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Introducción

Han sucedido tantas cosas y en tan poco tiempo, que no resulta fácil seleccionar
alguna temática referente a la Administración de Empresas y sus Desafíos. Y no
por no exista tema alguno, al contrario, son bastante los hechos, por ello
probablemente nos pasaremos los próximos años debatiendo sobre estos
acontecimientos.

En Octubre del 2019, comenzaron a ocurrir sucesos productos de las demandas


sociales que presentaba la ciudadanía, junto a ellos, se vio afectado el comercio
de varias comunas y a lo largo de todo Chile. Esto no solo por las manifestaciones
que ocurrían a diario, sino además, por los saqueos, quemas y claramente la
imposibilidad para lograr trabajar.

A mediados de Enero del 2021 las manifestaciones fueron bajando su intensidad,


sin embargo el comercio y las empresas fueron nuevamente golpeados por el
COVID-19 que llego de modo apisonador, triturando inmisericorde nuestro estilo
de vida, nuestra salud, nuestra vida social y nuestra vida laboral.

Esto, no ha llevado plantearnos la siguiente interrogante:


¿Cómo gestionar una Administración de empresas y nuevos desafíos frente
al COVID-19? ¿Cómo gestionamos nuestra empresa en tiempos de crisis?

Seguramente muchos de nosotros, gerentes, administrador y emprendedores han


visto cómo sus compañías afectadas por los reflejos de la crisis causada por la
pandemia y por esto es que se nos viene a la mente estas preguntas.

Mirar el impacto financiero generado en los consumidores puede ser una forma de
predecir cómo se verá afectado el mercado, ya que, con las medidas de
eliminación y la reducción de su poder adquisitivo, las personas han dejador de
consumir.

En medio de este escenario se encuentran las empresas que necesitan lidiar con
la caída de los ingresos, y más aún, pensar en estrategias para reconstruirse
después de la crisis.

Con esto en mente, es que queremos a ver cuáles son las relevancias que pueden
servir para la toma de decisiones pudiendo vislumbrar para nuestro futuro, en
comparación con los años pasados, destacando la conveniencia para las
empresas y su administración.
Desarrollo

Algo que nos debería quedar claro en la actualidad, es que muchos empresarios,
emprendedores, locatarios, etc., están en una misma situación de crisis. Por lo
tanto, quienes planeen desarrollar buenas estrategias para lograr sobresalir y
afrontar esta situación, probablemente llegara al final de este periodo de
turbulencias más fuerte de lo que entro.
Esto, básicamente por que las crisis impulsan los cambios, tanto por parte del
mercado, el cual se ve directamente afectado por lo que ocurre en el mundo, como
por parte de las empresas, que necesitan adaptarse a las nuevas tendencias.
Desde un cambio de comportamiento hasta la creación y la adhesión a las nuevas
tecnologías, es importante estar siempre a la vanguardia.

1. PLANIFICAR Y PRIORIZAR
Al administrar una empresa en tiempos de crisis, como la que estamos
experimentando debido a la pandemia del COVID-19, un gerente, administrador o
emprendedor deberá tener muy claro que es una prioridad y que se puede
posponer o eliminar.
Con esta base y en una observación del escenario actual, es posible preparar un
plan para suavizar los impactos de la crisis y preparar a la empresa, compañía,
local o emprendimiento para reanudar los negocios del fututo.
Obviamente, todo lo relacionado con la calidad del servicio o producto final que se
entrega, se deberá considerar una PRIORIDAD. Este, es el pilar más importante
para cualquier negocio…la relación con el cliente¡¡
Por otro lado, es necesario identificar y eliminar el desperdicio, posponer reformas
o mejoras que no son vitales para el funcionamiento de la empresa.
En este sentido, el papel que juega la prevención de perdidas es aún más
importante en este momento, ya que se deberá actuar de manera precisa para
identificar y eliminar estos brotes.

2. MANTENERSE VIGENTE

Un reflejo de la crisis, es la reducción de personal, lo cual es una práctica bastante


común, no siendo una de las mejores alternativas por los costes, la confianza y el
manejo del negocio que nuestro personal puede tener.
Además del persona, otros de los puntos más comunes, es reducir el presupuesto,
personal o tiempo de marketing, lo cual es un gran error.
Construir una imagen de marca requiere tiempo e inversión. Al recortar el
presupuesto de marketing, o el personal que lo realiza o los canales digitales que
realizan marketing en medio de las crisis, significaría que la marca, producto os
servicio perderían visibilidad e incluso pueden que darse en el camino.
Esto, quizás podría potenciar la imagen y sin necesidad de tantos recursos,
considerando que en la actualidad la redes sociales cumplen un rol fundamental
para promocionar de manera gratuita los diferentes rubros.
3. FLEXIBILIDAD, INOVACION Y ADAPTACION

En tiempos de crisis todos debemos volvernos camaleónicos, tener una capacidad


de enfrentar situaciones en la cuales debamos transar y ser aún más flexibles que
nunca para enfrentar situaciones difíciles en su totalidad.

Cada tipo de negocio tiene sus particularidades, la rutina de trabajo de una oficina
de contabilidad por ejemplo, será diferente de la de una tienda de celulares o un
supermercado. Pero si hay algo que evocan los momentos de crisis, es nuestra
capacidad de adaptación, lo que nos permite descubrir nuevas formas de actuar y
conocer más de cerca la residencia que habita en cada uno de nosotros.
A continuación realizare algunos ejemplos:
Los trabajos que anteriormente se realizaban en oficinas ahora esta con
trabajo remoto
El retail y las farmacias se unen cada vez más al servicio de entregas
expres
Es un buen momento para que las tiendas físicas, sin presencia de internet,
consideren unirse al comercio electrónico y modernizar sus servicios y
coberturas.

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