por ejemplo Bozal 2002)
sólo a trabajar, sino a recibir órdenes precisas que requieren inmediato
cumplimiento (véase imagen nº 2)

Pero Barthes añade un segundo elemento que denomina punctum. Según


Barthes el punctum es, añade, un pinchazo un pequeño corte, una casualidad:

“El puctum de una foto es ese azar que en ella me despunta (pero que también
me lastima, me punza)” (65).

Dicho de otra manera: si el studium tiene que ver con el contenido, el punctum
lo tiene con lo que nos retiene de la imagen, con ese elemento propio por el
que nos atrae, por el que la distinguimos y la señalamos como arte, como
excepcional. El punctum va más allá de efecto de verosimilitud, conecta la
imagen con nuestra subjetividad, con nuestra emoción y quizás con nuestro
dolor o alegría.

Como studium el poder documentalista de la fotografía nos ofrece información


directa de ceremonias, escenas cotidianas, tatuajes, máscaras, agrupamientos,
formas de vida, etc, que de otra manera hubiera sido bastante complejo de
captar. La cámara (al contrario que la pintura o el dibujo, mucho más
determinados por la subjetividad estética del artista) confirmaba la existencia
de ciertas cosas, incluso de la propia existencia de culturas exóticas (Naranjo
2006). Este fuerte sentido de narración realista de la cámara aún permanece en
el fotoperiodismo y como elemento básico de documentación en general.

Puede que en nuestro trabajo de campo tomemos algunas imágenes


fotográficas con un fuerte punctum; pero como investigadoras, no podemos
centrarnos en él. El punctum, lo emocional, no es nuestro objetivo prioritario.
Hemos de admitir que incluso no podremos mantener un cierto equilibrio entre
ambos y debamos aceptar que fundamentalmente nuestras imágenes están
para documentar, para hablar a su manera de los espacios, las relaciones y las
acciones que investigamos. Definitivamente el contenido, el studium debe
predominar en nuestros registros fotográficos. De eso trata la etnografía visual.

Etnografía visual.

Aunque existen enfoques diversos sobre la etnografía visual y el empleo de


imágenes (fotográficas) en la investigación (Pink 2001), lo importante, como
indica Prosser (2007) es que un proceso de investigación versátil se ha de llevar
a cabo “con suficiente flexibilidad para aplicar y utilizar sus habilidades en un
amplio espectro de cuestiones y posiciones analíticas y metodológicas” (2). En
este sentido dicho autor enfatiza que lo importante es combinar diversos
enfoques, desde la creación hasta la utilización de imágenes creadas por otros;
una combinación, como luego veremos, que dependerá tanto del contexto de
investigación mismo como del objetivo de investigación.

Prosser (2007) sugiere (3-4), apoyándose de lo anterior, cuatro aspectos


básicos de la indagación visual:
- Datos encontrados

Son imágenes creadas en el pasado, como fotografías


costumbristas, o productos de la cultura visual actual: álbumes
familiares de fotos, álbumes escolares, etc.

- Datos creados por la investigadora

El trabajo típico de una antropóloga, etnógrafa o investigadora


visual estriba en crear (tomar fotografías) imágenes del contexto
indagado. La creación de datos visuales entronca, en cierto
sentido no trivial con la fotografía como documentación social.

- Datos creados por el informante

En este caso, son los informantes quienes elaboran las imágenes


de un modo específico para la investigación. Se trata de una
estrategia de colaboración y participación de los mismos sujetos
implicados en el contexto objeto de investigación.

- Representaciones

Prosser entiende por representaciones las formas en las que las


investigadoras representan –gráficamente- datos, interpretaciones
y hallazgos; pero también puede entenderse por tal las
representaciones que los informantes emplean para comprender
su propia realidad, sus circunstancias o ciertos acontecimientos de
la misma a través de gráficas, gaffities, dibujos o ‘mapas
conceptuales’.

Todas estas fuentes o enfoques diversos en el empleo de la imagen fotográfica


en la investigación cualitativa son claves en la mayoría de los procesos de
indagación. Probablemente, la combinación de algunos de ellos, representa una
de las tácticas más efectivas para el conocimiento en profundidad del mundo
social y educativo.

Foto Elicitación

La Foto elicitación (Harper 2002) es el proceso por el cual la investigadora


recoge información a través del diálogo sobre material fotográfico. Dicho
material suelen ser imágenes que han elaborado los sujetos implicados y
participantes en la acción; pero también se pueden emplear imágenes que la
propia investigadora ha realizado. En ambos casos, y éste es el carácter
diferencial de la foto elicitación, se trata de dialogar sobre y con las imágenes
rememorando lo que ellas muestran, enlazando con recuerdos, con
experiencias (pasadas o presentes), con sensaciones y emociones.
La foto elicitación se basa en la simple idea de insertar fotografías en la entrevista de
investigación. Douglas Harper (2002: 13).

