TÉCNICAS DE ESTUDIO

¿SABES ESTUDIAR?

CONTESTA EL SIGUIENTE CUESTIONARIO RODEANDO CON UN CÍRCULO EL NÚMERO

DE LA PREGUNTA CUYA RESPUESTA SEA AFIRMATIVA:

1-¿Tienes un lugar fijo para estudiar?

2-¿Estudias en una habitación alejada de ruidos, televisión, radio, etc…?
3-¿Hay suficiente espacio en tu mesa de estudio?
4-¿La mesa está sin objetos que puedan distraerte?
5-¿Tienes luz suficiente para estudiar sin forzar la vista?
6-¿Cuándo te pones a estudiar tienes a mano lo que vas a necesitar?
7-¿Tienes un horario fijo de reposo, estudio, tiempo libre…?
8-¿Haces un programa del tiempo que piensas dedicar al estudio diariamente?
9-¿Divides tu tiempo entre las asignaturas que debes estudiar?
10-¿Estudias como mínimo 5 días a la semana?
11-¿En tu plan de estudios incluyes períodos de descanso?
12-¿Miras al profesor cuando explica?
13-¿Tomas notas de las lecciones señaladas para estudio y de los ejercicios que debes hacer?
14-¿Estás atento durante toda la explicación del profesor?
15-¿Preguntas cuando no comprendes alguna cuestión?
16-¿Participas en las actividades comunes de la clase?
17-¿Tomas notas de las explicaciones de los profesores?
18-¿Tienes cuadernos de apuntes divididos por materias?
19-¿Anotas las palabras difíciles, las tareas especiales, lo que no comprendes, etc…?
20-¿Revisas y completas los apuntes?
21-¿Subrayas las ideas más importantes?
22-¿Lees por encima la lección antes de estudiarla?
23-¿Cuándo lees intentas encontrar las ideas principales de lo que estás leyendo?
24-¿Subrayas las ideas y los datos importantes?
25-¿Cuándo no estás seguro de cómo se escribe una palabra o de su significado la buscas en
el diccionario?
26-¿Escribes los datos importantes o difíciles de recordar?
27-¿Señalas lo que no entiendes?
28-¿Cuando estudias, lo haces de forma activa, formulándote preguntas a las que intentas
responder?
29-¿Cuando estudias tratas de resumir mentalmente?
30-¿Empleas algún sistema o procedimiento eficaz para recordar datos, nombres, etc…?
31-¿Después de aprender una lección la repasas?
32-¿Tratas de relacionar lo aprendido en una asignatura con lo de otras?
33-¿Pides ayuda cuando tienes dificultades en los estudios?
34-¿Completas el libro con los apuntes tomados en clase?
35-¿Llevas al día las asignaturas y ejercicios?
36-¿Cuándo te sientas a estudiar te pones rápidamente a estudiar?
37-¿Cuándo estudias, te señalas la tarea y la terminas?
38-¿Estudias intensamente?
39-¿Ante un mapa geográfico desconocido consultas el mapa?
40-¿Ante una cuestión, problema o dificultad en el estudio, tiendes a considerar previamente
los datos que conoces antes de lanzarte intuitivamente a encontrar la solución?
41-¿Haces esquemas de cada lección?
42-¿En los esquemas incluyes la materia del libro y la de los apuntes tomados en clase?
43-¿Empleas el menos número posible de palabras para hacer los esquemas?
44-¿Cuándo una lección es difícil o confusa procuras organizarla a través de esquemas o
guiones para que sea fácilmente comprensible?
45-¿Tus esquemas destacan las ideas principales?
46-¿Te aseguras de que has comprendido bien lo que tienes que hacer antes de ponerte a
trabajar?
47-¿Consultas otros libros además de los de texto?
48-¿Antes de redactar un trabajo haces un guion o esquema?
49-¿Haces todo lo posible por redactar tus ejercicios de manera clara?
50-¿Compruebas la ortografía, redacción y limpieza de lo que escribes?

TOTAL PUNTOS: …… (1 PUNTO POR RESPUESTA AFIRMATIVA)

SI HAS OBTENIDO MENOS DE 30 PUNTOS, ES PROBABLE QUE NECESITES PONER EN

PRÁCTICA LO ANTES POSIBLE LAS TÉCNICAS DE ESTUDIO.

SI LA PUNTUACIÓN ESTÁ ENTRE 30 Y 41 TIENES HÁBITOS DEFECTUOSOS QUE DEBES

MEJORAR.

SI LA PUNTUACIÓN ES MAYOR DE 41, ENHORABUENA, TIENES BUENOS HÁBITOS DE

ESTUDIO, NO OBSTANTE TE SERÁ ÚTIL APRENDER NUEVAS TÉCNICAS.
FACTORES AMBIENTALES

Crear un ambiente adecuado de estudio es fundamental para potenciar la atención y la

concentración. Son varios los factores ambientales que tenemos que tener en cuenta para
obtener el máximo rendimiento en nuestro tiempo de trabajo:

Música
¿Qué es más adecuado, estudiar con o sin música? Depende. Si se trata de música vocal
corremos el riesgo de distraernos con mayor facilidad, porque nuestra atención se concentra en
la letra, si el tema es pegadizo peor.

Por el contrario, la música clásica se ha comprobado que predispone al estudio porque

contribuye a crear un clima de relajación que nos va a ayudar a concentrarnos.

Lugar de estudio
Lo recomendable es utilizar siempre el mismo lugar para estudiar, ya que, si nos habituamos
estudiar en el mismo sitio y a la misma hora conseguiremos asociar ese lugar con el tiempo
dedicado al estudio, y cada vez nos costará menos ponernos a trabajar. Si este lugar es tu
habitación personal procura que la parte en la que estudies no tenga demasiados distractores a
la vista, como posters, fotografías, el ordenador encendido… Si en tu habitación no logras
concentrarte porque existen condiciones adversas de ruido, iluminación…busca una biblioteca
que reúna estas condiciones, y utiliza siempre la misma, para que se produzca el efecto de
asociación del que hemos hablado anteriormente. Si eres constante, llegará un momento en el
que te sentirás invitado al estudio.

Temperatura
La temperatura adecuada oscila entre 18 y 20 grados. Una temperatura excesivamente fría
pone nervioso y dificulta la concentración, y una temperatura alta puede producir somnolencia,
sensación de agobio, y como consecuencia falta de atención.

Iluminación
Lo más aconsejable es utilizar luz natural, pero como siempre no podemos disponer de ella, lo
más recomendable es utilizar una luz local de unos 60 w como mínimo y otra ambiental. La luz
ha de estar distribuida de forma homogénea y han de evitarse tanto los resplandores como los
contrastes de luz y sombra. Un contraste de luz grande daña la vista.
Ventilación
El aire debe ser renovado periódicamente, cada 3-4 horas como máximo. Si fumas, deberás
ventilar la habitación con mucha más frecuencia. Si el lugar donde estudias no está bien
ventilado, el ambiente se irá cargando de anhídrido carbónico y poco a poco irá faltando el
oxígeno, lo que te puede producir dolor de cabeza, picor de ojos, mareos, nerviosismo,
fatiga…, al faltar oxígeno en sangre.

Mobiliario y postura
La mesa que utilicemos debe ser amplia para que quepa todo el material (evitarás
interrupciones si lo tienes todo a mano). La silla tendrá la altura suficiente para tener los pies en
el suelo, las rodillas dobladas y las piernas formando ángulo recto.

La postura ideal para el estudio es sentarse con la espalda recta, las piernas formando ángulo
recto, los antebrazos encima de la mesa y la cabeza y parte alta de la espalda inclinadas hacia
delante.

