HISTORIAS PARA CRtCtR tN TODA lA DIVtKSIDAD

~ edi tori al muc has nue ces

 ~ -..

--
'ftólo9-o
,¿Af:Juien por favor 9.uiere pensar en lxs niñxs ;:,,

He.len Ale.~y-ía, esposa del Reverendo Ale..9ría (Los Simpsons)

No somos una sociedad que problematice qué, cómo y cuándo pensamos en niñas y niños y
desde dónde. Por eso, este trabajo editorial, que fue originalmente pensado como producto
radial concreto, muestra desde la ficción acciones cotidianas que son el resultado de sentir y
pensarles y de la decisión de actuar con la niñez, que nos exige coherencia. Esa coherencia -nos
enteramos al oír a esta trava de un barrio popular cualquiera del conurbano bonaerense (que
Invito a pensar multiplicado por toda Latinoamérica)- tiene cierta solapada trampa, que nos
confronta, al menos, con el cinismo histórico occidental. ¿Quién diría "violemos, esclavicemos,
golpeemos, explotemos, olvidemos, ps1qu1atr1cemos, condenemos a la ignorancia, matemos a nlf'los
y niñas"? Nadie ... Lo real es que esas violencias ocurren y no es en ba_Ja proporción. Entonces,
esta trava que nos muestra Susy hace concreto un accionar desde el cual pensar el sentir
de lxs nlf'ixs y pensar la infancia. Es una pedagogía trava para adultos muy d1frc1I de digerir,
porque no lo dice alguien especialista en 1nfanclas; lo dice una trava, 9ue a menudo regresa de
prostituirse y que está ahí, entre todos y todas, circulando en aparente igualdad con hombres
y mujeres, pero que tiene conciencia plena de que llegado el momento le van a patear en
contra. Cuando se necesite un chivo expiatorio, la perversa será ella -mecanismo necesario para
que estxs hombres y mujeres se sientan en paz y nieguen toda responsabilidad- . La trava en
cuestión no tiene mayor sabiduría al respecto que pensarse nif'ía y en ese ejercicio de memoria
constante se mantiene cuerda y lúcida. Frente a tanta violencia, se mantiene humilde en
igualdad con la Infancia que la circunda; una igualdad responsable, que no subestima a esa niñez,
sino que mantiene un equilibrado lugar de responsabilidad adulta sobre esa cierta indefensión y
vulnerabllidad lnfante y la lucidez de ponerse a la par, prestando atención, Jugando el amor en
acción, fuera de toda subestimación.
o

¿De qué hay que hablar? De nosotros y nosotras y nuestras formas de relacionarnos con las
demás personas y el mundo. Entre esos aspectos relacionales, la sexualidad es uno más. No
puede ignorarse ni ser brutal, no podemos ignorar la sexualidad infante ni la exposición nlf'ia
a la sexualidad adulta circulante. Hay que traducirla a su medida o será violencia también.
Por eso, uno de los primeros mitos a derribar es que nadie piensa en los niños y las niñas,
cuando hay una industria complejíslma, extendida, en permanente expansión, que les adiestra
como consumidores y consumidoras de medicamentos, del Juego, del alimento, de la tecnología
educativa y un !argo etcétera, 9ue lo abarcaría todo de no ser porgue no hay una industria

