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EL ORIGEN DEL NATURISMO

En el principio creo Dios los cielos y la tierra. Entonces dijo


Dios: hagamos al a nuestra imagen, conforme a nuestra
semejanza, y señoree en los peces del mar, en las aves de
los cielos, en las bestias, en toda la tierra y en todo animal
que se arrastra. Y creo Dios al hombre a su imagen a imagen
de Dios los creó: varón y hembra los creo. Y dijo Dios: he
aquí que os he dado toda planta queda semillas os serán
para comer. Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí
que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana
del día sexto.

Considerando este relato sagrado, llegamos a la conclusión


que el origen del naturismo se remonta a la creación de la
tierra y del hombre, Dios, el creador prescribió la dieta que el
hombre debería adoptar: frutas y cereales.

Durante todo el tiempo de su inocencia, dentro de los límites


del paraíso, en el jardín del Edén, el ser humano tenía ese
régimen alimenticio, pero Adán y eva, nuestros primeros
padres, no cumplieron la condición necesaria para
permanecer en ese lugar y fueron ordenados por Dios para
que se retirasen. Fuera del edén las condiciones para vivir no
eran tan favorables como dentro de el, de manera que el
padre bondadoso agrego a su alimentación la hierba del
campo, conforme se lee en Génesis 3:18. Se incluye en ese
segundo régimen las verduras y hortalizas. Nótese que la
carne no fue artículo de alimentación humana
inmediatamente después que el hombre cae en pecado
(transgresión de la ley de Dios). Adán vivió 930 años. El fue
naturista en su estado de perfección moral y continuo siendo
naturista después de salir del paraíso, nuestra aseveración en
este sentido es válida hasta que alguien pueda probar lo
contrario.
A propósito léase la historia del profeta Daniel en Daniel 1:3-
6. 8-15,18-20.

Siglos y milenios pasaran a la historia y los naturistas se


sucederán unos tras otros, comprobando por experiencia
propia la veracidad de los principios del naturismo, esto es
que, el hombre vive más y mejor, alimentándose de los
productos vegetales en su estado natural. Así como los
animales comen todo al natural y crudo, el ser humano
también debería acostumbrarse a una dieta semejantemente
naturista, y viviría mucho mejor, adquiriría mas fuerza
aprovechando todo el valor nutritivo de los alimentos sin
destruirlos en la refrigeradora.

Si los animales comiesen los alimentos fritos adolecerían y


morirían de diferentes disturbios. Por esta razón los animales
presos y enjaulados que comen los restos de nuestra comida
fácilmente enferman y mueren. El hombre se ha distanciado
mucho de la naturaleza y ahora paga un precio muy alto por
esto.

DONATO RIVERO PINTO


MEDICO NATURISTA
INVESTIGADOR DE LA MEDICINA TRADICIONAL E INTERCULTURALIDAD
DE LA AMAZONIA BOLIVIANA

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