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El libro está asociado con Éxodo y Números en continuidad histórica, pero es

diferente de ellos porque el elemento histórico está subordinado a las


consideraciones legales y ritualistas.
Aunque el énfasis en Levítico está puesto más en los sacerdotes que en los
levitas, el título no es inapropiado ya que el sacerdocio judío era básicamente
levita (Hebreos 7,11).

Los primeros siete caps. de Levítico dan procedimientos detallados del holocausto
para todo tipo de sacrificios y ofrendas quemadas, la ofrenda vegetal, los
sacrificios por el pecado y la culpa, y otros sacrificios para remover el pecado y lo
profano, según el pacto.
La sección litúrgica siguiente (Lev. 8,1—10:20) describe la consagración de Aarón
y el sacerdocio, seguida por la designación de los animales limpios e inmundos y
ciertas reglas higiénicas (Lev. 11,1—15,33). El rito del día de la Expiación ocurre
en el cap. 16, seguido por una sección (Lev. 17,1—20,27) en la cual se tratan los
temas de la sangre del sacrificio, leyes éticas y penas para los que las
transgredieran. El tema de Lev. 21,1—24,23 es la santidad de los sacerdotes y la
consagración de las estaciones, mientras que el cap. siguiente se refiere a la
legislación que cubre los años sabáticos y del jubileo. El cap. de conclusión
resume las promesas y las amenazas (Lev. 26,1-46), y el apéndice (Lev. 27,1-34)
cubre los votos.
El ser humano como pecador, la expiación sustitucionaria y la santidad divina son
temas prominentes a lo largo de Levítico.

Ley.
Ley.
 I. Los términos en las Sagradas Escrituras. De las palabras heb., la que se usa
más es torah y puede referirse a instrucciones humanas(Prov. 1,8), a
instrucciones divinas (Isaías 1,10), a reglas (Lev. 7,7), a la ley de Moisés (1
Reyes 2,3), o a costumbres (2 Samuel 7,19).
Otras palabras que también pueden ser traducidas así son dath, hoq, mitswah
y mishpat. La palabra gr. muy común nomos ocasionalmente se refiere a
ley(es) pero en el sentido más universal (Rom. 3,27) como un principio que
gobierna las acciones de uno (Rom. 7,23), o al Pentateuco (Gál. 3,10), pero la
mayoría de las veces a la ley de Moisés (Hechos 15,5). Otros sinónimos en
castellano incluyen mandamiento, derecho, instrucción, juicio, ordenanza,
decreto, estatuto y testimonio.

Fragmento de un rollo de cuero (siglo I a. de J.C.) hallado en Qumrán, que


contiene Deuteronomio 5. Los Diez Mandamientos aparecen en la tercera
columna desde la derecha. Cortesía Departamento de Antigüedades y Museos
de Israel
 II. La ley moral. Está muy claro por los Diez Mandamientos —el Decálogo—
(Éx. 20,3-17; Dt 5,7-21) que la moralidad no se encuentra en criterios humanos ni
en el veredicto de la sociedad, sino en Dios.
Los Diez Mandamientos declaran los principios, si bien a grandes rasgos, de la
ley moral de Dios.

