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CLASE 9

La 2° posguerra se caracterizó por el enfrentamiento entre EEUU y la URSS, capitalismo y el


socialismo. La alianza que habían forjado a partir del 41 estuvo determinada por las circunstancias
bélicas y por el comportamiento de Hitler, y si bien existieron intenciones y proyectos de mantener
su vigencia una vez vencido el enemigo común, las diferencias terminaron ganando y a partir de la
conferencia de Postdam la situación de enfrentamiento fue el único camino posible. Existen
corrientes que plantean que el comienzo de la Guerra Fría se produjo en 1917, año en que comenzó
el enfrentamiento entre los dos sistemas antagónicos, la fecha de 1947 es la tiene mayor consenso. Si
partimos de la idea de que la Guerra Fría se extendió hasta 1989, año del hundimiento de los países
del “socialismo real”, generaciones enteras crecieron bajo la amenaza de un conflicto global que, a
partir del desarrollo de la energía nuclear, podía arrasar a la humanidad. Se pueden destacar cuatro
grandes rasgos de la vida internacional durante el período de la Guerra Fría:
1) La estructuración de un sistema bipolar rígido, que alineaba a dos bloques de países en torno
a las dos potencias imperiales. Tanto EEUU como la URSS aceptaron el equilibrio de poderes
establecido al final de la 2°GM; Entre el triunfo de la revolución en China (1949) y la década del 1970,
no se produjo una expansión significativa del campo socialista.
2) La tensión permanente entre los dos polos, motivada por la búsqueda del equilibrio
estratégico en un mundo perturbado por la 2°GM, que condujo a una carrera armamentista que tuvo
su mayor peligrosidad en el terreno nuclear.
3) Una política de riesgos calculados destinada a la contención de los avances del adversario y luego
a disuadirle de cualquier acto hostil, pero evitando provocar un conflicto de carácter mundial
4) El papel asignado a las Naciones Unidas como foro de discusión entre los bloques, último recurso
ante las crisis y escenario de propaganda de los contendientes.
Esta organización, junto con otras creadas en esos años, permitieron llevar adelante una política
internacional basada en la hegemonía de los EEUU, quien construyó su fortaleza nacional e
internacional a partir de su reconstrucción y consolidación económica, y de su política internacional
enmarcada en el contexto de la "Guerra Fría". El único momento en el que hubo un peligro de
enfrentamiento generalizado fue entre 1947 y 1951, la guerra de Corea. Tras un período marcado por
la “distensión”, iniciado después de la crisis cubana, en el que se dieron pasos significativos en
cuestiones como el control y la limitación del armamento nuclear, hacia mediados de la década de
1970 la situación se deterioró. Algunos especialistas hablan de una “segunda” Guerra Fría, como
consecuencia del impacto negativo de la guerra de Vietnam en su prestigio internacional, y del
surgimiento de una nueva ola de revoluciones en distintas zonas del planeta. El resultado fue una
aceleración de la carrera armamentista, y una combinación de guerras localizadas en las que EEUU no
cometió el error de Vietnam, limitándose a actuar de manera indirecta.
El fin de la Guerra Fría estuvo vinculado a los problemas internos experimentados por la URSS, que
terminó tomando la iniciativa de acabar con la guerra armamentista.
