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Sindrome Del Campo de Concentración Zdzislaw
Sindrome Del Campo de Concentración Zdzislaw
Introducción
nac~on.
El 6 de noviembre de 1939, en el principio de la invasión alemana, dentro de
una acción conocido como “Sonderaktion Krakau”, 183 profesores de la
Universidad Jaguelonica de Cracovia nuestra Alma Mater cayeron en un ardid
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Europa.
Pero los sagrados lugares de la persecución política y martirio estan tambien
en los lejanos “gulag” sovieticos de Siberia. Durante dos siglos, y especialmente
durante y despues de la Segunda Guerra Mundial, se mandaron alla a miles de
polacos y militantes de la libertad. Mayoria de ellos se quedaron para siempre
en las estepas y las minas siberianas, enterredos en las tumbas anónimas. Los
sobrevivientes hasta dia de hoy regresan a Polonia, dañados mentalmente por
los sofisticados metodos de persecución y torturas.
Entre las victimas de este periodo tenemos mas de veinte mil viudas y
huerfanos de los oficiales polacos, asesinados por el mandato de Stalin en el
bosque de Katyñ y otros lugares.
No se puede olvidar sobre miles de victimas de persecución politica despues
de la guerra mundial, torturados por la policía política del regimen comunista en
Polonia.
La historia mas dramatica experimentaron algunos sobrevivientes de los
campos hitlerianos quienes despues de la guerra mundial como enemigos del
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El ritmo de la muerte
Las huellas
Los campos de concentracion nazi son en la historia latente del siglo veinte y
tienen su rica literatura, tarnbien medica, pero sus consecuencias duran hasta el
día de hoy en los sufrimientos, en las tristezas y pesadillas de los ex prisioneros
y todo esto esta conocido en la bibliografia mundial como asthenia progresiva
gravis (Targowla, 1955) o “Konzentrationslagersyndrom KZ-syndrom”, es
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social, depresión, vejez prematura, hasta llegar a una fase organica. Tres son los
rasgos distintivos de esta enfermedad: el cuadro polifacetieo, el curso crónico y
el caracter progresivo.
Los datos presentados muestran claramente que las secuelas de los traumas
masivos no terminan en las victimas directas, sino que el daño de caracter
medico, psicológico y social se extiende hasta hoy tanto en los hijos como en
las familias de los ex prisioneros.
dramatica.
Algunas viudas describieron sus representaciones y fenómenos cercanos a la
percepción corpórea. Ellas experimentaban en estas situaciones la presencia
tisica del esposo, sintiendolo muy cerca, en la habitación, con la sensación de
poder hablarle, oir su voz, responder a sus preguntas. Estas vivencias recuerdan
las llamadas alucinaciones de la viudez (hallucinations of widowhood)., que se
experimentan en forma de contacto espiritual con el difunto. Estos fenómenos
son frecuentes y segun los datos bibliograficos, se presentan en el 5Q0 o de las
viudas.
Algunas mujeres, hasta día de hoy, despues de mas de 50 años, creen que sus
maridos viven pero que, por distintos motivos, no pueden presentarse, escribir o
regresar.
,,Yo vivo con la esperanza dijo una viuda que mi esposo regresara, yo rezo
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horas y horas, creo que esto no es verdad, creo que mi marido vive y que
regresara, que en un momento tocaya a la puerta. Estas imaginaciones me
acompañan en la oración, en el trabajo; y así pasan los anos
Vale la pena mencionar que algunas viudas justo despues de la muerte de su
esposo se entraron sobre su actividad de conspiración. De esta manera las
viudas de los prisioneros escribieron las paginas mas bellas del heroísmo
femenino polaco. En esta atmosfera el esposo solía convertirse en un heroe
místico. En este mismo espíritu, por supuesto, se formaron las actitudes de la
mayoría de los jovenes y niños que egresaron de las filas de la conspiración y la
guerilla, caminando por los mismos senderos de sus padres, amados y
glorificados.
El tratamiento
Conclusiones
experimentemos la “tristeza del cuento de hadas realizado”; que llevemos mayor actualidad al frente de los hechos
históricos ya que de ellos no solamente recibimos el castigo sino que nosotros mismos somos sus creadores.
“Al ser humano, entonces escribe Kepinski le es dificil vivir en el agnosticismo total y en el caos, por eso el puede
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facilmente someterse a la ‘iluminación’ de un mito, a veces sin sentido e inclusive criminal. La posibilidad de creer en ‘los
falsos profetas’ es quiza el mayor peligro de la cultura contemporanea” (Kepinski, 1974).
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