 III. Legislación social. Las leyes del AT de carácter judicial, civil, o político
se encuentran en el bloque de información legislativa que se conoce como el
Libro del Pacto (<022023>Éxodo 20:23—23:33), también en lo que llaman el
Código de Santidad (Levítico 17—26), y aquí y allá en gran parte del libro de
Deuteronomio, especialmente en los caps. 21— 25.
La familia era gobernada por varias reglas para mantenerla libre de corrupción
y disolución. Hay muchas recetas que tienen que ver con el matrimonio (Éxodo
21—22; 34; Levítico 18; 21; Números 5; 25; Deuteronomio 7; 21; 22; 24; 25;
27). En la familia, los niños debían honrar y obedecer a sus padres
(<022012>Éxodo
20:12; <050516>Deuteronomio 5:16; 21:18-21; 27:16). Y ya que el círculo familiar
podía incluir a sirvientes, esclavos y extranjeros, había leyes también para el
tratamiento de ellos (Éxodo 12; 21; 22; Levítico 19; 22; 24; 25; Números 9;
15; 35; Deuteronomio 1; 12; 14—16; 23; 24; 27).
Los crímenes en contra de la sociedad recibían el castigo impuesto por la ley.
Estos crímenes podían ser de (1) carácter moral, como violaciones sexuales o
perversidades (Éxodo 20—22; Levítico 18—20; Números 5; Deuteronomio 5;
22—25; 27), (2) en contra de individuos, tanto sus personas (Génesis 9;
Éxodo 20—23; Levítico 19; 24; Números 35; Deuteronomio 5; 19; 21; 22;
24; 27) como sus propiedades (Éxodo 20; 22; Levítico 6; 19; Deuteronomio
5; 19; 23; 25; 27), o (3) en contra del Estado (Éxodo 20; 23; Levítico 19;
Deuteronomio 5; 16; 19; 27). Otras reglas gobernaban las propiedades (Éxodo
21—23; Levítico 6; 24; 25; Números 27; 36; Deuteronomio 21; 22; 25).
Ciertos aspectos de organización política fueron indicados (Éxodo 22;
Números 1; 3; 4; 26; 33; Deuteronomio 17; 23). Hubo especificaciones en
cuanto al ejército (Números 1; 2; 10; 26; 31; Deuteronomio 7; 11; 20; 21; 23;
24). Se establecieron mandatos judiciales (Éxodo 18; 20; 21; 23; Levítico 5;
19; Números 35; Deuteronomio 1; 4; 5; 16; 17; 19; 25; 27), y fueron tomadas
medidas para asegurar que el pueblo recibiera el conocimiento de la ley
(Deuteronomio 6; 11; 27; 31; Josué 8).
Muchas leyes israelitas tenían que ver con la amabilidad. Hasta el tratamiento
de animales era sujeto a reglas (Éxodo 23; 34; Levítico 22; 25; Deuteronomio
22; 25). El mandamiento universal del amor era invocado, así para amigos
como para extraños (Éxodo 23; Levítico 19; Deuteronomio 10). A los pobres,
a los desafortunados, a los humillados, a los que no tenían quién los defendiera
y a los necesitados se les trataría humanamente (Éxodo 21—23; Levítico 19;
23; 25; Deuteronomio 14—16; 21—27).
En el Decálogo se detallan principios básicos para el culto y la adoración
(<022003>Éxodo 20:3-11). No se permitía adorar a otros así llamados “dioses”
(Exo, 22—23; 34; Deuteronomio 5; 6; 8; 11; 17; 30), la apostasía era un
pecado (<050425>Deuteronomio 4:25-31; 31:16; cf. Levítico 19; 26; Deuteronomio
27), y artes ocultas tales como la brujería, la hechicería y la adivinación no
debían ser practicadas (Éxodo 22; Levítico 18—20; Deuteronomio 18). De la
misma manera, las blasfemias no debían ser toleradas (Éxodo 22; Levítico 18;
19; 24), y el día sábado de Dios era inviolable (Éxodo 23; 31; 34; 35; Levítico
19; 26; Números 15).
Dado que Jehovah es el único Dios verdadero, Israel debía no sólo estudiar y
guardar sus leyes (Levítico 18—20; 25; Números 15; Deuteronomio 4—8; 10;
11; 22; 26; 27; 30), sino que también su pueblo debía separarse de los
paganos y de sus prácticas religiosas (Éxodo 22; 23; 34; Levítico 18—20;
Deuteronomio 6; 7; 12; 14; 18). Ellos debían ser una nación santa (Éxodo 19;
22; Levítico 19; 26; Deuteronomio 7; 14; 18; 26; 28), y darle a Dios la
fidelidad, el amor, la gratitud y el servicio obediente que sólo él merece (Éxodo
