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¡QUE VIVA EL TIEMPO ESPECIAL!

Por: Alina María Ali Ramírez


Psicóloga
Esp. Salud Mental del niño y el adolescente
Diplomada en Psicología Clínica Humanista Existencial
Educadora de familias en Disciplina Positiva

Mamá: ¿Hijo me acompañas a comprar unas cositas, y pasamos nuestro tiempo especial?

Hijo: ¡¡Hay mami, pero eso no es un tiempo especial, porque tú eres la que va a ir a comprar!!

Mamá: ¡También puede ser un tiempo especial acompañar a la mamá a hacer algo que
necesita!

Hijo: ¡No, mami eso no es un tiempo especial!

Interconsulta a una amiga especialista: ¿Vos no crees que con el tema del tiempo especial
los niños se van volviendo egoístas?, ¿Por qué no hacer también algo que la mamá quiera?

Respuesta especialista: ¡El niño tiene toda la razón! Es que el tiempo especial es algo
planeado entre los dos y debe ser muy especial para los dos. ¡Hacer vueltas de la mamá es
una tortura ¡

Resultado: Replanteé mi sentimiento, mi pensamiento, recordé cuanto deseaba que


hiciéramos un picnic; preparé todo lo necesario, nos fuimos a un parque, hicimos un picnic,
jugamos mucho, y nuestro vínculo afectivo se fortaleció grandemente.
¿CÓMO LOGRAR UN TIEMPO ESPECIAL CON LOS HIJOS?

 Tengamos claro que un tiempo especial es un momento para compartir haciendo


actividades que nos conectan a ambos desde la tranquilidad, el ocio, la diversión y el
entretenimiento.

 Es diferente del tiempo ordinario en el que realizamos actividades de la cotidianidad.

 No necesita ser extenso, pero sí que sea frecuente, como la lectura de un cuento, un
dibujo, o conversar antes de dormir.

 Podemos hacer juntos una lista de actividades que disfrutamos, algunas con costo,
otras no.

 Dejamos la lista en un lugar visible para irle colocando más actividades cuando nos
acordemos y por turnos vamos eligiendo la actividad del día.

 Este tiempo especial no debe ser interrumpido por nada, ni nadie.

 Desconectémonos del celular.

 Dispongamos de este tiempo con amor genuino, compromiso y alegría.

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