1 Introducción al paradigma del trabajo colaborativo
Existe un cambio de paradigmas en la forma en que los ecosistemas organizativos
funcionan, las tendencias emergentes llevan a destacar los Ambientes de Trabajo Colaborativo o Collaborative Working Environment (CWE)
El concepto de CWE se deriva de la idea de espacios de trabajo virtuales, y está
relacionado con el concepto de E-TRABAJO. Refiere a un grupo de trabajadores del conocimiento que utiliza de forma intensiva entornos y herramientas de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en sus prácticas laborales colaborativas, conectados por vía electrónica.
En un CWE, los profesionales trabajan juntos independientemente de su ubicación
geográfica. En este contexto, los E-PROFESIONALES utilizan un entorno de trabajo colaborativo para proporcionar y compartir información. El tele – trabajo facilita que las plataformas digitales funcionen como vehículos y garantía de la interacción remota.
El éxito del proceso de transformación no depende enteramente de la adopción de una
determinada tecnología innovadora, sino que está cifrado en cómo se empodera y capacita a las personas para que adopten esta nueva forma de trabajo usando la tecnología basados en la cooperación eficaz y eficiente de sus competencias.
También implica un nuevo modelo de liderazgo dinámico basado en la colaboración en
equipos que permitan crear y fomente el compromiso, la cooperación, la implicación y la rendición de cuentas, incrementando la confianza y el rendimiento.
Aplicaciones y servicios como: Correo electrónico, Mensajería instantánea,
Videoconferencia, Espacio de trabajo colaborativo, Gestión de documentos y sistema de control de versiones, Gestión de tareas, flujo de trabajo y Wikis se consideran elementos de un CWE. El enfoque CWE debe garantizar herramientas para el acceso al contenido y garantizar niveles de seguridad de la información.
Existen tres paradigmas de trabajo colaborativo:
Colaboración de persona a persona: Los compañeros que trabajan con un
propósito común claro pueden utilizar herramientas de colaboración para intercambiar contenido, recopilar conocimientos entre sí. Las técnicas pueden ser sincrónicas o asincrónicas, lo que significa que se admite la comunicación interactiva en tiempo real o no. Algunas herramientas pueden ser actualizaciones de actividad en streaming, pizarra electrónica, ventanas de chat, conversaciones de voz o video en línea, mensajería o wikis. Colaboración basada en el contexto: El contenido que está bien definido con metadatos y organizado con etiquetas o descriptores puede, presentarse o recomendarse automáticamente mediante los motores de búsqueda que forman parte de los sistemas de gestión de la información. Colaboración impulsada por procesos: Los flujos de trabajo son formas estructuradas de actividad colaborativa que emplea software para gestionar las etapas y tareas que los usuarios o grupos particulares deben realizar para lograr un propósito común y permite dar un seguimiento a los avances y aportes.