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EL CAMINO

AMABLE
UNA GUÍA DE
A U TO 'A YU D A
PARA AQUELLOS
QUE CREEN EN
LOS ÁNGELES

T O M T. M O O R E
f £ ig h í üéxJmoloff p u b l i s h i n g
Derechos de A u to r © 2 0 0 6 por Tom T. Moore

Todos los Derechos Reservados.

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guna manera sin permiso previo por escrito del editor, excepto en
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camente ediciones electrónicas autorizadas, y de no participar ni
alentar ninguna piratería electrónica de materiales con derechos.
Es apreciado su apoyo a los derechos de autor.

Ilustración:
Walter Bruneel
www.iasos.com

ISBN: 978-1-62233-500-8
Edición Impresa ISBN: 978-1-89182-460-9
ACERCA DEL LIBRO

Una Guía de Auto-Ayuda


para Aquellos Que Creen en los Angeles

Descubre y fortalece tu conexión con tus ángeles guardianes.


Crea resultados benevolentes en cada área de tu vida.
Este libro de auto-ayuda te volverá a poner en contacto con
tus ángeles guardianes o te ayudará a fortalecer tus creencias
espirituales. Tendrás más diversión y menos estrés en tu vida. Te
asistirá para lograr cualquier meta que hayas establecido para ti
en tu vida. Te ayudará a manejar esos desafíos importantes que
todos experimentamos en la vida. Este libro incluso te inspirará
para aprender más sobre el mundo y el universo.
¿Cómo puedo prometer todos estos beneficios? Porque yo he
estado usando estos conceptos por más de diez años, y puedo
reportar el éxito desde el conocimiento directo y la experiencia.
Pero esta es una guía de auto-ayuda, eso significa que requiere
de una participación activa de tu parte. ¡Lo que vas a leer en este
libro es información única que nunca has visto antes! Este libro
es para personas de todas las religiones y creencias — el único
requisito es una creencia básica en los ángeles.

v
P ró xim o s títu lo s de Tom T. M oore en E sp añ ol:

EL Cam ino A m able II y El Camino Amable III

O tros Libros en E sp añ ol de Light T echnology

Enseñanzas del Sagrado Triangulo Arcturiano de David Miller


El Antiguo Secreto de la Flor de la Vida, Vol. 1 y 2
de Drunvalo Melchizedek
Viviendo en el Corazón de Drunvalo Melchizedek
¡Tu Eres Psíquico! de Pete A. Sanders Jr.
RECONOCIMIENTOS

Cuando se escribe un libro, puede parecer como un esfuerzo


solitario, pero se recibe una enorme cantidad de contribución
conforme se formula la idea del libro, durante el proceso de
escribir y después, de todos esos amigos que se tomaron el
tiempo para leer el manuscrito y enviar de vuelta correccio­
nes y sugerencias. Comenzaré por agradecer a varios autores
cuyos libros he leído a través de los años y que me han dado
inspiración. En los primeros días, estos incluyen a Brad Steiger,
Dick Sutphen, Ruth Montgomery y la Dra. Edith Fiore. Más
tarde, hace como diez años, los libros inspiradores de Robert
Shapiro, recomendando buscar experiencias benevolentes,
compañeros benevolentes y resultados benevolentes, y es así
que seguí su consejo. Ahora cuento a Robert como uno de rrris
buenos amigos.
A continuación quiero agradecer a todas las personas que
contribuyeron con historias para este libro. Mantengo su pri­
vacidad usando solo su primer nombre. Quisiera agradecerles
mucho a todos ustedes por compartir sus historias acerca de
cómo les ha funcionado pedir resultados benevolentes.
Gracias a los amigos que leyeron mi manuscrito, me hici­
eron sugerencias y corrigieron mis errores gramaticales. Como
esto incluye a personas cuyas historias están incluidas aquí, no
mencionaré sus nombres, pero solo me gustaría expresar mi

vii
apreciación sincera por tomarse el tiempo para pasar a través
de éste línea por línea.
Un agradecimiento especial a mi esposa, Dena y a mi hija,
Shannon, quienes sugirieron que me tomara días específicos
para escribir, en lugar de trabajar en nuestro negocio de distri­
bución de entretenimiento normal. Todavía estaría tratando de
encontrar el tiempo para escribir si no hubiera dedicado esos
días cada semana para escribir. Y gracias a mi hijo, Todd, que
mantuvo mi computadora actualizada.
Finalmente, gracias a mi editora, Melody Swanson, quien
puso mi libro en su “carril de alta velocidad” para que se estre­
nara meses antes que otros libros que pasan por este proceso.
DEDICATORIA

Este libro está dedicado a Robert Shapiro. Por su sabiduría,


motivación y tutoría privada — y porque leí sus libros
publicados — recibí la inspiración para crear mi camino,
aplicando en mi propia vida sus conceptos y prácticas de
las maneras benevolentes, resultados benevolentes, oración
benevolente y la meditación el calor del amor. Robert entregó
estos libros* hablando con inspiración. También motivó
mi deseo por escribir este libro, y siempre estaré en deuda
con él por ayudar en mi expansión sobre esos conceptos,
posibilitándome para llevarlos hacia un mayor número de
lectores y audiencia. Estos cambiaron mi vida y espero que
cambien la tuya conforme también com iences a llevar el
Camino Amable.

— Tom T. Moore, May 2006

*La serie Explorer Race, la serie the Shamanic Secrets y la serie Ancient Secrets ofFem inine Science.

IX
EL CAMINO AMABLE
CONTENIDO

A cerca del L ib ro ............................................................................................................ v


R econ ocim ien tos........................................................................................................ vii
D ed icato ria..................................................................................................................... ix
P refacio ............................................................................................................................ xv

CAPÍTULO UNO
Ángeles..............................................................................................1
Encuentros con Un Ángel Guardián................................................................1
¡Mi Ángel Guardián Ha Trabajado Horas E x tra !.........................................3
Ángeles Guardianes en Tu Vida Diaria............................................................4

CAPÍTULO DOS
Cómo C om encé.............................................................................7
Descubriendo la Benevolencia...........................................................................7
Hacia los Resultados Benevolentes................................................................... 8
¿Cómo Funcionan los Resultados Benevolentes?.........................................9
Puedes Hacer Peticiones Ilimitadas................................................................10
Resistencia Común para Pedir Resultados Benevolentes......................... 10
Has un Hábito de Pedir Resultados Benevolentes.................................... 11
Tu Ángel Guardián es Tu Mejor Amigo.......................................................12
Esto Es Para Ti Personalmente........................................................................ 13

CAPÍTULO TRES
Pasos Fáciles................................................................................ 15
Encontrando Lugares de Estacionamiento y Asientos.............................15
Para Objetos Perdidos y Cuando se Compra Una Casa.......................... 17
Problemas con el Auto....................................................................................... 18
De Viaje.................................................................................................................. 20
Para Boletos de Concierto y Rifas................................................................... 21
¡Lo Imposible es Obtenible!............................................................................. 22
Pedir un RMB Es una Expansión de lo que Has Estado Haciendo ....23
Agradece a tu Ángel Guardián........................................................................ 25
Pasos Fáciles para Pedir RMBs:
Una Revisión Rápida...........................................................................................25

xi
CAPITULO CUATRO
Vida Fam iliar............................................................................... 27
Tomando Decisiones de Vida...........................................................................27
En Relación a Tu Casa....................................................................................... 28
En la Compra de un Auto................................................................................. 29
Atención Médica y Escuela.............................................................................. 30
Citas y Actividad Sexual................................................................................... 31
Encontrando lo Que se Perdió............................................................ 32
Tus Mascotas.........................................................................................................33
En Tu Búsqueda de la Iluminación............................................................... 34
Cuando Enfrentas una Cirugía........................................................................ 35
Funerales y Homenajes......................................................................................35

CAPÍTULO CINCO
El Ambiente C orporativo........................................................ 37
Cuando te Entrevistan....................................................................................... 37
Cuando Contratas................................................................................................38
Un Resultado Benevolente Sorpresivo.......................................................... 39
Tu Primer Día en el Trabajo............................................................................39
Ventas...................................................................................................................... 40
Contabilidad, Investigación y Desarrollo..................................................... 42
Producción y Seguridad.................................................................................... 43
Gerencia y Beneficencias................................................................................... 43
Problemas en el Trabajo................................................................................... 44

CAPÍTULO SEIS
Negocios Pequeños.................................................................... 47
Para Solicitar Nuevos
Clientes y Contratos de Negocios............................ 47
Cuestiones de Seguridad................................................................................... 49
Problemas con Empleados................................................................................50
Vendedores y Financiamiento......................................................................... 50
Contadores y Abogados.....................................................................................52

CAPÍTULO SIETE
Política............................................................................................ 57
Presentar Candidatura....................................................................................... 57
Ante un Consejo Municipal............................................................................. 58
Para un “Camino Superior” de Servicio........................................................ 59
Abuso y Actividades Ilegales............................................................................60
CAPITULO OCHO
Viajes.............................................................................................. 61
Para Viajes por Carretera.................................................................................. 61
Cuando Estás en Lista de Espera en el Aeropuerto.................................62
Para Días Especiales en las Vacaciones......................................................... 63
Para Viajes de Negocios.....................................................................................63
Sincronicidad Benevolente................................................................................69
Solicitando una Compresión del Tiempo.................................................... 70
Cuando los RMBs Parecen no Funcionar Inicialmente........................... 71
¡Pide lo Imposible!...............................................................................................72

CAPÍTULO NUEVE
Bingo, Casinos y Juegos de C artas...................................... 75
Un Resultado Benevolente para el Bingo......................................................75
En el Casino..........................................................................................................76
La Lotería................................................................................................................ 79
Para el Poker..........................................................................................................79

CAPÍTULO DIEZ
En Lugares Peligrosos...............................................................81
En una Zona de Guerra.....................................................................................81
Para Robos............................................................................................................. 83
Trabajando en Lugares Peligrosos.................................................................. 83
Cuando vas de Compras................................................................................... 84
Profesiones Peligrosas........................................................................................ 84
Para Aquellos en Prisión................................................................................... 85
Inmigrantes Ilegales............................................................................................ 86
Prostitución...........................................................................................................86
Para el Recorrido Hacia el Trabajo.................................................................87
Carteristas.............................................................................................................. 88
Peligros en las Escuelas: Pandillas, Violencia y Lesiones....................... 88
Deportes Riesgosos............................................................................................. 89
Robo de Identidad y Virus Informáticos..................................................... 91

CAPÍTULO ONCE
El Efecto Radiante................................................................................................93
Otros se Benefician de tus Peticiones de RMBs......................................... 93
Los RMBs Afectan la Seguridad de los Demás........................................... 95
¡Los RMBs Conducen a una
Vida más Amable para Todos!.................................................................96
CAPÍTULO DOCE
Oraciones Benevolentes........................................................... 99
Huracanes y Otras Tormentas Devastadoras............................................. 99
Oración Benevolente en A cción....................................................................100
Para Incidentes en los Noticieros................................................................. 102
Para Seres Amados en Lugares Peligrosos................................................103
Incluyéndote en las Oraciones Benevolentes...........................................104
Mantengan las Oraciones Benevolentes Simples y Puras.................... 106
Para Encontrar Pareja y Establecerse.......................................................... 107
Con Respecto a Tus Relaciones con los Demás......................................108
Con Respecto a la Enfermedad..................................................................... 108
Para la Colaboración Artística........................................................................109
Para la Comunidad Global
y las Decisiones Políticas Benevolentes.............................................. 110
Para la Paz Mundial y la Madre Tierra...................................................... 112
Revisión de la Oración Benevolente............................................................ 114

CAPÍTULO TRECE
Peticiones “Yo Espero” ........................................................... 115
Mi Descubrimiento de las Peticiones “Yo Espero” .................................115
Formas de Utilizar las Peticiones de Esperanza....................................... 117

CAPÍTULO CATORCE
Pensamientos Finales..............................................................119

Puntos de Bonificación
Una Explicación de los Apéndices Siguientes......................................... 123

Apéndices
Apéndice A: Afirmación Diaria.....................................................................125
Apéndice B: Un Recordatorio RMB para tu Espejo............................... 127
Apéndice C: Registrando los Sueños...........................................................129
Apéndice D: Meditación................................................................................. 133
Apéndice E: Meditación de la Calidez del Corazón.............................. 139
Apéndice F: Comunicándote con Mascotas y Animales...................... 141
Apéndice G: Una Oración Benevolente para los Desastres................. 143

G lo sario ........................................................................................................................1 4 5

A cerca del A u to r......................................................................................................1 4 7


PREFACIO

Cuando estoy echando un vistazo en una librería, e incluso cu­


ando estoy en el Internet, elijo uno o más libros cuyos títulos me
intrigan. Leo la portada y algunas de las primeras páginas, para ver
si el libro tiene temas lo suficientemente interesantes como para
que valga la pena comprarlo. Así que si tú estás haciendo lo mismo
en este momento, permíteme explicarte lo que yo creo que vas a
conseguir al leer este libro:
1. Este libro va a ponerte en contacto nuevamente con tu ángel
guardián o va a fortalecer y expandir la conexión que quizás
ya tienes.
2. Va a fortalecer tus creencias espirituales.
3. Vas a tener más diversión y menos estrés en tu vida.
4. Vas a reducir en gran medida el “factor de miedo” en la vida
cotidiana.
5. Al reducir el factor de miedo, este libro te brindará la confi­
anza de que puedes viajar a salvo a donde sea que vayas, ya
sea a tu trabajo o de vuelta a casa, a la tienda, a través del país
o alrededor del mundo.
6. Te ayudará a lograr cualquier meta que hayas establecido
para ti en tu vida.

xv
XVÍ E l C a m in o A m a b le

7. Este libro incluso te inspirará para aprender más sobre el


mundo y el universo.
¿Cómo puedo prometer todos estos beneficios? Porque he es­
tado usando estos conceptos durante más de diez años, y puedo
reportar el éxito desde el conocimiento directo y la experiencia.
Pero esta es una guía de auto-ayuda, lo que significa que requiere
de una participación activa de tu parte. Lo que vas a leer en este
libro es información única ¡que nunca has visto antes! Este libro
es para todas las religiones y creencias — el único requisito es una
creencia básica en los ángeles.
En este punto, si ninguno de los beneficios anteriores ha reso­
nado contigo, entonces es momento de regresar este libro a la re­
pisa y continuar con tu búsqueda. Pero si pido un resultado de lo
más benevolente, para que encuentres estas afirmaciones lo sufici­
entemente fascinantes, como para que compres el libro, y para que
enriquezca tu vida aún más de lo que puedes imaginar o anticipar.
Descubrirás lo que eso significa en las páginas siguientes.
CAPITULO UNO

ANGELES

L
a primera meta de este libro es ponerte en contacto
nuevamente con el ser angélico que te cuida durante tu
vida — tu ángel guardián — o fortalecer y expandir la
conexión que tal vez ya tienes. Después quiero que descubras
cuánta ayuda puedes recibir en tu vida. Primero, com encem os
con la forma usual en la que vemos nuestras relaciones con
nuestros ángeles guardianes.
Estuve en los Ángeles recientemente por negocios y me
encontré con un amigo de Montreal. Mientras nos poníamos al
corriente sobre lo que cada quien había estado haciendo, mencioné
que estaba escribiendo este libro. Mi amigo, Alphonse, dijo, “Tom,
tienes que entrevistarme para tu libro. ¡Sí que tengo historias para
ti!” Conforme lees lo que me relató, nota el tema común de peligro
en cada una de las historias.

E ncuentros con U n Á ngel G uardián


Cuando Alphonse tenía tres o cuatro años de edad en Italia,
había una ventana de tres pisos en el hueco de la escalera de su
apartamento y él se empeñaba en pensar que podía saltar a través
de ella. El día que decidió saltar, se puso en cuclillas para brincar,
cuando repentinamente un hombre extraño vestido de traje, lo

1
2 E l C a m in o A m a b l e

sujetó, previniendo su caída y su lesión. Él nunca lo había visto


antes ni lo volvió a ver otra vez.
A la edad de nueve, Alphonse era un inmigrante en un barco
hacia Canadá con su familia. Los mares estaban agitados, haciendo
resbalosa la cubierta de madera debido a las olas. Una noche muy
oscura, encontró una escotilla abierta, salió, e inmediatamente
resbaló en la cubierta rodante. Se deslizó por debajo de las cuerdas
de las que se sujetaban los marineros cuando recorrían el barco de
un lado al otro, golpeando la plataforma al borde de la cubierta.
No había lugar de donde asirse, y corría peligro de ser arrojado
sobre la plataforma hacia el mar. Apareció de la nada otro pasajero
y, sosteniéndose de la cuerda de cubierta, agarró a Alphonse y lo
jaló de vuelta a la seguridad.
Mientras conducía en Canadá a principios del invierno,
Alphonse, que nunca se abrochaba su cinturón de seguridad,
repentinamente escuchó una voz diciéndole que se pusiera el
cinturón. Doscientas yardas más tarde, se encontró con un parche
de hielo y resbaló hacia la sección en V de una barandilla que
dobló el auto a la mitad. El impacto rompió sus costillas, mientras
el cinturón lo sostuvo impidiendo que fuera arrojado a través de
la ventana lateral. Después de eso, otros seis autos se encontraron
con el mismo parche de hielo y se deslizaron hacia su auto en un
apilamiento de varios autos.
En otra ocasión, Alphonse estaba trabajando, plantando postes
en su casa de campo, y un amigo alto lo ayudaba. El amigo estaba
en la parte superior de una escalera golpeando los postes con
un hacha doble — un lado era un hacha y el otro un martillo.
Alphonse estaba sosteniendo los postes, cuando de pronto una voz
le dijo que se hiciera a un lado. El hacha resbaló de las manos de
su amigo y cayó pasando justo por donde estaba parado Alphonse.
Habría sido una muerte abrupta si hubiera permanecido en esa
posición.
Á n geles 3

Hace varios años a principios de agosto, Alphonse estaba


esquiando en las montañas de la frontera Ítalo-Germana. Se salió
fuera de los límites de la pista porque la nieve estaba mejor allí.
De improviso se le salió el esquí sin ninguna razón. Después de
levantarse, vio un hoyo en la nieve como a cinco o seis piés de
distancia, y a través del hoyo pudo ver la villa a lo lejos. Si hubiera
esquiado más lejos, se habría caído por el acantilado.
Este año pasado, Alphonse destrozó su auto completamente en
otra colisión, cuando fue forzado por otro auto contra un poste.
Traía puesto el cinturón, pero la bolsa de aire no se desplegó. La
primera persona en la escena fue un técnico médico de ambulancia
fuera de servicio. Alphonse no tenía ninguna herida, pero estaba
seguro de que su ángel guardián había enviado al técnico médico
por si acaso. Yo pienso que otra posibilidad fue que su ángel
guardián le estaba diciendo que manejara más conservadoramente,
o la próxima vez iba a ser necesaria una ambulancia.
El tema de todas esas historias fue que, si, Alphonse tiene un ángel
guardián que cuida de él y hace lo mejor por evitar que se lesione o
muera. Escuchar a nuestro ángel guardián y actuar en consecuencia
parece algo casi instintivo. Esto le ocurrió una y otra vez a Alphonse
y quizás a muchos de ustedes que están leyendo esto.

¡Mi Á ngel G uardián H a T rabajado


H oras E xtra !
En mis días de juventud después de dejar el ejército, mi primer
negocio exitoso fue operar un club de esquí en nieve para adultos
solteros en Dallas, Texas. Durante mis días en el TCU, yo era el
presidente del comité de viaje de toda la universidad y aprendí a
esquiar en viajes escolares. Inicié el club de esquí virtualmente sin
dinero y compré un viejo autobús escolar con un crédito sobre mi
auto, con el fin de llevar a los miembros del club hacia las montañas
en Nuevo México, cada fin de semana durante la estación de esquí.
4 E l C a m in o A m a b l e

Era tan pobre que no podía costear ningún seguro para el autobús.
Esperaba que si alguna vez colisionábamos, fuera el primero en
morir, porque cualquier demanda sobre lesiones significaría que
estaría en deuda para siempre.
En uno de los primeros viajes que hicimos a Nuevo México,
la estación local de televisión afiliada a la ABC, envió a un
equipo de noticias con nosotros. Mi ángel guardián me estaba
cuidando cuando nos encontramos con una tormenta de nieve
tan mala, que solo podía ver las marcas al lado de la autopista
conforme conducía el autobús. El carburador del motor comenzó
a congelarse, y finalmente nos detuvimos con el frente del autobús
en Nuevo México y la parte de atrás en Texas (lo que podría
conducir a algunos chistes sobre Texas). Usamos las luces de los
camarógrafos para calentar el carburador y que el autobús pudiera
cojear hasta el siguiente pueblo. El viaje normal de doce horas
tomó veintidós horas. ¡Nunca volvimos a tener entre nosotros un
equipo de noticias!
Durante otro viaje de esquí, el sistema de frenos del autobús se
descompuso en medio de la noche, en nuestro camino de regreso
a Dallas. Conduje las últimas 200 millas asistido por un joven
que jalaba el freno de mano para reducir la velocidad, mientras
pasábamos a través de los pequeños pueblos de Texas. En uno de
esos pueblos, él no pudo detenemos lo suficiente y di un giro de
90 grados en dos ruedas. En viajes subsecuentes a Nuevo México,
perdimos la caja de velocidades descendiendo por la montaña
en Santa Fe, y perdimos nuestro sistema eléctrico regresando de
Ruidoso, ambos eventos potencialmente desastrosos. ¡Mi ángel
guardián estaba trabajando horas extra!

Á ngeles G uardianes en T u V ida D iaria


Este es más o menos el alcance de lo que la mayor parte de las
personas piensa cuando se menciona a los ángeles guardianes. No
Á n geles 5

pensamos en ellos en nuestra vida diaria normal, solo en tiempos


de crisis. Eso es lo que estamos a punto de cambiar.
Para el propósito de este libro, vamos a usar la creencia
comúnmente aceptada de que un ángel guardián es un ser angélico
que ha sido asignado, o se ha hecho voluntario, para cuidar de
ti durante toda tu vida. El ángel guardián es ayudado por guías
angélicos, que pueden ser padres que han partido, familiares,
amigos o especialistas en tu campo de trabajo.
Este libro es una guía de auto-ayuda para aprender cómo
ponerte en contacto con tu ángel guardián en bases diarias, y
para que descubras los enormes beneficios que esto te dará como
resultado. Después de leer este libro, puede ser que desees leer más
sobre ángeles, y ciertamente existen muchos, muchos libros sobre
ángeles y sobre otros en el reino espiritual.
El Camino Amable es un sendero más fácil en la vida que tú
puedes tomar. No te voy a probar esto; tú vas a probártelo a ti a
través de la experiencia directa. En el siguiente capítulo, explicaré
cómo descubrí este sistema simple, que he estado usando durante
los últimos diez años en mi trabajo y en mi vida personal.
CAPITULO DOS

CÓMO COMENCÉ

prender cómo estar en contacto con tu ángel guardián

A es verdaderamente un proceso simple. Hacerlo parte


de tu rutina diaria es la parte más difícil, porque todos
somos criaturas de hábito. Agregar algo nuevo a nuestras vidas
diarias, aunque pueda ser sumamente beneficioso, implica algo
de trabajo.

