Conclusión

Estamos en el siglo XXI y con el pasar de los años las tecnologías han avanzado y al ritmo de ella
nuestras capacidades para adaptarnos, también las herramientas que nos prestan a redes sociales
nos permiten acercarnos a las personas con quienes no tenemos un contacto cercano físico sin
importar la distancia en tiempo real, también nos prestan escenarios de diversión y educación.

Heisenberg afirmaba que no hay realidad en la virtualidad y mostramos lo que queremos qué
otros conozcan de nosotros, los entornos virtuales transmiten conocimientos, diversión,
publicidad, nueva relaciones sociales, generación de nuevos empleos desde nuestros hogares
facilitando así la convivencia familiar y el cuidado de nuestros pequeños, nos facilita también el
acceso a plataformas para la educación escolar y profesional.

Vemos que las redes sociales se han convertido en plataformas de marketing para promover
nuestros negocios haciendo publicidad y concursos de artículos a la venta y así general más
ingresos y mayores ventas, así se obtienen mayoría de clientes, generando más ingresos y de esta
manera mejorar nuestra calidad de vida.

Debemos ser prudentes al compartir en nuestras redes sociales la información privada, códigos y
contraseñas, ya que en está encontramos seres inescrupulosos que utilizan la virtualidad para
robar información, engañar y causar daño social y psicológico sobre todas los menores de edad.
Por ello debemos instruir a nuestros jóvenes, adolescentes y niños al buen uso de las redes
sociales y tener confianza en sus padres y adultos responsables, para cuando se presente este
flagelo que hoy nos azota por estos medios virtuales, no cause daño al autoestima ya que la
comunicación personal se está perdiendo por el uso de las pantallas y redes sociales.

Personalmente en mis redes sociales trato de hacer un buen uso de ellas, buscando también
ayudar a las personas que lo necesiten con un mensaje, una imagen, una palabra de aliento que en
su momento lo requiera. Si todas las personas más le diéramos el uso adecuado a las redes
sociales, cuántas vidas salvaríamos, cuántos suicidios hubiésemos evitado, a cuantos niños les
hubiésemos evitado dolor, mal trato y violación de sus derechos.

Trato de que en mi entorno las personas y familiares más cercanos hagan el buen uso de sus
redes, sin una falsa identidad, algo que no son, los motivo a seguir a Dios antes que a cualquier ser
humano, y como profesional mi deseo es emplear mis conocimientos en pro de una sociedad
donde podamos mejorar las relaciones en familia la cual es la base de la sociedad de donde parten
los valores y principios teniendo en cuenta que los niños son esponjas que todo absorben y
aprenden por imitación en sus primeros años de acuerdo al entorno donde se desarrollan.