D del cuidado, del acompañamiento, de la amoros1dad; lxs que piensan activamente en la infancia
son lxs 9ue producen bienes y servicios, quienes les ven como objetos de deseo de su perversión,
que les contemplan como mano de obra esclava, para esclavitud sexual, con pensamiento activo
productivo con resultados concretos diarios. Mientras tanto, 9u1enes declaman por la 1nfancia
se conforman en ese lugar de declamación improductiva, solo 9ue al repetir incesantemente su
reclamo tienen la falsa sensación de que se están ocupando, pero en lo concreto no se produce
ningún resultado mas allá de su propia tranquilidad de conciencia. La niñez es hambreada por un
sistema económico Injusto, es abusada en el hogar por un papá, un tío o un vecino, o en su 1glesla
o en su escuela, mientras es explotada en traba_Jo esclavo, en fabricas urbanas clandestinas, en la
producción agraria, es golpeada por algunx de sus progenltorxs o abandonada en mano de otras
personas a quienes agrade de manera física o psí9u1ca. Mientras es ps19u1atrlzada en complicidad
familiar, escolar y médica, la nlf'iez es sometida a grandes extremos de represión y se le exige
el cumplimiento estr1d.o doctrinarlo de altos estándares de f ormaclón, o es sesgada de carlf'io,
o es privada de vuelo, es apagada en su brillo propio, es sometida a 1nd1ferencla, es descuidada,
 es menospreciada, es preparad a para cumplir un guion, es esputada a un "estate 9u1eto, estate
quieta, manfene f.e en s1lenc10, obedecé, no seas travlesx~ Nuestra nlf'íez es sometida a desamor,
cercenad a en sus propios suef'ios.

Pensar en la 1nfancla no basf.a. Cualquier nlf'ia f.ravesf.1 lo sabe. Por eso, hay infancia 9ue escapa,
que corre por sus suenos, que vuela lejos y no encuentr a dónde posarse, reposar, encontra
r
ahmento , porque aunque de agua se f.raf.e, def.rás hay una persona adulta 9ue a cambio le pide
lo único que posee: su cuerpo y ese manoseo perverso , le hace af'iicos sus suenos. Esta trava
lo
sabe y se empeña en no reproduc ir, al menos en las gurlsas a su alrededo r, o los changuit os de
su
entorno o en lxs pibes y las p1bas a su a/canee, mosf.rando un hacer/pa labra y no otra cosa,
una
comunicación pequeñi ta, de unos concreto s minutos diarios, con una cuántas palabras escogida
s
con cuidado y, en ese dar amor con palabras , se salva, se rescata a sí misma, de ser cómplice
de
todo un mundo de relaciones, que piense o no en la nlfiez, la aplasta. No dice mucho más,
pero
a partir de las palabras de esta frava podemos inferir cómo pensar la 1nfancla, desde
dónde,
cuándo, para qué y en qué medida y cuál es el tono con que a estos p1bes y a estas p1bas
se
les habla, toda una pedagog ía cof.1d1ana y f.rava ...

Marlene Wayar,
única garclta del río Su9ura en el Rro de la Plata
Ott1- ptOloio

Este libro es un abrazo.

Y como todos los abrazos, llevó mucho tiempo hacerlo.

ílbrazarse parece f ácll, pero nunca es fac1I llegar hasta el abrazo.

Primero hay 9ue saber lo 9ue s1gn1f1ca 9ue nadie te abrace y de eso mis amigas travas y yo
sabemos bastante.

La soledad no es mala. Lo malo es 9ue te deJen sola no por algo 9ue h1c1ste, sino por algo 9ue sos.

Soy periodista y ese oficio me ha permitido conocer mucha gente y experiencias diferentes. Lo
d1ferente es, Justamente, lo 9ue hace de un hecho una noticia. Eso de 9ue el perro no muerda
al hombre, sino el hombre al perro: ya saben.

Lo d1fe rente nos hace aprender cosas 9ue no sabemos y ni Imaginamos. Nos abre los ojos y la
cabeza, pero lo 9ue es más Importante, nos abre el alma. ílprendemos así muchas formas de
sentir y comprendemos así 9ue eso, Justamente, es la vida: los colores.

Q mí me gusta el lila, por ejemplo. Me parece alegre, bonito, elegante y armónico.

Jamás se me ocurriría exigirle al mundo 9ue sea solo hla, no solo por el disparate 9ue eso
s1gn1f1ca, sino por9ue arruinaría al lila: se transformaría en algo triste, autoritario, aburrido y
uniforme.

íl mí me gusta pensar 9ue Susy Shock es roJa.

