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Hebreos 6:7 Porque la tierra que bebe la lluvia que con frecuencia cae sobre ella y
produce vegetación útil a aquellos por los cuales es cultivada, recibe bendición de
Dios; 8 pero si produce espinos y abrojos no vale nada, está próxima a ser maldecida,
y termina por ser quemada. (LBLA)
Esdras 4:24 Entonces cesó la obra en la casa de Dios que estaba en Jerusalén, y
quedó suspendida hasta el año segundo del reinado de Darío, rey de Persia. (LBLA)
Israel detuvo la obra por dieciséis años porque hubo varias razones que pararon la
edificación, había desánimo, murmuradores, acusadores y hasta los mismos
hermanos se pusieron a buscar decretos contra la edificación.
1 Samuel 3:1 El joven Samuel servía al Señor en presencia de Elí. La palabra del
Señor escaseaba en aquellos días, las visiones no eran frecuentes. 2 Y aconteció un
día, estando Elí acostado en su aposento (sus ojos habían comenzado a oscurecerse
y no podía ver bien), 3 cuando la lámpara de Dios aún no se había apagado y Samuel
estaba acostado en el templo del Señor donde estaba el arca de Dios, (LBLA)
En este tiempo se acabó la profecía y escaseaba la Palabra del Señor, había
sacerdotes, pero no había santidad, incluso a Samuel lo pusieron en el Lugar
Santísimo a dormir, convirtió el Lugar Santísimo en una sala cuna. Es lo mismo que
hizo Eliacim que metió a Tobías a vivir en el lugar donde se guardaba el incienso.
Por tantos problemas que tuvo Israel incluso fueron conquistados por los babilonios
que ya vivían en la tierra santa, pero santa porque allí vivía el pueblo de Dios,
entonces al estar poblado de extranjeros vinieron leones a comer gente, entonces los
mismos babilonios pidieron que vinieran los sacerdotes de Israel a enseñar la cultura
divina.
Los hijos de Elí eran terribles, estaban sirviendo y se metían con las servidoras a tener
relaciones dentro del templo, Elí era un sacerdote, pero no había enseñanza, no era
un maestro a pesar de que conocía de la Palabra. Debemos pensar como cristianos
qué producimos.
Éxodo 2:15 Cuando Faraón se enteró del asunto, trató de matar a Moisés; pero
Moisés huyó de la presencia de Faraón y se fue a vivir a la tierra de Madián, y allí se
sentó junto a un pozo. (LBLA)
Moisés era un árbol que daba fruto para liberación, por allí tiene un canto, pero no
estaba en la danza ni en corros porque no era su comisión.
Luego aparece la zarza y Dios le habla diciéndole que debía cumplir su comisión de
libertador. El desierto es un vientre de formación, allí el pueblo de Israel no hizo casas
sino que vivía tiendas, la formación en el desierto es para aprender a depender del
Señor. El propósito de Dios se va a cumplir en ti aunque tú te alejes.
Jueces 5:23 «Maldecid a Meroz», dijo el ángel del Señor, «maldecid, maldecid a sus
moradores; porque no vinieron en ayuda del Señor, en ayuda del Señor contra los
guerreros». (LBLA)
El Señor maldijo a Meroz porque no fue a ayudar a quitarse el yugo de encima cuando
Barac los liberó junto con Débora del dominio de Sísara. Ellos no llegaron en ayuda
del Señor. Por eso, dice la Biblia que nosotros somos colaboradores del Señor, la
Iglesia es de Cristo, el más interesado de que la gente se convierta es el Señor.
El cuerpo humano tiene diversos órganos y todos cumplen una función, pero los de
Meroz no hacen nada, no ayudan en ningún equipo de servicio. Tenemos muchas
cosas que hacer, pero primero pongamos al Señor, no hay excusas para buscar del
Señor.
La hipocresía es como hacer un teatro, es fingir algo que no somos. Pedro fingió
hipocresía ante los gentiles y el mismo apóstol Pablo se lo remarcó. Recordemos a
aquella mujer que sabía que el Señor en 48 horas iba a la cruz y entonces lo perfumó.
Dios nos va a juzgar si hacemos lo que podemos hacer.
Mateo 25:29 Porque a todo el que tiene, más se le dará, y tendrá en abundancia; pero
al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. (LBLA)
Esto tiene dos vías, en la primera es que debemos usar nuestros talentos, el Señor le
dio talentos a algunos y los que produjeron recibieron más, pero hubo uno que no
produjo nada con el que le dieron, entonces le llamaron siervo malo y perezoso,
inclusive pensaban que el Señor era duro, que solamente espera que fallemos para
castigarnos. Nosotros debemos saber que el Señor es misericordioso. Si pensamos
eso es que seguimos al Señor por miedo. Si no hubiera infierno, muchos no vendrían a
los cultos, venimos a los cultos por agradecimiento y comunión. Debemos poner
nuestros dones al servicio del Señor porque debemos amar al Señor por sobre las
cosas.
Lucas 1:20 Y he aquí, te quedarás mudo, y no podrás hablar hasta el día en que todo
esto acontezca, por cuanto no creíste mis palabras, las cuales se cumplirán a su
debido tiempo. (LBLA)
Zacarías era incrédulo, a veces somos incrédulos con lo que el Señor puede hacer en
nuestra vida, el Señor nos está dando y todavía no creemos. A Zacarías se le aparece
un ángel y todavía no cree. A veces oímos la profecía y pensamos que es para otro.
1 Reyes 19:13 Y sucedió que cuando Elías lo oyó, se cubrió el rostro con su manto, y
salió y se puso a la entrada de la cueva. Y he aquí, una voz vino a él y le dijo: ¿Qué
haces aquí, Elías? (LBLA)