En el continente latinoamericano: A fines de la 2°GM se hizo evidente en Latinoamérica que el
proceso de industrialización iniciado tenía sus límites y que la actualización tecnológica era el único
camino para asegurar el futuro del modelo. Esa actualización requería de capitales extranjeros. Pero
además de una renovación de la tecnología, la modernización económica hacía necesario otras
inversiones en infraestructura tales como caminos, fuentes de energía, viviendas. Este giro en la
economía no pudo ser aplicado ya que las divisas generadas por la exportación de alimentos para los
países devastados por la guerra disminuyeron rápidamente. La recuperación industrial de Europa
llevó a un aumento considerable de las importaciones latinoamericanas que no siempre se
vinculaban a la necesidad de equipar a la industria languideciente. Estos dos factores, disminución
de las exportaciones y aumento de las importaciones produjo el desequilibrio creciente de la
balanza comercial. Hacia la década del 50 el modelo económico que nos rigió hasta el momento
mostró signos de agotamiento. Como respuesta a esta situación y en el marco de la OEA se creó, en
1947, la Comisión Económica de América Latina (CEPAL), que buscaba explicar las causas del
crecimiento desigual y del funcionamiento económico de la periferia latinoamericana. Para los
economistas de la CEPAL la causa del atraso económico de Latinoamérica se vinculaba con el lugar
subordinado que ocupaba en el mercado mundial. La forma de modificar esta situación era
incrementar el desarrollo industrial; la modernización económica debía ser planificada por el Estado
que se convertía así en actor principal del cambio. La solución de los economistas de la CEPAL se
encontraba en una industrialización más intensa que abarcara un sector más amplio. Esta
industrialización debía crecer en volumen y complejidad para alcanzar la madurez de los países
centrales; la propuesta se conoció con el nombre de "desarrollismo" que se caracterizó por:
-la plena apertura de las economías latinoamericanas a las inversiones extranjeras.
-Se comenzó con industrias básicas como la siderurgia en México, Brasil y Arg pero su crecimiento no
fue muy significativo.
El núcleo de esta política económica se centró en la expansión del sector industrial que produce
bienes de consumo duraderos, particularmente automotores, mediante la instalación de ramas
locales de empresas norteamericanas y europeas. La instalación de estas filiales creaba el problema
de la fuga de divisas en la figura de retorno de ganancias a los países centrales. También se
experimentaron avances en la producción de bienes de capital como tractores y material ferroviario
pero el mayor énfasis se centró en satisfacer las demandas de un mercado interno cada vez más
consumista. Por el lado de la demanda de mano de obra, requirió del sector obrero más calificado,
cuyos sueldos fueron altos. Por el lado de la oferta, los bienes producidos se orientaron hacia los
sectores de mayor nivel adquisitivo dentro de la sociedad. El fracaso del desarrollismo dio paso a la
teoría de la dependencia que encontraba la explicación del subdesarrollo latinoamericano en su
posición de dependencia en la economía mundial y proponían modificaciones.
En la Argentina: Luego del 56 se plantearon tres posiciones con respecto al camino a seguir en
política económica: el populismo reformista, el liberalismo y el desarrollismo. El populismo
reformista planteaba seguir con el modelo económico peronista basado en promover los intereses
de los sectores obreros y la burguesía urbana. Pero planteaba la modificación de dos aspectos que
había hecho fracasar el modelo: el desaliento a la producción agropecuaria y el escaso énfasis en
desarrollar una industria pesada. P ello proponía recurrir a capitales extranjeros de manera limitada
y centrada en sectores como la energía, comunicaciones y bienes de capital. Esta postura fue
mantenida por la UCR.
LIBERALISMO. Los grupos que apoyaban al liberalismo económico criticaron la conciliación de clases
del peronismo y la política industrialista y planteaban una vuelta a la apertura económica a través de
la reducción de aranceles aduaneros y de la intervención estatal en la economía. El mercado como
pieza central del modelo económico. En 1958 Triunfó la fórmula de la UCRI compuesta por Frondizi -
Gómez. Frondizi asumió la presidencia y se alejó del populismo reformista acercándose al modelo
desarrollista. Esta posición atacaba la conciliación de clases q había sido el eje de la economía
peronista. DESARROLLISMO. El estancamiento económico derivaba del retraso en el proceso
industrializador que debía solucionarse mediante la aplicación de varias medidas: reducción de los
salarios de los trabajadores para permitir mayores ganancias a los empresarios y con ello, elevar el
nivel de inversión; incentivando la llegada de capital extranjero. No cuestionaba los aspectos
centrales del proceso de sustitución y proponía una aceleración y ampliación cualitativa del proceso.
