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"Año del Bicentenario del Perú: 200 años de

Independencia"
UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DEL PERÚ

Facultad de Ingeniería - Humanidades

Escuela de Ingeniería Industrial - Sistemas

Escuela de Psicología

Curso: Problemas y desafíos en el Perú actual

Tema: Lectura obligatoria (El Oncenio del Presidente Leguia - Pease y Romero)

Integrantes:

 Domínguez Cisneros Elsa


 Fuentes Ipanaqué Humberto
 León Castillo Juan
 Ojeda Zúñiga José
 Pacheco Carranza Elizabeth Mariella

Docente: Cardoza Sernaque Lizbany Sujey

Ciclo: III

Chimbote, 04 de septiembre de 2021


Oncenio de Augusto B. Leguía

Augusto Leguía al ser educado en la burguesía de colegios británicos, se arraigó


a una mentalidad de la dependencia del capitalismo extranjero para que pueda alcanzar
el verdadero desarrollo nacional, llegó al poder a través de su inclusión a la sociedad
civil, al tener éxito trabajando en empresas extranjeras y la pertenencia a la burguesía
limeña. Sin embargo, en su gubernatura demostró ser una persona autoritaria, y despojó
la libertad de la república aristocrática, generando la fragmentación del partido civil, y
la desaprobación y desprecio de estos y de los partidos contrarios, a tal punto que al
culminar su primer mandato fue exiliado. A su retorno, obtuvo la aprobación popular, y
en base a ello llegó al poder, derrocando a los civilistas por medio de la disolución del
congreso.
En primer lugar, Leguía no solo buscaba anclar su Patria Nueva en el apoyo de
las clases medias, también pretendía hacerlo por lo menos de manera simbólica, con la
población indígena. Para lograrlo tomo ventaja de la popularidad del pensamiento
indigenista en el Perú en ese entonces. Además, siendo que las políticas de Leguía eran
populistas y conformistas tanto en los sectores populares y clases medias. Lo que
Augusto B. Leguía deseaba evidentemente era tener un pleno control sobre todos los
grupos sociales de nuestro Perú y así convertirse en un gobierno populista, el cual
ofrecía beneficios para calmar las protestas pero que al final no cambiaba la situación de
la población. Las clases sociales estaban divididas en tres grupos: clase alta, clase media
y clase baja. Pero la adhesión de Leguía a la corriente indigenista no partía de una
honesta preocupación por las mansas indígenas, sino más bien de su búsqueda por ganar
réditos políticos (Pease y Romeo, 2014). Por otro lado, para reprimir los nacientes
movimientos se le dio empleo a la creciente clase media en los nuevos organismos
administrativos del Estado (Remique, 1991). En segundo lugar, los estudiantes de la
Universidad Nacional de San Marcos habían apoyado la candidatura de Leguía en 1919,
y durante los primeros meses de su gobierno, el llamando maestro de las juventudes
busco devolverles el favor. Se aprobó una Ley de reforma universitaria que despedía a
los profesores incompetentes, también les otorgaba voz y boto al permitirles elegir un
miembro del consejo universitario (Planas,1994). En suma, las acciones que Leguía hizo
para mantener el apoyo temporal de los estudiantes, la clase media y el sector populista,
promoviendo obras y creando reformas para complacerles y mantenerlos en el
conformismo evitando confrontaciones entre las clases bajas e indígenas.
Durante el régimen de Leguía se dio “La expansión del Estado y la creciente
llegada del capital extranjero, principalmente estadounidense” (Pease & Romero, 2014,
p. 71). Por medio del capital norteamericano se inició el nuevo crecimiento económico,
las importaciones norteamericanas significaban el consumo interno, gracias a la
inversión en minería y petróleo, dando capital a la banca y dando un sistema de
préstamos, reembolso. “Lima fue priorizada y se vio beneficiada por la modernización”
(Pease & Romero, 2014, p. 72), por la infraestructura, obras públicas y las actividades
en las provincias. Por otro lado, el Estado acrecentó la deuda con los Estados Unidos, la
Patria Nueva sabía que la banca norteamericana atravesaba por un periodo de bonanza
dispuesta a garantizar las inversiones extranjera, los cuales hicieron que la deuda
externa con los Estados Unidos se elevase. En 1929, estalló la crisis económica mundial
fruto del colapso de la Bolsa de Valores de New York. Esto trajo consigo el desplome
de las economías latinoamericanas, incluida la peruana. Producto de esto: Las
exportaciones peruanas cayeron. Las inversiones de capitales norteamericanos dejaron
de llegar al país. Los créditos dejaron de llegar. A causa del desplome de la economía
norteamericana, se dio la caída del oncenio se produjo rápidamente como consecuencia
de la crisis mundial del capitalismo especialmente el norteamericano que se evidenció
con la quiebra de la bolsa de Valores de Nueva York. La caída de las acciones y la
liquidación de importantes transnacionales arrastró a sus sucursales en Latinoamérica.
No se vendían más nuestras materias primas o los precios cayeron estrepitosamente.
Generándose un desempleo inmenso: minería, migraciones a Lima, protestas,
actividades subversivas, etc.

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