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TEMA 2 PURIFICACIÓN DEL SANTUARIO CELESTIAL

Profecía de las 2300 tardes y mañanas

La profecía de Daniel 8: 14
“”Hasta dos mil trescientas tardes y mañanas; entonces el santuario  será
purificado””.

ESTA PROFECÍA HABLA ACERCA DEL INICIO DE LA


PURIFICACIÓN DEL SANTUARIO CELESTIAL
Cristo en su santuario, págs. 104-115

Hebreos 8: 2; 9:9,23-28 “…ministro del santuario, y de aquel verdadero


tabernáculo que levantó el Señor y no el hombre”.
“Lo cual es símbolo para el tiempo presente, según el cual se presentan
ofrendas y sacrificios que no pueden hacer perfecto, en cuanto a la
conciencia, al que practica ese culto…. Fue, pues necesario que las
figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así; pero las cosas
celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos. Porque no entro
Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el
cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios; y no para
ofrecerse muchas veces, como entra el sumo sacerdote en el Lugar
Santísimo cada año con sangre ajena”.

Después de su ascensión, nuestro Salvador iba a principiar su obra como


nuestro Sumo Sacerdote.

Hebreos 9:24 “No entro Cristo en el santuario hecho de mano, figura del
verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros
ante Dios”.

EL MINISTERIO DE CRISTO SE DIVIDE EN DOS GRANDES PARTES

Cada una ocupa un periodo y un lugar distinto en el santuario celestial,


así como el culto simbólico que consistía en el servicio diario y el servicio
anual, y a cada uno de ellos se dedicaba una sección del
tabernáculo. P.P. pág. 371.

SERVICIO EN EL LUGAR SANTO

Cristo después de su resurrección,  compareció ante la presencia de


Dios para ofrecer su sangre en beneficio de los creyentes
arrepentidos,  (Juan 20: 17), así como en el servicio diario, el sacerdote
rociaba la sangre del sacrificio en el velo, en el lugar santo a favor de los
pecadores arrepentidos. Cristo en su Santuario, pág. 40, 41.
Juan 20: 17. “No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas
ve a mis hermanos, y diles: Subo a mi padre y a vuestro Padre, a mi Dios
y a vuestro Dios”.

Comentario: Cristo, el día de su resurrección subió al cielo y presentó su


sangre al Padre; regresó a la tierra para estar con sus discípulos
cuarenta días, y luego, después de su ascensión se sentó a la diestra del
Padre en el Trono de Dios y del Cordero, Hechos 1: 3, Apocalipsis 22: 1,
y desde allí ministra el Lugar Santo.

C.S. pág. 473.  “Este ministerio siguió efectuándose durante dieciocho


siglos en el primer departamento del santuario”.

C.S. pág. 465.  “En aquel santuario los sacerdotes terrenales


desempeñaban el servicio; en éste (Santuario Celestial) es Cristo,
nuestro gran Sumo Sacerdote, quien ministra a la diestra de Dios. Uno
de los santuarios estaba en la tierra, el otro está en el cielo”.

Observación: Cumpliéndose los dieciocho siglos en 1844, El Padre y el


Hijo (Dios y Jesús) iniciaron su ministerio en el Lugar Santísimo, según lo
declara el profeta Daniel (Daniel 7: 9, 10 ,13), Juan (Apocalipsis 4: 1-6; 5:
6) y Elena de White (Primeros Escritos, pág. 55).

El Padre y el Hijo gobiernan sobre el universo desde el trono de Dios y


del Cordero (Apocalipsis 22: 1, 2) de donde sale el río de agua limpia y
de allí el Hijo ministra el Lugar Santo y el Lugar Santísimo, en su debido
tiempo cada uno.

Romanos 8: 34. “¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió


más aún, el que también resucitó, quien además está a la diestra de
Dios, el que también intercede por nosotros”.