Rop como las flores, los caramelos y los atardeceres de verano.

 n S Sh k . ás se le ocurrir ía imponerme su roio J ,
pero no sé si se imagin aba que yo
H usy oc Jªm l d
. harlar sobre mucha s cosas Y en 1.0 as nos
era
ltla el día 9ue nos conocimos Y nos pusimos
d
ª e I 1 d _
d
encontr amos. No es 9ue estábam os e acuer o o qu e aprobá bamos cada cosa que a 01.ra ec1a,
1 1 1 l
sino 9ue entre las dos tejimos un d lá Iogo d on d e ca d ª una tenía algo para apor1. ar e a a 01.ra.
, . d 1
Datos, miradas , experiencias, s;:i beres, sens1·b·l·d
11 a d es, bro mas , que fueron as1 zurc1e n o una 1.rama
9ue nunca nos ata: nos sostien e.

Q mf me gusta pensar 9ue Susy Shock es mi amiga.

De esas amigas 9ue saben cómo hacert e sentir bien cuando estás mal.

Y yo me sentía mal cuando esa vez nos encontr amos. Cualquier otra
person a podría haber
pensad o 9ue estaba triste por9ue desde hacía mucho tiempo estaba
Intent ando hacer algo
para aliviar el dolor 9ue les produc e a las person as 9ue la socieda d
las maltra te. Pero yo no
estaba triste: estaba mal. Estaba enojada, me sentía impote nte y desaco
modad a. Como todos
los primeros sábado s de cada mes, había pasado la tarde en la reunión
del grupo de mujere s
sobrev iviente s de abusos, golpes, violencias, la mayorí a agredi das
por sus paret p d
f amillare s ... ¿Cómo puede una person a hacerle algo asf a alguien 9ue debe respet Jas, a res,
ar Y proteg er?
La pregun ta me la hice muchas veces, pero esa vez la tenía en la
gargan ta b
que hacía arder mi 1nd1gnaclón. como una rasa

Entonc es llegó Susy Shock.

 Me acuerdo hasta en 9ué mesa de MU nos sentamos. Me acuerdo cómo la miré a los oJos y me
acuerdo cómo se iluminó la idea con ese roJo 9ue tiene el fu ego cuando prende.

Yo d~e: "Hagamos un programa de radio para niñas y nlñot

Susy Shock d~o: "Llamémoslo Crianzat

Yo d~e: "Que sea de hbre reproducción para 9ue circule por todos los lados a. donde 9u1eran
llevarlo~

Susy Shock d~o: "Con poesía y con amo(

Y nos abrazamos.

En menos de un mes, el programa radial estaba en el aire, cabalgando las emisoras comunitarias
de todo el país, reproduciéndose en barrios, pueblos, aulas, casas, computadoras y celulares.

Otro dra, en otra mesa de MU, otras personas a las 9ue me gusta pensar como mis amigas y
con otros colores -Lucía, azul brillante; Gonzalo, naranJa- me contaron 9ue 9uerían hacer de
Crianzas un libro de esta bella editorial.

Y nos abrazamos.

Para llegar a ese abrazo, esas personas tuvieron 9ue otra vez -hace ya ocho años- animarse a venir
a MU a un taller sobre crónica periodística 9ue yo decidí dictar con un delantal de moza para 9ue
ninguna persona pensara 9ue era una maestra ciruela 9ue iba a enseflarle a nadie cómo escr161r bien.
.

Luego, tuviero n que querer sentar se duran te un largo af"io, el segund o sábado
de cada mes
y durant e ocho horas, en unas sillas duras, 9ue te deJan el traste cuadra
do, para soport ar
una Cátedr a de ílutoge stlón 9ue dictam os en MU con la idea de dedica
rnos a pensar ué
queremos hacer, cómo querem os hacerlo y cómo podem os sosten erlo. 9
El trabaj o final de esa
cátedr a fue la editori al que hoy hace posible este libro, y antes otros,
lodos alegre s, bonitos,
elegan tes y armónicos.

Lo marav11loso de esta histori a es 9ue no es un cuento .

Tampoco una lección .

Es un abrazo .

