El tribunal falló a favor de Panamá en un arbitraje sobre una inversión hotelera ilegal en una reserva indígena. Los inversores demandaron a Panamá por más de $100 millones, alegando expropiación e incumplimiento de tratados de comercio e inversión. Sin embargo, el tribunal determinó que carecía de jurisdicción debido a que la inversión violó las leyes panameñas y los derechos de las comunidades indígenas.
El tribunal falló a favor de Panamá en un arbitraje sobre una inversión hotelera ilegal en una reserva indígena. Los inversores demandaron a Panamá por más de $100 millones, alegando expropiación e incumplimiento de tratados de comercio e inversión. Sin embargo, el tribunal determinó que carecía de jurisdicción debido a que la inversión violó las leyes panameñas y los derechos de las comunidades indígenas.
El tribunal falló a favor de Panamá en un arbitraje sobre una inversión hotelera ilegal en una reserva indígena. Los inversores demandaron a Panamá por más de $100 millones, alegando expropiación e incumplimiento de tratados de comercio e inversión. Sin embargo, el tribunal determinó que carecía de jurisdicción debido a que la inversión violó las leyes panameñas y los derechos de las comunidades indígenas.
Panamá gana arbitraje de 100M$ por expropiación de
hotel en reserva indígena por un arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (Ciadi) que ha desestimado los reclamos por expropiación de un proyecto hotelero en una reserva indígena panameña.
El tribunal, compuesto por Juan Fernández-
Armesto (presidente), Horacio Grigera Naón indico que los inversores habían violado la ley panameña y los Demandantes alegaron que Panamá expropió y no otorgó un trato justo y equitativo a las Demandantes .
Los reclamantes alegaron que panamá infringió su
acuerdo de libre comercio con América central y el acuerdo sobre la promoción y protección recíproca de inversiones con el reino de los países bajos. Los reclamantes solicitaron daños por mas de US $100 millones, incluidos daños morales, tarifas y costos, Panamá argumentó que el Tribunal carecía de jurisdicción porque los reclamantes adquirieron sus inversiones a través de una serie de transacciones fraudulentas Decisión del tribunal La decisión del tribunal fue que: “carecía de jurisdicción y desestimó todas las reclamaciones contra el país.”
El Tribunal observó que todos los tratados de inversión
tienen un requisito implícito para que un inversionista cumpla con la legislación nacional.
Específicamente, el Tribunal determinó que los Demandantes
violaron la ley panameña y las protecciones especiales otorgadas a las comunidades indígenas en Panamá.
La violación de la ley se consideró grave, lo que impidió a las
Demandantes obtener protección en virtud de los tratados aplicables.
Los Demandantes no realizaron la debida diligencia necesaria e
ignoraron las múltiples “señales de alerta” con respecto a la ilegalidad de la inversión.” PROYECTO DE EL CAÑAVERAL • ANTECEDENTES Y DEMADAS • En 2010, un grupo de inversores adquirió cuatro fincas rústicas para desarrollar el proyecto ecoturístico Cañaveral a lo largo del Caribe panameño, en la reserva indígena conocida como Comarca Ngöbe-Buglé, declarada por ley el 7 de marzo de 1997
• LA EXISTENCIA DEL REQUISITO DE LA LEGALIDAD DE LOS
TRATADOS • La inversión era ilegal Decisión del tribunal • Algunas de las demandantes no eran inversores protegidos por los tratados • Algunos de los inversores no demostraron tener una inversión que cumpliera con el test Salini; • Las demandantes no demostraron prima facie la existencia de un incumplimiento de los tratados.
En consideración de la ilegalidad insalvable de la inversión, la cual
resultó en la pérdida de protección bajo los tratados aplicables y el derecho internacional, el tribunal dictaminó que carecía de jurisdicción para decidir sobre el fondo de la controversia. Ordenó a cada parte el pago de sus propios costos, pero Panamá deberá asumir los costos de la inspección ocular.