Hay que huir de las posturas demasiado cómodas, aumenta el riesgo de somnolencia y
ocasiona dolores de espalda. Si te gusta estudiar en la cama o tumbado en el sofá hazlo para
repasar, cuando ya hayas retenido los conocimientos utilizando las técnicas de estudio activas.
La distancia ideal a la que debes ponerte el libro o los apuntes es de 30 cms. Es recomendable
utilizar un atril, y si no se dispone de éste, una pila de libros.
DISTRACTORES
DISTRACTORES

TIPOS Y SOLUCIONES PARA COMBATIRLA.

La distracción consiste en un desplazamiento de la atención hacia otros estímulos diferentes a aquellos en

los que estés ocupado. Es el peor enemigo del estudio y es la causa del bajo rendimiento, a pesar de que
se dedique bastante tiempo a esta tarea, ya que lo que cuenta no es el número de horas, si no la intensidad
y concentración con la que estudiamos.

Según su procedencia, existen distractores de dos tipos:

Distractores externos: Ruidos, factores ambientales del entorno (temperatura, postura, iluminación…,
falta de horario, inercia a dejarse llevar (hay que vencer el momento de ponerse a estudiar), excesiva
dificultad o facilidad de la materia, monotonía en lo que estés estudiando, otros objetivos externos que te
atraen más…

Distractores internos: Problemas y conflictos personales o familiares todavía sin resolver, ansiedad
cualquiera que sea su causa, falta de interés por el tema, asuntos personales por resolver, acumulación de
tareas, fatiga física o psíquica, voluntad débil…

Es importante saber que cosas nos suelen distraer para tener de antemano remedíos para combatirlas (en
los casos en los que sea posible).
Desde “Orientados” te proponemos las siguientes recomendaciones para mantener al máximo la
concentración durante tu tiempo de estudio:

Diseñar actitudes para combatir la distracción.

Planificar horas de estudio y de descanso.

Evitar adoptar una postura excesivamente cómoda, pues se produce somnolencia y nos resultará más
difícil concentrarnos.

Estudiar en lugares en los que haya los menores distractores posibles (ver documento de factores
ambientales que influyen en nuestro rendimiento).

Usar la misma habitación y los mismos horarios de estudio siempre que sea posible, de esta forma se
producirá un condicionamiento y te costará menos ponerte a estudiar.

Procurar resolver previamente los problemas personales así como cualquier tarea pendiente en la medida
que sea posible.

La monotonía es un gran enemigo de la concentración. Intenta variar de actividad mientras estudias

(alterna la realización de esquemas con revisar apuntes…, por ejemplo.

Recompensar el haber logrado concentrarte otorgándote un premio durante los descansos (llamada a un
amigo, merienda…).

Intentar despertar el interés en los temas que haya que estudiar.

Al inicio de las sesiones resulta más difícil concentrarse, si se traspasan los primeros minutos, se logra el
grado de concentración deseado hasta que llegue la fatiga.

Respirar lenta y profundamente para conseguir relajarte antes de empezar el tiempo de estudio.

En la página siguiente te facilitamos una plantilla para que teniendo en cuenta las recomendaciones
anteriores, coloques las soluciones que creas oportunas para tus distractores más habituales.

Descargar Registro de soluciones para combatir mis distractores más frecuentes >>
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EL MÉTODO EL-SER3

Si se seguís este método, comprobaréis que a medida que pase el tiempo y os vayáis
adiestrando en su práctica, estudiar resultará más fácil y entretenido y conseguiréis buenos
resultados.

Este método consta de 7 pasos:

Exploración. Consiste en obtener una visión en conjunto del tema a estudiar, si es un libro ver el índice, el
prólogo….

Lectura 1: Prelectura. Realizaremos una rápida lectura del tema o capítulo a estudiar para obtener una
visión en conjunto de lo que allí se dice. En esta fase no hay que tomar apuntes ni subrayar, el objetivo es
captar las ideas principales y su relación jerárquica.

Lectura 2: Lectura comprensiva. En esta fase, la lectura será más profunda utilizando la técnica del
subrayado, consultando los términos desconocidos y diferenciando las ideas principales de las
secundarias.
Existen varias causas por las que nos puede costar entender lo que leemos:

1.La escasez de vocabulario por la influencia de las nuevas tecnologías. Utilizamos un lenguaje muy
abreviado para escribir mensajes con el móvil o en el Messenger, sin darnos cuenta de la repercusión que
esto tiene en nuestra expresión escrita.

2.La falta de concentración (perder el hilo en clase), de manera que sólo conseguimos recordar ideas
sueltas de lo que ha explicado el profesor/a en clase.

3.La lectura pasiva, que se da cuando no consultamos el significado de las palabras que no conocemos.
Subrayar:

Consiste en remarcar las ideas más importantes de un texto con el fin de destacarlas del resto,
favoreciendo así nuestra atención, facilitando su fijación en nuestra memoria y ahorrándonos tiempo de
repaso.

La técnica del subrayado hay que utilizarla al mismo tiempo que la lectura comprensiva, nunca durante la
prelectura. Debemos evitar subrayarlo todo, ni utilizar muchos colores. Lo adecuado es un color para las
ideas principales y otro para las secundarias.
Existen dos tipos de subrayado:

Subrayado lineal - Líneas debajo de las ideas (de 2 colores, dobles o sencillas…)

Subrayado con signos gráficos - (redondear, encuadrar, subrayado vertical, Tachado, asterisco,
corchetes…)
El subrayar nos aporta las siguientes ventajas:
· Transforma el acto de lectura de pasivo a activo.

· Incrementa la atención perceptiva ante las ideas subrayadas por el contraste que existe.

·Evita las distracciones al concentrar toda la atención en una tarea.

Facilita la comprensión del texto, al ordenar las ideas subrayando las frases y las palabras claves.

· Ayuda al repaso, al seleccionar lo más importante de la información aportada, así evitas leer todo el texto
de nuevo.

· Favorece la lectura crítica, al centrarla sobre los puntos de interés.

· Favorece la elaboración de esquemas y resúmenes, al tener remarcado todo lo que merece ser destacado.

