FRUTOS FUERA DE TIEMPO

Citas Bíblicas:
“Al día siguiente, cuando salieron de Betania, Jesús tuvo hambre. Y viendo de lejos una higuera
con hojas, fue a ver si quizá pudiera hallar algo en ella; cuando llegó a ella, no encontró más que
hojas, porque no era tiempo de higos. Y Jesús, hablando a la higuera, le dijo: Nunca jamás coma
nadie fruto de ti. Y sus discípulos le estaban escuchando.”
Mr. 11.12-14
“Salió de Judea y partió otra vez para Galilea. Y tenía que pasar por Samaria.” (LBLA)
“Salió de Judea, y se fue otra vez a Galilea. Y le era necesario pasar por Samaria.” (RV60)
Jn. 4.3-4
No son mensajes regañones. El Espíritu Santo te dirá el porqué de los mensajes, y por qué a veces
tienes que volver a oírlos. Tú sabes lo que pasó en Samaria, pero hay dos cosas interesantes que nos
dan luz para entender cuándo es que Dios nos salva a nosotros y cuándo es que busca fruto en
nosotros.
Leamos Jn. 4.3-4. Judea era el lugar preferido por Jesús (Fig. del Cielo) y Galilea era el campo
donde Él tenía que efectuar el trabajo (Fig. de Israel). Pero llama mucho la atención lo que dice Jn.
4.4: “…Y le era necesario pasar por Samaria.”, en otras palabras “tenía que pasar por Samaria”. Lo
que encontró allí fue una mujer que tenía 6 maridos, tenía una necesidad.
El Señor tuvo que dejar dos ciudades antes de ir a Samaria, aunque de alguna manera Samaria era
parte de Israel como lo vemos en el Antiguo Testamento, y nosotros los gentiles éramos parte de
Abraham en la gentilidad, o sea en el comienzo, pero nos desviamos.
Por eso a Jesús le era necesario pasar por Samaria, aunque allí había ya una concepción de DIOS.
Jn. 1.12 dice: “…Pero a todos los que le recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de
Dios, es decir, a los que creen en su nombre.” En otras palabras, “a los que creyeron [nosotros] les
dio el mismo derecho que a los judíos”. Pero voy a que el tiempo de nuestra salvación como que no
estaba incluido en el programa de Dios, pero Él se ocupó de nosotros (Ej. El pan para los hijos y
no para los perrillos).
Se acercó a la higuera aunque no era tiempo de higos, o sea que la gente que no estaba en el
programa es la que va a producir frutos.
“Al que no era mi pueblo llamaré pueblo mío, y a la no amada, amada.” Ro. 9:25. “Fui buscado
por los que no preguntaban por mí; fui hallado por los que no me buscaban. Dije a gente que no
invocaba mi nombre: Heme aquí, heme aquí.” Is. 65.1. Leyendo esto vemos como que la salvación
no era para nosotros, aunque Dios nos mostró en este programa que íbamos a ser parte de la familia
de Abraham por la fe, aunque con programación diferente.
Dios va a ser un trabajo aparte con nosotros, por eso ha puesto en espera a Israel, pero con la idea
de que nosotros pudiéramos producir fruto no en un programa tradicional conocido, sino en un
programa como si estuviera fuera de tiempo, como si nos hubiera salido el sol en la noche. Así nos
sorprendió el Señor en nuestra miseria. Ese es el programa de Dios que va a ser incomparable.
En lo que vivimos en la carne nadie será perfecto. La perfección que Dios busca es que entendamos
que somos concientes que somos defectuosos. Debemos ubicarnos en qué programa hemos sido
puestos por Dios como gentiles. Por eso puso al Espíritu Santo dentro de nosotros para que todo lo
que hagamos glorifique a Dios, pero NO COMO UN DICHO.
¿Por qué Jesús puso un tesorero (Judas) si no tenía nada guardado? Para pagar impuestos
envió a Pedro a pescar. LO QUE DIOS QUIERE VER EN NOSOTROS ES FRUTO. No lo
que Dios hace (prodigios, maravillas, milagros, etc.), sino lo que nosotros podamos hacer (dar
de nuestros esfuerzos y sacrificios = consagración).

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David ofrecía 7000 ovejas pero aún así sentía que era muy poco. ¿Qué haríamos nosotros? Talvez
lo publicaríamos.
El Señor elogia la actitud de una mujer viuda (Mr. 12:42). Él estaba evaluando. Dijo: “…porque
todos han echado de lo que les sobra; pero ésta, de su pobreza echó todo lo que tenía, todo su
sustento.” Mr. 12.44.
LA EXPLICACIÓN DE LA HIGUERA
No era tiempo de higos. La Iglesia en general siempre trata de dar fruto los domingos, porque está
en su tiempo. ¿Daría usted una ofrenda cuando abunde su billetera así no sea Domingo?
La Iglesia tradicional sea cual sea, está dispuesta a cantar cuando es Domingo. Esto es muy común.
En cambio la Iglesia renovada en su programa, tiene cosas nuevas que no todos tienen, por eso da
aun cuando no sea el tiempo. LA IGLESIA TRADICIONAL DA, PERO CUANDO DIOS LE
DA. ¿Será que darán cuando no es tiempo?
Por eso es que el Señor estaba buscando fruto cuando no era tiempo de fruto, porque tenía que
hacerse de un pueblo que le iba a producir frutos fuera de tiempo, fuera de lo normal, fuera de
lo acostumbrado.
Los judíos mesiánicos saben que Cristo viene, pero dicen que va a venir en una fiesta judía, pero el
Espíritu muestra que nosotros tenemos un programa diferente. El pueblo judío será una señal. Por
eso a nosotros se nos va a pedir algo fuera de tiempo.
La Iglesia que se va a ir no es la Iglesia religiosa, sino la Iglesia que oye la voz del Amado y va a
dar fruto cuando nadie tiene fruto, por eso su Amado tiene contentamiento con ella porque sólo
ella tiene fruto. ¡PARA NOSOTROS HAY UN PROGRAMA APARTE!
Ahora podemos entender porqué el Señor estaba buscando frutos en un tiempo que no era de dar
frutos, haciéndonos ver que muchos van a dar fruto pero en el tiempo de ellos (“ahora sí me voy a
meter contigo Señor”, “Ahora que ya estoy desocupado me voy a consagrar”, etc.).
Por eso no esperemos el día de culto para dar fruto. De ahí que Israel no entendía porqué el Señor
quebrantaba los sábados: “¡No es tiempo de hacer milagros!” – decían - y Él respondía: “¡Para
ustedes No, pero para mí sí!”
Las Iglesias han hecho sus programas, han establecido su tiempo y quieren que Dios obre en el
tiempo y de acuerdo al programa de ellas. Pero Dios va a buscar fruto en el tiempo de Él. Por eso la
Iglesia debe estar dispuesta al tiempo de Cristo y no al tiempo de ella.
Cuando la Iglesia crea que ya es el tiempo, que ya está bien arregladita, bonita, etc. y diga: “¡VEN
SEÑOR JESÚS!”, la Iglesia consagrada ya se habrá ido.
Esto es revelación para los fieles, para los que buscan a Dios, para los que tienen necesidad. NO
LES LLEVES PAN AL PRÓDIGO, DEJA QUE SIENTA LA NECESIDAD DE DIOS.
Hay un programa aparte para nosotros. Vamos a ser una Iglesia diferente, no por nuestra fuerza
humana. Simplemente por tener oídos circuncidados.
Talvez te parezcan mensajes duros porque quizá vives en el pasado. ¿Por qué se va a restaurar el
tabernáculo de David? Porque dice la Palabra que David fue llamado el hombre que hace las cosas
conforme al corazón de Dios, que hace las cosas que no todos hacen.
