Se conoce como laminación o laminado (a veces también se denomina rolado)
al proceso industrial por medio del cual se reduce el espesor de una lámina de metal o de materiales semejantes con la aplicación de presión mediante el uso de distintos procesos, como la laminación de anillos o el laminado de perfiles. Por tanto, este proceso se aplica sobre materiales con un buen nivel de maleabilidad. La máquina que realiza este proceso se le conoce como laminador.
El laminado puede ser en frío o en caliente. El laminado en caliente es el que
se realiza con una temperatura bastante mayor a la de la recristalización que tiene el metal.1 La forma actual del laminado en caliente deriva del proceso patentado por el británico Henry Cort en 1783, que es popularmente conocido como «el padre de la laminación» debido al gran impacto de dicho proceso en la industria metalúrgica
El acero, que es una variante de hierro aleada con carbono, a menudo
presenta otros elementos añadidos para prepararlo para su procesamiento y uso industrial. Uno de ellos es el laminado en frío o en caliente, que es un proceso muy popular que prepara el acero para su uso. La industria del tubo lo usa extensamente.
El laminado es un proceso industrial de conformación de metal en el que un
material metálico se introduce entre uno o más pares de rodillos para reducir su espesor y hacerlo más uniforme. Es un proceso similar al de pasar un rodillo por encima de una masa de pizza, y su objetivo es potenciar las propiedades mecánicas (resistencia a la tracción, límite elástico, alargamiento…) del material.
El laminado se clasifica según la temperatura del material laminado. Puede ser
o en caliente o en frío. IMPORTANCIA
Principales aplicaciones del laminado.
El laminado se utiliza en los procesos de fabricación de los aceros, aluminio, cobre, magnesio, plomo, estaño, zinc, y sus aleaciones. Casi todos los metales utilizados en la industria, han sufrido una laminación en alguna etapa de su conformación. Aunque la principal aplicación del laminado es la «laminación del acero».
Decantarse por el acero laminado en frío o en caliente depende de cómo se
piensa utilizar. El resultado final que se está buscando determinará el tipo de laminado que se requiere.
Si el producto a fabricar es grande y requiere poder conformar distintas
formas, requerirá acero laminado en caliente para su fabricación. En cambio, si se va a fabricar un producto pequeño que necesita una tolerancia más baja y una duración mayor, probablemente requerirá acero laminado en frío.