· Ayuda a la memorización, al simplificar el tema y reducir lo que has de memorizar a lo más importante.
Esquematización:
El esquema es una síntesis que resume, de forma estructurada y lógica, el texto previamente subrayado y
establece lazos de dependencia entre las ideas principales, las secundarias, los detalles, los matices y las
puntualizaciones.
Para confeccionarlo recomendamos:
Utilizar un cuaderno de tamaño folio.
Dejar espacio en los 4 márgenes para anotaciones
Emplear una hoja para realizarlo, pues ha de tener unidad de visualización.
Que las frases que lo desarrollen sean cortas, significativas y que recojan palabras clave. La redacción
debe ser tipo telegrama.
Que todos los conceptos importantes queden incluidos en él.
Existen varios tipos de esquemas: De llave, numéricos, de letras…
El esquematizar nos aporta las siguientes ventajas:
Es una técnica activa que, al mantenernos ocupados incrementa nuestro interés y concentración.
Estructura de forma lógica las ideas del tema, por lo que facilita la comprensión.
Al ofrecer los datos a través de un medio óptico, pone en funcionamiento la memoria visual.
Ahorra tiempo en el repaso.
Resumen:
Resumir es condensar un texto de forma que no falte ninguna de las ideas importantes del mismo y se
mantenga la estructura argumentativa. Las ideas han de expresarse con brevedad, pero sin perder la
claridad expositiva, y han de relacionarse las anteriores con las posteriores y las principales con las
secundarias.
Para realizar un resumen, previamente has de leer, subrayar y realizar un esquema del tema a aprender.
Con el resumen rellenarás la estructura del esquema completándolo con otros detalles, aclaraciones,
precisiones y puntualizaciones, así que para realizarlo debes tener delante tanto el esquema como el texto
subrayado.
El resumir nos aporta las siguientes ventajas:
Es un formidable ejercicio que prepara para el examen, pues es una redacción que relaciona y desarrolla
ideas.
Desarrolla nuestra capacidad de expresión escrita.
Al ser una técnica activa que exige nuestra entrega, aumenta la capacidad de atención y concentración, y
como consecuencia, su asimilación y memorización.
Refuerza la capacidad de organizar lógicamente un material.
Recordar:
El recuerdo consiste en recitar lo aprendido para comprobar el grado de asimilación y reforzar las huellas
de la memoria. El tipo de recitado puede ser mental o en voz alta, y puedes ayudarte con la utilización de
esquemas que se elaboran cuando se recita. Cuando recitas, has de alejar de ti el libro y los apuntes, sólo
los consultarás para comprobar algún dato olvidado.
Debes emplear esta técnica:
Después de haber realizado el esquema de una pregunta y de haberla repasado, para comprobar tu grado
de memorización.
Cuando hayas terminado de estudiar el capítulo. Recuerda cuantas veces lo consideres necesario hasta
comprobar que te lo sabes.
Una vez que hayas comprendido el tema. Vuelve a recordar después de cada repaso; con ello estás
reforzando tu aprendizaje y dificultando el avance progresivo del olvido.
El recordar nos aporta las siguientes ventajas:
Te hace conocedor del grado de asimilación y de la necesidad de seguir o no estudiando hasta lograr la
deseada retención de los contenidos.
Es una técnica activa que nos concentra sobre la tarea que realizamos e incrementa el rendimiento de la
misma.
Contribuye a aclarar las ideas básicas, así como las dudas que todavía quedan por resolver.
Cada recuerdo refuerza las huellas del material recordado.
Repaso:
El principal medio para luchar contra el olvido es el repaso. Los repasos fortalecen el aprendizaje
realizado y hacen que los mecanismos del olvido funcionen más lentamente, ya que recuperan la fuente
de percepción que estimuló la memoria, contribuyen a pasar el material que se va a memorizar desde la
memoria a corto plazo hasta la memoria a largo plazo e incrementan la comprensión de los contenidos,
que es una de las claves de la memoria.
Si conocemos las principales causas del olvido nos será más fácil evitarlo, sabiendo las consecuencias
adversas que tiene para nuestro buen rendimiento. Aquí te exponemos las más habituales:
1.Poca comprensión de lo estudiado.
2.Falta de concentración.
3.Insuficiente repetición.
4.Ausencia de repasos.
5.Repasos tardíos y acumulados.
6.No aplicación o no utilización de lo aprendido.
7.Estudio superficial y pasivo, con poca reflexión y esfuerzo.
Observa la siguiente gráfica. Fíjate de qué forma actúa el olvido si no se utilizan los repasos:

Como se aprecia en la gráfica,

la velocidad del olvido decrece
con el tiempo.
Si queremos retener en la
memoria el 100% a lo largo del
tiempo, deberemos realizar un
PROGRAMA DE REPASOS
SUCESIVOS.
Te proponemos el siguiente plan:
· Primer repaso: A los 10 o 15 minutos después de estudiar un tema.
· Segundo repaso: Al día siguiente (24 horas aproximadamente).
· Tercer repaso: A la semana siguiente (entre 5 y 8 días).
· Cuarto repaso: Al mes siguiente (20 o 25 días después del 3º).
· El quinto, sexto…repaso puede espaciarse en la proporción del doble de tiempo que el anterior: 5º
repaso-a los dos meses del 4º; 6º repaso-a los cuatro meses del 5º (cuando estemos hablando de exámenes
finales).
· Expón recitando en voz alta hasta memorizarlo. Procura estar activo, pasea.
· Utiliza los esquemas y resúmenes para comprobar si te lo sabes durante los repasos.
· Después de cada repaso, vuelve a leer el texto subrayado para completar detalles.
· Más valen tres repasos espaciados que diez seguidos.
Es muy importante realizar un repaso dos o tres días antes de un examen o control.
PRÁCTICA DEL SUBRAYADO >>