Según Harper, las fotografías que pueden usarse en un proceso de este tipo, se
pueden agrupar en un continuo de la siguiente manera:

a. En un extremo estás las fotos que pueden considerarse más ‘objetivas’,


inventarios visuales de objetos, gente y artefactos.
b. En un lugar intermedio están las imágenes que proceden o son parte de
colectivos o instituciones. Por ejemplo, fotos de lugares de trabajo, de
escuelas, hospitales. Son imágenes que conectan al individuo con
experiencias contextuales pasadas o presentes.
c. En el otro extremo estarían las imágenes que muestran dimensiones
íntimas de la experiencia personal de los sujetos informantes. Por
ejemplo, fotos del grupo de amigas, de la habitación propia, de los
lugares que marcan su vida cotidiana e incluso del propio cuerpo o
partes de él.

Respetando esta clasificación, lo importante de la foto elicitación es que las


imágenes han de ‘representar’ algo con sentido para los informantes. En
muchos casos, hablar con imágenes como mediación es la única manera de
entrar en la experiencia íntima y personal; un ámbito que por la mera
utilización de la entrevista etnográfica estaría cerrado (cuando no vedado) a
nuestra indagación. La fotografía así usada “actúa como un médium de
comunicación entre investigadora y participante” Clark-Ibáñez (2004: 1512); lo
que la convierte en una poderosa estrategia en la investigación con niños y
niñas.

Véase el trabajo de Jeffrey Samuels sobre la Cultura Monástica en Sri Lanka (2004).

Foto Voz

La foto voz es una estrategia en la etnografía visual en la que a través de la


realización y utilización de fotografías los sujetos informantes pueden expresar
sus ideas, concepciones, pensamientos, relaciones e interacciones. Se trata, en
definitiva, de una estrategia de participación activa de los sujetos implicados en
la investigación en la obtención de información visual. Según Carolina Wang
(1999), la foto voz tiene, entre otros, dos objetivos básicos, que merecen ser
resaltados:

1.- registrar y reflejar las preocupaciones personales de los sujetos


2.- promover el diálogo crítico y el conocimiento a través de la discusión grupal
de fotografías.
En términos genéricos, la foto voz se apoya en la idea de que las imágenes
pueden enseñar e ilustrar más allá de la expresión verbal de los sujetos y por
eso mismo pueden servir para apoyar no sólo la indagación sobre cuestiones
sociales y educativas, sino también promover y enfatizar la acción individual y
comunitaria de los grupos sociales e individuos implicados.

Una correcta utilización de esta estrategias de indagación implica tener en


cuenta una serie de recomendaciones (Wang 1999):

- Selección de participantes. Es muy importante seleccionar a los sujetos


de manera que estén representados diferentes sensibilidades o puntos
de vista sobre un acontecimiento o una institución.
- Explicar cuidadosamente el uso de la cámara, evitando complicaciones
técnicas.
- Explicar detalladamente el proceso de indagación, informando sobre el
uso de las fotografías generadas como elementos de discusión colectiva
posterior.
- Negociar y obtener el consentimiento para la realización de las
fotografías.
- Sugerir temas posibles, permitiendo que los sujetos participantes puedan
libre y creativamente prestar atención y registrar otros que bajo su
punto de vista son tan o más importantes que los iniciales.
- Crear y habilitar un espacio para compartir las imágenes.
- Establecer un proceso para hablar, dialogar y analizar las imágenes
producidas.

ALGUNAS IDAS PARA EL USO DE IMÁGENES POR DOCENTES Y


ALUMNADO

- Tomar fotos de la clase periódicamente, para poder identificar cambios en


los patrones de flujo de movimiento y en la organización.
- Usar las fotos como un diario. Tomar fotografías periódicamente del centro
y utilizarlas como estímulo para escribir sobre la práctica o el mismo centro.
- Utilizar fotografías para documentar el desarrollo de un proyecto o una
lección.
- Solicitar que los estudiantes fotografíen sus lugares favoritos y menos
favoritos en la escuela, como elemento esencial para un debate.
- Solicitar que el alumnado fotografía su barrio, escenas de su familia, los
lugares que frecuenta el fin de semana, como elementos de debate y
aprendizaje posterior.
- Utilizar fotografías para documentar acontecimientos en el barrio, en el
pueblo o en la vida cotidiana del alumnado (fiestas populares, cambios
climáticos, nuevas construcciones, etc.)
(Tomado de Walker, Rob 2007: 6)
Fotografiar a menores.