D escubriendo la B enevolencia
Yo leo mucho: publicaciones de negocios relacionadas con
la industria del entretenimiento (la forma en la que me gano la
vida) y muchos otros tipos de libros, especialmente aquellos que
conciernen a los temas espirituales. Hace como diez años, comencé
a notar que muchos de los libros que estaba leyendo, usaban
continuamente la palabra “benevolente” para describir sugerencias
del reino angélico. Robert Shapiro, en su libro inspirador, The
Council o f Creators (de la serie Explorer Race), escribió: " ... busca
más experiencias benevolentes para ti. Busca más compañeros
benevolentes y experiencias de benevolencia para ti y para tu
compañero, o tu familia o tu gente”. Estas sugerencias parecían un
poco vagas, pero me intrigaron.
Benevolente (pronunciado be-nev-o-lente) no es una palabra

7
8 E l C a m in o A m a b l e

comúnmente usada en el lenguaje cotidiano, por lo que me pareció


muy notable. El Diccionario Webster define la palabra benevolente
como: “Una disposición amable para promover la felicidad y la
prosperidad a través de buenas obras, o por generosidad y placer
para hacer buenas obras”. No estaba seguro cómo exactamente se
relacionaba esto con lo que estaba leyendo, pero se despertó mi
curiosidad.

H a c ia l o s R e s u l t a d o s B e n e v o l e n t e s
Leí una sugerencia en el libro de Robert Shapiro para pedir
un resultado benevolente para una necesidad específica.1 Eso
sonó interesante, por lo que decidí intentarlo. Me di cuenta de
que para ver si mi “experimento” había funcionado, debía tener
una retroalimentación inmediata. Por lo tanto, comencé por ptedir
en voz alta un resultado benevolente, para encontrar un lugar
de estacionamiento cerca de donde recogía mi correspondencia
diariamente. El estacionamiento es limitado allí, y no le ayuda tener
una oficina veterinaria muy concurrida al lado, y un restaurante de
comida rápida junto al veterinario.
¡Esto funcionó fantásticamente bien! Alguien dejaba un lugar de
estacionamiento solo segundos antes de que yo llegara. También
intenté esto cuando salíamos al teatro y cuando salíamos a cenar.
Funcionó una y otra vez, las únicas excepciones ocurrieron cuando
me rehusaba a dejar pasar un lugar de estacionamiento un poco
más lejano. Entonces, conforme caminábamos hacia la puerta del
restaurante o el teatro, veía el lugar de estacionamiento vacante
esperando por mí, si hubiera elegido continuar manejando más
cerca de la entrada.

1 Intercambio las palabras “resultado benevolente", “el resultado más benevolente"y la abreviación “RMB” a través de este
libro. Todos estos términos significan y se refieren a la misma cosa.
Á n geles 9

¿ C ó m o F u n c io n a n l o s R e s u l t a d o s
B en ev o len tes?
Gradualmente expandí esas peticiones a cada faceta de mi vida
— negocios y personal — con el mismo éxito. En los siguientes
capítulos, te daré muchos ejemplos sobre cómo pedir esos resultados
benevolentes en tu vida, pero comencemos con algunas cosas
básicas:
• Una petición de un resultado benevolente es una petición de
ayuda a tu ángel guardián.
• Una petición de un resultado benevolente tiene que tener
intenciones exactas. Estás pidiendo algo específico.
• Solo puede usarse benevolentemente, incluso si accidental­
mente se expresa de tal forma que no es benevolente.
• Un resultado benevolente debe ser una petición de algo que
tú deseas que suceda, no de algo que no deseas que ocurra.
• Solo funcionará si la experiencia es benevolente para todos,
incluyendo aquellos que cooperan conscientemente o en un
nivel subconsciente para llevar a cabo tu petición.

La petición tiene que ser para ti, aunque los que estén contigo
puedan ser afectados benevolentemente también.
Nuevamente, una petición de un resultado benevolente no son
solo palabras que dices; es una petición de ayuda para tu ángel
guardián. Hay momentos en los que incluso puedes sentir energía
después de tu petición — Yo creo que es una retroalimentación
de amor de tu ángel guardián. Ponerle emoción y sentimiento a la
petición también ayuda. Estás pidiendo una conexión específica con
una persona o personas, que motive a esas personas a hacer algo
que harían de cualquier forma, pero tu petición los invita a hacerlo
en un tiempo específico, si no está en contra de su voluntad o sus
mejores intereses.
Debes pedir resultados benevolentes para consecuencias
10 El C amino A mable

positivas. Por ejemplo, podrías decir: “Yo pido el resultado más


benevolente para mi camino hacia la oficina esta mañana”.
No dirías: “Yo pido el RMB para no tener un choque en mi
camino a la oficina”.

P uedes H acer P eticiones Ilimitadas


No existe un límite para el número de peticiones que puedes
hacer durante tu vida. No vas a “exceder la cuota”. Si puedes,
imagina pilas enormes de formas a tu alrededor, cada una dice:
“Yo pido el resultado más benevolente p ara_____ ”. El resto está
en blanco y listo para que llenes tu petición, entonces llenas el
espacio en blanco y dices “¡Gracias!” Yo estimo que he pedido
cuando menos entre 10,000 y 15,000 resultados benevolentes
durante más de diez años, y todavía tengo ese enorme montículo
de formas que nunca disminuirá en tamaño.
R esistencia C omún para P edir
R esultados B enevolentes
Al correr la voz sobre pedir resultados benevolentes, me he
encontrado con resistencia por un par de razones. Primero, expresar
esas peticiones suena un poco “extraño”, porque la mayoría de las
personas no usan la palabra “benevolente” en su discurso cotidiano.
Yo lo entiendo. Pero este es “lenguaje angélico”. Así que cuando
quieres que tu ángel escuche tu petición, usas sus palabras.
Digamos una juntos para que comiences a sentirte más cómodo
usando estas palabras. Quiero que digas en voz alta en este momento:
Á n geles 11

Esa última parte de la petición es algo adicional que explicaré más


tarde. ¿Ya la dijiste? Si estás en público, puedes susurrarla o puedes
escribirla físicamente, pero se tiene que hacer físicamente, no solo
pensando mentalmente.
Otra resistencia con la que me he encontrado es, “O, no soy digno
de pedir ayuda”, o palabras con ese efecto. ¿Quién dice que no eres
digno? Al que le estás hablando es a tu propio ángel guardián. Algunas
personas han sido abusadas verbalmente en su vida. Quizás fueron
tus padres o familiares quienes constantemente te hacían menos.
Posiblemente en la escuela tuviste un maestro o maestros que no
sabían cómo inculcar conocimiento, sin reprenderte o menospreciar
tus esfuerzos. O tal vez obtuviste ese mensaje en tu institución
religiosa. Cualquiera que haya sido tu situación, tienes el derecho
de hablar con tu mejor amigo en la vida — tu ángel guardián. No
permitas que nadie te niegue ese derecho.
También me han preguntado, “Tom, ¿No deberíamos pedir
solamente cosas importantes en la vida y no pequeñas cosas
cotidianas?” Mi respuesta es, debes pedir por las pequeñas cosas,
con el fin de recordar pedir por los resultados importantes. En este
momento la mayoría están sumamente desconectados de su ángel
guardián y sus guías. Al pedir pequeñas cosas, como un lugar de
estacionamiento, o un asiento en el metro o el autobús, obtienes
retroalimentación inmediata de que hay alguien allí. Esto te da
confianza para pedir resultados más grandes.

H as un H ábito de Pedir R esultados


B enevolentes
Otro punto importante para recordar es que tu ángel guardián
no tiene cuerdas vocales para responderte. Él o ella responde
murmurando mensajes y creando eventos que te dejan saber que
no estás solo nunca — él o ella siempre está contigo. Cuando
pides resultados benevolentes, elevas tu percepción para captar
12 E l C a m in o A m a b l e

estos mensajes y eventos. Esto toma práctica. Si solo contactas con


tu ángel guardián y a tus guías en tiempos de crisis, ellos pueden
ser lentos para responder, porque tienen que averiguar cómo
comunicarse contigo. Entre más resultados benevolentes pidas,
más “sintonizado” estarás con tu propio ángel guardián y tus guías.
Es por esto que debes hacer un hábito de pedir resultados
benevolentes. Mi maestro de francés me enseñó hace mucho
tiempo, que toma un mínimo de siete veces repetir algo antes
de aprenderlo. Yo sugiero que pongas un letrero pequeño en tu
baño o en el refrigerador (o ambos) que diga, “¡Pide un Resultado
Benevolente Hoy!” para que lo recuerdes. De otra forma las
palabras en este libro se desvanecerán lentamente, conforme
quedas atrapado en tus actividades diarias.

Tu Á n g e l G u a r d iá n es Tu M e jo r A m i g o
También me han preguntado, “¿No debería ser mi clérigo
quien que pidiera estos resultados benevolentes por mí?” ¿Pueden
imaginar en un nivel práctico, aunque fueran 300 personas,
llamando a un consultor espiritual todo el día, para pedirle un
lugar de estacionamiento, o para pedirle por una reunión que van a
tener, o cualquiera de las miles de peticiones que esas 300 personas
tendrían durante una semana?” Sería abrumadoramente imposible.
Tienes que pedirlo tú mismo. Si te estuvieras mudando y
necesitaras ayuda, ¿llamarías a alguien más para que llamara a tu
mejor amigo, para que te ayudara con la mudanza? Por supuesto
que no. Tú levantarías el teléfono y llamarías a tu amigo y le pedirías
directamente que te ayudara a mudarte. Esta es la misma premisa.
Le estás pidiendo ayuda a tu ángel guardián que es tu mejor amigo.
Tu ángel guardián está allí para ayudarte cada minuto del día,
pero tienes que pedirle. Podemos usar la metáfora de tu ángel
guardián y tus guías angélicos, sentados mirando un televisor
con imágenes sobre tu vida mientras la vives. Ellos están muy
Á n geles 13

aburridos, porque no pueden ayudarte muy seguido. Ellos solo


pueden “murmurar en tu oído” y la mayor parte del tiempo no
los escuchas. Ellos saltan de júbilo cuando reconoces su presencia
y les pides aunque sea un poco de ayuda. Solicitar resultados
benevolentes fortalecerá tus creencias espirituales, porque estarás
recibiendo una retroalimentación constante de que existen seres
angélicos que te aman y que desean ayudarte a conducir tu vida
de forma más amable y menos estresante — ¡El Camino Amable!

E sto Es Para T i P ersonalmente


Me han preguntado si uno puede pedir un resultado benevolente
por la paz mundial, por las víctimas de desastres y otras peticiones
similares. La respuesta que he recibido en mis meditaciones, es que
los seres angélicos que producen resultados benevolentes, no son
los mismos que manejan las peticiones para otras personas.
En el momento en que incluyes a otra persona en tu petición,
o pides algo que es para otras personas, esto se dice de diferente
forma, y le dedicaré un capítulo a eso en este libro. Ambos son
muy similares, pero diferentes. Pedir resultados benevolentes es
para ti personalmente.
En los siguientes capítulos, daré mis sugerencias sobre todo tipo
de formas para pedir resultados benevolentes en tu vida diaria.
Sugiero que leas este libro durante el curso de una semana. Esto te
dará la oportunidad para digerir todas las veces en las que puedes
pedir resultados benevolentes, sin que todas se mezclen o, para
usar una expresión coloquial, “sin que se te salgan por las orejas”.
Pero deseo tocar un punto antes de continuar. Yo no inventé esto
de hablar con los ángeles. Esto ha estado ocurriendo durante miles
de años. Yo solo te estoy mostrando cómo puedes hacerlo en el
siglo veintiuno. Yo simplemente puse a prueba algunos conceptos
desconocidos y funcionaron, y ahora estoy compartiendo mi éxito
contigo. Muy pronto tú tendrás muchas historias de éxito propias.
CAPÍTULO TRES

PASOS FÁCILES

V
amos a comenzar con las peticiones fáciles para que
recibas retroalimentación inmediata de que pedir
resultados benevolentes funciona.

E ncontrando L ugares de
E stacionamiento y A sientos
No hace mucho tiempo en una visita a Sedona, Arizona
(considerado uno de los lugares más hermosos en los Estados
Unidos), mi esposa, mis amigos y yo condujimos hasta la sección
“elegante” de Sedona para buscar comida mexicana. Muchos de
ustedes que han visitado Sedona, saben que el estacionamiento
allí puede ser un poco problemático, debido a todas las tiendas de
regalos y restaurantes, divididos por una concurrida calle de doble
vía. Yo pedí el resultado más benevolente cuando dejé el hotel,
para un lugar de estacionamiento frente al restaurante. Cada lugar
de estacionamiento en ambos lados de la calle estaba ocupado
hasta que llegamos al restaurante. Allí, justo enfrente de la entrada,
estaba “nuestro” lugar de estacionamiento. Nuevamente, recibí esta
retroalimentación inmediata.
Como un ejercicio fácil de hacer, comencemos con el ejemplo
de arriba. Digamos que vas a ir a un centro comercial, a cenar o al

15
16 E l C a m in o A m a b l e

cine, en una ubicación en donde es típicamente difícil encontrar


lugar de estacionamiento. Di en voz alta (mucho antes de llegar):

Ahora, tengo algunos amigos que han dicho, “Pero, Tom,


yo ya uso a mi ángel del estacionamiento” Aquí está la razón por
la que pienso que es mejor pedir un resultado benevolente. Si solo
pides el lugar de estacionamiento más cercano, tu ángel o guía lo
van a cumplir, pero ese puede no ser el lugar más benevolente
para estacionar tu auto. Alguien podría abrir la puerta de un auto
demasiado fuerte y golpear el lado del tuyo. O alguien podría
echarse en reversa y abollar tu auto. Al estar demasiado cerca,
puedes perderte a ese viejo amigo que no has visto desde hace
mucho tiempo, o la oferta de la que no te hubieras enterado si no
hubieras pasado camino a tu destino.
¡Pero pedir un resultado benevolente funciona perfectamente!
puede parecer inicialmente que no, hasta que te das cuenta de todas
las otras posibilidades que entran en juego. El noventa y nueve por
ciento de las veces estarás cerca, y cuando no lo estés, sabrás que
debe haber una buena razón. Además, estamos trabajando para
que hagas un hábito de pedir resultados benevolentes. Encontrar
un espacio de estacionamiento es un problema constante para
muchas personas, por lo que es un ejercicio perfecto.
Clara en Seattle me envió un correo para decirme que la primera
vez que pidió un resultado benevolente, fue para recoger a su
nieto en un día caluroso de verano. Ella sabía que iba a tener que
esperarlo y tenía la esperanza de encontrar un lugar cerca. Ella
pidió un RMB (mi abreviación para resultado más benevolente).
Al llegar a la escuela, el único lugar disponible estaba en la
P asos Fá c iles 17

última fila, ¡pero era el único a la sombra de un árbol! Hice de


Clara una creyente, quien dice que ella pide RMB para todo. Ella
dice que nunca le ha fallado.
Como parte de mi negocio de distribución de películas, mi
esposa y yo vamos a estrenos de películas todo el tiempo. A mí me
gusta sentarme en medio de la fila, de preferencia a la mitad de la
sala, para que el centro de la pantalla esté en mi línea de visión.
Siempre pido un resultado benevolente para tener esos asientos
disponibles cuando llegamos al cine, e invariablemente, allí están.
Aquellos de ustedes que se desplazan al trabajo en tren, metro
o autobús, pueden encontrar difícil encontrar un asiento. Entonces
deben decir en voz alta:

No hace mucho tiempo, estaba en París. Un amigo y yo


teníamos que cruzar hacia el otro lado de la ciudad por negocios.
Teníamos que tomar tres metros en conexión camino hacia allá y
dos para regresar, así que pedí mi RMB para un asiento en cada
uno. Cuando abordamos, había un asiento esperando por mí,
aunque era una hora del día muy transitada.

Para O bjetos P erdidos y C uando se


C ompra U na C asa
Aquí hay otros ejemplos fáciles de usar: Siempre que extraviemos
algo en nuestra casa, pedimos un resultado benevolente para
encontrarlo, y siempre aparece. Dos de nuestros amigos, Don y
Karen, se mudaron recientemente a San Diego para estar cerca de
sus hijos y un nuevo nieto. Como sabes, cuando te mudas, tienes
18 El C amino A mable

un montón de cajas y es difícil recordar todo lo que pusiste en


ellas. Karen tenía la misma situación con numerosas cajas en su
cochera. Necesitaba algunos papeles importantes para el banco,
pero no podía recordar en qué caja estaban. Ella pidió un resultado
benevolente para encontrar la caja correcta, y en la primera caja que
eligió,- ¡allí estaban los papeles justo arriba!
Apenas el otro día, necesitábamos encontrar una garantía de
nuestra cámara digital para llevarla a reparar. Mi hija y mi esposa
buscaron en la caja en la que guardamos normalmente las garantías,
pero no pudieron encontrarla, así que buscaron en todas partes.
La tienda de cámaras alegó que ni siquiera tenían registro de que
hubiéramos comprado la cámara. Finalmente, mi hija dijo:

Entonces revisó la misma caja nuevamente. Allí estaba, ¡solo un


poco escondido!
Dos de nuestros amigos, Joy y Bob, compraron una casa en el
campo. En el pasado, cada vez que ellos cerraban un trato por una
casa, experimentaban problemas en el cierre — errores en el papeleo
y cosas así. Esta vez ellos pidieron el resultado más benevolente para
el cierre y reportaron que navegaron a través del proceso sin ningún
problema.

P r o b l e m a s c o n el A u t o
Durante el mes de agosto, mi esposa, algunos amigos y yo
condujimos hacia Mena, Arkansas, para pasar el fin de semana. En
el camino de ida, descubrí que mi camioneta tenía poco refrigerante
para el aire acondicionado. No tener suficiente enfriamiento en los
días más calurosos del verano en el Sur, puede ser miserable, por lo
Pasos Fáciles 19

que pedí un resultado más benevolente para que lo repararan. En el


motel me dijeron que encontrar un lugar abierto en sábado en un
pueblo tan pequeño, no era muy probable, pero me dieron el nombre
de una tienda de llantas cercana para que lo intentara.
Allí estábamos a las 7:00 a.m. a la mañana siguiente, pero no
abría sino hasta las 8:00 a.m. Me moví a una estación de servicio
que estaba abierta cerca de allí, y pregunté si sabían de un taller para
darle servicio al aire acondicionado. Un hombre joven que “resultó”
estar allí, me sugirió un taller de reparación automotriz a algunas
cuadras de distancia, y me recitó el número de teléfono de memoria.
Cuando encontramos el taller cerrado, regresamos a la tienda de
llantas, y yo dije:

La mujer dijo que no tenían el equipo, por lo que saqué el número


telefónico que había guardado y le pedí que los llamara.
El dueño del taller respondió y dijo que normalmente no trabajaba
en sábado, pero que fuéramos, porque estaba reparando un camión
de UPS que habíamos visto en la banqueta. Llenó el refrigerante y me
cobró un tercio de lo que habría pagado en Dallas. Y como beneficio
secundario, pudimos ver su increíble colección de motocicletas Indian,
un sedán Hudson 1942, y una colección de canicas y autos de juguete
en sus cajas originales. Él había enseñado reparación automotriz en
un colegio local durante veinticinco años antes de retirarse. Si no
hubiera llamado la mujer que él conocía, podría no habernos dicho
que sí. Y es obvio para mí que no fue una coincidencia que el joven
estuviera en la estación de servicio para sugerir que intentáramos ir al
taller de reparación — ¡mi ángel guardián lo organizó!
20 El C amino A m able

D e V iaje
Aquí hay otro ejemplo: Hace varios años, mi hijo y yo, junto
con su amigo Jason y el padre de Jason, volamos a la ciudad de
Salt Lake, Utah, y acampamos todo el camino hasta el Parque
Nacional Yellowstone y de regreso. ¡Qué viaje más maravilloso! Yo
sabía que nuestro vuelo de regreso a Dallas estaba sobrevendido,
por lo que nos anoté a los cuatro como voluntarios para que nos
“descartaran”. Típicamente, la línea aérea compensa con boletos
gratuitos o cupones, para usarlos en la compra de boletos, que yo
pensé que podíamos usar el siguiente año. Naturalmente, pedí el
resultado más benevolente. Ellos no necesitaban nuestros asientos,
pero por ofrecemos como voluntarios, nos dieron cuatro asientos
de primera clase. Mi hijo, su amigo y el padre de su amigo, nunca
habían volado en primera clase, por lo que fue el regalo de su
vida. El siguiente verano, nuestras agendas no coincidieron y no
pudimos regresar — lo que hizo que los recuerdos de ese viaje
fueran más especiales, por todos los resultados benevolentes
compartidos con amigos.
Hace dos años, fui a San Petersburgo, Rusia, de negocios, y
la compañía que estaba visitando me informó que tenían que
hospedarme en un hotel más pequeño. Todos los grandes estaban
llenos porque Paul McCartney iba a actuar en un concierto. Después
de llegar, pedí que me llevaran a la oficina de boletos, ya que nunca
había tenido la oportunidad de verlo en una actuación en vivo. Este
era el día anterior al concierto, por lo que las probabilidades de
obtener un boleto no eran tan buenas.
Naturalmente dije:
P a s o s F á c il e s 21

Les quedaba un boleto en las primeras cuarenta filas o algo así,


y terminé sentado justo en el centro en la fila 27. Ese concierto fue
el primero que se realizó frente al famoso Museo Hermitage, que
había visitado más temprano ese día. ¡Qué experiencia!
Una noche, nuestros dos amigos, Bob y Mary, conducían de
regreso de un concierto de Alanis Morissette en Fort Worth, como
a treinta millas de Dallas. Era tarde y Mary pidió un resultado
benevolente para su camino de regreso a casa. Se detuvieron en
una señal de alto en medio de la avenida, casi en la cima de una
colina; la señal de alto era muy difícil de ver en la oscuridad.
Escucharon un fuerte chirrido conforme un camión salía por detrás
de ellos, dio un frenazo y patinó de lado, esquivándolos por un
escaso margen. Ella afirmó, “¡De seguro fue un RMB!”

P a r a B o l e t o s d e C o n c ie r t o y R if a s
Cuando abrió el Centro de American Airlines en Dallas, el primer
concierto era de los Eagles. Siempre había querido verlos, pero
estaba fuera de la ciudad cuando se pusieron a la venta los boletos,
y se agotaron inmediatamente. Le dije a mi esposa que debíamos
arriesgarnos y pedir el resultado más benevolente para comprar
dos buenos boletos. Le dije que me esperara en los escalones frente
al Centro, mientras trataba de ver si podía comprarle boletos a un
revendedor o a alguien que tuviera dos boletos extra.
Casi no había boletos disponibles, y los que estaban disponibles
estaban cotizados demasiado alto. Pero tengo tal confianza al pedir
RMBs, que simplemente supe que encontraría dos de alguna forma.
De pronto, un hombre que estaba pasando vio mis dos dedos
levantados, y me dijo que había escuchado que había algunos
boletos en la oficina de venta. Le agradecí y fui a encontrarme con
mi esposa, y nos encaminamos a la ventana de boletos en donde
compré dos de los últimos asientos que tenían a la venta, a dieciocho
filas del escenario. Obviamente, mi ángel guardián organizó que
22 E l C a m in o A m able

pasara ese caballero para informarme sobre los boletos. Esta es la


forma como funciona pedir resultados benevolentes.
Mi hijo regresó de una fiesta de graduación de secundaria, con
un Play Station Sony que ganó en un sorteo. Aunque era el segundo
premio más grande, era el que realmente quería. Me explicó que
pidió el resultado benevolente “dos veces”. Estaba un poco ansioso,
¡porque una vez era realmente suficiente!

