DIRECCIÓN GENERAL

DE LA POLICÍA Y
DE LA GUARDIA CIVIL
MINISTERIO CUERPO NACIONAL DE POLICÍA
DEL INTERIOR DIRECCIÓN ADJUNTA OPERATIVA

INSTRUCCIÓN, DE 7 DE MAYO DE 2008, DE LA DIRECCION ADJUNTA OPERATIVA, POR LA

QUE SE IMPARTEN NORMAS DE ACTUACIÓN PARA EL CUMPLIMIENTO DEL DEBER LEGAL DE
COMUNICACIÓN DEL FALLECIMIENTO DE UNA PERSONA A LOS FAMILIARES.

I. ANTECEDENTES

Aunque se trata de hechos aislados, se vienen produciendo supuestos en los que el

cadáver de una persona, una vez identificado por la Policía, permanece un largo periodo de
tiempo, a veces varios meses, en depósitos de Institutos Anatómicos Forenses, de Hospitales,
etc. sin que la circunstancia del fallecimiento se haya puesto en conocimiento de los familiares,
lo que ha propiciado la presentación de las correspondientes quejas ante el Defensor del
Pueblo, por mal funcionamiento de los Servicios públicos policiales.

II. NORMATIVA REGULADORA DE LA ACTUACIÓN POLICIAL

En la Orden General n.º 1.515, de 17 de enero de 2005, se insertaba a requerimiento

del Defensor del Pueblo, un RECORDATORIO del “deber legal de la Policía, para que cuando
aparezca una persona fallecida en circunstancias tales que conduzcan al juez de instrucción a
la apertura de diligencias previas, extreme la diligencia necesaria para comunicar a los
familiares la circunstancia del fallecimiento, o bien traslade al juez de instrucción todos los
datos de que disponga para facilitar este propósito, a fin de que los familiares, si lo desean,
puedan ejercitar las acciones que el ordenamiento les confiere, en particular en los artículos
109 en relación con el 789.4 y 281 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que tienen como
presupuesto necesario que la notitia mortis llegue a su conocimiento”.

Asimismo, en la Orden General n.º 1569, de 9 de enero de 2006, de nuevo a

requerimiento del Defensor del Pueblo, se volvió a insertar el mismo RECORDATORIO con el
añadido de que “debe ser la Policía quien, en cualquier caso, y sin importar que otro organismo
pueda llevar a cabo la misma labor, informe a los familiares del fallecimiento de una persona”.

El anterior añadido estaba motivado por el hecho de que el Juez, en algunos supuestos,
decide el archivo de las actuaciones al no considerar los hechos constitutivos de delito y, por
lo tanto, no se comunica la circunstancia del fallecimiento a los familiares, al no proceder el
ofrecimiento de acciones que recoge el artículo 109 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

CORREO ELECTRÓNICO C/ Miguel Ángel, Nº 5

28071- MADRID
stoperl@dgp.mir.es TEL.: 91 322 3226/27/29
FAX: 91 308 2456
 III. REQUERIMIENTO DEL COMITÉ TÉCNICO DE UNIDADES DE POLICÍA
JUDICIAL

El asunto ha sido abordado, recientemente, por el Comité Técnico de la Comisión

Nacional de Coordinación de la Policía Judicial, que constató algunas deficiencias surgidas a
causa de la descoordinación de los distintos órganos y Administraciones intervinientes, dando
lugar a retrasos en las comunicaciones a los familiares afectados que no deben volver a
producirse.

El referido Comité acordó que la comunicación a los familiares (de la circunstancia

de la muerte de la persona) es un deber inexcusable que deberá hacerse por el primer
Cuerpo policial que intervenga en el hecho sucedido, debiendo plasmarse esta
circunstancia en la Diligencia correspondiente del Atestado “independientemente de que
otros organismos puedan llevar a cabo la misma labor”.

Asimismo, por el citado Comité se insta a esta Dirección Adjunta, a que se vuelva a
recordar a todas las Unidades y funcionarios dependientes, la importancia que tiene la
comunicación de los fallecimientos a los familiares cuando se haya confirmado la identidad
de los mismos, no sólo por simples motivos humanitarios, sino por el deber legal de
realizarla.

IV. PAUTAS DE ACTUACIÓN DE LAS UNIDADES AFECTADAS

En base a lo expuesto en los apartados anteriores, y dando cumplimiento a lo acordado

por el Comité Técnico de Unidades de Policía Judicial, se dispone lo siguiente:

PRIMERO.- Se recuerda que constituye un deber legal inexcusable de la Policía la

comunicación a los familiares de la circunstancia de la muerte de la persona, una vez
identificada, independientemente de que otros organismos puedan llevar a cabo la misma labor.

SEGUNDO.- Deberá plasmarse en una Diligencia específica en el atestado, que se ha

llevado a cabo la referida comunicación a los familiares del fallecido, especificando los datos
de éstos, domicilio, número de teléfono, etc.

TERCERO.- Como norma general, serán el Jefe de Turno de las Oficinas de Denuncias
y Atención al Ciudadano o el responsable de la investigación de la Brigada o Grupo Operativo
al que corresponda conocer del asunto, los que, previa la realización de las gestiones que
procedan, y una vez identificado el cadáver, deberán comunicar a sus familiares tal
circunstancia, sin perjuicio de la comunicación que deba efectuarse, en los casos de ciudadanos
extranjeros, a su respectiva Embajada o Consulado.
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 CUARTO.- A través del cauce reglamentario, por las Plantillas afectadas, se informará
a la Comisaría General de Policía Judicial (salvo que, por razón competencial, el asunto
corresponda a la Comisaría General de Extranjería y Documentación que, en este supuesto, se
dará cuenta a ésta) de aquellos supuestos en los que no haya sido posible localizar a los
familiares de la persona fallecida, disponiendo, si procede, la referida Comisaría General de
Policía Judicial, (o la de Extranjería y Documentación), la práctica de nuevas gestiones
encaminadas a dicho fin, por la Unidad territorial afectada o que éstas se continúen por la
Unidad central competente.

Lo que se comunica para conocimiento, difusión entre las Plantillas, Unidades y

funcionarios bajo su dependencia afectados, y adecuado cumplimiento.

El Director Adjunto Operativo

Miguel Ángel Fernández-Chico Díaz

SRES. COMISARIOS GENERALES, JEFES SUPERIORES DE POLICÍA Y COMISARIOS

PROVINCIALES

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