DOCUMENTO 5.1: LAS NECESIDADES ENERGÉTICAS

Te proponemos el siguiente texto para que apliques la técnica del subrayado. Recuerda que antes de
hacerlo debes leer por lo menos un par de veces el texto con la finalidad de diferenciar los datos
principales de los secundarios. En la página siguiente encontrarás el texto con nuestra propuesta de
subrayado:
En el organismo, la energía se manifiesta en forma de calor, para mantener constante la temperatura
corporal central, pudiendo variar en la periferia; en forma dinámica, para el trabajo muscular, por lo
que una actividad física importante tiene un gran consumo energético; y además, existen otras muchas
variantes, como los impulsos eléctricos, para transmitir mensajes a través de las fibras nerviosas, la
síntesis proteica, el transporte activo de sustancias a través de la membrana celular, etc...
La unidad empleada para realizar el cálculo energético ha sido la kilocaloría o caloría. Las necesidades
energéticas del ser humano se pueden desglosar en dos apartados básicos:
1- Metabolismo basal. Este concepto expresa las necesidades mínimas y se aprecia en estado de ayunas,
de relajación corporal, de reposo de 8 horas, y de temperatura neutra. Depende de la edad, del sexo, del
índice de masa corporal, de la relación peso-talla, de la complexión, del porcentaje de grasa y músculo,
del clima, etc...
2- Actividad física. Depende de si se realiza un trabajo ligero, moderado o pesado y un ejercicio ligero,
moderado o intenso.
PROPUESTA DE SUBRAYADO:
En el organismo, la energía se manifiesta en forma de calor, para mantener constante la temperatura
corporal central, pudiendo variar en la periferia; en forma dinámica, para el trabajo muscular, por lo
que una actividad física importante tiene un gran consumo energético; y además, existen otras muchas
variantes, como los impulsos eléctricos, para transmitir mensajes a través de las fibras nerviosas, la
síntesis proteica, el transporte activo de sustancias a través de la membrana celular, etc...
La unidad empleada para realizar el cálculo energético ha sido la kilocaloría o caloría. Las necesidades
energéticas del ser humano se pueden desglosar en dos apartados básicos:
3- Metabolismo basal. Este concepto expresa las necesidades mínimas y se aprecia en estado de ayunas,
de relajación corporal, de reposo de 8 horas, y de temperatura neutra. Depende de la edad, del sexo, del
índice de mas corporal, de la relación peso-talla, de la complexión, del porcentaje de grasa y músculo,
del clima, etc...
4- Actividad física. Depende de si se realiza un trabajo ligero, moderado o pesado y un ejercicio ligero,
moderado o intenso, en definitiva, depende de la intensidad del trabajo realizado.

PRÁCTICA DE LA ESQUEMATIZACIÓN >>

Ya conoces todas las ventajas que puede aportarte incorporar los esquemas a tu método de estudio. De
forma general, esta sería la distribución a seguir en un esquema:

Te proponemos el
siguiente texto
para extraer las
ideas que
consideres
importante incluir
en el esquema:

La sangre
humana es un
líquido denso de color rojo. Está formada por el plasma sanguíneo, los glóbulos rojos, los glóbulos
blancos y las plaquetas.
El plasma sanguíneo es un líquido constituido por un 90% de agua y un 10% de otras sustancias, como
azúcares, proteínas, grasas, sales minerales…
Los glóbulos rojos o eritrocitos son células de color rojo que son capaces de captar gran cantidad de
oxígeno. En cada milímetro cúbico de sangre existen entre cuatro y cinco millones de eritrocitos. Esta
enorme abundancia hace que la sangre tenga un color rojo intenso.

Los glóbulos blancos o leucocitos son células sanguíneas mucho menos abundantes que los eritrocitos.
Hay un leucocito por cada 600 eritrocitos. Los glóbulos blancos tiene una función defensiva frene a las
infecciones.

Las plaquetas son fragmentos de células sin núcleo. Hay unas 250.000 plaquetas por milímetro cúbico de
sangre, y su función es la coagulación de la sangre.

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COMO TOMAR APUNTES
El tomar apuntes es una de las actividades que necesariamente debemos dominar en nuestra tarea de
estudiantes. Es importante aprender bien esta técnica, ya que influye directamente en el buen rendimiento
escolar, pero esta habilidad no es innata, si no que se desarrolla con su práctica.

Desde “Orientados” queremos darte a conocer los motivos por los que es recomendable que perfecciones
esta técnica, así como algunas recomendaciones a tener en cuenta a la hora de efectuarlos.

· ¿Por qué tomar apuntes?

· Ayudan a identificar lo más importante de una clase.

· Posees un registro que te facilita los repasos de lo que allí se ha dicho.

· Pueden darse datos difíciles de encontrar.

· El profesor puede señalar lo más importante y lo menos importante.

· Aclara muchas dudas o temas de difícil comprensión.

· Nos mantiene atentos, oyendo y comprendiendo.

· Es un medio eficaz de aprendizaje, pues incluye los sentidos de la visión, musculares y cinestésicos, así
como el oído.

· Al tomar apuntes logramos mantener alta la curva del olvido.

¿Cómo tomar apuntes?
Es muy importante que mientras el profesor esté explicando lo mires de vez en cuando, te concentres en
lo que dice, busques las ideas principales y estés atento a las señales de alerta que el profesor indica
mediante alguna de las siguientes frases: “Lo más importante es…”; “En conclusión tendremos…”; “De
donde se deduce que…”; “En primer lugar…”…etc.

· Contrasta lo que dice con lo que ya sabes.

· Una vez localizadas las ideas principales, anótalas.

· Si has aprendido a subrayar, hacer esquemas y resúmenes, podrás tomar apuntes con eficacia.

· Tomar apuntes es un proceso de Escuchar_Comprender_Anotar. Escuchar con atención al profesor,

comprender lo que dice, y sólo entonces anotar las ideas principales, describiéndolas con las propias
palabras.

· Utiliza un block de anillas de tamaño folio, con divisiones para las distintas asignaturas, para no perder
las hojas y para poder intercalar hojas adicionales con información complementaria.

· Al principio de cada clase escribe la fecha, el nombre de la asignatura y el título del tema con letras
mayúsculas.
· Deja siempre un margen en la parte derecha o izquierda de la página, para las aclaraciones posteriores.

· Sé limpio y ordenado desde el principio. Escribe legiblemente.

· Numera las hojas que utilices para una misma clase.

· Utiliza apartados y subapartados.

· Copia los ejemplos que pone el profesor.

· Presta especial atención a los esquemas y aclaraciones que haga el profesor en la pizarra.

· Siempre que puedes compara las notas más importantes de los apuntes con las de tus compañeros al
terminar la clase.

· Completa en casa los apuntes consultando tus libros de texto y de consulta. Releer los apuntes el mismo
día o al día siguiente para tratar de comprenderlos y familiarizarse con ellos. Si los apuntes están bien
tomados no será necesario pasarlos a limpio. Esto exige mucho tiempo, el cual se podría dedicar a
avanzar en el estudio.

· Utiliza las abreviaturas o símbolos. Aquí te proponemos los siguientes:

P.ej- Por ejemplo.

Imp.- Importante.
= Igual.
=/ Distinto, diferente
Q Que.
Xq. Porque.
+ Más.
- Menos.
H Hombre.
Cm Como.
> Mayor que.
< Menor que.
X Por.
Principal_, Mayor_ Principalmente, mayormente (Cualquier palabra que termine en mente).
En resumen, los apuntes deben contener:
· Las ideas más importantes.

· Los puntos y aspectos fundamentales.

· Los datos, las fechas, nombres, gráficos…que los complementan.

· Los enunciados de los temas, la fecha y la materia.

· Trata de seguir los consejos anteriores con esfuerzo y constancia.

· Comprobarás que en unos días habrás ganado mucho en rapidez y precisión.
Recomendamos intentar evitar las siguientes actitudes:

1.- Copiar de forma literal todo lo que dice el profesor. La rapidez que esto exige se traduce normalmente
en una letra ilegible, pérdida del hilo conductor y que se recojan ideas incompletas, pérdidas de datos, etc.

2.- No repasar los apuntes después de clase o esa misma tarde para ver si se entienden y están completos,
corrigiendo las posibles deficiencias.

3.- Prescindir de tomar apuntes propios (a veces faltando a clase) y limitarse a fotocopiarlos de algún
compañero.

LA MEMORIA
La memoria es la capacidad de fijar, conservar y reproducir imágenes de objetos, sentimientos y
pensamientos en ausencia de la percepción de la que proceden.
Es una función en la intervienen un conjunto de procesos mentales interrelacionados, tales como la
percepción, la atención, la imaginación y el pensamiento.
Cuando nacemos, nuestra mente es como una hoja en blanco donde la experiencia va escribiendo nuestras
vivencias y la memoria las conserva. Sin memoria no seriamos capaces de hacer distinciones, de aprender
a adaptarnos a las exigencias del mundo exterior y de pensar, pues para relacionar conceptos previamente
hay que tenerlos grabados. Todo esto cobra especial relevancia cuando se aplica al tema del estudio, ya
que cuanto más conozcamos y potenciemos nuestra memoria, mayor rendimiento académico
obtendremos.

Dentro de la memoria, podemos distinguir la memoria olfativa, gustativa, táctil, auditiva y visual, siendo
estas dos últimas las dos que más debemos potenciar a la hora de estudiar. Si hablamos del grado de
profundidad de los recuerdos, podemos hablar de memoria de ahorro (cuando ya creemos olvidada una
materia y la volvemos a estudiar vemos que se produce un ahorro del tiempo que dedicamos a
memorizar), memoria de reconocimiento (cuando transcurre un periodo de tiempo más extenso, y
reconocemos ciertos conceptos que creíamos olvidados), y memoria de recuerdo (capacidad de recordar
con mayor o menor precisión los datos que previamente han sido grabados. Es la memoria propiamente
dicha). Si tenemos en cuenta la duración hablaremos de memoria a corto plazo, en la que el tiempo de
retención de los datos dura un máximo de dos minutos, y memoria a largo plazo, cuya huella es
estructural, no de actividad como en la memoria a corto plazo, su capacidad es prácticamente ilimitada y
su duración indefinida. Algunos recuerdos permanecen en la memoria a lo largo de toda la vida. El tiempo
que tardan los recuerdos en pasar a la memoria a largo plazo y consolidarse en ella oscila entre quince
minutos y una hora. Esto se consigue a través de la repetición de este contenido, automáticamente por el
interés que suscite en nosotros ese mensaje, y elaborando lógicamente y de modo significativo el material
que se ha de retener.
Desde “Orientados” queremos darte una serie de recomendaciones que te ayudarán a potenciar al máximo
esta capacidad:
Para el estudio y repasos procura no estar cansado, si no te encuentras en condiciones de estudiar, es
preferible que descanses antes de empezar la tarea.
• Relaciona lo que aprendas con lo ya aprendido.
• Organízate de forma personal y activa todo lo que desees memorizar.

• Memoriza primero el esquema o resumen general, luego los detalles.

• Subdivide la materia si es muy extensa. Pequeños bloques con sentido

propio se memorizan mejor. Luego memoriza el conjunto.

• Pon más atención en la parte media (principio y fin siempre se recuerdan mejor)

• El interés, la atención, la concentración, son factores que facilitan la memorización.

• Es necesario el sobreestudio, buscando al máximo las relaciones del tema desde distintos puntos de
vista.

• Establece un sistema de repasos periódico.

• Que participen en el estudio y los repasos el máximo de sentidos (hablar, oír, escribir…).

• Utiliza las reglas mnemotécnicas (documento 7.1), habiendo comprendido previamente el material a
memorizar.