¡Lo Im p o s ib l e e s O b t e n ib l e !
Ahora mi hijo está en la universidad, y tomó un curso de
computación el verano pasado. Estaba ocupado estudiando para
un final, y no podía conducir hacia Waco para dejar una videocinta
de una presentación de Power Point, por lo que mi esposa y
yo condujimos en auto las cien millas hasta su universidad. Yo
pedí un resultado benevolente para el recorrido de ida, pero
estaba temeroso por el camino de regreso, porque sabía que nos
encontraríamos con el tráfico de Dallas de regreso a casa, alrededor
de las 5:00 p.m. Al iniciar nuestro regreso, mi esposa dijo:

Yo pensé, “O seguro, mucha suerte — ¡el tráfico simplemente


va a desaparecer!”
Bueno, pasamos sin esfuerzo a través de las autopistas alrededor
del centro, como si fuera medio día. En realidad llegamos a
casa con mejor tiempo del que nos había tomado llegar allá. En
una meditación después, pregunté sobre eso, y se me dijo que
debíamos pedir lo imposible, porque esto puede exceder cualquier
cosa que podamos pensar como una resolución.
C. J. en Wisconsin me escribió un correo para decirme que
P a s o s F á c il e s 23

después de salir de su trabajo, comenzó a nevar y los caminos se


estaban “poniendo peligrosos”. Por lo que ella pidió el resultado
más benevolente para que los caminos estuvieran despejados y
pudiera arribar a casa a salvo. Ella reportó que “el camino se volvía
más despejado y más despejado ... ¡demasiado bueno! ¡Amo esto!”
Es por esto que te hice decir en el capítulo anterior: “... y que
los beneficios sean incluso mejores de lo que espero o puedo
anticipar”. Debes ser espontáneo cuando digas esto, casi como una
ocurrencia tardía.
La idea es que te sorprendas por lo buena que resulta ser la
consecuencia — más de lo que podrías haber imaginado. Tu ángel
guardián y tus guías te harán reír y decir, “¡ni siquiera había pensado
en eso!” Esto fue algo que aprendí después de pedir resultados
benevolentes durante mucho tiempo, y todavía me sorprendo, y en
ocasiones me asombro por los resultados de esta petición.
Mi amigo Robert me dijo que en una ocasión iba a encontrarse
con su amiga Wendy del otro lado de la ciudad, y él pidió un
resultado benevolente para llegar a tiempo. Cuando se encontró con
un embotellamiento de tráfico en un cruce largo en la avenida, dudó
que estuviera funcionando. Llamó a Wendy y ella le informó que
estaba retrasada y que todavía no había salido de casa. Después de
colgar, repentinamente tuvo la “inspiración” de salirse y recoger una
correspondencia — había querido hacerlo desde hacía dos semanas
pero no había tenido el tiempo. Después de recoger rápidamente la
correspondencia, regresó a la autopista, que ahora estaba despejada.
Todavía llegó antes que su amiga Wendy. Dijo que esto fue un
“regalo”. Toma nota de que él escuchó a su ángel guardián.

P e d ir u n R M B E s u n a E x p a n s ió n de lo

que E Ia s E s t a d o E Ia c ie n d o
Algunos de ustedes leyendo este libro, pueden haber tenido ya
24 El Camino Amable

experiencias al pedir resultados en un nivel más mental o subjetivo.


Mi esposa y yo asistimos recientemente a un seminario en un
crucero por Alaska, en donde se me permitió introducir los RMBs.
Dos damas se me acercaron después con sus propias historias,
que ellas sentían que eran resultados benevolentes. Primero, Joan
de Vancouver relató cómo ella y una amiga habían estado en un
viaje previo por Alaska, y su amiga realmente quería ver un oso.
Entonces Joan pidió un “orden divino”, y un oso apareció justo en
el sendero que habían tomado hacia el bosque.
Lena, de Perth, Australia, recibió la llamada telefónica de una
amiga, que vivía a treinta minutos fuera de la ciudad, para pedirle
que la recogiera para ir a ver a un expositor muy conocido. A ella
no le importaba recoger a su amiga, pero no le agradaba la idea
de conducir tan tarde después de terminado el programa, fuera de
los límites de la ciudad, para dejar a su amiga y después regresar
otros treinta minutos hacia su casa. Ella realmente deseaba que de
alguna forma no tuviera que hacer ese viaje. De la nada, llamó una
pareja que vivía cerca de la amiga, y le dijeron que podían llevarla
de regreso con ellos. Lena estaba segura de que este había sido un
resultado benevolente cuando me relató la historia.
En mi meditación, el mensaje que recibí es que deben continuar
con estas peticiones. Pero pedir resultados benevolentes es una
expansión de lo que han estado haciendo, ya que le da estructura
y se convierte en un hábito, en lugar de algo en lo que piensan
ocasionalmente. Las peticiones de resultados benevolentes deben
decirse en voz alta — pueden susurrarlas o escribirlas si es necesario.
Este es un mundo físico, y ustedes quieren que ocurra una acción
física. Por lo tanto, deben pedir el resultado benevolente en una
forma física, escribiéndola o haciendo la petición en voz alta.
P a s o s F á c il e s 25

A g r a d e c e a t u Á n g e l G u a r d iá n
Cuando veas los resultados positivos de tu petición de resultados
benevolentes, asegúrate de agradecer a tu ángel guardián. Yo digo,
“Gracias, gracias, gracias”, Y no se lo digo a nadie más. Tres gracias
son solo para mi ángel.
Todas las historias anteriores no solo pueden proveerte de
algunas ideas sobre peticiones de resultados benevolentes en tu
vida, sino que puedes ser capaz de ver cómo el hecho de hacerlo
disminuyó el estrés e incrementó el “factor divertido” para mí, para
mi familia, y mis amigos que pidieron resultados benevolentes en
bases cotidianas. En los siguientes capítulos, te voy a dar muchas
sugerencias más e historias de éxito, ¡pero puedes comenzar a
experimentar con estas peticiones ahora mismo!

P a s o s F á c il e s p a r a P e d ir R M B s :
U n a R e v is ió n R á p id a
• Pide el resultado benevolente en voz alta, murmurando
o por escrito.
• Comienza por peticiones fáciles para una retroalimentación
inmediata.
• Sé específico con tu petición.
• Has un hábito de hacer peticiones de resultados
benevolentes.
• Pedir un resultado benevolente con emoción y
t sentimiento, refuerza la petición.
• No temas pedir lo imposible.
• Puedes pedir que el resultado sea más de lo. que puedes
esperar o imaginar.
• Agradece a tu ángel guardián por cumplir tu petición.
CAPÍTULO CUATRO

VIDA FAMILIAR

E
ste es un tema sobre el que todos quieren información:
cómo usar estas peticiones de resultados benevolentes
en su vida familiar.

T o m a n d o D e c is io n e s d e V i d a
Comencemos con adultos jóvenes en su adolescencia tardía o al
inicio de sus veintes. Digamos que pronto te estarás graduando de
preparatoria, y tienes esa gran incógnita sobre lo que vas a hacer
con tu vida. ¿Vas a ir a la universidad, y si vas, a cuál? ¿Asistirás a
una escuela vocacional, o deberías unirte a la milicia? ¿O deberías
intentar encontrar un trabajo en algún lugar mientras intentas
resolver todo esto?
Yo sugiero que digas:

Puedes cambiar esta petición para que refleje mejor tus


circunstancias particulares.

27
28 E l C a m in o A m able

Si eres un padre o un tutor, tú quieres que estos hombres y


mujeres jóvenes tengan éxito en la vida, tanto o más del que tú
tienes, después de haber tenido años “de entrenamiento sobre la
marcha” en tu propia vida personal. Yo sugiero que digas:

Solo recuerda que lo que tú piensas que deberían hacer tus hijos
y lo que ellos hagan, pueden ser dos cosas diferentes. Solo puedes
guiarlos hasta aquí, y después ellos tienen que volar por sí mismos.
Por favor apóyalos, incluso si sientes que lo que están haciendo es
un error. Los errores son grandes maestros, y en muchas ocasiones
pueden ayudar a tus hijos a madurar y a crecer más rápido de lo
que lo habrían hecho de otro modo.

E n R elación a T u C asa
Para los jóvenes adultos, eventualmente vas a necesitar encontrar
tu propio lugar para vivir. Probablemente sea un apartamento, o
podría ser una habitación hasta que seas capaz de costear mejores
alojamientos. Debes decir:

Puedes decir algo similar si estás en el mercado para comprar


una casa. Di:
V ida Fa m il ia r 29

Eventualmente cuando vendas esa casa, podrías desear afirmar:

Cuando compres esa casa, puede necesitar poca o mucha


remodelación. A mi esposa le encanta remodelar casas, por lo que
hemos hecho varias durante los años. Cuando ve cotizaciones
para pintura, construcción, adoquinado, plomería, electricidad,
calefacción/aire acondicionado o cualquier otro trabajo en nuestra
casa, pide un resultado benevolente para encontrar a la mejor
compañía o individuo que haga el mejor trabajo al mejor precio.

E n la C o m p r a d e u n A u t o
Muchos de ustedes tendrán que comprar un automóvil o
motocicleta para ir y venir regularmente al trabajo. Cuando inicies tu
búsqueda di:
30 E l C am in o A mable

Puedes desear mantener esto en términos muy generales, porque


tu ángel guardián puede encontrar un auto o vehículo que sea
mucho mejor de lo que pensaste que podías pagar.
Cuando estás negociando con el concesionario o con un
individuo, puede ser que quieras decir:

Se puede usar la misma petición para cualquier objeto que


tengas que comprar, o cualquier servicio que no tenga un precio
establecido.

A t e n c ió n M é d ic a y E sc u ela
¿Qué tal si necesitas encontrar un doctor o un dentista en el área
a la que te acabas de mudar? Pide el resultado benevolente para
encontrar al doctor correcto o al dentista adecuado para ti, que
sea el más benevolente para tus necesidades. Puedes estructurar
tu petición del RMB dependiendo de tus circunstancias y lo que
necesitas en ese momento.
La escuela es un tema importante para todos los padres y tutores.
Desde preescolar hasta preparatoria, estarás tomando una parte
activa para asegurarte de que tu hijo reciba la mejor educación
posible. Por lo que necesitas pedir el resultado más benevolente
para elegir ese preescolar, si tienes elección, y después RMBs cada
vez que te encuentres con maestros y asesores. Cuando mi esposa
y yo teníamos reuniones con los maestros y asesores de nuestros
hijos, siempre pedíamos un resultado benevolente. Nunca nos falló
lograr un acuerdo que fuera del mejor interés para nuestros hijos.
Existe un inmenso número de actividades escolares en estos
días: fútbol, baloncesto, béisbol, voleibol, natación, atletismo,
V ida Fa m il ia r 31

lacrosse, banda, animadoras, baile, clubes de debate, clubes de


lenguas extranjeras, exploradores, teatro, anuarios en video,
clubes de robótica y muchos otros, demasiado numerosos para
listar aquí. Si eres un padre que participa en estas actividades,
puedes pedir un resultado benevolente cada vez que asistas a
reuniones y trabajes con tus hijos.
Si eres un estudiante que participa en estas actividades,
entonces puedes pedir el resultado más benevolente cada vez
que compitas, para que des lo mejor de ti y te sientas relajado.
También puedes pedir resultados benevolentes cada vez que
presentes un examen escolar. Di:

Otro momento de estrés para los estudiantes, es cuando


comienzan sus estudios en una nueva escuela. Como estudiante
puedes decir:

C ita s y A c t iv id a d S e x u a l
Cuando comienzas a tener citas, puedes decir:
32 E l C am in o A mable

A la edad que decidas volverte sexualmente activo, puedes decir:

Naturalmente puedes nombrar a la persona en la petición


anterior, si lo deseas.
Si eres una mujer, puede ser que desees agregar: .. y que sólo
me embarace cuando lo desee y con el hombre que amará y cuidará
de nuestro hijo por siempre”. Para un hombre, puedes desear
agregar: “... y que solo sea padre de un niño con una mujer que
ame y con la que desee pasar el resto de mi vida”.

E n c o n t r a n d o lo Q u e se P e r d ió
Como padre o tutor, cuando sales de compras, vas a parques
recreativos, o haces otras cosas con tus hijos, siempre existe la
posibilidad de que se puedan perder. Cuando esto ocurre entras
en pánico. Si eso llegara a suceder, detente inmediatamente y di:

Terry me envió un correo para decirme que ella y su hija habían


ido a una venta de garaje al estadio de su escuela. Ella pensó que
había perdido su billetera allí, y regresó con su hija, pidiendo un
resultado benevolente para encontrarlo. Un beneficio inmediato
fue que como resultado, tanto su hija como ella compraron algo
que no habían visto previamente al recorrer el área. Entonces
después encontró su billetera en su casa, entre los cojines de su
sofá. “Fue increíble”, remarcó.
V ida Fa m i l i a r 33

Toda mi familia fue a ver una de las primeras películas de Harry


Potter hace no mucho tiempo, cuando regresamos, descubrí que mi
anillo de bodas no estaba en mi dedo. Había perdido mi primer anillo
de bodas en los rápidos de un río, durante un viaje de canotaje con
la tropa de niños exploradores de mi hijo, así que no me complacía
la idea de comprar otro. Busqué por todo el mostrador de la cocina
y por el piso, y después pensé que podía haberlo perdido durante
alguna escena excitante de la película, así que llamé al gerente del
cine para pedirle que lo buscara. Cero anillo.
Decidí que era momento para pedir un RMB para encontrar el
anillo (cosa que debí haber hecho desde antes). Lo importante fue
que, liberé el estrés que estaba sintiendo por la pérdida. Mi esposa
subió al segundo piso y encontró el anillo junto al lavamanos, porque
en la prisa por salir para ir a ver la película, se había deslizado de mi
mano cuando me lavé rápidamente las manos con jabón.

Tus M ascotas
Cuando estés buscando una mascota para ti o para tu familia,
puedes decir:

Las mascotas se pierden algunas veces. Si somos descuidados


y dejamos la puerta abierta, nuestra perra, Sandy, ama explorar el
vecindario. En un día de verano, sin saberlo, nuestros jardineros
llegaron para cortar el césped y mi esposa había abierto la puerta.
Yo dejé salir a Sandy, y en cuanto ella salió disparada por la puerta,
le grité a nuestros jardineros que la atraparan, pero ella no iba a
permitir eso. Rápidamente pedí RMB por su retomo seguro. Ella
cruzó la transitada calle de cuatro carriles en la que vivimos, sin ser
34 E l C a m in o A m able

golpeada por ningún auto. Yo la seguí y la acorralé en el callejón


con la ayuda de mi jardinero.
La otra noche nuestra puerta trasera (a la que le habían
reemplazado el motor eléctrico) se abrió sola misteriosamente. Una
vez más, Sandy se había ido. Cuando sale por atrás, normalmente
se dirige hacia el callejón hacia donde hay unos perros de caza, para
decir hola y continuar. Me resigné a buscarla en la oscuridad — ¡y
hacía frío afuera! Me metí al auto para manejar por el callejón y
nuevamente pedí un RMB para su retomo seguro. Apenas había
salido de la entrada, cuando allí estaba en mis faros delanteros, en
la entrada del vecino de al lado. Abrí la puerta de mi auto y brincó
— ella ama viajar en auto.
Una dama a quien conocí recientemente, relató cómo su gato
estaba en agonía, así que lo llevó al veterinario y pidió un RMB para
que el gato estuviera bien. Resultó ser un problema fácil de tratar.
Pide resultados benevolentes a manos llenas para todas las fases de
tu vida con tu amoroso animal. Ellos están aquí para enseñarte algo.
Trátalos con amabilidad.

E n T u B ú s q u e d a d e la Il u m i n a c i ó n
Tomando en cuenta que este libro es para todas las fes religiosas
y creencias, para muchas personas la búsqueda de una institución
religiosa en la que puedan sentirse en casa, puede ser algo agotador,
especialmente en una gran ciudad con tantas opciones. Puedes
pedir un resultado benevolente para encontrar el grupo perfecto
de personas con quienes rendir culto. Puedes decir:
V ida Fa m il ia r 35

También puedes pedir un RMB general para ti. Yo sugiero que


digas:

Expresa esas dos peticiones anteriores con mucho sentimiento.

C u a n d o E n f r e n t a s u n a C ir u g ía
Conforme recorres el camino de la vida, puede haber una o más
ocasiones en las que necesites una operación en un hospital. Ese es
realmente un buen momento para pedir un resultado benevolente.
Necesité una cirugía artroscópica en mi rodilla hace un par de
años, para reparar un daño en el cartílago, causado por una
lesión de esquí, y más tarde otra cirugía para reparar una hernia,
ocasionada probablemente por cargar alrededor de setenta libras
de cajuela, en mis viajes a los mercados de películas, durante los
últimos veinticuatro años.
Me liberé completamente del estrés y la preocupación durante
los procedimientos, pidiendo un resultado benevolente para las
cirugías. Recuerdo que justo antes de que me pusieran a dormir
en la sala de operaciones para la cirugía de la hernia, ¡les estaba
deseando a los cirujanos y las enfermeras un día grandioso y de lo
más benevolente!

F u n e r a l e s y H o m e n a je s
En alguna ocasión en tu vida, asistirás a un funeral o algún tipo
de homenaje para alguno de tus amigos o familiares. Puedes pedir
36 El Camino A m able

un resultado benevolente para poder dar consuelo a aquellos que


están en pena por la persona que murió.
Recientemente mi esposa y yo asistimos a un servicio para
nuestra amiga Mary, que murió seis meses después de haber sido
diagnosticada con cáncer. Ordenamos que se enviaran unas flores
a la iglesia, en donde se iban a ofrecer los servicios. Como nunca
habíamos estado en esa iglesia, en la mañana del domingo del
servicio, busqué la dirección en el mapa del área. Me di cuenta de
que había otra calle paralela con un nombre casi idéntico a una
cuadra. Llamé al ñorista, que me indicó que iban a entregar las
flores justo antes del servicio, y le expliqué sobre las dos calles con
nombre similar. Él dijo que le iba a comunicar la información al
chofer de entregas. Pedí un resultado benevolente para que llegara
a tiempo.
Me paré en la puerta de la iglesia hasta el último segundo antes
de que diera inicio el servicio, pero las flores no llegaron. Perplejo,
entré y me senté para el servicio, consulté a la Asistente del
Reverendo, y me dijo que habían sido entregadas quince minutos
después de iniciado el servicio. El chofer de entregas se disculpó,
diciendo que había quedad atrapado en el tráfico, yo pienso que
dio vuelta en la calle incorrecta.
Pero lo que hizo de esto un resultado benevolente perfecto, fue
que nuestras flores estaban en medio de la larga mesa de buffet en
done estaba colocada la comida. ¡Las ñores iluminaron la mesa y la
habitación! Confía en pedir resultados benevolentes. ¡Funcionan a
la perfección!
CAPITULO CINCO

EL AMBIENTE
CORPORATIVO

P
ara la mayoría de nosotros, el trabajo ocupa un tercio
de nuestras vidas. Nada puede ser más angustiante
que aplicar para un trabajo. Voy a asumir que si estás
buscando un trabajo, has leído todos los libros sobre cómo
solicitar empleo en tu nivel de habilidad, cómo preparar un
currículum, cómo vestirse para la entrevista, y la importancia
de ser puntual.
C u a n d o t e E n t r e v is t a n
Cuando comienzas a contactar a empleadores potenciales,
puedes decir:

Cuando llamas a las compañías pidiendo entrevistas, di:

37
38 E l C a m in o A m able

Cuando vayas a la entrevista, di:

Ten en mente que has solicitado un RMB para el trabajo per­


fecto para ti, así que aunque te rechacen una y otra vez, tienes
que comprender que el trabajo perfecto llegará. Quizás alguien
más tiene que irse primero, y tu ángel guardián está al corriente
del momento en que sucederá.

C uando C o n tra ta s
Del otro lado de la moneda está el empleador. Quieres
contratar a alguien que contribuirá a que crezca tu negocio y
que te ayudará a que sea exitoso. Por lo tanto, dices:

Cuando lo anuncias, puedes decir:

Lo que va a suceder es que tu ángel guardián va a consultar


con sus contrapartes, y se va a asegurar de que esa persona per-
El A mbiente C orporativo 39

fecta lea el anuncio que has puesto en el periódico o en Internet.


Entonces escucha a tu intuición (tu ángel guardián), conforme
entrevistas a los solicitantes. Vas a tener un sentimiento defini­
tivo de que esa persona es la persona para el empleo.

U n R esultado B enevolente S orpresivo


Mi hija trabajó durante tres años y medio, para una de las
aerolíneas más importantes aquí en Dallas, después de un año
los empleados pueden aplicar para otra posición en la compañía,
pero en ese entonces, había una congelación de plazas a con­
secuencia del 9/11. Después de que abrieron las plazas, aplicó
para tres posiciones diferentes, y en cada ocasión alguien más
— usualmente un supervisor — conseguía el puesto. Finalmente
fue promovida a la división de servicio al cliente que tomaba
llamadas sobre quejas todo el día. Después de algunos meses de
eso ya estaba lista para renunciar. Esto fue un resultado benevo­
lente como lo verán a continuación.
Debido a que nuestro negocio se incrementó dramática­
mente durante el mismo periodo, necesitábamos urgen ten nte
a alguien para que trabajara en nuestra compañía, por lo que
la contratamos en una base de medio tiempo, pagándole el
mismo sueldo que ganaba trabajando para la aerolínea tiemplo
completo, y trabajando para nosotros medio tiempo. No solo fue
benéfico para ella a nivel monetario (recientemente recibió un
aumento de sueldo), sino que además ahora tiene tiempo para
trabajar en algunas ideas para crear su propio negocio.

Tu P rimer D ía en el T rabajo
El primer día en un nuevo trabajo, comúnmente sientes la
presión de “encajar” y hacer nuevos amigos. Antes de entrar a
un nuevo lugar de trabajo, puedes desear decir:
40 E l C a m in o A m able

Puedes elegir cambiar esto para que se adapte a tus circunstancias.


Ahora vamos a cubrir algunas de las posiciones generales en
una compañía.

V en tas
Ventas — eso es algo que conozco. En el pasado, después
de dejar el servicio militar, tuve una variedad de empleos
en ventas, para poner alimentos en la mesa mientras estaba
comenzando mi primer negocio de turismo. Viajé vendiendo
cuchillos y llaves. Vendí planes de recolección de deuda,
casas, cacerolas y sartenes, seguros y anuncios en el periódico.
Aprendí algo en cada uno de esos empleos.
Si es una reunión importante con grandes ramificaciones
para tu compañía, puedes agregar a la petición, “que sea
incluso mejor de lo que puedo esperar o anticipar” Como lo
mencioné previamente, agrega esto casi como una ocurrencia
tardía o algo espontáneo.
Aunque estés en una habitación llena de teléfonos, con otras
3 0 0 personas intentando vender algún producto o servicio,
puedes pedir un resultado benevolente cada mañana (o en el
horario de tu turno), para ser puesto en contacto con las per­
sonas que van a querer comprarte algo, es la misma situación si
tienes que hacer “llamadas en frío” todo el día, de un negocio a
otro o de una casa a otra. Pide un RMB cada día, para encontrar
a las personas que desean comprarte.
Ya sea que trabajes como agente de seguros que recibe pis-
El A mbiente C orporativo 41

tas para ventas de una compañía, que trabajes como agente de


bienes raíces, vendas autos para un distribuidor, o estés en una
de las diversas posiciones de ventas por comisión, puedes decir:

Te vas a dar cuenta cómo sube el porcentaje de las ventas


que haces. Puedes ajustar esta petición para que se adapte a tus
circunstancias específicas.
Cuando terminé el primer borrador de este libro, se lo di
a leer a muchos de mis amigos para que me hicieran correc­
ciones y sugerencias. Mi amiga Gilí en Nueva York fue la única
persona a quien le mandé el manuscrito, sin haber tenido la
oportunidad de enseñarle cómo hacer peticiones de resultados
benevolentes. Su esposo es un agente de bienes raíces, y como
cualquier otro sabe en ese negocio, hay que buscar casas con­
stantemente para venta y después hay que buscar prospectos
para la compra. Le sugería que pidiera un RMB para que su
esposo tuviera éxito para encontrar contrataciones de venta y
para vender.
Ella me contó que la primera mañana que pidió el resul­
tado benevolente, su esposo dijo que iba a visitar a una mujer
para una contratación. Ella le preguntó si se veía promisorio,
y el respondió, “No, no lo parece, pero voy a ir de cualquier
forma”. Ella no le comentó acerca de la petición, y ambos
salieron hacia el trabajo. Esa tarde ella les comentó a sus dos
hijos lo que había pedido. Cuando el regresó a casa, les relató,
“Saben, ¡no van a creerlo! no solo obtuve esa contratación,
¡sino que llegó otra más a la oficina!” Ella dice que esto fue
“extraordinario”.
42 E l C am in o A m able

Hacer una presentación dentro de tu compañía puede ser


estresante, si es para la alta gerencia.
Entonces puedes decir:

Cuando hagas esto, tu nivel de estrés se reducirá, porque


te sentirás confiado de que harás lo mejor en la presentación.
C o n t a b il id a d , In v e s t ig a c ió n
y D esa rro llo
¿Y el departamento de contabilidad? Si la división de ventas
es el brazo derecho de un negocio, el departamento de contabi­
lidad son los riñones, ya que todo tiene que fluir a través de este
departamento. Como uno de los contadores, o el contador de tu
compañía, quizás no seas tan apreciado como las otras partes de
ella, ¡pero sí que eres importante!
Cuando participes en reuniones con la gerencia y con otros depar­
tamentos, puedes pedir resultados benevolentes para esas juntas,
especialmente para aquellas en las que tienes que reportar la salud
de la compañía. Y cuando tienes que preparar reportes de impues­
tos, debes pedir un RMB para navegar con el reporte sin problemas.
Si estás en investigación y desarrollo, cada día puedes desear
decir algo como:
E l A m bien te C o r p o r a t iv o 43

P roducción y S eguridad

Si tu trabajo implica la producción del producto para


tu compañía, entonces al llegar a la planta, puedes decir la
petición del RMB anterior. Puedes cambiarla para adaptarse a
tus circunstancias específicas. Pide RMBs para cada una de tus
reuniones de producción.
Si trabajas en la seguridad para tu empresa, puede ser que
quieras decir:
Puede ser que seas llevado a descubrir uno de los diversos
tipos de programas espías usados por la competencia u otros
gobiernos, o posiblemente a una persona que esté tratando de
pasar de contrabando información vital.