Creía fundamental emprender obras de infraestructura que a largo plazo darían sus frutos:
industrialización, autoabastecimiento de petróleo y energía. Para incrementar la producción de
petróleo se anunció una nueva política petrolera, tendiente a firmar convenios con empresas
extranjeras para la extracción, con la dirección y control de Y.P.F. Esta política produjo serias críticas
en el ámbito político porque implicaba la firma de los contratos sin licitación previa. La oposición
cuestionaba al presidente por su cambio de opinión con respecto a las ideas anti-imperialistas.
La situación económica requería medidas urgentes y Frondizi confió el Ministerio de Economía a
Rogelio Frigerio debiendo reemplazarlo más tarde por Alsogaray ante la presión de las FFAA. El
conjunto de estas medidas llevaron a que al término de presidencia de Frondizi, la producción de
petróleo y gas natural hubiera aumentado un 150%. El país pasó de ser importador a exportador de
petróleo. La producción industrial aumentó un 10% en la industria automotriz, produciendo
automóviles, camiones y tractores. En 1961 se inauguró el Alto Horno de San Nicolás, para la
producción de acero, sobre el Paraná y se extendió a Bs As el gasoducto Campo Durán - San Lorenzo.
Este programa económico tuvo sus costos en materia social, aumento del costo de vida y la inflación,
medidas tendientes a restringir los gastos de administración del Estado y se puso freno al incremento
salarial congelando los sueldos lo que, significó un deterioro económico de los sectores obreros.
Ante la intensificación de las manifestaciones obreras en contra y las presiones ejercidas por las FFAA
para reprimirla se decretó el "Plan CONINTES", en 1960 que autorizaba a los militares a actuar ante
las protestas obreras. La situación hizo crisis en marzo de 1962, culminando con la destitución del
presidente, que fue depuesto por las Fuerzas Armadas. Los años de gobierno de Frondizi estuvieron
marcados por los problemas políticos y económicos heredados de los tiempos de la Revolución
Libertadora y el rol de tutela de la sociedad que asumieron las fuerzas militares. Pero la agudización
de los enfrentamientos respondía a: los conflictos de orden interno irresueltos, el clima de la guerra
fría y el impacto que la revolución cubana tuvo en Latinoamérica. En este marco se produce una
importante transformación en la educación superior universitaria: crecimiento de la matrícula,
creación de nuevas instituciones dedicadas a la promoción de la investigación y difusión de la misma;
con una importante participación de las mujeres en las casas de altos estudios
PABLO BUCHBINDER CAP. 8 LA RENOVACIÓN UNIVERSITARIA. LA DESPERONIZACIÓN DE LA
UNIVERSIDAD. Pocos días después del golpe de septiembre del 55, las universidades fueron
ocupadas por agrupaciones estudiantiles opuestas al peronismo, impidiendo a las autoridades
nombradas por el gobierno derrocado acceder a las Univ. Luego se designaron nuevas autoridades. El
gobierno de la Revolución libertadora otorgó un rol central como interlocutor a la dirigencia
estudiantil reformista y predominantemente de izquierda. El gobierno revolucionario otorgó
facultades a los interventores para que pudiesen comenzar la reorganización de las casas de estudios.
Utilizando dichas atribuciones, procedieron a desperonizar las instituciones académicas teniendo
lugar cesantías masivas de profesores, auxiliares docentes y personal administrativo comprometidos
con el “régimen depuesto” y reintegraron a las cátedras a los docentes que renunciaron entre el 43 y
el 46. La “honradez” y la “moralidad” eran indispensable para acceder a la cátedra.
El peronismo había avanzado en un proceso de fuerte centralización del sistema universitario. Las
leyes y las normativas impuestas a partir del 47 procuraron uniformar la vida universitaria como los
mecanismos de ingreso, la forma de designación de los profesores y los procedimientos de gobierno
y administración interna. Más allá de los intentos de desperonizar las instituciones académicas, el
gobierno de facto procuró ir en la dirección opuesta, fortaleciendo la autonomía universitaria,
dándole a las autoridades la potestad para administrar su patrimonio, darse su estructura y planes de
estudios. También les dio libertad para organizar sus formas de gobierno y dictar sus estatutos, la
única limitación estaba vinculada con aquellos relacionados con el gobierno peronista y a los afiliados
al Partido Comunista.
LAICA O LIBRE. La Revolución libertadora se encontró con un sistema universitaria en expansión.
Sólo dos nuevas universidades surgieron, sobre la base de otras existentes. Una la UNS a partir del
Instituto tecnológico del Sur en Ba Bca y la UNdel Nordeste sobre la base de las Univ Nac del Litoral y
Tucumán, existentes en Chaco y Ctes. La Revolución libertadora abrió la puerta a la creación de las
Universidades privadas, despertando un gran debate quienes los más destacados fueron Moreau de
Justo y Ghioldi quienes defendían la tradición de la enseñanza laica, pero terminaron aceptando los
criterios sugeridos por las autoridades. El hecho de que las Universidades privadas utilizaran fondos
públicos y que emitiesen títulos habilitantes sin supervisión estatal fueron los puntos centrales del
debate, triunfando los sectores de la Iglesia católica. En 1910 se creó la Univ católica en Bs.As. que
cerró sus puertas en 1920 ante la negativa del Estado Nac de otorgar reconocimiento legal a los
títulos otorgados a su egresados. La posibilidad de conformar un sistema privado de enseñanza
superior chocaron con valores arraigados en la tradición educativa basada en la educación laica. Se
acusaba al gobierno de:
- Fomentar la división de la sociedad sobre parámetros culturales.
- La implantación de universidades privadas atentaba contra la tradición laica, la impronta
gratuita e igualitaria del sistema educativo.
En 1958 Frondizi decide avanzar con el proyecto para dividir a la oposición. El Proyecto del gobierno
fue rechazado en la Cámara de Diputados, pero el Senado aceptó un dictamen en minoría. Se dejaba
en manos del Estado la habilitación para el ejercicio profesional y excluía la posibilidad de que se
subsidiara la enseñanza privada. En 1959 la ley fue reglamentada. Las primeras universidades
autorizadas fueron la de origen confesional: Univ. Católica de Córdoba y la de Santa Fe y en los
primeros años de la década del 60 aumentó el número de universidades privadas, creándose la de
Morón, el Instituto Tecnológico de Bs.As., la Univ. De la Empresa, y la de Belgrano entre otras. Una
disposición de mediados de los 70 las liberó de supervisión estatal en la emisión de los títulos
profesionales. Querían disputar al Estado la formación de profesionales aprovechando que un sector
no quería ir a la Universidad estatal por ser pública, masiva y estar politizada. También es cierto que
muchos docentes expulsados por el gobierno dl 55 continuaron sus carreras en la Universidades
privadas.
La RENOVACIÓN Y MODERNIZACIÓN DEL SISTEMA UNIVERSITARIO. 1955- 1966 este período se
caracterizó por la impronta que académicos renovadores le otorgaron a la vida universitaria. En la
UBA se recuerda a esa etapa como la edad de oro, ya que se produjo una importante transformación
de las estructuras curriculares y por el prestigio de docentes e investigadores, pero la
transformación estuvo limitada a algunas facultades y en algunos casos sólo a algunas áreas. El
proyecto renovador debía resolver el tema del aumento del número de estudiantes que optaban por
carreras como Derecho y Medicina y además debía renovar las estructuras curriculares, los planes de
estudios y los métodos de enseñanza que provenían de la década del 10 y principios del 20. En 1955
la enseñanza universitaria de la historia seguía conservando la estructura impuesta por los
historiadores de la llamada Nueva escuela histórica. La sociología científica tenía un lugar marginal.
Se insitía en la necesidad de asegurar el pluralismo ideológico y político en la vida académica.