Hay otros. Ojalá 9ue muchos. Ojalá 9ue todos difere ntes y entre d1s-l1n-
las person as, por9ue así
la vida que vivimos, se transf orma en una histori a 9ue nos hace felices compa
rtir.

Claudia ílcuña
 lnt~otluccion

Este libro comenzó algún dra ...

Este libro empieza el dra en 9ue Muchas Nueces conoció a la Cooperativa lavaca y nació la idea
de armar la ed1tor1al.

Este libro comienza el día en 9ue Muchas Nueces escuchó hablar a Claudia ílcufia de la importancia
de tener voz propia. Y 9ue hasta una mano puede ser un medio de comunicación.

Este libro surge el día en 9ue Marlene Wayar nos contó de su infancia y chocamos contra el
mundo trava.

Este libro nace cuando con Susy Shock aprendimos a 9uerer 9ue otrxs sean lo normal.

En realidad, este libro crece cuando Susy y lavaca idean un ciclo de micros radiales~ para 9ue
las niñas, los niños y lxs nifíxs crezcan en la diversidad.

Todos esos comienzos nos abrazan.

Todos esos encuentros forman parte de nuestra crianza.

Muchas Nueces

:t:Estos textos fueron primero micros radiales de lavaca.org y se pueden escuchar, en los vínculos atrás de
cada 1lustraclón, con un lector de Or desde el celular, o en el link: hHp://www.lavaca.org/cate9ory/cr1anzas
 U)
0 o 0
e N _SJ
~
! -O
Q ~
Q

~ C/)
?e _Q
C/)
e
·e ~
cr¡
-t
~
~ Q.)
s
Q.)

Q.)

a
cr¡
Q
U)
::::s
Q-...1

~
..Q ~
·s
_g
Ñ
~
a
'J
ó
·e
U)
~
eQ.) C/)
'J
::::s Q.)
~ -O u
Q.)
'J
Q_ 'J
e::J e
U) 'J
~ e::J
-O ~ u
~
g_ cg ~
U) E
Q
U)
~
~
~
~ e
...e: o {j
e U) eQ
~
~ u
- ''1
e;;::)
.O) ]
::s--)
Q)

~
.--

t,,z..i«nz«S
¡Chango! ¡Ch1n1tal ¡Guricesl ílcá te escribe la Susy.
Seguro que me conocés de verme volver tarde por el
barrio, algunas que otras risitas me
habrás regalado estando en barra. Pero sos de los y las
que me dice "Buen día, señora,, cuando
voy a la mañana a comprar el pan.

Soy la tía de Uriel, que vive Justo enfrente del Centro

Comunitario, y aun9ue tenemos nuevas
leyes, que me permiten tener en el documento el nom
bre que siento para mí, todavía la ley
no puede hacer mucho para que dejen de cargarlo a
mi sobrino con "su tío 9ue se disfraza
de mujer~ No vengo a retarte; vengo a que me conozcas. ¿Y sabé
s por 9ué? Por9ue hay un
amanecer asomando y estaría bueno que no te lo pier
das, 9ue no nos lo perdamos.

Te dejo un beso, o un abrazo, de tía trava

 ¡Changol ¡Ch1n1tal ¡Gurlcesl Qc~ te escribe de nuevo la Susy.

ílyer en el barrio se armó terrible batahola. Sé 9ue lo viste lodo. Pero los de la Melropohlana
no deJan de molestarnos.

Y9u1ero que sepas, que varios de tus padres y madres saheron a defendernos.
Y la historia es la de siempre: 9ue no somos •buen eJemplo•, •9ué hace una persona corno
yo criando n1rixt En fin, 9u1ero 9ue le enorgullezcas de ellxs, 9ue no solo me defend,eron,
también se defendieron al enorgullecerse de nuestros modos de criarles, que es nuestro modo
de amarles.
Ojalá, más allá de todo ese bochinche, te haya quedado e\ ruido fina\ de\ fuert{slmo ap\auso
9ue nos dimos todxs, al lograr 9ue se fueran los uniformados. Ese aplauso es un tambor 9ue
nos dice 9ue por ahí bien vamos ...
 !?AilAtt rnez..c. lAd J.S
¡{hangol ¡Ch1n1ta! ¡Gurices! ílcá te habla de nuevo la Susy.

