BENDICIÓN 2011

(Por Rubén del Prado)

Que el Dios todopoderoso salga a tu encuentro y te cubra con un manto especial

de fe y protección este año 2011.

Que tus ojos, al igual que el profeta Eliseo, alcancen ver más allá de toda
circunstancia, adversidad o problema, que puedas ver la acción de Dios en todas
las cosas y que veas el cumplimiento de las promesas de Dios para tu vida.

Que de tu boca, al igual que el rey David, solo salgan palabras de alabanza y fe,
que quienes te escuchen reciban en sus corazones semillas de fe y esperanza.
Que las palabras que tú hables edifiquen siempre a quienes te escuchen.
Que quede desterrado de ti el “no se puede”, más bien que siempre declares
“todo lo puedo en Cristo mi fortaleza”.

Que tus pies, al igual que Caleb siervo de Dios, te encaminen por caminos de
conquistas nuevas y victoria en tus luchas, que camines con firmeza y te lleven a
alcanzar los sueños deseados sin temor alguno, pisando siempre sobre roca firme
con la compañía de ángeles guardianes.
Que cada paso tuyo declare “el Señor es mi Pastor, nada me faltará”.

Que tu corazón, como el corazón de José, sea lleno de sentimientos buenos para
todas las personas, que sea libre de rencores y amarguras, que sepa perdonar las
ofensas y sea lleno del amor que proviene del Espíritu santo, que tu corazón
siempre se mantenga encendido en el servicio del Señor.
Que cada latido de tu corazón proclame “el Señor está conmigo, nada temo”.

Que este año, en especial te veas rodeado de gente buena, gente de fe, gente que
quiera caminar contigo en los caminos de Dios, gente que te desee la prosperidad
y te ayude a alcanzarla, gente que te promueva, gente que te valore y te respete.

Que tus oídos, como los oídos del profeta Isaías, se despierten cada día
escuchando la voz del Señor, que escuches con claridad sus consejos y su
sabiduría, para que sus palabras se aniden en tu corazón y te puedas conducir
siempre por camino recto y seguro. Que sea una realidad esta Palabra en tus
oídos: “habla Señor que tu siervo escucha”.

Que tus manos sean ungidas como las manos del sacerdote Aarón, que todo lo
que toques quede consagrado al Señor, que todo lo que toques sea bendecido, que
cuando extiendas tus manos impartas bendición y liberación de toda opresión.

Que tu oración sea escuchada y respondida a tiempo, que Dios atienda tu súplica
en todo momento al igual que el profeta Elías.
Que tu intercesión delante de Dios sea un baluarte para aquellos por quienes
supliques.

Contacto: rubendaviddelprado@hotmail.com
Que tu economía mejore y prospere, que queden canceladas todas tus deudas,
que tengas suficiente dinero para suplir tus necesidades y además te quede para
ayudar a los demás, que seas generoso en tus ofrendas y espléndido en tus
regalos. Que tengas para prestar y ayudar, que tengas para invertir y emprender,
que todo lo que emprendas resulte y sea de bendición para quienes te rodean.
Que tu economía sea testimonio y confirme la verdad de la Palabra de Dios que
dice: “mi Dios suplirá todo lo que falte de acuerdo a sus riquezas en gloria en
Cristo Jesús”

Que tu cuerpo sea fuerte y sano, que seas cubierto con una coraza de salud y
protección divina, que la enfermedad se aleje de tu casa, que la salud llegue a tu
familia. Que todo tu cuerpo y el de tus seres queridos queden sellados con la
Palabra profética que dice: “por sus llagas hemos sido sanados”.

Que mantengas la pureza en tu corazón, en tus pensamientos y en tu cuerpo. Que

todo tu cuerpo sea una ofrenda agradable a Dios, que de ti emane la santidad de
Dios. Que a donde vayas, pases o toques, quede impregnado de la presencia del
Señor como un perfume de olor grato, y que esta Presencia te acompañe cada día
de este año, en cada lugar donde te encuentres y en cada labor que realices y que
todo lo que hagas y digas traiga gloria y honor al Dios del cielo que te creó, que
te cuida y que te redimió con su sangre.
Que camines con la seguridad de las palabras de Jesús que dijo: “Yo estaré con
ustedes todos los días hasta el fin del mundo”.

Que este año, seas instrumento para que muchas personas vengan al
conocimiento y al amor de Jesús. Que crezcas en el servicio a Dios y recibas una
doble porción del Espíritu santo para que puedas llevar a cabo la misión que Dios
te tenga encomendada.

Y que todas estas bendiciones desciendan sobre ti como el rocío fresco de la

mañana, te empapen, te llenen, te inunden, en el poderoso nombre de Jesús el
Hijo de Dios, por la obra y gracia del Espíritu Santo y dentro de la voluntad del
Padre, fuente de toda bendición.
Selladas queden estas bendiciones en tu vida por la sangre de Jesús el Cordero de
Dios, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.

Contacto: rubendaviddelprado@hotmail.com