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Cómo será el postoperatorio de un cesárea?

Tras la cirugía, la madre debe permanecer en un área de


observación.Transcurridas unas horas se la traslada a una habitación con su
bebé. Puede comenzar la lactancia materna inmediatamente después del
parto. Necesitará tomar medicación porque, al desaparecer los efectos de la
anestesia, notará el dolor de la operación. Además, las enfermeras comienzan
muy pronto con la movilización para prevenir la formación de trombos.

Caminar en seguida puede ayudar a prevenir los coágulos de sangre y a


mantener el intestino en movimiento. Al principio se suele necesitar ayuda para
la movilización, especialmente para subir y bajar escaleras.

En general, las mujeres sometidas a una cesárea deben estar hospitalizadas


durante 3-4 días aunque la recuperación completa puede llevar de 4 a 6
semanas. Durante este tiempo deben evitar cargar pesos y realizar ejercicio
intenso. Es recomendable consultar al médico cuándo se puede retomar la
actividad habitual.

Las grapas y los puntos de sutura de la piel (si no son reabsorbibles) se deben
retirar entre los 4 y los 7 días siguientes en el Centro de Salud. La zona de la
herida se debe lavar diariamente con agua y jabón neutro y mantenerse limpia
y seca. Puede cubrirse con un apósito si se experimentan molestias con el roce
de la ropa. El apósito debe cambiarse diariamente.Criterios para su aplicación

CRITERIOS PARA SU APLICACIÓN:

Cuando una mujer no puede dar a luz por vía vaginal, el parto se realiza por medio de una
intervención quirúrgica practicando una cesárea. Algunas cesáreas son planificadas y programadas,
mientras que otras pueden practicarse como resultado de complicaciones surgidas durante el trabajo
de parto.

Existen varias condiciones que aumentan las probabilidades de un parto por cesárea. Estas incluyen,
entre otras, las siguiente

 Frecuencia cardíaca fetal anormal: la frecuencia cardíaca fetal durante el trabajo de parto es
un buen indicador de cómo reacciona el feto frente a las contracciones del trabajo de parto.
La frecuencia cardíaca se suele monitorizar electrónicamente durante el parto; lo normal es
que varíe entre 120 y 160 latidos por minuto. Si la frecuencia cardíaca fetal indica un
problema, es posible tomar medidas de inmediato, como darle oxígeno a la madre, aumentar
los líquidos y cambiar la posición de la madre. Es posible que sea necesario realizar una
cesárea.
 Mellizos u otros múltiples

 Posición anormal del feto durante el parto: la posición normal del feto durante el parto es
con la cabeza para abajo, y la cara hacia la espalda de la madre. Sin embargo, en ocasiones
el feto no se encuentra en la posición correcta, lo cual hace que el paso por el canal de parto
sea más difícil.
 El bebé es demasiado grande para un parto vaginal
 Complicaciones de la placenta (por ejemplo, placenta previa, situación en que la placenta
bloquea el cuello uterino y presenta el riesgo de desprenderse del feto prematuramente)
 Determinados problemas médicos maternos (por ejemplo, diabetes, presión arterial alta o
infección por el virus de inmunodeficiencia humana [VIH])

 Falta de progreso o evolución anormal del trabajo de parto

 Lesiones por herpes activas en la vagina o en el cuello uterino de la madre


 Parto por cesárea anterior

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