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Componentes Metalicos
Componentes Metalicos
Los metales pesados, y en general los elementos traza, están presentes en relativamente bajas concentraciones (<mg·Kg-1) en la corteza
terrestre, los suelos y las plantas. La presencia de concentraciones nocivas (anomalías) en los suelos es una degradación especial denomi-
nada contaminación. Los elementos traza en los suelos pueden ser de origen geogénico o antropogénico. Los elementos de origen geogéni-
co proceden de la roca madre, de actividad volcánica, o de la lixivación de mineralizaciones. Los metales pesados antropogénicos derivan de
residuos peligrosos, procedentes de actividades industriales, minería e industria agrícola, y residuos sólidos urbanos (RSU). Legalmente, se
entiende por contaminación la producida por estos contaminantes. La contaminación del suelo es hoy en día una de los temas ambientales
más importantes para la Sociedad y la Administración. La caracterización, evaluación y remediación de un suelo contaminado es uno de los
principales retos ambientales por abordar en los próximos años. La peligrosidad de los contaminantes en los suelos viene dada no sólo por
su concentración total, sino especialmente por su disponibilidad. La movilidad de los elementos traza depende de su especiación, y también
está afectada por diversos parámetros geoedáficos. En los últimos años se han obtenido diferentes aproximaciones a la especiación de ele-
mentos traza usando métodos directos e indirectos. La biodisponibilidad de los metales desde los suelos a las plantas y otros organismos
y el riesgo para la salud siguen siendo cuestiones por resolver. Esta conferencia desea contribuir al enfoque de estos problemas y mostrar
los avances alcanzados hasta ahora.
Heavy metals, and in general trace elements, are present in relatively low concentrations (<mg.kg-1) in the Earth’s crust, soils and plants. The
presence of harmful concentrations (anomalies) in the soils is a particular degradation named as contamination. Trace elements in the soils
can be of geogenic or anthropogenic origin. The first ones come from the bedrock, volcanic activity, or mineralization leaching. Whereas the
anthropogenic heavy metals are derived from hazardous wastes, including industrial activities, mining and agricultural industries, and munici-
pal solid wastes, (MSW). Legally, contamination is that produced by these pollutants. Soil contamination is today one of the most important
environmental issues for both the Society and the Administration. The characterization, evaluation and remediation of a polluted soil is one
of the present environmental challenges to be addressed in the next years. The hazard of the pollutants in the soils not only depends on their
total concentration, but particularly on their availability. The mobility of the trace elements depends on their speciation, and it is also affec-
ted by several soil parameters. Different approaches to the trace elements speciation using indirect and direct methods have been obtained
in the last years. The bioavailability of metals from the soils to the plants and other organisms and the risk for the health continue to be non-
resolved questions. This lecture wishes to contribute to focus these problems and to show the advances achieved until now.
fig 1. Tabla periódica de elementos en la biosfera. Selinus et al., (2005). Elementos mayoritarios elementos minoritarios elementos traza elementos traza esenciales gases nobles los
que están en rojo se consideran elementos tóxicos.
palabras clave: contaminación de suelos, metales pesados, elemen- key words: soil contamination, heavy metals, trace elements, mobility,
tos traza, movilidad, especiación. speciation
Conferencia invitada: Galán y Romero, Macla 10 (2008) 48-60 *corresponding author: egalan@us.es
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función biológica. Los materiales o com- Metales pesados que son arsénico, berilio, cadmio, cromo, cobre,
puestos tóxicos no tienen origen biológico, micronutrientes esenciales As, Co, Cr, Cu, Fe, Mn, mercurio, níquel, plata, plomo, selenio,
(unos pocos mg o µg/día) Mo, Se, V, Zn
excepto el caso particular de las toxinas talio y zinc, introduciendo al berilio, res-
Otros micronutrientes
que son compuestos tóxicos biogénicos. esenciales F, I, Si pecto a las listas anteriores de los más
tóxicos y disponibles.
Los contaminantes pueden abandonar Macronutrientes
(100 mg o más por día) Ca, Cl, Mg, P, K, Na, S
un suelo por volatilización, disolución, PODER DEPURADOR DE LOS SUELOS
lixiviado o erosión, y pasar a los organis- Metales pesados no Be, Cd, Hg, (Ni), Pb, Sb,
mos cuando pueden ser asimilables esenciales* (Sn), Ti El suelo actúa en general como una
(bioasimilables), lo que normalmente *Los metales en paréntesis pueden ser esenciales. barrera protectora de otros medios más
tabla 1. Micronutrientes y macronutrientes para el óptimo
ocurre cuando se encuentran en forma funcionamiento de los organisos vivos (recopilado de distin- sensibles (hidrológicos y biológicos), fil-
más o menos soluble. En concreto, la tas fuentes por Siegel, 2002) trando, descomponiendo, neutralizando
posibilidad de que un elemento (contami- tos traza son tóxicos si se ingieren o o almacenando contaminantes y evitan-
nante o no) quede libre y pase a disolu- inhalan en cantidades suficientemente do en gran parte su biodisponibilidad.
ción en un suelo se llama disponibilidad. altas y durante largos períodos de tiem- Esta capacidad depuradora de un suelo
La biodisponibilidad sería el grado de po. Selenio, flúor y molibdeno son ejem- depende de los contenidos en materia
libertad en que se encuentra un elemen- plos de elementos que presentan un orgánica, carbonatos y oxihidróxidos de
to o compuesto de una fuente potencial estrecho margen (del orden de unas hierro y manganeso, de la proporción y
para ser capturado por un organismo pocas ppm) entre los niveles de deficien- tipo de minerales de la arcilla, de la
(ingerido o adsorbido) (Newman & Jagoe, cia y los tóxicos (Plant et al., 2001). capacidad de cambio catiónico del suelo,
1994). Normalmente sólo una fracción del pH y Eh, textura, permeabilidad y acti-
pequeña de una sustancia potencialmen- Los elementos traza más abundantes vidad microbiana. Por tanto, para cada
te contaminante de un medio es biodis- en los suelos pueden clasificarse en situación, el poder depurador de un
ponible. Su efecto suele ser negativo, cinco categorías, de acuerdo con la suelo tiene un límite. Cuando se superan
pero también puede ser indiferente para forma química en que se encuentran esos límites para una o varias sustan-
un organismo específico. en las soluciones del suelo: cationes cias, el suelo funciona como contamina-
(Ag+, Cd+2, Co+2, Cr+3, Cu+2, Hg+2, do y es fuente de contaminantes.
La biodisponibilidad de un elemento es Ni+2, Pb+2, Zn+2), metales nativos
función de: a) la forma química y física en (Hg, V), oxianiones (AsO4-3, CrO4-2, El poder amortiguador de un suelo repre-
la que se encuentra en el medio; y b) la MnO4-2, HSeO3-, SeO4-2,), halogenu- senta la capacidad que tiene para con-
capacidad de los organismos para absor- ros (F-, Cl-, Br-, I-), y organocomplejos trolar los efectos negativos de los conta-
berlo o ingerirlo. Estos elementos pueden (Ag, As, Hg, Se, Te, Tl). Estas catego- minantes y volverlos inocuos o inactivos.
ser acumulados en el organismo (bioacu- rías no se excluyen mutuamente, por- Para los suelos agrícolas se ha definido
mulación) hasta tres, cuatro o cinco órde- que algunos elementos pueden apare- la denominada “Capacidad de Carga
nes de magnitud mayores que la concen- cer con más de una forma. para Metales Pesados” (LCASHM: Load
tración del medio donde vive. Normalmente, Cr, Ni, Pb, y Zn varían Capacity of Agricultural Soils for Heavy
entre 1 - 1500 mg kg-1, Co, Cu y As Metals) (Cheng et al. 2001), que depen-
METALES PESADOS Y ELEMENTOS entre 0.1 y 250 mg kg-1,y con meno- de de las propiedades del suelo, el tipo
TRAZA res proporciones Cd y Hg (0.01 - 2 mg e historia de la contaminación, organis-
kg-1) (Bowen, 1979, y Tabla 2). mos indicadores de la toxicidad, y otros
La tabla periódica (Figura 1) incluye parámetros ambientales.
Elemento Rango normal Concentraciones
unos 70 elementos metálicos, y de (ppm) anómalas (ppm)
ellos 59 pueden ser considerados Los efectos amortiguadores de los sue-
“metales pesados”, que son aquellos As <5-40 Hasta 2500 los se llevan a cabo por neutralización,
con peso atómico mayor que el del hie- Cd <1-2 Hasta 30 degradación biótica o abiótica, precipita-
rro (55,85 g/mol). Con esta precisión Cu feb-60 Hasta 2000 ción-disolución, oxidación-reducción, for-
Mo <1-5 10-100
se excluirían metales con pesos atómi- Ni 2-100 Hasta 8000
mación de complejos orgánicos o insolu-
cos menores que el del Fe y que con fre- Pb 10-150 10000 o más bilización. La cantidad máxima admisible
cuencia pueden ser metales contami- Se <1-2 hasta 500 de un contaminante, a partir de la que el
nantes, como el V (50,95), Mn (54,44), Zn 25-200 10000 o más contaminante está biodisponible en can-
Cr (52,01) y a otros que realmente no tidades que pueden ser tóxicas, se llama
tabla 2. Concentraciones geoquímicas normales y anómalas
son metales como As, F y P. Por ello, de algunos elementos traza en suelos (Bowie & Thornton, carga crítica y marca el umbral de toxici-
resulta mejor hablar de contaminación 1985). dad. La LCASHM puede tener valores
por “elementos traza”, si bien hay que De todos los elementos traza encontra- como: Cd: 23-87 g/ha/a, Pb: 6750-
reconocer que la mayoría de los conta- dos en suelos, hay 17 que se conside- 10125 g/ha/a, o As: 450-675 g/ha/a.
minantes inorgánicos son “metales ran como muy tóxicos y a la vez fácil-
pesados”. A veces, la contaminación mente disponibles en muchos suelos EL ORIGEN DE LOS ELEMENTOS
del suelo se puede producir también en concentraciones que sobrepasan los TRAZA EN LOS SUELOS.
por altas concentraciones de elemen- niveles de toxicidad. Éstos son: Ag, As,
tos mayoritarios (Na, Fe, Al). Bi, Cd, Co, Cu, Hg, Ni, Pb, Pd, Pt, Sb, Los elementos traza en los suelos pue-
Se, Sn, Te, Tl y Zn. De ellos, diez son den ser geogénicos o antropogénicos.
Los elementos traza están presentes en fácilmente movilizados por la actividad Los primeros dependen en gran medida
relativamente bajas concentraciones humana en proporciones que exceden de lo que se ha llamado geodisponibili-
(mg.kg-1) en la corteza de la Tierra, sue- en gran medida la de los procesos geo- dad. La geodisponibilidad de un ele-
los y plantas. Muchos de ellos son esen- lógicos. Éste es el caso de: Ag, As, Cd, mento o compuesto químico de un
ciales para el crecimiento y desarrollo de Cu, Hg, Ni, Pb, Sb, Sn y Tl (Novotny, material terrestre es aquella porción de
plantas, animales y seres humanos 1995). La EPA (US Environmental su contenido total que puede liberarse
(Tabla 1, Figura 1), aunque también pue- Protection Agency) incluye en la lista de a la superficie o cerca de la superficie
den ser tóxicos si se superan ciertos contaminantes prioritarios los siguien- (o biosfera) por procesos mecánicos,
umbrales. En general todos los elemen- tes trece elementos traza: antimonio, químicos, o biológicos (Plumlee, 1994).
Por tanto, los metales pesados geo- general las áreas altamente indus-
disponibles son los que pasan de la trializadas incluyen As, Cd, Cr, Hg,
roca madre a los suelos tras ser libe- Fe, Ni, Pb y Zn.
rados por meteorización, y constitu- • Residuos domésticos: aproximada-
yen, junto a otros procedentes de emi- mente el 10% de la basura está
siones volcánicas y lixiviados de mine- compuesta por metales. Su ente-
ralizaciones, los denominados como rramiento puede contaminar las
geogénicos. La liberación de los ele- aguas subterráneas, mientras que
mentos depende de la estructura y la incineración puede contaminar
estabilidad termodinámica de los fig 3. El papel fundamental de los microorganismos en la
la atmósfera al liberar metales
minerales de la roca. Las estructuras transformación y degradación de los minerales volátiles y como consecuencia con-
altamente polimerizadas son más en el suelo y en el proceso natural de la taminar los suelos. Por otra par te,
estables y resistentes a la destruc- edafización de una roca se concentran, las basuras no controladas obvia-
ción. El orden de estabilidad de acuer- pero en general sin rebasar los umbra- mente son una impor tante fuente
do con el tipo de enlace atómico es: les de toxicidad, y aunque así fuera, de contaminantes para el suelo y
Si-O>Al-O>X-O. Por ello los silicatos estos metales se encuentran en formas las aguas super ficiales.
son en general estructuras más esta- estables y por tanto poco disponibles.
bles, aunque también entre ellos hay De los distintos tipos de rocas, las LA CONTAMINACIÓN DE SUELOS POR
grandes variaciones (Tabla 3). ultrabásicas, como las peridotitas, pre- ELEMENTOS TRAZA
Mineral Vida media Mineral Vida media sentan altos contenidos en metales
(años) (años) pesados (Cr, Ni, Cu y Mn). Las menores Formas de presentación de los contami-
Cuarzo 34.000.000 Sanidina 291.000 concentraciones de metales pesados nantes en el suelo y su disponibilidad
Caolinita 6.000.000 Enstatita 10.100
se encuentran en las rocas ígneas áci- relativa
Moscovita 2.700.000 Diópsido 6.800
Epidota 923.000 Forsterita 2.300 das y en las sedimentarias (areniscas y
Microclina 921.000 Wollastonita 79 calizas). Los porcentajes más altos de Los contaminantes en suelos y sedi-
Albita 575.000 Calcita 0,43 metales traza en los suelos, heredados mentos se pueden hallar en seis for-
de la roca madre, se dan para Cr, Mn y mas diferentes (Rulkens et al., 1995):
tabla 3. Vida media de un cristal de 1mm de varios minera-
les en solución acuosa a 25ºC y pH 5 (Lasaga & Berner, Ni, mientras que Co, Cu, Zn y Pb se pre- como partículas (contaminantes parti-
1998) culados), como películas líquidas,
sentan en menores cantidades y son
Estudios recientes sobre la disolución de mínimos los contenidos en As, Cd y Hg. adsorbidos, absorbidos, disueltos en el
silicatos han demostrado que tanto mine- Las principales concentraciones anóma- agua intersticial de los poros, o como
rales como vidrios aumentan su veloci- las de metales pesados en suelos provie- fases sólidas en los poros (Figura 4).
dad de disolución con la disminución del nen fundamentalmente de las menas
contenido en sílice y que los vidrios se metálicas (sulfuros, óxidos). La explota- Partículas contaminantes
disuelven más rápidamente que minera- ción y extracción de metales produce
les con la misma relación Al/Si. Por ejem- anualmente millones de toneladas de
plo, un vidrio de composición basáltica se residuos, la mayoría con pirita y otros sul- Películas líquidas
disuelve hasta diez veces más rápido que furos, cuya oxidación libera grandes can-
un vidrio de composición riolítica (Wolf- tidades de metales pesados al ambiente,
Boenisch et al. 2004). y en particular a los suelos. En estas Contaminante adsorbido
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dad cuando la contaminación es antró- d) Materia orgánica. Reacciona con los g) Carbonatos. La presencia de carbo-
pica. Esto sucede precisamente porque metales formando complejos de cambio natos garantiza el mantenimiento de los
la disponibilidad de un elemento depen- o quelatos. La adsorción puede ser tan altos pH, y en estas condiciones tien-
de también de las características del fuerte que queden estabilizados, como den a precipitar los metales pesados.
suelo en donde se encuentra. Los pará- el caso del Cu, o formen quelatos tam- El Cd y otros metales tienden a quedar
metros geoedáficos llegan a ser esen- bién muy estables, como puede pasar adsorbidos por los carbonatos.
ciales para valorar la sensibilidad de los con el Pb y Zn. En muchos casos se for- h) Óxidos e hidróxidos de Fe y Mn.
suelos a la agresión de los contaminan- man complejos organometálicos lo que Juegan un importante papel en la reten-
tes; en concreto: facilita la solubilidad del metal, la dispo- ción de metales pesados y en su inmo-
a) pH. La mayoría de los metales tien- nibilidad y dispersión porque pueden vilización. Se encuentran finamente
den a estar más disponibles a pH ácido degradarse por los organismos del diseminados en la masa de suelo por lo
porque son menos fuertemente adsor- suelo. Esto conduce a una persistencia que son muy activos. Por su baja crista-
linidad y pequeño tamaño de partícula, orgánica o a oxi-hidróxidos de hierro, o incluso se describen otros nuevos para
tienen una alta capacidad sorcitiva para especiación operacional. La fracción asi- casos particulares con el fin de mejorar la
metales divalentes, especialmente Cu y milable por las plantas de un determina- precisión para fases y elementos concre-
Pb, y en menor extensión Zn, Co, Cr, do elemento de un suelo depende de su tos. Hall et al. (1996) recogió y comparó
Mo, Ni y también As. especiación química y funcional, o sea, los esquemas metodológicos más fre-
i) Salinidad. El aumento de la salinidad de su distribución entre sus formas quí- cuentes usados hasta entonces para sue-
puede incrementar la movilización de micas y especies, pero a esto no condu- los y sedimentos. En esencia, el procedi-
metales y su retención por dos meca- ce exactamente una extracción secuen- miento básico consiste en obtener varias
nismos. Primeramente, los cationes Na cial, que es sólo un procedimiento opera- fracciones utilizando extractantes diferen-
y K pueden reemplazar a metales pesa- tivo con bastantes limitaciones, como se tes de forma sucesiva. La finalidad de
dos en lugares de intercambio catióni- verá a continuación. estas extracciones es siempre determinar,
co. En una segunda fase, los aniones con la mayor precisión posible, la distribu-
cloruro y sulfato pueden formar com- La especiación operacional, o simple- ción de los elementos traza existentes en
puestos más estables con metales mente especiación, es la que con mayor una muestra sólida entre fracciones de
tales como Pb, Zn, Cu, Cd y Hg. Por otra frecuencia se aplica a los suelos, porque distinta naturaleza. A esta distribución es
parte, las sales normalmente dan pH desde un punto de vista analítico es más a lo que se denomina normalmente espe-
alcalino. sencilla y se puede realizar con técnicas ciación (partitioning). Una revisión crítica
instrumentales que están al alcance de de lo que puede ser este tipo de especia-
Procedimientos para valorar la conta- cualquier laboratorio. Para una buena ción y de los protocolos utilizados se
minación de un suelo especiación se debe de disponer de puede encontrar en el trabajo de López
métodos que determinen la concentra- Julián & Mandado (2002).
La peligrosidad (movilidad, disponibili- ción total, y selectivamente, la concen-
dad) de un contaminante se determina tración de las diferentes especies quími- Uno de los protocolos más populares
por distintos procedimientos químicos y cas. La selectividad de los métodos es el de Tessier et al. (1979), que ha
mineralógicos. Para verificar si un ele- depende en gran parte de la rapidez de sufrido muchas modificaciones (Ure et
mento o compuesto está en una fase las reacciones que tienen lugar en la for- al. 1993; Quevauvillier et al. 1994;
soluble en agua, que es cuando con mación o disociación de las especies Gómez Ariza et al.2000; Galán et al,
mayor facilidad podrá transferirse a una que se miden. Sin entrar en detalles ana- 2000). El esquema simplificado de este
planta u organismo vivo, la primera líticos, que escapan de esta presenta- protocolo puede ser el siguiente: la frac-
valoración de la movilidad se debe ción, se puede indicar que las aproxima- ción 1 es la tratada con acetato amóni-
hacer determinando qué fracción del ciones clásicas, que consisten en aislar co, la fracción 2 es la obtenida en un
mismo se encuentra soluble en agua y estudiar cada uno de los constituyen- medio reductor con clorhidrato de hidro-
(extracción con agua). A veces también tes separadamente, tienen dos limitacio- xilamina y ácido acético, la fracción 3
puede hacerse esta extracción en agua nes: a) la separación completa es muy es obtenida con ácido nítrico y agua oxi-
ligeramente ácida. difícil, si no imposible, b) las propieda- genada y la fracción 4 es insoluble
des de un componente de una mezcla (Tabla 7).
Otra medida de la posible transferencia compleja no son aditivas, debido a las
de metales (especialmente de cationes múltiples interacciones que normalmen- F1 corresponde a los metales del com-
divalentes) a una planta viene dada por te existen entre ellos. plejo de cambio y a los que están for-
la extracción que se obtiene tratando el mando, o adsorbidos en, carbonatos.
suelo con DTPA, o con EDTA (0,05M a Las extracciones secuenciales, si bien Este paso se puede subdividir en dos,
pH 7,0) (Quevauviller et at. 1998). no conducen a una especiación química un tratamiento con MgCl2 1M, durante
Existe un cierto acuerdo de que esta completa, si pueden tener un carácter 1 h, para extraer los cationes de cam-
medida se aproxima bastante a la can- práctico, de mayor interés en términos bio (cationes que pueden ser reempla-
tidad que en general las plantas pueden del comportamiento de un elemento zados por otros más competitivos, inde-
absorber de un suelo en condiciones como contaminante, porque se pueden pendientemente de que sean de mine-
normales (Ure et al. 1995). relacionar los contenidos (que no son rales de la arcilla, materia amorfa, etc.)
siempre totales) asociados a distintos y un segundo tratamiento con
Junto a estos métodos simples, que sólo componentes del suelo con su movilidad CH3COONa a pH 5 con ácido acético,
distinguen entre metal residual y metal y facilidad para ser transferido a los orga- durante 5 h, para hacer el ataque de los
liberado en agua o en un extractante nismos. En resumen, una extracción carbonatos. En F2 se concentran los
orgánico suave, hay procedimientos más secuencial puede valorar de forma apro- metales asociados a los compuestos
elaborados de extracciones química ximada la distribución de los elementos reducibles (óxidos de Mn y oxihidróxi-
secuenciales, que pueden conducir a la trazas respecto a las distintas fases de dos de Fe, y a veces de Al, amorfos o
llamada “especiación” de los distintos un suelo y su movilidad relativa. pobremente cristalinos). Dependiendo
elementos de un suelo. Éste es uno de del grado de ordenación del material
los tipos de especiación: la especiación Los procedimientos de extracciones pueden existir varias formas de asocia-
operacional. Pero hay otros dos tipos de secuenciales aparecen en la literatura ción con los metales pesados: metales
especiación: la especiación química, que desde al menos los años sesenta, y son intercambiables y solutos en las inter-
distingue el grado de oxidación del ele- constantemente revisados y modificados, caras debido al acomplejamiento en la
mento, y la especiación funcional, que Fracción Procedimiento
determina la forma molecular en la que
se encuentra el elemento. Así una espe- Ácida (F1) NH4Ac 1M (35 ml), pH 5, 1h, 20ºC, agitación contínua (volteador 40 rpm)
ciación de As puede conducir a conocer Reductora (F2) NH2OH.HCl 0,4M en ácido acético al 25% (20 ml), 6h, 96ºC,
su grado de oxidación, As+3 o As+5, espe- agitación manual cada 30 min.
Oxidante (F3) HNO3 0,2M (3 ml) + H2O2 30% (5 ml), pH 2 con HNO3, 2h, 85ºC,
ciación química, a conocer su forma agitación manual cada 30 min.; añadir H2O2 30% (3ml),pH 2 con HNO3, 3h,
molecular, arseniato, sulfoarseniuro, etc. 85ºC, NH4OAc 3,2 M (5ml) v/v en HNO3 diluida en 20 ml con H2O2, 30 min.,
o cómo está coordinado con otros áto- 20ºC, agitación contínua (volteador 40 rpm)
mos, especiación funcional, y por último, Residuo (F4) HF/HNO3/HCl 10/3/2,5 (20 ml), 2h a sequedad
si está soluble, asociado a la materia tabla 7. Esquema de extracción secuencial para la evaluación de la distribución de metales en sedimentos (0,5 g de
muestra) (Galán et al. 2000)
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LA DECLARACIÓN DE UN SUELO
COMO CONTAMINADO
Otra posibilidad para comparar la abun- minación serán diferentes en función colas (Tabla 10; Aguilar et al., 1999):
dancia relativa de los elementos traza del uso. Es evidente que el tipo de utili-
en suelos es normalizarla con un ele- zación del suelo encierra distintos gra- Nivel de referencia
mento universalmente encontrado y dos de peligrosidad y de los posibles Representa el máximo valor admisible
considerado como estable en la mayor elementos tóxicos presentes. La situa- para los suelos no contaminados.
parte de los ambientes geoquímicas. ción puede ser crítica para jardines y Normalmente se calcula por el percentil
Tal es el caso del Al. Una comparación áreas residenciales y mínima para del 90% de los valores correspondien-
con el Al ha mostrado que algunos ele- áreas industriales. tes a los suelos naturales no contami-
mentos como Cd, Pb y As aparecen nor- nados. Indica que el 90% de los suelos
malmente concentrados en el suelo. Aun teniendo claro estas cuestiones y presentan valores inferiores a él. Para
estando de acuerdo internacionalmente este umbral se debe conocer el pH del
Como puede verse, los suelos presen- en los parámetros que se deben consi- suelo y el contenido total de As, Cd, Co,
tan ya anomalías, en general positivas, derar para el establecimiento de los Cr, Cu, Hg, Mo, Ni, Pb, Se, Sn, Tl y Zn.
respecto a la roca madre, excepto en niveles de referencia, cada país, e inclu-
áreas muy concretas y/o para ciertos so a veces cada región, estado o comu- Nivel de investigación
elementos. Los valores de referencia nidad propone concentraciones máxi- En este nivel, los suelos se encuentran
regionales se pueden calcular para una mas diferentes (MAC, maximun accep- presuntamente contaminados y se pro-
zona más o menos homogénea por el table concentration) (Tabla 9), porque pone una serie de determinaciones
percentil del 90% de los valores corres- los niveles máximos permisibles para para evaluar la posible toxicidad de la
pondientes a suelos naturales no conta- cada suelo difieren en función de condi- contaminación. Se establecen dos nive-
minados (o al menos presumiblemente ciones locales, uso, historia de la les de peligrosidad.
no contaminados e influenciados por el región, tipo de suelo, clima y, cómo no,
uso). Esto indica que el 90% de los sue- de los autores que hacen los cálculos e a) Nivel de investigación recomendable
los presenta valores para este elemen- introducen los distintos factores en la Es el nivel de alerta a partir del cual se
to inferiores a él. formulación. sospecha que puede existir una conta-
minación peligrosa. A este nivel se
Se consideran como umbrales de conta- En España aún no se ha establecido recomienda realizar una serie de deter-
minación, los umbrales mínimos que una normativa para declarar un suelo minaciones para precisar la posible
pueden representar contaminación o, al como contaminado por metales pesa- toxicidad de la contaminación (además
contrario, los valores máximos permiti- dos. El Real Decreto 9/2005 de 14 de de las determinaciones reguladas en el
dos para suelos no contaminados. De enero (BOE 18 de Enero 2005) por el nivel anterior):
cualquier manera, estos niveles han de que se indica la relación de actividades • Parámetros del suelo: textura, conte-
ser contrastados con estudios toxicoló- potencialmente contaminantes del nidos en materia orgánica, carbona-
gicos que demuestren que esos valores suelo y los criterios y estándares para tos, oxihidróxidos de Fe libre y mine-
no son peligrosos. Tampoco quiere la declaración de suelo contaminado, ralogía de arcillas.
decir, en principio, que los suelos cuyos establece los limites para compuestos • Elementos traza: se recomienda
valores superen esos umbrales deban orgánicos, y deja a las Comunidades determinar el contenido de metales
ser considerados contaminados, aun- Autónomas que fijen los niveles y crite- solubles en agua y extraíbles por
que haya un exceso de elementos traza rios en relación con los elementos EDTA.
por encima de la media regional. traza, teniendo en cuenta que para
estos elementos la naturaleza de la b) Nivel de investigación obligatoria
La toxicidad de un elemento depende roca madre tiene una influencia funda- Se supone que a partir de este umbral el
de su actividad biológica, es además mental. Existen actualmente normati- suelo se encuentra contaminado y se
particular para cada especie e individuo vas en las Comunidades de Madrid (de establece la obligatoriedad de investigar
y finalmente depende de la forma en Miguel et al., 2002), País Vaco (IHOBE, adecuadamente esta contaminación.
que se suministre (vía respiratoria, 1993), Aragón (Navas y Machín, 2002),
ingestión, contacto), por lo que sólo el Cataluña y Galicia. Se han de realizar con carácter obliga-
estudio toxicológico podrá decidir la torio todas las determinaciones referi-
cantidad total biodisponible admisible Para la Comunidad Andaluza se propu- das en el umbral anterior y además se
de un elemento traza. Como la mayor sieron, con anterioridad al RD 9/2005, recomienda la extracción secuencial
peligrosidad está casi siempre relacio- los siguientes niveles para suelos agrí- propuesta por Tessier et al. (1979).
nada con su ingestión como elemento Metal Austria Canadá Polonia Japón Gran Bretañaa Alemaniab
disponible en solución, los valores lími-
te, umbrales máximos permitidos, se As 50 25 30 15 20 40 (50)
dan teniendo esto en cuenta.
Be 10 10 10 (20)
Cd 5 8 3 1 (3) 2 (5)
En términos generales se considera
Co 50 25 50 50
que las fracciones asimilables de un
suelo se pueden equiparar a la extraída Cr 100 75 100 50 200 (500)
con EDTA y oscilan sobre el 10% del Cu 100 100 100 150 50 (100) 50 (200)
total, aunque en función de los paráme- Hg 5 0,3 5 2 10 (50)
tros del suelo antes comentados esta Mo 10 2 10
cantidad puede variar hasta el 40% del Ni 100 100 100 100 30 (50) 100 (200)
total según nuestras experiencias. Pb 100 200 100 400 50 (100) 500 (1000)
Zn 300 400 300 250 150 (300) 300(600)
De esta manera, tenemos umbrales de
referencia y umbrales de contamina- a Valores propuestos para MAC en la UE en suelos tratados con lodos residuales. Valores entre paréntesis
ción. Los suelos con valores interme- son concentraciones máximas (Finnecy & Pearce, 1986
b Contenidos tolerables y tóxicos (entre paréntesis) (Kloke & Einkmann, 1991)
dios deben ser investigados y controla-
dos. Además, estos umbrales de conta- tabla 9. Propuesta de concentraciones máximas aceptables (MAC) de metales traza considerados como fitotóxicos en suelos agrícolas
(mg/kg) (Kabata-Pendias & Pendias, 1992)
Conferencia Invitada
macla. nº 10. noviembre´08
revista de la sociedad española de mineralogía 57
Suelos Agrícolas
1 21 22 3 PN AI
Elemento
<7 >7 <7 >7 <7 >7 <7 >7
As <20 20-30 30-50 >50 >100 >300
Cd <2 <3 2-3 3-5 3-7 5-10 >7 >10 >15 >30
Co <20 <50 20-50 50-150 50-100 150-300 >100 > 300 >300 >400
Cr <100 100-250 250-450 >450 >500 >1000
Cu <50 <100 50-150 100-300 150-300 300-500 >300 >500 >500 >1000
Hg <1 1-2 2-10 >10 >15 >30
Mo <10 10-40 40-200 >200 >200 >500
Ni <40 <50 40-80 50-100 80-200 100-300 >200 >300 >500 >750
Pb <100 <200 100-250 200-400 250-350 400-500 >350 >500 >1000 >2000
Se <2 2-5 5-10 >10 >20 >30
Sn <20 20-50 50-150 >150 >300 >500
Tl <1 1-3 3-5 >5 >10 >30
Zn <200 <300 200-300 300-500 300-600 500-1000 >600 >1000 >1000 >3000
(1) - Valores máximos permitidos; (21) - Investigación recomendable; (22) - Investigación obligatoria; (3)- Tratamiento necesario (obligatorio); (PN) = Valor de intervención para parques
naturales y zonas forestales.; (AI) = Valor de intervención para áreas industriales ; (<7) = pH 5-7; (>7) = pH
tabla 10. Tabla resumen de los umbrales de contaminación propuestos para elementos traza en la comunidad andaluza. (Los valores representan concentraciones totales y están expresados en mg/Kg)
(Aguilar et al., 1999).
Nivel de intervención tran en el momento de realizar la toma de valor de fondo geoquímico para la
Se admite que el suelo se encuentra muestra, y que están lógicamente influen- Comunidad Andaluza, representado por
contaminado a niveles peligrosos y es ciadas por la litología del subsuelo y afec- la mediana, y los percentiles 90 y 95
procedimiento urgente su regeneración. tadas por una cierta contaminación antró- como niveles guías para las anomalías
Para los suelos de los parques y zonas pica difusa (Salminen & Tarvainen, 1997; positivas que indicaban una investiga-
forestales y para las áreas industriales Baize & Sterckeman, 2001; Tarvainen & ción aconsejable u obligatoria, respecti-
se establece un solo umbral con valo- Kallio, 2002). Para obtener estos valores vamente. De forma gráfica se indicaron
res únicos, el nivel de intervención, sin se excluyen directamente las áreas en mapas de la Comunidad (escala
tener en cuenta el pH. expuestas a fuentes de contaminación. 1:400.000) los valores con distinta
coloración: en verde los que eran infe-
En cualquier caso estos valores dados También se pueden definir los niveles rior a la mediana, en amarillo los que
en la tabla no responden particularmen- de fondo regionales (regional geochemi- estaban entre la mediana y el percentil
te a la realidad de la Comunidad cal baseline), que son los niveles de 90, en naranja entre los percentiles 90
Autónoma Andaluza, que carecía hasta fondo geoquímico determinados para y 95, y en rojo los que sobrepasaban el
el año 2004 de una base geoquímica cada región y elemento, teniendo en percentil 95 (Figura 12).
de elementos traza para los suelos, que cuenta además los distintos contextos
pudiera ser utilizada para valorar las geológicos representados en esa Como cada dominio geotectónico pre-
anomalías encontradas, teniendo como región. A partir de estos valores se senta un contenido geoquímico más
referencia a sus propios valores. Es por puede deducir si los potenciales “conta- homogéneo, se ha utilizado para los
ello por lo que en el año 2004 se finali- minantes” son de origen natural o datos otro tratamiento estadístico más
zó una investigación sobre los fondos antropogénico. Se puede controlar tam- preciso (robusto). En concreto se ha
geoquímicos de los suelos de bién la posible carga de contaminante obtenido el denominado LMS (last
Andalucía. Esta investigación se llevó a admisible para un suelo de acuerdo con median square) que es el punto medio
cabo por las Universidades de Granada su contexto (geología, historia y uso), o centro del tramo donde se concentran
(Grupo Edafología y Ordenación del así como, dar niveles guías como refe- el 50% de las observaciones más próxi-
Territorio, Responsable Prof. José rencia para la administración. mas (shortest-half: mitad más corta)
Aguilar Ruiz); Huelva (Grupo Análisis (Rousseuw & Leroy, 1988). Este valor
Medioambiental, Responsable Prof. En el proyecto indicado se definieron es el que se tomó como fondo geoquí-
José Luis Gómez Ariza) y Sevilla (Grupo los niveles de fondo de los elementos mico regional. Como anomalías positi-
Mineralogía Aplicada, Responsable traza más frecuente en los suelos anda- vas se tomaron b (límite superior de la
Prof. Emilio Galán Huertos), mediante luces, considerando: a) toda la mitad más corta) y el percentil 90
Acuerdo Específico entre las tres Comunidad Autónoma y b) los dominios (Figuras 12 y 13). Con este sistema no
Universidades y la Consejería de Medio geotectónicos existentes en Andalucía. se establecen porcentajes fijos para la
Ambiente de la Junta de Andalucía. El El plan de trabajo consistió en un mues- población de datos incluidos en cada
Informe elaborado a partir de esta treo estratificado y aleatorio de 750 intervalo, excepto en el último.
investigación se puede consultar en la puntos, con un total de 1350 muestras
Mapa de Andalucía
página http://www.juntadeandalucia.es/ (niveles 0-20cm, 20-40 cm y roca
medioambiente/site/web/. madre), estando representados todos ≤Mediana Mediana - P 90 P 90 – P 95 > P 95
los suelos y todos los dominios geológi- 50% 40% 5% 5%
El fondo geoquímico natural (geochemical cos. Se excluyeron las áreas urbanas,
background) representa la concentración láminas de agua y lugares potencial- Mapas geológicos provinciales
≤LMS >LMS y ≤b > b y ≤P 90 > P 90
de un elemento químico en suelos no con- mente contaminados. De forma siste-
taminados. Como este valor es práctica- mática en la fracción <2mm de cada
Fig 12. Intervalos utilizados para representar los fondos
mente imposible de obtener, se utilizan los muestra se midió el pH y se determina- geoquímicos (baseline, color blanco) y anomalías en los
denominados niveles de fondo geoquímico ron los contenidos en As, Co, Cr, Cu, Ni, suelos de la Comunidad Andaluza.