G erencia y B eneficencias
Com o el gerente o director de una em presa, tienes
m últiples responsabilidades. Conform e te reúnes con tus
gerentes, supervisores y em pleados, pide un resultado
benevolente para que las ju n tas sean productivas t
contribuyan al éxito de la com pañía. Y naturalm ente
44 E l C am in o A m able

un RMB para esas reuniones con tus clientes, abogados y


personal del gobierno.
Si trabajas para una organización sin fines de lucro reca­
bando dinero para caridad, cada día afirma:

P r o b l e m a s en el T r a b a jo
Veamos entonces algunos de los problemas con los que te
puedes encontrar en el trabajo. Posiblemente tengas un prob­
lema con el solo hecho de trabajar con otra persona, debido
a un conflicto de personalidad. Puedes pedir un resultado
benevolente cada vez que tengas que trabajar con esa persona.
Si es en cada minuto del día, entonces puedes pedir el RMB al
inicio del día. Si solo te encuentras con esa persona periódi­
camente, recuerda pedir el RMB antes de la reunión, para que
Huya suavemente y sin conflicto.
Pero tal vez la persona sea demasiado desagradable como
para trabajar con ella, y sufres de abuso verbal o sexual e
insinuaciones, por lo que sabes que es inevitable hablar con tu
supervisor sobre la situación. Entonces dices:

Nadie tiene derecho a tratarte de esta forma — no en estos días


y en esta era.
E l A m bien te C o r p o r a t iv o 45

También debemos cubrir el problema tan serio de descu­


brir actividades ilegales, ya sea en tu departamento o en tu
empresa. Esto puede involucrar todo el camino hasta el direc­
tor de la empresa, o incluso con algunas autoridades externas.
Cuando lo hagas, puedes desear decir algo como esto:

Nuevamente, puedes desear ajustar esta petición para adap­


tarse a tu situación específica. Sabe que tu ángel guardián se
hará cargo de ti, y que lo que sea que suceda, ¡será lo mejor
para ti y para tu familia!
Una persona que está conduciendo actividades ilegales
es un lastre para la compañía. Sus acciones pueden costarle
millones de dólares a la empresa en cuotas legales, acuerdos
y pérdidas; puede afectar el buen nombre de la compañía; y
causar que sus acciones se desplomen. Las buenas personas
pueden renunciar por las acciones de esa persona, debilitando
a la empresa y poniéndola en riesgo o banca rota. La mayoría
de los gerentes lo comprenderán y tomarán la acción apro­
piada. Si no lo hacen, puedes ser el que les cueste las cuotas
legales y los acuerdos. Lo que sea que pase, ¡será un resultado
benevolente para ti!
CAPÍTULO SEIS

NEGOCIOS PEQUEÑOS

Si eres dueño de un negocio pequeño — de uno a veinte


empleados, digamos — tú eres el “chef y el que lava las botel­
las”. Puede ser la tienda de la esquina, una tienda de abar­
rotes, un revendedor, un contratista, o uno que dé servicio a
las empresas. No soy capaz de cubrir los miles de negocios
individuales, pero intentaré ser lo suficientemente general para
cubrir a muchos de ellos. Puedes pedir resultados benevolen­
tes para atraer nuevos negocios, contratos de negocio, para
contratar a los mejores empleados para ti, para comprarles a
los mejores proveedores, para trabajar con abogados, llenar
formas de impuestos del gobierno, u otras formas.

P a r a S o l ic it a r N u e v o s C l ie n t e s y
C o n t r a t o s d e N e g o c io s
Dos amigos de nosotros, Billy Josephine, son dueños de un
negocio de pintura de alto nivel y de contratación. Hace un
par de años, la economía estaba baja en esa zona y las cosas
habían estado difíciles para ellos. Billy no se había acostum b­
rado todavía a pedir resultados benevolentes, pero su esposa
Jo y yo pedimos un resultado benevolente para que su negocio
se levantara. En un mes, consiguieron un contrato de pintura

47
48 E l C a m in o A m able

para una casa de 2 0 ,0 0 0 pies cuadrados que les iba a tomar


alrededor de un año completar.
Cuando le hagas una propuesta a un cliente potencial
nuevo, di:

Puedes variar la afirmación de acuerdo a las circunstancias.


También puedes agregar espontáneamente, si sientes que
puede ser una oportunidad grande para ti, y que sea
incluso mejor de lo que puedo esperar o imaginar”.
Yo digo algo similar a esta petición de RMB todo el tiempo,
cuando estoy solicitando nuevos clientes. Si no obtengo el
negocio, entonces sé que podría haber tenido más problemas
con ese cliente potencial, que lo que valía el negocio, o que
algo incluso mejor va a llegar a mi camino.
Recibí un correo de una dama en Irán que tenía problemas
con su negocio allá. Después de leer sobre la petición de RMBs,
ella pidió un resultado benevolente para que su negocio se
recuperara. Reportó que justo cuatro días antes de enviarme el
correo, firmó cuatro contratos, y al parecer iba a firmar otros
cuatro la siguiente semana.
Cuando estoy negociando un contrato, yo digo:

De esta forma, sé que los términos serán los mejores que pueda
negociar. Intenta ser más consciente, y escucha la inspiración y
N egocios P equeños 49

los mensajes de tu ángel guardián. Si tienes un mal sentimiento


en relación a un contrato, no lo ignores. Retrocede si sientes
que debes hacerlo.

C u e s t io n e s d e S e g u r id a d
Si operas cualquier tipo de establecim iento minorista,
entonces sabes que el hurto puede drenar tus ganancias. Cada
día puedes decir:

Posiblemente lo que ocurrirá es que una persona de seguridad


que esté de guardia, aparezca justo en el momento en que un
ladrón estaba a punto de robar algo, o puede ser que el ladrón
sea visto en alguna de las cámaras de seguridad, o tal vez un
policía entre justo a tiempo para prevenir el robo. Pide un RMB
cada día y observa tú mismo cómo se reducen esos robos. La
petición de arriba funciona igual si existe el peligro de un robo
a mano armada.
Si eres un contratista, la seguridad es un gran problema para
ti. Las lesiones en el trabajo son costosas para ti en términos de
la pérdida de mano de obra, horas perdidas y costo de seguros.
Así que te sugiero que digas cada día:
50 E l C am in o A m able

No te olvides de pedir un RMB cada vez que tu equipo y tú se


transporten hacia un sitio de trabajo.

P ro blem a s con E m pleado s


Aunque es importante contratar al empleado correcto en
una empresa grande, encontrar a la persona correcta para un
trabajo en una empresa pequeña, puede hacer que la empresa
crezca o quiebre. Yo siempre pido un RMB para contratar a la
mejor persona para llenar un puesto particular en mi empresa.
Algunos negocios pequeños tienen que contratar inmi­
grantes ilegales, para llenar puestos que nadie más quiere
desempeñar. Si esas son tus circunstancias, ya sea una obra,
un restaurante o una operación de servicio, sabes que si son
deportados, esto puede casi terminar con toda la operación.
Puede ser que desees decir cada semana, día o mes:

Estoy seguro que no tengo que recordarte que los trates con
respeto y que les pagues los salarios razonables.

V en d ed o res y F in a n cia m ien to


Si tú o alguien más en tu compañía tiene que comprar
bienes constantemente a vendedores, entonces podrías decir:
N egocios P equeños 51

Puedes descubrir que tus vendedores de pronto te ofrecen


mejores precios y términos de los que tenías antes, incluso si
no se los pediste.
Como dueño de un negocio pequeño, hay veces en las que
tienes que encontrar financiamiento para hacer crecer tu nego­
cio o para pagar deudas a corto plazo. Puedes necesitar [man­
dam iento bancario o inversionistas. Cuando te encuentres con
un banquero di:

Si no recibes el dinero de ese banco, es porque otro banco u


otra forma de financiamiento estará disponible para ti y será
incluso mejor.
Cuando te encuentres con inversionistas, di:

Su aprobación y su oferta pueden ser sorprenderles. Por otro


lado, debes estar preparado para aceptar su rechazo. Puede
ser por razones válidas, como que necesitan más información
antes de comprometerse, o porque tu propuesta simplemente
no corresponde con su portafolio de inversiones. Cualquiera
que sea la razón, se debe a que tu ángel guardián puede ver
más adelante en el camino de lo que tú puedes. Así que per­
manece confiado y mantén tus esperanzas.
52 El C amino A m able

Durante varios años, estuve intentando montar un par de


“paquetes” diferentes de películas. He coproducido varias
películas, pero nunca las había llevado desde el financiamiento
hasta la producción. Durante ese tiempo, viajé a París, Canes,
Budapest, Praga y San Petersburgo, Rusia, tratando de reunir
todas las piezas. Armé los planes de negocios y los presupues­
tos, escribí las sinopsis, los tratos, e incluso una gran parte
del guión — pero aun así no llegaban a nada. Durante todo
ese tiempo, estuve pidiendo resultados benevolentes para
mis esfuerzos. Pero fui paciente, porque sé que los resultados
benevolentes funcionan a la perfección. ¡Pero simplemente
parecía que estaban tomando demasiado tiempo!
Cuando tuve la “inspiración” para hacer este libro, pregunté
en meditación por qué no había tenido éxito en el montaje de
esos paquetes de películas. El mensaje que recibí fue que hacer
esas películas me habría puesto en un camino completamente
diferente, y no me habría despertado un día inspirado para
escribir este libro. También me dijeron que este libro y los
siguientes — no me pregunten; no lo sé todavía — iban a ser
más importantes de lo que cualquiera de esos filmes hubieran
sido. Así que se paciente. Tu ángel guardián está trabajando
para acomodar los eventos ¡de forma que sea lo. mejor para ti!

C o n ta d o res y A bogados
Si tienes un negocio pequeño, la época de impuestos puede
ser muy estresante. C. J. en W isconsin ha estado pidiendo
resultados benevolentes durante tres años para su negocio de
entrenamiento y curación de caballos, y ella me envía periódi­
camente correos sobre sus éxitos. Ella me reportó hace algún
tiempo que pidió un resultado benevolente cuando ella y
su esposo visitaron a su nuevo contador, cuando antes ellos
hacían sus propias declaraciones de impuestos. El contador
N egocios P equeños 53

descubrió que tenían un reembolso cuantioso por los tres últi­


mos años, que compensaba de más lo que debían ese año.
Cuando manejas un negocio pequeño, ocasionalmente
debes utilizar los servicios de un abogado. Ya sea para contra­
tos con inversionistas, proveedores, clientes, o cualquiera de la
miríada de otras necesidades normales de negocios, es impor­
tante un buen abogado para la salud de tu negocio. Cuando
elijas un abogado, puedes afirmar:

Algunas veces es necesario un abogado en los momentos en


los que no puedes arreglar una disputa. Naturalmente, yo pido
RMBs para llegar a una solución razonable en cualquier disputa
que pueda tener con mis clientes, por lo que rara vez necesito
los servicios de un abogado. La última vez que necesité mane­
jar una disputa fue hace como cuatro años y medio.
Hice un contrato con una pequeña televisora, y com o
parte del contrato de ventas, se suponía que tenían que hacer
ciertas cosas, pero no las hicieron. Los demandaron, y yo fui
demandado ju n to con ellos, y otra com pañía de distribución.
Cuando recibí los papeles, inm ediatam ente pedí un resultado
benevolente para mí. Todo aquel que ha estado involucrado
en una demanda civil sabe cuántas solicitudes de respuestas
deben hacerse. Este fue un momento muy tenso, ya que mi
negocio tenía poco flujo de efectivo después del 9/11. Fui
afortunado de tener un amigo de preparatoria, que era abo­
gado en otro estado y me ayudó con las respuestas durante
vanos meses.
54 E l C am in o A m able

Finalmente el abogado de la demandante amenazó con ir al


juez si no contrataba consejo legal. Debido a que los proced­
imientos legales eran en Houston, no quería contratar a un abo­
gado de Dallas y tener que pagar sus viajes y gastos cada vez,
pero no conocía ningún abogado en Houston. Pedí un resultado
benevolente para encontrar un abogado que pudiera manejar
mi caso y que me cobrara tarifas razonables. Al siguiente día
cuando estaba sacando la basura al callejón, mi vecino de enfr­
ente también estaba afuera. Sabía que él era abogado, así que
le pregunté si podía recomendarme a uno en Houston. Me dijo
que sí, ¡su sobrino era abogado con práctica en Houston!
Con mi nuevo abogado, todos acordamos sostener la medi­
ación en Houston, con los demandantes, la televisora y el
otro distribuidor. El jefe de mi abogado, “resultó ser” el mejor
abogado internacional en Texas, y también estuvo presente.
Naturalmente dije con gran sentimiento:

Los demandantes comenzaron demandando $ 5 ,0 0 0 ,0 0 0 a


la televisora y $ 1 ,0 0 0 ,0 0 0 a mi compañía y lo mismo a la otra
compañía de distribución. Al final de la mediación, acorda­
ron aceptar, incluido el pago de cada quién a sus abogados,
$ 4 0 0 ,0 0 0 para la televisora, $ 1 0 0 ,0 0 0 a la otra compañía de
distribución, ¡y cero para mi compañía! Mi único gasto fue mi
abogado, que no fue barato, pero aun así fue mucho mejor de
lo que podría haber sido.
Si eres un abogado, entonces puedes solicitar un RMB cada
vez que representes a tus clientes en la corte, mediaciones y
Negocios P equeños 55

otras negociaciones. Descubrirás que se incrementará tu éxito,


junto con el aprecio de tus clientes.
Confío en que para este momento, ya puedes ver cómo pedir
resultados benevolentes puede hacer tu vida menos estresante
en el manejo de tus negocios. Ciertamente así ha sido para mí.
¡Es el Camino Amable!
CAPÍTULO SIETE

POLÍTICA

lgunos de ustedes pueden pensar que no tienen nada

A que ver con el proceso político. Pero en cualquier


momento en el que necesitan contactar a alguien
en su pueblo, ciudad, estado, provincia o gobierno nacional,
se están comunicando con una persona que posiblemente fue
designada o elegida para ese puesto. Debes pedir resultados
benevolentes para tratar con esas personas — ciertamente
si contribuyes con sus campañas políticas. Quieres que ellas
respondan favorablemente a tu petición, ya sea reparar un
bache en la calle, arreglar un farol, o recoger la basura — e
incluso para algo realmente grande como inscribir a tus hijos
en alguna institución de aprendizaje superior.

P r e s e n t a r C a n d id a t u r a
Si has decidido postularte para un cargo electo en tu
gobierno local, estatal o nacional, puedes pedir resultados
benevolentes para numerosos eventos. Puedes pedirlos para
reuniones con tu personal de campaña y tus partidarios y para
los debates con las otras personas postuladas para tu cargo.
Ya que los debates pueden ser el catalizador para tu elección o
derrota, tal vez desees decir:

57
58 E l C am in o A m able

Si no eres electo y habías pedido un resultado benevo­


lente para ser electo, entonces tienes que confiar en que tu
ángel guardián tiene algo todavía mejor esperando para ti.
Posiblemente necesitas más experiencia y “formación” antes de
postularte para el cargo otra vez. Tal vez alguien en un cargo
superior se impresione contigo y te ofrezca un trabajo que te
dará mayor experiencia, o que te permitirá postularte y ser
electo para un cargo todavía más alto que el que querías origi­
nalmente. O es posible que permanezcas en el sector privado
y seas una influencia benevolente para aquellos en un cargo,
sobre lo que será mejor para sus electores.

A nte un C onsejo M unicipal


Puede haber ocasiones en las que sientas que es necesario
expresar tu apoyo a favor o en contra de una propuesta, ante
una com isión de planeación o un consejo municipal. Ese fue
el caso hace varios años cuando personas bien intencionadas
en mi suburbio de Dallas, decidieron com prar tierra cerca
de la escuela secundaria para donarla para un centro para
niños del YMCA. Su ubicación iba a estar a media cuadra
de mi casa, así que ciertam ente era una preocupación para
nosotros.
Ellos no habían considerado el hecho de que las instala­
ciones que querían construir, iban a ser usadas por menos de
un 10 por ciento de los estudiantes de la escuela secundaria
(de acuerdo con el presidente del cuerpo estudiantil), porque
Política 59

en realidad era para niños más pequeños. Y el tráfico se iba a


volver un desastre debido a los padres que llevarían y reco­
gerían a sus hijos, justo en el momento en que los estudiantes
de secundaria salieran de clases.
Naturalmente pedí un resultado más benevolente para que
el edificio no fuera construido allí, y me presenté junto con un
número de mis vecinos, ante nuestro pequeño consejo munici­
pal. No estábamos en contra de que se construyera el centro
para los niños, solo pensábamos que su ubicación tenía que
estar cerca de la escuela primaria, en dónde muchos más niños
podrían usar las instalaciones.
Pensé que habíamos perdido cuando el consejo votó para
permitir la construcción. Pero después leí que solo iban a
permitir que las instalaciones fueran usadas por residentes de
nuestra localidad. Eso no era posible, porque los niños de toda
la zona de Dallas podían usar cualquier instalación del YMCA.
Al final, el grupo donó la tierra a la escuela secundaria, y se
construyeron canchas de tenis, esto dio como resultado un
uso más gentil para la tierra y mucho menos tráfico en el área.

Para un “C amino S uperior” de S ervicio


Aquellos de ustedes electos para un cargo, deben pedir un
resultado benevolente para elegir el equipo correcto que trabaje
mejor con ustedes, para ustedes, y para las personas que los
eligieron. También pueden pedir resultados benevolentes para
sus reuniones con otros oficiales electos, y cuando se reúnan
con sus electores.
Si un oficial electo te designa para un cargo, puedes pedir
un RMB para trabajar con esa persona y para ella, para trabajar
con el equipo de esa persona y nuevamente para trabajar con
sus electores. Todas estas peticiones te ponen en un “camino
superior” de servicio.
60 E l C a m in o A m able

A b u s o y A c t iv id a d e s Il e g a l e s
Digamos que te ves en una situación que no fue la que
buscabas. Posiblemente la persona para la que trabajas está
abusando de ti verbal o sexualmente, o has sido empujado a
actividades corruptas o ilegales. Entonces, como lo mencioné
antes para alguien en el sector privado, puedes decir:

También puedes ser más específico con relación a quien le


estás revelando esta información.
En el caso de que no te hayas dado cuenta (y estoy seguro
que si te has dado cuenta), han ocurrido recientemente
muchas revelaciones sobre actividades ilegales. Las cosas ya no
permanecen escondidas como lo hacían en el pasado. En mis
meditaciones, me han informado que más de una persona en
el sector público que lea este libro, revelará actividades ilegales
y/o corrupción en los cargos públicos. Entonces ¿quieres estar
escondido en un clóset junto con los otros, cuando alguien
más abra la puerta y haga brillar la luz adentro, o quieres ser el
que abra esa puerta? Es tu elección.
Servir a tu localidad, ciudad, condado, provincia, estado o
país, puede ser sumamente gratificante, no tanto monetari­
amente, pero por el hecho de saber que haces una diferencia
para ayudar a las personas a vivir vidas más benevolentes —
¡un resultado benevolente por tus esfuerzos!
CAPITULO OCHO

VIAJES

A hora me gustaría darte algunas ideas sobre la uti-


/ \ lización de los resultados benevolentes cuando via-
JL A jas, yo creo sinceramente que esto hará que tus viajes
sean menos estresantes para ti. He escuchado que muchas
personas no viajan por miedo. Una vez que comienzas a viajar
y a conocer personas de todo el mundo, te das cuenta de que
todos somos solo diferentes colores de la misma tela. Si estas
historias pueden alentarte más a que explores nuestro hermoso
mundo, entonces estoy seguro de que tendremos un planeta
mucho más pacífico.

P ara V iajes por C arretera


Recientemente, mi esposa y yo volamos a Sacramento y
condujimos hacia Monte Shasta para asistir a una conferencia.
Naturalmente pedi un resultado benevolente para tener un viaje
seguro de ida, y a nuestro retorno, para el camino de regreso.
En un noticiero de la radio, dijeron que la Patrulla de
Caminos de California (CHIP) se estaba poniendo difícil en
la interestatal 5, y que iba a multar a cualquiera que estuviera
apenas sobre el límite de velocidad. Estábamos conduciendo
de regreso y yo estaba rebasando a algunos autos que iban más

61
62 El C amino A mable

lento, cuando una camioneta pickup de gran tamaño se ubicó


detrás de mí. Pasé un camión y algo me dijo que dejara que
el pickup me rebasara. Después de que pasó, me abrí otra vez
para rebasar un par de autos. De repente una patrulla (CHIP)
arrancó desde atrás de unos árboles y arbustos en el divisor
mediano. Tuve que regresar al carril lento para permitirle que
pasara al camino. Se adelantó y detuvo a la camioneta pickup.
Pudo haberme detenido a mí en su lugar, pero no lo hizo — un
resultado definitivamente benevolente.
Nuestros dos amigos, Joy y Bob, condujeron recientemente
a Las Vegas desde Dallas. Ellos pidieron un resultado más
benevolente para su camino, para el hotel y para el estaciona­
miento. Me contaron que cada vez que pasaron por una trampa
de velocidad con radar de policía, estaban detrás de camiones
y de tráfico que los había hecho reducir la velocidad. En Las
Vegas, se les asignó exactamente el piso del hotel que ellos
querían con vista al Strip. Y encontraron el lugar perfecto para
estacionarse en donde su auto no podía ser dañado.

C uando E stás en L ista


de E spera en el A eropuerto
Todos los que son empleados de líneas aéreas (y familiares
de empleados de una línea aérea) saben lo estresante que puede
ser estar en lista de espera para los pocos lugares que dejan
los que no llegan al vuelo. Como lo mencioné anteriormente,
nuestra hija fue empleada en una línea aérea durante tres años
y medio antes de trabajar para nosotros, durante ese tiempo
pudimos volar gratis o a un precio sumamente reducido con un
número de aerolíneas. Como familiares de empleados de otras
líneas aéreas, siempre estábamos al final de la lista, por lo que
pedía un resultado más benevolente para subirme a ese avión.
VlAIES 63

No puedo decirles cuántas veces fuimos las últimas perso­


nas en abordar el avión en los últimos lugares. Muchas veces
parecía imposible, porque solo había cinco lugares libres y seis
o siete personas en la lista de espera. Pero la mayoría de las
veces había solo un asiento y las dos o tres personas en la lista
de espera antes de mí, dejaban pasar el lugar, esperando un
vuelo en el que pudieran viajar juntos.

Para D ías E speciales en las V acaciones


Pedir RMBs puede dar como resultado días muy especiales
en las vacaciones. Maureen me escribió para decirme que pidió
un resultado benevolente para un nado con delfines que reservó
para su familia en Hawái. Era el día más perfecto que uno pud­
iera imaginar, dijo ella. El agua estaba tranquila como un lago,
en lugar de las olas usuales, ¡y los delfines llegaron dos veces!
El nado con delfines fue un regalo especial para la familia de su
hermana, porque su hermana había muerto en un accidente de
auto unos meses antes, y era su primera Navidad sin ella.

Para V iaies de N egocios


Como distribuidor de películas internacionales y de pro­
gramas de TV (y antes de eso, como un operador turístico inter­
nacional), debo hacer viajes frecuentes como parte de mi trabajo.
Esos viajes pueden ser muy estresantes. En los días en los que
no pedía resultados benevolentes, estuve en dos accidentes de
autobús en las montañas, que afortunadamente fueron meno­
res. Perdí mi cuota de conexiones. Una vez de regreso de Brasil,
tuvimos que regresar cinco horas de vuelo y retornar a Río de
Janeiro cuando nuestro avión perdió un motor.
Como un ejemplo de cómo utilizo la petición de resultados
benevolentes en viajes de negocios, comenzaré por un viaje
64 El C amino A mable

a un mercado de TV a Cannes, Francia, en abril del 2004.


Estaciones de TV, televisoras y compañías de DVD, llegaron de
todo el mundo para comprar películas y series de TV. La noche
anterior a mi partida, se me ocurrió ver mi pasaporte mientras
empacaba ¡y descubrí que había expirado el día anterior!
Inmediatamente pedí un resultado más benevolente para lle­
gar al avión el día siguiente. Con la ayuda de mi hija y mi esposa,
fuimos capaces de hacer una cita en línea a las 10:00 a.m. con la
oficina de pasaportes de Houston y descargamos la forma que
necesitaba llenar para obtener un nuevo pasaporte. Contacté
a la línea aérea Lufthansa, y me dijeron que podía volar desde
Houston en lugar de desde Dallas.
Me fui en el primer vuelo del dia de la aerolínea Southwest a
las 6:30 a.m. de Dallas a Houston con todo mi equipaje, y tomé
un taxi directamente a la oficina de pasaportes. Pedí un RMB
para un lugar para dejar mi equipaje, le pregunté al chofer del
taxi si había un hotel cercano, y me dijo que sí. Nos detuvimos
en el hotel y el conserje accedió a guardar mi equipaje mientras
obtenía mi pasaporte. Fui la primera persona de la fila cuando
se abrió la puerta de la oficina de pasaportes, y descubrí que en
tanto tuviera una cita, me atenderían cuando llegara. Dos horas
y media después, tenía mi pasaporte, recogí mi equipaje y tomé
un taxi hacia el aeropuerto.
En octubre regresé otra vez a Cannes. Decidí que en este
viaje también iba a exhibir en un pequeño mercado de filmes
en Milán, Italia, que había sido movido cuatro días después de
que terminara el de Cannes. Durante la semana, fui invitado
por la organización del mercado de Milán, para tomar parte
de un fin de semana en el Lago Como, Italia (George Clooney
tiene una casa allí que fue usada en la filmación de Oceans 12).
Ellos ofrecieron alimentos y tours gratuitos, pero se suponía
que yo tenía que pagar el hotel. Descubrí que algunas perso-
VlAIES 65

ñas también recibieron hospedaje gratuito en el hotel, así que


pedí un RMB para que también me dieran gratis el hotel. En el
autobús, me senté justo detrás del caballero italiano a cargo, y
él arregló que me dieran el hospedaje del hotel sin costo — en
un hotel cuatro estrellas justo sobre la orilla del lago.
Durante el fin de semana, un grupo viajamos a la frontera
Suiza a un mercado de fabricantes, en donde compré un par
de trajes italianos que necesitaban compostura. Uno de los
hombres que venía con nosotros era ruso, y en el camino de
regreso, nuestro taxi fue detenido en la frontera mientras los
italianos verificaban su pasaporte y sus papeles. Pedí un resul­
tado benevolente, y sin mucha demora, partimos.
Mientras estuve en Milán, fui al centro de la ciudad a comer
a un restaurante recomendado por el conserje del hotel. Estaba
en una “calle peatonal”, en la que no estaban permitidos los
autos. Alrededor de las 11:00 p.m., me dirigí a un boulevard
para buscar un taxi. No había ninguno en absoluto que no
hubiera sido contratado de antemano. Después de varios minu­
tos esperando que pasara un taxi disponible, pedí un resultado
más benevolente para que llegara un taxi pronto. Antes de
poder terminar la petición, un taxi salió zumbando de una
esquina y lo tomé para el viaje de regreso al hotel.
Un día después de que terminó el mercado de Milán, me
levanté temprano y tomé el primer tren al Lago Como para
cruzar la frontera a Suiza y recoger mis trajes. El Lago Como
estaba inundado de personas debido a una carrera internacio­
nal de ciclismo. Me dirigí a la oficina de turismo para preguntar
si había un autobús que pudiera tomar para cruzar la frontera,
y me informaron que esos autobuses habían sido cancelados
debido a la carrera. En ese momento, descubrí que había
dejado mi pasaporte en el hotel en la ropa que había usado la
noche anterior. La dama de la oficina de turismo vio mi cara de
66 E l C am in o A m able

pánico. Cuando le expliqué mi predicamento, ella sugirió que


llamara a la tienda desde un teléfono público que estaba afuera
para ver qué podían hacer.
En lugar de hacer eso, lo primero que hice después de dejar
la oficina fue decir:

Después vi que había un hotel al lado y fui a ver si el con­


serje podía ayudarme. El llamó a la tienda por mí, y acordaron
llevar los trajes del otro lado de la frontera. Entonces él ordenó
un taxi, pero me explicó que tendría que caminar varias cua­
dras para tomar el taxi, porque las calles estaban cerradas por
la carrera de ciclistas.
Pero diez minutos más tarde, llegó el taxi — había podido
encontrar el camino a través de las multitudes. Después de
darle una generosa propina al conserje, nos dirigimos hacia
la frontera, pero nos cambiaron la ruta debido a la carrera de
ciclismo. Pedí otro RMB para que nos esperara la persona con
los trajes. A cincuenta yardas del punto de revisión de la fron­
tera, estaba una dama esperando pacientemente por nosotros,
con los trajes en la mano. Agradecidamente recogí los trajes y
nos dirigimos de vuelta a la estación del tren.
La mañana que dejé Milán, tenía un vuelo muy temprano y
tenía que dejar el hotel alrededor de las 5:00 a.m. Le pregunté
al conserje si había alguien más que partiera a esa misma hora,
que pudiera compartir el taxi conmigo para el largo viaje, pero
no tenía a nadie en su lista. Pedí un resultado más benevo­
lente para que alguien compartiera el taxi, pero a la mañana
siguiente llegué a la recepción y no había nadie a la vista. Estaba
VlAIES 67

resignado a pagar un taxi costoso hacia el aeropuerto, cuando


cinco o seis doctores de la Clínica Mayo, que habían estado en
Milán para una conferencia sobre cáncer, caminaron hacia la
recepción. Ellos habían reservado un mini autobús para que los
llevara al aeropuerto ¡y me invitaron a acompañarlos sin costo!
En abril pasado, tenía otro viaje programado para el mer­
cado en Cannes. En esta ocasión un cliente de mi amigo
francés, Dominique, le ofreció su casa de cinco habitaciones
en Megeve, Francia (un gran centro turístico de esquí), para
la semana anterior a nuestra llegada a Cannes. El segundo día
que pasamos allí, cinco de nosotros (Dominique y yo, junto
con dos hombres de Holanda y otro de Francia) condujim os
hacia L'Aiguille du Midi, cerca de Mont-Blanc, para esquiar
en el famoso Vallée Blanche. Habíamos contratado un guía,
porque íbamos a esquiar tres glaciares (comenzando desde
una altitud de 3,80 0 metros — más de 12,000 pies), que tenía
grietas en las que podíamos caer. El guía nos hizo ponernos
arneses para sacarnos fuera de la grieta si alguno caía en una.
No es necesario decir que pedí un resultado benevolente para
todo el día de esquí.
Lo necesitaba, porque ya era tarde en la estación de esquí y
la nieve se estaba derritiendo. No había habido tormentas de
nieve en dos semanas, haciendo que las pistas de esquí estu­
vieran llenas de hielo y fueran traicioneras. Fue especialmente
difícil cuando nos movimos desde un glaciar hacia el siguiente
a través de grandes trozos de hielo. Había un poco de nieve
allí, y en una ocasión incluso tuvimos que quitarnos los esquís
y deslizamos sobre el hielo glaseado. Entonces me caí hacia un
sendero muy estrecho con una pendiente pronunciada, con un
esquí debajo de mí. En la parte inferior de la pendiente, había
un campo de bloques de hielo, del que nunca hubiera sido
capaz de escapar. Los otros esquiadores ya habían pasado la
68 El C amino A mable

subida, y solo mi amigo Dominique estaba detrás de mí, al prin­


cipio, no vi cómo podía regresar a la pista, porque la pendiente
estaba muy pronunciada. Me tomó algo de trabajo, pero even­
tualmente con su ayuda, pude volver arriba. Si él no hubiera
estado detrás de mí, podría haber estado allí durante una hora
o más, esperando a que alguien regresara a donde yo estaba.
Después del mercado de TV, necesitaba recoger mi maleta
de esquí en un suburbio lejano al norte de París, antes de
regresar a los Estados Unidos. Tomé el tren rápido TGV hacia
París y pasé la noche con Neil, un amigo productor y escritor
que era originario de Dallas. Amo quedarme en su aparta­
mento, no solo por las buenas conversaciones, sino porque
puedo observar el espectáculo de luces de la Torre Eiffel desde
la ventana de su sexto piso, antes de cerrar los ojos para irme
a dormir. Esa noche pedí un resultado benevolente para llegar
a tiempo al aeropuerto para mi vuelo.
A la mañana siguiente Neil llamó a un taxi y escuchó una
respuesta automática diciendo que uno se pondría en camino.
Él me ayudó a bajar mi equipaje. Era un sábado por la mañana,
y su apartamento está en un área residencial con poco tráfico
a esa hora del día. Esperamos y esperamos, pero no había taxi.
Neil estaba a punto de correr a un sitio de taxis que estaba a tres
cuadras de distancia, cuando espié un taxi algo lejos de la calle.
Pedí un resultado más benevolente para que el taxi se dirigiera
hacia nosotros. Dio la vuelta y salió en otra dirección, pero justo
detrás había otro taxi que procedió a detenerse a diez pies de
nosotros para dejar a un pasajero. ¡Qué resultado benevolente!
Rápidamente lo contratamos y Neil le dio la dirección. Él dijo
que conocía la dirección y partimos. ¡Lo pueden creer! De los
miles de taxistas en París, mi chofer había crecido a solo cuatro
cuadras de donde tenía que recoger mi bolsa de esquí. Incluso
me señaló la tienda que era de sus padres antes de que se ju bi­
V ia jes 69

laran. ¡Estoy seguro de que mis ángeles benevolentes se rieron


arreglando esto! También yo era su último pasajero del día,
porque había comenzado a trabajar a las 3:00 a.m. más o menos.

S lN C R O N lC lD A D B E N E V O L E N T E
El pasado mes de junio, regresé a Budapest para ir a un
mercado Europeo Oriental y de Asia Central. Tengo un amigo
húngaro allí, Tomas (que se hace llamar Tom internaciona­
lmente), que se expandió de producir a distribuir películas
húngaras. Me recogió en el aeropuerto y me llevó a su nueva
oficina. Como cualquier compañía nueva, tenía que estar al
pendiente de su flujo de efectivo en lo que se hacía de nom ­
bre internacionalmente. Él me dijo, “Tom tienes que pedir un
resultado benevolente para que pueda conseguir un millón de
euros (com o $ 1 ,2 5 0 ,0 0 0 en moneda americana) para el final
del mercado, para que pueda expandirme”. Por supuesto, le
expliqué que no necesitaba que yo lo pidiera por él, porque eso
es entregarle su poder a otra persona.
Nuestro amigo mutuo Neil de París, estaba allí para trabajar
en el fondeo de un documental que iba a producir. El segundo
día del mercado, un banquero, “que se veía extraviado”, estaba
rondando por el área de la caseta en donde estaba Neil, y Neil
lo invitó a tomar asiento. El banquero le explicó que estaba
buscando a algún distribuidor de Europa Oriental para invertir
hasta 5,00 0 ,0 0 0 de euros, pero que no sabía en dónde encon­
trar a alguno. Neil lo mandó a la caseta de Tom. Tom le dijo que
él necesitaba inicialmente 2 0 0 ,0 0 0 euros y después 1,000,000
en seis meses. El banquero le pidió que enviara una propuesta
para que su banco la considerara la semana posterior a que ter­
minara el mercado. Ya sea que Tom reciba sus fondos o no, el
punto es la sincronía que puso a alguien en el camino de Tom,
que podía proporcionarle ese millón de euros. ¿No es genial?
70 El C amino A mable

S o l ic it a n d o una C o m p r e s ió n del T ie m p o
En mi viaje de regreso a Dallas desde Budapest, el avión de
Continental Airlines que salía de Ámsterdam se demoró en la
salida, y parecía que solo tendría la mínima oportunidad para
hacer mi conexión en Houston de regreso a Dallas. Así que
naturalmente pedí un resultado más benevolente para poder
hacer la conexión.
En Houston, todavía estaba esperando en el área de reclamo
de equipaje, con menos de veinte minutos antes de mí salida a
las 7:00 p.m. Ni siquiera había pasado por migración, y sabía
que el vuelo estaba a dos terminales de distancia. Aun así, sentí
que podía tomar ese vuelo, aunque Continental ya me había
dado un pase de abordar para un vuelo dos horas más tarde.
Seguí cantando (en voz baja) la vieja canción de rock: “Yo creo
en milagros ... cosita sexy” [“Cosita Sexi”, por Hot Chocolate].
Esas eran las únicas palabras que recordaba, así que seguí can­
tándolas. Algunos pueden haber escuchado recientemente la
canción que se repite en un comercial de Dr. Pepper.
Cuando volví a registrar mi equipaje con Continental fal­
taban tres minutos para las 7:00 p.m. Le pregunté a la agente
si podía intentar llegar al vuelo, y me dijo que sí — pero sé
que ella estaba pensando que no había oportunidad de que lo
lograra. También pedí en voz alta una compresión del tiempo
— ¿sabían que pueden hacer esto también? — y salí corriendo.
Llegué a la puerta a las 7:10, presenté mi pase de abordar origi­
nal al agente de la puerta, y fui el último pasajero en abordar.
Naturalmente mi equipaje no alcanzó ese vuelo, así que pedí
un resultado benevolente para que llegara a salvo más tarde.
En este punto, ya sé que si no explico la compresión del
tiempo, voy a recibir numerosos correos pidiendo que lo haga.
Esta es otra de las cosas con las que he experimentado, y he
descubierto que funciona. Digamos que tienen que conducir a
V ia jes 71

través de la ciudad para encontrarse con algunos amigos. Salen


tarde y saben que llegarán tarde. Entonces dicen en voz alta:

Entonces conduce normalmente ¡y no mires tu reloj o el


reloj del auto! parece no funcionar si lo haces. Cuando llegues,
¡te asombrará el poco tiempo que te tomó! De alguna forma tu
ángel guardián consigue manipular el tiempo para ti.

C uan do los RMBs P a recen no


F u n c io n a r In ic ia l m e n t e
Hay veces cuando pedir RMBs parece no funcionar inicial­
mente. En octubre pasado regresé de Cannes, esta vez volé a
través de Madrid y conecté con la línea Iberia. A mi arribo en
Niza, descubrí que no llegaron tres de las maletas que registré,
incluyendo mi ropa, pero la maleta con la mayoría de mis fol­
letos y posters para la casilla todavía estaba perdida. Teníamos
que arrancar el mercado con un mínimo de posters y solo dos
copias de cada folleto.
No podía comprender por qué esa maleta no había sido
encontrada, si había pedido un RMB. La noche del lunes después
del primer día del mercado, hice una meditación y pregunté por
qué no había recibido todavía mi maleta. El mensaje que recibí
fue que ya que había estado asistiendo a estos mercados d ¡ir inte
veintitrés años, me había aburrido, así que establecí como un
reto, desde un nivel de consciencia más alto, el retraso de mi
equipaje. También me dijeron que podría ser hasta el miércoles
o el jueves que recibiera la maleta.
72 El C amino A mable

Después de la meditación, pedí con mucho sentimiento


que la maleta llegara al día siguiente. El martes por la tarde
recibí una llamada avisando que la maleta estaba en camino.
Finalmente llegó a las 6:00 p.m. al cierre del día de negocios.
De regreso, volé en un avión turboprop regional de Iberia
a Barcelona para pasar una noche allí. Dos de mis maletas no
llegaron esta vez, incluyendo la misma maleta que se había
retrasado. Nuevamente hice mi meditación y pregunté por qué.
Al parecer lo arreglé así para no tener que hacerme líos con las
maletas extra camino a casa, y éstas iban a ser entregadas en
pocos días a salvo. Seis días después llegaron. Debido a que
solo contenían posters, folletos y ropa sucia, realmente no tenía
ninguna urgencia de recibirlas antes.

jPiDE lo Imposible!
Mencioné anteriormente que deben pedir lo imposible,
porque el resultado puede exceder cualquier cosa que puedan
imaginar. Durante un crucero por Alaska que tomamos mi
esposa y yo, había tres puertos de escala. Yo había estado
comprobando las predicciones del tiempo en Internet para
los siguientes diez días. Había llovido cada día de acuerdo
al canal del clima y al personal del barco, y el pronóstico era
más o menos el mismo en cada puerto en el que teníamos
programado atracar. Naturalmente mi esposa y yo pedimos un
resultado benevolente para condiciones soleadas en nuestra
primera excursión en tren a Skagway, Alaska. Estuvo soleado
todo el camino hasta el W hite Horse Pass y de regreso, y solo
llovió un poco en la tarde después de nuestro retorno.
Cuando llegamos a Juneau, Alaska, reservamos un tour para
ver a las ballenas. Los dos pedimos un clima despejado, porque
íbam os a salir en bote. Supe después que la noche anterior toda
una mesa de participantes de un seminario a quienes les había
V iajes 73

hablado sobre los RMBs, se reunieron alrededor de la mesa, y


cada uno pidió un resultado más benevolente para un buen
clima. Para nuestro tour en bote a bordo del nuevo catamarán
Espíritu (¡qué tal el “guiño” para nosotros!), estuvo ligeramente
nublado pero con mucho sol atravesando las nubes. Esa tarde
hubo condiciones incluso más soleadas para el segundo grupo
de observadores de ballenas.
Cuando llegamos a Ketchikan, ¡no había una sola nube en
el cielo! Este es el pueblo más húmedo en los Estados Unidos,
con un promedio de lluvia de trece pies (más de cuatro met­
ros) por año. Nuestros guías de tour locales a través del bosque
pluvial (que todavía traían puestas sus gabardinas) dijeron que
normalmente estaba lloviendo o estaba a punto de llover. Solo
tienen trece días de sol al año, ¡Qué resultado más benevolente!
Esto parecía imposible cuando lo pedimos.
En este capítulo, han viso una amplia variedad de ocasiones
en las que pueden pedir resultados benevolentes para disfru­
tar más de sus viajes. Hubo un par de excepciones cuando
la experiencia fue establecida a nivel del alma, pero incluso
cuando viajan en el Camino Amable, ¡pueden desear alguna
cosa excitante o un reto en su vida! Y algunas veces el resultado
está más allá de su comprensión en relación a cómo se llevó a
cabo — ¡lo imposible hecho posible!
CAPÍTULO NUEVE

BINGO, CASINOS
Y JUEGOS DE CARTAS

D
ebido a que este libro es para todas las fes y cre­
encias, sé que hay un número de lectores que no
pondrían un pie en un casino, incluyendo a algu­
nos de mis amigos y familiares. Los que se sientan así, pueden
elegir saltarse este capítulo. Pero debido a que hay un número
más grande de personas a quienes les gusta jugar al bingo, ir a
casinos y jugar juegos de cartas, daré algunas sugerencias para
hacer más productivas sus visitas a estos establecimientos.

U n R esu lta d o B en evo len te


para el B in g o
Hace algunos años, mi familia y yo tomamos un crucero
al Caribe desde Houston. El primer día, mi hija y yo jugam os
bingo, pero otras actividades nos impidieron jugar otra vez,
hasta el último día del crucero. Yo había pedido un resultado
más benevolente el primer día, pero no ganamos nada, así que
pedí un resultado benevolente otra vez el último día. Dije:

75
76 El C amino A m able

Mi hijo nos alcanzó en el salón de espectáculos junto con otras


3 0 0 personas. Ni mi hijo, ni mi hija ni yo, ganamos nada en las
primeras apuestas de la tarde.
Nadie había ganado el premio mayor durante la semana, y el
último día, juegan hasta que alguien lo gane. Estábamos jugando
con múltiples tarjetas, y ninguno de nosotros parecía tener nin­
guna suerte, porque seguían repitiendo los números que no
teníamos. A una de mis tarjetas le faltaban cinco números, pero
yo esperaba que alguien gritara “¡Bingo!” en cualquier segundo.
Pero el siguiente número era uno de los cinco, y el siguiente
otro, y el siguiente otro. Y el siguiente era el número antes del
último. Puedo asegurarles que mi corazón estaba en mi gar­
ganta. Por increíble que suene, el siguiente número que repiti­
eron era mi último número, y grité “¡Bingo!” Al mismo tiempo,
un hombre joven que estaba sentado justo a mi lado, también
gritó “¡Bingo!” — estoy seguro que las personas pensaron que
era mi hijo. Gané la mitad de la apuesta de $ 8 ,4 0 0 junto con
ese hombre joven. ¡Qué sincronía! Esto pagó el crucero. El año
anterior, tomamos el mismo crucero (naturalmente habíamos
pedido un RMB para el viaje), y un par de cubiertas tenían
fugas de agua, que no nos afectaron, pero nos ofrecieron a
todos un 50 por ciento de descuento en el siguiente crucero.
Naturalmente, aceptamos su oferta.

