Facultad de teologíaTBS027-Iniciación bíblica (2016)

Prueba 3
8 a 10 de junio 2016

Identificación: Velazco Berríos, Pedro Cristhian

I. Planteamiento de la pregunta

La Pontificia Comisión Bíblica, en su La interpretación de la Biblia en la Iglesia, plantea en sus

páginas finales lo siguiente:

A causa de su orientación especulativa y sistemática, la teología ha cedido con

frecuencia a la tentación de considerar la Biblia como un depósito de dicta
probantia, destinados a confirmar las tesis doctrinales. En nuestros días, los teólogos
dogmáticos han adquirido una más viva conciencia de la importancia del contexto
literario e histórico para la correcta interpretación de textos antiguos, y recurren
siempre más a la colaboración de los exégetas.

Como Palabra de Dios puesta por escrito, la Biblia tiene una riqueza de significado
que no puede ser completamente captado en una teología sistemática ni quedar
prisionero de ella. Una de las principales funciones de la Biblia es lanzar serios
desafíos a los sistemas teológicos y recordarles continuamente la existencia de
aspectos importantes de la divina revelación y de la realidad humana, que a veces
son olvidados o descuidados por la reflexión sistemática. La renovación de la
metodología exegética puede contribuir a esta toma de conciencia.

Luego del análisis minucioso de los aspectos involucrados en estos párrafos, tome postura frente a estos
párrafos. En su análisis, recurra, al menos, a los contenidos de la unidad actual del curso
(hermenéutica) y de otras unidades del curso si es necesario. En su respuesta refiera a ideas de al menos
3 textos de lectura obligatoria de la unidad (citando y/o parafraseándolos con actitud de objetividad).
Por último, en su análisis refiérase a alguna temática que ud considere como parte de los «serios
desafíos» que el estudio de la Escritura ha sido capaz de plantearle a sus propias concepciones
teológicas.

Redacte su respuesta teniendo en cuenta todos los elementos de manera armónica (cohesión),
proponiendo un texto bien legible (coherencia) entre 950 y 1050 palabras. Revise la argumentación, la
redacción y la ortografía del texto antes de considerarlo la versión definitiva.
II. Su respuesta

El texto citado: La interpretación de la Biblia en la Iglesia de la Pontificia Comisión Bíblica

realiza cuatro consideraciones sobre la relación entre exégesis bíblica y teología. El presente texto
analiza estas consideraciones; para ello recurre a los contenidos desarrollados en el curso y a las
lecturas complementarias que en él han sido propuestas.
En primer lugar, se afirma que en diversas oportunidades la teología ha considerado la Escritura
como un depósito de “dicta probantia” para confirmar sus tesis doctrinales. Esta afirmación tiene un
correlato en la historia del quehacer teológico; no obstante, según el magisterio de la Iglesia, el modo
de proceder es inverso. La Sagrada Escritura es el alma de la teología; debemos asumir, por tanto, que
toda doctrina teológica tiene su fundamento en la Biblia. Esta aseveración excluye la posibilidad de
instrumentalizar la Escritura, es decir, recurrir a los textos bíblicos para justificar y confirmar tesis
doctrinales. Este proceder podría avalar una concepción de la Escritura cerrada y paralizante que sólo
sirve para justificar estructuras determinadas. Es interesante resaltar que esta problemática se presenta
en otros ámbitos cristianos no católicos, como lo expresa Lanoir respecto al criterio de sola scriptura:

No hacen falta las tentaciones de reintroducir una autoridad (la del pastor o del estudioso
por ejemplo) que sea garante de la lectura, o las tentaciones de hacer de la inspiración de
las escrituras un dogma tan indiscutible que casi ya no parece útil leer lo que está escrito,
ya no hay lugar para las preguntas.1

En efecto, la tentación de considerar la Escritura como un medio probatorio para determinadas

doctrinas teológicas estará siempre presente. Por ello, es necesaria una exégesis que evite dicho
proceder a través de su estudio serio y científico que interprete y ofrezca los fundamentos correctos a
las doctrinas teológicas.

En segundo lugar, la consideración del contexto literario e histórico en la interpretación de los

textos es reciente. Sin embargo, el problema interpretativo es de antaño como lo expresa la Pontificia
Comisión Bíblica: “el problema de la interpretación de la Biblia no es una invención moderna, como a
veces se querría hacer creer. La Biblia misma testimonia que su interpretación presenta dificultades. Al
lado de textos límpidos, tiene también pasajes oscuros.” 2 Ante tal diversidad de textos en la Escritura,
es necesaria la colaboración de los exégetas para realizar una interpretación correcta, pues los textos no
fueron dictados por Dios; si no escritos por hombres que redactaron los textos a partir de la realidad en
que ellos vivieron; ellos usaron la lengua que hablaban. Los textos no solo responden a la realidad de
un contexto histórico determinado o a la iniciativa de autores específicos. Los textos son respuesta a la
iniciativa salvífica de la voluntad de Dios, que se expresa en la Escritura, pero que no se restringe a
ella. La salvación de Dios se expresa en la Escritura, pero no se agota en ella, la trasciende en la
historia que ella narra y que aún no ha acabado. Por otro lado, toda crítica debe tomar en cuenta la
lengua original en la que se escribe; así como, el contexto literario e histórico del texto bíblico para
realizar una interpretación adecuada.

