Ética, Marcelo Liebmiger

1.
En el existencialismo, el concepto de condición humana reemplaza al concepto de
naturaleza humana: por lo tanto, los seres humanos no tienden a ser x o forma
debido a la "naturaleza" (naturaleza humana), sino que obviamente se colocan en
ciertos límites (condiciones humanas) dentro. Esta distinción es crucial, porque el
concepto de condición humana y la responsabilidad de uno por sus proyectos, y por
tanto el rechazo del concepto de naturaleza, son la columna vertebral del
pensamiento existencial. 
2.
La condición humana se define aquí como un conjunto de restricciones a priori, y los
seres humanos están conectados con estas restricciones y "perfilan su situación
básica en el universo". El hombre, el hombre, es libre y debe tomar una decisión que
lo oriente a encontrar su propia esencia, se creará a sí mismo, pero siempre está
limitado por ciertas condiciones, a saber, restricciones, como nuestra existencia. No
podemos hacer lo imposible.

3.
¿Elegimos nuestros pensamientos? Esta es una de las ideas más importantes aquí.
¿Elegimos lo que pensaremos a continuación?

Uno puede pensar: "Bueno, por supuesto que sí". Pero mira de cerca, ¿de verdad? Si
observa el ascenso y la caída de los pensamientos, se dará cuenta de que en realidad
nunca los elige, simplemente están apareciendo en la conciencia momento a
momento. Incluso si tiene un pensamiento en el pasado, para luego tener un
pensamiento en el futuro sobre algo, digamos un automóvil, el pensamiento inicial,
ese primer pensamiento nunca fue elegido. Para que pueda elegir sus pensamientos,
tendrá que pensar continuamente antes de pensar. Todos podemos observar que eso
no es lo que estamos haciendo. E incluso si lo fuera, el primer pensamiento de la
secuencia no habría sido elegido. Eso significa que, en el fondo, no eliges tus
pensamientos. Todo se reduce a que (análogamente) nuestros cuerpos producen
pensamientos como si produjeran glóbulos blancos o mitosis / meiosis; simplemente
no tienes nada que decir. Tu cuerpo simplemente lo hace. Esa analogía se queda
corta en el hecho de que los pensamientos se ven más afectados por los estímulos
ambientales, pero lo que quiero decir es que el cuerpo los está produciendo y no
tenemos ningún control sobre él. Solo la ilusión de control.

Luego están las emociones, motivaciones, impulsos e impulsos; los impulsores de la

acción. De repente siente la necesidad de ir a buscar algo de comida. ¿Elegiste ese
impulso? Miremos. Entonces el impulso aparece en la conciencia. ¿Tuviste
pensamientos antes de decidir que tendrías ese impulso? Usualmente no. Y si lo hizo,
como dije antes, sus pensamientos no son controlados por usted. Y así, incluso si
hubiera decidido tener el impulso de comer, en el fondo nunca eligió el impulso
porque nunca eligió los pensamientos que conducen al impulso. Tal vez decidas
"Compraré un jamón, en lugar de pavo". ¿No es eso libre albedrío? ¡Elegí! ¿Pero lo
hiciste? ¿Alguna vez eligió la combinación de pensamientos, sensaciones y
experiencias pasadas que lo llevaron a preferir el jamón al pavo? No, esa decisión se
tomó incluso antes de que se encontrara con la necesidad de tomar la decisión.
Incluso si luego decides: "¿Sabes qué? No voy a comer. Resistiré mi impulso. O mejor
aún, comeré pavo y lo cambiaré". ¿Elegiste sentir la inclinación a resistir o cambiar las
cosas?

En la fundación, nunca elegimos nada. Esto se aplica incluso a nuestros objetivos más
importantes que perseguimos, hasta el más mínimo detalle.

Todo simplemente está sucediendo. Nuestros cuerpos simplemente se están yendo.

Son como aviones en piloto automático, y como estamos sentados en la cabina con
las manos en el volante de control, tenemos la ilusión de que somos nosotros los que
volamos la maldita cosa. Pero en verdad, va a donde va, y tú no tienes parte en eso.