Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
P ara vivir una vida exitosa como adulto, un niño necesita llegar a ser un
exitoso solucionador de problemas. Los niños necesitan adquirir las
habilidades que le ayuden a afrontar con los desafíos inesperados de la vida
adulta: cómo afrontar con un embarazo no deseado, un recorte presupuestal
cuando tiene una familia que alimentar y un préstamo que pagar, el diagnóstico
de una enfermedad que amenaza la vida o numerosos otros problemas que
inevitablemente se encuentran. Ya sea que estemos tratando con estos problemas
mayores o dificultades de la vida diaria, las habilidades efectivas de solución de
problemas son uno de los requerimientos esenciales para vivir una infancia y
adultez más satisfactoria. La gente que es efectiva en la solución de problemas
reporta mayores sentimientos de felicidad y de bienestar, mientras que los que
tienen pobres habilidades de solución de problemas tienen pocas elecciones, se
sienten menos en control y probablemente llegarán a sentirse más ansiosos y
deprimidos. Enseñar las habilidades apropiadas de solución de problemas
previene muchos trastornos del ánimo y conductas maladaptativas, y fortalece la
calidad de vida.
Estas son las razones por las que las dos historias qie se presentan se centran
sobre la solución de problemas. Exploran cómo afrontar con la adversidad y
construir el proceso cognitivo que proporciona resiliencia. Hablan de acerca de
pensar los problemas antes que confiar en soluciones no realistas y mágicas.
Enseñan respecto a la aceptación, negociar los resultados, trabajar
colaborativamente hacia una resolución, y otros medios útiles para tornar un
problema en una solución.
Características Terapéuticas
Problemas Abordados
Pérdida
Tristeza
Pensamiento global
Pensamiento negativo
Pesimismo
Introspección
Desesperanza
Recursos Desarrollados
Pensar específicamente
Pensar positivamente
Ser optimista
Ver hacia fuera
Mantener la esperanza
Orientado a la acción
Resultados Ofrecidos
Solución de Problemas
Si ésta no tiene suerte, puede ser una buena idea volver al paso dos y generar
nuevas soluciones potenciales. Si es necesario, reiniciar el proceso de nuevo
para definir el problema original.