Está en la página 1de 18

ROMA TERCER PERIODO

“ EL IMPERIO ”
Fue el tercer periodo de la  civilización romana en la Antigüedad clásica,
posterior a la República romana y caracterizado por una forma de
gobierno autocrática. El nacimiento del Imperio viene precedido por la
expansión de su capital, Roma, que extendió su control en torno al mar
Mediterráneo. Bajo la etapa imperial los dominios de Roma siguieron
aumentando hasta llegar a su máxima extensión durante el reinado de Trajano,
momento en que abarcaba desde el océano Atlántico al oeste hasta las orillas
del mar Caspio, el mar Rojo y el golfo Pérsico al este, y desde el  al sur hasta
las tierras boscosas a orillas de los ríos Rin y Danubio y la frontera
con Caledonia al norte. Su superficie máxima estimada sería de unos 5
millones de km².
 Polibio fue uno de los primeros hombres en documentar la expansión de Roma
aún como República. Durante los casi tres siglos anteriores al gobierno del
primer emperador, César Augusto, Roma había adquirido mediante numerosos
conflictos bélicos grandes extensiones de territorio que fueron divididas en
provincias gobernadas directamente por propretores y procónsules, elegidos
anualmente por sorteo entre los senadores que habían sido pretores o
cónsules el año anterior.
Durante la etapa republicana de Roma su principal competidora fue la ciudad
púnica de Cartago, cuya expansión por la cuenca sur y oeste del Mediterráneo
occidental rivalizaba con la de Roma y que tras las tres guerras púnicas se
convirtió en la primera gran víctima de la República. Las guerras
púnicas llevaron a Roma a salir de sus fronteras naturales en Italia y a adquirir
poco a poco nuevos dominios que debía administrar,
como Sicilia, Cerdeña, Córcega, Hispania, Iliria, etc.
Los dominios de Roma se hicieron tan extensos que pronto fueron difícilmente
gobernables por un Senado incapaz de moverse de la capital ni de tomar
decisiones con rapidez. Asimismo, un ejército creciente reveló la importancia
que tenía poseer la autoridad sobre las tropas para obtener réditos políticos.
Así fue como surgieron personajes ambiciosos cuyo objetivo principal era el
poder. Este fue el caso de Julio César, quien no solo amplió los dominios de
Roma conquistando la Galia, sino que desafió la autoridad del Senado romano.
El Imperio romano como sistema político surgió tras las guerras civiles que
siguieron a la muerte de Julio César, en los momentos finales de la República
romana. Tras la guerra civil que lo enfrentó a Pompeyo y al Senado, César se
había erigido en mandatario absoluto de Roma y se había hecho
nombrar Dictator perpetuus (dictador vitalicio). Tal osadía no agradó a los
miembros más conservadores del Senado romano, que conspiraron contra él y
lo asesinaron durante los Idus de marzo dentro del propio Senado, lo que
suponía el restablecimiento de la República, cuyo retorno, sin embargo, sería
efímero. El precedente no pasó inadvertido para el joven hijo adoptivo de
César, Octavio, quien se convirtió años más tarde en el primer emperador de
Roma, tras derrotar en el campo de batalla, primero a los asesinos de César, y
más tarde a su antiguo aliado, Marco Antonio, unido a la reina Cleopatra VII de
Egipto en una ambiciosa alianza para conquistar Roma.
.
El legado de Roma fue inmenso; tanto es así que varios fueron los intentos de
restauración del Imperio, al menos en su denominación. Destaca el intento de
recuperar occidente de Justiniano I, por medio de sus
generales Narsés y Belisario, el de Carlomagno con el Imperio Carolingio o el
del Sacro Imperio Romano Germánico, sucesor de este último, pero ninguno
llegó jamás a reunificar todos los territorios del Mediterráneo como una vez
logró la Roma de tiempos clásicos.
Con el colapso del Imperio romano de Occidente finaliza oficialmente la Edad
Antigua dando inicio la Edad Media.
ORGANIZACIÓN ECONOMÍCA .-

1 aúreo de oro = 25
denarios
1 denario de plata =
4 sestercios
1 sestercio de latón 
= 4 ases
1 dupondius de
bronce = 2 ases
1 as de bronce =
4 cuadrantes

La economía del Imperio romano se basaba en una red de economías


regionales, en las que el Estado intervenía y regulaba el comercio para
asegurarse sus propios ingresos La expansión territorial permitió que se
reorganizara el uso de la tierra, lo que condujo a la producción de excedentes
agrícolas y una progresiva división del trabajo, particularmente en el norte de
África. Algunas ciudades se definían a sí mismas como los principales centros
regionales de una determinada industria o actividad comercial. La escala de los
edificios en las áreas urbanas indicaba una industria de la construcción
completamente desarrollada. Documentos en papiro demuestran métodos
de contabilidad complejos que sugieren elementos de racionalismo económico
en una economía altamente monetizada. Durante los primeros siglos del
Imperio, las redes de carreteras y transporte se expandieron significativamente,
uniendo rápidamente las economías regionales. El crecimiento económico,
aunque no es comparable al de las economías modernas, fue superior al de la
mayoría de sociedades previas a la industrialización.62
MONEDA Y BANCA .-
La economía del Imperio se monetizaba universalmente. La normalización del
dinero y las formas de pago impulsó la integración comercial y económica en
las provincias. Hasta el siglo IV, la unidad monetaria básica era el sestercio, 
aunque al comienzo de la dinastía severa también se usó el denario de plata,
que valía cuatro sestercios La moneda de circulación corriente de menor valor
era el , as de bronce, que valía un cuarto de sestercio. El lingote no se
consideraba moneda y se usaba solo en negocios en las regiones fronterizas.
Los romanos de los siglos I y II contaban las monedas en lugar de pesarlas, lo
que indica que el valor se atribuía según su valor fiduciario, y no el valor del
metal.
Roma no tenía banco central, por lo que la regulación del sistema bancario era
mínima. Las reservas de los bancos de la Antigüedad clásica eran en general
inferiores a los depósitos totales de los clientes. La mayoría de los bancos
tenían solo una sucursal, aunque algunos de los más grandes tenían hasta
quince sucursales Un banquero comercial llamado argentarius recibía y
mantenía depósitos por un tiempo indefinido o plazo fijo, haciendo también
préstamos a terceros.  Un individuo con deuda podía utilizarla como forma de
pago, transfiriéndola a otra parte y sin ningún cambio de dinero. El sistema
bancario estaba presente en todas las regiones y permitía cambiar grandes
cantidades de dinero en cualquier lugar sin necesidad de transferencias físicas
de moneda, lo que reducía el riesgo asociado al transporte. Se tiene
conocimiento de al menos una crisis crediticia en el Imperio, ocurrida en el año
33, durante la cual el gobierno central intervino en el mercado con un rescate
financiero (mensae) de 100 millones de sestercios.67
El gobierno no pidió dinero prestado: en ausencia de deuda pública,
el déficit tuvo que ser financiado con reservas monetarias. 69 Durante la crisis
del siglo III, la disminución del comercio de larga distancia, la interrupción de la
minería y la transferencia de valores al exterior por parte de los invasores
redujeron significativamente el dinero en circulación. 7067 Los emperadores de
las dinastías antonina y severa devaluaron drásticamente la moneda,
particularmente el denario, debido a la presión con el pago a los militares. 71 La
repentina inflación durante el reinado de Comodo (r. 180-192) puso en riesgo el
mercado crediticio. Aunque la moneda romana siempre tuvo un valor fiduciario,
durante el reinado de Aureliano (r. 270-275) la crisis económica alcanzó su
punto máximo, provocando que los banqueros perdieran la confianza en el
dinero emitido por el gobierno central. Diocleciano (r. 286-305) implementó
varias reformas monetarias e introdujo el sólido de oro, pero el mercado
crediticio nunca recuperó su fuerza anterior.
APORTES A LA HUMANIDAD .-
Transporte y comunicaciones
Calzada romana en la entrada de la ciudad de Gerasa.
Los romanos favorecían el transporte de mercancías por mar o río, ya que el
transporte por tierra era más difícil . Los veleros romanos navegaban no solo
por el Mediterráneo (Mare Nostrum), sino también por todos los principales ríos
del imperio, incluido el Guadalquivir, el Ebro, el Ródano, el Rin, el Tíber y
el Nilo.
El transporte terrestre hizo uso de una compleja y avanzada red de calzada
romana. Los impuestos en especie pagados por las comunidades locales
requerían viajes frecuentes de funcionarios administrativos, animales y
vehículos de curso público (el sistema estatal de correos y transporte
implementado por Augusto). La primera vía , la Vía Apia, fue creada en
el 312 a. C. por Apio Claudio el Ciego, para unir Roma con la ciudad de Capua.
A medida que el imperio se expandía, la administración adaptó el mismo
esquema en provincias. En su apogeo, la red de carreteras romanas tenía
hasta 400 000 km de carreteras, 80 500 de las cuales estaban pavimentadas.
Cada siete o doce millas romanas había una mansio, una estación de servicio
para los funcionarios públicos mantenida por el Estado. Entre los empleados de
estos puestos se encontraban choferes, secretarias, herreros, veterinarios y
algunos militares. La distancia entre las mansiones se determinaba por la
distancia que podía recorrer un carro en el transcurso de un día y algunas
podían crecer hasta convertirse en pequeñas ciudades o almacenes
comerciales. Además de la mansiones, algunas tabernas ofrecían alojamiento,
alimentación animal y, eventualmente, servicios de prostitución. Los animales
de transporte más comunes eran las mulas, que viajaban a una velocidad de
cuatro millas por hora. Para tener una idea del tiempo de comunicación, un
mensajero necesitaba nueve días para viaje entre Roma y Mogontiacum, en la
provincia de Germania Superior.81 Los caminos estaban marcados
por miliarios colocados en intervalos de unos mil pasos (1480 metros). 82
Arte
Cúpula del Panteón de Agripa, la cúpula de hormigón sin armar más grande del
mundo. La invención del opus caementicium permitió a los romanos introducir
arcos, bóvedas y cúpulas de dimensiones sin precedentes y de gran
durabilidad.
Roma construyó una sociedad que daba gran importancia a las artes en sus
más variadas manifestaciones. Además de jugar un papel decorativo, las artes
también tenían un papel educativo y socializador en un contexto donde una
gran parte de la población era analfabeta o con poco acceso a la literatura más
sofisticada. El arte consagró ideologías, narró hechos históricos, integró
festividades cívicas y rituales religiosos y glorificó a personajes eminentes,
actuando de hecho como una lengua franca a la que tenía acceso toda la
población. El arte romano se desarrolló inicialmente a partir de la tradición
etrusca y posteriormente absorbió las referencias de la cultura griega, haciendo
de su arte en gran medida una extensión y variación de esta, y convirtiendo a
los romanos en el principales preservadores del legado artístico griego para la
posteridad.
Si bien los romanos adaptaron diversos modelos extranjeros, especialmente
provenientes de Grecia, estos fueron capaces de desarrollar una tradición que
al final del período republicano y durante todo el período imperial adquirió
características innovadoras y originales, ganando una significativa
independencia de la herencia recibida y formando una identidad propia. Aun
así, en el Imperio hubo varias fases de oscilación entre tendencias más
helenísticas e imitativas y otras más progresistas y creativas. Esto, sumado a
las múltiples variaciones regionales, la incorporación de influencias orientales,
los importantes cambios surgidos de la cristianización y el fuerte y permanente
amor romano por el eclecticismo, hacen del arte de la Roma imperial un
complejo mosaico de tendencias, a veces bastante divergente, siendo
imposible caracterizarlo como un bloque estético monolítico. 380381 A pesar del
enorme valor otorgado a las obras de arte, los artistas tenían un estatus social
más bajo, incluso si se trataban de individuos reconocidos. Los romanos y
griegos veían a los artistas y artesanos como trabajadores manuales, aunque
al mismo tiempo se reconocía la pericia necesaria para producir arte de
calidad, incluso considerándose una ofrenda divina. 382
Arquitectura[editar]
Artículo principal: Arquitectura de la Antigua Roma
Puente del Gard, un acueducto romano en Francia
Los arcos de medio punto, las bóvedas y las cúpulas son características de la
arquitectura romana que la distinguen de la arquitectura griega. La introducción
de estos elementos, de una dimensión sin precedentes en la historia, fue
posible gracias a la invención del hormigón. Este material, conocido por los
romanos como opus caementicium, se hizo a partir de cenizas volcánicas
descubiertas en las cercanías del Vesubio, llamadas puzolanas, que se
trituraron y se mezclaron con óxido de calcio.383 El núcleo de hormigón de los
edificios generalmente estaba revestido con estuco, ladrillo, piedra o mármol.
En algunos casos, se agregaron esculturas doradas para crear un efecto de
poder y prosperidad deslumbrante y ostentoso. La calidad constructiva
introducida en la arquitectura romana aumentó significativamente su
durabilidad. Muchos de los edificios romanos todavía están intactos y en uso, la
mayoría de los cuales son edificios convertidos en iglesias durante la era
cristiana. Sin embargo, en muchas de las ruinas se ha eliminado el
revestimiento de mármol, como es el caso de la Basílica de Constantino.384
Las cúpulas eran una presencia común en balnearios, villas, palacios y tumbas.
Las salas de audiencias de muchos de los palacios imperiales estaban
coronadas por cúpulas y también eran muy comunes en los pabellones de los
jardines.385 Generalmente asumían una forma hemisférica y estaban total o
parcialmente ocultas al exterior, estando en muchos casos rematadas por
un óculo y, en ocasiones, cubiertas por un techo cónico o poligonal. 386 Con el
colapso del Imperio occidental, la construcción abovedada declinó. Sin
embargo, este estilo continuó vigente en Oriente a través de la arquitectura
bizantina.387
Fue durante los gobiernos de Trajano (r. 98-117) y Adriano (r. 117-138) que el
imperio alcanzó su máximo apogeo tanto territorial como artístico, habiendo
comenzado un inmenso programa para la construcción de monumentos,
asambleas, jardines, acueductos, balnearios, palacios, pabellones, sarcófagos
y templos.388 La introducción del arco, la cúpula y el uso de hormigón permitió
la construcción de grandes techos abovedados en espacios públicos y
complejos como balnearios o basílicas. Entre los ejemplos más notables de
cúpulas se encuentran el Panteón de Agripa, las Termas de Diocleciano y
las Termas de Caracalla. El Panteón, dedicado a todos los dioses planetarios,
es el templo de la antigüedad mejor conservado del mundo y aún conserva
intacta su cúpula.384 Los últimos grandes programas de construcción en Roma
tuvieron lugar durante el reinado de Constantino I (r. 306-337), incluido el Arco
de Constantino cerca del Coliseo de Roma.389
Pintura[editar]

Fresco de Pompeya, c. 20-30. La pintura a menudo demuestra el orgullo que


existe en la alfabetización, pues las personas se solían retratar junto a objetos
asociados con la lectura y la escritura.
La pintura fue una de las artes más populares del Imperio romano, pero se
sabe poco de ella debido a que la gran mayoría de registros se han perdido con
el tiempo. Gran parte de lo que se conoce sobre la pintura romana se basa en
la decoración interior de residencias privadas, en particular los frescos que se
han conservado en Pompeya. Esta ciudad, descubierta en el siglo XVIII, fue
sepultada bajo la erupción del Vesubio en 79, lo que permitió conservarla
relativamente intacta. A partir de este conjunto de obras —que, aunque rico y
variado, es una fracción ínfima de lo producido y abarca un período muy
limitado— se estableció una cronología de estilos que se ha aplicado a todo el
legado pictórico imperial. Según esta propuesta, la pintura romana evolucionó a
partir de ejemplos griegos de decoración mural puramente geométrica,
incorporando progresivamente elementos figurativos en escenarios
arquitectónicos o paisajísticos, utilizando a menudo modelos griegos o citando
obras griegas famosas en reinterpretaciones creativas, llegando a presentar en
algunos ejemplos una gran sofisticación y suntuosidad. Además de frisos
decorativos y paneles con motivos geométricos y vegetales, la pintura mural
representa escenas de la mitología, los paisaje y jardines, la recreación,
espectáculos, el trabajo y la vida cotidiana e incluso escenas eróticas. Las
aves, los animales y la vida marina a menudo se representan con especial
cuidado en relación con los detalles artísticos. 390391392
A través de registros literarios y escasos remanentes esparcidos por la
extensión del Imperio, se sabe que la pintura mural fue solo una de las
modalidades de pintura practicada, con registros de obras realizadas sobre
tela, metal, piedra, marfil y otros soportes, utilizando pigmentos variados de
origen vegetal y mineral.393 Los retratos pintados sobre tablas de madera y
planchas de metal fueron muy apreciados, especialmente en contextos
funerarios, pero también como una glorificación de personajes ilustres,
presentados en procesiones que reafirmaban el prestigio de las familias
patricias y otras festividades públicas. Los ciudadanos comunes también
podían tener sus rostros inmortalizados, ya que la técnica tenía un costo
relativamente bajo. Sobrevivió a un buen conjunto de retratos funerarios
en encáustica en Egipto, mostrando una técnica exquisita y un gran realismo. 394
Los retratos de Fayún son un indicador de por qué las fuentes literarias
antiguas se maravillaban del realismo de las representaciones artísticas. 395 Otro
género popular fue el de las pinturas triunfantes, ejecutadas en grandes
paneles que representan batallas y mapas de campañas militares, presentadas
en las procesiones de los generales victoriosos. 396 También cabe destacar la
producción de manuscritos iluminados, de las que se conservan muy pocas
copias.397
Gran parte de la escultura del retrato habría sido pintada, aunque la pintura
rara vez ha sobrevivido a lo largo de los siglos. A partir del siglo II en adelante,
con la expansión del cristianismo, surgió un tema completamente nuevo
relacionado con esta religión, el arte paleocristiano, al mismo tiempo que se
observó una creciente simplificación y geometrización de las formas. Sin
embargo, aún quedan algunos refinados ejemplos de pintura tardío-imperial
que remiten a la tradición clásica, principalmente en Dura Europos, con temas
hebreos, y en Luxor, con temas cristianos.398399
Escultura[editar]

Detalle de un busto de Filipo el Árabe (r. 244-249) en el Museo Chiaramonti.


La escultura fue una de las expresiones artísticas más importantes de los
romanos y estuvo presente en todos los aspectos de su vida, desde el
doméstico al público, desde el religioso al civil y militar, en grandes y pequeñas
dimensiones, en piedra, metal o cerámica, con propósitos decorativos,
conmemorativos, celebrativos o educativos. La parte más importante de la
escultura imperial es figurativa, pero también se aplica a objetos utilitarios. 375400
Era común aplicar una pintura decorativa a la superficie de las esculturas. 401
La tradición griega siguió siendo un referente central a lo largo de toda la
trayectoria del arte escultórico en Roma, pero, al igual que con otras
expresiones artísticas, se introdujeron varias innovaciones propias. Esto fue
especialmente visible en el retrato, que desde la República había gozado de
especial estima, con ejemplos de intensa expresividad y gran realismo, y en la
decoración de los grandes monumentos públicos, como los arcos de triunfo,
el Ara Pacis y la Columna de Trajano, donde se desarrolló un estilo narrativo
que se configuró como típicamente romano.402403404
En todo el Imperio, las influencias orientales provocaron un lento pero creciente
alejamiento del canon griego hacia una simplificación formal que sentó las
bases de la escultura bizantina, paleocristiana y medieval. Aun así, fueron
varias las fases en las que se recuperaron arcaísmos clásicos, como en la
época de Augusto, cuando se exaltaban elementos que reforzaban la
continuidad con un pasado prestigioso, lo que al mismo tiempo servía para
crear una cohesión política y cultural. Con el auge del cristianismo, aparecieron
nuevos temas, pero la herencia clásica siguió ofreciendo modelos importantes
para la constitución de una iconografía renovada. 381377405
Durante el período de Augusto, los retratos utilizaron proporciones clásicas y
rasgos jóvenes, evolucionando luego hacia una combinación de realismo e
idealismo.406 Los retratos del período republicano demuestran un intenso
realismo, aunque a partir del siglo II a. C. fue adoptando progresivamente el
concepto de desnudez heroica, a menudo para el retrato de generales
conquistadores.407 La escultura imperial puede presentar un rostro adulto, a
veces envejecido, sobre un cuerpo joven desnudo o semidesnudo de perfecta
musculatura. De hecho, era común colocar bustos en un cuerpo creado para
otro propósito.408 Vestido con túnica o uniforme militar, el cuerpo comunica la
esfera de actividad, y no las características del retratado. 409 Las mujeres de la
familia imperial a menudo se representaban vestidas de manera similar a las
diosas o personificaciones divinas, como Pax.395
Los sarcófagos de mármol y piedra caliza son característicos del período
comprendido entre los siglos II y IV,410 de los cuales hay al menos 10 000
ejemplares supervivientes.411 Aunque las escenas mitológicas son aquellas
cuyo estudio es más profundo, 412 los relieves en sarcófagos son la fuente más
rica de iconografía romana,413 y pueden representar la ocupación en vida de los
muertos y escenas militares, entre otros temas. 414 El hábito de copiar y releer
modelos griegos fue esencial para preservar el legado de la escultura griega,
cuyos originales se perdieron en su mayoría. 405 Ya durante la Edad Moderna, la
producción romana se convertiría en una influencia importante para los
movimientos artísticos del Renacimiento, Barroco y Neoclasicismo. 415
Artes decorativas[editar]
Detalle de suelo de mosaico en opus tessellatum, que representa a Medusa. El
Pireo, Grecia, siglo II.
Entre los objetos de arte decorativo más comunes, dirigidos a consumidores
adinerados, se encuentran piezas de cerámica, recipientes y utensilios de plata
y bronce y artefactos de vidrio. La producción de cerámica de diversas
calidades y las industrias de la metalurgia y el vidrio desempeñaron un papel
económico importante en el comercio y el empleo. Las importaciones
estimularon nuevos centros de producción regionales, como el sur de la Galia,
que se convirtió en el principal productor de terra sigillata, cerámica de alta
calidad y uno de los principales artículos comercializados en Europa durante el
siglo primero.416 Los romanos también dominaron la técnica del soplado de
vidrio, que se originó en Siria durante el siglo I a. C.417418
Los mosaicos son una de las formas más perdurables del arte decorativo
romano y se pueden encontrar en las superficies de pisos, paredes, techos y
columnas en espacios públicos o privados. 419 Los mosaicos figurativos
comparten muchos de los temas con la pintura y, en algunos casos,
representan los mismos temas en composiciones casi idénticas. Aunque los
patrones geométricos y las escenas mitológicas son motivos recurrentes en
todo el imperio, también existen varias expresiones locales. En el norte de
África, una fuente de mosaicos particularmente rica, los temas preferidos en las
propiedades privadas fueron escenas de la vida cotidiana: caza, agricultura y
vida silvestre local.420 El maestro (pictor) dirigió un taller de mosaicos. La
técnica más común era el opus tessellatum, creado a partir de piezas uniformes
(tesela) de materiales como piedra y vidrio. Los mosaicos generalmente se
producían localmente, aunque a veces se producían y se vendían en paneles
prefabricados.421 El opus sectile era una técnica en la que la piedra lisa,
generalmente mármol de colores, se cortaba en formas precisas que formaban
patrones geométricos o figurativos. Esta técnica más compleja fue
particularmente valiosa y se hizo extremadamente popular durante el
siglo IV. 422
Artes escénicas[editar]
Además de la tradición griega del teatro de máscaras (imagen) exclusivamente
masculino, el género más popular en el imperio era el mimo, que mezclaba un
guion escrito con improvisación, humor, sátira política, escenas de acción y
sexo, acrobacias y malabares.
La música y la danza han sido manifestaciones artísticas populares desde la
fundación, probablemente desarrolladas a partir de la imitación de los
precursores griegos. Lo poco que se conoce de él se deriva de fuentes
bibliográficas e iconográficas.423424 La presencia de música era común en
prácticamente todos los eventos sociales y en las ceremonias fúnebres. En los
sacrificios se acostumbraba tocar una aulós (tibia), un instrumento de
viento cuyo sonido se creía que ahuyentaba las malas influencias. 425426 Se creía
que la música reflejaba el orden del cosmos, estando asociada con las
matemáticas y el conocimiento. 427 Entre los instrumentos musicales más
comunes se encontraban la madera, los metales, los instrumentos de percusión
y las cuerdas, como la cítara griega.428 El cornu, un instrumento de viento de
metal que se curvaba a lo largo del cuerpo del músico, se usaba en desfiles y
señales militares.429 El órgano hidráulico llamado hydraulis fue una de las
hazañas musicales y técnicas más significativas de la antigüedad, después de
los combates de gladiadores, los eventos en los anfiteatros y las
representaciones teatrales.430
El teatro de máscaras griego, exclusivamente masculino, se mantuvo durante
el Imperio romano, llevando a escena las tragedias y comedias de la literatura
en latín.431432 Sin embargo, la forma más popular de teatro fue el mimo, un
género caracterizado por obras que mezclaban un guion escrito con
improvisación y otros elementos como secuencias de acción, sátira, entre
otras. También se intercalaron con números de baile, acrobacias,
malabares, funambulismo, estriptis e incluso osos bailarines.433434435 El mimo se
realizó sin máscaras y promovió el realismo estilístico en el escenario. Los
roles femeninos fueron interpretados por mujeres, no por hombres
disfrazados.436 Este género estaba relacionado con otro
llamado pantomima (pantomimus), una forma primitiva de ballet narrativo,
música instrumental y libreto musical, a menudo sobre temas mitológicos que
podían ser trágicos o cómicos.437438
Aunque algunas formas de danza no fueron aceptadas en el imperio y fueron
vistas como extranjeras o inhumanas, la danza se incorporó a los rituales
religiosos de la Roma arcaica.439 Las danzas eran una característica de
la religión mistérica, en particular el culto a Cibeles practicado por los
sacerdotes eunucos 440 y el culto a Isis. En el aspecto secular, los bailarines
de Siria y Cádiz fueron extremadamente populares.441 Como los gladiadores,
los animadores eran infames a los ojos de la ley y tenían un estatus poco
superior en relación con los esclavos, aunque técnicamente eran libres. Sin
embargo, las grandes estrellas podrían disfrutar de una riqueza y un estatus
considerables, permitiéndoles relacionarse con las clases altas e incluso con
los emperadores, a menudo sexualmente. 442 Los artistas se apoyaron
mutuamente mediante la formación de gremios.443 El teatro y la danza fueron a
menudo condenados por grupos cristianos durante el imperio tardío. 423 Aquellos
cristianos que integraron la danza o la música en sus prácticas religiosas
fueron considerados como paganos por los Padres de la Iglesia.444
Literatura[editar]

Escena de la tragedia Andrómaca de Eurípides (siglo V a. C.) en la Casa de


Marco Lucrecio, en Pompeya.
En el canon occidental, la literatura durante el período de Augusto y el final de
la República es vista como la edad de oro de la literatura latina, incorporando
los ideales clásicos de la unidad del conjunto, la proporción entre las partes y la
articulación cuidadosa de la composición. 445 A este periodo
pertenecen Virgílio, Horacio y Ovidio, considerados como algunos de los
poetas latinos clásicos más influyentes de la historia. Virgilio escribió la Eneida,
una epopeya nacional para Roma de la misma manera que las epopeyas
de Homero lo fueron para Grecia. Horacio perfeccionó el uso de
la métrica griega en la poesía latina. La poesía erótica de Ovidio fue muy
popular, aunque víctima del programa moral de Augusto, que lo llevó al
exilio. Las Metamorfosis de Ovidio es un poema continuo de quince libros, que
abarca temas de la mitología grecorromana y el culto imperial hacia Julio
César. Las versiones de Ovidio de los mitos griegos se han convertido en una
de las principales fuentes de la mitología clásica. Su influencia fue
particularmente influyente en la literatura medieval de los siglos XII y XIII, que
fueron se denominados en su conjunto como la «Edad de Ovidio». 446
El período comprendido entre mediados del siglo I y mediados del siglo II se
denomina convencionalmente la «Edad de Plata» de la literatura latina. Durante
el gobierno de Nerón, los escritores reaccionaron contra el agustinianismo. 447
Los tres escritores principales de este periodo fueron el filósofo y
dramaturgo Séneca, su sobrino Lucano, que transformó la Segunda Guerra
Civil en la épica Farsalia; y el novelista Petrónio, autor de El Satiricón. Todos se
suicidaron después de perder el favor del emperador. Séneca y Lucano eran
de Hispania, al igual que el epigrama Marcial.448 Por otro lado, la obra del
poeta Estacio ejercería una enorme influencia en la literatura del
Renacimiento. 449
Los libros eran caros, ya que cada copia tenía que ser escrita a mano en un
rollo de papiro por escribas especializados.450 La producción de libros
comerciales se inició durante el período final de la República. En el
siglo I algunos barrios de Roma eran conocidos por sus librerías (tabernae
librariae), que también existían en muchas ciudades de las provincias
occidentales.451 La calidad de las ediciones varió significativamente y algunos
autores se quejaron de copias llenas de errores, plagio o falsificaciones, ya que
no existían los derechos de autor.452 El códice todavía era una novedad en el
siglo I, pero a fines del siglo III ya había reemplazado por el volumen453454 y era
el medio más común entre los libros de contenido cristiano. 455 Sin embargo,
mientras que el formato del libro enfatizaba la continuidad del texto,
el códice fomentaba la lectura parcial y las interpretaciones fragmentadas. 456
Aunque los Padres de la Iglesia fueron educados, consideraban que la
literatura clásica era peligrosa e inútil, por lo que a menudo la reinterpretaban
mediante metáforas y alegorías. Juliano, el único emperador que rechazó el
cristianismo después de Constantino I, prohibió a los cristianos enseñar el plan
de estudios clásico con el argumento de que corrompían a los jóvenes. 457

APORTES AL DERECHO
El Derecho Romano es el nombre que damos al conjunto de normas que
rigieron la vida de la Antigua Roma durante los catorce siglos que el Imperio se
mantuvo en pie. En este post analizamos en qué consiste el Derecho
Romano, contando brevemente su historia y fundamentos, para entender la
importancia que tiene hoy en día.
En la actualidad, entendemos por Derecho Romano el ordenamiento jurídico
que reguló las actividades de los ciudadanos del Imperio, desde su
fundación —en el año 753 a. C.— hasta su caída en el siglo V d.C., siendo un
cuerpo legal vivo que se adaptó para cubrir las necesidades sociales de cada
momento histórico.
El compendio de normas de la Antigua Roma siguió vigente hasta la caída del
Imperio bizantino, en el año 1453, pero sus fundamentos se han mantenido
vivos a lo largo de los últimos siglos. Primero, a través de su inclusión en
los textos jurídicos germánicos y, después, como parte del ius commune y de
los diversos derechos nacionales, sirviendo de base no solo para el desarrollo
de la legislación civil de gran parte de Europa y de toda América Latina, sino
también para el desarrollo de múltiples instituciones y principios de derecho
público como la separación de poderes, la regulación de los bienes públicos,
crímenes, la organización administrativa, la materia urbanística o el sistema
impositivo, entre otros.
 
Las bases del Derecho Romano
Los más de mil años de legislación y formas de entender la ley del Imperio
romano abarcan desde el primer código de leyes de la Antigüedad, la Ley de
las XII Tablas, hasta la compilación jurídica que realizó el emperador
Justiniano en el siglo VI d.C., conocida como Corpus Iuris Civilis.
Para construir el ordenamiento jurídico que forma el Derecho Romano se tomó
como base la costumbre, es decir, los actos socialmente aceptados y que a
través de la repetición quedaban validados como una forma de actuar
legítima para responder a una necesidad jurídica.
Por tanto, los romanos regulaban tanto la esfera pública del ciudadano —su
relación con el Estado—, como la privada —entre los propios ciudadanos—,
apoyándose en las soluciones similares que habían resuelto de forma exitosa:
conflictos de propiedad, compraventas viciadas, adquisición por posesión
continuada en el tiempo, hurtos, delitos violentos… Situaciones que hoy en día
han quedado reflejadas en nuestro ordenamiento en el Código Civil, Código
Penal y en el Código de Comercio, entre otras normas que constituyen la
base del sistema jurídico.
 

 
Pero además de la costumbre, el Derecho Romano tenía otras fuentes: las
decisiones que tomaba el Senado —como representante del pueblo— sobre
las normas que debían regir a los ciudadanos; los pronunciamientos de los
magistrados romanos; las leyes aprobadas por los ciudadanos en los comicios;
los plebiscitos, que es la denominación de las decisiones que tomaba la plebe
romana en sus asambleas; los iura u opiniones de los jurisconsultos; y, a partir
del Principado, las ‘constituciones imperiales’ o normas que emanaban de los
propios emperadores.
Estas decisiones, tomadas por los distintos órganos en que se organizaba la
sociedad romana, sirvieron para dar forma a un cuerpo legal escrito que
complementaba las normas no escritas, un ordenamiento que establecía los
derechos y libertades de los ciudadanos y la forma de resolver los conflictos o
de castigar los incumplimientos.
A pesar de ser una legislación tan antigua, su influencia en diferentes
factores sociales, políticos y económicos ha trascendido en el tiempo. Esto
se debe a que los romanos supieron elaborar un cuerpo legislativo sencillo,
capaz de dar respuesta a los conflictos que surgían entre los ciudadanos de la
manera más simple, sin buscar grandes formulaciones teóricas, aunque con un
espíritu formalista muy sólido, tanto en la interpretación de su derecho como en
su aplicación, buscando la solución más justa a cada caso concreto y con
una enorme capacidad de adaptación a los cambios y necesidades imperantes
en cada momento en la sociedad.
De forma simplificada, el Derecho Romano distinguía entre varias formas de
comprender lo que era justo conforme a derecho:
– Ius: normas creadas por el hombre
– Iniuria: lo contrario a esas normas
– Fas: voluntad divina
– Nefas: lo contrario a la voluntad divina
 
Su ordenamiento distinguía también entre:
– Derecho público, que era la parte del ordenamiento jurídico que regulaba la
acción del Estado en áreas del interés general y velaba por su relación con el
ciudadano u otras comunidades independientes.
– Derecho privado, que era la esfera jurídica que regulaba las relaciones entre
los ciudadanos y sus intereses particulares.
 
Según el jurista Celso, el “derecho” era el arte de lo bueno y lo equitativo. Y
de acuerdo con Ulpiano, la justicia era definida como la voluntad constante de
dar a cada uno su derecho, apoyándose el Derecho Romano en tres
preceptos:
– Honeste vivere o ‘vivir honestamente’.
– Alterum non laedere o ‘no dañar al otro’, porque quien ocasiona un daño a
otra persona lesiona sus derechos y queda expuesto a sanción.
– Suum cuique tribuere o ‘dar a cada cual lo suyo’, es decir, cumplir con las
leyes, los contratos, pactos y reconocer el derecho ajeno.
 

 
Sin embargo, una de las diferencias con la concepción actual del Derecho, es
que en el antiguo ordenamiento romano no todo ser humano era sujeto de
derechos y, por tanto, no reconocía derechos a toda la sociedad, dejando
fuera a los esclavos, que eran considerados cosas. Por su parte, se concedió a
los latinos una especie de semiciudadanía, pudiendo algunos de ellos llegar a
convertirse en ciudadanos romanos. En cambio, los derechos del resto de
extranjeros o peregrinos, dependían del tratado que su comunidad hubiera
firmado con Roma. Se concedió a algunos la posibilidad de realizar actos
jurídicos válidos regulados por el derecho de gentes. Pero se podía dar muerte
a los que se rendían sin condiciones.
Asimismo, no todos los ciudadanos romanos tuvieron los mismos derechos
sufriendo algunas importantes limitaciones por razón de sexo, condición
social, profesión o religión, entre otras causas. Por ejemplo, las mujeres no
pudieron formar parte del ejército o de las asambleas, careciendo de derechos
políticos y para actuar en el tráfico jurídico necesitaron durante muchos siglos
la asistencia de un tutor.
 
El Derecho Romano en la actualidad
Ni la caída del Imperio romano de Occidente, a finales del siglo V, ni del de
Oriente, en el siglo XV, supuso la pérdida de vigencia del Derecho Romano.
Los Estados europeos, a lo largo de los siglos posteriores, siguieron aplicando
sus preceptos y recuperaron su estudio e interpretación para adaptarlo a sus
circunstancias contemporáneas.
No es hasta los siglos XVIII y XIX cuando países como Francia, Alemania o
España impulsan el movimiento codificador de sus propios ordenamientos y
dan forma a nuevos cuerpos legislativos. En el caso de España, el Código
de Comercio vigente se promulgó en 1885 y el Código Civil en 1889. Ambos
textos han sido modificados en estos más de 130 años para adaptarse al
cambio social español, pero la base y la simplicidad de algunos preceptos
ha permanecido en el tiempo.
 

 
En la actualidad, el plan de estudios del Grado en Derecho cuenta con una
asignatura específica de Derecho Romano que, al estudiarse al principio de la
carrera, ayuda al alumno a comprender mejor instituciones jurídicas que se
desarrollaron hace siglos y que siguen plenamente vigentes: como lo son el
concepto de persona física, capacidad jurídica y de obrar, obligación, derecho
real, negocio jurídico, garantía, proceso, sucesión hereditaria o de propiedad
privada, por ejemplo, contribuyendo a una interpretación más precisa de su
regulación actual y permitiendo tanto completar como corregir sus lagunas.
El estudio del Derecho Romano aporta al futuro abogado una visión global de
un sistema jurídico y la lógica que lo estructura, razón por la que ha servido
de base a lo largo de siglos para el desarrollo de los cuerpos jurídicos de
muchos de los Estados actuales.
Títulos que te pueden inter
Bajo el Imperio y hasta la muerte de Alejandro Severo la costumbre continua
siendo una fuente inagotable del derecho no escrito. Los jurisconsultos de este
periodo atestiguan su autoridad. En cuanto al derecho escrito, el cambio en la
forma de gobierno trae consigo modificaciones en el ejercicio del poder
legislativo.
 
En los comienzos del Imperio, los emperadores mantuvieron en apariencia las
antiguas formas republicanas y las leyes se continuaron votando en los
comicios por tribus –donde todo el pueblo estaba reunido-, después de haber
sometido los proyectos al senado.
 
Pero a partir del año 747, los tribunos, no propusieron más las leyes. El
Emperador investido de un gran poder, esto es, la potestad tribunicia, les retiro
este derecho.
 
Bajo el Imperio del Emperador Tiberio los comicios pierden el poder de elegir
magistrados para dárselo al Senado y poco a poco bajo los otros emperadores,
los comicios dejaron de reunirse sin que se les haya suprimido expresamente
las funciones. El desuso se explica, sobre todo, por la extensión dada al
derecho de ciudad. Era difícil hacer votar la ley a todos los ciudadanos que
tenían derecho de sufragio en Roma y en Italia entera; de hecho, los comicios
se redujeron a una débil minoría.
 
Además los emperadores hicieron directamente la ley. Los senadoconsultos y
las constituciones imperiales suceden, por consiguiente, en este período, a
las leyes y a los plebiscitos; de otra parte, el edicto de los magistrados y las
respuestas de los prudentes llegaron a hacerse, a partir del Emperador
Adriano, fuentes del derecho civil. 

También podría gustarte