La sangre de Cristo libra al pecador arrepentido de la condenación


de la ley, pero no anula el pecado; éste queda  registrado  en el
santuario hasta la expiación final; así en el símbolo, la sangre de la
víctima quitaba el pecado de la persona arrepentida, pero el pecado
quedaba en el  santuario hasta el día de la expiación. C.S. pág. 474.

¿A QUÉ LUGAR LLEGO CRISTO DESPUÉS DE SU ASCENSIÓN?

•      Hechos 7: 56 “y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre
que está a ladiestra del Padre”.
•      Marcos 16: 19 “Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en
el cielo, y se sentó a la diestra de Dios”.
•      1 Pedro 3:22 “… quien habiendo subido al cielo está a la diestra de Dios;
y a él están sujetos ángeles, autoridades y potestades”.
•      Romanos 8: 34 “¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió;
más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de
Dios, el que también intercede por nosotros”.

UBICACIÓN DEL PADRE CUANDO CRISTO ASCENDIO AL CIELO

Apocalipsis 22:1 “Después me mostró un río limpio de agua de vida,


resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del
Cordero”.

UBICACIÓN DEL TRONO EN EL SANTUARIO CELESTIAL

Apocalipsis 4: 5, 6; 8: 3 “Y del trono salían relámpagos y truenos y


voces; y delante del trono ardían siete lámparas de fuego,…“Y delante
del trono había como un mar de vidrio semejante al cristal; y junto al
trono,…”. 
”Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de
oro; y se  le dio incienso para añadirlo a las oraciones de todos los
santos, sobre el altar de oro que estaba delante del  trono”.

Cristo en su Santuario, pág. 102. “Los lugares santos del santuario


celestial están representados por los dos departamentos del santuario
terrenal. Cuando en una visión le fue dado al apóstol Juan que viese el
templo de Dios en el cielo, contemplo allí “siete lámparas de fuego
ardiendo delante del trono” (Apocalipsis 4: 5). Vio un ángel que tenía en
su mano un incensario de oro; y le fue dado mucho incienso, para que lo
añadiese a las oraciones de todos los santos, encima del altar de oro que
estaba delante del trono”. (Apocalipsis 8: 3). Se le permitió al profeta
contemplar el primer departamento del santuario en el cielo; y vio allí las
siete lámparas de fuego y el altar de oro representados por el candelero
de oro y el altar del incienso en el santuario terrenal. (Apocalipsis 11: 19).
De nuevo, fue abierto el templo de Dios y miró hacia adentro del velo, en
el interior, el lugar santísimo. Allí vio el arca de su pacto representada por
el cofre sagrado construido por Moisés para guardar la ley de Dios”.

Comentario: El trono de Dios y del Cordero de donde sale el río de agua


limpia de Apocalipsis 22: 1, no es el mismo que el trono del Santuario
Celestial de Apocalipsis 4. En la ascensión de Jesús Él llegó al trono de
Dios y del Cordero, es decir al trono de Apocalipsis 22: 1, de donde sale
el río de agua limpia, y desde éste trono ministró el Lugar Santo hasta
1844.

¿CUÁNTOS LIBROS HAY EN EL CIELO?


Apocalipsis 20:12.  “Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante
Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro
de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban
escritas en los libros, según sus obras”.

Apocalipsis 22: 19. “Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta
profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y
de las cosas que están escritas en este libro”.

LIBROS QUE HAY EN EL CIELO


1)   Libro de la vida.
2)   Libro de memorias.
3)   Libro de la muerte.

LIBRO DE LA VIDA

C.S. pág. 534. “El libro de la vida contiene los nombres de todos los que
entraron alguna vez en el servicio de Dios”

¿QUIÉNES SON INSCRITOS EN EL LIBRO DE LA VIDA?

Únicamente los nombres de aquellos que alguna vez aceptaron a Cristo


como su Salvador. Así como únicamente entraba la sangre del cordero
de aquellos que habían creído en la sangre de Aquel que los redimiría.
La sangre quitaba el pecado del pecador arrepentido, no así del que no
se arrepintiera, y pensaba que con solo llevar la sangre era suficiente
para librarlo del pecado; el pecador quedaba con el pecado. Cristo en su
Santuario, pág. 44.

LIBRO DE MEMORIAS

¿QUÉ SE REGISTRA EN EL LIBRO DE MEMORIAS?

En el libro de memorias se llevan los registros de todos los hechos de


cada persona con exactitud terrible  mientras cada persona aún vivía.
Salmo 139: 16; 87: 6.

 Malaquías 3: 16. “Entonces los que temían al Señor hablaron cada uno a
su compañero; y el Señor escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria
delante de Él para los que temen al Señor, y para los que piensan en su
nombre”.

C.S. pág. 535-537. “Delante de Dios está escrito “un libro de memoria”, en


el cual quedan consignadas las buenas obras de los que temen a Dios y
de los que piensan en su nombre” Malaquías 3:16”. Todo acto de justicia
esta inmortalizado. Toda tentación resistida, todo pecado vencido, toda
palabra de tierna compasión….”.
“Hay además un registro en el cual figuran los pecados de los hombres.
(Eclesiastés 12:14). De toda palabra ociosa que hablaren los hombres,
darán cuenta en el día del juicio. Dice el Salvador: Por tus palabras serás
justificado, y por tus palabras serás condenado”. “Los propósitos y
motivos secretos aparecen en el registro infalible, pues Dios sacará a luz
las obras encubiertas de las tinieblas, y pondrá de manifiesto los
propósitos de los corazones”.
“La obra de cada uno pasa bajo la mirada de Dios, y es registrada e
imputada ya sea como señal de fidelidad o de infidelidad”.
“Frente a cada nombre, en los libros del cielo, aparecen, con terrible
exactitud, cada mala palabra, cada acto egoísta, cada deber
descuidado, y cada pecado secreto, con todas las tretas arteras.  La
admoniciones o reconvenciones divinas despreciadas, los momentos
perdidos, las oportunidades despreciada,  todo fue registrado por el ángel
anotador”.
“A medida que los libros de memoria se van abriendo en el juicio, las
vidas de todos los que hayan creído en Jesús pasan ante Dios para ser
examinados por Él. Empezando con los que vivieron los primeros en la
tierra, nuestro Abogado presenta los casos de cada generación sucesiva,
y termina con los vivos”.
“Cada nombre es mencionado, cada caso cuidadosamente investigado.
Habrá nombres que serán aceptados y otros rechazados”.
“En caso de que alguien tenga en los libros de memoria pecados de los
cuales no se haya arrepentido y que no hayan sido perdonados, su
nombre será borrado del libro de la vida, y la mención de sus buenas
obras será borrada de los registros de Dios”.
“A todos los que se hayan arrepentido, y que hayan aceptado con fe la
sangre de Cristo como su sacrificio expiatorio, se les ha inscrito el perdón
frente a sus nombres en los libros del cielo; como llegaron a ser
partícipes de la justicia de Cristo y su carácter está en armonía con la ley
de Dios, sus pecados serán borrados”.

C.S. pág. 539, 540. “La obra del juicio investigador y el acto de borrar los
pecados deben realizarse antes del segundo advenimiento del Señor. En
vista de que los muertos han de ser juzgados según las cosas escritas en
los libros, es imposible que los pecados de los hombres sean borrados
antes del fin del juicio en que sus vidas han de ser examinadas. Pero el
apóstol Pedro dice terminantemente que los pecados de los creyentes
serán borrados "cuando vendrán los tiempos del refrigerio de la
presencia del Señor, y enviará a Jesucristo." (Hechos 3: 19, 20.) Cuando
el juicio investigador haya concluido, Cristo vendrá con su recompensa
para dar a cada cual según sus obras”.
“En el servicio ritual típico el sumo sacerdote, hecha la propiciación por
Israel, salía y bendecía a la congregación. Así también Cristo, una vez
terminada su obra de mediador, aparecerá "sin pecado para la salvación"
(Hebreos 9: 28, V.M.), para bendecir con el don de la vida eterna a su
pueblo que le espera. Así como, al quitar los pecados del santuario, el
sacerdote los confesaba sobre la cabeza del macho cabrío emisario, así
también Cristo colocará todos estos pecados sobre Satanás, autor e
instigador del pecado. El macho cabrío emisario, que cargaba con los
pecados de Israel, era enviado "a tierra inhabitada" (Levítico 16: 22); así
también Satanás, cargado con la responsabilidad de todos los pecados
que ha hecho cometer al pueblo de Dios, será confinado durante mil
años en la tierra entonces desolada y sin habitantes, y sufrirá finalmente
la entera penalidad del pecado en el fuego que destruirá a todos los
impíos. Así el gran plan de la redención alcanzará su cumplimiento en la
extirpación final del pecado y la liberación de todos los que estuvieron
dispuestos a renunciar al mal”.

“En el tiempo señalado para el juicio -al fin de los 2.300 días, en 1844-
empezó la obra de investigación y el acto de borrar los pecados. Todos
los que hayan profesado el nombre de Cristo deben pasar por ese
riguroso examen. Tanto los vivos como los muertos deben ser juzgados
"de acuerdo con las cosas escritas en los libros, según sus obras."

“Los pecados que no hayan inspirado arrepentimiento y que no hayan


sido abandonados, no serán perdonados ni borrados de los libros de
memoria, sino que permanecerán como testimonio contra el pecador en
el día de Dios. Puede el pecador haber cometido sus malas acciones a la
luz del día o en la obscuridad de la noche; eran conocidas y manifiestas
para Aquel a quien tenemos que dar cuenta. Hubo siempre ángeles de
Dios que fueron testigos de cada pecado, y lo registraron en los libros
infalibles. El pecado puede ser ocultado, negado, encubierto para un
padre, una madre, una esposa, o para los hijos y los amigos; nadie, fuera
de los mismos culpables tendrá tal vez la más mínima sospecha del mal;
no deja por eso de quedar al descubierto ante los seres celestiales”.

“¡Qué pensamiento tan solemne! Cada día que transcurre lleva consigo
su caudal de apuntes para los libros del cielo”. 

C.S. pág. 541, 542.  “El egoísmo escondido de los hombres aparece en los
libros del cielo. Allí está el registro de los deberes que no cumplieron
para con el prójimo, el de su olvido de las exigencias del Señor. Allí se
verá cuán a menudo fueron dados a Satanás tiempo, pensamientos y
energías que pertenecían a Cristo. Harto tristes son los apuntes que los
ángeles llevan al cielo. Seres inteligentes que profesan ser discípulos de
Cristo están absorbidos por la adquisición de bienes mundanos, o por el
goce de placeres terrenales”.
LIBRO DE LA MUERTE

¿QUIÉNES SON INSCRITOS EN EL LIBRO DE LA MUERTE?

Los que nunca han aceptado a Cristo como su Salvador.


Jeremías 17: 13 “¡Oh Señor, esperanza de Israel! Todos los que te dejan
serán avergonzados; y los que se apartan de  mí serán escritos en el
polvo,…”.
Y los que en el juicio han sido encontrados faltos (con pecados no
confesados y perdonados), sus nombres son trasladados del libro de la
vida al libro de la muerte.

¿QUÉ CONTIENEN LOS LIBROS?


Por lo tanto, los libros contienen los nombres y los registros de todos los
que han de ser juzgados. C.S. pág. 534.

SERVICIO EN EL LUGAR SANTÍSIMO


¿CÓMO SE LLEVA A CABO LA PURIFICACIÓN EN EL CIELO?

En el día de la expiación terrenal el pecado del pecador arrepentido era


borrado del santuario terrenal, pero el pecado del pecador no arrepentido
no era borrado  de él. Cristo en su santuario, pág. 61-66.

En el Santuario Celestial, los pecados escritos en los libro de pecadores 


arrepentidos son borrados y su nombre es dejado en el libro de la vida;
pero de pecadores con pecados no confesados, los pecados son dejados
en el libro y su nombre es borrado del libro de la vida y trasladado al libro
de la muerte. C.S. págs. 534-540.

¿CUÁNDO COMENZÓ ÉSTA PURIFICACIÓN?

Esto es a partir de 1844, sin embargo, siendo que los justos vivos todavía
están mezclados con los pecadores en la iglesia, y siendo que Daniel vio
al Anciano de días sentarse para juzgar con los libros que fueron
abiertos, esta visión muestra el juicio en relación a los muertos. C.S.
págs. 534-540.

¿QUÉ SUCEDIÓ EN EL CIELO EN 1844?

DANIEL VE EL ESTABLECIMIENTO DEL JUICIO EN EL CIELO

Daniel 7: 9, 10“ Estuve mirando hasta que fueron puestos tronos, y se


sentó un Anciano de días, cuyo vestido era blanco como la nieve, y el
pelo de su cabeza como lana limpia; su trono llama de fuego y sus
ruedas fuego ardiente”.
“Un río de fuego procedía y salía de delante de Él, millares de millares le
servían y millones de millones asistían delante de Él. El juez se sentó, y
los libros fueron abiertos”.

Daniel 7: 13 “Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes


del cielo venía uno como un Hijo de Hombre, que vino hasta el Anciano
de Días, y le hicieron acercarse delante de Él”.

JUAN TAMBIÉN VE EL ESTABLECIMIENTO DEL JUICIO EN EL


CIELO

Apocalipsis 4: 1-6; 5: 6. “Después de esto miré, y he aquí una puerta


abierta en el cielo; y la primera voz que oí, como de trompeta, hablando
conmigo, dijo: Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán
después de estas. Y al instante yo estaba en el Espíritu; y he aquí, un
trono establecido en el cielo, y en el trono, uno sentado. …Y alrededor
del trono había veinticuatro tronos; y vi sentados en los tronos a
veinticuatro ancianos, vestidos de ropas blancas, con coronas de oro en
sus cabezas. Y del trono salían relámpagos y truenos y voces; y delante
del trono ardían siete lámparas de fuego,…Y delante del trono había
como un mar de vidrio semejante al cristal; y junto al trono, y alrededor
del trono, cuatro seres vivientes llenos de ojos delante y detrás. Y miré, y
vi que en medio del trono y de los cuatro seres vivientes, y en medio de
los ancianos, estaba en pie un Cordero como inmolado,…”.

A ELENA DE WHITE TAMBIÉN SE LE MOSTRÓ EL


ESTABLECIMIENTO DEL JUICIO EN EL CIELO EN 1844

Primeros Escritos, pág. 55. “Vi al Padre levantarse del trono, y en


un carro de llamas entro en el lugar santísimo, al interior del velo, y se
sentó. Entonces Jesús se levantó del trono… Después de eso, un carro
de nubes, cuyas ruedas eran como llamas de fuego, llego rodeado de
ángeles, a donde estaba Jesús. Él entró en el carro y fue llevado al lugar
Santísimo, donde el Padre estaba sentado”.
Elena de White ve como el Padre se levanta del Trono de Dios y del
Cordero (Trono de Apocalipsis 22: 1)y se dirige al Trono del Santuario
(Trono de Apocalipsis 4) y luego se levanta Jesús del mismo trono (Trono
de Dios y del Cordero a donde llego después de su ascensión) y se dirige
a donde estaba el Padre, en el Lugar Santísimo en el Santuario Celestial.

¿DE QUÉ CONSISTE LA PURIFICACIÓN O LIMPIEZA EN EL


SANTUARIO CELESTIAL?
Entonces en cuanto a la purificación del Santuario Celestial, éste se esta
llevando en el presente removiendo del Libro de la Vida los nombres de
aquellos que son hallados faltos; y escribiéndolos en el libro que
contienen los nombres de aquellos que han de ser levantados en la
resurrección de los impíos después de los mil años. ( C.S. Capítulo 29).
Daniel 8: 16, 27; 9: 22-24, 27.

LIMPIEZA DE LOS PECADOS EN LOS REGISTROS

Apocalipsis 20:12. “Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante


Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro
de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban
escritas en los libros, según sus obras”.

Desde que hay pecado se llevan los registros en el cielo, pero en Daniel
8: 14 dice: “Hasta dos mil trescientas tardes y mañanas y luego el
santuario será purificado”.

LA VISIÓN DE LAS 2300 TARDES Y MAÑANAS LE ES REVELADA


AL PROFETA DANIEL

VISIÓN DE LA PURIFICACIÓN DEL SANTUARIO


Daniel 8: 26. “La visión de las tardes y las mañanas que se ha referido es
verdadera; y tú guarda la visión, porque es para muchos días”.

Daniel 9: 24-27. “Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y


sobre tu santa ciudad,.. Sabe pues y entiende, que desde la salida de la
orden para restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías Príncipe,
habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas…”.

¿CUÁNTO ES UN DÍA PROFÉTICO?

Ezequiel 4: 6. “…día por año, día por año te lo he dado”. 69 semanas  es


igual a: (69 días de la semanas x 7días) = 483 días, o 483 años.

Cristo en su Santuario, págs. 61-64.  “El ángel declaró que las 70


semanas iniciaban desde el momento cuando salió el edicto para
reedificar Jerusalén. Este decreto se encuentra en  Esdras 7:12-26.

70 semanas  es igual a: (70 días de la semanas x 7días) = 490 días, o


490 años.
Cristo en su Santuario, págs. 61-64. “ Este decreto fue promulgado en su
forma más completa por Artajerjes, rey de Persia, en el año 457 A.C.
Pero en Esdras 6: 14 se dice que la casa del Señor fue edificada en
Jerusalén por mandato de Ciro, de Darío, y de Artajerjes rey de Persia”. 

Cristo en su Santuario, págs. 61-64. “ Estos 3 reyes, al promulgar el


decreto,  confirmarlo y completarlo, lo pusieron en la condición requerida
por la profecía para que marcara el principio de los 2300 años.  Tomando
el año 457 A.C. en el que se completó el decreto, como fecha de la
orden, se comprobó que se había cumplido cada detalle de la profecía
referente a las setenta semanas”.

¿CUÁNDO FUE PUESTO EN VIGENCIA EL DECRETO?

Cristo en su Santuario, pág. 65. “El decreto de Artajerjes fue puesto en


vigencia en el otoño (21 de septiembre al 21 de diciembre) del año
457 AC. Si partimos de esa fecha, los 483 años alcanzan al otoño del
año 27 DC”.

Daniel 9: 27. “Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la


mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda…”. La semana de
la cual se habla aquí es la última semana de las 70 semanas. Son los
últimos 7 años del período concedido especialmente a los judíos.
Durante ese plazo que se extendió del año 27 al año 34 DC, primero en
persona y luego por intermedio de los discípulos. En el otoño  del año 27
DC, Jesús fue bautizado por Juan y recibió la unción del Espíritu Santo.
(Hechos 10: 38; Lucas 4:18; Mar. 1: 14,15).

“A la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda”. En el año


31 D.C, tres años y medio después del bautismo, nuestro Señor fue
crucificado.

Y 3 ½ años después se cumplen los 490 años con la muerte de Esteban,


y el evangelio es llevado a los gentiles. (Hechos 8: 4).

Cristo presentó la invitación del Evangelio especialmente a los judíos.


Cuando los apóstoles salieron para proclamar las buenas nuevas del
reino, las instrucciones del Salvador fueron: “Por camino de gentiles no
vayáis y en ciudad de samaritanos no entréis”, Mateo 10: 5, 6.

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