Autor: Jhonatan Esteban Ramos Rodriguez Estudiante de física
Facultad de Artes y Humanidades
Departamento de Artes Universidad de Pamplona 157001: Acústica Musical Tutor: Jorge Hernando Ibarra Becerra 01 de abril de 2021 2
Carnavales de Riosucio Y Negro y Blanco
Los Carnavales son celebraciones culturales de origen no religioso, con fines generalmente festivos, sin embargo en Colombia además de tener estos fines están dedicados resaltar y recordar algún suceso histórico, se mantiene ciertas costumbres y tradiciones a lo largo del tiempo. América Latina es una región continental que se destaca por tener un proceso de alienación cultural través de procesos como la colonización y la globalización. Este último es un tema al que se no le presta mucha atención, ya que sabemos que permite que se dé a conocer la gran diversidad cultural de nuestra región, pero al mismo tiempo genera escenarios que permiten que se pierdan las costumbres autóctonas. En nuestro país este tipo de festividades tiene un trasfondo mucho más profundo que oculta el sufrimiento por el que han tenido las comunidades nativas, aborígenes, entre otros grupos vulnerables, sin embargo esto desencadeno el proceso de mestizaje llegando a un punto en el que no existen entremos raciales totalmente definidos en una determinado territorio, aun así muchas costumbres tienden a convertirse en una parte fundamental de la cultura de un determinado territorio. Desencajado de tradiciones nativas andinas e hispánicas, el Carnaval de Negros y Blancos es un importante periodo de festividades que tienen lugar todos años en San Juan de Pasto departamento de Nariño, desde el 28 de diciembre hasta el 6 de enero, al sudoeste de Colombia, para celebrar la expulsión de las poblaciones invasoras, recordar la importancia de sus tradiciones, que puede comprar con la Independencia de la colonización pero desde un contexto más cultural, en general son las festividades de fin de año típicamente colombianas, pero agregando ese toque carnavaleño en el que el protagonista es “el juego”, un momento que simboliza el desarraigo hacia la opresión, que muchas veces llega a ser anarquía. Esto nos muestra lo importante que es tener en cuenta nuestra historia en el camino a la construcción de un nuevo país. Por su parte el carnaval del Diablo se trata de un carnaval que conmemora el retorno de la paz a Riosucio, en Caldas. Cada año extraño, traerán faldas cortas, bailes, grupos, disfraces y chicha para celebrar durante seis días consecutivos. Su mítico demonio o diablo es su centro que simboliza la satisfacción de la felicidad. Los dos pueblos "Quebralomo y la Montaña", establecidos entre los siglos XVI y XVII, se declararon enemigos muertos cuando disputaron los territorios que se extendían al pie del Cerro Ingrumah. Dos sacerdotes históricos, Párrocos, lograron unirlos y cofundaron Riosucio en 1819. Por lo tanto, el diseño urbano exclusivo basado en las dos plazas principales está a solo una cuadra de distancia. Se cree que en enero de 1847, los indígenas de la serranía participaron en la ceremonia de culto de los indígenas de la tierra en la fiesta de los Reyes Magos de Qiebralomo; en este caso, bailes y cantos de origen africano mezclados con lo sagrado, teatro de España y coreografías de ascendencia europea, aparecieron las "diversiones Matachinescas" y se promulgaron leyes festivas que ordenaban la reconciliación de viejos opositores. En mi entorno cultural no se observa una única determinada etnia o todas las personas no comparten el mismo origen, pues vienen de diferentes regiones del país lo cual hace a mi municipio, el municipio de Fortul en el Departamento de Arauca diverso y difuso, y muchas veces se tiene una cultura alienada (no propia) recientemente.