¿Por qué Dios dice que busca adoradores? Porque no hay muchos.
¿Por qué Dios se agradó de dos blancas y no de cheques gordos? Se agradó de la viuda porque
dio en el tiempo que no debería dar. (Diezmos y deudas).
Cuando producimos para Dios en escasez, es el momento más grato para Él. Hermano, entiende y
recibe una verdad que es muy importante: DIOS SE AGRADA MÁS DE NUESTRA
ALABANZA AQUÍ EN LA TIERRA, PORQUE ES ¡A PESAR DE TODO!

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Esto es producir fruto cuando no es tiempo de fruto. ¿Quién no canta un domingo? Pero, ¿quién
canta en medio de las dificultades? LAS TRIBULACIONES Y LOS PROBLEMAS TE DEBEN
LLEVAR A BUSCAR A DIOS.
Israel se encerró en un programa, por eso Jesús dijo a la higuera: “Nunca jamás coma nadie fruto de
ti.” (Mr. 11:14). Israel nunca salvó una nación, ni lo hará ahora ni después. Ella sí se salvará pero
porque Dios la va a salvar. Es decir, no tuvo fruto, no tiene fruto, ni tendrá fruto. Dará fruto pero
cuando vea bajar al Señor en las nubes.
La Iglesia en cambio, va a dar fruto pero en el tiempo de Dios. Los ministros y la Iglesia tienen que
moverse ahora en el mover de Dios. Esto se llama hora extra.
Por ejemplo, cuando Jesús habla de aquel siervo en Lc. 17.8-9: ¿No le dirá más bien: "Prepárame
algo para cenar, y vístete adecuadamente, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después
comerás y beberás tú"? ¿Acaso le da las gracias al siervo porque hizo lo que se le ordenó? ¡Claro
que no! Nosotros ni a siervos inútiles llegamos, porque ni siquiera hemos hecho lo que se nos ha
mandado, entonces, después de hacer lo que se nos ha mandado, queda el producir fruto fuera
de tiempo, fuera de las demandas de Dios.
Hay un fruto que procede de nosotros (Ej. El diezmo, la alabanza). Uno lo inicia y luego lo toma el
Espíritu (Ej. La Danza).
Hay frutos que Dios espera de nosotros y esto va a demostrar que le creemos a Dios, que confiamos
en Él y que lo amamos.
La Iglesia es una entidad muy aparte. Va a depender del impulso de Dios pero contado con su
sacrificio. Pablo decía: “Cuando soy fuerte es cuando nada soy”. Cuando no tenemos nada es
cuando podemos producir para Dios.
Moisés sólo fue con una vara. ¿Qué tiene la vara? Provisión de Dios, aunque muchos sólo esperan
dinero como provisión. Ex. 14.15-16: “Entonces dijo el SEÑOR a Moisés: ¿Por qué clamas a mí?
Di a los hijos de Israel que se pongan en marcha. Y tú, levanta tu vara y extiende tu mano sobre el
mar y divídelo; y los hijos de Israel pasarán por en medio del mar, sobre tierra seca.”
La Iglesia tiene un programa diferente y aparte de las Iglesias. La Iglesia va a producir de sí misma
para Dios. El Señor quiere fruto de nosotros, pero en Su tiempo y no en el nuestro. ¿Entiende ahora
hermano por qué Jesús buscaba fruto en el tiempo que no era de fruto? Porque quería que
produjeran fruto pero en el tiempo de Él.
¿Quiere usted producir fruto al Señor? ¿Lo hará cuando usted no tenga nada!
RECUERDE ESTO: JOB, SÓLO DESPUÉS DE PERDER TODO (HIJOS, RIQUEZAS,
SALUD, ¡TODO!), PUDO DECIR: ¡SEA EL NOMBRE DE DIOS GLORIFICADO!

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