Una de las situaciones fotográficas más comprometidas es la de


fotografiar a menores en la escuela. En este caso es necesario tener en
cuenta las siguientes recomendaciones:

1. Solicitar el premiso de los padres/madres o tutores antes de


efectuar las fotografías.
2. Evitar fotografiar los rostros de los menores, o en todo caso, evitar
publicar fotos en las que aparezcan los rostros de los mismos,
especialmente en primeros planos o retratos fotográficos.
3. Tener en cuenta que lo importante es registrar la acción y la
interacción de los sujetos; no se trata de hacer un foto reportaje.
EJEMPLO DE USO DE LAS IMÁGENES

Secuencia de interacción.

En un C.P.R. de Andalucía durante el proceso de investigación sobre la


utilización de las nuevas tecnologías se descubrió la presencia de un viejo
principio pedagógico que ha regido el funcionamiento de dichas escuelas: los
mayores y los que saben enseñan a lo menores; es decir, no es sólo el docente
quien enseña, el propio alumnado asume tareas de enseñanza en relación a sus
compañeros y compañeras de menor edad. En las escuelas rurales los docentes
comienzan una cadena pedagógica que va mucho más de ellos y ellas y en la
que se implica el alumnado. La fotografía nos ayudó a detectar no sólo este
proceso sino también que la relación ‘pedagógica’ entre el alumnado está
determinada por el género, tal como indican las fotografías siguientes. (Tomado
de estudio ‘El nacimiento de la alfabetización’, CAMOT Project- Comenius 2.1.)

Secuencia Primera. La maestra enseñan el uso de las TICs


Secuencia segunda: el alumno que ha aprendido enseña a otro alumno.

Secuencia tercera: o enseña a otra alumna.


En las imágenes puede percibirse una cuestión que tiene que ver con las
relaciones de género. En la secuencia segunda el niño enseña a otro niño, pero
no invade su espacio vital; sin embargo, sí lo hace cuando enseña a una niña,
llegando a tomar el ‘ratón’ por ella para llevar a cabo la acción que se supone
debería hacer ella.

Preguntas y actividades de apoyo

- ¿Qué es lo que tienes que tener muy en cuenta antes de realizar fotografías en
escuelas de primaria y secundaria?
- Imagina una manera de utilizar la estrategia de foto-voz con tu alumnado que
te pueda ser de utilidad como docente.
- Imagina una manera de utilizar fotografías familiares de tus alumnos en tus
clases.
Referencias:

Berger, John (2001) Mirar. Barcelona. Gustavo Gili.


Bozal, Valeriano (2002) Johannes Vermeer de Delft. Madrid. TF editores.
Barthes, Roland (1982) La cámara lúcida. Notas sobre la Fotografía. Barcelona.
Gustavo Gili.
Clark-Ibáñez, Marisol (2004) Framing the Social World with Photo-Elicitation
Interviews, American Behavioral Scientist, Vol. 47 No. 12: 1507-1527.
Collier, John Jr., & Collier, Malcolm (1986) Visual Anthropology. Photography as
a Research Method. Alburquerque. University of New Mexico Press.
Harper, Douglas (2002) Talking about pictures: a case for photo elicitation,
Visual Studies, Vol. 7 nº 1:13-26.
Pink, Sarah (2001) Doing Visual Ethnography. London. SAGE.
Prosser, Jon (1998) Image-based Research. A sourcebook for Qualitative
Researchers. London. RoutledgeFalmer Press.
Prosser, Jon (2007) Introducing visual methods: A roadmap, en Introduction to
visual methods. ESRC Research Development Initiative. Building capacity
in visual methods. University of Leeds- June 2007 (1-6).
Samuels, Jeffrey (2004) Breaking the Ethnographer’s Frames. Reflections on
the Use of Photo Elicitation in Understanding Sri Lankan Monastic Culture,
American Behavioral Scientist, Vol. 47 No. 12: 1528-1550.
Sullivan, Gerald (1999) Margaret Mead, Gregory Bateson and Highland Valí.
Fieldwork Photografps of Bayung Gedé, 1936-1939 Chicago. The
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Naranjo, Juan (Ed.) (2006) Fotografía, antropología y colonialismo (1845-2006).
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Walter, Rob (2007)Using images in action research, en Prosser, Jon (2007)
Introducing visual methods: A roadmap, en Introduction to visual
methods. ESRC Research Development Initiative. Building capacity in
visual methods. University of Leeds- June 2007 (1-8) paper.
Wang, Carolina C. (1999) Photovoice: A participatory action research
stragteghy applied to women´s health Journal of Women´s Health, V. 3,
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