(geochemical baseline), que representan Pb, Zn, Cd, Hg y Se. Los datos obteni-
una medida de las variaciones geoquími- dos se trataron estadísticamente y de De los elementos traza analizados, sólo
cas superficiales, tal y como se encuen- ellos se dedujo para cada elemento el se han encontrado de forma sistemáti-
ca arsénico, cobalto, cromo, cobre, oscilan entre 1 (Ni) y 1,2 (Pb). En el caso que nos ocupa, los elemen-
níquel, plomo y cinc. De los restantes tos traza, y esencialmente los principa-
elementos se han detectado: a) cadmio Si comparamos los valores obtenidos para les metales pesados con marcado
en un 12% de las muestras y en canti- Andalucía con los valores para los distin- carácter tóxico para la salud humana,
dades variables entre 0,3 y 4,5 ppm; b) tos dominios geotectónicos (Tabla 12), se se ha creído conveniente desarrollar
mercurio en un 0,5% de las muestras, puede observar la influencia que tiene el NGRs específicos para la Comunidad
oscilando entre 1 y 10 ppm; y c) selenio contenido geoquímico de cada dominio a Andaluza, dado que el RD 9/2005 (BOE
en aproximadamente el 1% de las través de la roca madre en los elementos 14/01/2005) deja abierta la posibili-
muestras en cantidades variables de 3 traza geogénicos. Se detectan claramente dad, en su Anexo VII apartado 3, de que
a 6 ppm. En consecuencia se han esta- influencias geogénicas para todos los ele- las Comunidades Autónomas definan
blecido los niveles de fondo y las ano- mentos estudiados, especialmente para estos valores.
malías sólo para As, Co, Cr, Cu, Ni, Pb As, Cr, Cu, Pb y Zn en las zonas del Macizo
y Zn (Tabla 11). Ibérico (Galán et al., 2008), y de Cr y Ni en Los valores de NGRs para los principa-
las Béticas Internas. les elementos traza que pueden apare-
NIVEL SUPERIOR (0-20 cm)
Toda Andalucía (750 muestras)
cer frecuentemente en suelos, se han
En conclusión, las anomalías encontra- calculado según criterios generalmente
Mediana (Mediana- p90] (p90-p95] >p95 das en los suelos se deben de contextua- aceptados, con ligeras modificaciones
lizar de acuerdo con los niveles de fondo derivadas de la contextualización y
As ≤ 10 (10-36] (36-54] >54 regionales para evitar que ciertas anoma- adaptación a las circunstancias de
Co ≤ 12 (12-24] (24-32] >32 lías geogénicas se puedan considerar Andalucía. Los valores que se proponen
Cr ≤ 70 (70-120] (120-144] >144
Cu ≤ 24 (24-48] (48-62] >62 como contaminación. Ninguna normativa para la Comunidad Andaluza tienen un
Ni ≤ 29 (29-56] (56-69] >69 para la declaración de suelo contaminado carácter conservador, considerándose
Pb ≤ 24 (24-67] (67-109] >109 debe dar valores de referencia que estén siempre niveles que no suponen un
Zn ≤ 56 (56-119] (119-145] >145 por debajo de los fondos regionales. riesgo inaceptable para la población
Sin embargo, desde el punto de vista de humana expuesta en el escenario de
NIVEL INFERIOR (20-40 cm)
Toda Andalucía (600 muestras)
la seguridad de la salud humana y de los uso considerado, permitiendo por tanto
distintos ecosistemas, es necesario ade- diferenciar zonas o emplazamientos
Mediana (Mediana- p90] (p90-p95] >p95 más fijar lo que se denomina Niveles con características críticas. Constituyen
Genéricos de Referencia (NGRs). un buen elemento para la evaluación de
As ≤9 (9-33] (33-48] >48 procesos de contaminación a nivel de
Co ≤ 11 (11-21] (21-31] >31
Cr ≤ 68 (68-121] (121-151] >151
Los niveles genéricos de referencia fase exploratoria en el estudio de
Cu ≤ 21 (21-43] (43-52] >52 (NGRs) para sustancias contaminantes emplazamientos potencialmente conta-
Ni ≤ 29 (29-56] (56-71] >71 tóxicas constituyen un conjunto de valo- minados. En general, estos valores se
Pb ≤ 20 (20-57] (57-83] >83 res para los diferentes escenarios cono- han concebido para ser operativos y efi-
Zn ≤ 51 (51-99] (99-123] >123 cidos, que pueden ser utilizados para la cientes en términos de salud humana.
tabla 11. Valores de Fondo para los Suelos de Andalucía. gestión de suelos afectados por tales
contaminantes. Los NGRs marcan las Estos valores (NGRs) constituyen refe-
Los niveles de fondo representados por concentraciones por debajo de las cuales rentes fundamentales para la investiga-
las mediana son valores que pueden cali- no hay riesgo significativo de contamina- ción y gestión de suelos potencialmen-
ficarse de normales, inferiores en todos ción en un suelo; por encima de dichos te contaminados. Se establecen aten-
los casos a los descritos en la literatura valores podría haber riesgo para la salud diendo a los dos principios rectores de
como valores de referencia en otros paí- humana o los ecosistemas. Cuando esos la valoración y gestión de suelos conta-
ses. Además son muy semejantes los niveles se superan, es obligatoria una minados: a) uso del terreno, y b) riesgo
fondos calculados para el nivel superior y investigación detallada en la que debe para la salud humana.
el inferior, lo que indica que apenas exis- realizarse un análisis específico de los
te una “contaminación antrópica”. Las riesgos que presente el emplazamiento La metodología para calcularlos está basa-
relaciones nivel superior/nivel inferior supuestamente contaminado. da en los modelos propuestos por US-EPA-
Fig 13. Ilustración del estudio estadístico efectuado para los dominios geotectónicos. El intervalo marcado por el corchete (entre a y b) corresponde al shortest-half y el valor medio entre
a y b indica LMS.
Conferencia Invitada
macla. nº 10. noviembre´08
revista de la sociedad española de mineralogía 59
Andalucía ZCI ZOM ZSP ZBE ZBI CGib CGua Otras Grupo de Mineralogía Aplicada de la
Cuencas Junta de Andalucía. En especial quere-
As ≤ 10 ≤≤ 24 ≤≤ 17 ≤≤ 20 ≤≤ 7 ≤≤ 10 ≤≤ 7 ≤≤ 6 ≤ ≤9
mos hacer mención de los doctores
(10-36] (24-33] (17-24] (20-30] (7-9] (10-17] (7-10] (6-9] (9-13] Isabel González, Juan Carlos Fernández
(36-54] (33-62] (24-49] (30-157] (9-17] (17-53] (10-14] (9-16] (13-36] Caliani y Patricia Aparicio, que han dedi-
>54 >62 >49 >157 >17 >53 >14 >16 >36 cado una gran parte de su investigación
a esta temática.
Co ≤ 12 ≤≤ 7 ≤ 17 ≤ 16 ≤9 ≤ 17 ≤8 ≤9 ≤9
(12-24] (7-12] (17-21] (16-20] (9-12] (17-21] (8-13] (9-11] (9-11]
(24-32] (12-25] (21-40] (20-34] (12-18] (21-36] (13-30] (11-17] (11-18]
REFERENCIAS
>32 >25 >40 >34 >18 >36 >30 >17 >18
Aguilar, J; Dorronsoro, C.; Galán, E. & Gómez
Cr ≤ 70 ≤ 49 ≤ 79 ≤ 85 ≤ 47 ≤ 85 ≤ 64 ≤ 66 ≤ 53 Ariza, J.L. (1999): Los criterios y estándares
(70-120] (49-76] (79-95] (85-109] (47-63] (85-104] (64-91] (66-84] (53-67] para declarar un suelo como contaminado en
(120-144] (76-128] (95-156] (109-209] (63-97] (104-193] (91-176] (84-100] (67-94] Andalucía y la metodología y técnica de toma de
>144 >128 >156 >209 >97 >193 >176 >100 >94 muestras y análisis para su investigación. In
“Investigación y Desarrollo Medioambiental en
Cu ≤ 24 ≤ 16 ≤ 22 ≤ 31 ≤ 20 ≤ 21 ≤ 22 ≤ 24 ≤ 17 Andalucía”. OTRI. Universidad de Sevilla, 61-64.
(24-48] (16-25] (22-31] (31-41] (20-28] (21-27] (22-32] (24-33] (17-23]
(48-62] (25-49] (31-95] (41-108] (28-48] (27-42] (32-53] (33-49] (23-35] Baize, D. & Sterckeman, T. (2001). Of the
>62 >49 >95 >108 >48 >42 >53 >49 >35 necessity of knowledge of the natural pedo-
geochemical background content in the evalua-
Ni ≤ 29 ≤ 26 ≤ 45 ≤ 27 ≤ 24 ≤ 35 ≤ 23 ≤ 30 ≤ 23 tion of the contamination of soils by trace ele-
(29-56] (26-37] (45-56] (27-40] (24-31] (35-46] (23-33] (30-38] (23-29]
ments. Science of the Total Environment, 264,
(56-69] (37-60] (56-61] (40-62] (31-50] (46-95] (33-71] (38-42] (29-46]
127-139.
>69 >60 >61 >62 >50 >95 >71 >42 >46
2001 (Supplemental Guidance for les pesados y otros elementos traza es Bowie, S.H.U. & Thornton (1985):
Developing Soil Screening Levels for uno de los problemas ambientales que Environmental Geochemistry and Health.
Superfund Sites, March 2001), con datos más preocupa a la Administración. La Kluwer Academic Publ., Hingham. MA.
de la EPA (Environmental Protection caracterización, evaluación y recupera-
Cheng, H.M.; Zheng, C.R.; Tu, C. & Zhou, D.M.
Agency) y la ATSDR (Agency for Toxicity ción de un suelo, especialmente cuan- (2001): Studies on loading capacity of agricultu-
Substances and Disease Registry, do se va a hacer un cambio de uso, es ral soils for heavy metals and its applications in
January, 2004). Para cada elemento se uno de los mayores desafíos ambienta- China. Applied Geochemistry, 16, 1397-1403.
han establecido valores para dos escena- les actuales. Todos los métodos aquí
rios diferentes: “industrial” y “otros usos”. expuestos para su evaluación, así como De Miguel, E., Callaba, A., Arranz, J.C., Cala,
los criterios basados en el conocimien- V., Chacón, E., Gallego, E., Alberruche, E.,
Las rutas de exposición en los escena- to de los Fondos Geoquímicos Alonso, C., Fernández-Canteli, P., Iribarren, I. &
rios antes definidos son: ingestión del Regionales y los NGRs, e inclusive los Palacios, H. (2002): Determinación de niveles
de fondo y niveles de referencia de metales
suelo, contacto dérmico, ingestión + con- denominados Análisis de Riesgos, son pesados y otros elementos traza en suelos de
tacto dérmico e inhalación de partículas sólo aproximaciones al conocimiento la Comunidad de Madrid. Instituto Geológico y
real de la cuestión. Se necesita dar res- Minero de España, Madrid. 167 pp.
Como norma general se elige como NGRs puesta a las siguientes cuestiones:
la concentración más baja que actúe a ¿qué elementos tóxicos existen en los Dold, B., (2003): Speciation of the most solu-
través de la ruta (o combinación de rutas) suelos, en qué cantidad están biodispo- ble phases in a sequential extraction procedu-
más sensible. La Consejería de Medio nibles, cómo pueden pasar a la cadena re adapted for geochemical studies of copper
Ambiente de la Junta de Andalucía, junto trófica, cuál es el riesgo para la salud sulphide mine waste. Journal of Geochemical
con los tres Grupos de Trabajo de las humana y otros ecosistemas, hasta Exploration, 80, 55-68.
Universidades anteriormente citados, qué punto podemos admitir un cierto Dold, B. & Fontboté, L., (2002): A mineralogi-
han colaborado para la determinación de nivel de contaminación en un suelo cal and geochemical study of element mobility
los NGRs para elementos traza, así como determinado para un uso en que exista in sulfide mine tailings of the Fe-oxide Cu-Au
para la elaboración de los protocolos de posibilidad de transferencia a los orga- deposits from the Punta del Cobre district, nor-
evaluación de los emplazamientos afec- nismo?. Estas son algunas de las pre- thern Chile. Chemical Geology, 189, 135-163.
tados por metales pesados y otros ele- guntas que a través de la investigación
mentos traza. Los valores y protocolos probablemente tendrán respuestas en Finnecy, K. & Pearce, I. (1986): Land contami-
serán dados a conocer en breve por la no mucho tiempo. nation and reclamation. In “Understanding of
Our Environment”, R. E. Hester, ed. Royal Soc.
propia Consejería. of Chemistry, London, 329-337.
AGRADECIMIENTOS
CONCLUSIÓN Föstner, U. (1987): Changes in metal mobili-
Muchas ideas y datos aquí expuestos ties in aquatic and terrestrial cycles. In “Metal
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