Mientras Frondizi ocupó la presidencia el proyecto universitario, coincidió con aspectos de la política
del gobierno que reconocía en el desarrollo de la ciencia un instrumento para asegurar el progreso y
la independencia económica. La investigación ocupó un lugar central y hubo aumento de recursos
para el desarrollo tecnológico y científico. En 1958 nace el CONICET y la Univ fue percibida como
ámbito privilegiado p la creación científica e intelectual.El análisis de la evolución histórica de la UBA
permite observar que las bases del proyecto modernizador se sentaron antes de la normalización que
concluyó en diciembre de 1957. Uno de los pilares de la renovación fue la transformación del cuerpo
de profesores. El inicio de concursos dio paso a una renovación generacional del profesorado. La
elección de los jurados de los concursos generó controversias en todas las universidades. Los criterios
que operaron en estos concursos fueron novedosos: las publicaciones en revistas internacionales o la
capacidad para formar discípulos. Y no tanto la antigüedad docente.
Cuando Risieri Frondizi asumió el rectorado de la UBA la renovación tomó un nuevo impulso,
promoviendo el desarrollo de las facultades y de las secciones asociadas al desarrollo de un perfil más
científico que profesional. En las facultades de Ciencias Exactas y Filosofía y Letras se llevó a cabo el
proyecto de convertir a la Universidad en un centro para la investigación. La renovación alcanzó a
institutos de orientación profesional como la Facultad de Medicina. La intención de unir la docencia
con la investigación se manifestó a partir de la expansión del sistema de dedicación exclusiva. En
1958 había nueve profesores con esa dedicación en la UBA. En 1966 alrededor de 700. La dedicación
presuponía que el profesor dedicaba la mayor parte de su tiempo a la investigación original. El
Conicet apoyó este régimen a partir de la concesión de subsidios para la investigación y el
equipamiento y a través de una política de concesión de becas para graduados. La creación de la
carrera de investigador fue otro avance, surgiendo un nuevo perfil de profesor universitario,
vinculado con la investigación y la docencia. Durante los años 57 y 58 se creó el Consejo
Interuniversitario, integrado por los rectores de todas las universidades, y se creó un fondo
conformado por el remanente de los presupuestos de las distintas universidades. A principios de la
década del 60, el Banco Interamericano de Desarrollo otorgó préstamos para el reequipamiento de
las universidades nacionales. Algunos centros de la UBA recibieron subsidios de fundaciones
extranjeras, la Facultad de Ciencias Médicas de la UNde Cuyo, se beneficiaron con fondos de la
Fundación Rockefeller. Además se otorgaron becas en el exterior. Los aportes más importantes de la
renovación universitaria eran de origen público.
Otros cambios, por ej. en UNS fue el reemplazo de la estructura de facultades por la de dptos, cuyo
objetivo era unir a las mismas especialidades dentro de cada Universidad. Se avanzó sobre la
organización de la estructura curricular, surgiendo nuevas carreras y reformas actualizadas de los
planes de estudios. La renovación de la enseñanza universitaria de las cas soc se inició en la UBA
sucedió después del golpe militar de 1955. En 1957 se crearon las carreras de Psicol y Sociol y se
aprobó el plan de la carrera de Cas de la Educ, que reemplazaba a la de Pedagogía. En 1958 fue
fundada Cas Antropológicas y Economía. Surgieron preocupaciones didácticas y varias universidades
instalaron departamentos de Pedagogía. En las facultades renovadoras, como Filosofía y Letras, se
reemplazaron los cursos anuales por cuatrimestrales. La mayoría de los planes de estudios sufrió
modificaciones para volverlos flexibles y a permitir su actualización. La modernización edilicia
también formó parte de estos cambios como el incremento de la matrícula y el de graduados,
impulsándose el desarrollo del Departamento de Orientación Vocacional. Desde finales de la década
del 50 este departamento ofreció asistencia en su a estudiantes secundarios. A principios del 56, se
creó en la UBA el Depto de Extensión, encarando un proyecto de desarrollo integral en la Isla Maciel,
zona marginal del Gran Bs As que asumía la intención de llevar a cabo una investigación sobre la
condición social de sus habitantes y su organización para tomar medidas que mejoraren su nivel de
vida. Otro avance fue la creación de la Editorial Universitaria de Bs As (Eudeba), en 1958. Ese cambio
no fue igual en todas las Univ del país, en algunas el modelo de los años 20 seguía reproduciéndose
en las casas de estudios del interior de la Argentina.
LOS LÍMITES DE LOS PROYECTOS MODERNIZADORES El golpe de 1966 y la intervención a las
universidades cerraron el período de renovación y modernización universitaria. Los proyectos
modernizadores fueron perdiendo fuerza durante la década de 1960. En todas las universidades
comenzaron las tensiones entre los grupos tradicionales y los renovadores. La comunidad académica
se fragmentó y esto restó fuerzas a los proyectos renovadores. El impacto de la Revolución en Cuba
provocó que creciera el consenso a favor de las soluciones revolucionarias. Se dio una imposibilidad
de separar lo político de la académico y ahí es donde el proyecto renovador del 1955 encontró sus
límites. El modelo académico consolidado desde 1958 fue cuestionado por su carácter cientificista.
Una parte de los docentes y, los estudiantes, rechazaba la idea de que la ciencia pudiese contribuir a
modificar la realidad social. Se cuestionó también la posibilidad de la autonomía de la ciencia. La
relación entre los estudiantes y la dirigencia universitaria se complicó en la década del sesenta. Los
estudiantes se movilizaron contra los exámenes de ingreso Y cuestionaron la recepción de subsidios
externos por considerarlos una forma de penetración imperialista. Esto dividió a la comunidad
académica. La radicalización política de la juventud incidió en la división de la comunidad académica y
en el debilitamiento del proyecto transformador. La Universidad fue atacada por la derecha política y
Las FFAA veían a la Universidad, como centros de infiltración revolucionaria. Hubo presiones para
evitar el nombramiento de algunos profesores o para lograr la expulsión de estudiantes sindicados
por su afinidad con grupos revolucionarios. En 1965 se produjo un incidente durante un homenaje al
ex presidente Roca. En 1966 la UBA, se pronunció institucionalmente en su contra. Las nuevas
autoridades sancionaron un decreto, firmado por el presidente Onganía, el cual suprimía el gobierno
tripartito, disolvía los consejos superiores y obligaba a los rectores y decanos a transformarse en
interventores sometidos al del Ministerio de Educación. Algunos aceptaron esto y otros como el de la
Univ de Córdoba, La Plata y Bs.As. lo rechazaron. En algunas facultades fueron tomados los edificios
por grupos de estudiantes y docentes. La respuesta de las autoridades militares fue el desalojo
violento. Los episodios más graves se vivieron en la Facultad de Cas Exactas. Más de 150 personas,
entre estudiantes y profesores, fueron detenidas y encarceladas. (La Noche de los Bastones Largos.)
BARRANCOS, DORA “MUJERES EN LA UNIVERSIDAD” En la década del 60 fue el comienzo del ingreso
masivo de las mujeres a la universidad, debido a la gratuidad de la enseñanza. Las carreras que
captaron más ingresantes fueron las humanísticas, odontología, ciencias exactas, naturales, Química,
bioquímica y farmacia, e/otras. La mayoría de puestos estaban a cargo de hombres. En cambio, en las
universidades privadas había >cantidad de mujeres, pero en los viejos troncos de humanidades
seguía habiendo más docentes hombres. En 1973 con el regreso del peronismo-Cámpora- al
gobierno, Rodolfo Puiggrós asumió el rectorado de la UBA y Adriana Puiggrós se convirtió en la
primera decana de univ.públicas. A mediados del 50 en la Facultad de Filo y letras de la UBA se
comenzaba con la militancia estudiantil, llegando a la presidencia Amanda Tubes, lo mismo sucedió
en 1970 en la Fac de exactas.

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