Me quedé pensando en la fiesta del otro día, en el aniversario del Centro Comunitario, cuando
fas personas esas se rieron y burlaban al empezar a sonar la chacarera y todos ustedes
corrieron a bailarla y a comprobar con sus ojos de único mirar 9ue ustedes la bailaban
mezclados, libres, entre iodos y todas, sin la presión de 9ue haya una sola forma de bailarla,
y la muy graciosa de Brisa les pidió que se callen, que no sean irrespetuosos, 9ue si no saben
divertirse que se retiraran, porque hay gente que cree en serlo 9ue para bailar hay 9ue
hacerlo solo de a dos y en pareJa, y que esa pareja es de una sola forma y bla bla bla ... ue
9
por suerte para ustedes la alegría anda suelta y desencadenada ... y 9ue yo, desde entonces,
me ando sonriendo por fu era y por dentro ...

ílbrazo y beso de tía trava

¡Chango! ¡Ch1nital ¡Guricesl ílcá te habla de nuevo la Susy.
ir más
Tenía ganas de conversar con la maestra de la escuela, por9ue mi sobrino Ur1el no 9uiere
a clase, y resulta 9ue la seña me exphca 9ue los compañeritos y las compañerltas lo cargan
sa,
con su tía 9ue es ... y no podía decirlo ... "Travesti~ le completo yo. Y ella, 9ue es muy amoro
se asusta por9ue me nombré así, y yo la miré y sonriendo le d~e: "¿Vos no te nombrás muJer?
ha
¿Y eso te insulta? ¿Cómo nos va a asustar lo 9ue somos y tannnto dolor y alegría nos
: y si
costado ser?". Y 9uedamos en esto: "cuando me veas venir a buscarlo, no dudes en decirlo
ta
t enés un megáfono por favor: ¡usálol: 'ílhí viene la tía travestl de Ur1el'", 9ue a mí me encan
cómo suena ... orgullo es ese nombrarme, orgullo gigante y bien maricón.

ílbrazo y beso de tía trava

 ,
Dt, -fit,St «s
¡Chango! ¡Chinlta! ¡Gurices! ílc
á le habla de nuevo la Su
sy.
Medio tristona ando porque
no sé qué les pasa a ustede
s, pero a mí todo este zafa
las fiestas me dep afuera
siempre. Entonces, busco en rrancho de
frentar a la tristeza con má
s alegría.
Y de eso le quería hablar: de
que la alegría también es nu
estra, es un derecho, aun9ue
pobres, aunque estemos solos
y solas, aunque como yo, seamos
tr avita, ande por este barri
haya sidra que me ampare.
Y no lo digo de novelera qu o y no
invento. e soy, sino porque las f iesla
s son un

Yo me quedo meJor con nu

estra alegría de todos los
días, esa de es ta r al mar
Y de ahr seguir siendo. gen de lodo.

