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Ministerio Evangelístico
Misionero y de Restauración
LA GRAN COMISION
Marcos 6:7-13i
Nuestro Señor Jesucristo, fue muy específico cuando encomendó a sus discípulos la
forma de llevar a cabo la GRAN COMISION. Muchas de las razones por medio de las
cuales, los métodos de evangelización no han dado sus mejores y contundentes
resultados, no ha sido porque se hayan aplicado métodos ineficaces, sino más bien
porque no se ha dado un uso verdadero a los dones iniciales que el Espíritu Santo nos ha
entregado y se ha dado poco interés y/o importancia a las instrucciones emanadas por
nuestro Señor Jesucristo. ¿Cuáles son esos dones y cuáles fueron esas instrucciones?...
Apoyándonos en la palabra de Dios, encontraremos que lo primero que hizo Jesús fue dar
a su Iglesia “Autoridad sobre espíritus inmundos y sobre las enfermedades” (Mateo
10:1iv; Lucas 10:19v), seguido de las siguientes instrucciones:
Los gentiles eran todas aquellas naciones que no eran Israelitas, profesaban falsas
religiones, cultos y costumbres que iban en contra de los mandamientos de Dios. Eran
injustamente menospreciados por los judíos, a pesar de que Dios ordenó a Israel que
fuera “luz de los gentiles” (Isaías 49:6vi) y había promesas para ellos (Isaías 2:2-4; 46:6vii;
Zacarías 9:7viii). Dios nos envía a conquistar el mundo para Cristo, pero a la vez que nos
promete victorias, también nos exhorta para que no nos contaminemos con las ciudades,
pueblos, urbanizaciones, barrios, calles o casas conquistadas (Josué 23:6-8ix). Dice
Jeremías 15:19, “...Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos...”
Las ciudades samaritanas eran lugares donde había excesiva idolatría, muchos cultos
paganos falsos, acompañados de ebriedad e inmoralidades. Ellos reconocían su
parentesco con los judíos cuando éstos estaban prosperados, pero en los casos
contrarios, relucían su parentesco con los asirios y otras naciones paganas. En la
actualidad, existen muchas agrupaciones, familias y círculos sociales que han optado por
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dedicarse al pecado y a las malas obras, rechazando abiertamente las prácticas del
verdadero cristianismo: Sectas satánicas, por ejemplo. (Salmos 1x)
Primeramente, Jesús envió a buscar a las ovejas pérdidas de la casa de Israel, es decir,
los que se habían apartado de los mandamientos de la ley mosaica. Sin embargo,
podemos observar que, por medio de la fe en Cristo, también los gentiles podían recibir
sanidad y salvación (Mateo 15:22-28xi; Marcos 7:26xii) y constituirse en herederos de las
promesas Bíblicas (Gálatas 3:29). Posteriormente, después de la resurrección, Jesús
extendió la comisión de predicar a todo el mundo (Mateo 28:18-19; Marcos 16:15).
Predicar el Reino de los cielos, implica la manifestación del poder de Dios sobre las
fuerzas del mal. Es por eso que el Señor Jesús, primeramente nos dio autoridad sobre los
espíritus inmundos (Marcos 16:17 y Lucas 10:19). La intención es "llevar" salvación,
favores de Dios (gracia) y sanidad, primeramente al Pueblo de Dios y después a todos los
gentiles (2 Pedro 3:9).
Cuando el “Reino de los Cielos” no se está manifestando en medio del pueblo de Dios,
los que han creído, deben comenzar a abandonar el espíritu del mundo y de todas las
cosas que no agradan a Dios; deben “buscar primeramente el reino de Dios” (Mateo
6:33) y pedir con todo el corazón a Dios “venga tu reino, hágase tu voluntad” (Mateo
6:10).
5.- Ungir con aceite y sanar a los enfermos, limpiar leprosos, resucitar muertos:
El Señor, luego de dar potestad a sus discípulos, los envió a sanar los enfermos, no dijo
“a ver si se pueden sanar” o “a ver si hay posibilidad de que se sanen”; el envió A
SANAR. Es decir, los envió para que lo representaran con toda autoridad mediante la
palabra y los hechos (2 Corintios 5:20). La Palabra de Dios es clara cuando ordena en
Lucas 10:8 "...sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: Se ha acercado a
vosotros el reino de Dios..."
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6.- No lleves nada para el camino: Oro, plata, cobre, alforja, doble túnica, calzado,
bordón.
El trabajar en pro de una zona en particular, para procurar la salvación de las almas,
implica invertir mucho tiempo. Por ello en las salidas misioneras, se hace necesario en
muchos casos, posar en la zona en que se va a trabajar. La indicación es clara. ¡No es en
cualquier lugar donde vamos a descansar (posar)!, durante nuestra estadía por esos
lugares, hasta que se levante la Iglesia.
Pueden existir muchas razones por las que Dios ordenó salir de dos en dos: Pero,
primeramente es un mandato; no obstante, hay citas bíblicas que lo respaldan:
Eclesiastés 4:9-12; Mateo 18:16; Juan 8:17; 2 Corintios 13:1; Hebreos 10:28.
Dificultad, en algunos casos, de anunciar la necesidad de salvación, sin el uso de
frases popularmente cristianas: “Gloria a Dios, Aleluya, Quien vive”. No es que estas
sean malas (no se malinterprete), sino que no en todo lugar podemos llegar con esas
expresiones eufóricas.
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Dios le bendiga, y esperamos que este material haya sido de su agrado. Cualquier
comentario o sugerencia diríjase a la Iglesia “Renuevo Fiel”, Av. Aragua,
B/Andrés Eloy Blanco, Maracay; escriba a JAIME LUIS ARIAS MORILLO
.
Apartado Postal 4770 Maracay 2101-A Estado Aragua, o llame en Venezuela a
los teléfonos 0243-8712223, 0243-2180593 y 0414-4940260.
E-mail: hhamesias@hotmail.com
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i
Marcos 6:7-13
7 Después llamó a los doce, y comenzó a enviarlos de dos en dos; y les dio autoridad sobre los espíritus inmundos.8 Y
les mandó que no llevasen nada para el camino, sino solamente bordón; ni alforja, ni pan, ni dinero en el cinto,9 sino
que calzasen sandalias, y no vistiesen dos túnicas.10 Y les dijo: Dondequiera que entréis en una casa, posad en ella
hasta que salgáis de aquel lugar.11 Y si en algún lugar no os recibieren ni os oyeren, salid de allí, y sacudid el polvo que
está debajo de vuestros pies, para testimonio a ellos. De cierto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el
castigo para los de Sodoma y Gomorra, que para aquella ciudad.12 Y saliendo, predicaban que los hombres se
arrepintiesen.13 Y echaban fuera muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos, y los sanaban.
ii
Mateo 10:5-10
5 A estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones, diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en ciudad de
samaritanos no entréis,6 sino id antes a las ovejas perdidas de la casa de Israel.7 Y yendo, predicad, diciendo: El reino
de los cielos se ha acercado.8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia
recibisteis, dad de gracia.9 No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos;10 ni de alforja para el camino, ni
de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.
iii
Lucas 9:1-6; 10:1-9
1 Habiendo reunido a sus doce discípulos, les dio poder y autoridad sobre todos los demonios, y para sanar
enfermedades.2 Y los envió a predicar el reino de Dios, y a sanar a los enfermos.3 Y les dijo: No toméis nada para el
camino, ni bordón, ni alforja, ni pan, ni dinero; ni llevéis dos túnicas.4 Y en cualquier casa donde entréis, quedad allí, y
de allí salid.5 Y dondequiera que no os recibieren, salid de aquella ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies en
testimonio contra ellos.6 Y saliendo, pasaban por todas las aldeas, anunciando el evangelio y sanando por todas partes.
1 Después de estas cosas, designó el Señor también a otros setenta, a quienes envió de dos en dos delante de él a toda
ciudad y lugar adonde él había de ir.2 Y les decía: La mies a la verdad es mucha, mas los obreros pocos; por tanto,
rogad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies.3 Id; he aquí yo os envío como corderos en medio de lobos.4 No
llevéis bolsa, ni alforja, ni calzado; y a nadie saludéis por el camino.5 En cualquier casa donde entréis, primeramente
decid: Paz sea a esta casa.6 Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; y si no, se volverá a
vosotros.7 Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que os den; porque el obrero es digno de su salario.
No os paséis de casa en casa.8 En cualquier ciudad donde entréis, y os reciban, comed lo que os pongan delante;9 y
sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: Se ha acercado a vosotros el reino de Dios.
iv
Mateo 10:1
1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y
para sanar toda enfermedad y toda dolencia.
v
Lucas 10:19
19 He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará.
vi
Isaías 49:6
6 dice: Poco es para mí que tú seas mi siervo para levantar las tribus de Jacob, y para que restaures el remanente de
Israel; también te di por luz de las naciones, para que seas mi salvación hasta lo postrero de la tierra.
vii
Isaías 2:2-4; 46:6
2 Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los
montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones.3 Y vendrán muchos pueblos, y dirán:
Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus
sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.4 Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a
muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación,
ni se adiestrarán más para la guerra.
6 Sacan oro de la bolsa, y pesan plata con balanzas, alquilan un platero para hacer un dios de ello; se postran y adoran.
viii
Zacarías 9:7
7 Quitaré la sangre de su boca, y sus abominaciones de entre sus dientes, y quedará también un remanente para nuestro
Dios, y serán como capitanes en Judá, y Ecrón será como el jebuseo.
ix
Josué 23:6-8
6 Esforzaos, pues, mucho en guardar y hacer todo lo que está escrito en el libro de la ley de Moisés, sin apartaros de ello
ni a diestra ni a siniestra;7 para que no os mezcléis con estas naciones que han quedado con vosotros, ni hagáis mención
ni juréis por el nombre de sus dioses, ni los sirváis, ni os inclinéis a ellos.8 Mas a Jehová vuestro Dios seguiréis, como
habéis hecho hasta hoy.
x
Salmos 1
1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,
Ni estuvo en camino de pecadores,
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
xi
Mateo 15:22-28
22 Y he aquí una mujer cananea que había salido de aquella región clamaba, diciéndole: ¡Señor, Hijo de David, ten
misericordia de mí! Mi hija es gravemente atormentada por un demonio.23 Pero Jesús no le respondió palabra.
Entonces acercándose sus discípulos, le rogaron, diciendo: Despídela, pues da voces tras nosotros.24 El respondiendo,
dijo: No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.25 Entonces ella vino y se postró ante él, diciendo:
¡Señor, socórreme!26 Respondiendo él, dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos.27 Y ella
dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.28 Entonces respondiendo
Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora.
xii
Marcos 7:26
26 La mujer era griega, y sirofenicia de nación; y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio.