EL CONCILIO VATICANO I

1. INTERVENCIÓN DE LA IGLESIA EN SU CONTEXTO

En el racionalismo se ve los frutos del protestantismo, porque han perdido la fe en Jesucristo.

Su desarrollo se dio gracias a la filosofía cartesiana que rompió con la autoridad y la tradición, la
filosofía moral y el panteísmo de Spinoza que excluye toda religión, el kantismo que confunde la
filosofía con la teología y la filosofía experimental inglesa, todas ellas el cual es racionalismo
conduce a los creyentes al panteísmo, materialismo y al ateísmo.
En contra del panteísmo y del deísmo, Vaticano I, afirma una revelación sobrenatural. Ante las
situación del siglo XIX donde se sufrió, al poner en tela de juicio las nociones de sobrenatural, de
revelación, de misterio y de milagro en los medios cultos y se discute el título del cristianismo.
Los teólogos, se dedican a defender la religión de las asechanzas de sus adversarios, el cuidado
principal de la dogmática es hacer aceptables a las filosofías de su tiempo los dogmas.
Ante tantas posturas como los fideistas, que opinan que la fe debe de ser ciega, los tradicionalistas,
que la tradición proveniente de la revelación primitiva es necesaria. Los Sumos Pontífices actuaron,
Gregorio XVI condeno el tradicionalismo de Lammennaias con Mirari vos arbitramur, Pío IX en la
encíclica Qui pluribus expone la doctrina de la Iglesia sobre las relaciones entre fe y razón, con el
Syllabus y Quanta cura denuncia los errores y los falsos principios del siglo XIX.
Pío IX en la encíclica Qui pluribus, declara que no existe conflicto alguno entre la fe y la razón,
porque las 2 derivan de la fuente de la verdad eterna. Ante ello el racionalismo se levanta y reduce
la religión cristiana a una obra humana, por ello el Papa declara que:
a) La religión es manifestada por Dios a los hombres y por ello tiene autoridad
b) Es menester que inquiera el hecho de la revelación para que conste que Dios ha hablado y
prestarle y prestarle un obsequio razonable
c) Debe darse toda la fe a Dios que habla, y nada es más conveniente a la razón que asentir y
firmemente adherirse a las cosas reveladas.
La encíclica une los términos de revelación, palabra y fe. Considera la revelación en su aspecto
objetivo, activo y pasivo. En el primer caso se trata de religión revelada en oposición a doctrina
humana, la segunda hace un equivalente entre la acción de revelar y la de hablar y en el tercero
considera la reacción del hombre ante Dios que revela: la fe es la respuesta al Dios que habla,
asentimiento a lo que revela. El motivo de esta adhesión es la palabra misma de Dios.
La fe es un obsequio razonable apoyado en la palabra verídica e infalible de Dios mismo, que
pertenece a la categoría de testimonio.
2. CONSTITUCIÓN DOGMÁTICA SOBRE LA FE CATÓLICA
En la constitución Dei Filius, en el capítulo Sobre la revelación afirma que: existe 2 vías para el
conocimiento de Dios
a) La vía ascendente del conocimiento natural: el cual inicia en la creación y su instrumento es
la luz natural de la razón y conoce a Dios en su relación causal con el mundo.
b) La vía descendente de la revelación: tiene como autor al Dios que habla, autor del orden
sobrenatural, que se da a conocer a sí mismo junto a los decretos de su voluntad.
En el parágrafo primero declara la posibilidad del hombre de llegar por la razón, por la creación,
a un conocimiento cierto de Dios, principio y fin de todo. En contraposición del ateísmo y el
positivismo; y el tradicionalismo.
La segunda parte opone este conocimiento natural de Dios a la vía sobrenatural de la revelación
afirmando así que:
a) La revelación sobrenatural y positiva tuvo lugar en el Antiguo y Nuevo Testamento
b) Dios es autor y la causa de revelación, el cual es una gracia.
c) Dios tuvo la iniciativa de la revelación, para que así las verdades religiosas del orden
natural puedan ser conocidas por todos, con certeza firme y sin error alguno.
d) El objeto material de la revelación es Dios mismo y los decretos eternos de su libre querer
e) Todo el género humano es el beneficiario de la revelación