Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Adj-0 915711001574942282
Adj-0 915711001574942282
laboral.
Hizo hincapié en que el testigo Daniel
Eduardo Bozzini no recordó a los dueños de los
frigoríficos Unión del Sudoeste y Faraón y tampoco
vio a una mujer en dichos establecimientos.
Señaló que “atento al largo tiempo
transcurrido, lo que resulta increíble son las
declaraciones del resto de los testigos que, incluso
recordaban con exactitud la fecha en la que se
llevaron a cabo los allanamientos, como por ejemplo
el testigo Guanhon, o que explicaban lo sucedido con
lujo de detalle; lo que, sorpresivamente, no llamó
la atención del Tribunal” (cfr. fs. 21417 vta.).
Argumentó que el sentenciante omitió
arbitrariamente ponderar la declaración del testigo
Doroteo Castillo en cuanto dijo que en el tiempo que
trabajó en el frigorífico el Faraón nunca vio a José
Alberto Samid ni a Alicia Nélida Samid.
En esta inteligencia, sostuvo que el resto
de los testigos que no pertenecen a la A.F.I.P. o al
SE.NA.SA. recuerdan los hechos de una forma
totalmente distinta a los testigos que sí lo son, en
el sentido de que no reconocieron a José Alberto
Samid ni a Alicia Nélida Samid como personas
vinculadas a las diferentes empresas que
integraron.
A continuación, se agravió de la
calificación legal escogida por el a quo en tanto, a
a fs. 20947/20964).
En esta dirección, el tribunal
sentenciante recordó que Valeria Fernanda Della
Cella —quien se desempeñó como empleada del estudio
contable de María Susana Moreno- refirió que las
sociedades radicadas ante el estudio pertenecían a
José Alberto Samid.
La comprobación de las circunstancias
reseñadas, le permitió al a quo concluir que María
Susana Moreno no solo se valió de su calidad de
contadora para beneficiar a la asociación ilícita a
través de la gestión en las diferentes sociedades
desempeñándose en distintos roles y ocupando cargos
formales en algunas de ellas, sino que además, las
administró y representó ante los organismos de
control.
Al respecto, los jueces ponderaron la
documentación oportunamente secuestrada en el marco
de los allanamientos aludidos y los informes de la
A.F.I.P., de los cuales se desprende que María
Susana Moreno ostentó las calidades de síndica,
apoderada y gerente de planta de la sociedad NEA
S.A. empleada de FRIGORÍFICO MORÓN S.A., apoderada
de FRIGOESTE S.A. y autorizada para actuar ante la
D.G.I. en representación de FIMOGRAM S.A. (cfr.
informes contables incorporados por lectura al
debate a fs. 21227 vta.).
En este punto, los jueces se detuvieron a
Ante mí: