San Juan de Pasto

6 de septiembre de 2021
Seminario de Procedimientos Penales Especiales y Técnicas de Juicio Oral

Juan Pablo Vela Ruíz – Código: 216052476 - 5A

ALEGATO DE APERTURA
El siguiente es un trabajo académico requisito para aprobar la materia señalada
en el ante título, todas las referencias normativas hacen alusión a la ley 906 de 2004
Código de Procedimiento Penal colombiano.

Entre las etapas del proceso penal de la ley 906, agotada la investigación,
formulada la acusación y desarrollada la audiencia preparatoria, el juez de conocimiento
habrá dispuesto la fecha y la hora para la realización de la audiencia de Juicio Oral. En
esta audiencia se realizará la práctica probatoria y el juez concluirá con una sentencia
condenando o absolviendo al acusado, según su impresión acerca del desarrollo de la
misma. Además de las reglas de contenido y congruencia (artículos 446 y 448
respectivamente) que convierten a la sentencia, en el marco del sistema adversarial, en
la calificación del desempeño procesal de las partes, esa impresión del juzgador que
conlleva la sentencia por supuesto se ciñe a la estricta normatividad y jurisprudencia,
pero en el ejercicio de la independencia judicial es comprensible que la sentencia
contendrá elementos de subjetividad. Ese factor de subjetividad y la aplicación de la
congruencia como calificación del ejercicio del litigio de la parte son los elementos que
dotan de gran relevancia al tema desarrollado en este texto: los alegatos de apertura.

Los alegatos de apertura son la oportunidad procesal que tienen las partes en un
proceso penal para, en el desarrollo de la audiencia de Juicio Oral del Título II del
Código de Procedimiento Penal, presentar al juez una teoría del caso, a manera de
introducción o preámbulo de lo que será el ejercicio probatorio a desarrollarse, los
fundamentos de la acusación o de la defensa y las conclusiones jurídicas que se
derivarán de los mismos.

Más allá de un resumen o simple introducción, el alegato de apertura de la parte

se convierte en un medio indispensable para alcanzar la persuasión del juzgador. Es por
eso que existe extensa investigación y estudios al respecto de la mejor manera de
realizar esta intervención. Se alcanza entonces una autentica técnica cuyo fin es el
generar cierta impresión psicológica, otorgando sentido y credibilidad a la versión de la
parte acerca de los aspectos jurídicos, empíricos y probatorios que componen el caso.

Cabe anotar que el artículo 367 define una Alegación inicial, la cual corresponde
a la oportunidad que tiene el imputado que según ciertos requisitos y por revisión del
juez, puede conducir a reducir la pena mediante la confesión y también es la ocasión a
la manifestación de la Fiscalía acerca de la existencia de preacuerdos. El juez ilustrará al
acusado y hará un examen de esas manifestaciones. Los alegatos de apertura son
diferentes de la “Alegación inicial”.

La oportunidad para presentar la Declaración inicial se le confiere a la Fiscalía y

a la defensa, en ese orden. Mientras que, según el artículo 371, para el acusador
presentar la teoría del caso es una obligación, para la defensa es una opción. Dado que
la defensa no solo cuenta con la posibilidad de entregar una versión alternativa a la de la
Fiscalía como estrategia de litigio, se permite que guarde silencio en este punto pues la
estrategia puede ser la de desvirtuar la veracidad de la teoría del caso del acusador
mediante el ejercicio probatorio y su respectivo análisis y de esa manera hacer efectivo
el principio del In dubio pro reo, sembrando una duda razonable respecto de la
narración incriminatoria contentiva de la hipótesis delincuencial construida por el ente
acusador.

La estrategia de litigio que realiza la parte obedece al estudio minucioso del

material probatorio allegado al proceso, de las entrevistas a los testigos, la versión del
acusado y del análisis jurídico de los hechos jurídicamente relevantes y del desarrollo
procesal. Tal estrategia se materializa en una teoría del caso. Así, el desarrollo de la
audiencia de Juicio Oral en la práctica de pruebas no debería obedecer al azar sino a la
mutua confrontación de la planeación que ha realizado cada parte para alcanzar el
convencimiento del juzgador. La teoría del caso, la cual se expresa en los alegatos de
apertura, es entonces expresión y medio de esa estrategia de litigio. Se indica entonces
desde la técnica la necesidad de que todo planteamiento que se manifiesta se sustente en
la certeza del material probatorio a practicarse. Otro punto general de la técnica indica
que la narración se sujete al orden lógico occidental “orden cronológico”, que sea una
intervención sucinta, que el lenguaje sea sencillo y que sea reiterativo en la formula que
sintetiza la teoría del caso. Una frase que resume la razón de condena o absolución será
la síntesis mencionada, la cual debería ser sonora, rítmica e impactante, la que será el
título de la intervención y su reiteración obedecerá a que será la consecuencia lógica de
las distintas aseveraciones que componen la intervención.

La intervención del alegato de apertura, en tanto manifestación de la teoría del

caso, debe señalar el contexto normativo de la conducta, la adecuación típica. Debe
señalar la narración de los hechos de la supuesta conducta, los hechos previos,
concomitantes y posteriores y señalar la conexión de estos con los hechos de relevancia
jurídica. Por último, se debe recorrer el material probatorio pronto a practicarse, señalar
nuevamente el objeto y su adecuación al fin de constatar los hechos jurídicamente
relevantes y así habilitar las consecuencias jurídicas de las normas mentadas.

Considero que la Dramaturgia, como área del conocimiento, ofrece a la creación

del alegato de apertura, de la teoría del caso y en general al ejercicio del litigio penal
una importante herramienta. Esta ciencia y arte provee a su estudioso el sentido de la
consecuencialidad y la expectativa de verosimilitud a la que culturalmente la humanidad
y específicamente como civilización occidental estamos acostumbrados. Su estudio, por
ejemplo, se remonta a la Odisea y la Ilíada por ser antiquísimas construcciones literarias
para hallar allí y en toda la literatura la permanencia de unas formas literarias. La
aparición de la prosa en el lenguaje escrito significó un desarrollo especifico en la
historia de la humanidad. Tales rudimentos son constantes en el ejercicio narrativo de
las más diversas obras. Es así que esta área del conocimiento se especializa en el estudio
del drama humano a partir de la juiciosa aplicación milenaria del intelecto al servicio
del arte de la literatura y el teatro. Entonces en la Dramaturgia se tiene una poderosa
herramienta en la construcción de relatos verosímiles y como medio de análisis de la
congruencia tanto lógica como empírica respecto de lo que podemos llamar la
naturaleza humana, es decir en una herramienta para el ejercicio de la sana crítica
judicial y en un medio también para influenciar la misma.