ílbrazo y beso de tía lrava

 M.«los be.sos
¡Chango! ¡Chinita! ¡Gurices! ílcá te habla de nuevo la Susy.
¡ílayyyyy! ¡Vengo endiablada de bronca! Por9ue a la Pato y a la Colo, 9ue todos conocemos en
el barrio y gue bien linda pareja gue son esas, las han echado de un bar de La Plata, porgue
dice el dueño gue anduvieron a los besos y gue eso no está bien. ¿Y a 9ué 9uieren 9ue anden
esas dos, si entre otras cosas son hndas porgue se aman como a pocos acá en el barrio he visto?
¡ílhora resulta gue les molesta un beso, dos besos, tres besos!
Mirá vos 9ué prehistóricos 9ue son algunos todavía. Pero ustedes saben cómo es esto: si les
molestó un beso, ¡van a tener 9ue bancarse cien besos! Porgue ahí están yendo decenas de
pareJitas de chicos y chicas para aturdirle el negocio al dinosaurio ese.
Q ver si puede con tanta demostración de amor.
ílbrazo y beso de tía lrava
 H«d«
¡Changol ¡Chinital ¡Gurlcesl ílcá les habla de nuevo la Susy.
ílndo muy divertida ensayando y ensayando. Por9ue no sé si les conté, que soy parle del
grupo de teatro del barrio. Claaaaro... ¡ílhora esta trava también es actriz! ¿Qué me conlás?
Y encima de todo parece 9ue mis compañeras del grupo andan tan, pero tan aguerridas, que
me han elegido para hacer ni más ni menos 9ue de hada, en la obra para chicxs que estamos
ensayand o.
Pero no creas que lo nuestro es imitar a Üisney, ¿eh? ¡Ni locas! Mi hada es muy guerr,\\era,
es muy sudaka. ílnda entre los persona_Jes con su varita mágica, 9ue en verdad es un azole,
poniendo orden entre tanto machito golpeador y entre tanto mach1lo abusador. ¿Qué me
contás? Este grupo de teatro sí 9ue se las trae.
Beso y abrazo de tía lrava
~
T«íl~«s
-¡Buenos díasl ¿Vos sos Dolores, la mamá de ílgustina, la compañerita de Uriel? ¡Oué bueno!
Yo soy la tía. Te venía a pedir la tarea del cole de ayer, por9ue Uriel anda con anginas y no
pudo ir, pero necesitaba, por favor, 9ue con la tarea, si podés, me prestes un poco de onda ...
sí, f ~ate si te queda algo por ahí, detrás de la mesada o aba_Jo de alguna silla. No, no te estoy
cargando, te estoy pidiendo simplemente 9ue me trates con onda, por9ue no cambia si la 9ue
pide la tarea de su sobrino soy yo, que aparte de tía soy trava, ¿entendés? Oue no es 9ue
te voy a robar el marido, como d~iste por lo baJo a la sahda de la escuela, la semana pasada.
Una: porque las travas no robamos lo que no nos pertenece, o sí, pero como cual9uier h~o o
h~a de vecino, no es el ser trava lo que nos hace ladronas, ¿entendés? Y además tu marido
es demasiado feo para que me guste, iJªJa_Jal Y es un chiste, porque lo que quiero es 9ue te
relajes, amara, y que no solo Uriel, mi sobrino, haga las tareas que le faltan. Es hora que los y
las adultas hagamos las tareas que debemos y nos corresponden, para que en serio tengamos
un mundo más copado.
 Alirn~ntos
o el tiempo, y
Siempre que acompafio a mi sobrino Ur1el a la escuela, y ahora 9ue ya fue pasand
la maestra
añO a af'iO se va haciendo más sencillo ser una tía más 9ue lleva a su sobrino, y que
mlnis charlas,
me salude con un beso y 9ue las otras madres también te cuenten a la hora de las
tiene esa
etcétera, etcétera, empecé a 9uedarme un poco más en la vereda, porque una
rápidamente,
costumbre del tiempo trava, que es llegar, hacer lo 9ue tiene 9ue hacer y huir
9uedando, y
porque siempre se supo de prestado, en casi todos lados, pero de a poco me voy
que tiene dos
gracias a eso, conocí a una de la porteras de la escuela, una que se llama Marta y
hizo 9ue yo le
niños que, según me d~o la primera vez, aman a Florencia de la V Ese solo gesto me
que abraza su
sonriera y al otro día le llevara una porción de pastel para cada uno, como gesto
os super
otro gesto. Me contó 9ue está separada y 9ue el padre de los chicos, dos niñitos colorad
parecidos, es un tipo violento y 9ue ella tiene miedo todavía, aun9ue el Juez le dictam
inó 9ue no
un día y se los
podía acercárseles a n1ngunx. Vive atemorizada, e imaginando 9ue él va a aparecer
hasta que
va a llevar. Por eso los chicos estudian a la mañana y a la tarde se 9uedan en la escuela
"Qué suerte
a ella se le termina su horario de traba_Jo. "N1 loca los dejo solitos en la casa~ me dice.
re suerte...
9ue vos no tenés marido~ me d~o ayer, y yo la miré y le d~e '¿Sabés que sí? Es una
en ese otro
pero tengo sobrino, y tenemos h~os, como los tuyos, a los 9ue hay que abrazarlos
a veces, las
camino de ser otro tipo de varones, para 9ue sean otro tipo de maridos. Oue somos
que duele,
madres Y las tías las que les ponemos, pobrecitos, el chip 9ue les exige ser de esa forma
así que mariana vamos, aparte de bizcochuelo, a empezar con algo de feminis
mo para crianzas.
GOué me decís?
,
Querida señorita Dolores,
Por fin, después de tantísimo tiempo, tengo la posibilidad de escribirte y es maravillosa la
oportunidad, ya que es un nuevo libro la excusa para hacerlo. Pero no un libro cual ulera,
sino un
libro pensado desde las crianzas, palabra que adopté como propia ni bien la conocí 9en Brasil hace
unos años, porque al pensarla como una acción también nos incluye. ílhr, en esa palabra tan
bella, los
niños y /as niñas son también devenir, son proceso, son un camino de abrazo cuidadoso, Junto
al Juego
y al pan y sobre todo Junto a otrxs... ¿Y por qué te lo cuento a vos? Por9ue fuiste mi primera
maestra de la primaria, en 1° y 2° grado en la Escuela Nº 28 de Villa León, Huza1n9ó, en
la década
del 10. Y yo, que necesito tanto hablar del pr1vileg10 de tener la mamá y el papá 9ue tuve, ue
no solo nunca depron de abrazar en todas las decisiones y los caminos 9ue fui eligiendo, 9
sino 9ue
amaron esas decisiones y esos caminos, yo 9ue lxs nombro cada vez 9ue me pongo a
discutirle a
este mundo sus paternidades y maternidades mez9uinas y esas fam1has 9ue tiran pibes
y p1bas a
la calle, a la guerra, al abandono, a la violencia, a la 1nd1ferencia, elcéte ra, etcétera ... 9ue tantxs
,
de lxs nuestrxs pueden dar cuenta, porgue han sido muchxs de esxs niños y niñas desabrazadxs
por correrse del molde, del mandato... yo también necesd:.o nombrarte, querida Seño, porgue
vos,
que eras abuela y pecosa y toda colorada y bien ba_Jlta y usabas anteojos como
los 9ue a mí
me tocó usar en esos mismos años, también nos marcaste de una manera def1n1l1va, como cuando
llamaste a nuestrxs padres y madres a una reunión y les d~lste que no nos ibas a enseñar solo
lo
 ue la currlcula le ex191a hacer, por9ue si lo haclas, nos íbam
9 os "a secar", así dijiste. Y entonces
nos propus1sle 9ue luvléramos "olro cuaderno" en el 9ue apre
nder otras cosas. Con lolal firmeza,
esxs n1n1los y n1n1las 9ue éramos lo escondlamos con rapidez
y disimulo, y poníamos en su lugar el
"cuaderno of1c1al" cada vez 9ue alguien ~eno al nido de nues
tra aula aparecía, por9ue nadie debla
saberlo, nadie debía encontrarlo y entonces nos ensenaste
a defendernos también de ese posible
censor a nueslra aventura ...

Muchos anos después, les pregunté a ex companerxs 9ué

era lo 9ue hacíamos en ese "otro
cuaderno" y nadie se acordaba con precisión . Solo sé 9ue, grac
ias a vos, sé, y sabemos muchxs, 9ue
existe siempre olro cuaderno en donde escr1b1r...

Por eso le 9u1ero agradecer, "yo, primer hijo de la madre 9ue

después fui ...", le lo agradezco por9ue
larnb1én le tuve para poder desplegar las alas ...

Donde9u1era 9ue estés, siempre va mi abrazo

Susy Shock

fj