1 Corine Lanoir, La Biblia: pan de un pueblo que construye su fe en el mundo (2007), 41

2 Pontificia Comisión Bíblica, La interpretación de la Biblia en la Iglesia (1993)
 En tercer lugar, es importante recalcar que la pluralidad, y por tanto riqueza, de los significados
en la Biblia no puede ser captada completamente en una teología sistemática. Esta pretensión de
absolutizar una determinada teología nos aleja de una comprensión narrativa del texto. En ese sentido,
es importante reconocer que actualmente es necesario complementar la teología sistemática con una
aproximación narrativa. Ya que este acercamiento narrativo permite salvaguardar la comprensión del
relato como primera categoría de comunicación teológica. Hoy nos encontramos ante el cambio de
paradigmas y los relatos han dejado de comprenderse como un subgénero de la comunicación. En la
actualidad reconocemos que contar un relato es un arte que necesita una técnica especial. 3 Lo que hoy
consideramos como narratología, o ciencia del relato es un gran complemento para complementar la
teología sistemática y evidenciar sus limitaciones.

Finalmente, la Biblia presenta serios desafíos a los sistemas teológicos y recuerda que en
ocasiones este ha descuidado y olvidado aspectos importantes de la revelación y de la realidad humana.
En ese sentido, la exégesis bíblica y la lectura popular de la Biblia aportan criterios e interpretaciones
nuevas que confrontan racional y sistemáticamente al estatuto teológico y a las estructuras que brotan
de él4. Un ejemplo de ello es la comprensión del estatuto social de las mujeres y su rol en las
comunidades cristianas, presente en las cartas paulinas. La Escritura nos invita a reflexionar lo que
debemos considerar permanente y lo que habría que relativizar. Aquello que deberíamos relativizar
corresponde estrictamente a lo relacionado con la cultura, la civilización y las categorías del tiempo de
la redacción paulina. En ocasiones, nuestras traducciones, estructuras eclesiales, dogmas y doctrinas
preestablecidas nos dificultan la lectura de los textos bíblicos desde nuevas perspectivas. Lanoir nos
presenta un caso concreto respecto al estatuto de la mujer y su de autoridad en la comunidad cristiana:

¿Por qué, por ejemplo, en Rm. 16,7 se quiere borrar la existencia de una mujer llamada
“apóstola” leyendo “Juniam” como una forma abreviada del nombre masculino
Junianus, mientras que Junia era un nombre de mujer conocido en aquel tiempo? ¿O
porque se presenta siempre a Febe como “diaconisa” o “servidora” en la Iglesia de
Cencrea, cuando este mismo término, aplicado a un varón, se entiende como el que está
a cargo de la comunidad, el pastor?5

Esta limitación, mencionada por Lanoir, es más evidente cuando la exégesis invita a mirar
críticamente y a repensar las estructuras eclesiásticas que brotan de sistemas teológicos previos a una
exégesis histórico-crítica. En el caso antes mencionado, la dificultad de reconocer el liderazgo de las
mujeres en las primeras comunidades cristianas y su derecho a ejercer cargos en las iglesias, de modo
muy diferente al que hoy conocemos, evidencia el serio desafío que plantea la Biblia, desde la exégesis,
a la teología sistemática y a las estructuras que de ella dimanan.

(Respuesta en: 1002 palabras)

3 Cfr. Daniel Marguerat, Conferencia: El análisis narrativo en el Nuevo Testamento (16 de octubre del 2015)
4 Cfr. Néstor Mínguez, Lectura Latinoamericana de la Biblia: Experiencias y desafíos (2001), 95
5 Corine Lanoir, La Biblia: pan de un pueblo que construye su fe en el mundo (2007), 42
III. Pauta de corrección

Criterio Logro alto (2) Logro medio (1) No logrado (0) Factor Parcial
Claridad conceptual. Buen 1.5 3/
manejo de los conceptos de la
unidad del curso.
Referencia pertinente a tres 1 2/
textos de lectura mínima de la
unidad.
Pertinencia y relevancia 1.5 3/
justificada sobre los desafíos
planteados.
Demuestra actitud de objetividad 1 2/
en el tratamiento de las
problemáticas e ideas que
aborda.
Redacción y ortografía. 0.5 1/
Subtotal 11/
Descuento (atraso o incumplimiento de extensión; 1 punto por día; 1 punto por
incumplimiento de extensión)
Total
Calificación (65% de exigencia; puntaje aprobatorio: 7,15).