Nombre: Manuela Arévalo Buitrago.

ID: 409617.
Resumen: La transición de la edad adulta en Colombia: una lectura relacional.
Este artículo tiene como objetivo general indagar sobre la configuración asumida por la
transición que han tenido los adultos jóvenes a la edad adulta, tomando como base la
calidad de las relaciones entre la generación de los jóvenes y la de sus padres, la
transmisión familiar intergeneracional, la red relacional y la participación de los jóvenes en
el ámbito social, considerando que debe ser un asunto de debate entre la investigación
evolutiva - social, y la psicología, ya que en nuestro país son muy escasas las
investigaciones y los estudios relacionados con este tema. Este giro en la vida humana es
definido como “la transición de la adolescencia a la adultez” (Arnett, 1997; Scabini, Marta
y Lanz, 2006; Harwood, 2008). Cabe mencionar, que al momento de tratar dos términos
como lo son “joven adulto” y “adulto emergente” se habla de dos conceptos totalmente
diferentes, en el que joven adulto corresponde a un periodo de edad entre los 20 y los 29
años. (Scabini, Marta y Lanz, 2006; Comisión Económica para América Latina y el Caribe,
2008), y adulto emergente corresponderá a un periodo de edad entre los 18 a los 25 años.
(Arnett, 2000, 2004; Fierro Arias y Moreno Hernández, 2007). Los adultos emergentes son
aficionados ante explorar diversos campos como lo son: la vida en el amor, el trabajo y las
visiones en el mundo. De ahí se obtiene que la adultez emergente se convierta en un aporte
novedoso a las teorías del desarrollo (ver Arnett, 1997; Fierro Arias y Moreno Hernández,
2007).
Keniston plantea una teoría de la juventud (youth), con el objetivo de marcar un periodo
entre la adolescencia y la adultez que consiste en una experimentación de roles, marcando
una tensión entre él mismo (self) y la sociedad. Ahora bien, aparece el concepto de
“transición vital”, el cual se sobrepone al de “etapa”, compatible con el ámbito relacional-
intergeneracional (Cigoli y Scabini, 2006; Scabini, Marta y Lanz, 2006).
El proceso de transición a la edad adulta, varía según el país, por ejemplo, en países como
Estados Unidos, Alemania, Canadá, Francia, entre otros, es alrededor de la edad de 25 años.
Mientras que, en países como Egipto, Marruecos, Indonesia, Brasil, entre otros, se
encuentra alrededor de 21 años.
Arnett (2004) propone 5 “características externas” que, desde un punto de vista social, son
percibidas como marcadores necesarios para ser adultos:
1. Dejar la casa de los padres.
2. Casarse o convivir.
3. Convertirse en padre o madre.
4. Completar la escolarización.
5. Tener un trabajo de tiempo completo.
Sin embargo, también se plantearon 3 características, las cuales son percibidas como
indispensables para que un joven se considere adulto:
 1. Asunción de responsabilidades.
2. Capacidad para tomar decisiones autónomas.
3. Independencia económica.
Sale a la luz un estudio sobre juventud y cohesión social (2008), realizado en 18 países de
Iberoamérica (añadiendo a España y Portugal), contratado por la Comisión Económica para
América Latina y el Caribe (CEPAL). Este estudio estaba enfocado en los aspectos socio-
económicos que influyen en los jóvenes iberoamericanos en un rango de edad de 18 a 29
años (adultos jóvenes). Como resultados, se tienen los siguientes: los jóvenes colombianos
son optimistas hacia el futuro (Semana, 2008), es una generación contradictoria y al tiempo
distanciada de las instituciones políticas y religiosas, dado que no muestran héroes a
quiénes quisieran imitar.
El investigador Ossa Ramírez (2009), abordó un proyecto basado en la crisis del proyecto
de vida académico y las nuevas formas de identificación en una población de 10 estudiantes
universitarios de la ciudad de Cali. Este estudio se basó en el enfoque interaccionista social
y el construccionismo psicológico, en los cuales se encontró que el proyecto de vida actual
de estos jóvenes colombianos, cada vez es más sensible a la flexibilidad, la
experimentación, el hedonismo y las interacciones múltiples, poniendo como idea central la
idea de “identidad estable”, la cual es propia de las generaciones anteriores. El resultado de
este estudio evidencia una crisis por el distanciamiento entre la cultura escolar y la cultura
cotidiana entre los jóvenes que hacen parte de la población; siete mujeres y tres hombres en
un rango de edades entre los 19 y 25 años, estudiantes de la carrera de psicología.
La adultez emergente, es un campo nuevo para la investigación, la cual ofrece la
posibilidad de reexaminar los métodos que han sido utilizados en la investigación social
con adolescentes.