En el C a s in o
Había tenido una mezcla de suerte en los casinos hasta reci­
entemente. Una razón puede ser porque nuestro negocio de
venta de tours al mayoreo, lleva a miles de personas a Las Vegas
cada año. Durante ese periodo de tiempo con el hotel, conocí
al personal del casino, y aprendí que ellos sabían al centavo el
promedio de lo que una pareja pierde en sus casinos durante
un viaje de tres días. Realmente es un negocio “pesado”. A mí
B ingo, C asinos y Juegos de C a r t a s 77

realmente no me gustaba perder el dinero por el que había tra­


bajado duro en estas operaciones, así que limitaba mis visitas al
casino, disfrutando de la variedad de espectáculos que ofrecía
Las Vegas entonces y que sigue ofreciendo ahora.
Recientemente en un crucero por Alaska con mi esposa,
decidí deambular en el casino del barco. Una de las cosas que
he aprendido de mis días de operar una compañía de turismo,
es que la mayoría de las personas piensan inconscientemente
que van a perder, cuando caminan a través de las puertas del
casino. Estoy seguro que has escuchado o incluso has dicho
cosas como: “Solo voy a llevar esta cantidad de dinero, y cuando
se termine, dejo de jugar”, o “Solo juego para divertirme, ya que
nunca gano”. Tienes que liberarte de esta programación sub­
consciente, o pedir un resultado benevolente no va a funcionar
muy bien, tal vez solo te limite a pérdidas pequeñas.
Una sugerencia es comenzar por decir la afirmación diaria que
aparece en el Apéndice A de este libro. Necesitas decir esto cada
mañana para comenzar a reprogramar tu subconsciente para
aceptar prosperidad y abundancia.
Cada vez que entraba al casino del barco, sostenía mis bra­
zos extendidos con mis palmas hacia arriba (aunque no de
forma muy obvia) y decía:

Durante mi primera vez en el casino, me senté en la mesa


de blackjack durante una hora. Fui un ganador, aunque no
de mucho.
La segunda vez, entré y me senté. Ganaba y perdía, sin real­
mente avanzar mucho, cuando el croupier de blackjack me
78 E l C am in o A mable

repartió la carta roja del dispensador de cartas (que contiene


varios mazos de cartas con las que reparte el croupier). La carta
roja es la señal para el croupier de que es tiempo para revolver
todos los mazos de cartas después del juego, y la persona que
recibe la carta puede cortar los mazos.
Mientras el croupier terminaba de repartir cartas a los otros
jugadores de la mesa (yo estaba en el primer puesto), callada­
mente murmuré:

Corté las cartas, y durante las siguientes ocho manos más o


menos ¡No perdí! O mi mano era mejor que la del croupier, o
en la mayoría de las manos, el croupier se pasaba de 21 y todos
los que estaban en la mesa, todavía dentro del juego, ganaron.
¡Qué diversión! Era un grupo feliz de jugadores. Me levanté y salí
después de eso, porque tenía que vestirme para una cena formal.
Si les encanta jugar en las máquinas de monedas, pueden
pedir el mismo resultado benevolente que yo cuando entré
al casino. Tal vez la chica que da el cambio les sugiere una
máquina en particular para que la prueben, o pueden sentirse
atraídos a una en particular. Estén abiertos a los codazos gen­
tiles de su ángel guardián.
Aunque la mesa de dados no es mi juego, pide un resultado
benevolente para ganar en la mesa y repítelo otra vez cuando
te den los dados para lanzarlos. Puedo pensar que tiene que
funcionar de una forma muy similar a cortar el mazo de cartas.
Hay libros sobre este juego — recientemente leí que incluso hay
un libro que enseña cómo sostener los dados para que caigan
B ingo, C asinos y Juegos de C artas 79

repetidamente en los mismos números. Pero todo comienza


con la forma en la que te sientes sobre tus oportunidades para
ganar. Dale la bienvenida a la abundancia de ese casino cuando
camines a través de la puerta.

L a L o t e r ía
En cuanto a la lotería, lo he intentado pero nunca he ganado
más de cinco dólares. Nuevamente, tal vez inconscientem ente
pienso que no puedo ganar y por eso no gano, o como me
lo explicaron, algunas personas están destinadas a ganar la
lotería, como una lección de vida para aprender a manejar una
gran cantidad de dinero que se les entrega repentinamente.
Yo pienso que podría ser la misma lección de vida que la de
aquellos que heredan propiedades y grandes sumas de dinero.
Llegué a la comprensión hace mucho tiempo, de que tendría
que trabajar por mi prosperidad.
Curly, una amiga mía que trabaja medio tiempo en una
farmacia que yo frecuento, y que es una de las cuidadoras de
una dama de noventa y ocho años de edad, juega a la lotería
todo el tiempo, a menudo gana varias cantidades. Hace un par
de años, ganó $20,000, porque tiene el deseo y la intención de
tener éxito y. algunas veces lo tiene.

P a r a el P o k e r
El poker se ha convertido recientemente en un juego extrem­
adamente popular. Cuando estés a punto de tomar parte en un
juego, repite:
80 El C amino A mable

Pueden decir la frase como lo deseen. Y pueden pedir un


RMB cada vez que corten las cartas durante la noche.
¡Buena suerte y buena diversión!
CAPÍTULO DIEZ

EN LUGARES PELIGROSOS

s asombrosa la cantidad de personas que viven con


miedo en estos días. Voy a mostrarte cómo reducir
enormemente ese nivel de miedo, pidiendo resultados
benevolentes cuando estés en peligro. Si trabajas en un lugar
peligroso o viajas a uno, si estás en la milicia, vives en una zona
de guerra, o incluso si trabajas en una parte peligrosa de una
ciudad urbana, entonces pedir resultados benevolentes puede
reducir considerablemente el miedo y los factores de estrés.

En una Z ona de G u erra


Digamos que estás en la milicia, y te encuentras en una zona
de guerra. Realmente no quieres estar allí, pero tus deberes
requieren que permanezcas allí hasta que regreses a casa en
una rotación. Pedir resultados benevolentes funcionará mejor
si decides que prefieres no lastimar, matar o mutilar a otra per­
sona, y si deseas fervientemente no salir lastimado ni muerto.
Entonces digamos que estás asignado a un viaje en convoy
desde el punto A hacia el Punto B. Repite en voz alta:

81
82 E l C a m in o A mable

O si estás de patrulla en algún área, di:

Lo que puede ocurrir en esos dos ejemplos, es que si explota


una bomba en la carretera durante el viaje, no golpeé tu vehí­
culo. En patrullaje, quizás tus “adversarios” decidan retirarse
temprano o sean llamados repentinamente para reportarse en
otra área. Puede ser un patrullaje aburrido, pero regresarás a la
base sin ningún conflicto.
¿Se pueden imaginar lo que pasaría si todos en ambos
bandos de un conflicto pidieran resultados benevolentes para
regresar a salvo a sus bases cada día? ¡No sería posible la
guerra! Me doy cuenta de que esto es un sueño, pero recu­
erden, ¡pueden solicitar lo imposible cuando piden resultados
benevolentes! Una palabra de advertencia: Esto no funcionará
en absoluto si pides un RMB para matar a tus adversarios antes
de que ellos te maten a ti. Pedir un RMB para dañar a otra per­
sona no funciona. ¡No olvides esto!
Si vives en una zona de guerra o en un lugar peligroso,
puedes pedir resultados benevolentes para las cosas más sim­
ples, como para ir a la tienda de abarrotes, a un restaurante, a
la escuela, o incluso para caminar hacia tu auto. Di:
w

E n L u g a r e s P elig r o s o s 83

Para R obos
Si los robos y las intrusiones son un problema en tu área,
puedes decir cada noche o en la mañana antes de salir hacia
el trabajo:

Lo que puede suceder mientras estás fuera, es que un policía


puede atrapar a un ladrón justo antes de que esa persona entre
a tu casa, o si un vecino espía a una persona sospechosa, en
lugar de ignorar a esa persona, él o ella pueden sentirse com-
pelidos a llamar a la policía.

T r a b a ja n d o en L u g a r e s P e l ig r o s o s
Si eres un socorrista, un representante gubernamental o
de alguna organización, en servicio médico, o en cualquier
miríada de profesiones que te piden trabar o viajar a zonas de
guerra u otros lugares peligrosos, funciona igual para todo.
Solo pide un resultado benevolente para moverte de un lugar
al siguiente, para dormir o comer, o para cualquier cosa que
sientes que podría ponerte en peligro.
Como recordatorio, aquellos que trabajan en lugares que
pueden ser blanco para robos, como tiendas de abarrotes,
licorerías, restaurantes de comida rápida, sitios de construcción
o cualquier lugar que sea considerado un trabajo peligroso,
pueden decir:
84 El C amino A mable

C uan do va s de C o m pra s
Diane en Michigan me escribió para compartir la siguiente
historia: “Iba a la tienda una noche, y como es mi hábito, antes
de salir de mi auto, pedi un resultado más benevolente para
mi diligencia. Estaba conduciendo un Hyundai Accent, que
no es un auto caro, pero era casi nuevo en ese tiempo y se
veía muy bien. Me había estacionado en un pequeño lote en la
parte posterior de la tienda. Después de salir de mi auto, noté
que un hombre joven estaba parado en el lote a unos cuantos
espacios. Cuando pasé enfrente de él, me hizo un comentario
sobre mi ‘bonito auto’. Si pensarlo siquiera y sin reducir mi
ritmo, le agradecí sinceramente y agregué de manera amistosa
que también era muy económico, y entonces entré a la tienda.
“Mientras estaba en la tienda, de repente comencé a temblar,
y se me ocurrió que el hombre joven estaba considerando el
robo, cuando menos en su mente. Supe que si estaba allí todavía
cuando estuviera lista para irme, podía pedirle a un empleado
que me acompañara al auto. Sin embargo, tuve una fuerte intu­
ición de que no estaría allí. Agregué una petición de un resultado
más benevolente para llegar a salvo a casa y no me sorprendió
ver que el hombre no estaba por ningún lado cuando me fui. ¡Le
agradecí a Dios y a los ángeles muy sinceramente!”
Diane mencionó que ha estado pidiendo resultados benevo­
lentes durante un tiempo, y que “su vida ha fluido suave,
benevolente y milagrosamente como resultado”. Yo no podría
decirlo mejor.

P r o f e s io n e s P e l ig r o s a s
Dos de las profesiones más peligrosas estos días, son la de
oficial de policía y bombero. Estas profesiones aparecen con­
stantemente en nos noticieros, debido al peligro de este tipo
de trabajos. Estas personas nunca saben cuándo una llamada
E n L ugares Peligrosos 85

podría poner sus vidas en peligro mortal. Si tú eres un policía


o un bombero, di cada día:

Esta petición cada día para un resultado benevolente para


regresar a la estación a salvo, pondrá en movimiento circun­
stancias que permitirán que ocurra el resultado benevolente.
Otra profesión peligrosa es la de guardia de prisión. Estos
guardias deben trabajar en un ambiente muy negativo cada
día — con reclusos que están abatidos y enojados por estar
encarcelados. Pedir un resultado benevolente para tu seguridad
durante tu turno cada día, hará que este trabajo sea mucho más
fácil y menos estresante.

P a r a A q u e l l o s en P r is ió n
No nos olvidemos de los reclusos. Los mantienen en condi­
ciones a veces brutales que no les ofrecen ninguna esperanza
de redención. Tienen muy poco entrenamiento o ninguno, que
los prepare para su liberación, para que puedan ganarse la
vida honestamente y convertirse en ciudadanos que respeten
la ley. En prisión, puede haber pandillas que luchen entre sí, o
prisioneros que pueden ofenderse por lo que pueden percibir
como el menor insulto.
Si tú estás encarcelado, puedes pedir resultados benevolen­
tes cada vez que vayas a comer, a la ducha, a hacer ejercicio en
el “patio”, al área común cercana a tu celda, o a tus trabajos. Si
fuiste a prisión injustamente, entonces pide un RMB para que
recibas ayuda y que tu sentencia sea revocada. ¡Pide lo que
parece imposible!
86 E l C a m in o A m able

In m ig r a n t e s Il e g a l e s
Esta siguiente sección es para aquellos que viven fuera de
los Estados Unidos, Europa y las principales naciones Asiáticas.
Si eres un inmigrante ilegal a punto de iniciar tu camino para
cruzar una frontera, con la esperanza de alimentar a tu familia,
corres el riesgo de quedarte sin brazos o piernas bajo las rue­
das de un tren, de bandidos que se aprovechan de las personas
en tu situación, de contrabandistas que pueden quitarte tu
dinero y te dejen en ambientes hostiles para morir, de ahogarte
en ríos u océanos, o de ser capturado por patrullas fronterizas
y de ser enviado de vuelta a casa a la pobreza.
Al inicio de tu viaje, puedes decir:

Cada día puedes pedir un RMB para viajar en el tren a salvo,


para cruzar ríos u océanos, para viajar con seguridad a través
de áreas con pandillas de bandidos, para lidiar con contra­
bandistas y para cruzar a salvo la frontera hacia tu destino.
Después de que alcances tu destino, puedes primero pedir
un resultado benevolente para encontrar un buen trabajo.
Cada día, puedes pedir un RMB para que estés a salvo y libre
de ser deportado y para que seas capaz de permanecer en ese
país tanto tiempo como sea necesario.

P r o s t it u c ió n
Una profesión peligrosa de la que nadie quiere hablar, es la
prostitución. Estos hombres y mujeres, niños y niñas, están en
peligro cada día de sus vidas. Sus familias los han vendido en
muchas ocasiones para ser esclavos sexuales, o han escapado
E n L u g ares P eligrosos 87

del abuso físico y sexual. Han sido corrompidos y engañados


por sus proxenetas y han sufrido más abuso sexual y físico.
Aquellos en esta profesión pueden decir:

Recuerden pedir lo imposible — ¡puede ser que lo reciban!

P a r a el R e c o r r id o H a c ia el T r a b a jo
Muchas personas no piensan que el recorrido hacia el trabajo
en una gran ciudad urbana es peligroso, pero díganselo a quienes
han leído o han visto ira en el camino, choques de múltiples autos
apilados y masacres en el camino. Hace varios años, me dirigía
hacia Cannes, Francia, a otro mercado de TV, y renté un auto en
el aeropuerto de Niza para el camino de veinte minutos en una
autopista de seis carriles entre dos ciudades. Pedí un RMB para
el camino. Diez minutos después me alegré de haberlo hecho,
porque un auto pequeño me rebasó muy rápido. Perdió el con­
trol como 300 metros más adelante, golpeó la barrera y rebotó
de vuelta a la autopista, deteniéndose sobre dos vías de tráfico. Si
hubiera llegado a la escena cinco segundos antes, hubiera estado
en medio de su desastre. Reduje la velocidad a 16 kph (1 0 mph)
y pasé al auto usando el carril de la derecha.
88 E l C a m in o A m able

Para los que toman trenes, metros o autobuses en ciudades


como Madrid y Londres. Cuando se dirijan a la estación cada
mañana y cada tarde, digan:

Esto reduce el factor de miedo al nivel mínimo, porque


sabrás que si hay un problema serio, no estarás involucrado.

C a r t e r is t a s
En muchas ciudades grandes en el mundo, los carteristas son
un problema. Hace años cuando solía exhibir en el Festival de
Filmes de Cannes, un carterista le robó la cartera a un periodista
amigo mío, mientras pasaba a través de una multitud en la calle.
Era un hecho conocido que los carteristas venían a Cannes
porque muchas personas que asistían cargaban mucho dinero.
Justo recientemente pasé una noche en el centro de Barcelona.
Lo primero que me advirtió el personal de recepción fue que
cuidara mi cartera cuando saliera a cenar, porque los carteris­
tas estaban trabajando en esa área. Así que pide, un resultado
benevolente para tu seguridad y la seguridad de todos tus efec­
tos personales durante una caminata o excursión en una ciudad.

P e l ig r o s en l a s E s c u e l a s :
P a n d il l a s , V io l e n c ia y L e s io n e s
Asistir a la escuela estos días puede ser peligroso tanto para
los estudiantes, como para los maestros y directivos. Ha habido
numerosas golpizas y tiroteaos en las escuelas, resultando en
la muerte y lesiones de estudiantes y adultos. Las pandillas en
E n L ug ares P eligrosos 89

algunas escuelas pueden también causarles a los estudiantes y


los maestros mucho estrés y miedo. Además, hay padres que
están pasando por divorcios difíciles que tratan de sacar a los
hijos de la escuela cuando la corte no les permite verlos.
También se pueden dar lesiones durante la escuela en
deportes, clases de ciencias, animadoras y otras actividades
patrocinadas por la escuela. Si eres un alumno o maestro, di:

D e p o r t e s R ie s g o s o s
Hablando de deportes, existe un número de deportes que
implican un riesgo — algunos más que otros. Por ejemplo el
paracaidismo. Hace muchos años cuando estaba en el ejército
y estacionado en Corea con la fuerza de “mantenimiento de la
paz”, solía tomar lecciones de vuelo en un pequeño aeropuerto
en un banco de arena en medio del Río Han. Un día vi a unos
paracaidistas saltar de un avión. Uno de los hombres tenía un
paracaídas que solo se abrió parcialmente. Trabajó con él hasta
que finalmente abrió su paracaídas de reserva. Era un hombre
grande y el paracaídas no lo detuvo completamente, y calló en el
campo con una lesión en la cadera. Nunca quise intentar el para­
caidismo después de eso. Pero por supuesto, ahora podría decir:
90 E l C am in o A m able

Como lo m encioné antes, esquiar es otro deporte del que


conozco mucho. Aprendí a esquiar en la universidad y usé ese
conocimiento para iniciar mi primer negocio — un club de
esquí para solteros, que llevaba adultos solteros a Colorado,
Nuevo México y Utah. Solo tuve un par de lesiones durante
los años, el peor fue un hombro destrozado, que ocurrió en
Aspen, Colorado, el primer día de la temporada de esquí. Yo
fui la primera lesión del año ¡y se suponía que tenía que cuidar
de 3 00 personas en el viaje! Tuvimos algos sustos en nuestros
viajes por autobús a las montañas, incluyendo dos golpes
potencialmente malos, causados por conductores ebrios en el
camino. Así que pide un resultado benevolente para el camino
y para el área de esquí, y entonces repite cada vez que esquíes:

El buceo submarino (o debajo del agua) es un deporte


maravilloso, que te lleva a otro mundo de plantas hermosas,
arrecifes y más variedades de peces de los que te podrías
imaginar. Durante mis días de mayorista de turismo, hacíamos
viajes a las Islas Caimán en las Indias Británicas Occidentales
cuatro días a la semana. Estoy seguro de que han leído reportes
de personas que sufren de la enfermedad de descompresión
por salir demasiado rápido, o que incluso mueren en cuevas o
grietas submarinas. El hermano de mi agente en Gran Caimán,
intentó establecer un récord mundial de buceo con un tanque
y nunca regresó, así que puede ser peligroso. Yo sugiero que
cada día afirmes:
E n L ugares P e l i g r o s o s 91

Puedes pedir resultados benevolentes para tener seguridad


durante todas tus excursiones deportivas — fútbol, voleibol,
béisbol, atletismo, natación, etc. Pide resultados benevolentes
para todas las ocasiones en las que practiques y para cada uno
de tus juegos.

R o b o d e Id e n t id a d
y V ir u s In f o r m á t ic o s
Aquí hay un peligro que parece tener a todos temerosos
estos días: el robo de identidad. Digan en voz alta:

¿Qué tal estuvo eso para recuperar su poder?


¿Preocupados por virus en la computadora? Pueden pedir
protección para su computadora con lo siguiente:
92 El Camino Amable

Puedes llevar seguridad a tu vida cuando pides resultados


benevolentes para viajar, trabajar y vivir. Es el Camino Amable.
CAPÍTULO ONCE

EL EFECTO RADIANTE

Cuando pides un resultado benevolente, estás pidiendo algo


específico para ti. Tus amigos y tu familia tienen que pedir
sus propios resultados benevolentes. Pero com encé a darme
cuenta de que cuando yo pedía un resultado benevolente, tam­
bién tenía un efecto benevolente en las personas a mí alrededor
en el momento de la petición.

O t r o s s e B e n e f ic ia n d e t u s
P e t ic io n e s d e RMBs
Observemos de cerca lo que sucede cuando pides RMBs.
Tomemos por ejemplo, la petición de un lugar de estaciona­
miento cercano. Si tus amigos o tu familia están contigo, ellos
se benefician de que encuentres un lugar de estacionamiento
bien ubicado. Podría estar lloviendo, nevando o podría ser un
día caluroso, o tú u otra persona en tu auto podrían tener un
problema físico, que podría hacer difícil una larga caminata.
Todos se benefician de tu petición de un resultado benevolente.
Cuando conduces hacia o desde el trabajo y pides un resul­
tado benevolente para llegar a salvo, todos esos autos a tu
alrededor están bajo la influencia de tu petición de un RMB. Y
cuando estás en el metro, el tren o el autobús regresando del

93
94 El C amino A mable

trabajo, hay un efecto radiante de tu petición por un resultado


benevolente para llegar a salvo, porque las demás personas en
el vehículo probablemente llegarán a salvo también.
Cuando aplicaste para ese trabajo, la compañía que te con­
trató y tus compañeros de trabajo, todos se beneficiaron, cre­
ando un efecto radiante. La compañía se benefició al asociarse
contigo, ya que era un resultado benevolente, y tus nuevos
compañeros de trabajo se beneficiaron al tener a alguien que es
la mejor persona para ese puesto y probablemente la persona
más agradable con quien trabajar.
Cuando nuestros amigos que tienen el negocio de pintura
de alta calidad pidieron un resultado benevolente para atraer
un nuevo cliente, las personas que los contrataron se benefi­
ciaron de su experiencia y atención al detalle. Sus trabajadores
se beneficiaron al tener trabajo adicional que los mantuviera
ocupados durante varios meses.
Cada vez que pido un RMB en mi negocio cuando estoy
negociando con un nuevo cliente, sé que también será para
su mejor interés comprarle a mi compañía. Somos personas
buenas y honestas con quienes trabajar y hemos obtenido una
reputación durante muchos años como proveedores confi­
ables. Mi petición de un resultado benevolente los afecta en un
Camino Amable positivo.
En un capítulo anterior, mencioné mi viaje con mi hijo, su
amigo y el padre de su amigo, que hicimos a Yellowstone y
com o yo había pedido un resultado benevolente para que nos
“descartaran” en nuestro vuelo de regreso. No nos descartaron,
pero a todos nos dieron asientos de primera clase por ser
voluntarios. Mi RMB tuvo el efecto radiante más grande para
todos nosotros, que pudimos viajar en primera clase juntos.
Fue un gran trato, no solo para ellos, sino también para mí al
experimentar su felicidad y cómo lo disfrutaron.
E l E f e c t o R a d ia n t e 95

Los RMBs A fecta n


la S e g u r id a d d e l o s D e m á s
Si tienes que actuar como un informante para reportar un
abuso sexual o una mala conducta, o al reportar actividades
ilegales en donde trabajas, naturalmente pedirás un resultado
más benevolente para ti al reportar esas acciones. Tus ángeles
cuidarán de ti, pero el efecto radiante puede extenderse mucho
más allá de eso. Puede haber otras personas sufriendo como tú,
y ya no tendrán que soportar el dolor. Puede ser que incluso
sumen sus voces. Si esto involucra actos de negocio ilegales,
entonces puedes salvar cientos, o incluso miles de trabajos, al
deshacerte de las “manzanas podridas”. Posiblemente miles
de personas que son dueñas de acciones en tu compañía, no
perderán el dinero que invirtieron.
Si estás en la milicia y en una zona de guerra, cuando
pediste ese resultado benevolente para llegar a salvo a tu des­
tino, cuando menos las otras personas en tu vehículo llegarán
a salvo también. Pero también quizás todos los otros vehículos
en el convoy llegarán a salvo, porque la bomba que se suponía
que iba explotar, no lo hace por alguna razón, salvando por lo
tanto sus vidas y las de cualquier civil que podría haber estado
en la zona de explosión.
Cuando estás patrullando y pides un resultado benevolente
para regresar a salvo de tu misión, la patrulla probablemente
regresará sin encuentros. Tú estás a salvo, pero también los
están tus compañeros que estaban en la patrulla contigo.
Nuevamente, es el efecto radiante. Y debería llevar esto un
paso más adelante y mencionar que todas las personas con
las que te encuentres y con las que no te encuentres, también
regresarán a salvo a casa, ¡sean los civiles o los soldados!
Como un civil viviendo en una zona de guerra, cuando
pides ese resultado benevolente para llegar a salvo a trabajar,
96 El C amino A mable

a la escuela, o incluso a la tienda, tiene un efecto radiante en


todos aquellos que están en contacto contigo hacia donde sea
que conduzcas o camines. Puede bien ser tu familia o tus ami­
gos, pero también pueden ser extraños en la calle, en el m er­
cado en donde compras, en el restaurante en donde comes, o
en el club nocturno al que asistes.
Si estás encarcelado en prisión o eres un guardia de prisión,
pedir un resultado benevolente cada día para tu seguridad,
nuevamente afecta a aquellos a tu alrededor. Conforme te
trasladas durante el día, ese efecto radiante te sigue.
Es lo mismo para un policía, un bombero o un paramédico.
Todos los que trabajan con ellos reciben el beneficio de su
petición de un RMB para estar a salvo. Además, el público a
quienes sirven se beneficia también. Cuando responden un lla­
mado, siempre existe la posibilidad de que ocurra un accidente
en el camino. Si no hay accidente, ellos no tienen lesiones, sus
compañeros de trabajo tampoco, ni nadie que hubiera podido
estar involucrado en el choque.
En un capítulo anterior, conté la historia de un hombre en el
pickup que fue detenido y multado por la Patrulla de Caminos de
California por exceso de velocidad, durante el camino de Monte
Shasta a Sacramento. Ese fue probablemente un efecto radiante,
tanto para él, porque redujo la velocidad, como también para
los otros conductores a quienes podía haber puesto en peligro.
Sé que esto es un hecho — desde que mi hijo fue detenido por
exceso de velocidad, ¡conduce con mayor responsabilidad ahora!

jLos RMBs C o n d u c e n a u n a V id a
m ás A m a ble pa ra T o d o s!
Cuando estuve en el casino en el crucero por Alaska y corté
el mazo de cartas después de pedir un resultado benevolente,
El Efecto R a d ia n t e 97

gané un número de juegos, pero también ganaron las personas


que estaban sentadas en mi mesa de blackjack. Tuve un sen­
timiento grandioso sentado allí, ¡al saber que fui un catalizador
para su buena suerte y su buen ánimo!
Incluso cuando pides un resultado benevolente para conse­
guir un taxi, hay un efecto radiante. Posiblemente ese taxista
no había conseguido pasaje y necesitaba el trabajo. Algo le
dijo que girara hacia la calle en donde tú estabas esperando,
y recogió un buen pasaje — y uno seguro también. Ambos se
beneficiaron por tu petición.
Cuando un buen número de nosotros pidió cielos solea­
dos en los puertos en Alaska, cientos, si no miles de perso­
nas fueron afectadas por nuestra petición. Todos los tours
pudieron ser operados, incluyendo aquellos con helicópteros y
aviones. Fue un ingreso positivo para los operadores de tours
y su personal. Todos los pasajeros del crucero disfrutaron de
días libres de lluvia, y estoy seguro que las tiendas a lo largo
de los muelles hicieron negocios excepcionales mientras estu­
vimos en el puerto.
Puedes volver a revisar los capítulos que has leído hasta
ahora, para ver numerosas instancias en donde alguien más fue
afectado de forma positiva por esas peticiones de resultados
más benevolentes. Será igual para ti también. Solo tienes que
hacer un hábito de pedir RMBs, y tu vida y las vidas de aquellos
a tu alrededor, ¡serán mucho más amables!
CAPÍTULO DOCE

ORACIONES BENEVOLENTES

Las oraciones benevolentes y los resultados benevolentes


son similares, como “primas hermanas”, pero son diferentes.
Mientras que un resultado benevolente es algo que pides para ti,
una oración benevolente es algo que puedes decir cuando sien­
tes la necesidad de pedir ayuda benevolente para alguien más.
Esa persona o personas pueden no saber cómo pedirlo para ellas
mismas, o pueden estar en un peligro tan grande, que no son
capaces de decir nada en absoluto.