23; 34; Levítico 19; 25; Deuteronomio 4—6; 8; 10; 11; 13; 14; 17; 30; 31).
La legislación de Moisés presenta mandatos acerca del tipo de sacrificios y los
detalles que los gobiernan; la ofrenda quemada entera (Éxodo 20; Levítico 1;
6; <051227>Deuteronomio 12:27), el sacrificio por el pecado (Levítico 4—6; 8—
10; Números 15), el sacrificio por la culpa (Levítico 5—7; 19; Números 5) y el
sacrificio de paz (Levítico 3; 7; 19; 22). La ley también tenía mucho que decir
en cuanto a otras ofrendas y sacrificios (Éxodo 10; 13; 18; 22; 23; 29; 30; 34;
Levítico 2; 3; 6; 14; 19; 22; 23; 27; Números 3; 5; 6; 8; 15; 18; 19; 28; 30;
31; Deuteronomio 12; 14—18; 23; 26).
Muchos pasajes contienen leyes relacionadas con el sacerdocio (Éxodo 28—
30; 39; 40; <030205>Levítico 2:5-8, 10, 16; 21—24; 27; Números 3—6; 15; 18;
31). Los códigos legales regulaban la purificación ceremonial no sólo para los
sacerdotes sino también con referencia a las comidas (Éxodo 12; 22; 23; 34;
Levítico 3; 7; 11; 17; 19; 20; 22; Deuteronomio 12; 14; 15) y a la purificación
(<030511>Levítico 5:11—15:22; Números 6; 19; 31; Deuteronomio 21; 24).
Jesús habló de manera negativa acerca de las tradiciones de los judíos pero no
de la ley ceremonial establecida en el AT. Sin embargo él indicó que vendría un
tiempo cuando los ritos de la ley cederían el lugar a la adoración espiritual
(<430424>Juan 4:24).
En el período transitorio después de la crucifixión, la resurrección y la
ascensión, las condiciones dadas en cada uno de esos casos determinaban si
las estipulaciones de la ley debían ser observadas o no. Pablo circuncidó a
Timoteo (<441603>Hechos 16:3) pero no a Tito (<480203>Gálatas 2:3, 4). El pudo
asegurar a los corintios que la circuncisión en la carne no era indispensable para
la salvación (<460701>1 Corintios 7:18, 19); y, escribiéndoles a los gálatas, él
podía
discutir firmemente en contra de los argumentos de los judaizantes
(<480204>Gálatas
2:4 ss.; 5:1 ss.) siguiendo la línea definida por la decisión del concilio de
Jerusalén (<441504>Hechos 15:4 ss.). El argumento de Hebreos es que los tipos
y
sombras de la ley ceremonial han pasado con la venida de Cristo, el Sumo
Sacerdote perfecto, el cual, como Cordero de Dios, se ofreció a sí mismo en el
Gólgota para que pudiera satisfacer cada demanda de la ley y adquirir la
salvación para su pueblo.
Por medio de la ley ceremonial, Dios habló pictóricamente acerca de la
salvación que él iba a llevar a cabo a través de la vida y muerte del hijo
encarnado. Por lo tanto, esa ley era necesariamente imperfecta y temporal. La
legislación social que gobernaba a Israel fue diseñada para una cultura
específica en un período dado de la historia, de modo que ésta también fue sólo
por un tiempo; sin embargo sus principios son eternos y aplicables a toda
generación. La ley moral de Dios está en vigor en todas partes y por siempre
porque refleja su manera de ser. Nunca ha sido ni puede ser anulada.
Libacion. A veces se refiere a la libación como ofrenda ritual de un líquido
(p. ej., ver nota de la RVA de <022940>Éxodo 29:40); el derramamiento de
líquidos, como vinos, agua, aceite, etc., pero generalmente vino, como ofrenda
a una deidad. Las libaciones eran una práctica común entre las naciones
paganas (<053238>Deuteronomio 32:38). Las ofrendas rituales de líquido
acompañaban muchos de los holocaustos del AT (<022940>Éxodo 29:40, 41;
<032313>Levítico 23:13, 18, 37; <041504>Números 15:4-10, 24; 28:7-10). Pablo
se
imagina que su muerte es como una ofrenda ritual de líquido (<505017>Filipenses
2:17; <550406>2 Timoteo 4:6).
Bandeja de piedra para libación, decorada con una cabeza de león grabada, del
Tell Beit
Mirsim (Debir), c. 1400-1200 a. de J.C. Cortesía Departamento de Antigüedades y
Museos de
Israel

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