H uracan es y O tra s T o rm en ta s
D ev a sta d o ra s
Aquí en los Estados Unidos tuvimos un huracán terriblemente
destructivo en el 2005 llamado Katrina. Me sentí conmovido por
las historias de los noticieros, que mostraban personas vadeando
en el agua hasta la cintura, levantadas por los helicópteros desde
las azoteas. No era capaz de ayudarlos físicamente, así que dije:

99
10 0 E l C a m in o A m able

Tomemos, por ejemplo, un desastre que puede ocurrir al otro


lado del mundo. Puede ser un terremoto o un huracán. Estos
eventos suceden todo el tiempo. Las noticias han reportado que
los huracanes están incrementando su fuerza debido al calenta­
miento global. Sabemos por los reportes de las noticias que
cuando ocurren estas tormentas, las personas son lesionadas y
están peligro de morir, o se quedan sin alimento, agua y cobijo.
En el evento de cualquier desastre mayor, puedes decir:
Como puedes ver, puedes cambiar las palabras para adaptarse
a las circunstancias. No tienes que usar mis palabras exactas.

Puedes afirmar la ubicación real, o si no estás seguro, solo


el nom bre del país. La razón por la que dices “seres” es porque
esos en peligro pueden ser personas, sus mascotas o animales
de todo tipo. En las secuelas del paso de Katrina, por TV se
podían ver perros en las azoteas con o sin sus dueños. Muchas
mascotas fueron rescatadas por personas de buen corazón que
salieron en botes para encontrarlos. Al usar la palabra “seres”
para aquellos que pueden ayudar, esto puede incluir hombres,
mujeres, niños, perros, animales o seres angélicos. No querrás
ponerle límites a tu petición.

O r a c ió n B e n e v o l e n t e en A c c ió n
La primera vez que leí sobre oraciones vivas fue en el libro
antes mencionado Council of Creators de Robert Shapiro.
O rac iones B enevolentes 101

Él se expandió más tarde en este concepto en otros escritos,


pero durante un tiempo, yo no pude ver la diferencia entre
“solicitar” y “pedir”, por lo que me quedé con pedir resultados
benevolentes. Pero es muy simple en el concepto.
En las afirmaciones de la oración viva, tú dices, “Yo solicito”.
En mis meditaciones mencioné que no podía ver mucha diferen­
cia entre las palabras “pedir” y “solicitar”. Me dijeron que las bus­
cara en un diccionario. Un poco regañado lo hice. Para resumir
definiciones muy largas, “pedir” se usa para requerir una acción
específica, mientras que “solicitar” es una petición más general.
Son palabras muy similares pero no son exactamente lo mismo.
Las oraciones benevolentes contienen palabras simples, pero
son poderosas. Al pedir, te sentirás mejor. No tendrás sentimien­
tos de desesperanza o frustración. Las oraciones benevolentes
son cosas. Los seres angélicos actúan instantáneamente y se crea
una energía por tu petición y sus acciones. Me han descrito que
si pudiera ver esas oraciones, tienen la apariencia de corrientes
coloridas de amor y sentimientos, que llegan de todas partes del
mundo al lugar del desastre, algunas veces por millones.
Normalmente, nunca sabrás si tu oración benevolente real­
mente ayudó a alguien — solo tienes que tener fe de que lo
hizo. Pero hay ocasiones en las que sí sabes. Recientemente,
cuando mi esposa y yo abordamos un avión para volar de San
Diego a Dallas, una pareja se sentó en la fila frente a nosotros.
Poco tiempo después vimos esa mirada de pánico en sus ros­
tros, como la que describí antes cuando descubrí que no tenía
mi pasaporte en el Lago Como, en Italia. Murmuré para que
solo mi esposa pudiera escuchar:
102 E l C am in o A m able

No pudimos escuchar todo lo que estaban diciendo, excepto


algo sobre el área de la sala de abordar o un auto, pero la mujer
se levantó y dejó el avión.
Alrededor de diez minutos más tarde, regresó con una
mirada de alivio, cargando su bolso. Lo había dejado en el
punto de revisión de seguridad y “afortunadamente” nadie lo
había recogido, excepto el personal de seguridad, que guardó
su bolso hasta que ella lo reclamó. Ambos estaban felices y
se besaron antes de acomodarse para disfrutar del vuelo. Mi
esposa y yo pudimos ver una oración benevolente en acción.

Para In c id e n t e s e n l o s N o t i c ie r o s
Como en las peticiones por resultados benevolentes, debes
decir una oración benevolente para lo que quieres, no para lo
que no quieres. Usemos incendios en los departamentos como
un ejemplo. En zonas urbanas las personas viven muy cerca
una de las otras, y lamentablemente, los fuegos ocurren por
personas que fuman en la cama, un viejo cableado eléctrico y
muchas otras razones. Las estaciones de televisión transmiten
estos eventos de la vida si ocurren durante la transmisión del
noticiero. Y allí estás tú, sentado en tu sala o incluso en la
mesa cenando, y ves o escuchas que hay personas atrapadas y
posiblemente sus mascotas.
No digas, “No permitas que se derrumbe ese edificio” o “No
permitas que el fuego queme a esos seres”. Mejor puedes decir:
O racion es B en evo len tes 103

Pueden incluso acortar esta petición y decir:

Cambien las palabras para que se ajusten a las circunstancias.


Recientemente en uno de esos noticieros, había una historia
sobre una periodista que había sido capturada por terroristas
que amenazaban con matarla si no se cumplía con sus deman­
das. Después de escuchar eso, yo dije:

Puede ser que no seas capaz de hacer nada individualmente,


¿pero puedes imaginar el efecto de miles de estas peticiones
ejecutadas instantáneamente por los seres angélicos?

P a r a S e r e s A m a d o s en
L u g a r e s P e l ig r o s o s
Para aquellos que tienen a un miembro de la familia en un
lugar peligroso, pueden decir:

Puede ser que elijas decir esto cada día, pero trata de decirlo
10 4 E l C am in o A m able

en forma diferente. Quizás nombres la ubicación un día, la ciu­


dad o el pueblo al siguiente, la provincia en la que está tu ser
amado otro día, el área del país el que sigue, y el nombre del
país al día siguiente. Después si regresa a casa o cuando se va al
final de su turno, puedes decir:

In c l u y é n d o t e e n l a s O r a c io n e s
B en evo len tes
Después de pedir resultados benevolentes durante años, las
oraciones benevolentes son un desarrollo más reciente para mí
(aunque no tan reciente como las peticiones “yo espero”, que
se cubren en el siguiente capítulo). Abajo verán ejemplos de
m om entos en los que pueden decir una oración benevolente
tanto para ustedes como para sus seres amados. En capítu­
los anteriores, no quise separar los resultados benevolentes
que podrían ser para ti y para tu familia, de los resultados
benevolentes para ti. En mi experiencia, parece haber solo una
pequeña diferencia si estás pidiendo un resultado benevolente
que te incluye a ti y una oración benevolente que usas para ti y
digamos, para tu familia. Yo creo esto debido al efecto radiante.
Solo asegúrate de decir una oración benevolente si es para
alguien más.
Con eso en mente, puedes decir oraciones benevolentes para
otros y puedes incluirte a ti. Como un ejemplo, digamos que tú
O racio n es B en evo len tes 105

estás en una zona de guerra peligrosa, como lo mencioné antes,


tu grupo debe moverse de un lugar al otro. Puedes decir:

Digamos que vives en un área amenazada por tormentas, como


tornados o huracanes como Katrina. En este caso, podrías decir:

Cambia las palabras para ajustarse a las circunstancias. Si tú


y tus seres amados están atrapados en una casa dañada o
colapsada, o por inundaciones, puedes decir:

Todos vemos y leemos historias sobre abuso físico y sexual


en nuestras comunidades. Pero puede haber alguien leyendo
106 E l C am in o A m able

este libro que esté realmente experimentando abuso en bases


diarias. Si vives en una casa en donde hay abuso físico o sexual,
definitivamente deberías decir:

Si la razón del abuso es debida a una adicción al alcohol o las


drogas, puedes decir:

Recuerden, ¡pueden pedir por lo que parece imposible!

M a n t e n g a n l a s O r a c io n e s
B e n e v o l e n t e s S im p l e s y P u r a s
Teniendo en mente que este libro es para personas de todas
las fes religiosas y creencias, algunos pueden preguntarse si
pueden incluir el nom bre de su deidad religiosa cuando dicen
estas oraciones benevolentes.
Ciertamente pueden hacerlo si lo desean, pero me han
dicho en mis meditaciones, que las oraciones benevolentes
funcionan m ejor si se mantienen simples y puras. Como lo
m encioné arriba, los seres angélicos que manejan esto, saben
instantáneam ente que tú has hecho una oración benevolente y
actuarán en consecuencia. No se necesita decir nada adicional.
O r a c io n e s B e n e v o l e n t e s 107

P a r a E n c o n t r a r P a r e ja y E s t a b l e c e r s e
Cuando estás buscando a alguien con quien pasar tu vida,
debes hacer una oración benevolente, porque estás involucrando
a alguien más. Di:

Después de encontrar a esa persona perfecta, es típico que


tengas que encontrar un lugar para vivir juntos. Esta oración
benevolente puede también ser usada para reubicarse en otro
pueblo, ciudad o país:

Cuando tienes reuniones con maestros o consejeros en la


escuela de tus hijos, puedes afirmar:
108 E l C am in o A mable

C o n R e s p e c t o a T u s R e l a c io n e s
con los D em ás
Las relaciones de negocios pueden ser agradables o muy
tumultuosas. Tuve una de las últimas hace m uchos años antes
de aprender sobre los resultados benevolentes. Todas estas son
experiencias de aprendizaje, pero recuerda, estamos tomando
el Camino Amable. Así que puedes afirmar:

Nuevamente, esto involucra a otras personas, así que puede


decirse como una oración benevolente, aunque estés pidiendo
que sea un resultado benevolente para ti.
Muchas veces cometemos errores que inadvertidamente, o
algunas veces intencionalmente les causan a otros estreses y
problemas. Cuando eso suceda, di lo siguiente con sentimiento
y sinceridad:

Es mejor decir esto en tus propias palabras.

C o n R e sp e c t o a la E n fer m ed a d
Cada año escuchamos sobre alguna nueva enfermedad que
amenaza la salud de las personas en alguna parte del mundo.
O r a c io n e s B e n e v o l e n t e s 109

Recientemente es la influenza aviar, y antes de eso era la enfer­


medad de las vacas locas. El próximo año probablemente sea
algo más. Cada año los periódicos, revistas, y noticieros en
radio y programas de TV, reportan la propagación de la enfer­
medad y el número de muertes que se le atribuyen. Te preocu­
pas, pero ¿qué puedes hacer al respecto excepto preocuparte?
Yo sugiero que digas:

P ara la C olaboración A rtística


Si eres un escritor, quieres escribir la mejor historia, artí­
culo o libro que puedas, para que seas lo más exitoso posible.
Cuando yo comencé a escribir este libro, dije:

Cambia las palabras para que se adapten a tus circunstan­


cias de escritura.
Si eres un cineasta, puedes decir algo similar a lo anterior.
Como ejemplo, puedes desear decir:
1 10 E t C a m in o A m able

Te darás cuenta que decir esto, atraerá a los mejores escri­


tores, directores, operadores de cámaras, actores y equipo de
producción — a quien sea que necesites para ser tan exitoso
como puedas serlo.

P a r a l a C o m u n id a d G l o b a l y l a s
D e c is io n e s P o l ít ic a s B e n e v o l e n t e s
En el caso de que no lo hayan notado, un resultado de la
explosión demográfica es que tendremos que aprender cada
vez más a congeniar con personas de diferentes razas, culturas
y creencias. Posiblemente tú y aquellos en el área o país en
donde vives, se han sentido incóm odos viviendo y trabajando
con personas que parecen muy diferentes a ti. ¿Qué puedes
hacer? Comienza por decir:

Esta oración benevolente y miles como esta, crearán la inte­


gración de una com unidad global m ucho m enos estresante
y temerosa.
O r a c io n e s B e n e v o l e n t e s 111

La política siempre es un tema en el que todos tienen una


opinión. Incluso en una sociedad completamente libre, los
gobiernos no pueden hacer públicas todas las razones para las
políticas y decisiones que toman, incluso si son para tu mejor
interés. Pero los mismos líderes gubernamentales son huma­
nos y pueden cometer errores, o pueden ser influenciados por
personas y compañías que no tienen tus mejores intereses en
el corazón. Entonces sugiero que digas:

Otro día puedes cambiar esta y decir simplemente:

Esto debe decirse con sinceridad, porque no funcionará si


eres despectivo o bromeas en tu tono de voz. Sé que a veces es
difícil cuando ves constantemente y escuchas a los líderes de tu
país como el blanco de bromas en la TV, la radio y la prensa.
Pero se serio y sincero.
Si tu país tiene fronteras con otro país, o está rodeado por
otros países, las decisiones de los líderes de esos países pueden
afectar tu vida y la vida de tu familia. El medio oriente es un
112 E l C amino A mable

buen ejemplo de esto, porque las vidas de muchas familias se


ven destrozadas por las decisiones de unos pocos. Para el líder
o los líderes de otro gobierno, di:

P ara laPaz M undial


y la M adre T ierra
Realmente com encé por aprender sobre las oraciones
benevolentes cuando decidí pedir un resultado benevolente
por la paz mundial. Me explicaron en mis meditaciones que
diferentes seres angélicos manejan esas peticiones generales.
Me sugirieron que dijera:

Esta es una buena para decir ahora mismo. Otro día, puedes
decir:
O raciones B enevolentes 113

Di estas peticiones solo una vez. Eso es todo lo que se necesita.


Tal vez estés preocupado por el ambiente. Quizás piensas
que un parque nacional, un bosque o un refugio, no están reci­
biendo toda la ayuda que deberían del gobierno. Entonces di:

Para toda la naturaleza y el ambiente, puedes afirmar:

Otra petición ambiental es:

Puedes hacer esta petición más específica, nombrando a la


industria o la compañía.
Para todos los que no creen que nuestro planeta es el único
habitado entre trillones y trillones de planetas, pueden afirmar:
114 E l C amino A mable

¡Esta última oración benevolente puede ser respondida más


pronto de lo que piensas!
CAPITULO TRECE

PETICIONES “YO ESPERO”

Recientemente descubrí el uso de la esperanza como una


petición benevolente en una visita que les hice a nuestros
amigos, Don y Karen, que viven ahora en San Diego. (Hablé
antes en el libro sobre cómo Karen encontró algunos papeles
importantes pidiendo un resultado benevolente.)

Mi D escubrimiento
de las P eticiones “Y o E spero”
Mi esposa y yo no habíamos estado en San Diego en varios
años, así que los cuatro decidimos hacer cosas de turistas: ir
a la gran reserva de vida silvestre y al increíble acuario del
Instituto Oceánico Scripps. Fuimos a comer un día a la pin­
toresca ciudad de Escondido. Manejamos lentamente por la
calle principal buscando un restaurante. La ciudad tiene esta­
cionamiento paralelo sobre la calle, y casi todos los espacios
estaban llenos. De pronto un auto salió ju sto frente a nosotros,
y supe que era allí en donde debíamos detenernos y estacio­
narnos (algunas veces parece que mi ángel guardián está tan
acostumbrado a mis peticiones de RMBs, que me las otorga
con un guiño). Frente a nosotros había una pequeña panadería
Francesa que también tenía menú para el almuerzo.

115
116 E l C amino A mable

Era un día soleado, cálido y agradable, así que decidimos


comer al aire libre en una pequeña área cercada al frente.
Estábamos disfrutando de nuestro almuerzo y conversación,
hasta que un hombre salió de la tienda de al lado con una car­
retilla. Era obvio que él y dos hombres jóvenes estaban rem od­
elando el interior, y él había decidido limpiar el cemento de su
carretilla. Comenzó a raspar ruidosamente el interior con una
pala. No solo era ruidoso, sino también polvoriento. Había dos
grupos de personas incluso más cerca de él que nosotros, así
que todos estábamos molestos. Esto duró varios minutos.
Finalmente dije con sentimiento:

Él dejó de raspar inmediatamente la carretilla, bajó la pala


y se llevó la carretilla al interior. Me quedé muy sorprendido,
y mi amigo Don comenzó a reírse, porque también había visto
lo que había pasado. Yo supe de alguna forma que el hombre
no podía haberme escuchado, pero de cualquier forma era
embarazoso, porque sentí como si de alguna forma le hubiera
ordenado al hombre que se detuviera. Term inamos nuestro
almuerzo sin más interrupciones.
A la mañana siguiente, medité sobre esto, y el m ensaje
que recibí fue que la petición “Yo espero” es otra forma de
petición benevolente, para que suceda algo que involucra a
alguien más. La otra persona no tiene que cumplirlo si no
desea hacerlo, así que es puramente benevolente. La palabra
“Esperanza” está definida en el Diccionario W ebster com o
“deseo acompañado con expectativa por obtener lo que se
desea o la creencia de que es obtenible”. En este caso, me
explicaron que el hom bre estaba a punto de terminar. Cuando
P eticio n es “Yo E spero ” 117

dije que esperaba que hubiera terminado, él lo cumplió y dejó


de limpiar más.
Formas de U tilizar
las P eticiones de Esperanza
Hasta ahora, no he intentado utilizar muy a menudo las peti­
ciones “Yo espero”. Puedes usarlas en una circunstancia en la
que estás en un restaurante muy concurrido y dices:

Yo intenté esto recientemente en un restaurante cuando


vi que nuestro mesero estaba mezclando dos bebidas para
alguien. El no acudió, pero otro mesero pasó, nos preguntó si
necesitábamos algo y se hizo cargo de nuestra petición.
O posiblemente puedes decirlo cuando estás en una tienda
muy llena y deseas que el encargado de ventas te ayude inm e­
diatamente. Si no lo hace, es porque realmente está ocupado y
no puede responder directamente. Si necesitas que aprueben
un papel o un proyecto, podrías decir también:

Si deseas que alguien llame por razones de negocios o per­


sonales, podrías afirmar:

Puede ser que quieras darle seguimiento con una petición de


un resultado benevolente para los resultados de la llamada.
118 E l C a m in o A m able

Yo veo las peticiones “Yo espero” como suplementarias a


tus peticiones de resultados benevolentes y oraciones benevo­
lentes. Me interesaría escuchar cómo utilizan estas peticiones
de esperanza.
CAPÍTULO CATORCE

PENSAMIENTOS FINALES

En este libro, te he presentado una forma de vida más


amable. Te he brindado una forma para estar en contacto con­
stantemente con tu ángel guardián y tus guías.
Si no haces el hábito de hacer peticiones de resultados
benevolentes, o de solicitar oraciones benevolentes, será
como la vieja canción de rock que dice “Somos la luz del sol
momentánea, disolviéndose en la hierba” [“Let’s Get Together”,
Los Youngbloods]. Tus memorias sobre tus peticiones y sobre
recibir resultados benevolentes se desvanecerán, y volverás a
reaccionar ante la vida, en lugar de actuar para hacer de ella la
mejor, la más pacífica, la más divertida, la menos estresante, y
la menos temerosa para tus circunstancias.
Hacer el hábito de pedir resultados benevolentes ha sido lo
más difícil para mis amigos. No pienses que debes solo pedir
resultados benevolentes para las “cosas importantes”, como
si fueras una persona a la que se le dieron solo tres deseos.
Puedes pedir RMBs miles de veces. Mencioné antes que he
pedido resultados benevolentes entre 10,000 y 15,000 veces, y
no se me han terminado esas “formas” todavía.
También deseo hacer énfasis en que entre más pidas resul­
tados benevolentes, más te sintonizarás para reconocer los

119
120 El C amino A mable

mensajes y los cambios de circunstancias que te envía tu ángel


guardián. Yo noto ahora como incluso peticiones simples de
un RMB para cruzar la ciudad, crean espacios en el tráfico
para mí, cómo el agente de tránsito detiene a alguien más unos
segundos antes de que yo llegue, y cómo conductores pelig­
rosos pasan dándome un amplio margen. Ahora estoy mucho
más consciente de mis alrededores, y tú lo estarás también.
Es por esto que sugerí que coloques recordatorios por toda
tu casa u oficina, pequeñas señales que te recuerden constan­
temente todo esto, hasta que ya no necesites que te los recu­
erden. Te sugerí que pongas varias señales. Solo has una señal
a mano con los crayones de tus hijos, o con una pluma de color
de punto ancho — cualquier cosa que atraiga tu vista cada día
y cada noche. Si no lo has hecho, ¡detente y hazlo ahora!
Si ya has estado pidiendo resultados benevolentes, estoy
seguro de que has estado viendo éxito en las pequeñas situa­
ciones mundanas. Si comenzaste haciendo peticiones de RMB
solo para los eventos grandes e importantes, entonces puede
ser que todavía no hayas recibido una resolución. No creas
que no está pasando nada. ¡Roma no se construyó en un día!
Sé paciente — como me lo dicen repetidamente en mis medi­
taciones — y pide por los pequeños eventos.
En las páginas siguientes, encontrarás “puntos de bonifi­
cación”, conocidos comúnmente como apéndices. Estas son
sugerencias extra que, durante el tiempo en el que estés pidi­
endo resultados benevolentes y oraciones benevolentes, m ejo­
rarán tu vida todavía más.
Te lo recordaré otra vez: Yo no inventé esto de hablar con
los ángeles. Esto ha estado sucediendo durante miles de años.
Yo solo intenté algunos conceptos, y funcionaron para mí,
por lo que te los estoy compartiendo. Has leído en este libro
m uchos de los errores que he cometido durante los años — y
P ensam ien to s F inales 121

cómo me han salvado los RMBs — y puedo asegurarte que hay


muchos más por venir. Esa es parte de la aventura de la vida.
Piensa en mí como un amigo, y si alguna vez me conoces, dame
un abrazo. Eso es todo lo que pido o deseo. ¡Los abrazos son
grandiosos!
Te veré en mi próximo libro, si no antes. Ahora deseo decirte
algo que tú también le puedes decir a todas las personas con
las que encuentres, y a los perros, gatos, animales, árboles,
flores, lagos, casas y cualquier otra cosa con la que te encuen­
tres en este hermoso planeta nuestro: ¡Buena Vida!
PUNTOS DE BONIFICACION
UNA EXPLICACIÓN DE LOS APÉNDICES SIGUIENTES

Esta no es una sección normal de apéndices. Las siguientes


páginas te darán trabajo extra y métodos que van más allá
del alcance básico de este libro. En la universidad, a mi hijo
le daban trabajo extra que otros alumnos y él podían hacer,
para ganar puntos de bonificación en los cursos que estaban
tomando. Es por esto que lo llamé “Puntos de Bonificación”.
Ve de esta forma las siguientes páginas. No necesitas pro­
barlos ni experimentar con ellos para tener éxito en la petición
de los resultados benevolentes. Pero estos enriquecerán tu vida
como un bono, si decides incorporar cualquiera de ellos en tu
vida diaria.
Si tienes una historia de gran éxito, por favor escríbeme.
Probablemente escribiré una secuela de este libro. En ella
relataré historias de todo el mundo para motivar a más perso­
nas a adoptar las peticiones RMB en sus vidas diarias. Por favor
contribuye y envía tus historias a: stories@thegentlewaybook.
com. ¡Buena Vida!
— Tom T. Moore

123
APENDICE A:

AFIRMACION DIARIA

Esto es lo que yo repito diario para empezar mi día. Lo


tengo pegado en el espejo de mi baño. Establece tu propósito
y tu voluntad, y con el tiempo — estoy hablando de meses —
cambia esos pensamientos de carencia que pueden haberte
impedido tener una vida exitosa.

125
APENDICE B:

UN RECORDATORIO RMB
PARA TU ESPEJO

Con el fin de ayudarte a recordar pedir resultados benevo­


lentes cada día, para que este pueda convertirse en un hábito
benéfico, coloca el siguiente mensaje en el espejo de tu baño, o
donde sea que lo veas cada mañana y cada noche:

127
APÉNDICE C:

REGISTRANDO LOS SUEÑOS

Como lo mencioné al inicio de esta sección de apéndices,


estos son puntos de bonificación, cosas que no tienes que
hacer para pedir exitosamente resultados benevolentes, pero
que pueden reamente enriquecer tu vida.
He estado registrando mis sueños cada mañana desde 1979
— ¡mucho tiempo! He registrado miles de sueños. Muchas
veces no puedo recordar ningún sueño, y la mayor cantidad
de sueños que he registrado en una noche, han sido nueve.
Existen muchos libros sobre los sueños, así que esta será solo
una breve introducción.
¿Por qué registrar tus sueños? Porque la mayor parte del
tiempo son mensajes de tu ángel guardián. Yo he tenido
muchos sueños precognitivos. Una vez hace muchos años, mi
esposa y yo íbamos a asistir a un congreso mundial de agentes
de viajes en Manila. Yo tuve un sueño muy vivido sobre una
explosión, y de alguna forma una mujer y varios hom bres esta­
ban involucrados. Con base en ese sueño, cancelamos nuestro
tiempo en Manila y agregamos días extra en Taiwán y Hong
Kong. El primer día del congreso, explotó una bomba frente
al vestíbulo, hiriendo a diez personas. Arrestaron a una mujer
que trabajaba para el gobierno filipino en los Ángeles en cierta

129
130 El C amino A mable

capacidad, y a cuatro hombres. Eso sucedió antes en mi regis­


tro del sueño, ¡así que te puedes imaginar con qué seriedad lo
tomo a partir de entonces!
Durante el tiempo cuando mi esposa y yo estábamos vendi­
endo nuestro negocio de turismo, estaba buscando qué iba a
hacer a continuación. Tuve un sueño vivido sobre una práctica
que los cineastas independientes de películas familiares de
aventura, usaron en los años 1970. Lo que hacían era ir a una
ciudad y rentar un cine por una o varias noches, se anuncia­
ban en los periódicos, en la radio y a veces en la TV. Ellos se
quedaban con todas las utilidades de la venta de boletos, y el
cine se quedaba con la concesión y las ventas de la tienda. No
podía comprender por qué había tenido ese sueño, Pero en
poco tiempo entré a la distribución de películas internacionales
y programas de TV.
La mayor parte del tiempo, los sueños son simbólicos por
naturaleza. Antes de que se estrellara un avión de Delta Airlines
en el aeropuerto de Dallas Fort W orth en agosto de 1985,
soñé que un avión que se veía como uno de Delta, se estrel­
laba. Antes de que explotara el Challenger en 1986 durante el
lanzamiento, yo soñé que estaba en una cápsula de cristal muy
arriba sobre la Tierra y después bajo el océano. Tuve tres sue­
ños precognitivos antes del 9/11, incluyendo uno en el que vi
un tornado atravesando un edificio, con un grupo de personas
flotando en el aire justo detrás de él.
Yo uso un diccionario de sueños para que me ayude a
interpretarlos. Puede ser que no necesites uno — muchos de
mis amigos y familiares no lo necesitan — pero si lo necesi­
tas, te sugiero que vayas a tu librería local con varios sueños
escritos. Busca esos sueños en varios diccionarios para ver
cuál parecer ser el más cercano en la interpretación de tus
sueños, y compra ese. El libro que he usado durante años y
A péndice C: R egistrando los S ueños 131

años es The Dreamer’s Dictionary por Lady Stern Robinson


y Tom Corbett.
Para registrar tus sueños, has lo siguiente:
1. Compra una libreta con espiral, una pluma con punto
grueso (para ver en la oscuridad) y una pequeña pluma
o luz para leer.
2. Colócalos cerca de tu cama o en tu mesa de noche.
3. Cada noche, registra la fecha del día siguiente y la ciudad
en donde estás registrando el sueño.
4. Repite en voz alta, “Deseo recordar mis sueños esta
noche”.
5. Compra un diccionario si tienes problemas para interp­
retar tus sueños.
6. Después de un periodo de tiempo registrando tus sue­
ños, puedes desear hacer lo que yo hago, y es imprimir
libretas especiales de cien hojas, impresas por delante y
por detrás. Puedes ir a mi sitio www.thegentlewaybook.
com, y copiar y pegar la página que ya creé. Me gusta este
tamaño, porque es de la medida de mi mesa de noche y
cabe más fácil que una libreta más grande, especialmente
con un diccionario de sueños, otros libros y revistas, una
luz pequeña, y una lámpara que también hay allí.
He escuchado incontables veces durante los años, “Oh, pero
yo no sueño”. Eso no es verdad en absoluto. Todos sueñan.
Pero si no le ordenas a tu mente consciente que recuerde tus
sueños, entonces se pierden inmediatamente cuando despier­
tas. Nuevamente, hay libros sobre sueños y cómo recordarlos,
pero aquí hay algunas sugerencias:
1. Repite en voz alta cada noche que deseas recordar tus
sueños.
2. Acuerda contigo despertarte cinco o diez minutos antes
de que suene el despertador.
132 E l C amino A mable

3. Trata de despertar tan silenciosamente com o sea posible.


No prendas la radio ni la TV.
4. Si despiertas durante la noche, piensa en lo que estabas
soñando y regístralo inmediatamente. Probablemente no
recuerdes el sueño en la mañana.
5. Si el sueño parece ser para advertirte algo, di:

¡Buena suerte y buena vida!


APÉNDICE D:

MEDITACIÓN

Otra cosa grandiosa que puedes probar, si no por otra razón,


por tu salud física, es la meditación. He estado en el consul­
torio de mi doctor una hora después de meditar, y mi presión
era tan baja, que tuvieron que tomarla dos veces más. Hice
una versión rápida del ejercicio de respiración que describo
abajo, justo antes y durante una prueba de presión sanguínea
y de ritmo cardiaco, ¡y he visto como baja de ochenta latidos a
sesenta y seis en solo treintas segundos más o menos!
Muchos, muchos doctores recomiendan la meditación en estos
días. Un estudio conducido en el otoño del 2005, encontró que el
cerebro de las personas que meditan era 5 por ciento más grueso
en las áreas que tienen que ver con el enfoque y la memoria, que
el de los que no meditan. La implicación es que la meditación
puede realmente mejorar la capacidad de la atención y la memoria
[l/.S. News and World Report, 26 de diciembre del 2005].
Pero la meditación te ofrece mucho más. Si tienes un prob­
lema en tu vida — ¿y quién no lo tiene? — puedes preguntarle
a tu ángel guardián cuál es la solución. Solo tienes que aquietar
tu mente y escuchar la respuesta.
Conforme progresas y te sientes más cómodo en tus medita­
ciones, puedes desear preguntar todo tipo de preguntas sobre las

133
134 E l C am in o A m able

personas que conoces y los que salen en los noticieros. Como


ejemplo, yo vi una entrevista en la TV con Paul McCartney, y
él dijo que realmente no escuchó a John Lennon o a George
Harrison decir, “cambia esto o aquello”, pero dio a entender que
sintió su presencia y su asistencia. Así que pregunté en medit­
ación cuál podría haber sido su conexión, y me dijeron que ellos
ahora están actuando como guías para él y lo ayudan a escribir su
música. También lo ayudan a tomar otras decisiones musicales.
Recientemente compré el documental en DVD de Bob
Dylan, No Direction Home. Yo había escuchado su música
muchas veces a través de los años, pero cuando vi el docu­
mental, me quedé impresionado por los tipos tan diferentes
de canciones que compuso, así que pregunté en meditación
sobre eso. El mensaje que recibí fue que él todavía no entiende
el “proceso” y piensa que lo inventó en su mente, pero que
allí había realmente un número de diferentes compositores
cósm icos que contribuyeron con canciones. Vi una fila de com ­
positores allí y a alguien diciendo, “el que sigue”. Muchas de
esas com posiciones les hacen pensar a las personas sobre sus
relaciones con otros.
Entonces para comenzar a practicar la meditación, sigue
estos pasos fáciles:
1. Trata de meditar a la misma hora cada día. Esto puede
significar que ajustes tu despertador veinte minutos
antes cada mañana —y sí, puede ser que tengas que cam ­
biar tu tiempo de sueño para ajustarte a esto. O quizás
en el trabajo después del almuerzo, en lugar de mirar
TV o salir corriendo para almorzar en un restaurante,
puedes cerrar la puerta de una oficina, e incluso meterte
en un clóset.
2. Ten a la mano una libreta en donde puedas escribir lo
que recibes, porque los mensajes son similares a los
A péndice D: M e d it a c ió n 135

sueños, en cuanto a que se desvanecen rápidamente (yo


cambié de libreta a mi computadora debido a la longitud
de los mensajes).
3. Sugiero que toques algo de música suave y agradable
para opacar los ruidos externos. Puede ser que tengas
que usar audífonos para escuchar. Yo escucho la música
de Robert Coxon, un artista canadiense que toca música
realmente hermosa.
4. Siéntate cómodamente en una silla, un sofá, o sobre el
suelo. Siéntate en una posición vertical — no te jorobes.
Pide un resultado benevolente para tu meditación.
5. Cierra tus ojos. Junta las yemas de los dedos pulgares
con los índices.
6. Comienza a Inhalar por tu nariz, sosteniendo hasta una
cuenta de cuatro, y después suavemente exhala a través
de tu boca, con tus labios ligeramente abiertos. Esto
ayuda a centrar tu atención. Después de poco tiempo,
continúa inhalando por tu nariz y exhalando por tu boca
sin sostener la respiración.
7. Al mismo tiempo, relaja tu cuerpo, permitiendo que tus
músculos se relajen desde tus pies, lentamente hacia
arriba a tus piernas, tu torso, tus brazos, tus manos y tu
cuello. Y lo más importante, relaja los músculos de la
boca.
8. Inicia con la intención de aquietar tu mente. Aleja gen­
tilmente cualquier pensamiento sobre tus actividades
diarias. Esta es la parte más difícil. Te va a tomar práctica,
porque tu mente querrá saltar hacia cien temas diferen­
tes.
9. Conforme aquietas tu mente, imagina una luz blanca
hermosa llena de amor puro, proveniente de tu ángel
guardián, bajando a través de la parte superior de tu
136 El C amino A mable

cabeza. Esto te ayudará a enfocarte. Permite que esta her­


mosa luz amorosa de tu ángel viaje lentamente a través de
todo tu cuerpo —bajando primero por tu cabeza, después
por tu garganta, después a través de tu corazón y tu plexo
solar, después por tu abdomen, pasando por la ingle
y hacia abajo a través de los pies. Imagínala pasando a
través del piso, todo el camino hasta el centro de la Tierra.
10. Ahora imagina una luz dorada saliendo de tu corazón y
rodeando todo tu cuerpo con un movimiento en espiral,
como un capullo. Después expande la luz e imagina que
viaja alrededor del mundo. Todo esto te ayuda a enfo­
carte y a visualizar.
11. Ahora, mientras sigues inhalando suavemente a través de
tu nariz y exhalando por tu boca, imagínate bajando una
escalera. Los escalones tienen números. Baja desde el
siete hasta el uno. Conforme bajas los escalones, piensa,
“Siete, abajo, abajo, abajo, seis, abajo, abajo, abajo”, y así
sucesivamente. Si sientes la necesidad, baja otra serie de
siete escalones.
12. En este punto, puedes mantener tu mente quieta e imag­
inarte en un hermoso lugar tranquilo, como una playa o
una montaña. Observa si hay mensajes o imágenes que
llegan a tu mente. O si tienes una pregunta, hazla gentil­
mente y espera la respuesta. No saltes hacia otro tema ni
permitas que ningún otro pensamiento te distraiga. Va a
parecer como si estuvieras pensando la respuesta, pero
no es así.
13. Cuando sientas que es momento de regresar, imagínate
que estás subiendo los escalones, y cuando termines
de contar del uno al siete, estarás totalmente despierto.
Registra cualquier sentimiento, imágenes y mensajes que
recibiste.
A péndice D: M e d it a c ió n 137

No te frustres si tus primeros intentos parecen no tener


resultados. Esto es como conducir una bicicleta. Toma un poco
de práctica, pero ¿recuerdas lo divertido que era conducir esa
bicicleta exitosamente? ¡Esto es todavía mejor!
Hay libros sobre meditación si deseas llevar esto más adel­
ante y aprender más al respecto. Si quieres comprar un CD de
meditación, puedes ir a www.discksutphen.com. En mi opin­
ión, Dick es una de las mejores voces que he escuchado. Elige
uno de sus diversos CDs de meditación ¡para un resultado de
lo más benevolente para tus meditaciones!
APÉNDICE E:

MEDITACIÓN DE LA
CALIDEZ DEL CORAZÓN

Esta es una meditación cuyo propósito es familiarizarte con el


sentimiento de amarte a ti física y mentalmente. Después de que
te de las instrucciones para este ejercicio aparentemente simple,
describiré muchos beneficios que resultan de hacer esto.
Cierra tus ojos. Frota tu pulgar muy suavem ente con las yem as
de tus dedos durante un minuto aproxim adam ente, no hagas nada
más. Nota que esto enfoca tu atención en tu cuerpo físico y la aleja
de todas las otras cosas a tu alrededor.
A continuación, lleva la misma atención física hacia tu corazón,
o a cualquier parte en esa área, en donde puedas buscar o generar
un sentimiento cálido. Puede no ser tu corazón; puede ser tu plexo
solar o tu abdom en. Puede tom ar un minuto o dos encontrar o
generar esa calidez que puedas sentir.
Entra en esa calidez, y perm anece con ella y siéntela durante unos
minutos p ara que puedas memorizar este método y tu cuerpo pueda
crear el recuerdo de cómo se siente y cómo necesita sentirse p ara ti.
En momentos diferentes, y puede ser en lugares diferentes. No trates
de moverla, solo siéntela. Conforme sigues repitiendo este ejercicio,
serás capaz de hacerlo durante periodos más largos de tiempo.
Después de eso, piensa en esto: La calidez es la evidencia
física del am or a ti mismo. Has leído durante años que necesita-

139
140 El C amino A mable

mos amarnos a nosotros. Esto te une con tus ángeles y con


toda la creación. Te brindará una mayor facilidad y comodidad
en tu vida.
Puedes notar conforme te haces mejor en esto, que tus ami­
gos y conocidos estarán más relajados a tu alrededor, y que
las cosas parecen ser más armoniosas. Tenderás a no enojarte
tanto como solías. Los animales pueden reaccionar diferente
contigo — serán más amistosos y estarán más relajados a tu
alrededor, tal vez te verán diferente. Esto se debe a que estás
irradiando esta cálida energía amorosa.
No trates de enviarles esto a otras personas. Si están inte­
resados en lo que estás haciendo, o por qué se sienten mejor
a tu alrededor, puedes enseñarles esta meditación simple.
Nuevamente, esto te beneficiará a ti y mejorará tu experiencia
a lo largo del Camino Amable.
APÉNDICE F:

COMUNICANDOTE CON
MASCOTAS Y ANIMALES

Recibí la siguiente información de dos chamanes Indígenas


Americanos. Muchos de ustedes han visto programas de TV
sobre psíquicos de mascotas, y desearon poderse comunicar
con su amoroso perro, o gato, u otro animal. ¿Cuántas veces
te ha mirado tu mascota y tú simplemente supiste que estaba
tratando de decirte algo?
De acuerdo con estos dos chamanes, los animales no se
com unican con palabras, sino con imágenes. Si has estado
pidiendo resultados benevolentes durante un tiempo, entonces
tu consciencia y tu habilidad para recibir estas imágenes será
mejor que si acabas de empezar.
Si has estado en el trabajo todo el día, cuando llegas a casa
y saludas a tu mascota, relaja tu mente y ve si puedes ver
cualquier imagen de lo que ha estado haciendo tu mascota
mientras estabas fuera. Entonces crea una imagen simple en tu
mente de lo que tú has estado haciendo, y envíale a tu mascota
imágenes que signifiquen cuánto la amas.
Crea imágenes simples, no complicadas.
Cuando lleves a tu mascota al veterinario, mándale imá­
genes de que van a cuidar de ella. Tu mascota absorbe mucho
del miedo de los animales que están allí, y esto la asusta tam­
bién. Envíale a tu mascota imágenes calmantes.

141
APÉNDICE G:

UNA ORACION
BENEVOLENTE PARA LOS
DESASTRES
Puse esta oración benevolente al final del libro, para que
puedas hacer referencia a ella fácilmente, cuando sea que sien­
tas una necesidad compasiva de ayudar a aquellas personas
en otra parte del mundo. Esto puede decirse para terremotos,
tsunamis, erupciones volcánicas, huracanes, tornados, ataques
terroristas, o cualquier otra calamidad por la que desees pedir
asistencia angélica.
Si lo recuerdas, escribí antes que no es necesario limitar esta
oración benevolente solo a los seres humanos. Al decir “todos
esos seres”, no solo incluyes a los humanos, sino a los perros
de rescate, a los gatos, a los animales y a los seres angélicos. Y
para los que se preguntan cómo los animales pueden ayudar
a los humanos, recientemente vi en un noticiero de TV una
historia sobre un gato que salvó a su humano incapacitado
¡marcando el 911!

143
GLOSARIO
DEFINICIONES DE LOS TÉRMINOS QUE SE UTILIZAN
EN ESTE LIBRO

Ángeles: Intermediarios divinos que ayudan a orquestar resul­


tados benevolentes y oraciones benevolentes.

Lenguaje de los Ángeles: Palabras como “benevolente” y


“oración benevolente” que parecen usar en el mundo angélico.

Benevolente: Una disposición amable para promover la felicidad y


la prosperidad a través de buenas obras, o por la generosidad y el
placer de hacer buenas obras [definición del Diccionario Webster],

Ángel Guardián: Un ángel que se ofrece como voluntario para


cuidar de una persona particular a través de su vida.

Guías: Entidades angélicas que ayudan al ángel guardián a dar


guía a un individuo. Estos pueden ser incluso padres que han
muerto, parientes o amigos.

S er Superior: Tu alma.

Esperanza: Deseo acompañado por la expectativa de obtener lo

145
146 E l C a m in o A m able

que se desea o se cree que es obtenible. [Definición del Diccionario


Webster].

O ración Benevolente: Una petición hecha a tu ángel guardián


y a otros seres angélicos, cuando es para otros. Esta también
puede incluirte a ti.

RMB: Abreviación para “resultado más benevolente”.


ACERCA DEL AUTOR

Tom T. Moore está en el negocio del entre­


tenimiento, durante los pasados veinticuatro
años ha sido el presidente y director de su
propio negocio de distribución de películas
internacionales y programas de TV, con base
en Dallas, Texas. Durante este tiempo, ha sido
coproductor ejecutivo de varias películas y
espectáculos de TV, y ha viajado extensivamente como parte de
las labores de su negocio a mercados internacionales de pelícu­
las en Cannes, Francia; Milán Italia; Los Ángeles, California; y
Budapest, Hungría. Él nos entrega un conocimiento profundo,
pedir resultados benevolentes puede usarse tanto en asuntos de
negocios como en la vida personal, y relata muchas historias per­
sonales con relación a estas peticiones. Él dice que pedir resul­
tados benevolentes en los últimos diez años, lo ha conducido a
llevar una vida más amable, menos estresante y menos temerosa
— ¡El Camino Amable!
Antes de convertirse en un distribuidor de películas, Moore
era dueño de una compañía internacional de turismo que oper­
aba junto con su esposa, vendiendo tours a través de 3,0 0 0
agentes de viajes en todo el país. Ese negocio surgió de su

147
148 El C amino A mable

primera incursión exitosa, un club de esquí para adultos solte­


ros, que creció hasta convertirse en el club de esquí en nieve
más grande en Texas. Moore todavía es un ávido esquiador y
le encanta esquiar en los Estados Unidos, Canadá y Europa.
Moore se graduó con una Licenciatura en Administración de
Empresas en finanzas, en la Universidad Cristiana de Texas en
Fort W orth, Texas, y sirvió en el ejército de los Estados Unidos
como primer teniente. Él es nativo de Dallas, Texas y es casado
con dos hijos.
Para reservar a Tom T. Moore como ponente en tu próx­
ima conferencia o evento, escríbele un correo electrónico a
speaker@TheGentleW ayBook.com .

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